«La sanción social fortalece la conciencia de lo público» cuarto de huéspedes Para introducir el debate sobre corrupción entrevistamos al doctor Roberto Hinestrosa, actual decano de la Facultad de Finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales, quien se desempeñó como viceministro de Justicia, jefe de Gabinete y secretario del Despacho de la gobernación de Cundinamarca; procurador delegado para la Economía y Hacienda Pública, procurador delegado ante las Entidades Territoriales, y recientemente elegido Concejal de Bogotá. ¿Cree usted que los escándalos de corrupción son el resultado de nuevas dinámicas por parte de los agentes involucrados, o corresponden más a viejas prácticas con mayor visibilidad debido a las recientes medidas de control institucional y sensibilización por parte de la sociedad? Yo creo que sí hay un aumento marcado de la corrupción, fundamentalmente en la contratación; en obras de infraestructura, en compras, suministros, servicios; es decir, que el fenómeno se ha concentrado especialmente como un beneficio de las administraciones públicas a favor de una serie de particulares. Patricia Herrera Profesora investigadora Facultad de Finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales [email protected] Sandra Olaya Profesora-investigadora Facultad de Finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales [email protected] Carolina González Profesora-investigadora Facultad de Finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales [email protected] ¿Podemos entender, entonces, que es un fenómeno propio del sector público? Porque hay quienes sostienen que se trata de una dinámica social polifacética y transversal a la estructura social... Que se concentre no quiere decir que sea exclusivo. Efectivamente, en el sector público se expresa de manera particular, pues allí se manifiesta como una suma de factores morales, políticos, culturales, sin duda. ¿Es transversal?, ¿polifacética? Sí. Estoy de acuerdo con el hecho de que para interpretar razonablemente la corrupción se requieren miradas holísticas, una aproximación amplia a ésta. Es muy cultural. Fíjese que en los países desarrollados, en general lo público se ve (y se siente) como aquello que «es de todos»; aquí, en cambio, parece que lo público fuera «lo de nadie», algo ajeno, lejano. Los delincuentes hacen de lo público un botín, precisamente por esa marcada indiferencia del ciudadano de a pie. ¿Es social? Sí, también, con intolerables efectos en la política. Por ejemplo, mire el lamentable espectáculo de las elecciones, que se han convertido en un negocio; los candidatos a la presidencia, a las alcaldías, a las gobernaciones, así como al Congreso, a la Asamblea y al Concejo, adquieren con las revista de la universidad externado de colombia 10 facultad de finanzas, gobierno y relaciones internacionales cuarto de huéspedes 11 cuarto de huéspedes personas que financian sus campañas una serie de compromisos previos, los cuales deben cumplir —si llegan al poder— favoreciendo a los contratistas, o a sus amigos que ya tienen nexos con los carruseles de la contratación. Es una filigrana muy sofisticada, hecha de compromisos y poder mal ejercido, y sustentada en la indiferencia. En el fondo, ese es el tema de los carruseles de la contratación en Bogotá, que afortunadamente empieza a mostrar unos precedentes importantes en lo relacionado con la misión que cumplieron los ciudadanos y los medios, en su calidad de representantes de la comunidad, como vigilantes de las finanzas públicas y de una justicia comprometida a sancionar y llevar hasta las últimas consecuencias los excesos de los funcionarios públicos. ¿Hay escenarios más propicios que otros para que germine la corrupción? Es una pregunta interesante, un buen indicador del fenómeno. Sí, existen escenarios que se prestan para que aparezca la corrupción, así como hay escenarios en los que la corrupción es poco probable. Estudiar los unos y los otros nos permite sofisticar los diseños institucionales, por ejemplo, o determinar los sitios vulnerables. Por otra parte, es importante —pensando en las formas más idóneas de aproximarse al fenómeno y estudiarlo, que es lo que ustedes hacen— entender la correlación entre la manera en que se presentan los actos de corrupción y los controles que se han implementado para prevenirlos. En este orden de ideas, se cree —ingenuamente, diría yo— que por el hecho de que haya un mayor número de controles, o más entidades de control, la corrupción disminuye, pero se ha visto que no es así; por el contrario, ha aumentado, ha