SENTENCIA DEFINITIVA No. ***/2016 Saltillo, Coahuila, a ******************** V I S T O S para pronunciar sentencia definitiva en Primera Instancia dentro de los autos del expediente número 1228/2015, relativo al Juicio Ejecutivo Mercantil, promovido por el Licenciado ********, en su carácter de Endosatario en Procuración de ********, en contra de ********; y, R E S U L T A N D O: PRIMERO.- Mediante escrito de fecha ********, el Licenciado ********, compareció ante este juzgado, con el carácter indicado en el proemio, a demandar en la vía ejecutiva mercantil, en ejercicio de la acción cambiaria directa, de ********, las prestaciones especificadas en el escrito de demanda. Fundó su acción en que; la parte demandada suscribió el documento mercantil denominado pagare en fecha ********con fecha de vencimiento el día ********, pactando que además en caso de mora se causaría un interés al tipo del 10% mensual en el documento base de la acción; que en virtud de que a esta fecha se encuentra vencido el plazo otorgado para la liquidación del documento pagaré, independientemente de las gestiones extrajudiciales hechas, aun sigue insoluto el adeudo, motivo por el cual se vio en la necesidad de interponer la demanda; que en fecha anterior ********, le endosó en procuración el valor del documento base de la acción a su favor para promover el juicio ejecutivo mercantil presente. SEGUNDO.- Admitida la demanda, se corrió traslado de ella a la parte demandada, quien, pese a que fue legalmente emplazada, no se apersonó al juicio a efectuar el pago, ni a oponerse a la ejecución, por lo que, a petición de la parte actora, se le declaró rebelde y se tuvieron por confesados los hechos de la demanda que se dejó de contestar y en virtud de que no existieron pruebas por desahogar y no hubo hechos controvertidos en el presente juicio para producir alegatos, se citó a las partes para sentencia de remate, la que hoy se pronuncia; y, C O N S I D E R A N D O: PRIMERO.- Que al tenor de lo establecido por el artículo 1391 del Código de Comercio, el procedimiento ejecutivo mercantil tiene lugar cuando la demanda se funda en un(os) documento(s) que traiga(n) aparejada ejecución; como acontece en la especie con el (los) pagaré(s) que se acompañó(aron) a la demanda, según se desprende de la lectura de la fracción IV, del precepto invocado en relación con los artículos 167 y 174 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, por lo que debe estimarse procedente la vía ejecutiva mercantil intentada. SEGUNDO.- El (los) título(s) de crédito base de la acción es(son) ejecutivo(s) porque contiene(n) los requisitos y menciones a que se refieren los artículos 14, 170 y 171 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, toda vez que se trata del (los) título(s) a que se refiere la fracción IV del artículo 1391 del Código de Comercio, además de que la obligación contenida en dicho(s) título(s) es líquida y exigible, en razón de que está comprendida en su texto la cantidad de dinero que se reclama y por haber vencido el(los) plazo(s) pactado(s) para su pago. TERCERO.- El artículo 1194 del Código de Comercio . aplicable este principio a las acciones contenidas en el(los) título(s) de crédito como el(los) que sirve(n) de base en el presente litigio, el Licenciado ********, con la personalidad que tiene reconocida en autos, se ha constreñido en el deber de demostrar los elementos esenciales de ella. Ahora bien, en primer término cabe señalar que es suficiente que el titular del(los) documento(s) base de la acción ejecutiva, lo(s) haya exhibido para tener por demostrada tanto la existencia del crédito y su propiedad, así como la facultad para hacerlo(s) efectivo(s) judicialmente, de conformidad al endoso en procuración que aparece consignado en el (los) documento(s) base de la acción, en los términos de los artículos 5o., 14, 17, 35 y 38 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito. Por consiguiente, como la acción cambiaria directa es deducible por falta de pago total o parcial de un pagaré, conforme a lo previsto por los artículos 150, fracción II y 174 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito y en virtud de que la parte demandada fue emplazada legalmente, no compareció al juicio a oponer excepciones y defensas, es de estimarse que el (los) título(s) base de la acción, la(s) firma(s) que lo suscribe(n) y el hecho de no haber sido objetado(s) por la parte contraria, se tendrá(n) por admitido(s) y surtirá(n) sus efectos como si hubiere(n) sido reconocido(s) expresamente, tal como lo dispone el artículo 1296 del Código de Comercio. CUARTO.- Que advirtiéndose de autos que la parte demandada ********, no ha cubierto el importe consignado en el PAGARÉ base de la acción, y que el Licenciado ********, le reclama el pago de su valor, el pago de intereses moratorios vencidos, así como los que se sigan generando hasta la total liquidación del presente juicio; el pago de los gastos que origine el impone condenar a la parte demandada, con apoyo en los artículos 152, y 174 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito y 1408 del Código de Comercio, a pagar a la parte actora la cantidad de ******** en concepto de suerte principal; por lo que respecta al reclamo del pago de intereses pactado en el pagaré base de la acción, por disposición del artículo 174 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, debe ser estudiado de oficio el cobro excesivo de intereses, sustentándose en el siguiente criterio jurisprudencial, que a la letra dice:- - - - - - -------------------------Época: Décima Época, Registro: 2006794, Instancia: Primera Sala, Tipo de Tesis: Jurisprudencia, Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de la Federación. Libro 7, Junio de 2014, Tomo I, Materia(s): Constitucional, Civil, Tesis: 1a./J. 46/2014 (10a.), Página: Una 400, PAGARÉ. EL ARTÍCULO 174, PÁRRAFO SEGUNDO, DE LA LEY GENERAL DE TÍTULOS Y OPERACIONES DE CRÉDITO, PERMITE A LAS PARTES LA LIBRE CONVENCIÓN DE INTERESES CON LA LIMITANTE DE QUE LOS MISMOS NO SEAN USURARIOS. INTERPRETACIÓN CONFORME CON LA CONSTITUCIÓN [ABANDONO DE LA JURISPRUDENCIA 1a./J. 132/2012 (10a.) Y DE LA TESIS AISLADA 1a. CCLXIV/2012 (10a.)]