SENTENCIA DEFINITIVA No. ***/2016 Saltillo, Coahuila, a

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SENTENCIA DEFINITIVA No. ***/2016
Saltillo, Coahuila, a ********************
V I S T O S para pronunciar sentencia definitiva en
Primera Instancia dentro de los autos del expediente número
1228/2015, relativo al Juicio Ejecutivo Mercantil, promovido por
el Licenciado ********, en su carácter de Endosatario en
Procuración de ********, en contra de ********; y,
R E S U L T A N D O:
PRIMERO.- Mediante escrito de fecha ********, el
Licenciado ********, compareció ante este juzgado, con el carácter
indicado en el proemio, a demandar en la vía ejecutiva mercantil,
en ejercicio de la acción cambiaria directa, de ********, las
prestaciones especificadas en el escrito de demanda. Fundó su
acción en que; la parte demandada suscribió el documento
mercantil denominado pagare en fecha ********con fecha de
vencimiento el día ********, pactando que además en caso de
mora se causaría un interés al tipo del 10% mensual en el
documento base de la acción; que en virtud de que a esta fecha
se encuentra vencido el plazo otorgado para la liquidación del
documento
pagaré,
independientemente
de
las
gestiones
extrajudiciales hechas, aun sigue insoluto el adeudo, motivo por el
cual se vio en la necesidad de interponer la demanda; que en
fecha anterior ********, le endosó en procuración el valor del
documento base de la acción a su favor para promover el juicio
ejecutivo mercantil presente.
SEGUNDO.- Admitida la demanda, se corrió traslado de
ella a la parte demandada, quien, pese a que fue legalmente
emplazada, no se apersonó al juicio a efectuar el pago, ni a
oponerse a la ejecución, por lo que, a petición de la parte actora,
se le declaró rebelde y se tuvieron por confesados los hechos de
la demanda que se dejó de contestar y en virtud de que no
existieron
pruebas
por
desahogar
y
no
hubo
hechos
controvertidos en el presente juicio para producir alegatos, se citó
a las partes para sentencia de remate, la que hoy se pronuncia; y,
C O N S I D E R A N D O:
PRIMERO.- Que al tenor de lo establecido por el artículo
1391 del Código de Comercio, el procedimiento ejecutivo
mercantil tiene lugar cuando la demanda se funda en un(os)
documento(s) que traiga(n) aparejada ejecución; como acontece
en la especie con el (los) pagaré(s) que se acompañó(aron) a la
demanda, según se desprende de la lectura de la fracción IV, del
precepto invocado en relación con los artículos 167 y 174 de la
Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, por lo que debe
estimarse procedente la vía ejecutiva mercantil intentada.
SEGUNDO.- El (los) título(s) de crédito base de la acción
es(son) ejecutivo(s) porque contiene(n) los requisitos y menciones
a que se refieren los artículos 14, 170 y 171 de la Ley General de
Títulos y Operaciones de Crédito, toda vez que se trata del (los)
título(s) a que se refiere la fracción IV del artículo 1391 del Código
de Comercio, además de que la obligación contenida en dicho(s)
título(s) es líquida y exigible, en razón de que está comprendida
en su texto la cantidad de dinero que se reclama y por haber
vencido el(los) plazo(s) pactado(s) para su pago.
TERCERO.- El artículo 1194 del Código de Comercio
.
aplicable este principio a las acciones contenidas en el(los)
título(s) de crédito como el(los) que sirve(n) de base en el
presente litigio, el Licenciado ********, con la personalidad que
tiene reconocida en autos, se ha constreñido en el deber de
demostrar los elementos esenciales de ella.
Ahora bien, en primer término cabe señalar que es
suficiente que el titular del(los) documento(s) base de la acción
ejecutiva, lo(s) haya exhibido para tener por demostrada tanto la
existencia del crédito y su propiedad, así como la facultad para
hacerlo(s) efectivo(s) judicialmente, de conformidad al endoso en
procuración que aparece consignado en el (los) documento(s)
base de la acción, en los términos de los artículos 5o., 14, 17, 35
y 38 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito. Por
consiguiente, como la acción cambiaria directa es deducible por
falta de pago total o parcial de un pagaré, conforme a lo previsto
por los artículos 150, fracción II y 174 de la Ley General de Títulos
y Operaciones de Crédito y en virtud de que la parte demandada
fue emplazada legalmente, no compareció al juicio a oponer
excepciones y defensas, es de estimarse que el (los) título(s) base
de la acción, la(s) firma(s) que lo suscribe(n) y el hecho de no
haber sido objetado(s) por la parte contraria, se tendrá(n) por
admitido(s) y surtirá(n) sus efectos como si hubiere(n) sido
reconocido(s) expresamente, tal como lo dispone el artículo 1296
del Código de Comercio.
