CAPÍTULO 6. EL REPORTAJE EN ENTORNOS MULTIMEDIA OBJETIVOS Reconocer las principales características de un reportaje destinado a los medios de comunicación que publican contenidos en plataformas multimedia. Identificar las características de los medios de comunicación que, como internet, permiten desarrollar algunos de los rasgos más importantes del reportaje como género periodístico. Recuperar la importancia que el reportaje tiene dentro de la profesión periodística en el contexto de las nuevas tecnologías de la comunicación y la información. Realizar una descripción sobre los tipos de reportaje que pueden realizarse en plataformas on-line y sobre cómo aprovechar al máximo los recursos y herramientas de la Web 2.0 para presentar la información periodística. 1. INTRODUCCIÓN La introducción de las tecnologías de la información y de la comunicación a la vida periodística, a sus rutinas y a su dinámica cotidiana, han configurado en el caso del reportaje, como género periodístico, una contradicción fundamental que se soporta a partir de los nuevos modelos de negocio que las empresas de la comunicación se han encargado de establecer a partir de la década del noventa. Por una parte, internet y las herramientas on-line otorgan mayores posibilidades para que el reportaje pueda desarrollarse en todo su esplendor como género. Por otra parte, y a pesar de lo anterior, se ha comprobado que la puesta en marcha de las diferentes páginas web de los diarios tradicionales ha supuesto la paulatina disminución de la participación de los reportajes en el conjunto de la información presentada en los portales de los medios de comunicación. Es manifiesta, de esta manera, la injerencia de las dinámicas económicas y de los modelos de mercado –la competencia por la inmediatez, la instantaneidad y la ubicuidad- sobre la cotidianidad de los medios de comunicación. Existe, por tanto, un direccionamiento completo de las decisiones empresariales sobre las nuevas dinámicas de producción periodística que terminan afectando la calidad del periodismo al convertir la información en una mercancía corta, pequeña, simple y pasajera. Lo anterior ha impedido que el reportaje y su desarrollo esté prácticamente inexplorado a causa, sobre todo, “de la potenciación mayoritaria del diseño frente a los contenidos y al doble proceso de descualificación/sobrecualificación que parece sufrir la práctica periodística en internet” (López García, 2003: 450). A pesar de lo anterior, internet representa para el reportaje una gran posibilidad de desarrollo como género periodístico, a partir de las definiciones aportadas en el Capítulo 2 del módulo, pues permite la implementación de cuatro elementos que, aplicados al reportaje, profundizan el grado de explicación que el género periodístico aporta a los procesos de información periodística. Así, las características de hipertextualidad, de interactividad, de contenidos multimedia y de exención de limitantes de extensión otorgan al reportaje importantes elementos para que el periodista pueda, desde su experiencia e investigación, abordar un hecho informativo en sentido completo. El reportaje, de acuerdo a lo anterior, debe seguir considerándose, aun dentro de la escena del ciberespacio en el que es posible encontrar infinidad de información escrita y procesada de millones de formas diferentes, una pieza de contenido periodístico. Por tanto, en internet, como en cualquier otro medio, es necesario que su desarrollo y su ejecución guarde las condiciones profesionales, de rigurosidad y de calidad que amerita cualquier pieza periodística, a las que se suman la profundidad y el grado de investigación específica que un reportaje requiere. El objetivo básico del último capítulo del módulo es presentar de una manera esquemática las principales características que delinean el desarrollo del reportaje en medios de comunicación que presentan sus contenidos en plataformas multimedia y, principalmente, en internet. La familiarización con sus componentes y criterios específicos permitirá marcar distancias, cortas, frente a los demás géneros y, sobre todo, frente a los otros medios o plataformas de comunicación. Asimismo, el último capítulo responde a la necesidad de hablar, en la segunda década del siglo XXI, sobre el reportaje en formatos multimedia. No hacerlo marcaría al texto como un libro de historia del periodismo hasta finales del siglo XX. El capítulo está dividido en cuatro partes. La primera de ellas se centra en la definición del reportaje en entornos multimedia. La segunda sección examina los principales tipos de reportaje multimedia que existen en los medios de comunicación en internet y, posteriormente, analiza las principales características de un reportaje multimedia, que establecen las diferencias frente a los reportajes de otros soportes mediáticos. En tercer lugar, el capítulo realiza una exploración sobre la estructura que un reportaje multimedia puede tener para aprovechar toda la potencialidad del medio. La última parte del capítulo está dedicada a aportar consejos prácticos sobre las formas de desarrollar un buen reportaje en entornos multimedia. 2. ¿CÓMO SE PUEDE DEFINIR UN REPORTAJE PARA ENTORNOS MULTIMEDIA? El reportaje multimedia es, ante todo, un reportaje periodístico. Esto quiere decir que debe ceñirse a los criterios y a la conceptualización específica para el género periodístico contemplados en el Capítulo 2 del presente módulo. El reportaje es, como quedó registrado en el capítulo mencionado, un género periodístico, basado en hechos generalmente noticiosos, que, a través de una narración con una amplia libertad de estilo para el autor y que puede contener elementos literarios, presenta los resultados de un exhaustivo trabajo periodístico investigativo y documentado y que, por tanto, da cuenta de una variedad amplia de fuentes de información y puntos de vista, así como de los antecedentes de la noticia, de su explicación y de sus posibles consecuencias. Vale decir que en los formatos mediáticos actuales –elemento que resulta fundamental para el presente capítulo-, el reportaje –o su pieza central- siempre está acompañado de elementos secundarios que complementan la información central que se pretende comunicar. El reportaje ciberperiodístico al igual que el reportaje para medios impresos necesita una definición relacionada con la ubicación de las diferentes piezas dentro de la pantalla. La labor de la diagramación en el reportaje multimedia es tan fundamental como lo es para el reportaje escrito. Por ello, la definición del reportaje ciberperiodístico no puede olvidar nunca la inclusión de una caracterización del diseño que, en última instancia, es el que define el grado de funcionalidad de los