Desarrollo y libertad. Amartya Sen

Anuncio
RECENSIONES
«DESARROLLO Y LIBERTAD»
*
AMARTYA SEN
Premio Nobel de Economía 1998
Editorial Planeta (Colección Documento)
Barcelona, 2000 (440 páginas)
«Durante el siglo XX se ha consolidado el
sistema de gobierno democrático y participativo como modelo superior de organización
política. Actualmente, los conceptos de derechos humanos y de libertad política forman
parte en gran medida de la retórica imperante»... «Y, sin embargo, también vivimos en un
mundo de notables privaciones, miseria y
opresión. Hay muchos problemas nuevos y viejos, y entre ellos se encuentran la persistencia
de la pobreza y muchas necesidades básicas insatisfechas, las hambrunas y el problema del
hambre, la violación de libertades políticas
elementales, así como de libertades básicas...» La superación de estos problemas
constituye una parte fundamental del ejercicio del desarrollo. Así comienza el estudio del
profesor Sen, Premio Nobel de Ciencia Económica 1998, para reconocer y sostener el papel que desempeñan los diferentes tipos de
libertad en la lucha contra estos males. Para
resolver los problemas a los que nos enfrentamos concibe la libertad individual como un
compromiso social. Este es el enfoque básico
que trata de explorar y de examinar.
La eliminación de la falta de libertades
fundamentales es una parte constitutiva del
desarrollo. La libertad económica y la libertad política se refuerzan mutuamente. En el
estudio se subraya la necesidad de realizar
*
Director del Trinity College, Cambridge
un análisis integrado de las actividades económicas, sociales y políticas en las que intervienen toda una variedad de instituciones. Se
centra la atención en el papel y en las interconexiones de ciertas libertades instrumentales y fundamentales, entre las cuales se
encuentran las oportunidades económicas,
las libertades políticas, los servicios sociales,
las garantías de transparencia y la seguridad
protectora. Se investigan los mecanismos sociales, que afectan a muchas instituciones (el
Estado, el mercado, el sistema jurídico, los
partidos políticos, los medios de comunicación, los grupos de presión y los foros de debate, entre otras) desde el punto de vista del
grado en que contribuyen a aumentar y a garantizar las libertades fundamentales de los
individuos, concebidos como agentes activos
de cambio y no como receptores pasivos de
prestaciones.
Se trata de un estudio general sobre el desarrollo y sobre las razones prácticas subyacentes destinado especialmente a suscitar el
debate público. Dada la importancia que el
autor concede al papel del debate público
como vehículo de cambio social y de progreso
económico, ha elaborado el presente estudio
principalmente con el propósito de que sea
objeto de una deliberación abierta y de un
examen crítico.
El autor concibe el desarrollo como un proceso de expansión de las libertades reales de
que disfrutan los individuos. Las libertades
no sólo son el fin principal del desarrollo, sino
que se encuentran, además, entre sus principales medios. Las libertades políticas (en forma de libertad de expresión y elecciones
libres) contribuyen a fomentar la seguridad
económica. Las oportunidades sociales (en
forma de servicios educativos y sanitarios) facilitan la participación económica. Los servicios económicos (en forma de oportunidades
para participar en el comercio y la producción) pueden contribuir a generar riqueza
personal general, así como recursos públicos
para financiar servicios sociales. Los diferentes tipos de libertades pueden reforzarse mu-
REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES
31
169
RECENSIONES
tuamente y estas conexiones empíricas refuerzan las prioridades valorativas.
El papel del Estado y la sociedad es ayudar,
no proporcionar algo ya acabado.
Aristóteles, al comienzo de Etica a Nicómaco, señaló que «la riqueza no es, desde luego, el bien que buscamos, pues no es más que
un instrumento para conseguir otro fin». La
utilidad de la riqueza reside en las cosas que
nos permite hacer, es decir, en las libertades
fundamentales que nos ayuda a conseguir.
Pero esta relación no es ni exclusiva ni uniforme.
Al examinar la libertad y los fundamentos
de la justicia el profesor Sen analiza algunos
métodos de evaluación, en particular el utilitarismo, el pensamiento libertario y la justicia rawsiana para comprobar que cada una
de estas estrategias consolidadas tiene sus
ventajas, pero que también adolecen de importantes limitaciones. Así, avanza en un intento de arrojar luz sobre el subdesarrollo
(entendido en un sentido amplio como la falta
de libertad) y el desarrollo (entendido como
un proceso consistente en eliminar la falta de
libertades y en extender los diferentes tipos
de libertades fundamentales que los individuos tienen razones para valorar).
