TRIBUNAL DE DEFENSA DE LA COMPETENCIA Y DE LA PROPIEDAD INTELECTUAL RESOLUCIÓN N° 2426-2009/TPI-INDECOPI EXPEDIENTE N° 297394-2006 ACCIONANTE : EMPLAZADA INDUSTRIAS DE ESPUMAS Y DERIVADOS S.A. : PRODUCTOS PARAÍSO DEL PERÚ S.A.C. Nulidad de registro de marca – Principio de especialidad – Riesgo de confusión entre signos que distinguen productos de las clases 17 y 20 de la Nomenclatura Oficial: Existencia Lima, veintiuno de setiembre de dos mil nueve. I. ANTECEDENTES Con fecha 16 de noviembre de 2006, Industrias de Espumas y Derivados S.A. (Perú) solicitó la nulidad del registro de la marca de producto BB PLAST, inscrita bajo Certificado Nº 114514 a favor de Productos Paraíso del Perú en la clase 20 de la Nomenclatura Oficial. Manifestó lo siguiente: (i) Es una empresa que se dedica a la fabricación y comercialización de espumas y colchones de espumas plásticas, resortes y otros. (ii) La espuma que elabora es producto de un proceso técnico de poliuterano que incluye las siguientes materias primas plásticas semielaboradas: Poliol (51%) y TDI (39%). (iii) Es titular de la marca BB PLAST en la clase 17 de la Nomenclatura Oficial, la cual fue otorgada el 15 de noviembre de 2004. Dicha marca distingue productos elaborados de materias primas plásticas semielaboradas (espumas). (iv) A la fecha, producen espumas para uso de colchones y almohadas, las cuales serán vendidas a nivel nacional. (v) La emplazada ha registrado un signo idéntico a su marca, por lo que es evidente que se está induciendo a confusión a los consumidores; además, dicha conducta conlleva a pensar que la emplazada adquirió la marca en cuestión con la intención de cometer actos de competencia desleal. Incluso, la emplazada ha interpuesto contra su empresa una acción por infracción a los derechos de Propiedad Industrial. (vi) La Sala de Propiedad Intelectual ha establecido que la protección que otorga la ley no se limita a los productos especificados en el registro, sino que se extiende a productos similares. Con fecha 3 de enero de 2007, Productos Paraíso del Perú S.A.C. absolvió el traslado de la acción señalando que: - Conforme se verifica de la búsqueda de antecedentes, el signo BB PLAST fue registrado a favor de la empresa BB Plast S.A. en el año 1-13 TRIBUNAL DE DEFENSA DE LA COMPETENCIA Y DE LA PROPIEDAD INTELECTUAL RESOLUCIÓN N° 2426-2009/TPI-INDECOPI EXPEDIENTE N° 297394-2006 1995 para distinguir colchones de la clase 20 de la Nomenclatura Oficial. Por otro lado, la marca de la accionante fue registrada en noviembre de 2004 para distinguir productos de la clase 17 de la Nomenclatura Oficial. Lo expuesto demuestra que ambos signos han coexistido pacíficamente en el mercado sin inducir a confusión al público consumidor. - La marca de la accionante distingue en forma general materias primas semilaboradas, las cuales pueden incluir un sinnúmero de productos. Lo mismo sucede con las “espumas”, por lo que no puede concluirse que tales productos están orientados a la fabricación de colchones. Así, las materias primas plásticas semielaboradas no son únicamente espumas para elaborar colchones, ya que dichas materias pueden incluir distintos productos - En las visitas inspectivas realizadas en el local de la accionante – como consecuencia de la acción por infracción interpuesta por su empresa mediante Expediente Nº 292159-2006 – se ha verificado que ésta viene utilizando la marca BB PLAST para distinguir colchones y no materias primas plásticas semielaboradas. - Mediante Resolución Nº 1523-2000/TPI-INDECOPI, la Sala de Propiedad Intelectual ha establecido que no existe vinculación entre los colchones y las espumas de poliuretano. - No existe riesgo de confusión entre los signos en cuestión; asimismo, en ningún momento su empresa ha actuado de mala fe al solicitar el registro de la marca BB PLAST en la clase 20 de la Nomenclatura Oficial. Citó jurisprudencia que consideró aplicable al caso. Mediante Resolución Nº 510-2008/CSD-INDECOPI