ampliado sus escenarios. ¿Por qué? Es algo que debemos resolver. En última instancia, lo que han conseguido los expertos es aprender a desviarla, pero la corrupción muta, se adapta. Entonces, a pesar de que haya un mayor número de entidades de control, ¿la corrupción no disminuye? Esta es la pregunta fundamental, la que todo el mundo se hace y la que hay que contestar. ¿Qué debemos hacer para que la corrupción disminuya?, ¿para que prácticamente desaparezca de nuestra soLa sanción social, la ciedad? En mi concepto, tiene que haber sanciones y órganos de exclusión del corrupto, control, pero lo decisivo es su articulación, su coherencia con previene por ejemplo que se una cultura contra la corrupción. Lo ideal es que la gente se dé hagan balances en los que, aun cuenta, efectivamente, de que los recursos públicos, los actos pagando penas duras, a la vuelta de corrupción, de robo y de malas prácticas van en contra de de pocos años los condenados los intereses directos de la sociedad en general. Lo ideal es que salgan con miles de millones haya cultura donde se inserte el gen anticorrupción y que, por de pesos en el bolsillo. tanto, sea capaz de defender lo público, desde las bancas de un parque hasta los dineros de los contribuyentes. Ese es el ideal. El otro escenario, es decir, el de vigilancia y control, y de los controles sobre los controles, es costoso y frágil. revista de la universidad externado de colombia 12 facultad de finanzas, gobierno y relaciones internacionales contenido 1 Si la ciudadanía participa, si ejerce un control sobre los actos de los gobernantes y de los representantes en los cuerpos colegiados, la corrupción sufrirá un golpe demoledor. No creo, ni nunca creeré, que los colombianos son incapaces —casi por su ADN, dicen los que defienden esa teoría— de oponerse a la corrupción. ¿Cómo favorecer una cultura que prevenga la corrupción en la interacción entre Estado y particulares? Por medio de la sanción social. La sanción fortalece la conciencia de lo público. Son principios básicos, nada que nadie no pueda entender; es ir a lo básico, al pacto social. Repetir, divulgar, premiar, favorecer, exigir en cada instancia la idea de que lo público es de todos los ciudadanos, que es inmoral enriquecerse a costa de los demás, que las sanciones son duras y hay imperio de la ley, y lo más importante, que la sanción más grave es la sanción pública, la social. Si quieren, en este último punto está contenido todo el tema preventivo. Y es que la sanción social, la exclusión del corrupto, previene por ejemplo que se hagan balances en los que, aun pagando penas duras, a la vuelta de pocos años los condenados salgan con miles de millones de pesos en el bolsillo. La sanción social tiene el poder de cerrarle el paso a la idea de que es posible hacerse rico a cambio de estar tres o cuatro años en la cárcel. De estas ideas básicas pero fuertes, de este poder de lo simple, se empiezan a construir la responsabilidad social y política, la participación, la ciudadanía propiamente dicha, es decir, la participación dentro de la vida política, como organización de la sociedad, fundada en la Constitución, pero también la participación como el ejercicio del derecho y del deber popular, que como ustedes saben, tiene varios procedimientos. editorial 4 correo de brujas 6 cuarto de huéspedes 10 cuarto de huéspedes dosier 18 actualidad 46 especial 66 economía y finanzas 98 imagomundi 120 ¿Algunos que valga la pena mencionar? Uno relevante por su actualidad: la presentación de los avales de los partidos a los candidatos. Lo ideal es que sean candidatos sanos, transparentes, que haya garantías desde los misciudad - región Con el voto, la mos partidos —¡para eso existen los partidos!— de que 160 gente ejerce un control desempeñarán una función responsable y ejercerán un sobre aquellos elegidos para control sobre la función de la administración. gobernar y participar como Mencionaría también el voto, porque la abstencontraseña miembros de los cuerpos colegiados. ción es una de las principales cómplices (así lo veo) 184 Me sostengo en el argumento de la corrupción. Participación, cultura ciudadana, de que el control a la corrupción todo va unido. Con el voto, la gente ejerce un cony su erradicación dependen trol sobre aquellos elegidos para gobernar y participar dramáticamente de la cultura como miembros de los cuerpos colegiados. Me sostencultura y sociedad de la ciudadanía. 190 go en el argumento de que el control a la corrupción y su erradicación dependen dramáticamente de la cultura de la ciudadanía. 13