. nueva reflexión sobre el tema del interés usurario en la suscripción de un pagaré, conduce a esta Sala a apartarse de los criterios sostenidos en las tesis 1a./J. 132/2012 (10a.), así como 1a. CCLXIV/2012 (10a.), en virtud de que en su elaboración se equiparó el interés usurario con el interés lesivo, lo que provocó que se estimara que los requisitos procesales y sustantivos que rigen para hacer valer la lesión como vicio del consentimiento, se aplicaran también para que pudiera operar la norma constitucional consistente en que la ley debe prohibir la usura como forma de explotación del hombre por el . derechos humanos respecto de los cuales el artículo 1o. constitucional ordena que todas las autoridades, en el ámbito de sus competencias, tienen la obligación de promover, respetar, proteger y garantizar. Así, resulta que el artículo 21, apartado 3, de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, prevé la usura como una forma de explotación del hombre por el hombre, como fenómeno contrario al derecho humano de propiedad, lo que se considera que ocurre cuando una persona obtiene en provecho propio y de modo abusivo sobre la propiedad de otra, un interés excesivo derivado de un préstamo; pero además, dispone que la ley debe prohibir la usura. Por lo anterior, esta Primera Sala estima que el artículo 174, párrafo segundo, de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, que prevé que en el pagaré el rédito y los intereses que deban cubrirse se pactaran por las partes, y sólo ante la falta de tal pacto, operará el tipo legal, permite una interpretación conforme con la Constitución General y, por ende, ese contenido normativo debe interpretarse en el sentido de que la permisión de acordar intereses tiene como límite que una parte no obtenga en provecho propio y de modo abusivo sobre la propiedad de la otra, un interés excesivo derivado de un préstamo; destacando que la adecuación constitucional del precepto legal indicado, no sólo permite que los gobernados conserven la facultad de fijar los réditos e intereses que no sean usurarios al suscribir pagarés, sino que además, confiere al juzgador la facultad para que, al ocuparse de analizar la litis sobre el reclamo de intereses pactados en un pagaré y al determinar la condena conducente (en su caso), aplique de oficio el artículo 174 indicado acorde con el contenido constitucionalmente válido de ese precepto y a la luz de las condiciones particulares y elementos de convicción con que se cuente en cada caso, a fin de que el citado artículo no pueda servir de fundamento para dictar obtenga en provecho propio y de modo abusivo sobre la propiedad de su contrario un interés excesivo derivado de un préstamo. Así, para el caso de que el interés pactado en el pagaré, genere convicción en el juzgador de que es notoriamente excesivo y usurario acorde con las circunstancias particulares del caso y las constancias de actuaciones, aquél debe proceder de oficio a inhibir esa condición usuraria apartándose del contenido del interés pactado, para fijar la condena respectiva sobre una tasa de interés reducida prudencialmente que no resulte excesiva, mediante la apreciación de oficio y de forma razonada y motivada de las mismas circunstancias particulares del caso y de las constancias de actuaciones que válidamente tenga a la vista el juzgador al momento de resolver. Contradicción de tesis 350/2013. Suscitada entre el Sexto Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito, el Séptimo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito y el Primer Tribunal Colegiado del Trigésimo Circuito. 19 de febrero de 2014. La votación se dividió en dos partes: mayoría de cuatro votos por lo que hace a la competencia. Disidente: José Ramón Cossío Díaz. Mayoría de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena y Olga Sánchez Cordero de García Villegas, respecto al fondo. Disidente: Jorge Mario Pardo Rebolledo, quien reservó su derecho para formular voto particular. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario: Mario Gerardo Avante Juárez. Tesis y/o criterios contendientes: El Primer Tribunal Colegiado del Trigésimo Circuito, al resolver el juicio de amparo directo 193/2012, que dio origen a la tesis aislada XXX.1o.2 C (10a.) de rubro: "INTERESES MORATORIOS EN UN TÍTULO DE CRÉDITO. EL ARTÍCULO 174 DE LA LEY GENERAL DE TÍTULOS Y OPERACIONES DE CRÉDITO, QUE PERMITE SU . DE PROHIBICIÓN LEGAL DE LA USURA ESTABLECIDO EN EL ARTÍCULO 21, NUMERAL 3, DE LA CONVENCIÓN AMERICANA SOBRE DERECHOS HUMANOS.", publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Décima Época, Libro XI, Tomo 2, agosto de 2012, página 1735, con número de registro IUS 2001361. El Séptimo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito, al resolver el juicio de amparo directo 369/2012, que originó la tesis aislada I.7o.C.21 C (10a.), de rubro: "USURA Y CUALQUIER OTRA FORMA DE EXPLOTACIÓN DEL HOMBRE POR EL HOMBRE. EL ARTÍCULO 174 DE LA LEY GENERAL DE TÍTULOS Y OPERACIONES DE CRÉDITO SE CONTRAPONE CON LO DISPUESTO EN LOS ARTÍCULOS 1o. DE LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS Y 21 DE LA CONVENCIÓN AMERICANA SOBRE DERECHOS HUMANOS.", publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Décima Época, Libro XII, Tomo 3, septiembre de 2012, página 2091, con número de registro IUS 2001810. El Sexto Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito, al resolver el juicio de amparo directo 144/2013, en el que esencialmente sostuvo que en el sistema jurídico al que pertenece el artículo 174 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, existe una limitante a la libertad contractual en lo referente al pacto de intereses que se puede establecer en un título de crédito, de tal suerte que, la sola circunstancia de que en el mencionado precepto no se haya establecido literalmente cuáles son los parámetros que deben tenerse en cuenta para pactar los intereses, no conlleva por sí sola la inconstitucionalidad del precepto y de la misma manera, tampoco sería procedente que en un aparente control de convencionalidad ex oficio, se deje de aplicar dicho precepto.Nota: La presente tesis abandona el criterio sostenido en la CCLXIV/2012 (10a.), de rubros: "INTERÉS USURARIO EN MATERIA MERCANTIL. CUÁNDO DEBE CONSIDERARSE QUE EXISTE Y EN QUÉ MOMENTO PROCESAL DEBE ESTUDIARSE." e "INTERESES USURARIOS EN EL PAGARÉ. SUS CONSECUENCIAS.", que aparecen publicadas en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Décima Época, Libro XVII, Tomo 1, febrero de 2013, páginas 714 y 826, respectivamente. Tesis de jurisprudencia 46/2014 (10a.). Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha veintiuno de mayo de dos mil catorce. Esta tesis se publicó el viernes 27 de junio de 2014 a las 09:30 horas en el Semanario Judicial de la Federación y, por ende, se considera de aplicación obligatoria a partir del lunes 30 de junio de 2014, para los efectos previstos en el punto séptimo del Acuerdo General Plenario 19/2013. Época: Décima Época, Registro: 2006795, Instancia: Primera Sala, Tipo de Tesis: Jurisprudencia, Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de la Federación, Libro 7, Junio de 2014, Tomo I, Materia(s): Constitucional, Civil, Tesis: 1a./J. 47/2014 (10a.), Página: 402, PAGARÉ. SI EL JUZGADOR ADVIERTE QUE LA TASA DE INTERESES PACTADA CON BASE EN EL ARTÍCULO 174, PÁRRAFO SEGUNDO, DE LA LEY GENERAL DE TÍTULOS Y OPERACIONES DE CRÉDITO ES NOTORIAMENTE USURARIA PUEDE, DE OFICIO, REDUCIRLA PRUDENCIALMENTE. El párrafo segundo del citado precepto permite una interpretación conforme con la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, al prever que en el pagaré el rédito y los intereses que deban cubrirse se pactarán por las partes, y sólo ante la falta de tal pacto, operará el tipo legal; pues ese contenido normativo debe interpretarse en el sentido de que la permisión de acordar intereses no es ilimitada, sino que tiene . modo abusivo sobre la propiedad de la otra, un interés excesivo derivado de un préstamo. Así, el juzgador que resuelve la litis sobre el reclamo de intereses pactados en un pagaré, para determinar la condena conducente (en su caso), debe