En septiembre de 2005, los dirigentes mundiales celebrarán una

Palabras de José Manuel Hermida
Coordinador Residente
Sistema de las Naciones Unidas - Costa Rica
Reunión de la Asociación Regional IV de la
Meteorológica Mundial
Organización
Saludos
Muy buenos días:
Señor Sr. Michel Jarraud, Secretario General de la Organización
Meteorológica Mundial.
Serñor Allan Flores, Viceministro de Ambiente y Energía de la República
de Costa Rica,
Señor, Paulo Manso, Director del Instituto Meteorológico Nacional,
Señoras y Señores participantes en esta importante actividad;
Vivimos en un mundo, donde más de mil millones de personas todavía
viven en la pobreza extrema sobreviviendo con 1 dólar al día…Vivimos en
un mundo donde más de 800 millones de personas pasan hambre a
diario... y 20 mil de ellas, mueren cada 24 horas por esas condiciones.
Esta realidad obligó a 189 países de todo el mundo a firmar la Declaración
del Milenio y a aprobar los Objetivos de Desarrollo del Milenio en el año
2000, cuyo objetivo principal fue el de retomar la agenda para el
desarrollo impulsada en la década anterior y replantear algunos objetivos
básicos en torno al desarrollo humano.
La reducción de la pobreza, la erradicación de enfermedades mortales, la
promoción de la igualdad de género y la educación universal, así como la
protección del medio ambiente, entre otros, pasaron nuevamente a
colocarse en la agenda mundial de prioridades.
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Es en septiembre de este año, que los dirigentes mundiales celebrarán la
Cumbre del Milenio +5 donde se examinarán los progresos realizados por
la humanidad desde que se proclamó la Declaración del Milenio.
En esta cumbre y con la misión de replantear los principales mecanismos
para contribuir a alcanzar un progreso socialmente justo para la
humanidad, el Secretario General de las Naciones Unidas, Kofi Annan,
presentará su informe, titulado: “Un concepto más amplio de la libertad:
Desarrollo, seguridad y derechos humanos para todos.”
Este informe del Secretario General puntualiza que los acontecimientos
que se han producido desde que se proclamó la Declaración del Milenio
exigen una revitalización del consenso sobre los desafíos y las prioridades
fundamentales en el mundo y que ese consenso se convierta en acción
colectiva, permanente e inmediata.
En Naciones Unidas sentimos que hay un ambiente propicio para cumplir
promesas. Hoy más que nunca, desde un punto de vista financiero, es
totalmente factible la erradicación de la pobreza y, más importante aún,
cada vez percibimos más voluntad política para actuar hacia esta meta.
El informe del señor Annan, se base en tres pilares fundamentales: el
desarrollo, la seguridad y los derechos humanos. La humanidad no podrá
tener seguridad sin desarrollo, no podrá tener desarrollo sin seguridad y
no podrá tener ninguna de estas cosas si no se respetan los derechos
humanos. En definitiva un triángulo indivisible.
En cuanto a los retos fundamentales, el informe enfoca la necesidad clara
de enfrentar los problemas ambientales. Enfatiza que uno de los mayores
desafíos para el medio ambiente y el desarrollo en el siglo XXI será el de
controlar y hacer frente al cambio climático.
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Una abrumadora mayoría de científicos están ahora de acuerdo en que la
actividad humana tiene una repercusión considerable sobre el clima.
Desde la revolución industrial de mediados del siglo XVIII, las
concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera han
aumentado de manera significativa, la Tierra se ha calentado
considerablemente y el nivel del mar se ha elevado apreciablemente.
Los años noventa fueron el decenio más cálido de que se tiene constancia,
produciéndose una disminución de los glaciares y de la capa de hielo del
Ártico.
Está previsto también que la concentración de gases de efecto
invernadero aumente aún más durante el próximo siglo, por lo que es
probable que el correspondiente aumento de la temperatura media de la
superficie terrestre provoque una mayor variabilidad climática y una
mayor incidencia e intensidad de fenómenos meteorológicos extremos
como los huracanes y las sequías.