materiales multimedia preparados. Las características especiales de los medios cuyas publicaciones se realizan en internet permiten al reportaje, respecto a sus antecedentes impresos o audiovisuales, evolucionar o incluso transformar algunas de las reglas básicas de funcionamiento del conjunto de los géneros periodísticos (López García, 2003: 449). “Asistimos a un doble proceso de convergencia (Matías, 2000), por un lado, y redefinición continua, por otro, de los géneros periodísticos en el entorno digital (Fernández Parratt, 2001)” (López García, 2003: 449) A pesar de compartir un conjunto común de características (autonomía de estilo, grado de profundidad, libertad temática, variedad de puntos de vista), el reportaje que se prepara para un medio de comunicación en internet tiene varios puntos de atención que lo hacen específico dentro de una plataforma que está en constante movimiento. De hecho, si se analizan los primeros reportajes multimedia publicados en internet, lo que se aprecia es el volcado sin preparación nueva de los contenidos del medio escrito a las pantallas digitales. La situación, que aún se mantiene en algunos medios de comunicación, ha variado en los últimos años con la entrada de la web 2.0 que permite desarrollar contenidos en diferentes formatos e incluirlos dentro de una misma pieza noticiosa. El reportaje, por tanto, como relato narrativo fruto de una exhaustivo y profundo trabajo de reportería, recibe en internet una gran oportunidad para desarrollar su potencial informativo, a partir del uso de las herramientas y aplicaciones útiles a sus objetivos comunicativos. “Los géneros interpretativos, el reportaje y la crónica, presentan una vitalidad en el espacio del ciberperiodismo que probablemente corresponda a la adecuación entre sus características y las propias del nuevo soporte digital en el que operan” (López García, 2003: 450). De forma similar, Ramón Salaverría (2005: 166) señala que el reportaje es un género que, en su propósito explicativo y contextualiador, permite echar manos de una gran variedad de recursos estilísticos: “Ya en el papel, admite una máxima explicación de las técnicas narrativo-descriptivas y expositivas, el uso de múltiples recursos dialógicos, y también la combinación con otras piezas informativas textuales y gráficas de apoyo. Así pues, en su salto al ciberespacio, se trata probablemente del género más apto para el aprovechamiento de las posibilidades hipetextuales, interactivas y multimedia” El medio digital, asimismo, requiere, de una parte, de importantes conocimientos técnicos adicionales al propio trabajo del profesional del periodismo para poder emplear a fondo las herramientas y las aplicaciones disponibles en la web 2.0. Por otra parte, genera una consecuencia trágica para la labor periodística: el hecho de asumir nuevas funciones como periodista, que antes eran encargadas a un sector especialista en la técnica de la informática, por ejemplo, no implica que al reportero le sea reconocida económicamente esa labor adicional asumida. Sin embargo, el hecho de no conocer tales herramientas y de no adquirir tales capacidades sí determina que un profesional sea o no contratado por un medio para ejercer las actividades periodísticas. Para Guillermo López García (2003: 451), las herramientas de los medios digitales permiten acrecentar varios elementos útiles para el periodismo que, en el caso del reportaje, vale la pena no solamente utilizar sino también reproducir dentro de los aspectos estructurales de la pieza periodística realizada. López García señala así cuatro aspectos esenciales: a. La multiplicidad de manifestaciones periodísticas no necesariamente enmarcadas en los medios de comunicación de masas y en las que la posición del periodista en tanto autor del texto presenta una mayor relevancia. b. La existencia de múltiples puentes de comunicación entre los autores y el público. c. La necesidad de profundizar en la información y ofrecer ópticas singulares de la misma como forma de ofrecer un producto diferenciado en un marco de máxima competencia. d. Las propias características del medio digital. El reportaje multimedia se configura así como una pieza periodística que puede aprovechar lo que más le convenga de cada una de las plataformas comunicativas descritas en los capítulos precedentes. Puede tomar de los medios impresos el proceso de documentación, de investigación y de redacción, así como cualquier otro tipo de ayuda gráfica empleada cotidianamente en el papel (fotografías, gráficos explicativos, mapas, infografías). Puede también hacer uso de la locución y de la mezcla de sonidos típica de los medios radiofónicos, en los que las voces de personajes o la creación de un ambiente sonoro contextualizarán aún más los contenidos informativos presentados. Finalmente, puede apoderarse de las técnicas y de los recursos audiovisuales para presentar cierto tipo de información a través del lenguaje audiovisual, con las características específicas de ser preparado para su visualización a través de pantallas de ordenador. 3. PRINCIPALES TIPOS O CLASES DE REPORTAJE MULTIMEDIA Guillermo López García (2003: 468-473) establece que existen, a grandes rasgos, tres tipos de reportaje que pueden aplicarse a los cibermedios. La tipología propuesta por López García, es también asumida por Ramón Salaverría (2005ª: 162-163), y parte de la base de que el género puede extenderse en la red en mucha mayor medida que en otros medios, dentro de los medios de comunicación o fuera de ellos, y contiene además un carácter híbrido no sólo en lo que concierne a la información y opinión, sino incluso en las relaciones con otros documentos ajenos en principio al quehacer periodístico (trabajos de corte didáctico o académico). Asimismo, la clasificación propuesta por López García también se realiza a partir de diferentes planos de la actualidad en función de los cuales se presenta el reportaje. La propuesta de tipología contiene, de este modo, al reportaje de actualidad, el reportaje temático y el dossier documental. 