aplicar de oficio el referido artículo 174, acorde con el contenido constitucionalmente válido de ese precepto y a la luz de las condiciones particulares y los elementos de convicción con que se cuente en cada caso, para que dicho numeral no pueda servir de fundamento para dictar una condena al pago de intereses usurarios, por lo que si el juzgador adquiere convicción de oficio de que el pacto de intereses es notoriamente usurario acorde con las circunstancias particulares del caso y las constancias de actuaciones, entonces debe proceder, también de oficio, a inhibir esa condición usuraria apartándose del contenido del interés pactado, para fijar la condena respectiva sobre una tasa de interés reducida prudencialmente para que no resulte excesiva, mediante la apreciación razonada, fundada y motivada, y con base en las circunstancias particulares del caso y de las constancias de actuaciones que válidamente tenga a la vista al momento de resolver. Ahora bien, cabe destacar que constituyen parámetros guía para evaluar objetivamente el carácter notoriamente excesivo de una tasa de interés -si de las constancias de actuaciones se aprecian los elementos de convicción respectivos- los siguientes: a) el tipo de relación existente entre las partes; b) la calidad de los sujetos que intervienen en la suscripción del pagaré y si la actividad del acreedor se encuentra regulada; c) el destino o finalidad del crédito; d) el monto del crédito; e) el plazo del crédito; f) la existencia de garantías para el pago del crédito; g) las tasas de interés de las instituciones bancarias para operaciones similares a las que se analizan, cuya apreciación únicamente constituye un parámetro de referencia; h) la variación del índice condiciones del mercado; y, j) otras cuestiones que generen convicción en el juzgador. Lo anterior, sobre la base de que tales circunstancias puede apreciarlas el juzgador (solamente si de las constancias de actuaciones obra válidamente prueba de ellos) para aumentar o disminuir lo estricto de la calificación de una tasa como notoriamente excesiva; análisis que, además, debe complementarse con la evaluación del elemento subjetivo a partir de la apreciación sobre la existencia o no, de alguna situación de vulnerabilidad o desventaja del deudor en relación con el acreedor. Contradicción de tesis 350/2013. Entre las sustentadas por el Sexto Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito, el Séptimo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito y el Primer Tribunal Colegiado del Trigésimo Circuito. 19 de febrero de 2014. La votación se dividió en dos partes: mayoría de cuatro votos por lo que hace a la competencia. Disidente: José Ramón Cossío Díaz. Mayoría de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena y Olga Sánchez Cordero de García Villegas, respecto al fondo. Disidente: Jorge Mario Pardo Rebolledo, quien reservó su derecho para formular voto particular. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario: Mario Gerardo Avante Juárez. Tesis y/o criterios contendientes El Primer Tribunal Colegiado del Trigésimo Circuito, al resolver el juicio de amparo directo 193/2012, que dio origen a la tesis aislada XXX.1o.2 C (10a.) de rubro: "INTERESES MORATORIOS EN UN TÍTULO DE CRÉDITO. EL ARTÍCULO 174 DE LA LEY GENERAL DE TÍTULOS Y OPERACIONES DE CRÉDITO, QUE PERMITE SU PACTO IRRESTRICTO TRANSGREDE EL DERECHO HUMANO DE PROHIBICIÓN LEGAL DE LA USURA ESTABLECIDO EN . AMERICANA SOBRE DERECHOS HUMANOS.", publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Décima Época, Libro XI, Tomo 2, agosto de 2012, página 1735, con número de registro IUS 2001361. El Séptimo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito, al resolver el juicio de amparo directo 369/2012, que originó la tesis aislada I.7o.C.21 C (10a.), de rubro: "USURA Y CUALQUIER OTRA FORMA DE EXPLOTACIÓN DEL HOMBRE POR EL HOMBRE. EL ARTÍCULO 174 DE LA LEY GENERAL DE TÍTULOS Y OPERACIONES DE CRÉDITO SE CONTRAPONE CON LO DISPUESTO EN LOS ARTÍCULOS 1o. DE LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS Y 21 DE LA CONVENCIÓN AMERICANA SOBRE DERECHOS HUMANOS.", publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Décima Época, Libro XII, Tomo 3, septiembre de 2012, página 2091, con número de registro IUS 2001810. El Sexto Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito, al resolver el juicio de amparo directo 144/2013, en el que esencialmente sostuvo que en el sistema jurídico al que pertenece el artículo 174 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, existe una limitante a la libertad contractual en lo referente al pacto de intereses que se puede establecer en un título de crédito, de tal suerte que, la sola circunstancia de que en el mencionado precepto no se haya establecido literalmente cuáles son los parámetros que deben tenerse en cuenta para pactar los intereses, no conlleva por sí sola la inconstitucionalidad del precepto y de la misma manera, tampoco sería procedente que en un aparente control de convencionalidad ex oficio, se deje de aplicar dicho precepto. Tesis de jurisprudencia 47/2014 (10a.). Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha veintiuno de mayo de dos mil catorce. Esta tesis se publicó el viernes 27 de junio de y, por ende, se considera de aplicación obligatoria a partir del lunes 30 de junio de 2014, para los efectos previstos en el punto séptimo del Acuerdo General Plenario 19/2013. Por consiguiente, en virtud de que la parte actora en su demanda reclama además del pago de la suerte principal el pago de un 10% (diez por ciento) mensual 120% (ciento veinte por ciento) anual, por concepto de intereses moratorios vencidos y de los que se sigan venciendo hasta la total solución del presente juicio; en consecuencia, con fundamento en lo dispuesto por los artículos 1º y 133 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y el artículo 21 apartado tres, de la Convención Americana sobre Derechos Humanos que establece la prohibición de la usura así como cualquier otra forma de explotación del hombre por el hombre, por lo tanto, en estas condiciones se estima que es procedente en el presente caso ejercer "control de convencionalidad ex oficio en un modelo de control difuso de constitucionalidad", de conformidad con el artículo 1º de la Constitución General de la República sobre el contenido de los artículos 152 y 174 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, impidiendo con ello que proceda la usura pretendida por la parte actora, en perjuicio de la demandada. En este sentido, el Alto Tribunal al resolver el expediente varios 912/2010 en relación a la ejecución de la sentencia dictada por la Corte Interamericana de Derechos Humanos en el ´Caso Radilla Pacheco contra los Estados Unidos Mexicanos´-, cuyas consideraciones se vean reflejadas en la tesis de rubro: "CONTROL DE CONVENCIONALIDAD EX OFFICIO EN UN MODELO DE CONTROL DIFUSO DE CONSTITUCIONALIDAD" 1 - sostuvo que, derivado de la reforma al artículo 1º de la Carta Magna, todas las autoridades del país, dentro del ámbito de sus . derechos humanos contenidos en los instrumentos internacionales firmados por el Estado Mexicano, sino