2.4. EL CUBO DE LA BASURA

2.4. EL CUBO DE LA BASURA
Un anuncio anónimo en El Correo Gallego,
que posteriormente se adjudicó al equipo de
Conde Roa, en el que se veía a Bugallo y
Zapatero rodeados por un círculo rojo, al
modo de las dianas etarras, sacudió la
campaña y las denuncias airadas llegaron
hasta la Junta Electoral. Hay quien opina, en
las propias filas del PP, que aquel anuncio no
solo no benefició, sino que perjudicó a Conde
Roa. De hecho, hubo una inmediata y
silenciosa corrección de rumbo. A su vez,
durante toda la campaña, Gerardo Conde Roa fue víctima de un reguero anónimo de
insinuaciones y difamaciones sobre su vida privada, realmente vil y cobarde.
¿Por qué se producen este tipo de episodios en las campañas electorales?
¿Vale todo? Publicar los sueldos, ciertos o no, del rival; inventar acusaciones, susurrar
maledicencias. Algunos candidatos entienden la contienda electoral como una guerra,
aplican el principio de que en la guerra vale todo y se deslizan por el abismo de la
guerra sucia. Pero hasta en la guerra los militares de honor respetan al enemigo.
Por fortuna, hay muchos políticos que entienden la disputa electoral
democráticamente y, al hacerlo, son doblemente respetuosos: con el adversario y con
los electores. Esta sección, que hemos llamado “el cubo de la basura” recoge algunos
episodios a nuestro juicio lamentables, como ese mencionado de Conde Roa o como
la idea caballeresca de exponer al público en Vigo los muebles del despacho de
Corina Porro, episodios que insultan la inteligencia de los votantes. Vendettas,
zancadillas y miserias personales, ajenas al debate ciudadano y muy alejadas de los
verdaderos problemas municipales: en definitiva, cortinas de humo que distorsionan la
campaña electoral y la convierten en un lodazal.
Fueron muchos los periódicos y los periodistas que lo señalaron con claridad,
ejerciendo, aquí sí, una vez más, de conciencia crítica social, desnudando las
prácticas cuasi delincuentes de algunos políticos, que parecen gozar de inmunidad:
nadie entendería -y sería motivo de escarnio, de querella criminal o de expulsión
laboral- estas mismas expresiones y actos en boca de un colectivo de médicos o de
profesores. ¿Se imagina alguien al director del Clínico o de POVISA exhibiendo a la
entrada del hospital los muebles del anterior director?
Algunos episodios que seguidamente se relatan debieron ser rentables:
Caballero renovó en Vigo y Conde Roa ganó en Santiago. No hay evidencia de que las
urnas hayan castigado expresamente tales falcatruadas. Todo lo que sigue -visto
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ahora en perspectiva, en frío, meses después de la campaña- es tan grave que
constituye un serio motivo de reflexión sobre la calidad de nuestra democracia.
El despacho de Corina y la placa del Auditorio
Uno de los primeros episodios de la
guerra sucia fue la genial idea del
alcalde de Vigo, Abel Caballero, de
exponer al público en el Areal los
(presuntos) muebles de la exalcaldesa
Corina Porro, sacados a subasta
después de cuatro años, justamente en
vísperas electorales y sin que ninguna
Junta Electoral dijera ni pío.
“Los vecinos de Vigo peregrinan
hasta el despacho de Corro” (El Correo
Gallego, 27 de abril). Luego resultó que
la peregrinación no fue tan numerosa:
“Los muebles de Porro no enganchan.
Indiferencia ciudadana” (El País); “diez
vigueses vieron el despacho de la
exalcaldesa el primer día de la apertura”
(Atlántico).
Al día siguiente de abrirse el espectáculo al marujeo público, el PP contraatacó:
“Caballero usó durante cuatro años la antigua Alcaldía”, en Atlántico con fotos de Caín,
digo de Abel, en el despacho imperial, que una vez visitado, a la redactora de Faro de
Vigo María Villar le parece que pasa “de suntuoso a sencillito”. La Voz de Galicia
remata el invento: “El PP demuestra con fotos que Caballero se quedó con parte del
despacho de Corro. La visita organizada por el alcalde no despertó expectación”.