de fecha 24 de octubre de 2008, la Comisión de Signos Distintivos declaró fundada en parte la acción de nulidad interpuesta y declaró nulo parcialmente el Certificado Nº 114515, en el extremo que distingue colchones, colchones de resorte, colchones de espuma, box spring y almohadas, quedando vigente para distinguir camas, camas gemelas y camas plegables, de la clase 20 de la Nomenclatura Oficial. Consideró que: - Dentro de las materias primas plásticas semielaboradas se encuentran las espumas de poliuterano, las mismas que son el insumo principal de los colchones, de las almohadas y de los box spring, constituyendo una información esencial para la adquisición de tales productos por parte de los consumidores, motivo por el cual los adquirentes pueden considerar que tanto la espuma como los colchones (colchones de resortes y colchones de espuma), las almohadas y los box spring provienen de un mismo origen empresarial. 2-13 TRIBUNAL DE DEFENSA DE LA COMPETENCIA Y DE LA PROPIEDAD INTELECTUAL RESOLUCIÓN N° 2426-2009/TPI-INDECOPI EXPEDIENTE N° 297394-2006 - - - - Asimismo, se observa que los consumidores en el mercado pueden adquirir colchones de espuma (producto final) o la espuma misma (producto intermedio), estos últimos a fin de ser usados como colchones. Sin perjuicio de lo expuesto, cabe mencionar que las espumas no se encuentran vinculadas con los demás productos que distingue la marca en cuestión. Así, en el caso de las camas, camas gemelas y camas plegables, es usual en el mercado que las empresas que fabrican estos productos no sean las mismas que fabrican espumas, motivo por el cual, el consumidor no las va a asociar al mismo origen empresarial. Realizado el examen comparativo, se advierte que los signos en cuestión son gráfica y fonéticamente idénticos. Si bien la marca B B PLAST de la accionante coexistió con diversas marcas que incluían la expresión BB PLAST; cabe señalar que en el presente caso lo que es materia de discusión es el alegado riesgo de confusión entre la marca registrada a favor de la accionante y la marca de la emplazada, constituyendo esta última un registro nuevo e independiente de las citadas marcas (a la fecha caducas). Respecto a la mala fe invocada por la accionante – si bien en el escrito de nulidad no se hace mención expresa a la supuesta mala fe con la que habría actuado la emplazada, la Comisión considera que al haberse invocado el argumento de actos de competencia desleal, se entiende que se ha invocado la mala fe como causal de nulidad – debe tenerse en cuenta que no se ha acreditado la supuesta conducta maliciosa o desleal atribuida a la emplazada. Con fecha 18 de noviembre de 2008, Productos Paraíso del Perú S.A.C. interpuso recurso de apelación reiterando sus argumentos respecto a que no existe vinculación entre los productos que distingue la marca registrada a favor de la accionante y los productos que distingue la marca cuya nulidad se pretende, toda vez que los primeros resultan genéricos y pueden incluir cualquier material o insumo que sea de composición plástica. Precisó que los canales y forma de comercialización de los productos que distinguen los signos en cuestión son distintas; así, las materias plásticas semielaboradas, dentro de las cuales se encuentra la espuma, son adquiridas por los fabricantes para la elaboración de diversos productos, como cojines, almohadas y colchones, mientras que los productos de la clase 20 de la Nomenclatura Oficial son adquiridos directamente por los consumidores finales. Agregó que: - Si las marcas BB PLAST ya han coexistido pacíficamente en las clases 17 y 20 de la Nomenclatura Oficial, no habría problema en que vuelvan a coexistir. 