La concepción del desarrollo basada en las
libertades fundamentales de los individuos
tiene para el profesor Sen transcendentales
implicaciones para la compresión del proceso
de desarrollo, así como para la forma y los
medios de fomentarlos. Desde el punto de vista de la evaluación, implica la necesidad de
evaluar los requisitos del desarrollo desde la
perspectiva de la eliminación de la falta de libertades que sufren los miembros de la sociedad. Desde este punto de vista, el proceso de
desarrollo no es muy diferente de la historia
de la superación de esta falta de libertades.
Al analizar los fines y los medios del desarrollo, el autor desarrolla la idea básica de
que el aumento de la libertad del hombre es
tanto el principal objetivo del desarrollo como
su medio primordial. El objetivo del desarrollo está relacionado con la valoración de las libertades reales de que gozan los individuos.
Las capacidades individuales dependen de
los sistemas económicos, sociales y políticos.
Para crear buenos mecanismos institucionales hay que considerar el papel instrumental
de los distintos tipos de libertad e ir más allá
de la importancia fundamental que tiene la
libertad general de los individuos.
Los fines y los medios del desarrollo obligan a colocar la perspectiva de la libertad en
el centro del escenario. Así los individuos han
de verse como seres que participen activamente en la configuración de su propio destino, no como meros receptores pasivos de los
frutos de ingeniosos programas de desarrollo.
170
El profesor Sen señala que, cuando se analiza la justicia social, existen poderosas razones para juzgar la ventaja individual en
función de las capacidades que tiene una persona, es decir, de las libertades fundamentales de que disfruta para llevar el tipo de vida
que tiene razones para valorar. Desde esta
perspectiva la pobreza debe concebirse como
la privación de capacidades básicas y no meramente como falta de ingresos, que es el criterio habitual con el que se la identifica.
A pesar del papel fundamental que desempeñan las rentas en las ventajas de que disfrutan los diferentes individuos, la relación entre
la renta y los logros y libertades individuales ni
es constante ni automática e irresistible. Hay
diferentes tipos de contingencias que alteran
sistemáticamente la «conversión» de las rentas en las distintas «funciones» que podemos
lograr, y eso afecta a los estilos de vida que
podemos disfrutar. El autor ilustra las diferentes formas en que puede cambiar sistemáticamente la relación entre las rentas ganadas
y las libertades fundamentales en forma de
capacidades para llevar la vida que los individuos tienen razones para valorar. Los papeles
de las heterogeneidades personales, las diferencias de medio ambiente, las diferencias de
clima social, las diferencias en la distribución
REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES
31
RECENSIONES
de las rentas dentro de la familia tienen que
recibir la atención que se merecen en la elaboración de la política económica y social.
El debate público y la participación social
son bienes fundamentales para la elaboración de la política económica y social en un
sistema democrático. La utilización de las
prerrogativas democráticas —tanto de las libertades públicas como de los derechos humanos— constituyó una parte crucial del
ejercicio de la propia elaboración de la política económica. En los análisis recientes, la
evaluación del mecanismo del mercado tiende a centrar la atención en los resultados que
acaba generando, como las rentas o las utilidades.
El profesor Sen defiende que las acuciantes necesidades económicas se suman a la urgente necesidad de reconocer las libertades
políticas. Hay tres consideraciones distintas
que indican la primacía general de los derechos políticos y liberales básicos: son importancia directa en la vida humana relacionada
con las capacidades básicas; su papel instrumental en la mejora de las posibilidades de
los individuos para expresar y defender sus
demandas de atención política; y su papel
constructivo en la conceptualización de las
«necesidades». Por tanto, examina los argumentos que esgrimen quienes creen que existe un conflicto real entre la libertad política y
los derechos democráticos, por una parte, y la
satisfacción de las necesidades económicas
básicas, por otra. El desarrollo y el fortalecimiento de un sistema democrático constituyen un componente esencial del proceso de
desarrollo y afirma «que la importancia de la
democracia reside en tres virtudes: 1) su importancia intrínseca, 2) su contribución instrumental y 3) su papel constructivo en la
creación de valores y normas».
El reto del desarrollo comprende tanto la
eliminación de las privaciones persistentes y
endémicas como la prevención de la miseria
repentina y grave. Sin embargo, las respectivas demandas de los dos retos tanto a las ins-
tituciones como a la política económica y social pueden ser distintas e incluso dispares.