3.1. El reportaje de actualidad El reportaje de actualidad es una pieza periodística preparada para cibermedios que guarda una correspondencia casi idéntica con los medios impresos o audiovisuales. “En la práctica, en la mayor parte de las ocasiones, se trata de la mera traslación de reportajes impresos o de la realización en el caso de los medios exclusivamente digitales, de un reportaje digital que sigue con bastante fidelidad las reglas del reportaje impreso” (López García, 2003: 469). El reportaje de actualidad suele presentarse en un único documento que, en su gran mayoría, está conformado por texto. Así, la parte escrita predomina sobre los demás recursos multimedia disponibles en el entorno de internet. Este tipo de documentos están firmados por un solo autor y, en ocasiones, presentan un complemento traducido en enlaces relativos a la temática expuesta en el reportaje (López García, 2003: 469). La temática del reportaje de actualidad, como su nombre lo indica, está relacionada, sobre todo, con temas inmediatos, cercanos al periodo de tiempo en el que se publican y tratan de ofrecer un primer análisis profundo sobre un asunto concreto (un cambio de gobierno, una cumbre internacional, un evento deportivo destacado). A pesar de tener una gran potencialidad de enriquecimiento del texto, este tipo de reportaje limita las opciones de uso de las herramientas de la Web 2.0. De hecho, no presenta ninguna diferencia de diseño y de recursos multimedia frente a una noticia común y corriente de un diario multimedia. La siguiente figura ilustra un reportaje publicado en la edición digital de la Revista Semana (una de las revistas semanales de información más importantes de Colombia) en la que se copia la información de la edición impresa y, por tanto, no se aprovecha ninguna de las opciones básicas del género en internet: 3.2. El especial temático o reportaje multimedia El reportaje multimedia normalmente abarca un ámbito de la actualidad mucho más amplio, tanto en el tema elegido por el reportero como en el arco temporal que abarca. El especial temático puede así referirse al desarrollo de una intervención bélica, a realizar el balance de un campeonato mundial de fútbol o a ejecutar una cobertura sobre las elecciones de un determinado país e institución. En el reportaje multimedia el método de planeación de aleja de la práctica y de la dinámica del día a día del diario y se asienta sobre la profundidad temática que responde, además, a la longevidad de la información. Es decir, la pieza que se prepara puede mantenerse en la edición digital del medio de comunicación durante un periodo de tiempo relativamente largo (meses incluso) sin que llegue a perder relevancia temática o quede desfasado en el tiempo. Las características básicas del especial temático, de acuerdo con López García (2003: 470471) son cuatro y se resumen en el siguiente cuadro: Características básicas del especial temático Característica Descripción Conforman un apartado específico que engloba a todos los grandes reportajes de estas Ubicación común tanto en grandes portales como características que ofrece el medio, bajo una en diarios digitales categoría informativa propia: especiales multimedia. Dada la amplitud del asunto relatado el texto Modelo de reportaje muy distinto al de los medios fuente desaparece y es sustituido por una serie de impresos apartados que satisfacen los intereses particulares del lector en torno al asunto principal. Desaparece el texto fuente y es reemplazado por un índice de los diferentes apartados que Utilización de otros soportes diferentes al texto configuran el especial. Se acerca al ideal de multimedialidad y se resalta el uso de la infografía digital. Los especiales temáticos se piensan para durar, para aprovechar la capacidad de archivo del medio Los contenidos se mantienen y se actualizan de y para recabar el interés de los lectores en torno a acuerdo a la evolución de los hechos un asunto cuyo interés se prolonga en el tiempo. El reportaje multimedia se acerca al ideal de la actualización continua. Género más propiamente ciberperiodístico. Aprovecha a fondo las posibilidades audiovisuales Aprovechamiento de la multimedialidad de la web mediante el uso de galerías fotográficas, infografías interactivas, sonidos y vídeos. Fuente: elaboración propia a partir de López García, 2003, 471-472, y Salaverría, 2005a: 163 Ejemplos del reportaje multimedia se presentan en las dos siguientes figuras. En la primera, dentro de la sección de especiales del New York Times, se aprecia un especial temático sobre Etan Patz. En la segunda, la Revista Semana, dentro de su apartado de multimedia, prepara un especial sobre la política antidrogas en el continente americano. 3.3. El dossier documental “La inclusión de esta tercera representación del reportaje ciberperiodístico en la clasificación que presentamos parte de la defensa… de un modelo de reportaje cuyas implicaciones y desarrollo tienen un mayor alcance que su correlato periodístico en medio impresos o audiovisuales. Este desarrollo viene determinado por el cariz de internet como un gigantesco medio de comunicación desestructurado, en el que conviven productos propiamente periodísticos (en el sentido de productos generados por una empresa comunicativa en concreto) con otros cuya raigambre puede ser, o no, también periodística, pero en todo caso ajenos a una organización empresarial… y, por último, publicaciones en principio ajenas al quehacer periodístico que buscan ofrecer un punto de vista más bien exhaustivo a propósito de una determinada cuestión científica o cultural” (López García, 2003: 472) El dossier documental, para Ramón Salaverría, está conformado por una acumulación más o menos estructurada de artículos de hemeroteca que versan sobre un mismo tema. “Cuando un medio ha publicado un buen número de textos –crónicas, entrevistas, columnas de opinión, reportajes…- sobre un asunto informativo de interés público y de actualidad permanente, tiende a reunirlos en un repositorio común. Estos dossieres suelen contar con una breve presentación que contextualiza y presenta toda la información documental disponible” (2005a: 163). Las características del dossier documental, según López García son las siguientes: a. Trabajo periodístico normalmente ajeno a la actualidad informativa, relativo a ámbitos especializados variados. b. El reportaje es fronterizo con trabajos de carácter didáctico aunque su intención es divulgativa. c. El reportaje documental tiene pocas posibilidades de actualizarse dado su alejamiento de la actualidad y sus pretensiones de conseguir un resultado completo. d. Es un trabajo definido sobre la base de la documentación periodística que requiere de un número importante de enlaces internos y externos al medio de comunicación que lo publica. En la siguiente gráfica se presenta un reportaje que se acerca al dossier documental elaborado por el New York Times. En la parte izquierda de la página inicial del reportaje se aprecian las piezas informativas que se agrupan bajo el título “An Art Critic in Africa” y que dan paso a nuevas informaciones documentales bajo cada uno de los subapartados. Asimismo, dentro del estilo del New York Times se destaca el uso de hipervínculos que conducen a informaciones ubicadas afuera de las páginas del diario, con lo cual se otorgan nuevos puntos de vista al lector. 