3-13 TRIBUNAL DE DEFENSA DE LA COMPETENCIA Y DE LA PROPIEDAD INTELECTUAL RESOLUCIÓN N° 2426-2009/TPI-INDECOPI EXPEDIENTE N° 297394-2006 - - - No comprende porque la accionante esperó casi dos años para solicitar la nulidad de la marca de su empresa y que, seguramente, ello se debe a que decidió esperar a que Productos Paraíso del Perú S.A.C. invierta sus recursos en la marca BB PLAST para luego utilizarla aprovechándose de la reputación adquirida por dicha marca. La Sala debe tener en consideración el hecho de que la accionante ha utilizado la marca BB PLAST para distinguir productos distintos a los que figuran en el registro respectivo, ello con la intención de aprovecharse del prestigio adquirido por la marca de su empresa. La marca registrada cuya nulidad se pretende fue registrada cumpliendo con todos los requisitos de ley. A pesar de haber sido debidamente notificada, Industrias de Espumas y Derivados S.A. no absolvió el traslado de la apelación. II. CUESTIÓN EN DISCUSIÓN La Sala de Propiedad Intelectual deberá determinar si el registro de la marca BB PLAST fue concedido en contravención de las normas vigentes al momento de su otorgamiento. III. ANÁLISIS DE LA CUESTIÓN EN DISCUSIÓN 1. Informe de antecedentes Se ha verificado lo siguiente: a) Industrias de Espumas y Derivados S.A. (Perú) es titular de la marca de producto B B PLAST que distingue materias primas plásticas semielaboradas, de la clase 17 de la Nomenclatura Oficial, registrada bajo Certificado Nº 101336, vigente hasta el 15 de noviembre de 2014. Registro solicitado el 10 de agosto de 2004 y otorgado el 15 de noviembre de 2004. b) Productos Paraíso del Perú S.A.C. (Perú) es titular de la marca de producto BB PLAST, que distingue colchones, colchones de resorte, colchones de espuma, box spring, almohadas, camas, camas gemelas, camas plegables, de la clase 20 de la Nomenclatura Oficial, registrada bajo Certificado Nº 114514, vigente hasta el 21 de abril de 2016. Registro solicitado el 18 de enero de 2006 y otorgado el 21 de abril de 2006. 4-13 TRIBUNAL DE DEFENSA DE LA COMPETENCIA Y DE LA PROPIEDAD INTELECTUAL RESOLUCIÓN N° 2426-2009/TPI-INDECOPI EXPEDIENTE N° 297394-2006 2. Nulidad del registro de una marca 2.1 Determinación de la norma aplicable La declaración de nulidad de un registro determina, con efectos retroactivos, que ni éste ni la solicitud que lo originó, han surtido los efectos previstos por la ley. Siendo así, es importante para declarar la nulidad de un registro determinar la norma que se encontraba vigente al momento en que se otorgó, ya que la nulidad del registro se evaluará de acuerdo a las causales de fondo previstas en la norma vigente a la fecha de concesión de la marca. En tal sentido, aquellas causales de nulidad estipuladas en normas que entraron en vigencia con posterioridad no invalidan un registro otorgado válidamente de acuerdo a la normatividad vigente al momento de su concesión. Lo contrario generaría una inseguridad jurídica y significaría aplicar una norma retroactivamente, lo cual está expresamente prohibido por el artículo 103 de nuestra Constitución1. En el presente caso, al momento de otorgarse el registro de la marca de producto BB PLAST, inscrita bajo Certificado Nº 114514 (21 de abril de 2006) se encontraban vigentes la Decisión 486 y el Decreto Legislativo 823. En consecuencia, la solicitud de nulidad del registro de dicha marca debe ser evaluada en virtud de lo dispuesto en dichas normas. En cuanto a la parte procedimental, cabe señalar que se aplica la norma vigente a la fecha de tramitación de la acción de nulidad. Por lo tanto, en el presente caso corresponde aplicar la Decisión 486, concordada en lo pertinente con el Decreto Legislativo 8232 y siempre que no la contravenga. 2.2 Causal de nulidad El artículo 172 de la Decisión 486 señala que la autoridad nacional competente decretará de oficio o a solicitud de cualquier persona, la nulidad relativa de un registro de marca cuando se hubiese concedido en contravención de lo dispuesto en el artículo 136 o cuando éste se hubiera efectuado de mala fe. Esta acción prescribirá a los cinco años contados desde la fecha de concesión del registro impugnado. 1 2 Artículo 103 de la Constitución.