En aquellos días de precampaña, Caballero organizó otra de las suyas: el 26
de marzo, el Presidente de la Xunta, en compañía de las autoridades locales, de tres
conselleiros, del Presidente de Novacaixagalicia y hasta de Luz Casal, inauguró
solemnemente el Auditorio del Palacio de Congresos Mar de Vigo, que uno tampoco
entiende muy bien esa manía de los políticos de inaugurarlo todo. Huele a moho
franquista, a NODO, en la estela de las inauguraciones de pantanos, cortando la cinta
nacional.
A lo que vamos: al día siguiente, el 27 de
marzo, Abel Caballero volvió a “inaugurar” el
Auditorio, ordenando colocar esta placa:
Así se escribe la historia. Un poco de
seriedad: el personal tiene otras preocupaciones. A
pesar de episodios como éste, Abel Caballero
renovó la alcaldía de Vigo.
La farmacéutica de Baltar y el agente electoral
“El alcalde me amenazó con cerrarme la farmacia si mi auxiliar iba en la lista
del PSOE”. Con esta declaración contundente, Faro de Vigo, 27 de abril, Celsa
Cortiñas, farmacéutica de Baltar (Ourense) denunciaba un episodio de guerra sucia y
caciquil propios del siglo XIX: la presión de un alcalde y candidato del PP, José
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Antonio Feijóo, contra una candidata rival del PSOE, amenazándola con perder su
puesto de trabajo como auxiliar en la farmacia del pueblo.
La denuncia llegó a la Guardia Civil y al Juzgado de Xinzo de Limia: “Me dijo
cosas más graves, pero no puedo desvelarlas porque están bajo secreto sumarial”. A
su vez, el PSdeG lleva el caso a la Fiscalía.
Mientras, por aquello de que donde las dan las toman, un presunto agente
electoral de Baltar (no el pueblo de Xinzo, sino el Presidente de la Diputación) se
cabrea porque no le renuevan contrato de procurador de votos emigrantes en
Argentina y le monta un pollo al PP de Ourense, con denuncia pública, documentos y
mucho aparato.
Ante la denuncia, Feijóo –no el presunto
chantajista de la farmacéutica, sino el Presidente de
la Xunta-, “descarga en Baltar la decisión de
investigar el caso del agente electoral” (El País, 6 de
mayo).
Celsa Cortiñas (izqda). Foto: J. Regal
La campaña en los juzgados
“La campaña arranca en la Fiscalía”, titula La Opinión el 6 de mayo: el concejal
del PP Julio Flores denuncia adjudicaciones del Concello de A Coruña a tres
empresas amigas en los últimos tres años. ¡Qué calladito lo tenía, esperando el
momento!
Con las mismas, la secretaria municipal de Palas de Rei “denuncia o Alcalde do
PP por fraude e falsificación” (en Xornal, que olvida en el titular la presunción de
inocencia, que sí recoge Marcos Sueiro en el texto).
Más tribunales en campaña: “El fiscal acusa al alcalde de A Baña de
prevaricación y le pide 28 años de inhabilitación por bajas injustificadas en el censo”
(La Voz, 14 de mayo).
El Alcalde de Oímbra ya admite su hazaña
sin necesidad de que lo diga el Fiscal y sin rubor,
(La Voz de Galicia, 17 de mayo). Como diría Baltar:
“¿Censos alterados? Lo hacemos todos”.
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En O Courel, “los partidos se enzarzan en una disputa por el carrexo del voto” y
el candidato del PSOE, Besteiro, “pide indagar se os populares do Courel captan votos
de enfermos” (Xornal y La Voz). “Guerra en la oficina de Correos” amplía El País.
Esto del carrexo o acarreo de votos es más viejo que la pana, pero los métodos
se modernizan, según El Correo Gallego: “Llega el acarreo 2.0: el PSdeG denuncia un
salto popular de los buses al voto por correo”.
En A Coruña, Mar Barcón saca a relucir una petición de la Brigada policial de
Blanqueo relativa al candidato del PP Carlos Negreira, investigado por su época de
Presidente de Portos, en busca de adjudicaciones presuntamente sospechosas de
haber beneficiado a la trama Gürtel. “Por donde Negreira pasa, deja rastro”, proclama
Mar Barcón.
En Ames, el PP acusa al Alcalde, Carlos Fernández, de “espiar a trabajadores
del Concello” y el alcalde no solo lo admite sino que justifica haber contratado a un
detective para vigilar a dos trabajadores, con un argumento infantil: “Iban a desayunar
a escondidas para así librar dos veces”. ¡Pero, hombres de Dios, a quién se le ocurre
desayunar dos veces!
