EXPOSICIÓN DE MOTIVOS CONGRESO NACIONAL: La persona humana es el fin supremo del Estado y de la sociedad, cuya integridad física, síquica y moral es tutelada mediante la adopción de instrumentos internacionales, la consagración de derechos y garantías en la Constitución de la República, la emisión de leyes y la creación del marco institucional capaz de hacer cumplir tales disposiciones. En este sentido, Honduras es Estado parte de la Convención Contra la Tortura y otros Tratos Crueles Inhumanos o Degradantes, así como del Protocolo Facultativo de esta Convención. Este último instrumento internacional se aprobó mediante Decreto No. 374-2005, de fecha 20 de enero del 2006, cuyo instrumento de ratificación fue depositado el 6 de abril del 2006. Uno de los aspectos más relevantes de este Protocolo es la obligación de los Estados parte de crear el Mecanismo Nacional de Prevención, cuyo propósito es el de examinar periódicamente el trato de las personas privadas de libertad en lugares de detención, con miras a fortalecer la protección contra la tortura y otros tratos crueles inhumanos o degradantes y realizar recomendaciones, propuestas y observaciones a las autoridades nacionales competentes. Además, el Protocolo exige que este mandato sea ejercido por un organismo independiente funcionalmente, dotado de recursos humanos y económicos suficientes, con enfoque de género, étnicos y de grupos minoritarios en el país y que para su creación se deberá tomar en cuenta lo relativo al estatuto de las instituciones nacionales de promoción y protección de los Derechos Humanos. Adicionalmente, debe ser instituido bajo un amplio e inclusivo proceso de socialización con todos los sectores involucrados, a fin de garantizar su correcto, coordinado y eficaz funcionamiento. De conformidad a los términos del Protocolo éste se encuentra vigente desde el 22 de Junio de 2006, debiendo los Estados partes haber constituido el Mecanismo Nacional de Prevención el 22 de Junio del 2007. Sin embargo, el Estado de Honduras se encuentra en mora sobre la creación del Mecanismo Nacional de Prevención ya que está vigente desde el 6 de abril del 2006, habiendo pasado más de un año sin crear el citado Mecanismo, lo que además del incumplimiento en sí y sus negativos efectos en la población privada de libertad, coloca al Estado en posición de ser expuesto por el incumplimiento al Protocolo, sobre todo ante las inminentes visitas del Subcomité para la Prevención, mecanismo internacional de seguimiento al Protocolo, con sus consecuentes efectos negativos en cuanto a la imagen del país y al erario público. La Tortura y los tratos crueles, inhumanos y degradantes constituyen graves violaciones a la dignidad humana que han sido poscristas a nivel universal. Tal práctica ha sido definida por la Convención Contra la Tortura y otros Tratos Crueles Inhumanos o Degradantes como: “todo acto por el cual se inflija intencionalmente a una persona dolores o sufrimientos graves, ya sean físicos o mentales, con el fin de obtener de ella o de un tercero información o una confesión, de castigarla por un acto que haya cometido o se sospeche que ha cometido, o de intimidar o coaccionar a esa persona o a otras, o por cualquier razón basada en cualquier tipo de discriminación, cuando dichos dolores o sufrimientos sean inflingidos por un funcionario público u otra persona en el ejercicio de funciones públicas, a instigación suya, o con su consentimiento o aquiescencia. No se considerarán torturas los dolores o sufrimientos que sean consecuencia únicamente de sanciones legitimas o que sean inherentes o incidentes a éstas”. Concepto en el que estarían comprendidas no solamente las cárceles, sino que entre otros: Los centros de detención de menores infractores, asilos y centros de internamiento psiquiátrico. Finalmente permítanme recordar que diferentes mecanismos de protección a los Derechos Humanos han expresado su preocupación sobre la situación y como en el caso de la sentencia emitida por la Corte Interamericana de Derechos Humanos en el caso López Álvarez, se nos ha sancionado argumentado que “la persona ilegalmente detenida se encuentra en una situación agravada de vulnerabilidad, de la cual surge un riesgo cierto de que se le vulneren otros derechos, como el derecho a la integridad física y a ser tratada con dignidad y “que los detenidos tienen derecho a vivir en condiciones de detención compatibles con su dignidad personal y que el Estado debe garantizarles el derecho a la integridad personal”. En consecuencia, considero necesario iniciar un amplio e inclusivo proceso de elaboración del anteproyecto de creación del MECANISMO NACIONAL DE PREVENCIÓN, para lo que, amparada en el derecho que me confiere el Reglamento Interior del Congreso Nacional, propongo la siguiente: MOCIÓN Que el señor Presidente del Congreso Nacional, encomiende a la Comisión Ordinaria de Derechos Humanos, la elaboración y presentación a éste pleno, de una Iniciativa de Ley orientada al cumplimiento de la obligación que el Estado de Honduras tiene de crear el MECANISMO NACIONAL DE PREVENCIÓN, al tenor de lo establecido en el Protocolo Facultativo de la Convención contra la Tortura y otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, el que fue aprobado mediante Decreto No. 374-2005, de fecha 20 de enero del 2006, lo que realizará mediante un amplio, interinstitucional e inclusivo proceso de socialización, en el que participen las diferentes sectores involucrados en el tema. A tal efecto, la referida comisión deberá presentar el respectivo Proyecto de Decreto en el término de seis (6) meses a partir de la fecha. Tegucigalpa M.D.C., de del 2007. DAYANA GISELL MARTÍNEZ BURKE Diputada por el Departamento de Francisco Morazán