El éxito de un campo puede no garantizar el
éxito en el otro. De aquí que en el estudio se
ocupe del problema de la prevención de las
hambrunas y de las crisis calamitosas. Se
trata de una importante parte del proceso de
desarrollo concebido como libertad, pues implica la mejora de la seguridad y de la protección de que disfrutan los ciudadanos. La
conexión es tanto constitutiva como instrumental.
En cuanto a la presencia de la mujer en el
cambio social el profesor Sen manifiesta que
«a lo mejor nada sea tan importante hoy en la
economía política del desarrollo como que se
reconozca como es debido la participación y el
liderazgo en el terreno político, económico y
social de las mujeres». Se trata de un aspecto
muy importante del «desarrollo como libertad».
Un enfoque que merece especial atención
al autor es la estrecha relación entre las medidas que aumentan la igualdad sexual y la
libertad de las mujeres (en concreto la educación, la sanidad y las oportunidades de empleo de las mujeres) y la responsabilidad
individual de la familia. Estas afirmaciones
generales también son válidas en el caos de
los países en vías de desarrollo, a pesar de su
pobreza. Aunque suelen esgrimirse algunos
argumentos según los cuales las personas
que son muy pobres no valoran ni la libertad,
en general, ni la libertad de reproducción, en
particular. La evidencia, en la medida que
exista, indica lo contrario. Estas concepciones
empíricas refuerzan la concepción del «desarrollo como libertad», ya que la solución del
problema del crecimiento demográfico puede
ser la expansión de la libertad de los individuos.
Los argumentos que analiza el profesor
Sen a favor de las libertades y de las correspondientes formulaciones desde el punto de
vista de los derechos son: 1) su importancia
intrínseca, 2) su transcendental contribución
REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES
31
171
RECENSIONES
a dar incentivos políticos para proporcionar
seguridad económica, 3) su papel constructivo
en la génesis de valores y prioridades. La discutible acción política no puede justificarse
basándose en un discutible análisis histórico.
El profesor Sen analiza algunas razones
para mostrarse escéptico sobre la idea de que
sea posible conseguir un progreso social razonado, idea que es fundamental en el enfoque
presentado en el libro. Uno de los argumentos cuestiona la posibilidad de realizar elecciones sociales racionales e invoca el
«teorema de la imposibilidad» de Kenneth
Arrow. En el segundo argumento se muestra
escéptico sobre la posibilidad de tener en
cuenta las consecuencias intencionadas y
centra la atención en la abrumadora importancia de los efectos «inintencionados». El
tercer argumento está relacionado con las
motivaciones. Según éste los seres humanos
son egocéntricos e interesados. Dado ese supuesto, se dice que el único sistema que puede funcionar eficazmente es la economía de
mercado capitalista. Todo sistema económico
exige una conducta ética, y el capitalismo no
es una excepción. Y los valores pueden influir
de manera considerable en la conducta de los
individuos.
las organizaciones no gubernamentales, la
judicatura, los medios de comunicación y la
comunidad en general— que contribuyen al
proceso de desarrollo al aumentar y mantener las libertades individuales. El análisis
del desarrollo exige una comprensión integrada de los respectivos papeles de estas diferentes instituciones y de sus interacciones.
La formación de los valores y la aparición y la
evolución de la ética social también forman
parte del proceso de desarrollo que es necesario examinar, junto con el funcionamiento de
los mercados y de otras instituciones. En este
estudio también se ha intentado comprender
e investigar esta estructura interrelacionada
y extraer lecciones para el desarrollo desde
esa amplia perspectiva.
LUIS FERNÁNDEZ BRICEÑO
El profesor Amartya Sen presenta, analiza y defiende un determinado enfoque del desarrollo, visto como un proceso de expansión
de las libertades fundamentales que tienen
los individuos y utiliza la perspectiva de la libertad tanto en el análisis valorativo encaminado a evaluar los cambios como en el
análisis descriptivo y predictivo al concebir la
libertad como un factor casualmente eficaz
para conseguir rápidos cambios.
El autor resume las implicaciones de
este enfoque para el análisis de la política
económica y social, así como para comprender las conexiones económicas, políticas y sociales generales. Hay toda una variedad de
instituciones sociales —relacionadas con el funcionamiento de los mercados, las administraciones, los parlamentos, los partidos políticos,
172
REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES
31
Descargar