4. PRINCIPALES CARACTERÍSTICAS DE UN REPORTAJE MULTIMEDIA Las características de un género en evolución, como sucede con cualquiera de los géneros periodísticos en internet, cambian y se redefinen a partir de las nuevas tendencias de las plataformas y herramientas on-line. En el caso del reportaje multimedia, sus características básicas se mantienen en principio sobre los mismos ejes, aunque reciben pequeñas adiciones a medida que se realizan nuevas exploraciones a las aplicaciones que circulan por las autopistas de la información. El apartado enunciará tres propuestas de categorización que difieren una de otra por su carácter histórico. En primer lugar se presenta la reflexión de Guillermo López García (2003), que está compuesta por dos características fundamentales. En segundo lugar, se retoma lo planteado por Ramón Salaverría (2005, 2005a), quien añade un elemento definitorio a la propuesta anterior. Por último, se analizará la alternativa de Ainara Larrondo (2009) en la que se realiza una nueva concepción de las particularidades que el reportaje multimedia contiene. 4.1. La propuesta de Guillermo López García (2003) Los puntos fundamentales de la caracterización de Guillermo López García (2003: 454-468), se pueden evidenciar en la siguiente gráfica: Características del Reportaje Multimedia según Guillermo López García Carácter multimedia Ruptura de secuencialidad Ruptura de periodicidad Hipertextual Interactividad Legibilidad El código HTML y los programas de edición web Reportaje multimedia El texto Imágenes estáticas y dinámicas Multimedia Sonido Aplicaciones de infografía Exposición de fuentes documentales o complementarias mediante enlaces El reportaje se inserta de una forma natural en el soporte digital y, generalmente, el reportaje y sus formatos van de la mano con las características de internet. La ilimitada extensión potencial de los contenidos, la variedad de los mismos de acuerdo al soporte y la aparición del concepto de actualidad menos ligado a las rutinas de producción de los diaria de los diarios impresos o de las emisiones televisivas o radiofónicas, favorecen la aparición del género en los cibermedios (López García, 2003: 454). 4.1.1. Un género hipertextual a. Carácter multimedia: Internet es el único medio en el que se pueden emplear, dentro de la misma pieza y ubicados en el mismo espacio comunicativo, diferentes soportes para comunicar la información: “La comunicación en Red posibilita la “integración de todos los mensajes en un modelo cognitivo común” (Castells, 2000: 404) mediante la conjunción de soportes en una misma plataforma (López García, 2003: 454-455). b. Ruptura de la secuencialidad: El reportaje multimedia, como ya lo haría el escritor argentino Julio Cortázar con su novela Rayuela, rompe las estructuras básicas de la lectura lineal y propone diferentes nodos independientes que contienen información que, si bien está relacionada con el tema central de la pieza periodística, no sigue una linealidad específica ni tiene un orden concreto establecido. El periodista, de acuerdo a las técnicas específicas de la lectura en pantalla, tiene una serie de recursos estratégicos que guían u orientan las miradas del lector (uso de negritas, uso de colores, manejo de tipografías, etc.) c. Ruptura de la periodicidad: La inexistencia de límites temporales o espaciales permite que las publicaciones realizadas en internet puedan ser constantemente actualizadas, como en el caso de la noticia, y además, para el caso específico del reportaje, puedan permanecer disponibles para el lector durante un periodo de tiempo mucho mayor. “Precisamente por eso, el reportaje en Internet se ajusta con mayor sencillez al ideal ciberperiodístico de la “actualización constante”, completando de forma continua la información de que inicialmente se compone con nuevos textos e informaciones generadas por el medio o por otros espacios comunicativos en la Red. El reportaje, en cierto sentido, podría ser la culminación de un esfuerzo informativo del medio en virtud del cual la información ofrecida en la noticia en un primer momento se desarrolla posteriormente con análisis, datos contextuales, informaciones complementarias, etc., en un proceso que iría desde la información al reportaje” (Cabanes, 2002 en: López García, 2003: 465). d. Interactividad: El concepto aportado por López García se divide en dos elementos: La interactividad con el servicio informativo on-line en el que se inscribe la existencia de materiales interactivos en la red como los comentarios, los chats y los foros de debate La interacción con la información entendida como la posibilidad por parte del lector de seleccionar su hoja de ruta cuando se enfrenta con un texto informativo. e. Legibilidad: A pesar de que en la pantalla los textos son más libres y pueden, de acuerdo a su estructura, dividirse en nodos informativos con sentido completo, es importante decir que en pantalla los textos son más difíciles de leer que en el papel. Por ello, un reportaje multimedia, como cualquier otro mensaje que se transmita a través de pantallas, debe ser absolutamente legible (en cualquiera de los medios o formatos que emplee). “Dejando a un lado la calidad y la precisión del texto periodístico, es preciso que el soporte envuelva al texto en formatos precisos y que de un solo vistazo su lectura sea ideogramática y no lineal (De Kerckhove, 1999: 137), con el objetivo de acudir lo menos posible a la barra de desplazamiento y comunicar el texto central con sus fragmentos informativos a través de links (Armentia et. Al., 2000: 184)” (López García, 2003: 457). f. El código HTML y los programas de edición web: Esta característica -desfasada pues el código HTML ya no se emplea como hace diez años en la estructuración de la información on-line- demuestra la necesidad de reconceptualizar periódicamente las herramientas y las características del género en su soporte multimedia. Sin embargo, es necesario que el periodista, como se anotó en la introducción, esté al día en las herramientas y plataformas tecnológicas que puedan ayudar en su tarea profesional y con ello aumentar la calidad de sus reportajes. 