también por los derechos humanos contenidos en la Constitución Federal, adoptando la interpretación más favorable al derecho humano de que se trate, lo que se entiende en la doctrina como principio por persona. Adujo el Máximo Tribunal de la Nación, que tales mandatos deben leerse junto con lo establecido por el diverso artículo 133 del Máximo Texto Legal de la Nación, para determinar el marco dentro del que debe realizarse este control de convencionalidad, o control difuso, lo cual claramente será distinto -se dice- al control concentrado que tradicionalmente operaba en nuestro sistema jurídico. Estableció que en el ejercicio de la función jurisdiccional -como está indicado en la última parte del artículo 133 en relación con el artículo 1º- de nuestra ley fundamental, los jueces están obligados a preferir los derechos humanos contenidos en la Constitución y en los tratados internacionales, aún a pesar de las disposiciones en contrario establecidas en cualquier norma inferior o ley ordinaria. Citó que si bien, los jueces no pueden hacer una declaración general sobre la invalidez o expulsar del orden jurídico las normas que consideren contrarias a los derechos humanos contenidos en la Constitución y tratados como acontece en las vías de control directas establecidas en los artículos 103, 105 y 107 de la Constitución sí están obligados a dejar de aplicar estas normas inferiores dando preferencia a los contenidos de la Constitución y de los tratados de esta materia. La Suprema Corte de Justicia de la Nación determinó que el parámetro de análisis de este tipo de control que deberán siguiente: los derechos humanos contenidos en la Constitución Federal y la Jurisprudencia emitida por el Poder Judicial de la Federación; todos los derechos humanos contenidos en tratados internaciones en los que el Estado Mexicano sea parte 3; criterios vinculantes de la Corte Interamericana de los Derechos Humanos establecidos en las sentencias en las que el Estado mexicano haya sido parte 2, y criterios orientadores de la jurisprudencia y precedentes de la citada corte, cuando el Estado Mexicano no haya sido parte. En relación a lo anterior, es oportuno citar algunos de los criterios aislados que derivaron de la sentencia en comento, en relación con los puntos destacados: "CRITERIOS EMITIDOS POR LA CORTE INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS CUANDO EL ESTADO MEXICANO NO FUE PARTE. SON ORIENTADORES PARA LOS JUECES MEXICANOS SIEMPRE QUE SEAN MÁS FAVORABLES A LA PERSONA EN TÉRMINOS DEL ARTÍCULO 1o. DE LA CONSTITUCIÓN FEDERAL. Los criterios de la Corte Interamericana de Derechos Humanos que derivan de sentencias en donde el Estado Mexicano no intervino como parte en el litigio son orientadores para todas las decisiones de los jueces mexicanos, siempre que sean más favorables a la persona, de conformidad con el artículo 1o. constitucional. De este modo, los jueces nacionales deben observar los derechos humanos establecidos en la Constitución Mexicana y en los tratados internacionales de los que el Estado Mexicano sea parte, así como los criterios emitidos por el Poder Judicial de la Federación al interpretarlos y acudir a los criterios interpretativos de la Corte Interamericana para evaluar si existe alguno que resulte más favorable y procure una protección más amplia del . de que sean los criterios internos los que se cumplan de mejor manera con lo establecido por la Constitución en términos de su artículo 1o., lo cual tendrá que valorarse caso por caso a fin de garantizar siempre la mayor protección de los derechos humanos." Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Libro III, Diciembre de 2011, página 550, tesis P. LXVI/2011 (9ª.) Décima Época. PARÁMETRO PARA EL CONTROL DE CONVENCIONALIDAD EX OFFICIO EN MATERIA DE DERECHOS HUMANOS. El mecanismo para el control de convencionalidad ex officio en materia de derechos humanos a cargo del Poder Judicial debe ser acorde con el modelo general de control establecido constitucionalmente. El parámetro de análisis de este tipo de control que deberán ejercer todos los jueces del país, se integra de la manera siguiente: a) todos los derechos humanos contenidos en la Constitución Federal (con fundamento en los artículos 1o. y 133), así como la jurisprudencia emitida por el Poder Judicial de la Federación; b) todos los derechos humanos contenidos en tratados internacionales en los que el Estado Mexicano en tratados internacionales en los que el Estado Mexicano sea parte; c) los criterios vinculantes de la Corte Interamericana de Derechos Humanos derivados de las sentencias en las que el Estado Mexicano haya sido parte, y d) los criterios orientadores de la jurisprudencia y precedentes de la citada Corte, cuando el Estado Mexicano no haya sido parte" Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Libro III, Diciembre de 2011, página 551, tesis P. LXVIII/2011 (9ª.), Décima Época. La acogida nacional del derecho internacional de los derechos humanos se manifestó con la reforma al artículo 1º Constitucional, "Artículo 1o. En los Estados Unidos Mexicanos todas las personas gozarán de los derechos humanos reconocidos en esta Constitución y en los tratados internacionales de los que el Estado Mexicano sea parte, así como de las garantías para su protección, cuyo ejercicio no podrá restringirse ni suspenderse, salvo en los casos y bajo las condiciones que esta constitución establece.". Del numeral transcrito se obtiene que la Constitución Federal impone que las personas que se encuentren en el territorio nacional gozarán de los derechos humanos reconocidos en la Constitución y en los tratados internacionales de los que el Estado Mexicano sea parte; de ello se sigue que el Constituyente dotó de jerarquía constitucional a las normas convencionales en materia de derechos humanos. Así mismo, se puede colegir que el control de convencionalidad ex officio obliga a todas las autoridades nacionales, incluido a quien esto resuelve; sin embargo, es preciso acotar diversas hipótesis que en su ejercicio y pronunciamiento se pueden suscitar, entre otras, que este Juzgado se pronuncie oficiosamente al dictar sentencia, sobre el control de convencionalidad de una norma de derecho interno. Este órgano jurisdiccional, considera que las normas ordinarias internas aplicadas al asunto que nos ocupa, artículo 77 del Código de Comercio, en relación con los numerales 152 y 174 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, son conformes con el texto Constitucional, y por ende con la voluntad del Constituyente, es decir que la voluntad de las partes es la máxima ley de los contratos, formales e informales, siempre que las prestaciones accesorias no sean usurarios, es decir que no exista abuso del hombre contra el hombre, toda vez que es violatorio de . necesidad o error en que el ser humano se encuentre; en esa tesitura el justiciable logra la aplicación de esa norma ordinaria al caso en concreto, pero de manera justa, equilibrada y armónica con el acuerdo de voluntades licitas no así ilícitas, de lo contrario se evidencia la inconvencionalidad de la norma, esto es el resultado del estudio oficioso de control de convencionalidad en la sentencia definitiva. Puntualizado lo anterior, este juzgado estima que el interés moratorio convencional que reclama la parte actora es violatorio a los derechos humanos y fundamentales de la demandada consagrados en el artículo 21, apartado 3 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, en cuanto proscribe la usura; de ahí, conforme a los artículos 1º y 133 del Máximo Texto Legal de la Nación, el suscrito juzgador está obligado a emprender el estudio correspondiente. En este orden de ideas, es menester definir qué se entiende por usura. En su sentido gramatical, el Diccionario de la Real Academia Española refiere: Usura. (Del lat. Usura). 