La de Ames fue una de las campañas más duras, quizás por su cercanía a
Compostela, por la necesidad del PP de romper el cinturón rojo en torno a la capital,
por que el candidato del PSOE era el Presidente de la FEGAMP o, simplemente, por el
talante de los concursantes. Lo cierto es que la víspera del cierre de campaña, el PP,
a través del periódico gratuito Ames@diario lanzó un cañonazo a la línea de flotación
del candidato socialista que prácticamente lo dejó hundido.
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La diana (anónima) de Conde Roa
Posiblemente, éste fue el episodio más sucio de la campaña de las
municipales. El equipo de Conde Roa se pasó de frenada, en expresión muy gráfica y
acertada del Xornal y los socialistas reaccionaron indignados, acusando al candidato
del PP de recurrir a métodos de Herri Batasuna. (15 de mayo).
Un acto que Luis Pousa condena sin paliativos como “una indecencia moral e
intelectual”. “La narrativa publicista de esos repugnantes pasquines recuerda mucho a
la utilizada en sus momentos de mayor locura por HB. Pero no solo por los radicales
abertzales: el método de identificar con un círculo rojo en las fotografías a los que hay
que hacer desaparecer es ampliamente conocido en todo el mundo. (...) Quienes
juegan con ese círculo están más próximos a ser unas bárbaros que unos
demócratas”. El Correo, 17 de mayo.
En fin, la relación de episodios de guerra sucia, en los que también entran
esposas, hermanos y demás parientes, sería interminable:
El presidente del PP de Ourense, José Luis Baltar, sacando del bolsillo
3.000 euros para dárselos en mano al alcalde de Morgade en el
transcurso de un mitin (La Opinión, 17 de mayo).
Baltar
. Foto: Iñaki Osorio.
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El presunto intento por parte del PP de “comprar” a Carlos Marcos,
candidato de Unión Coruñesa, ofreciéndole nada menos que la gerencia
de Turismo a cambio de retirar su candidatura. Intento negado
tajantemente por Negreira, claro. (El Ideal Gallego, 18 de mayo).
Los 175.000 euros que al parecer se gastó en un chalé sin licencia en
Monterroso la mujer de Xosé Manuel Barreiro, presidente del PP de
Lugo (Xornal, 19 de mayo).
La finca de un hermano de Irisarri en Ferrol. La “mansión” de Pachi
Vázquez en O Carballiño.
El regidor de Cee, sometido a escuchas policiales, que se jacta de su
inocencia: “Saludo a la Policía antes de colgar” (Xornal, 20 de mayo).
Javier Losada enchufando en Emalcsa al hermano de Carmen Marón,
según ABC (8 de mayo).
Las alusiones sin pruebas al patrimonio del Alcalde de Ames, Carlos
Fernández.
Pachi Vázquez, “en brazos del alcalde imputado” [el de Muxía, Félix
Porto].
Foto: Muñiz
(suma y sigue)
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Breve glosario electoral
Es posible que algún lector nos tilde de parciales si afirmamos aquí que los
insultos más gruesos durante la campaña fueron vomitados por destacados líderes del
PSOE; los del PP mantuvieron un tono más institucional y comedido y, sin ningún
género de dudas, los dirigentes nacionalistas fueron los más respetuosos. No faltará
quien encuentre munición distinta de la que aquí se cita para probar lo contrario.
En todo caso, las salidas de tono de Abel Losada, tildando a Feijóo de hacer
“terrorismo político” y, especialmente, las boutades de Miguel Cortizo, presumiendo de
tener más altura intelectual que Feijóo, son expresiones que, a nuestro juicio,
descalifican exclusivamente a quienes las utilizan. En la vida cotidiana y en el debate
político, en el que sería exigible a altos cargos una mayor ejemplaridad. Es lo que hay.
Baltares y louzanes: Dícese de los líderes natos de la política local gallega. También
usado por Pachi Vázquez como sinónimo de “caciques” [El País, 11 de mayo]
Frases célebres de Pachi Vázquez sobre el baltarismo:
-“Baltar es el mejor comprando voluntades”.
-“Baltar es una vergüenza gallega y nacional”.
Baltarización de la política: Ourensanismo acuñado por la Asociación en Defensa da
Sanidade Pública en relación a un suculento contrato del Sergas.
Belenestebanización de la política: Acción y efecto de convertir el debate
parlamentario en un patio de vecindad, un programa rosa: “Yo, por mi partido,
¡maaaato!”. Neologismo acuñado por el diputado popular Pedro Puy.
