Los derechos de Munch, Mondrian, Kandinski, Saint

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70 LA VANGUARDIA
CULTURA
DOMINGO, 1 FEBRERO 2015
Los últimos ‘liberados’
Pier Mondrian.
Composition
(1919) forma
parte de los
fondos de la
GNAM de
Roma
Saint-Exupéry.
Cualquier
editorial
española
podrá editar
su texto El
principito
Edvard Munch.
Las obras del
autor de El
grito quedan
liberadas del
pago de
derechos
JOSEP PLAYÀ MASET
Barcelona
Edvard Munch y su tan reproducido óleo El grito, Filippo Tommaso Marinetti y su provocador texto sobre El futurismo o Antoine
de Saint-Exupéry y su bellísimo
texto sobre El principito pasan a
ser este año 2015 de dominio público. Es decir que este diario puede reproducir la obra de Munch
sin tener que pagar derechos de
autor o cualquier editorial española podrá reeditar el famoso texto de Saint-Exupéry. La razón es
simple: se han cumplido 70 años
de la muerte de sus autores, periodo que las leyes dan de vigencia a
los derechos de autor.
La norma sin embargo tiene algunos flecos que conviene tener
en cuenta. El primero es que rige
la ley de propiedad intelectual vigente en el país de origen del autor. La convención de Berna estableció un mínimo de 50 años antes de pasar al dominio público y
más tarde Estados Unidos y la mayoría de países de la Unión Europea y de Iberoamérica establecieron la fecha en 70 años, a contar
desde el 1 de enero del siguiente.
Sólo unos pocos, como Canadá,
Nueva Zelanda o Uruguay, se quedan en los 50 y otros, como Colombia, alargan hasta los 80 años.
Las obras del escultor Aristide
Creaciones de
dominio público
Los derechos de
Munch, Mondrian,
Kandinski,
Saint-Exupéry o
Maillol quedan
libres a los 70 años
de su muerte
EL EPO TAJE
Maillol, que falleció en la localidad rosellonesa de Banyuls el 27
de septiembre de 1944, han pasado a ser de dominio público desde el 1 de enero de 2015 porque
Francia establece que los derechos prescriben a los 70 años.
Con algunas excepciones. Si se
trata de autores que gozan de la
categoría de “mort pour la Fran-
ce” entonces puede extenderse
hasta 95 años. La ley de propiedad intelectual de Francia también recoge excepciones si determinada obra se publicó durante
alguna de las dos guerras mundiales, ya que se considera que el autor no pudo disfrutar de esos derechos durante este periodo, y se
alarga el plazo.
En España estuvo vigente hasta 1987 una ley de la propiedad
aprobada nada menos que en
1879 y extendía los derechos de
autor durante 80 años. Finalmente se decidió adaptarla al entorno
europeo pero se estableció que para los autores fallecidos antes del
7 de diciembre de 1987 la duración de sus derechos seguirá siendo de 80 años. Así, los derechos
del escritor Antonio Machado, fallecido también en Banyuls, en
1939 –antes que Maillol–, o los
del poeta Miguel Hernández, fallecido en Alicante en 1942, no
prescriben hasta 2019 y 2022, respectivamente. Romancero gitano
o Poeta en Nueva York de Federico García Lorca, fusilado en agosto de 1936, quedarán “liberados”
a partir del 1 de enero de 2017.
Este año entran en el dominio
público autores como el Nobel
Santiago Ramon y Cajal, el torero
Ignacio Sánchez Mejías –por sus
libros, no por sus verónicas–, el
político Jaume Carner o el pintor
Arcadi Mas. Y en los dos años anteriores han quedado libres Ferran Agulló –el escritor que dio
nombre a la Costa Brava–, la pintora Marie Blanchard, el político
Rafael Campalans, el canónigo catalanista Jaume Collell, el poeta
Guerau de Liost o los escritos del
presidente de la Generalitat Francesc Macià. En la web de la Biblioteca Nacional de España aparece
una lista de autores de dominio
público, que recoge a todos los españoles nacidos entre 1920 y
1934. Pero cuidado porque entre
los que quedan libres este año se
cita a Miguel Utrillo, y se confunde al pintor con su hijo, del mismo nombre pero periodista, y se
dice que quedan del dominio público algunas de sus novelas y ensayos (uno sobre Dalí, otro sobre
Sitges) que siguen protegidos.
LA VANGUARDIA 71
CULTURA
DOMINGO, 1 FEBRERO 2015
Vassily
Kandinski.
Pintura con
centro verde
(1913), obra del
artista ruso
que pertenece
a la colección
del Art
Institute of
Chicago
Ramón y
Cajal.
El Nobel de
Medicina en
una imagen
tomada en el
año 1920
Aristide Maillol.