1. f. Interés que se lleva por el dinero o el género en el contrato de mutuo o préstamos. 2. f. Este mismo contrato. 3. f. Interés excesivo en un préstamo. 4. f. Ganancia, fruto, utilidad o aumento que se salga de algo, especialmente cuando es excesivo. De ahí que pueda válidamente definirse a la usura como el cobro de un interés excesivo en un préstamo. Precisado lo anterior, es necesario remitirnos a las normas mercantiles que regulan el pacto de réditos en caso de mora, esto es, el cobro de intereses tratándose de títulos de crédito/pagaré. Así, el artículo 362 señala que los deudores que demoren en el pago de sus deudas, deberán satisfacer, desde el día siguiente al del vencimiento, el interés que para ese caso se encuentre pactado en el documento y que a falta de estipulación, el interés será el 6% anual. Los artículos 152, fracción II y 174, párrafo segundo, de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito refieren, que el primero a la acción que se ejerce por incumplimiento de pago del documento base y determina que los intereses moratorios se fincan al tipo legal establecido para ello, a partir del día de su vencimiento y el segundo de dichos artículos se refiere a las opciones para la determinación del interés moratorio del documento y al tipo estipulado para ellos; a falta de esa estipulación, al tipo de rédito fijado en el documento, y en defecto de ambos, al tipo legal. En los actos mercantiles, ciertamente rige la voluntad contractual prevista en el artículo 78 del Código de Comercio, de aplicación supletoria conforme lo prevé el numeral 2º. de la invocada Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, por tratarse de uno de los elementos esenciales (voluntad) de las convenciones comerciales y por no existir disposición expresa en la norma especial, en el sentido de que en los contratos mercantiles cada uno se obliga en la manera y términos que aparezca que quiso obligarse. El preinvocado numeral consagra el principio pacta sunt servanda, esto es, no exige alguna formalidad o requisito para que los contratos mercantiles tengan validez, pues únicamente establece que los mismos deben cumplirse en la forma y términos que las partes quisieron obligarse; en otras palabras, lo estipulado por las . partes, en cualquier forma que se haya establecido, debe ser llevado a efecto. Empero, esa libertad contractual tiene la limitante prevista por el numeral 77 de la codificación en cita, esto es, tiene que versar sobre convenciones lícitas, como lo dispone el artículo 1830 del Código Civil del Distrito Federal, en el que se señala que "Es ilícito el hecho que es contrario a las leyes de orden público o a las buenas costumbres", pues las ilícitas no producen obligación ni acción. En ese tenor, se tiene que la voluntad de las partes en materia mercantil no es irrestricta, pues lo convenido siempre debe referirse a cuestiones lícitas, esto es, no debe contravenir disposiciones de orden público. La Convención Americana de Derechos Humanos, en su numeral 21, refiere: "Artículo 21. Derecho a la Propiedad Privada. 1. Toda persona tiene derecho al uso y goce de sus bienes. La Ley puede subordinar tal uso y goce al interés social. 2. Ninguna persona puede ser privada de sus bienes, excepto mediante el pago de indemnización justa, por razones de utilidad pública o de interés social y en los casos y según las formas establecidas por la ley. 3. Tanto la Usura como cualquier otra forma de explotación del hombre por el hombre, deben ser prohibidas por la ley" Del texto de dicho dispositivo internacional se puede apreciar que se contempla como un derecho humano a proteger, el relativo a quien no podrá ser privada de ellos salvo por subordinar su uso y goce al interés social o por razones de utilidad pública; así mismo, como norma de carácter prohibitivo, proscribe la usura por considerarla como una forma de explotación del hombre por el hombre, que indudablemente constituye una modalidad que afecta la propiedad privada a que todo ser humano tiene derecho; esto es, prohíbe su uso y práctica, como forma de protección del derecho a la propiedad privada de las personas. El numeral que se comenta establece en forma expresa un derecho a favor de una persona, que se traduce en la protección de su propiedad privada y para protegerla establece en forma concreta que la usura debe ser prohibida por la ley; por lo que esa norma protectora del derecho humano es ejecutable por sí misma, ya que se encuentra dentro de una vocación de incorporación inmediata y su aplicación en pro de la persona no puede estar condicionada a regulación legislativa o desarrollo mediante leyes reglamentarias, lo que permite su aplicación directa. Como se ve, la Convención Americana sobre Derechos Humanos - suscrita el veintidós de noviembre de mil novecientos sesenta y nueve en San José de Costa Rica, que entró en vigor el dieciocho de julio de mil novecientos setenta y ocho, de exigibilidad en México a partir del veinticuatro de marzo de mil novecientos ochenta y uno - establece en su artículo 21, inciso 3 que la usura y cualquier otra forma de explotación humana por parte otros hombres, debe ser motivo de prohibición legal. Ahora, dicha norma es de observancia obligatoria para todos los jueces nacionales y de aplicación oficiosa en virtud de lo dispuesto por el primer y tercer párrafo del artículo 1° Constitucional y, en atención al método de control de . Lo dispuesto por el artículo 21 de la Convención Americana de Derechos Humanos transcrito, se trata de un derecho fundamental más que, a la luz del numeral 1º de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, amplía el catálogo de los derechos humanos contenidos en el ordenamiento supremo del orden jurídico nacional. En ese orden de ideas, puede destacarse - en lo que interesa que:-Los artículos 152 y 174, segundo párrafo de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, no establecen límite para el pacto de intereses en caso de mora, pues la voluntad de las partes rige - en principio - para dicho acuerdo, en correlación con lo dispuesto por el numeral 78 de la codificación mercantil. - La Convención Americana sobre Derechos Humanos, proscribe la usura. De ello se obtiene que, si bien la codificación mercantil contempla la posibilidad de cobrar intereses por los préstamos basados en el principio de libre contratación; no obstante, atento al contenido de los artículos 21, inciso 3 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos y 1° de la Constitución Federal debe reconocerse la Protección al deudor frente a los abusos y la eventualidad en el cobro de intereses excesivos por constituir usura. Permitir que la voluntad de las partes esté sobre dicha disposición convencional, sería solapar actos de comercio que conculquen derechos humanos. Cabe puntualizar la siguiente interrogante a dilucidar: ¿cuándo debe considerarse que el interés es excesivo? Al respecto, el diccionario de la Real Academia Española define el exceso como medida o regla. 