Oleoducto Keystone XL - Canadá - Estados Unidos: Un desafío para

Oleoducto Keystone XL - Canadá - Estados Unidos:
Un desafío para el futuro petrolero de México
Mientras México celebra un año más de su historia republicana, Canadá realiza
uno de los más grandes hitos de su vida petrolera que cambiará la historia
de suministro de hidrocarburos para Estados Unidos: el tendido de un oleoducto
desde la provincia de Alberta hasta el sur de Texas.
Ing. Luis Vielma Lobo
Director General de CBM
Ingeniería Exploración y Producción
Edición Octubre 2011
Recientemente el departamento de Estado
aprobó la solicitud del gobierno canadiense, para
que la empresa TransCanada, especializada en
transporte de hidrocarburos, proceda con las
fases II y III del proyecto de construcción y tendido
de 2700 Km. de un oleoducto de casi 1 metro de
diámetro (36 pulgadas), con una capacidad de
transporte cercana al millón de barriles diarios.
Esta aprobación del gobierno de la Unión
Americana, realmente representa la consolidación
de un proyecto (fases II y III) que se inició
desde junio del año 2010, cuando había sido
aprobada la fase I del mismo, conocido como
Keystone Pipeline System. Esta fase I consistió
en la conversión de un gasoducto a oleoducto
y la construcción de una nueva línea de ducto,
denominada “bala”, por ser un ducto rápido, que
permite transportar crudo directamente desde
Canadá hasta el Midwest de los Estados Unidos.
La fase II de este ducto, denominado Keystone
Cushing Pipeline es una extensión del anterior
desde Nebraska hasta Oklahoma con una longitud
de 480 Km. (298 millas) y un diámetro de 91.5
cms (36 pulg.) e inició su servicio en el mes
de febrero de este año. Este ducto se encuentra
conectado a las instalaciones de almacenamiento
y distribución en Cushing, Oklahoma, un centro
(hub) de tuberías que atiende refinerías y
terminales de embarque, en dicha área.
La nueva propuesta del proyecto, recientemente
aprobada, se denomina Keystone Gulf Coast
Expansion Project, y tiene una longitud de 2.673
Km. (1.661 millas) y 91.5 cms. (36 pulg.) de
diámetro. Inicia su recorrido en Hardisty, Alberta,
hasta Port Arthur Texas, un centro de distribución
(hub) y en su recorrido pasa por los estados de
Saskatchewan, Canadá, Montana, Dakota del
Sur y Nebraska, en Estados Unidos. El proyecto
incorpora una parte del Keystone Cushing
Pipeline (fase II) a través de Nebraska y Kansas,
para servir los mercados refinadores del área de
Cushing, Oklahoma y continúa por el estado de
Oklahoma hasta el punto de entrega en Nederland,
Texas y desde allí servir los mercados refinadores
de Port Arthur.
Desde el punto de vista económico este proyecto
aportará contribuciones a la economía de los
Estados Unidos del orden de los 20 billones de
dólares y durante su construcción el proyecto
generará más de 20 mil nuevos empleos directos
en el periodo 2011- 2012.
Desde el punto de vista de seguridad, está
comprobado que los ductos son el medio
más seguro y económico para el transporte
de hidrocarburos, en comparación con otras
opciones existentes, desde transporte en
camiones (pipas), hasta transporte en barcos
construidos con este propósito.
Adicionalmente, el sistema de ductos será
monitoreado y controlado de manera automática
las 24 horas, los 365 días al año, atendiendo
normas de seguridad del ente regulador
respectivo. De presentarse un incidente, el
sistema de bombeo y las válvulas se activan
automáticamente, siendo capaz de bloquearse y
aislar la zona afectada de inmediato.
Este sistema de oleoductos va mucho más allá
de una oportunidad tecnológica para la industria
de los hidrocarburos, pues la estrategia real del
gobierno canadiense, liderado desde la provincia
de Alberta y con el apoyo del sector privado, es
utilizar un medio de transporte más económico y
seguro, para dar salida a las inmensas reservas
de crudo no convencional asociado a las arenas
bituminosas de Athabasca, ubicadas en esta
provincia y para ello no ha escatimado esfuerzos,
desde que hace unos años atrás las reservas
del país se triplicaron, al ser reconocidos estos
bitúmenes como reservas no convencionales y
ser aceptadas en sus libros de reservas.