El escultor falleció
en la localidad
rosellonesa de
Banyuls en 1944
Hay que atender a las peculiaridades de cada país para conocer
el tiempo de prescripción. Un caso peculiar es el de Estados Unidos. Antes de que se cambiase la
ley, si alguien adquiría una obra
de arte se entendía que pasaba a
poseer los derechos de autor. Es
decir, podía hacer postales, pósters o camisetas con esta obra y
era él quien la controlaba. Actualmente los derechos de autor no
son del propietario, a menos que
conste explícitamente en el contrato de venta, sino del creador.
Eso ha dado pie a curiosas situaciones. Así, en el Dalí Museum de
Saint Petersburg (Florida, EE.
UU.) hay una parte de las obras
en las que los derechos pertenecen a la fundación del museo, en
tanto que propietaria, mientras
que de otras, las adquiridas más
recientemente, los derechos pertenecen a la fundación Dalí, de Figueres, en tanto que gestora del
legado y de sus derechos por delegación del Estado español.
Puede suceder que un autor
venda un cuadro y con él los derechos de autor. Hace unos años se
abrió una polémica porque algunos museos ponían como condición para la compra de obra que
los artistas cediesen sus derechos
de autor. “La legislación española
ha querido proteger al autor y ha
establecido que el contrato debe
precisar la duración de esa cesión
de derechos, el territorio para la
que se establece y el idioma, si se
trata de obra escrita”, precisa Albert Segura, abogado especializado del despacho Roca Junyent. Y
si no se especifica, se entenderá
que la cesión de derechos es sólo
por 5 años, para el país de origen
y la lengua en que está escrito.
En el caso de obras compartiCASOS PREVIOS A LA NUEVA LEY
En España los autores
fallecidos antes de
1987 tienen 80 años de
derechos protegidos
S IN L Í M I T E
Los derechos morales
no prescriben,
pero sí los derechos
de explotación
das, como sucede a menudo en el
caso de canciones, habrá que esperar a que se cumplan los 70
años de la muerte de ambos compositores. Cuando una obra original es adaptada, traducida o modificada, se considera que se trata
de una obra derivada que tiene
sus propios derechos. Una obra
Todas las obras
‘liberadas’, en una
web francesa
]En Francia, un colecti-
vo de artistas llamado
SavoirsCom1 ha creado
una página web denominada Calendrier de
l’Avent du domaine public, donde anticipan y
celebran la llegada al dominio público de nuevos
autores. Y lo hacen invitando a escritores y periodistas a “colgar” en esta
página artículos sobre las
obras más relevantes que
quedan libres de derechos de explotación (los
autores aceptan que sus
artículos sean también de
dominio público).
Ayer sábado finalizó el
festival que durante dos
semanas han organizado
en París y sus alrededores con distintos actos y
conferencias para sensibilizar sobre la importancia y la riqueza de poder
aumentar el espacio de
dominio público con nuevos autores.
de un autor clásico español no
tendrá derechos de autor, al haber superado con creces su plazo
de protección, pero su traducción
o adaptación tienen derechos independientes.
Un caso más complicado se presenta con obras que han permanecido inéditas, escondidas en alguna colección o que se consideraban perdidas y de las que no se
EN ES PAÑA
La Biblioteca Nacional
publica la lista de los
últimos autores de
dominio público
A UT OR ES R ECI ENTES
Ramón y Cajal, Marie
Blanchard, Guerau de
Liost, Campalans y
Francesc Macià
tenía conocimiento. Si aparece
un manuscrito desconocido de
Pío Baroja no se podrá publicar
sin acuerdo de los herederos.
Otro tema complejo se presenta en el caso de las esculturas. Si
el autor autorizó una reproducción en serie pero no pudo dar su
“bon à tirer”, es decir si no validó
el resultado final la obra tendrá
seguro menos valor y probablemente obligará a sus propietarios
o a quienes han encargado esa
nueva fundición a añadir un cartelito donde se precise que se trata
de una obra “derivada de…” o “inspirada en …”. Hace unos años en
Francia hubo una sentencia, dictada a instancias de la fundación Rodin, que obligó al taller que había
realizado varias obras a partir de
moldes originales del escultor a
señalar que se trataba de “reproducciones post mórtem”, aunque
legalmente tenían todo el derecho a hacerlas.
Pero hay otro elemento importante a tener en cuenta, que se refiere a los derechos morales. Los
herederos de Maillol, como los
de Piet Mondrian, Vassili Kandinski, Glenn Miller o Jean Giraudoux, por citar otros autores que pasan al dominio público en el 2015,
conservan los derechos morales
sobre su obra. Eso significa que si
se utiliza la imagen de una escultura de Maillol deberá constar su
autoría, deberá reproducirse en
su integridad y sin manipulación
alguna. Este derecho moral no
prescribe nunca y es intransferible. Pero los poseedores de obras
de Maillol, Munch, Mondrian o
Kandinski podrán exponerlas y
administrar los derechos de explotación.c
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