CUARTO.- Que advirtiéndose de autos que la parte
demandada ********, no ha cubierto el importe consignado en el
PAGARÉ base de la acción, y que el Licenciado ********, le
reclama el pago de su valor, el pago de intereses moratorios
vencidos, así como los que se sigan generando hasta la total
liquidación del presente juicio; el pago de los gastos que origine el
impone condenar a la parte demandada, con apoyo en los
artículos 152, y 174 de la Ley General de Títulos y Operaciones
de Crédito y 1408 del Código de Comercio, a pagar a la parte
actora la cantidad de ******** en concepto de suerte principal; por
lo que respecta al reclamo del pago de intereses pactado en el
pagaré base de la acción, por disposición del artículo 174 de la
Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, debe ser
estudiado de oficio el cobro excesivo de intereses, sustentándose
en el siguiente criterio jurisprudencial, que a la letra dice:- - - - - - -------------------------Época: Décima Época, Registro: 2006794, Instancia: Primera
Sala, Tipo de Tesis: Jurisprudencia, Fuente: Gaceta del
Semanario Judicial de la Federación. Libro 7, Junio de 2014,
Tomo I, Materia(s): Constitucional, Civil, Tesis: 1a./J. 46/2014
(10a.), Página: Una 400, PAGARÉ. EL ARTÍCULO 174,
PÁRRAFO SEGUNDO, DE LA LEY GENERAL DE TÍTULOS Y
OPERACIONES DE CRÉDITO, PERMITE A LAS PARTES LA
LIBRE CONVENCIÓN DE INTERESES CON LA LIMITANTE DE
QUE LOS MISMOS NO SEAN USURARIOS. INTERPRETACIÓN
CONFORME CON LA CONSTITUCIÓN [ABANDONO DE LA
JURISPRUDENCIA 1a./J. 132/2012 (10a.) Y DE LA TESIS
AISLADA 1a. CCLXIV/2012 (10a.)]. nueva reflexión sobre el tema
del interés usurario en la suscripción de un pagaré, conduce a
esta Sala a apartarse de los criterios sostenidos en las tesis 1a./J.
132/2012 (10a.), así como 1a. CCLXIV/2012 (10a.), en virtud de
que en su elaboración se equiparó el interés usurario con el
interés lesivo, lo que provocó que se estimara que los requisitos
procesales y sustantivos que rigen para hacer valer la lesión como
vicio del consentimiento, se aplicaran también para que pudiera
operar la norma constitucional consistente en que la ley debe
prohibir la usura como forma de explotación del hombre por el
.
derechos humanos respecto de los cuales el artículo 1o.