- Ninguna ley tiene fuerza ni efecto retroactivo, salvo en materia penal cuando favorece al reo. Cabe precisar que, si bien, a la fecha, el Decreto Legislativo Nº 823, Ley de Propiedad Industrial, ya no se encuentra vigente por haber sido derogado por el Decreto Legislativo Nº 1075, al momento de presentarse la presente acción de nulidad el referido cuerpo legal sí se encontraba vigente. 5-13 TRIBUNAL DE DEFENSA DE LA COMPETENCIA Y DE LA PROPIEDAD INTELECTUAL RESOLUCIÓN N° 2426-2009/TPI-INDECOPI EXPEDIENTE N° 297394-2006 El artículo 136 inciso a) de la Decisión 486 dispone que no podrán registrarse como marca aquellos signos cuyo uso en el comercio afectara indebidamente un derecho de tercero, en particular cuando sean idénticos o se asemejen a una marca anteriormente solicitada para registro o registrada por un tercero, para los mismos productos o servicios, o para productos o servicios respecto de los cuales el uso de la marca pueda causar un riesgo de confusión o de asociación. De la revisión de lo actuado durante el desarrollo del procedimiento, se advierte que la acción de nulidad iniciada por Industrias de Espumas y Derivados S.A. se sustentó tanto en el riesgo de confusión que existiría entre la marca de la emplazada y la marca de la accionante, como en la supuesta mala fe con la que habría actuado la emplazada al solicitar el registro de la marca BB PLAST, sin embargo, debe tenerse en cuenta que mediante Resolución Nº 5102008/CSD-INDECOPI, la Comisión de Signos Distintivos concluyó que no se había acreditado la mala fe invocada, aplicando únicamente el artículo 136 inciso a) para declarar la nulidad parcial de la marca cuestionada; en tal sentido, y teniendo en cuenta que únicamente ha apelado Productos Paraíso del Perú S.A.C., corresponde a la Sala pronunciarse sólo respecto a si existe riesgo de confusión entre la marca BB PLAST y la marca B B PLAST. 3. Principio de especialidad Para que la marca pueda desempeñar sus funciones básicas en una economía competitiva, el ordenamiento jurídico otorga al titular el derecho exclusivo a utilizar la marca en el mercado. Este derecho exclusivo tiene dos dimensiones: una positiva y otra negativa. La dimensión positiva implica que el titular de la marca está facultado para usarla, cederla o conceder una licencia sobre ella. La dimensión negativa implica que el titular de la marca está facultado para prohibir que terceros la registren o usen. La dimensión positiva se ciñe estrictamente al signo en la forma exacta en que fue registrado y para los productos o servicios que figuran en el registro. La dimensión negativa, en cambio, tiene un ámbito más amplio que tradicionalmente se vincula con el riesgo de confusión. Para determinar si existe riesgo de confusión debe tenerse en cuenta el principio de la especialidad, derivación de la finalidad esencial de la marca: la distinción en el mercado de los productos o servicios de un agente económico de los productos o servicios idénticos o similares de otro. Por ello, este principio limita la posibilidad de oponer una marca (registrada o solicitada) frente al registro de otra que tiene por objeto un signo idéntico o similar sólo para productos o servicios idénticos o similares. 6-13 TRIBUNAL DE DEFENSA DE LA COMPETENCIA Y DE LA PROPIEDAD INTELECTUAL RESOLUCIÓN N° 2426-2009/TPI-INDECOPI EXPEDIENTE N° 297394-2006 Cabe precisar que la regla de la especialidad no está necesariamente vinculada a las clases de la Nomenclatura Oficial, por lo que no debe confundirse su verdadero alcance3. A este respecto, el segundo párrafo del artículo 151 de la Decisión 4864 otorga a la Clasificación Internacional un carácter meramente referencial. Así, puede ser que productos o servicios comprendidos en una misma clase de la Nomenclatura Oficial no sean similares y, a su vez, que productos o servicios de clases diferentes sean similares. En tal sentido, para determinar si existe riesgo de confusión, lo relevante es determinar si los productos o servicios son similares según su naturaleza, finalidad, canales de comercialización o público consumidor al que están dirigidos. 