S. E. el Señor Director Provisorio en la Confederacion Argentina

S. E. el Señor Director Provisorio en la Confederacion Argentina, general Don
Justo José Urquisa, y el S. E. el Señor Precidente en la Republica del Paraguay
Don Carlos Antonio Lopes, en el interés de fijar definitivamente las relaciones
entre ambos Estados, (ilegible) en el principio del interés recíproco, comunidad de
origen, y demás que naturalmente les unen, han resuelto establecer en la parte
mas necesaria los límites territoriales, estableciendo al mismo tiempo las bases
sobre que debe arreglarse el comercio, y navegacion entre ambas República; y al
efecto nombraran para su
Plenipotenciarios, á saber: S. E. el Señor Director
Provisorio en la Confederacion Argentina al Doctor Don Santiago Derqui; y S.E. el
Señor Presidente de la República del Paraguay á Don Demian Varela, Ministro
Secretario de Estado, interino en las Relaciones Esteriores en la República: los
cuales habiendo cangeado sus plenos poderes, y hallándolos en buena y debida
forma, acordaron en los artículos siguientes_
Artículo 1°
El rio Paraná es límite entre la Confederacion Argentina, y la República del
Paraguay, desde las poceciones brasileras hasta las leguas arriba en la boca
inferior de la isla del (ilegible).
Artículo 2°
La isla de Yaciretá queda perteneciendo al territorio paraguayo; y al argentino, la
de Apipé. Las demás islas firmes, ó anegables, pertenecen al territorio á que sean
mas adyacentes.
Artículo 3°
Queda estipulado, como condición especial el este tratado, la comunicación
(ilegible) entre las villas de la Encarnacion del Paraná, y San (ilegible) del
Uruguay, para los correos paraguayos y brasileros, con las escoltas necesarias
para su resguardo.
Artículo 4°
El Rio Paraguay pertenece de costa á costa en perfecta soberanía á la República
del Paraguay hasta su confluencia en el Paraná.
Artículo 5°
La navegación del Río Bermejo es perfectamente común á ambos Estados.
Artículo 6°
La orilla terrestre desde la desembocadura del Bermejo hasta el Rio del Atajo, es
territorio neutral, en la latitud de una legua de conformidad que las Altas Partes
contratantes no podrán hacer allí acantonamientos militares, ni guardias policiales,
ni aun con el (ilegible) de observar á los bárbaros que habitan esa costa.
Artículo 7°
La Confederacion concede á la República la libre navegación de su pabellón por el
Río Paraná, y sus afluentes, otorgándoles toda aquellas franquicias, y ventajas
que los Gobiernos civilizados, unidos por el tratado especial de comercio, se
conceden unos á otros: no detendrá, ni impedirá, ni impondrá derechos sobre el
curzo de ninguna operación mercantil, que tuviese por objeto pasar por el territorio
fluvial, o terrestre de la Confederacion á puertos paraguayos, o de estos á
cualquiera otros estrangeros, sin sujetarlos á fiscalizaciones, gavelas, rebuscar,
(ilegible) de bultos G G, que a la ves que incomodan al comercio, lo aniquilan,
alarmándolo, y ahuyentándolo de frecuentar las vías mas productivas.
Artículo 8°
En los mismos términos del artículo anterior, la República cocede al pabellón
argentino la libre navegación del Paraguay, y sus afluentes, y el trámite libre por el
territorio terrestre.
Artículo 9°
Queda bien entendido que ambos Estados están en su derecho para dictar los
reglamentos que (ilegible) convenio para evitar en los tránsitos el contrabando,
proveer á su seguridad y, con entera reserva reclamo legítimo de su perfecta
soberanía en su territorio fluvial, que no esté limitado por el derecho universal, á
tratados espresos.
Artículo 10
La Confederacion dará libre tránsito por el Paraná á otros pabellones estrangeros,
tan luego como hay hecho los arreglos que él demanda.
Artículo 11
El Gobierno de la República del Paraguay, de acuerdo con el de la Confederación
Argentina, cooperará con los medios que le proporciona la situación topográfica de
la República, á facilitar la navegación del Rio Bermejo, destruyendo los ovtáculos
que se hubiesen creado en su canal, haciendo algunas obras que fuesen
practicables para mejorarlo, y estableciendo posiciones que sirvan de puntos de
arribada á las embarcaciones en los lugares, y parages que acordaren, y
señalaren ambos gobiernos.
Artículo 12
El Gobierno de la república del Paraguay, cuando llegase el caso de ser invitado
por el de la Confederacion Argentina, habilitará, con previo acuerdo, y guarnecerá
un puerto en el rio Pilcomayo, á la mayor altura que sea navegable, de manera
que desde él pueda darse al comercio una via terrestre por el territorio paraguayo,
la mas corta posible, hasta la frontera de Bolivia.
Artículo 13
Los Paraguayos residentes, ó transeúntes en la Confederacion, y los Argentinos
residentes, ó transeúntes en la República, gozarán personalmente de las ventajas,
y regalías que tengan los mismos ciudadanos, respetándoles los derechos
individuales que imperen, y al modo de proceder que ellas demanden.
Artículo 14
En razón de la hermandad que establecen entre ambas Repúblicas, la comunidad
de origen, intereses, y situación respectiva, los ciudadanos paraguayos, que su
gobierno quiera destinar á cultivar sus talentos en los establecimientos de
facultades y estudios mayores que sostuviere el Gobierno general de la
Confederacion Argentina, serán considerados á la paz de los ciudadanos
argentinos.
Artículo 15
El presente tratado será ratificado por S.E. el señor Presidente de la República del
Paraguay á los seis días de la fecha; y á los sesenta, por S.E. el Señor Director
Provisorio de la Confederación Argentina, debiendo ser congeadas las
ratificaciones en la ciudad de Corrientes_
En testimonio de lo cual, los infraescritos Plenipotenciarios firman por duplicado el
presente tratado, sellándolo con sus armas, y refrendándolo con sus respectivos
Secretarios, en la Asuncion, capital de la República del Paraguay á los quince días
del mesd e julio de mil ochocientos cincuenta y dos_
Nos D.D. Santiago Derqui, Encargado de Negocios en la Confederacion Argentina
en misión especial cerca del Gobierno de la República del Paraguay, y D. Benito
Varela, Ministro Secretario de Estado, interino en las Relaciones Esteriores en la
República del Paraguay, en (ilegible) de la Plenipotencia que nos fue conferida
para ajuntar el tratado del 15 de julio del presente año, y autorizado por nuestros
respectivos gobiernos para proceder al cange de las ratificaciones, que por
acuerdo posterior debe efectuarse en esta capital, hemos examinado las
ratificaciones hechas por el Exmo. Señor Brigadier General Don Justo José
Urquiza, Director Provisorio de la Confederacion Argentina el 20 de Agosto último,
y por el Exmo. Señor Presidente de la República Don Carlos Antonio Lopes el 19
de julio pp.; y encontrando exactamente igual en uno y otro el texto del (ilegible)
tratado, y sus respectivas ratificaciones en buena forma, según (ilegible) y derecho
internacional hemos verificado su cange, y en fe de ello firmamos la presente acta
en los ejemplares de un tenor, que hacemos sellar con nuestras armas, y
refrendar por nuestros respectivos Secretarios, en esta Ciudad en la Asuncion á
catorce días del mes de Setiembre de mil ochocientos cincuenta y dos_