constitucional ordena que todas las autoridades, en el ámbito de
sus competencias, tienen la obligación de promover, respetar,
proteger y garantizar. Así, resulta que el artículo 21, apartado 3,
de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, prevé la
usura como una forma de explotación del hombre por el hombre,
como fenómeno contrario al derecho humano de propiedad, lo que
se considera que ocurre cuando una persona obtiene en provecho
propio y de modo abusivo sobre la propiedad de otra, un interés
excesivo derivado de un préstamo; pero además, dispone que la
ley debe prohibir la usura. Por lo anterior, esta Primera Sala
estima que el artículo 174, párrafo segundo, de la Ley General de
Títulos y Operaciones de Crédito, que prevé que en el pagaré el
rédito y los intereses que deban cubrirse se pactaran por las
partes, y sólo ante la falta de tal pacto, operará el tipo legal,
permite una interpretación conforme con la Constitución General
y, por ende, ese contenido normativo debe interpretarse en el
sentido de que la permisión de acordar intereses tiene como límite
que una parte no obtenga en provecho propio y de modo abusivo
sobre la propiedad de la otra, un interés excesivo derivado de un
préstamo; destacando que la adecuación constitucional del
precepto legal indicado, no sólo permite que los gobernados
conserven la facultad de fijar los réditos e intereses que no sean
usurarios al suscribir pagarés, sino que además, confiere al
juzgador la facultad para que, al ocuparse de analizar la litis sobre
el reclamo de intereses pactados en un pagaré y al determinar la
condena conducente (en su caso), aplique de oficio el artículo 174
indicado acorde con el contenido constitucionalmente válido de
ese precepto y a la luz de las condiciones particulares y
elementos de convicción con que se cuente en cada caso, a fin de
que el citado artículo no pueda servir de fundamento para dictar
obtenga en provecho propio y de modo abusivo sobre la
propiedad de su contrario un interés excesivo derivado de un
préstamo. Así, para el caso de que el interés pactado en el
pagaré, genere convicción en el juzgador de que es notoriamente
excesivo y usurario acorde con las circunstancias particulares del
caso y las constancias de actuaciones, aquél debe proceder de
oficio a inhibir esa condición usuraria apartándose del contenido
del interés pactado, para fijar la condena respectiva sobre una
tasa de interés reducida prudencialmente que no resulte excesiva,
mediante la apreciación de oficio y de forma razonada y motivada
de las mismas circunstancias particulares del caso y de las
constancias de actuaciones que válidamente tenga a la vista el
juzgador al momento de resolver.
Contradicción de tesis 350/2013. Suscitada entre el Sexto Tribunal
Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito, el Séptimo Tribunal
Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito y el Primer Tribunal
Colegiado del Trigésimo Circuito. 19 de febrero de 2014. La
votación se dividió en dos partes: mayoría de cuatro votos por lo
que hace a la competencia. Disidente: José Ramón Cossío Díaz.
Mayoría de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena y
Olga Sánchez Cordero de García Villegas, respecto al fondo.
Disidente: Jorge Mario Pardo Rebolledo, quien reservó su derecho
para formular voto particular. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea. Secretario: Mario Gerardo Avante Juárez. Tesis y/o
criterios
contendientes:
El
Primer
Tribunal
Colegiado
del
Trigésimo Circuito, al resolver el juicio de amparo directo
193/2012, que dio origen a la tesis aislada XXX.1o.2 C (10a.) de
rubro:
"INTERESES
MORATORIOS
EN
UN
TÍTULO
DE
CRÉDITO. EL ARTÍCULO 174 DE LA LEY GENERAL DE
TÍTULOS Y OPERACIONES DE CRÉDITO, QUE PERMITE SU
.
DE PROHIBICIÓN LEGAL DE LA USURA ESTABLECIDO EN
EL ARTÍCULO 21, NUMERAL 3, DE LA CONVENCIÓN
AMERICANA SOBRE DERECHOS HUMANOS.", publicada en el
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Décima Época,
Libro XI, Tomo 2, agosto de 2012, página 1735, con número de
registro IUS 2001361. El Séptimo Tribunal Colegiado en Materia
Civil del Primer Circuito, al resolver el juicio de amparo directo
369/2012, que originó la tesis aislada I.7o.C.21 C (10a.), de rubro:
"USURA Y CUALQUIER OTRA FORMA DE EXPLOTACIÓN
DEL HOMBRE POR EL HOMBRE. EL ARTÍCULO 174 DE LA
LEY GENERAL DE TÍTULOS Y OPERACIONES DE CRÉDITO
SE CONTRAPONE CON LO DISPUESTO EN LOS ARTÍCULOS
1o. DE LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS
UNIDOS MEXICANOS Y 21 DE LA CONVENCIÓN AMERICANA
SOBRE DERECHOS HUMANOS.", publicada en el Semanario
Judicial de la Federación y su Gaceta, Décima Época, Libro XII,
Tomo 3, septiembre de 2012, página 2091, con número de
registro IUS 2001810. El Sexto Tribunal Colegiado en Materia Civil
del Primer Circuito, al resolver el juicio de amparo directo
144/2013, en el que esencialmente sostuvo que en el sistema
jurídico al que pertenece el artículo 174 de la Ley General de
Títulos y Operaciones de Crédito, existe una limitante a la libertad
contractual en lo referente al pacto de intereses que se puede
establecer en un título de crédito, de tal suerte que, la sola
circunstancia de que en el mencionado precepto no se haya
establecido literalmente cuáles son los parámetros que deben
tenerse en cuenta para pactar los intereses, no conlleva por sí
sola la inconstitucionalidad del precepto y de la misma manera,
tampoco sería procedente que en un aparente control de
convencionalidad ex oficio, se deje de aplicar dicho precepto.Nota:
La
presente
tesis
abandona
el criterio
sostenido
en
la
CCLXIV/2012 (10a.), de rubros: "INTERÉS USURARIO EN
MATERIA MERCANTIL. CUÁNDO DEBE CONSIDERARSE QUE
EXISTE
Y
EN
QUÉ
MOMENTO
PROCESAL
DEBE
ESTUDIARSE." e "INTERESES USURARIOS EN EL PAGARÉ.