4.1.2. La conjunción de aplicaciones multimediáticas en la información A pesar de que hace diez años, cuando López García realizó su propuesta de caracterización del reportaje, aún no era posible por motivos tecnológicos (anchos de banda y pesos específicos de los productos gráficos y audiovisuales) dotar al reportaje de todos los medios disponibles para su enriquecimiento y calidad, ya se intuía el camino por el cual apostaría la prensa en la elaboración de las piezas periodísticas y, sobre todo, el uso, cada vez más frecuente, de materiales de apoyo en los productos periodísticos de internet. En el 2003, de acuerdo con López García, las herramientas multimedia que se planteaban como útiles al reportaje en los cibermedios eran las siguientes: a. El texto: El texto, incluso hoy, sigue siendo el vehículo principal, primario e indiscutible de toda la información transmitida a través de los medios masivos de comunicación. La presencia de texto en el reportaje multimedia asegura la guía para el lector en su navegación y, por otra parte, permite la profundización en la información expuesta. El texto, asimismo, sigue siendo el medio que menos complicaciones tiene para ser publicado en los cibermedios, requiere menor infraestructura para su realización y, “probablemente siga siendo el método primordial de transmisión al público de una determinada realidad a través del tamiz que supone la interpretación” (López García, 2003: 463). El autor señala, asimismo, algunas características básicas del texto en los reportajes multimedia, que se asemejan a las ya reseñadas a los capítulos anteriores sobre la riqueza del género: Lenguaje rico y variado, cuidadoso y fácil de leer. División del texto original en piezas de valor informativo completo. Uso y enlace a otros documentos no producidos por el medio de comunicación que publica el reportaje. b. Imágenes estáticas y dinámicas: La presencia de fotografías (imágenes fijas) es prácticamente obligatorio en cualquier reportaje. El apoyo gráfico de las imágenes es absolutamente necesario y más ante una comunicación a través de pantallas (López García, 2003: 464). Por otra parte, las imágenes dinámicas (animaciones) desarrollan una función decorativa y se utilizan solamente si el diseño general del reportaje lo requiere. Otro tipo de gráficos informativos e interactivos son expuestos por López García, dada su importancia dentro del género, en una sección aparte: el apartado sobre la infografía. Por último, la aparición de vídeos (imágenes dinámicas) en los reportajes periodísticos, dados los recursos tecnológicos del año 2003, era muy escasa. Sus costes de producción y de publicación en los soportes disponibles hacían que la herramienta no fuera utilizada en profundidad y con calidad. Así, los vídeos quedaban relegados a un segundo plano de utilización. c. El sonido: Una vez más, López García señala los inconvenientes económicos y tecnológicos del uso del sonido en los reportajes multimedia y, aunque reconoce su importancia como un medio que permite crear un ambiente mucho más rico, se mantiene, al igual que el vídeo, como un recurso aislado y reducido dentro de las características del reportaje de los primeros años de la primera década del siglo XXI. d. Aplicaciones de infografía: La infografía, que emerge a partir de la conjunción de los datos con las herramientas del diseño gráfico, siempre mediada por el uso de ordenadores, es quizás el medio que mayores desarrollos tiene con el paso de la información de un formato de papel a una plataforma digital. La infografía “ha sustituido los documentos estáticos de la prensa escrita por procesos dinámicos que cada vez adquieren mayor complejidad y suponen un complemento ideal, incluso alternativo en algunos casos, del texto escrito: “la infografía o cualquier sistema de representación gráfica resultará imprescindible en todos los medios y no solamente como ocurre hoy: moderadamente en los de prestigio y con gran despliegue en los sensacionalistas. Es útil como documentación y acompañamiento de las informaciones, pero ya se ve la utilidad de su presencia como exposición de un problema complejo, que puede ser abordado con un simple golpe de vista” (Cantavella, 1999)” (López García, 2003: 466-467) La infografía para los reportajes multimedia se utiliza, según López García (2003: 467), como vía preferida para exponer: Datos estadísticos referidos a un objeto particular: país, institución, colectivo Explicación de procesos, generalmente asociados a ámbitos especializados: un virus, un avión espacial, un satélite de comunicaciones Las características de un objeto relacionado con el reportaje: un ordenador MAC, la nueva bicicleta de motor Visualización de mapas de cualquier clase e. La exposición de fuentes documentales o complementarias mediante enlaces: Las posibilidades del reportaje multimedia sobrepasan las fronteras informativas del medio que crea la pieza periodística. Una de las características básicas del género en este tipo de formatos es que puede aportar una gran fuente de información cuando vincula sus informaciones a otros espacios on-line que aportan documentos de primera mano al lector: “La importancia de dichos documentos es enorme para la satisfactoria realización del reportaje multimedia, y no solo porque permiten aprovechar mínimamente el potencial de este género como estructura abierta, no limitada a un documento concreto circunscrito a un espacio definido, sino porque ofreciendo enlaces a documentos que ya no tienen por qué tener un corte periodístico conseguimos tres efectos añadidos, beneficiosos para el lector y para el propio estatuto del reportaje ciberperiodístico: profundización en el tema sobre el que versa el reportaje; Exposición de fuentes útiles para la configuración del reportaje, eventualmente ampliables, y puesta en relación del reportaje ciberperiodístico con otros ámbitos del conocimiento más formalizados, como los textos académicos, por ejemplo” (López García, 2003: 467-468). Por último, el autor da pistas al respecto de la procedencia –dispersa- de los documentos que pueden asociarse como fuentes externas al reportaje: Documentos oficiales Monográficos generados por instituciones públicas y privadas Estudios de carácter académico Páginas web especializadas 4.2. La propuesta de Ramón Salaverría (2005) Con dos años de diferencia frente a la propuesta de caracterización realizada por López García, y definitivamente influida por ella, Ramón Salaverría establece tres grandes características de los reportajes preparados para los cibermedios: la hipertextualidad, la multimedialidad y la interactividad. 4.2.1. Características con respecto a la hipetextualidad Salaverría (2005: 166) sugiere tres tendencias básicas al respecto de la característica ya reseñada por López García. La primera está definida en la capacidad del género –debida a su plataforma de acogida- de realizar enlaces internos y externos hacia otro tipo de fuentes. La segunda, con el objetivo de acentuar la función documental de los reportajes, se concibe como la capacidad del medio para enlazar documentos íntegros (discursos, leyes), con lo cual se busca aumentar la credibilidad en la información a través de la presentación de pruebas al lector. Por último, la tercera característica se reseña como la “fragmentación hipertextual del contenido matriz, mediante hiperestructuras tanto axiales como reticulares” (Díaz Noci y Salaverría, 2003: 120-133 en Salaverría, 2005: 166). El mismo Salaverría anota al respecto de la función hipertextual del reportaje ciberperiodístico: “El reportaje también es un género ideal para la estructuración hipertextual. Puesto que el autor no está de ordinario demasiado presionado por el tiempo y cuento con un texto de una notable extensión, puede ensayar diversas formas de fragmentación axial y/o reticular de su texto” (2005a: 162). 