De manera similar, para los Estados Unidos
el proyecto representa un beneficio, no sólo
económico, sino estratégico, por varias razones,
entre las cuales destacamos:
1. Disponer de una fuente estable y consistente
de suministro de energía, en un horizonte de
tiempo sólo limitado por la magnitud de las
reservas de la rica provincia de Alberta.
2. La Unión Americana, continuará siendo
dependiente de energía importada en el
futuro, aun si se consideran esfuerzos de
conservación, combustibles alternos y
nuevas tecnologías y descubrimientos.
3. La mayoría de los sistemas de transporte
de hidrocarburos y derivados se encuentran
operando muy cerca de su capacidad
máxima y este sistema ayudará a
descongestionar los mismos.
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Oleoducto Keystone XL - Canadá - Estados Unidos:
Un desafío para el futuro petrolero de México
La extracción de este bitumen no es nueva, desde la década de los 50 se
conoce su existencia y se inició su explotación. No obstante lo difícil de su
extracción, más minera que petrolera y los bajos precios del petróleo de
esa época, que no hacían rentable su explotación a gran escala. Asimismo
las características físico químicas del crudo, con viscosidades sobre los
12 mil centipoises (unidad de medición de viscosidad o la resistencia del
hidrocarburo a fluir a temperatura ambiente) y gravedades menores a los
10 grados API, hacían prácticamente imposible su transporte, o demasiado
costosa la operación, con base en las tecnologías existentes de esos años.
El desarrollo de crudos extra pesados en Venezuela, a partir de los años 70
en la región oriental del país en el área conocida como la Faja del Orinoco,
a partir de Laboratorios Integrados de Campo y los descubrimientos de
procesos de coquización retardada, para el mejoramiento de este tipo de
crudo, dieron los hallazgos tecnológicos que le permitieron desarrollar
comercialmente ese tipo de crudo o bitumen. Allí se probaron en pequeña y
gran escala todo tipo de tecnologías incluyendo: construcción y terminación
de pozos, opciones para aliviar la viscosidad en el subsuelo y en la
superficie, opciones de transporte de crudo químico, térmico y de otros
tipos. Paralelamente, en laboratorios del INTEVEP, el centro de investigación
de PDVSA, se evaluaban opciones comerciales para mejorar la calidad del
crudo.
Todas estas tecnologías están siendo aplicadas en Canadá, gracias a la
cantidad de profesionales y especialistas contratados por empresas y el
gobierno de la provincia de Alberta, entre ellos especialistas venezolanos
y producto de ello, Canadá ha logrado incrementar la producción de estas
arenas y busca elevar producción sobre los 4 millones de barriles por
día en los próximos 5 años. De allí la urgente necesidad de disponer de
un mecanismo confiable y económico para transportar este petróleo no
convencional a sus mercados naturales más cercanos.
Al disponer de un oleoducto para transportar este crudo, el gobierno de
Canadá ahora cuenta con el respaldo del gobierno de los Estados Unidos,
completando así el mosaico necesario para desarrollar su estrategia.
La pregunta ahora para las autoridades energéticas en México y PEMEX, es
¿cómo impacta esta estrategia la posición de nuestro país como proveedor
importante de crudo de los Estados Unidos? Es un tema que debe evaluarse
con mucha seriedad, pues el sistema de ductos Keystone XL, transportará
crudo a lo largo de varios estados que tienen refinerías e industria
petroquímica y se extiende hasta las costas de Texas en el GOM.
El sistema de ductos ha sido diseñado de tal manera que permite recolectar
crudo a su paso convirtiéndose en un hub de crudos que seguramente
tendrá una filosofía de operación que permitirá el transporte de distintos tipos
de crudo o mezclas, en función de las necesidades de los clientes ubicados a
lo largo de la ruta.
En la industria petrolera, se considera a los ductos, no sólo la opción más
segura, sino la más económica para transportar crudo y, sin duda, el costo
de este crudo va a ser competitivo con el crudo Maya mexicano, utilizado
como insumo en las refinerías de los estados de Texas y Louisiana.
El tiempo irá dando razón, pero sin duda los clientes de PEMEX en la región
de Texas, principalmente, ya tienen una alternativa para obtener insumos
diferentes a los suministrados por México, a precios competitivos y con toda
seguridad buscarán sacar ventaja de ello.
Este tema es -diría el doctor Peter Drucker- cuando se presentaba una
discusión acerca de un tópico crítico con alto impacto en la gestión de
una empresa, una organización, o en el Estado y que requiere adecuada
consideración y análisis: “Food for thought”.
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