4. Determinación del riesgo de confusión La Decisión 486 establece literalmente el riesgo de confusión como parámetro para fijar los límites de la dimensión negativa del derecho de exclusiva de la marca5. Con relación a la figura del riesgo de confusión, cabe referirse a la interpretación prejudicial del artículo 136 inciso a) de la Decisión 486 6 realizada por el Tribunal de Justicia de la Comunidad Andina en el Proceso N° 156-IP20057, en la cual se afirma que “Los signos que aspiren ser registrados como marcas deben ser suficientemente distintivos y, en consecuencia, no deben generar confusión con otras marcas debidamente registradas que gozan de la protección legal concedida a través del acto de registro y del derecho que de él se desprende, consistente en hacer uso de ellas con exclusividad.” En dicha interpretación prejudicial se señala asimismo que: 3 El artículo 68 de la Decisión 85, derogada el 11 de diciembre de 1991 sí establecía un nexo directo entre la regla de la especialidad y las clases de la Nomenclatura Oficial. 4 Artículo 151 de la Decisión 486.- Para clasificar los productos y los servicios a los cuales se aplican las marcas, los Países Miembros utilizarán la Clasificación Internacional de Productos y Servicios para el Registro de las Marcas, establecida por el Arreglo de Niza del 15 de junio de 1957, con sus modificaciones vigentes. Las clases de la Clasificación Internacional referida en el párrafo anterior no determinarán la similitud ni la disimilitud de los productos indicados expresamente. 5 Artículo 136.- “No podrán registrarse como marcas aquellos signos cuyo uso en el comercio afectara indebidamente un derecho de tercero, en particular cuando: a) Sean idénticos o se asemejen, a una marca anteriormente solicitada para registro o registrada por un tercero, para los mismos productos o servicios, o para productos o servicios respecto de los cuales el uso de la marca pueda causar un riesgo de confusión o de asociación; (...)”. 6 Ver nota 5. 7 Gaceta Oficial del Acuerdo de Cartagena N° 1271 del 2 de diciembre de 2005. 7-13 TRIBUNAL DE DEFENSA DE LA COMPETENCIA Y DE LA PROPIEDAD INTELECTUAL RESOLUCIÓN N° 2426-2009/TPI-INDECOPI EXPEDIENTE N° 297394-2006 “Según la Normativa Comunitaria Andina no es registrable un signo confundible ya que no posee fuerza distintiva y de permitirse su registro se atentaría contra el interés del titular de la marca anteriormente registrada y el de los consumidores. La prohibición de registro de signos confundibles contribuye a que el mercado de productos y servicios se desarrolle con transparencia, para que el consumidor no sea objeto de engaños que le lleven a incurrir en error al realizar la elección de los productos que desea adquirir. Como ya se anotó, la ausencia de distintividad de un signo, en relación con una marca ya existente con anterioridad en el mercado, o con un signo previamente solicitado, puede provocar error entre los consumidores; por tal circunstancia la norma comunitaria ha determinado que la sola posibilidad de confusión basta para negar el registro.” La Sala considera que el riesgo de confusión debe analizarse teniendo en cuenta la interrelación de todos los elementos: productos - servicios, signos y fuerza distintiva de los signos. Estos elementos son independientes unos de otros, de modo que para el análisis de la similitud o conexión competitiva de productos o servicios, resulta irrelevante tanto la similitud de los signos como su distintividad. En la interrelación de estos elementos se determina el riesgo de confusión. Así, puede ser que ante marcas idénticas, en caso que la marca registrada anterior tenga una fuerza distintiva muy grande, aun con una lejana conexión competitiva, se determine que existe riesgo de confusión. Por otro lado, ante productos o