4.2.2. Características con respecto a la multimedialidad A partir de la diferencia de los dos años entre las dos propuestas, la caracterización multimedial de Salaverría (2005: 167 y 2005a: 162) encuentra los siguientes elementos configurativos del género: a. Generalización del uso de galerías y secuencias fotográficas que acompañan el texto b. Gran acogida de los gráficos y uso cotidiano de los mismos: la infografía, como había anunciado López García, se convierte en un género autónomo. c. Cada vez hay una práctica más generalizada en la estructuración de los reportajes: acompañar los escritos con grabaciones de sonido. d. “Algunos contados cibermedios españoles comienzan a ofrecer de vez en cuando grabaciones de vídeo” (Salaverría, 2005: 166) 4.2.3. Características con respecto a la interactividad “El reportaje también ofrece muchas posibilidades para la experimentación de la interactividad. De ordinario, este género goza de una vida útil más larga que la de otros géneros mucho más efímeros… un reportaje suele disfrutar de mayor visibilidad y permanencia en un cibermedio… Esto permite usar el reportaje como gancho para la creación de un foro de debate a propósito del tema analizado en el texto” (Salaverría, 2005a: 162). Al respecto de la interactividad, Salaverría se mantiene sobre las líneas de López García y establece tres rasgos principales que caracterizan al género on-line: a. Se ha generalizado el hábito de incluir direcciones de correo genéricas de la redacción, para que se genere un proceso de comunicación entre las opiniones, preguntas, correcciones y comentarios de los lectores y los profesionales de la información. b. Se ha extendido el uso de encuestas a los cibernautas sobre temáticas de actualidad y que pueden constituirse como temas de reportaje. c. Se ha generalizado la inclusión de foros y chats de discusión sobre temas objeto de reportaje. 4.3. La propuesta de Ainara Larrondo (2009) La propuesta de Larrondo con años de diferencia frente a las anteriores y con un gran aporte de la tecnología en las prácticas básicas del reportaje, está definida a partir de tres elementos caracterizadores del género periodístico: una modalidad genérica renovada; un esquema discursivo mixto, integrador y multidimensional, y el reportaje hipermedia como macrogénero. Como se aprecia por su enunciación, es una propuesta mucho más actual y que se estructura a partir del contenido conceptual más que de la descripción de los elementos que se aprecian en la composición de un reportaje. 4.3.1. Modalidad genérica renovada Larrondo (2009: 79-80) describe al “reportaje hipermedia” como una “sucesión de un prototipo anterior, a una modalidad textual heredada que presenta novedades en el ciberperiodismo”. Para la autora, esta sucesión se manifiesta en el género periodístico enunciado a través de las pantallas de internet en tres usos concretos: a. El empleo de otra narrativa de carácter hipertextual b. La cualidad para albergar otras narrativas c. La capacidad de conjugar todas ellas para componer un único discurso Así, Larrondo resume en esta caracterización narrativa las tres dimensiones propuestas por Salaverría: hipertexto, multimedia e interactividad. En palabras de la autora: “Esta mejora de los rasgos hereditarios de un prototipo conocido determina sus características distintivas e, incluso, su significado mismo como ‘género’. De hecho, parece más adecuado considerar al reportaje hipermedia un ‘metagénero’ vinculado a la herramienta hipertextual, al soporte multimediático, interactivo y al receptor (coautor) del mensaje que contiene, como responsable último de la producción de sentido realizada por el periodista (Larrondo, 2009: 79) 4.3.2. Esquema discursivo mixto, integrador y multidimensional Para Larrondo, el reportaje hipermedia se compone a partir de la aplicación de la técnica del hipertexto: “por el aprovechamiento de la funcionalidad del hipertexto como estructura organizativa de contenidos” (2009: 80). Así, el reportaje recurre a una herramienta documental –como la misma naturaleza del reportaje- que asegura un tratamiento coherente y cohesionado del tema elegido. Del mismo modo, el uso narrativo del hipertexto facilita una relación entre los hechos narrados y las noticias anteriores publicadas sobre el asunto (background) y posteriores (actualización). El hipertexto en el reportaje, como estructura narrativa básica, se convierte en una herramienta de jerarquización, disposición, engranaje y estructuración de toda la fase documental realizada por el periodista, incluidos los rasgos básicos del reportaje como lo son su contexto, sus antecedentes y sus proyecciones (Larrondo, 2009: 80). “La visión multidimensional de los acontecimientos ofrece mayores oportunidades para comprender el verdadero alcance y significado del hecho en cuestión, ya que también el contexto consigue integrarse en un relato único y ordenado. Ello otorga mayores posibilidades de interpretación y garantiza que no se pierda detalle de todas las implicaciones del tema. La técnica del hipertexto aplicada al reportaje permite, en suma, incrementar el valor documental característico del género y enriquecer los elementos que tradicionalmente han dotado de sentido a su discurso” (Larrondo, 2009: 80). El escenario mixto complejizado a partir de las herramientas de internet define al medio digital como el mejor escenario para que el reportaje desarrolle su riqueza informativa e interpretativa. En el escenario ciberperiodístico, el reportaje se asume como un género mixto donde no sólo se combina la información con la interpretación, sino que también se agregan muchos elementos de argumentación (Larrondo, 2009: 81). Asimismo, los grados de discursividad mixta, integradora y multidimensional garantizan el enriquecimiento del reportaje a partir de otros discursos provenientes de herramientas participativas (foros, chats, blogs, entrevistas participativas, juegos en línea, envío de contenidos) (Larrondo, 2009: 80). Todos estos recursos aumentan la implicación y el compromiso de nuevas narrativas dentro de un texto que puede ser actualizado desde que la interactividad discursiva se haga presente. 