2. m. Cosa que sale de cualquier línea de los límites de lo ordinario o de lo lícito. De suyo entonces, se puede colegir que un interés será excesivo cuando transgreda los límites de lo ordinario o lícito. Pasos a seguir para determinar la norma positiva que servirá de parámetro para proscribir la usura en el cobro de réditos. En este tenor, para poder resolver qué norma positiva debe ser aplicable para establecer una limitación al cobro de intereses excesivos este juzgado atenderá a lo establecido por el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación en la tesis. 3. Artículo 1o. En los Estados Unidos Mexicanos todas las personas gozaran de los derechos humanos reconocidos en esta Constitución y en los tratados internacionales de los que el estado mexicano sea parte, así como de las garantías para su protección, cuyo ejercicio no podrá restringirse ni suspenderse, salvo en los casos y bajo las condiciones que esta constitución establece. Las normas relativas a los derechos humanos se interpretaran de conformidad con esta constitución y con los tratados internacionales de la materia favoreciendo en todo tiempo a las personas la protección más amplia. Todas las autoridades, en el ámbito de sus competencias, tienen la obligación de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos de conformidad con los principios de universalidad, interdependencia, indivisibilidad y progresividad. En consecuencia, el estado deberá prevenir, investigar, sancionar y reparar las violaciones a los derechos humanos, en los términos que establezca la ley. Está prohibida la esclavitud en los estados unidos mexicanos. Los esclavos del extranjero que entren al territorio nacional alcanzaran, por este solo hecho, su libertad y la protección de las . étnico o nacional, el género, la edad, las discapacidades, la condición social, las condiciones de salud, la religión, las opiniones, las preferencias sexuales, el estado civil o cualquier otra que atente contra la dignidad humana y tenga por objeto anular o menoscabar los derechos y libertades de las personas. LXIX/2011 (9ª.), localizable en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta Libro III, del mes de Diciembre de 2011, página 552, décima época, de rubro: "PASOS A SEGUIR EN EL CONTROL DE CONVENCIONALIDAD CONSTITUCIONALIDAD EX OFFICIO EN MATERIA Y DE DERECHOS HUMANOS" en donde se precisó la posibilidad de la aplicación de la interpretación conforme en sentido estricto por los jueces del país. En el criterio contenido en la tesis, se estableció que el Poder Judicial al ejercer un control de convencionalidad ex officio en materia de derechos humanos, debe realizar los siguientes pasos: a) Interpretación conforme en sentido amplio, lo que significa que los Jueces del país, al igual que todas las demás autoridades del Estado Mexicano, deben interpretar el orden jurídico a la luz y conforme a los derechos humanos establecidos en la Constitución Federal y en los tratados internacionales en los cuales el Estado Mexicano sea parte, favoreciendo en todo tiempo a las personas con la protección más amplia; b) Interpretación conforme en sentido estricto, lo que significa que cuando hay varias interpretaciones jurídicamente válidas, los Jueces deben, partiendo de la presunción de constitucionalidad de las leyes, preferir aquella que hace a la ley acorde con los derechos humanos reconocidos en la Constitución y en los tratados internacionales en los que el estado Mexicano sea parte, para evitar incidir o vulnerar el contenido esencial de estos derechos; y, c) Inaplicación de la ley cuando las alternativas anteriores no son posibles. Lo anterior no afecta o rompe con la lógica de los principios de división de poderes y de federalismo, sino que fortalece el papel de los jueces al ser el último recurso para asegurar la primacía y ampliación efectiva de los derechos humanos establecidos en la Constitución y en los tratados internacionales de los cuales el Estado Mexicano es parte. Código Penal Federal. En este orden de ideas y al tratarse la usura de un acto motivo de represión por las legislaciones penales, habrá que remitirnos a lo que sobre el particular refiere el Código Penal Federal en sus artículos 386 y 387, fracción VIII: "Artículo 386. Comete el delito de fraude el que engañando a uno o aprovechándose del error en que este se halla se hace ilícitamente de alguna cosa o alcanza un lucro indebido […]". "Artículo 387. Las mismas penas señaladas en el artículo anterior, se impondrán: […] VIII. Al que valiéndose de la ignorancia o de las malas condiciones económicas de una persona, obtenga de esta ventajas usurarias por medio de contratos o convenio en los cuales se estipulen réditos o lucros superiores a los usuales en el mercado". El punto de referencia a destacar para el caso que nos ocupa es que la indicada norma prevé como usura la estipulación de intereses superiores a los "usuales en el mercado". Entonces, para poder determinar cuándo los intereses pactados . considerarse como excesivos o desproporcionados a criterio de este juzgado y ante la ausencia de la legislación que de manera concreta así lo establezca, se debe tomar como parámetro el término medio aritmético derivado de las tasas de interés mínimas y máximas permitidas en el mercado financiero del país, puesto que aún partiendo de que es potestad de las partes pactar de manera libre la tasa de interés ordinario y aún moratorio que estimen conveniente de acuerdo al principio denominado pacta sut servanda, esa libre voluntad contractual no puede ir más allá de lo excesivo o de lo desproporcional y por lo mismo, se debe atender a las regulaciones que sobre el particular expida el Banco de México en relación a la tasa de interés mínima y a la máxima, cuya aplicación autoriza respecto al uso de las tarjetas de crédito clásicas a las diversas instituciones bancarias del país y de ahí partir para determinar un término medio aritmético entre la tasa de interés más baja y la tasa de interés más alta; ello de acuerdo a los artículos 24 y 26 de la Ley del Banco de México, que lo faculta para expedir disposiciones generales con el propósito, entre otros, de proteger los intereses del público y establece que las características de las operaciones activas, pasivas y de servicios que realicen las instituciones de crédito, se ajusten a las disposiciones del banco central . Efectivamente, es necesario precisar que -dentro de otras múltiples funciones- el Banco de México regula los sistemas de pago para las transacciones con cheque, tarjeta de débito, tarjeta de crédito y las transferencias electrónicas a fin de que sean seguros y expeditos. Así mismo, el Banco de México calcula