servicios idénticos, cualquier similitud de los signos puede ser suficiente para que exista un riesgo de confusión. Asimismo, puede ser que, a pesar de la similitud de los signos y aunque se determine que existe similitud o conexión competitiva entre los productos o servicios, no se determine un riesgo de confusión, si la marca registrada anterior es muy débil, por lo que cuenta con una protección limitada. De otro lado, en el Proceso N° 126-IP-20058, el Tribunal Andino estableció que: “Para determinar el riesgo de confusión del signo pendiente de registro respecto de una marca ya registrada, o ya solicitada para registro, será necesario establecer si se presenta identidad o semejanza tanto entre los signos en disputa, como entre los productos o servicios distinguidos por ellos y, además, considerar la situación de los consumidores o usuarios, la cual variará en función de los productos o servicios de que se trate.” 8 Gaceta Oficial del Acuerdo de Cartagena N° 1273 del 7 de diciembre del 2005. 8-13 TRIBUNAL DE DEFENSA DE LA COMPETENCIA Y DE LA PROPIEDAD INTELECTUAL RESOLUCIÓN N° 2426-2009/TPI-INDECOPI EXPEDIENTE N° 297394-2006 Por lo anterior, la confusión entre dos signos es tanto mayor cuanto mayor sea la similitud o conexión competitiva entre los productos o servicios a distinguir con los mismos. En conclusión, para la correcta aplicación del artículo 136 inciso a) de la Decisión 486, es necesaria la interrelación de determinados requisitos: la identidad y similitud de productos o servicios y la identidad o similitud de los signos, tomando en cuenta, siempre, la distintividad de los signos. 4.1 Respecto a los productos En el presente caso, la marca registrada a favor de la emplazada (Certificado Nº 114514) distingue colchones, colchones de resorte, colchones de espuma, box spring, almohadas, camas, camas gemelas, camas plegables, de la clase 20 de la Nomenclatura Oficial. Por su parte, la marca B B PLAST de la accionante distingue materias primas plásticas semielaboradas, de la clase 17 de la Nomenclatura Oficial. Al respecto, cabe precisar que dentro de las materias primas plásticas semielaboradas que distingue la marca de la accionante se encuentran las espumas de poliuretano, las cuales son utilizadas en la fabricación de colchones y muebles. Así, la espuma de poliuretano es un material plástico poroso formado por una agregación de burbujas, conocido también por el nombre coloquial de “gomaespuma”. La espuma de poliuretano es un material muy versátil, ya que, según los aditivos y los sistemas de fabricación utilizados, se pueden conseguir características muy distintas destinadas a usos muy diferentes, desde los bien conocidos bloques de espuma elástica para colchones hasta espumas casi rígidas para juguetería, automoción o calzado9. Si bien el hecho de que la espuma de poliuretano sea una de las materias primas de los colchones y almohadas no determina, por sí solo, la existencia de similitud o conexión competitiva entre los productos que distinguen los signos en cuestión, sin embargo, debe tenerse en cuenta que en el mercado es muy probable encontrar una empresa que fabrique colchones y almohadas y que también elabore la espuma con la que rellena dichos productos; incluso, la propia empresa Productos Paraíso del Perú, a través de su página web 10, señala que produce espumas de poliuretano formuladas con las mejores materias primas de reconocidas Petroquímicas en el ámbito mundial, así como con la más avanzada tecnología. Asimismo, existen en el mercado nacional 9 Información obtenida de http://www.foamflex.com/tienda/espuma-de-poliuretano.php http://www.paraiso-peru.com/espanol/productos/espumas/espumas.html 10 9-13 TRIBUNAL DE DEFENSA DE LA COMPETENCIA Y DE LA PROPIEDAD INTELECTUAL RESOLUCIÓN N° 2426-2009/TPI-INDECOPI EXPEDIENTE N° 297394-2006 distintas empresas que se dedican tanto a elaborar y comercializar colchones de resortes y espuma y almohadas, como a producir espumas