4.3.2. El reportaje hipermedia como macrogénero Por último, Larrondo (2009: 80) destaca al hipertexto como un elemento que resalta la “miscelánea genérica del reportaje y su idiosincrasia”, con lo que favorece su aproximación como “género híbrido, heterogéneo y creativo”. “Gracias a sus mayores posibilidades de vincluación entre discursos, el reportaje se convierte en un macrogénero que contiene otros géneros o microgéneros arquetipos, como los que tradicionalmente han acompañado a una información relevante para apoyarla y contextualizarla... estos se mezclan, además, con otros formatos propios de la comunicación en internet, de carácter abierto y participativo” (Larrondo, 2009: 80). El reportaje hipermedia pasa así a asumir un rol de género contenedor que reúne en sí mismo, en su estructura de red, a múltiples discursos que guardan un fin común: intentar explicar de la mejor manera un tema específico. De allí que las nuevas tecnologías constituyan un elemento enriquecedor para el reportaje pues aumentan su creatividad, un elemento que puede ser pensado en la radio, en la prensa y en la televisión, pero con niveles mucho más bajos de posibilidades reales de ejecución (Larrondo, 2009: 80). 5. ESTRUCTURA DE UN REPORTAJE MULTIMEDIA Por definición, el reportaje se presenta como un género de estructura abierta. Desde la prensa, pasando por la televisión y la radio, sus contenidos no se someten a un esquema o guión establecido por las leyes que, por ejemplo, sí rigen a los géneros noticiosos más estrictos como la noticia. De acuerdo con Ainara Larrondo, los reportajes ciberperiodísticos están estructurados con una gran amplitud horizontal y una gran profundidad vertical. Asimismo, presentan una tendencia hacia la reticularidad, como característica básica de construcción de articulación y coherencia hacia una misma temática de contenidos, discursos y medios diferentes. “Esta pauta de estructuración mixta, sustentada en múltiples microestructuras de contenido arbóreas y en una red de conexiones compleja, aporta las mayores opciones navegacionales, con lo que se ajusta al ideal de estructuración para este modelo. En la página siguiente, en la que se muestra la representación gráfica de la estructura hipertextual del especial 27M elecciones municipales y autonómicas de Elmundo.es, elaborado por Ainara Larrondo, se aprecian puntualmente varios de los elementos que caracterizan la estructura de un reportaje, de acuerdo a las concepciones de varios autores: a. La disponibilidad de un espacio ilimitado (López García, 458-460) b. Compleja distribución fragmentada de los documentos en diferentes niveles de profundidad vertical y amplitud horizontal (López García, 458-460) c. Despieces que funcionan perfectamente como nodos de segundo –o tercer- nivel conectados al nodo matriz donde se encuentra el texto principal (Salaverría, 2005: 162) d. Contraste entre el espacio potencial y el nodo inicial (López García, 458-460) e. Texto fuente reducido y sustituido por los elementos que componen el reportaje, sin que se pierda de vista el conjunto del mismo (López García, 458-460) f. Una página o nodo inicial (López García, 458-460) g. La extensión del texto fuente a través de una serie de documentos de diferentes procedencias y en diferentes formatos informativos (López García, 458-460) h. Contextualizaciones (primaria y secundaria) (López García, 458-460) i. Una estructura abierta del reportaje Hacia fuentes ajenas al medio Hacia fuentes propias del medio Hacia la participación de otros discursos y a la actualización constante de sus contenidos informativos (López García, 458-460) Larrondo, anticipándose a su mismo diagrama, plantea una estructura que define de la siguiente manera: “Dicha convención obtiene reflejo a través de una hiperestructura de tipo mixto, integrada por un número variable de estructuras arbóreas multilineales y con relaciones entre todos sus nodos. Esta articulación jerárquica y reticular proporciona un esquema narrativo particular que diferencia al reportaje tanto de sus homólogos textuales en prensa tradicional, como de otras modalidades hipertextuales o hipermedia más sencillas (noticia) (Larrondo, 2009: 62). Representación gráfica de la estructura hipertextual del especial 27M elecciones municipales y autonómicas de Elmundo.es Fuente: Larrondo, 2009: 77 La estructura del género, dominada por la hipertextualidad, la multimedialidad y la interactividad se configura a partir de nuevas convenciones que se integran a las dinámicas propias de la sociedad de la información en red. Larrondo define la motivación del cambio a través de dos puntos fundamentales: la introducción de variaciones en el elemento interpretativo y el enriquecimiento de su discurso tradicional con otros de carácter más novedoso en función de la interacción con otros agentes de la información y de la variedad de herramientas y medios disponibles (2009: 81). La figura siguiente señala la estructura conceptual del género ciberperiodístico, en el aprecia la complejidad de las relaciones y la introducción, a través del hipertexto, contenidos de interpretación: “el hipertexto acrecienta dicha complejidad (la interpretación), porque altera sus mecanismos y extiende la cualidad interpretativa mensajes” (Larrondo, 2009: 82) que se de los de la de los Diagrama conceptual del reportaje hipermedia Fuente: Larrondo, 2009: 82 Larrondo resume fundamentalmente el paso de una estructura básica, escrita o audiovisual que guarda ciertas convenciones ligadas a las narratividades clásicas o retóricas, a una conjunción de discursos en torno a una red de informaciones con sentido completo y que, luego de un proceso de documentación, pueden integrarse a una red de información guiada por el diseño y por la profesionalidad periodística: “Cabe hablar, por tanto, de un redimensionamiento del género interpretativo que se plasman en la sustitución de un inicio, un cuerpo central y un final por categorías discursivas temáticas que sirven para desarrollar el tema y contextualizarlo, para el relato de antecedentes, la inclusión de información complementaria y la documentación del hecho. Estas categorías generan un tipo de interpretación descriptiva enriquecida, no solo por su mayor amplitud y profundidad, sino también por las vinculaciones coherentes que establecen con las restantes” (Larrondo, 2009: 82). 6. EL DECÁLOGO DE UN REPORTAJE MULTIMEDIA 6.1. Nunca un reportaje multimedia puede ser la reproducción literal de artículos previamente preparados o publicados en ediciones impresas o audiovisuales. 6.2. El reportaje multimedia necesita encontrar un adecuado equilibrio entre la coherencia informativa y la densidad informativa. El hecho de que internet sea ‘ilimitado’ no significa que un reportaje deba exagerar sus posibilidades informativas. 