y publica el CAT (Costo Anual Total) para que los usuarios de los servicios financieros puedan comparar el costo de los diversos productos servicios que establece restricciones sobre las comisiones que los bancos pueden cobrar a sus clientes a fin de promover la sana competencia y para proteger los intereses de los usuarios de servicios financieros. Así, para estar en condiciones de determinar si el interés constituye un acto de usura porque sobrepasa los promedios de las tasas de interés bancarias, habrá que remitirse a la información que como referencia se desprende de la consulta de los cuadros comparativos de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usurarios de Servicios Financieros 4 de las comisiones para tarjeta de crédito que para las denominadas básica -que son las de más alta tasa de interés promedio en el mercado (en comparación con las oro, platino y clásica) oscilan entre el 18.30% (tarjeta de crédito Banorte Fácil) al 89.80% (tarjeta de crédito Congelada Bancomer). Así mismo, las tasas de interés promedio los préstamos personales, van del 21.6% (Reforma S.F.P) al 93.60% (Crédito Afirme). Atendiendo a lo anterior, para poder obtener el término medio aritmético, una vez advertidas con meridiana claridad cuáles son las tasas de interés mínimas y máximas que se aplican por el uso y disposición del crédito que se otorga a los particulares y que, por una parte se ejerce a través de las mencionadas tarjetas de crédito clásicas, a la fecha en que se emite la presente sentencia, resulta de la suma de la tasa de interés más baja (18.30%) y la tasa de interés más alta (89.80%) que sumados, arroja una tasa de 108.10%, la que dividida entre dos, da como resultado una tasa de interés anual de 54.05% (cincuenta y cuatro punto cero cinco).Mientras que, tratándose de créditos personales, se obtuvo como resultado de la suma de la tasa de interés más baja (21.60%) y la tasa de interés más alta (93.60%) lo que arroja una . una tasa de interés anual de cincuenta y siete punto sesenta (57.60%). En esa directriz, en seguimiento de la interpretación conforme la tasa señalada en el penúltimo párrafo es la que, a criterio de este juzgado, es la que debe servir de parámetro, al momento de emitir la presente resolución, para determinar si un pacto de intereses ordinarios y aún moratorios, es o no usurario en perjuicio de alguna de las partes contratantes. Dichos parámetros mínimo y máximo, para obtener un término medio aritmético, como ya se indicó, son los permitidos en el mercado financiero por el Banco de México y, por lo tanto, a consideración de este juzgado, deben servir de base (aplicando el término medio aritmético indicado) para determinar si un interés (ordinario o moratorio) convencional pactado en distintas operaciones entre particulares, excede dicho límite para poder considerarlo o no, como excesivo o desproporcional. En el presente caso, se pretende el cobro de intereses moratorios convencionales a razón del ciento veinte por ciento (120%) en términos anuales, lo que equivale al quince por ciento (10%) mensual; siendo por tanto, este porcentaje el que constituye el motivo de estudio en el presente asunto. Conforme con lo anterior, un interés (ordinario o moratorio) constituye usura cuando sobrepasa el término medio aritmético de las tasas de interés mínimas y máximas usuales en los mercados financieros del país. En la especie, el término medio aritmético derivado del interés más bajo y el interés más alto, fijado de manera anual en el mercado financiero, sin prejuzgar si es o no justo, sino México para las operaciones bancarias relacionadas con las tarjetas de crédito clásicas, a la fecha de la presente sentencia, es como ya se vio, el de cincuenta y cuatro punto cinco por ciento anual (54.05%) al que se sujetan las señaladas tarjetas de crédito clásicas. Así, se puede determinar como un interés usurario la fijación de la tasa de interés moratorio anual, que se encuentra plasmada en los documentos base de la acción, puesto que ahí se pactó una tasa mensual del diez por ciento mensual (10%) y que en términos anuales es del ciento veinte por ciento (120%) porcentaje que sobrepasa en demasía la tasa de interés anual que se deriva del término medio aritmético entre la tasa más baja que es del 18.4 y de la tasa más alta consistente en el 52.5 que se fija por las instituciones financieras para la tarjeta de crédito más cara en el mercado bancario. De ahí que sea evidente que el interés pactado en el pagaré base de la acción, sobrepasa el límite permitido en el mercado financiero bancario para créditos otorgados a través de las tarjetas de crédito clásicas, aplicando en su término medio aritmético, en favor de los particulares, por lo que al existir dicho exceso, esto es, pueden ser considerados intereses excesivos o desproporcionales, ello permite considerar que existe usura en el pacto de los intereses consignado en los títulos de crédito base de la acción y, por lo tanto, atento al principio de interpretación conforme en sentido estricto que se ejerce, debe ser objeto de control de convencionalidad ex officio en un modelo de control difuso de constitucionalidad. Si bien el pronunciamiento de interpretación conforme en sentido estricto de los artículos 152 y 174 de la Ley General de Títulos y . apartado 3 de la Convención Americana de Derechos Humanos que proscribe la usura, conduce a determinar un límite para el cobro de intereses moratorios (como se ha desarrollado en párrafos que anteceden) conlleva a que, en caso de que los réditos se excedan, el juez estará en posibilidad de reducirlos a ese porcentaje, sin que pueda considerarse que ello trae como consecuencia absolver de su pago, o su reducción hasta el interés legal. Este aserto es así porque si bien del contenido del artículo 77 del Código de Comercio se advierte que las convenciones ilícitas no producen obligación ni acción, empero, no debe pasar inadvertido que la materia mercantil de que se trata, supone la existencia de una ganancia. En efecto, la tasa de interés o (tipo de interés) es el porcentaje al que está invertido un capital en una unidad de tiempo. En términos generales, a nivel individual, la tasa de interés (expresada en porcentajes) representa un balance entre el riesgo y la posible ganancia (oportunidad) de la utilización de una suma de dinero en una situación y tiempo determinado. En ese sentido, la tasa de interés es el precio del dinero, el cual se debe pagar/cobrar por tomarlo prestado/cederlo en préstamo en una situación determinada. Así, los préstamos en dinero llevan aparejado el pago de un dinero extra en concepto de intereses, lo que es lógico, pues de lo contrario ningún prestamista se desprendería de un dinero que recuperará en el futuro con riesgos y sin poder disponer de él durante la vigencia del préstamo. Por tanto, partiendo de la premisa de que primigeniamente existe materia mercantil y que, atento al control de convencionalidad ejercido, se protege el derecho humano contenido en el apartado 3, artículo 21, de la Convención Americana sobre de Derechos Humanos, al proscribir que en el cobro de intereses moratorios éstos no sean usurarios, es