de poliuretano, como Continental11 , Forli12, Santa Rosa, Industrias Plásticas Zeta Flex S.A.C., entre otras. En tal sentido, la Sala Considera que existe vinculación competitiva entre algunos productos que distingue la marca de la accionante (espumas de poliuretano) y algunos de los productos que distingue la marca de la accionante (colchones, colchones de resorte, colchones de espuma, box spring y almohadas). Por otro lado, respecto a las camas, camas gemelas y camas plegables que también distingue la marca de la emplazada, cabe precisar que entre éstas y los productos que distingue la marca de la accionante no existe vinculación competitiva, ya que se trata de productos de distinta naturaleza y finalidad y, además, serán expendidos a través de distintos canales. 4.2 Examen comparativo Para determinar si dos signos son semejantes, es práctica de esta Sala partir de la impresión en conjunto que cada uno de ellos pueda suscitar en el público consumidor de los correspondientes productos o servicios, criterio por lo demás contenido en el artículo 131 inciso a) del Decreto Legislativo 82313. Por lo general, el consumidor no podrá comparar ambos signos simultáneamente. Más bien el signo que tenga al frente en un momento determinado va a ser confrontado con el recuerdo más o menos vago que guarde del signo anteriormente percibido. Por ello, al comparar dos signos distintivos debe considerarse principalmente aquellas características que puedan ser recordadas por el público consumidor. Lo más importante a considerar son las semejanzas y no las diferencias de los signos en cuestión. Las diferencias sólo tendrán influencia en la impresión en conjunto si son tan fuertes frente a las similitudes, que dejan un recuerdo en la mente de los consumidores. Estos 11 http://cicontinental.com/index.php?option=com_content&task=view&id=66&Itemid=90 http://www.colchonesforli.com/ 13 Artículo 131.- A efectos de establecer si dos signos son semejantes y capaces de inducir a confusión y error al consumidor, la Oficina competente tendrá en cuenta, principalmente los siguientes criterios: a) La apreciación sucesiva de los signos considerando su aspecto de conjunto, y con mayor énfasis en las semejanzas que en las diferencias; b) El grado de percepción del consumidor medio; c) La naturaleza de los productos o servicios y su forma de comercialización o prestación, respectivamente; d) El carácter arbitrario o de fantasía del signo, su uso, publicidad y reputación en el mercado; y, e) Si el signo es parte de una familia de marcas. 12 10-13 TRIBUNAL DE DEFENSA DE LA COMPETENCIA Y DE LA PROPIEDAD INTELECTUAL RESOLUCIÓN N° 2426-2009/TPI-INDECOPI EXPEDIENTE N° 297394-2006 criterios han sido señalados en reiterada jurisprudencia del Tribunal Andino y más recientemente en los Procesos N°s 55-IP-200014 y 76-IP-200015. El recuerdo y capacidad de diferenciación del público dependerán de los productos o servicios a distinguir y especialmente de la atención que usualmente se dé para la adquisición y contratación de esos productos o servicios. En el presente caso, la Sala conviene en precisar que la adquisición de los productos que distinguen los signos en conflicto requiere un cierto cuidado y atención en la elección. En este orden de ideas, la impresión en conjunto de signos denominativos (o de aquéllos en los que resulta más relevante el elemento denominativo) se determinará en primer lugar por su aspecto fonético y gráfico. En muchos casos, el aspecto fonético será el más importante porque por lo general la denominación es utilizada en el mercado verbalmente. Realizado el examen comparativo entre la marca registrada BB PLAST de la emplazada y la marca registrada B B PLAST base de la acción, tanto desde el desde el punto de vista fonético como gráfico, se advierte que los signos resultan idénticos. 