6.3. Un reportaje ciberperiodístico debe aprovechar todo el potencial multimedia que requiera el tema elegido: texto, imágenes, vídeos, recursos infográficos, enlaces internos y externos y géneros dialógicos asociados, según el caso. 6.4. Un reportaje multimedia debe aprovechar al máximo las características hipertextuales de internet. Es imposible concebir, hoy, un reportaje que no tenga recursos de hipertexto como ayudas para contextualizar la información presentada. 6.5. Un reportaje multimedia necesita promover su concepción interactiva e involucrar a los públicos-usuarios en la retroalimentación de la información. 6.6. Un reportaje multimedia debe tener un carácter abierto para que pueda, si la información lo amerita, actualizarse de acuerdo a la presencia de nuevas informaciones relevantes. 6.7. El reportaje multimedia debe reivindicar la necesidad de que el género goce de una mayor visibilidad dentro de los portales informativos, disminuyendo la uniformidad noticiosa que ronda en los medios de comunicación digitales. 6.8. El reportaje multimedia no puede concebirse como un texto lineal que otorgue información en un único plano informativo. Necesita plantearse a partir de nodos que funcionan como unidades informativas independientes. 6.9. El reportaje multimedia debe aprovechar todas las posibilidades de la comunicación de pantallas informativas, sin caer en errores típicos que impiden la legibilidad o la navegabilidad dentro de la pieza informativa. 6.10. El reportaje multimedia como género periodístico debe considerarse desde una perspectiva mixta, integrador, multidimensional e interpretativo. 7. CONSEJOS PRÁCTICOS PARA LA ELABORACIÓN DE UN REPORTAJE MULTIMEDIA La elaboración de un reportaje multimedia requiere de una preparación exhaustiva y de un trabajo, ante todo, de investigación periodística. El proceso de documentación por parte del profesional de la comunicación es el primer paso para poder diseñar un conjunto de nodos informativos que estructuren un reportaje para un cibermedio. A partir del proceso de documentación, la planeación informativa que realice el reportero debe satisfacer una gran variedad de puntos de vista involucrados en la temática elegida. Por lo general, un reportaje multimedia no es el resultado del trabajo individual de un periodista en concreto. La configuración del reportaje multimedia escenifica una nueva definición de las rutinas periodísticas que plantean dos cuestiones fundamentales: la reconfiguración del periodista hacia la adquisición de habilidades y capacidades multimediales y el trabajo en equipo de las redacciones ciberperiodísticas. El trabajo en equipo es también una reiteración de la futura estructura del reportaje ciberperiodístico. Las redes de trabajo, bajo una coordinación, representan asimismo la ordenación y la jerarquía informativa de las piezas que conforman el reportaje. Los procesos de ordenación, jerarquía, diseño de materiales interactivos, edición de vídeos, preparación de diagramación y desarrollo de los textos responderán siempre a esa primera planeación y a los resultados de la documentación efectuada. La puesta en escena de todos los elementos reunidos debe también guardar una coherencia básica que permita seguir un único hilo conductor. Ese hilo evitará que el usuario se pierda entre los niveles que se han definido en la concepción del reportaje. El esfuerzo documental y el trabajo en equipo, recursos escasos en las redacciones de la segunda mitad del siglo XXI, merecen el necesario mantenimiento de los productos durante un tiempo definido en términos de la importancia del tema y de su posible actualización. El periodo de actualización y retroalimentación informativa por parte de los usuarios-lectores debe también ser contemplado en el proceso de planeación del reportaje. Es fundamental situar al reportaje en un lugar visible de la página del cibermedio. Los recursos empleados no pueden ser destinados a un espacio secundario dentro de la página principal del medio y, mucho menos, a páginas interiores de los mismos. El posicionamiento del género del reportaje es quizás el único sello de calidad que hoy en día preparan, muy de vez en cuando, los medios de comunicación. Todos los demás se basan en estructuras noticiosas prefabricadas en notas de prensa, agencias informativas o refritos de internet. Por ello, resulta necesario que el mismo medio destaque su propio trabajo por encima del resto de la parrilla tradicional de noticias frías, compradas y, por lo general, mal escritas. 8. ALGUNOS EJEMPLOS DE REPORTAJES MULTIMEDIA Título: “NARCOGUERRA” Dirección: Gustavo Sierra Emitido en: Diario El Clarín, Argentina Resumen: Un especial multimedia para entender el conflicto que sacude a México y que ya dejó más de 8.000 muertos Título: “En la tierra de Diego” Dirección: Gustavo Sierra Emitido en: Diario El Clarín, Argentina Resumen: Un pequeño sector del gran Buenos Aires cruzado por zanjones pestilentes y llenos de ratas, a metros de donde nació y crió Diego Armando Maradona. Allí viven unas 50.000 familias. Padecen un muestrario de todos los males de los barrios marginales argentinos. Título: “Malvinas: y Goliat venció a David” Dirección: Sonia Aparicio Emitido en: El Mundo, España Resumen: Reportaje que da cuenta de los principales elementos que conformaron la Guerra de las Malvinas en el marco de la conmemoración de su 30º aniversario. Título: "Las cuerdas que nos unen" Dirección: Carlos Solano, Julio César Guzmán, José Ricardo Báez Emitido en: El Tiempo, Colombia Resumen: Reportaje que ilustra los diferentes géneros musicales de cuerda que se interpretan en Colombia. Título: "La matanza el 11M" Emitido en: El País – Cadena SER, España Resumen: Reportaje que recopila información sobre los atentados del 11M en Madrid. Título: “Sabina en Boca, el sueño del pibe” Dirección: David Wroclavski Emitido en: Diario El Clarín, Argentina Resumen: Reportaje que cuenta la relación entre Argentina y el músico español Joaquín Sabina. Título: “Leyendas de los juegos olímpicos” Dirección: Miguel Ángel García Emitido en: Diario Marca, España Resumen: El reportaje hace un repaso de las principales figuras que han marcado época en la gran fiesta del deporte Título: “Mundial Suráfrica 2010” Dirección: Daniel Muñoz, Hugo Alguacil, Álvaro Llorca Emitido en: Diario El Mundo, España Resumen: Reportaje recorre la historia de la selección española de fútbol en el Mundial de fútbol de Suráfrica 2010. Título: “Los Yupkas, un pueblo guerrero” Dirección: José Navia Emitido en: El Tiempo, Colombia Resumen: Reportaje cuenta la historia de los Yapkas, un pueblo indígena que vive en resguardos en el norte de Colombia.