Bellaco: Mal patriota, mentiroso, en expresión del
presidente Zapatero que hizo fortuna en la
campaña: “Debo ser un bellaco –afirmó
Rajoy-, pero tengo la obligación de decir que
en los últimos doce meses se congelaron las
pensiones...” [Atlántico, 14 de mayo].
Corbata: Prenda que se quita el ministro Sebastián para ahorrar energía.
Daño colateral: Exclusión de las listas del alcalde de Arzúa.
Desincentivación del voto: Según Xornal, lo contrario de la incentivación del voto.
Uno de los efectos desindeseados del 15M.
Electrolineras: Eso que todo el mundo llama y seguirá llamando, gasolineras
(eléctricas).
Falsómetro: Falso plano del Metro de Santiago, ideado por Conde Roa para
denunciar en cada parada simbólica un incumplimiento del alcalde Bugallo.
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Figuriñas de Lego: La Xunta de Feijóo, en expresión del ministro de Justicia,
Francisco Caamaño (inicio de campaña, mitin de Bertamiráns).
Jibarización: Quedarse un partido político con la cabeza reducida a manos de sus
propios jíbaros. “La coalición del BNG se jibariza”, A. Aycart, ABC.
Lumbago: Afección dolorosa de la columna vertebral que le produce a Miguel Cortizo
tener que bajarse a la altura intelectual de Feijóo, como se muestra en la
imagen:
Frases célebres de Cortizo sobre la lumbalgia:
El Ideal Gallego: “Cortizo considera que el nivel intelectual de Feijóo está por
debajo de lo normal; ironiza que su edad le impide agacharse a la altura del
mandatario autonómico porque le daría lumbago”.
La Opinión: ”El delegado del Gobierno critica el bajo nivel intelectual de Feijóo”.
La Region y Xornal: “No me agacho al nivel intelectual de Feijóo, me da
lumbago”. “Yo estoy en el nivel normal y el otro está allá abajo”.
Faro: “Estoy en otro nivel intelectual que Feijóo, en el normal; él anda ahí
abajo”.
Macronudo [de Celulosas]: nudo viario macanudo en proyecto para la circunvalación
viaria de Pontevedra
Mourinhización: palabro inventado por Millán Fernández en Xornal, aplicando al
“entrenador” Feijóo los desvaríos verbales de Mourinho, entrenador del Real
Madrid, y sus relaciones algo chulescas con los medios. Véase Xunta
mourinhizada.
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Pijoforma: Lo que no es Conde Roa, que lleva el mismo traje desde hace doce años.
No figura en el Diccionario de la RAE.
P: ¿Por que os do PP vestides todos da mesma 'pijoforma'? ¿Hai algún manual?
Conde Roa: Neste momento, levo un traxe que ten doce anos. A min, ás veces tamén me
chama a atención esa especie de uniforme que levan algúns do Partido Popular, pero xa lle digo
que non cambio de traxe desde fai moitos anos. En todo caso, se vostede me aconsella, por
suposto gratuitamente, unha forma de vestir que me separe do que vostede chama "pijoforma",
llo agradecería moitísimo. Quedo ao seu dispor.
[Encuentro digital, El Correo Gallego, 19 de mayo]
Riso: cast., risa. Herramienta revolucionaria de cambio, en afortunada expresión de
Martiño Noriega, candidato del BNG en Teo.
Severinismo: Nueva doctrina política nacida en Monforte de Lemos, que tiene como
líder máximo al nacionalista Severino Rodríguez, “gran comunicador, templado
y cercano”.
El Progreso, 17 de mayo
Talibanes de la lengua: Aplícase comúnmente en las páginas de Opinión de ABC a
los defensores del idioma gallego, como Carlos Callón, Suso de Toro, Ana
Pontón, Rubén Cela y otros indeseables. Es una especie en extinción
“...abocados a una deseable aunque excesivamente lenta, desaparición” [A.
Aycart, ABC].
Terrorismo político: Lo que hace el Presidente Feijóo en opinión de Abel Losada.
-“Sr Feijóo: Lo que Usted hace es terrorismo político”.
Transfuguismo: Ver la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio.
Frases célebres de Pachi sobre transfuguismo:
“Feijóo es el presidente del transfuguismo”.
Xunta mourinhizada: Dícese de la que está en proceso de mourinhización.
Frases célebres de Cortizo:
-“La Xunta es una orquesta de Mourinhos”
-“La Xunta actúa con mala fe y es desleal con el Gobierno Central”
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