Aprender haciendo, formación basada en simuladores Soraya Paniagua Servicios El uso de simuladores como herramienta de formación está siendo todo un éxito en diversos sectores de negocio. ¿El secreto?, este artículo se lo desvelará. Descargar archivo de audio (15:06 min / 3,45 Mb) Durante años, la simulación asistida por ordenador ha jugado un papel muy significativo en los programas de formación de importantes sectores de la economía como la aviación o la industria militar. De hecho, los primeros simuladores surgen en la década de los 60 con el objetivo de reducir el nivel de error humano en los vuelos comerciales. Desde entonces el entrenamiento de los pilotos es impensable sin un simulador. Actualmente, el modelo de simulaciones asistidas por ordenador está siendo utilizado con éxito en diversos sectores de negocio para el desarrollo de una amplia gama de competencias. Una Simulación parte de una reconstrucción de modelos de actuación reales y permite tomar decisiones relacionadas con dicho modelo, minimizando el riesgo de tomar decisiones erróneas. De esta forma, el usuario aprende por la experiencia, con una base eminentemente práctica. La formación basada en la simulación permite a los empleados aprender haciendo o lo que es lo mismo, tomando decisiones en escenarios reales. Es lo que se conoce como learn by doing es decir, aprender experimentando situaciones que parecen reales. Este tipo de aprendizaje facilita esa adhesión o retención de la información y permite aprender más rápido a la vez que facilita el desarrollo de una mayor intuición a la hora de tomar decisiones reales. Las barreras técnicas y los costes de desarrollo, han sido los dos principales factores que, hasta ahora, han frenado la expansión de los simuladores como herramienta de aprendizaje. Pero las nuevas tecnologías, como Macromedia Flash, omnipresente en la formación a través de Internet, así como la creación de herramientas de autor específicas para simulaciones están abaratando significativamente los procesos de producción. Así, podemos afirmar que a corto o medio plazo asistiremos al auge de los simuladores como herramienta de formación. ¿Qué es un simulador? Según Will Glass-Husain (Foro Business Simulations), hay bastante confusión sobre qué es y qué no es un simulador. Mucha gente podría pensar en un millonario simulador de vuelo, otros en el juego de los Sims (juego de ordenador) y otros en juego de negocio a través de la web. Según Glass-Husain Todo simulador debe tener tres atributos: 1. Imita la realidad 2. No es real en sí mismo 3. Puede ser cambiado por sus usuarios Un simulador imita la realidad La imitación de la realidad es lo que distingue un simulador de un juego. Por ejemplo el juego SimCity es un simulador y un juego porque el usuario, que es el alcalde de un pueblo, puede conseguir que el pueblo sea próspero y la gente feliz o hundirlo en la bancarrota mediante sus decisiones y acciones. Un simulador no es real Un simulador se usa para practicar algo, no sustituye experiencias reales. Rose Tremain escribió que "la vida no es un ensayo general". También es cierto que un ensayo general no es la vida. Si cometes un error durante un ensayo general no hay coste, solo repites la escena hasta que salga bien. Un simulador es una simplificación de la vida real. Los simuladores sencillos son, normalmente, mejores que los complicados. Los simuladores complejos pueden hacer que el usuario se pierda en los detalles y no pueda extraer el aprendizaje o las lecciones valiosas del simulador. La consultora McKinsey, en un artículo titulado 'Is Simulation Better Than Experience?' expone que las simulaciones pueden ser mejores que la experiencia real ya que comprimen el tiempo y elimina detalles irrelevantes. A diferencia de la vida, las simulaciones han sido optimizadas para el aprendizaje. Un simulador puede ser cambiado por sus usuarios Las simulaciones son activas, fuerzan a los estudiantes pasivos hacia un aprendizaje activo. El profesor de psicología Salvatore Soraci ha demostrado que la gente recuerda mejor las cosas que ha aprendido después de un esfuerzo mental. Siempre hay un "¡ah -ha! " cuando alguien genera su propia hipótesis de cómo funciona algo antes de descubrir la respuesta correcta. Ese "¡ah -ha! " no ocurrirá nunca cuando el aprendizaje sólo es empírico. Es preciso practicar e interactuar. Algunas veces las "demos" son llamadas simulaciones. Si la "demo" es, esencialmente, una película donde ver a otros, entonces no es simulación. Sin embargo, si se pueden cambiar cosas dentro de la "demo" y ver cómo responde, la "demo" se convierte en simulador. Las simulaciones hacen que los estudiantes sean responsables de su propio aprendizaje y su motivación consiste en la consecución de metas u objetivos. La motivación en el aprendizaje basado en simuladores Con simuladores, la necesidad de entender la motivación es particularmente importante. El aprendizaje a través de las simulaciones es auto conducido. Un usuario que se sienta delante de un ordenador y comienza a conducir una simulación irá a través de un círculo de aprendizaje: reflexionar sobre el caso, elegir la estrategia, tomar decisiones y observar las