que este juzgado considera lo siguiente: Que si bien la parte actora amparado en los documentos base de la acción reclama en su demanda un interés del 10% (diez por ciento) mensual, lo que se traduce en un 120% (ciento veinte por ciento) anual, contrario al contenido del artículo 1° de la Carta Magna, pues dentro del ámbito de su competencia, este juzgado se encuentra obligado a aplicar la interpretación conforme en sentido estricto, ello, en aras de proscribir la usura en términos del artículo 21, apartado 3 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, a fin de velar por los derechos humanos contenidos tanto en los instrumentos internacionales firmados por el Estado Mexicano, como aquéllos contenidos en la Constitución Federal; adoptando que la interpretación más favorable al derecho humano de que se trate. La presente resolución tiene como precedente el criterio sustentado por el Séptimo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito, al resolver el juicio de amparo directo 369/2012, que originó la tesis aislada I.7o.C.21 C (10a.), de rubro: "USURA Y CUALQUIER OTRA FORMA DE EXPLOTACIÓN DEL HOMBRE POR EL HOMBRE. EL ARTÍCULO 174 DE LA LEY GENERAL DE TÍTULOS Y OPERACIONES DE CRÉDITO SE CONTRAPONE CON LO DISPUESTO EN LOS ARTÍCULOS 1o. DE LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS Y 21 DE LA CONVENCIÓN AMERICANA SOBRE DERECHOS HUMANOS.", publicada en el Semanario Judicial de . septiembre de 2012, página 2091, con número de registro IUS 2001810. El Sexto Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito, al resolver el juicio de amparo directo 144/2013, en el que esencialmente sostuvo que en el sistema jurídico al que pertenece el artículo 174 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, existe una limitante a la libertad contractual en lo referente al pacto de intereses que se puede establecer en un título de crédito, de tal suerte que, la sola circunstancia de que en el mencionado precepto no se haya establecido literalmente cuáles son los parámetros que deben tenerse en cuenta para pactar los intereses, no conlleva por sí sola la inconstitucionalidad del precepto y de la misma manera, tampoco sería procedente que en un aparente control de convencionalidad ex oficio, se deje de aplicar dicho precepto. Nota: La presente tesis abandona el criterio sostenido en la jurisprudencia 1a./J. 132/2012 (10a.) y en la tesis aislada 1a. CCLXIV/2012 (10a.), de rubros: "INTERÉS USURARIO EN MATERIA MERCANTIL. CUÁNDO DEBE CONSIDERARSE QUE EXISTE Y EN QUÉ MOMENTO PROCESAL DEBE ESTUDIARSE." e "INTERESES USURARIOS EN EL PAGARÉ. SUS CONSECUENCIAS.", que aparecen publicadas en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Décima Época, Libro XVII, Tomo 1, febrero de 2013, páginas 714 y 826, respectivamente. Tesis de jurisprudencia 46/2014 (10a.). Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha veintiuno de mayo de dos mil catorce. Esta tesis se publicó el viernes 27 de junio de 2014 a las 09:30 horas en el Semanario Judicial de la Federación y, por ende, se considera de aplicación obligatoria a partir del lunes 30 de junio de 2014, para los efectos previstos en el punto séptimo del Acuerdo General Plenario 19/2013. Razón por la cual, no ha lugar a condenar a la parte demandada al pago por concepto de los intereses moratorios al tipo pactado que le reclaman vencidos, pues, al tenor de lo establecido por el artículo 152 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, según el cual mediante el ejercicio de la acción cambiaria directa el último tenedor de un pagaré puede reclamar el pago de su importe, de los intereses pactados y de los demás gastos legítimos; resulta procedente condenar a ********, al pago de la cantidad de ******** por concepto de suerte principal, más al pago de los intereses moratorios vencidos a razón del ******** mensual, más los que se sigan venciendo hasta la total solución del presente juicio, los que se liquidarán en ejecución de sentencia; y por lo que hace a la cantidad líquida su pago deberá hacerse dentro de los CINCO días siguientes al en que cause ejecutoria esta sentencia y, para el caso de que no lo haga, deberá procederse a hacer trance y remate del(los) bien(es) embargado(s) y, con su producto, pago al acreedor, como lo dispone el artículo 1408 del Código de Comercio. Sin que sea óbice a lo anterior, el hecho de que en el auto de exeqüendo, se hubiese tenido a la parte actora por reclamando a la parte demandada el pago de intereses moratorios vencidos a razón del 10%, y que no se han liquidado", pues dicha determinación no vincula al juzgador, si lo que está facultado para resolver en la sentencia si procede o no dicha reclamación. En la inteligencia de que, para computar el ******** mencionado, se consultaron en la página www.********.org.mx. Los indicadores básicos de tarjeta de crédito, datos a junio del año dos mil quince, visibles en la página 22, tomándose como referencia la tasa de interés más baja del ******** correspondiente a ******** y la más alta del ******** correspondiente a ********, las cuales sumadas dan . ******** anual, entre doce meses que tiene el año, resulta el ******** mensual. QUINTO.- Tomando en consideración que, al tenor de la fracción III, del artículo 1084 del Código de Comercio, siempre será condenado en costas el perdidoso en un Juicio Ejecutivo, resulta procedente condenar al demandado, al pago de las costas causadas en esta Instancia. Por lo anteriormente expuesto y fundado, y con apoyo además en lo prescrito por los artículos 17 y 116, fracción III, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; 135, 140, 141, 154, 155 y 156 de la Constitución Política del Estado Independiente, Libre y Soberano de Coahuila de Zaragoza y 1° y 33 de la Ley Orgánica del Poder Judicial del Estado, es de resolverse y se resuelve: PRIMERO.- Procedió la Vía Ejecutiva Mercantil intentada y tramitada. SEGUNDO.- La parte actora el Licenciado ******** en su carácter de Endosatario en Procuración de ********, justificó los elementos constitutivos de su acción, en tanto que la parte demandada ********, no compareció a juicio; en consecuencia: TERCERO.- Se condena a la parte demandada ********, al pago de la cantidad de ******** por concepto de suerte principal, más al pago de los intereses moratorios vencidos a razón del ******** mensual, y los que se sigan venciendo hasta la total solución del presente juicio; pago que deberá hacer dentro de los cinco días siguientes al en que cause ejecutoria esta sentencia. CUARTO.- En su caso hágase trance y remate de los bienes embargados, siempre y cuando sean propiedad de la parte demandada, para con su producto, pagar al acreedor. QUINTO.- Se condena a la parte demandada al pago de las costas causadas en esta Instancia. SEXTO.- NOTIFÍQUESE.- Así, definitivamente juzgando, lo resolvió y firma el Licenciado REYNARIO PADILLA VALDEZ, Juez Segundo de Primera Instancia en Materia Mercantil de este Distrito Judicial de Saltillo, por ante la Licenciada ANA LUISA CAMPOS AMAYA, Secretaria de Acuerdo y Trámite que autoriza y da fe.- DOY FE.- - - - - - En la misma fecha se fijó el acuerdo de Ley. CONSTE.Exp. No. 1228/2015 tjgh. .