266 veteada con materiales calizos mediante estrechas lajas. Este

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BOLETÍN
DE LA SOCIEDAD
ESPAÑOLA
veteada con materiales calizos mediante estrechas lajas. Este lecho
bituminoso se corresponde con el reconocido en otro socavón de la
ladera contraria; trátase, pues, de un mismo estrato.
Ascendiendo aguas arriba, en la ladera del barranco se encuentra
otro lecho bituminoso, cuya dirección es casi de este a oeste; el buzamiento sigue siendo meridional, al sur de 70 a 80 , y la potencia de
unos 75 centímetros. Como siempre, la capa bituminosa aparece entreveteada por calizas, que siempre están más o menos cargadas de materias volátiles. Esta capa corresponde con la reconocida en otro socavón
en la ladera de enfrente.
En este socavón y al partirse un gran fragmento de pizarras bituminosas, pudimos recoger trozos en cuyas lisas superficies se reconocían
restos de peces, espinas, partes de esqueletos y escamas, pero en muy
mal estado de conservación (lám. X X X V ) .
Se ve, pues, que en esta zona relativamente uniforme existen al menos tres capas bituminosas claras, separadas entre sí poco más o menos
por unos 100 metros de materiales estériles.
Estas pizarras despiden olor característico al golpearlas, carácter
que quizá en esta zona es más acentuado que en las otras.
Es seguro que esta formación, continuándose con el rumbo indicado, atraviese el crestón existente entre el Udalazar y el arroyo de las
Minillas o de Cañada Honda; de aquí el que también en ambas laderas
de dicho cauce se hayan reconocido capas bituminosas. Los socavones
efectuados son varios y los estudiamos a continuación.
Lechos bituminosos del arroyo de las Minillas.—Son éstos tres, situados en la margen derecha y hacia las zonas altas. La dirección de la
formación cretácica es, como siempre, la de W N W . a ESE., y el buzamiento meridional al SSW., entre 55 y 60 .
En el socavón inferior, y al lado derecho entrando, se reconoce un
plano de resbalamiento local, orientado en líneas generales de norte a
sur y casi vertical. La capa, muy flexuosa, mide por término medio
unos 60-70 centímetros (lám. XXXIV, fig. 2).
Por encima de este socavón existen otros dos, ambos muy superficiales y próximos al descrito. En los dos se reconoce un lecho bituminoso cuyo buzamiento general sigue siendo hacia el S S W . más o menos, y cuya inclinación oscila entre 60 y 7 0 . La riqueza bituminosa en ambas calicatas aun es pobre, pero es necesario indicar que se
está aún en las zonas meteorizadas y que, por lo tanto, han perdido sus
caracteres bituminosos. En zonas más profundas presentarán sin duda
alguna los rasgos que caracterizan a estos estratos pizarrosos.
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