consecuencias de esas decisiones. Sin este auto esfuerzo el simulador se convertirá en un simple juego. En el peor de los casos, se convierte en un ejercicio frustrante. Los simuladores de negocio El modelo de aprendizaje a través de simuladores fue adoptado por las escuelas internaciones de negocio en la década de los 80, fundamentalmente en Estados Unidos. Un simulador de negocio es un juego cuyo objetivo es fomentar las dotes estratégicas y directivas de los participantes. Podemos afirmar que uno de los primeros simuladores de negocio que ha existido es el juego del Monopoly que se basa en la compraventa de inmuebles y otros negocios. El jugador toma decisiones y se enfrenta a situaciones de pérdidas y ganancias. Los simuladores pueden estar basados en la monoparticipación y los que exigen la multiparticipación. El primer tipo lo forman los simuladores más sencillos, pues se reducen a un diálogo máquina-participante. El alumno se enfrenta en solitario al programa. Imagen de una simulación de un programa sobre Atención al Cliente de Telefónica Una de las claves de éxito de un simulador de negocio es el realismo ya que genera una experiencia más divertida, clara y educativa. La aproximación a la realidad hace más sencillo saber qué es lo que se supone que hay que hacer en el simulador, el comportamiento del simulador será plausible y razonable. Un simulador realista es, además, más educativo porque es más fácil para los participantes dibujar una correspondencia entre los resultados de la simulación y los resultados de su organización. Otro aspecto importante es la parcela de conocimientos que pretende abarcar el simulador. La calidad del simulador, sin duda, será inferior si pretende englobar con igual intensidad "todos" o muchos aspectos de la realidad empresarial (estrategia, organización, personal, producción, costes, financiación, inversión, logística, marketing, etc.). Es preferible optar por un simulador "dedicado", aquel que presenta una o dos facetas de la actividad de una empresa. Actualmente existen una gran variedad de juegos y simuladores virtuales de negocio, así como herramientas que permiten introducir parámetros para construir el simulador a medida, un ejemplo de software es el "Powersim Estudio 2005 (http://www.cacitgroup.com). El usuario simplemente deberá definir las decisiones que desea optimizar, y especificar los objetivos que desea alcanzar. El sistema encontrará automáticamente el conjunto de decisiones que concretan sus metas. The Beer War (http://www.beer-war.com) es un simulador que gira en torno al negocio de la cerveza. El jugador se hace cargo de una cervecería y debe construir la mayor compañía de cervezas del mercado. Para ganar el juego el usuario tendrá que llevar a la bancarrota a la competencia. Es gratuito, en inglés y de baja calidad gráfica. En el ámbito académico podemos hablar del Centro de Simulación Empresarial (CESIEM) de México, líder en el desarrollo y administración de simuladores en América Latina ( http://www.cem.itesm.mx/centro). Para el uso de sus alumnos utilizan varios simuladores como el Simulador de Administración general y estrategias "The business policy game", el Simulador de Marketing "Marketing game", también el "Threshold Team Competidor", un simulador que involucra a los participantes con una pequeña empresa manufacturera que fabrica dos productos de plástico y los comercializa en un mercado específico por medio de tiendas detallistas. Demuestra cómo se interrelacionan cada una de las áreas de la compañía y ayuda a los participantes a percibir los problemas de una manera integral. En el simulador "Airline" el equipo asume la gerencia de una línea aérea. La línea aérea tiene actualmente 3 aviones pequeños para 19 pasajeros cada uno. Cada empresa en la simulación comienza con la misma estructura general del mercado, avión, activos, y la misma capacidad de carga de pasajeros. En español y gratuito existe el simulador "Civitis" (http://civitis.com), un juego de estrategia online que simula el funcionamiento real de las sociedades de cultura occidental. Ello implica la actuación como ciudadano, como empresario e incluso como político. Todo ciudadano gestiona una empresa con todas las implicaciones que ello conlleva, personal, proveedores, clientes, calidad, stocks, mercados, exportación, importación, repercusión impositiva, repercusión legislativa. En España, el Instituto Nacional de Empleo dispone del "Simulador Virtual de Industria Láctea" (http://www2.inem.es/sggfo/formacion/cursos/simulador_virtual.asp). El simulador permite emular las prácticas de fabricación en una industria aportando los conocimientos teóricos necesarios para complementar la intervención formativa del docente tanto en instalaciones como en el proceso de fabricación. Además, ofrece al alumno la visión necesaria de conjunto de las industrias lácteas, proporcionándole, con ello, la posibilidad de interactuar en el proceso formativo y observar las consecuencias de los diferentes procesos estudiados, adquiriendo las habilidades necesarias para su desempeño. Otro ejemplo de simulación lo podemos encontrar en la página de innovación del Gobierno de Castilla la Mancha, se trata