4.3. Riesgo de confusión Por lo expuesto, respecto de las camas, camas gemelas y camas plegables que distingue la marca cuestionada, a pesar de la identidad entre los signos en cuestión, dada la falta de vinculación competitiva entre los productos que distinguen los mismos, la Sala concluye que su coexistencia en el mercado no es capaz de inducir a confusión al público consumidor respecto a los productos (confusión directa) o respecto al origen empresarial de los mismos (confusión indirecta). En cuanto a los colchones, colchones de resortes, colchones de espuma, box spring y almohadas que distingue la marca de la emplazada, al existir vinculación competitiva entre los productos que distinguen los signos en cuestión, y dada la identidad existente entre los mismos, se concluye que no es posible su coexistencia en el mercado sin riesgo de inducir a confusión a los consumidores. 14 15 Gaceta Oficial del Acuerdo de Cartagena Nº 633 del 17 de enero del año 2001, p. 7. Gaceta Oficial del Acuerdo de Cartagena Nº 633 (nota 14), p. 15. 11-13 TRIBUNAL DE DEFENSA DE LA COMPETENCIA Y DE LA PROPIEDAD INTELECTUAL RESOLUCIÓN N° 2426-2009/TPI-INDECOPI EXPEDIENTE N° 297394-2006 En consecuencia, se considera que al otorgarse el registro de la marca BB PLAST registrada bajo Certificado Nº 114514, éste se encontraba comprendido en la prohibición del artículo 136 inciso a) de la Decisión 486, por lo que corresponde declarar su nulidad respecto de colchones, colchones de resortes, colchones de espuma, box spring y almohadas. 5. Otros argumentos de la emplazada Productos Paraíso del Perú S.A.C. ha señalado que debe tenerse en cuenta que al momento de registrarse la marca de la accionante en la clase 17 de la Nomenclatura Oficial se encontraba registrada la marca BB PLAST en la clase 20 de la Nomenclatura Oficial a favor de un tercero, por lo que dichos signos ya han coexistido, motivo por el cual no habría problema en que también coexistan los signos cuestionados en el presente procedimiento. Al respecto, cabe precisar que aun cuando ello sea cierto16, tal hecho carece de relevancia en el presente procedimiento, en el cual debe evaluarse únicamente si al momento de concederse el registro de la marca BB PLAST a favor de Productos Paraíso del Perú S.A.C., éste se encontraba incurso en alguna prohibición de registro. En tal sentido, la coexistencia de la marca de la accionante con registros anteriores de terceros no constituye un argumento que determine o no la nulidad de la marca de la emplazada. Por otro lado, la emplazada también señala que debe tenerse en consideración que la marca BB PLAST de la accionante viene siendo utilizada para distinguir productos distintos a los que figuran en el certificado. Al respecto, cabe mencionar que dicho argumento también carece de relevancia en el presente expediente, en el cual sólo debe evaluarse si la marca de la emplazada se encuentra incursa en alguna causal que determine su nulidad. IV. RESOLUCIÓN DE LA SALA CONFIRMAR la Resolución N° 510-2008/CSD-INDECOPI de fecha 24 de octubre de 2008, que declaró FUNDADA en parte la acción de nulidad del registro de la marca de producto BB PLAST, inscrita bajo Certificado Nº 114514, respecto de colchones, colchones de resorte, colchones de espuma, 16 Se ha verificado que a la fecha de inscripción de la marca BB PLAST a favor de Industrias de Espumas y Derivados S.A. se encontraba registrada en la clase 20 de la Nomenclatura Oficial la marca B.B. PLAST a favor de B.B. Plast S.A. – la cual caducó el 27 de abril de 2005. 12-13 TRIBUNAL DE DEFENSA DE LA COMPETENCIA Y DE LA PROPIEDAD INTELECTUAL RESOLUCIÓN N° 2426-2009/TPI-INDECOPI EXPEDIENTE N° 297394-2006 box spring y almohadas y la mantuvo vigente para distinguir camas, camas gemelas, camas plegables, de la clase 20 de la Nomenclatura Oficial. Con la intervención de los Vocales: María Soledad Ferreyros Castañeda, Néstor Manuel Escobedo Ferrada, Edgardo Enrique Rebagliati Castañón y Miguel Antonio Quirós García MARIA SOLEDAD FERREYROS CASTAÑEDA Presidenta de la Sala de Propiedad Intelectual /go. 13-13