Desafortunadamente, el cambio climático abre todavía más la brecha
entre los países ricos y pobres.
La gran paradoja de la situación actual es que los países más vulnerables a
esos cambios, pequeños Estados insulares en desarrollo, naciones
ribereñas con una numerosa población en las tierras bajas, países de los
trópicos y subtrópicos áridos y semiáridos, son los que menos contribuyen
a las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero.
Creo que todos estamos de acuerdo en que es una situación inaceptable.
La solución tiene que darse a todos los niveles de acción, desde lo local,
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hasta lo nacional y mundial.
Es una responsabilidad común, pero
diferenciada.
Todos además somos concientes en que el cambio climático está
haciendo más constantes y frecuentes los fenómenos naturales que
causan muchas veces tragedias humanas, dolor y marcas irreversibles en
las poblaciones afectadas.
- PAUSA En este sentido es esperanzador observar las oportunas acciones
emprendidas por las Naciones Unidas y específicamente por la
Organización Meteorológica Mundial (OMM) en favor de la protección de
poblaciones vulnerables y la gestión de sistemas de información precisos
y veraces que contribuyen directamente al desarrollo humano y a la
mitigación de todo tipo de daños.
Estas acciones
van desde la predicción meteorológica hasta la
investigación sobre la contaminación del aire, el cambio climático, los
estudios del agotamiento de la capa de ozono y la predicción de las
tormentas tropicales.
Es importante notar también como
la Organización Meteorológica
Mundial coordina la actividad científica mundial para que la información
meteorológica llegue rápida y eficazmente a los públicos de interés, tales
y como son las entidades públicas, el sector privado - comercial, la
navegación aérea y marítima internacional.
También quiero referirme a algunos de los PRINCIPALES PROYECTOS
DE LA OMM que tienen incidencia directa en la búsqueda del desarrollo
humano.
Tal es el caso del Programa de Vigilancia Meteorológica
Mundial que suministra información meteorológica de última hora a nivel
global, permitiendo así la oportuna toma de decisiones para evitar la
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incidencia de los fenómenos naturales en zonas vulnerables, reduciendo a
un mínimo los daños materiales y humanos.
Otro baluarte de la organización lo constituye el Programa Mundial sobre
el Clima, que mediante la concentración, conservación y transmisión
precisa de datos climáticos, permite mejorar la planificación económica y
social; mejorar la comprensión de los procesos climáticos mediante la
investigación, así como la detección e información de las variaciones o
cambios climáticos inminentes, naturales o causados por el hombre y que
pueden afectar considerablemente a actividades humanas esenciales.
Para todos ustedes son conocidos también los grandes aportes del
Programa de Investigación de la Atmósfera y el Medio Ambiente, el
Programa de Aplicaciones de la Meteorología y el Programa de Hidrología
y Recursos Hídricos, que entre otros proyectos de la OMM, contribuyen a
la seguridad de vidas y bienes, al desarrollo socioeconómico de las
naciones y a la protección del medio ambiente.
- PAUSA Los acuerdos entre los países son también fundamentales y ya
disponemos de un ejemplo alentador que demuestra la posibilidad de
encontrar soluciones globales.
Gracias al Protocolo de Montreal, relativo a las sustancias que agotan la
capa de ozono, el riesgo de quedar expuestos a radiaciones perjudiciales
parece estar disminuyendo, lo cual constituye una clara demostración de
cómo pueden remediarse los problemas ambientales mundiales cuando
todos los países realizan esfuerzos determinados para poner en práctica
marcos acordados internacionalmente.
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En este mundo donde, como recordamos, más de 1.000 millones de
personas todavía viven por debajo del umbral de la pobreza extrema y
20.000 perecen todos los días a causa del hambre, urge asegurar que, a
partir de ahora, las promesas que se hagan se vayan a cumplir.
Muchas gracias.
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