del "Simulador de Gestión Para Empresa Innovadoras" (http://www.clminnovacion.com/formacion/business/default.htm). El simulador permite recrear toda la problemática a las que se enfrentan los directivos y emprendedores en la gestión empresarial cotidiana. Los participantes no compiten contra la máquina sino contra otros participantes, estando condicionados por las decisiones de estos. Simulador de Gestión de Recursos de Telefónica En España, Telefónica ha incluido en sus programas de formación el uso de simuladores y ya ha puesto en marcha el primer simulador de negocio orientado a la a mandos medios, gerentes, personas que lideran equipos y aquellos que deben comprender las variables de control de gestión de la empresa. El Simulador de Gestión de Recursos de Telefónica ha sido producido por Educaterra, empresa de Telefónica, que durante años viene trabajando en la formación basada en simulación y ha creado numerosos cursos basados en simulaciones de herramientas de gestión y aplicaciones informáticas. Imágenes del Simulador de Gestión de Recursos de Telefónica El Simulador de Gestión de Recursos, es una herramienta de monoparticipación. El alumno individualmente se enfrenta a situaciones de la realidad en un contexto de trabajo en el que debe tomar decisiones. Son cinco horas de formación en la modalidad de autoestudio pero con el apoyo de un experto para la resolución de dudas. El objetivo es formar a los mandos medios de Telefónica en todos aquellos aspectos que mejoran la eficacia en la gestión de recursos, haciendo especial hincapié en el incremento de la productividad. Para ello, el usuario deberá superar las pruebas que el simulador le vaya poniendo, a medida que interacciona con el mismo y que recrean situaciones típicas que se dan en el ámbito real de la empresa que afectan de una u otra forma a la rentabilidad. El Simulador tiene varios entornos: sala de reuniones, despachos, espacio de trabajo con el equipo, despacho de un cliente y cafetería. El alumno elige libremente a qué zona o sala desplazarse. Una vez dentro de cada escenario debe afrontar diferentes situaciones y cuestiones relacionadas con ese entorno de trabajo. El alumno recibe el "feed back" cada vez que toma una decisión y se le dan las pautas para mejorar su desempeño y eficacia. Además el simulador se divide en dos partes: 1.- El alumno se enfrenta a situaciones o problemas relacionados con variables soft (blandas) de la gestión, como por ejemplo, la gestión del tiempo, trabajo en equipo, delegación eficaz, etc. 2.- El alumno tiene a su disposición un panel con las principales variables económicas de la compañía en el que puede reproducir decisiones como el incremento de precios, la disminución de costes, etc. También puede utilizar el panel para averiguar las respuestas a preguntas sobre el mercado y el negocio de las telecomunicaciones. Estas dos partes responden a la premisa de que la rentabilidad está relacionada con la gestión de recursos de diferente índole dentro de un área de trabajo. Un mando debe conocer lo que sucede en la compañía aunque no pueda actuar directamente sobre las variables financieras de la organización en su conjunto. Pero existe un aspecto muy importante sobre el que sí puede actuar que es la productividad del equipo, basada en un liderazgo eficaz que genere buen clima de trabajo, la satisfacción y fidelización de clientes, etc. Las tendencias Según el Instituto Danés de Tecnologías, a medida que las tecnologías de simulación se hacen más sofisticadas y más rentables a la hora de desarrollar, y con el aumento del énfasis en la evaluación de su eficacia, es probable que el mercado siga creciendo (Billhardt 2004). De cara a futuro, es importante establecer una diferenciación clara entre simulaciones y simulador. Ya existen muchos cursos basados en simulaciones sobre todo para explicar el funcionamiento de programas informáticos o herramientas de gestión. No es lo mismo simular una acción o función que crear un simulador. A nivel de la Educación, uno de los campos con más potencial para la aplicación de lo simuladores es la Formación Profesional. Para los proveedores de contenidos es un gran reto hacer entender a las autoridades competentes el gran valor de integrar este tipo de recursos en la FP. La principal dificultad será encontrar la financiación para crear los recursos. En cuanto a los proveedores, las evidencias apuntan a que empresas que se dedican a la creación de videojuegos están comenzando a trabajar en el desarrollo de simuladores y, por tanto, entrando de lleno en el campo del eLearning. Soraya Paniagua. Educaterra Documentación: • Study of the e-learning suppliers' "market" in Europe. Danish Technological Institute. 2004. • What is a Simulation?, by Will Glass-Husain. Foro Business Simulations. The Drive to Learn, by Will Glass-Husain. Foro Business Simulations. • Simulador de negocio MMT2: Para dominar el marketing. PC World, número 147. • Los juegos de simulación basados en la realidad, herramienta de desarrollo organizacional. Antoni Amenós Vidal. estrategia.info • "Negocio virtualmente real". Virginia Viadas. www.soyentrepreneur.com Descargar archivo de audio (15:06 min / 3,45 Mb)