SUS CONSECUENCIAS.", que aparecen publicadas en el
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Décima Época,
Libro XVII, Tomo 1, febrero de 2013, páginas 714 y 826,
respectivamente.
Tesis
de
jurisprudencia
46/2014
(10a.).
Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de
fecha veintiuno de mayo de dos mil catorce. Esta tesis se publicó
el viernes 27 de junio de 2014 a las 09:30 horas en el Semanario
Judicial de la Federación y, por ende, se considera de aplicación
obligatoria a partir del lunes 30 de junio de 2014, para los efectos
previstos en el punto séptimo del Acuerdo General Plenario
19/2013.
Época: Décima Época, Registro: 2006795, Instancia: Primera
Sala, Tipo de Tesis: Jurisprudencia, Fuente: Gaceta del
Semanario Judicial de la Federación, Libro 7, Junio de 2014,
Tomo I, Materia(s): Constitucional, Civil, Tesis: 1a./J. 47/2014
(10a.), Página: 402, PAGARÉ. SI EL JUZGADOR ADVIERTE
QUE LA TASA DE INTERESES PACTADA CON BASE EN EL
ARTÍCULO 174, PÁRRAFO SEGUNDO, DE LA LEY GENERAL
DE
TÍTULOS
Y
OPERACIONES
DE
CRÉDITO
ES
NOTORIAMENTE USURARIA PUEDE, DE OFICIO, REDUCIRLA
PRUDENCIALMENTE. El párrafo segundo del citado precepto
permite una interpretación conforme con la Constitución Política
de los Estados Unidos Mexicanos, al prever que en el pagaré el
rédito y los intereses que deban cubrirse se pactarán por las
partes, y sólo ante la falta de tal pacto, operará el tipo legal; pues
ese contenido normativo debe interpretarse en el sentido de que
la permisión de acordar intereses no es ilimitada, sino que tiene
.
modo abusivo sobre la propiedad de la otra, un interés excesivo
derivado de un préstamo. Así, el juzgador que resuelve la litis
sobre el reclamo de intereses pactados en un pagaré, para
determinar la condena conducente (en su caso), debe aplicar de
oficio
el referido artículo
174, acorde
con
el contenido
constitucionalmente válido de ese precepto y a la luz de las
condiciones particulares y los elementos de convicción con que se
cuente en cada caso, para que dicho numeral no pueda servir de
fundamento para dictar una condena al pago de intereses
usurarios, por lo que si el juzgador adquiere convicción de oficio
de que el pacto de intereses es notoriamente usurario acorde con
las circunstancias particulares del caso y las constancias de
actuaciones, entonces debe proceder, también de oficio, a inhibir
esa condición usuraria apartándose del contenido del interés
pactado, para fijar la condena respectiva sobre una tasa de interés
reducida prudencialmente para que no resulte excesiva, mediante
la apreciación razonada, fundada y motivada, y con base en las
circunstancias particulares del caso y de las constancias de
actuaciones que válidamente tenga a la vista al momento de
resolver. Ahora bien, cabe destacar que constituyen parámetros
guía para evaluar objetivamente el carácter notoriamente excesivo
de una tasa de interés -si de las constancias de actuaciones se
aprecian los elementos de convicción respectivos- los siguientes:
a) el tipo de relación existente entre las partes; b) la calidad de los
sujetos que intervienen en la suscripción del pagaré y si la
actividad del acreedor se encuentra regulada; c) el destino o
finalidad del crédito; d) el monto del crédito; e) el plazo del crédito;
f) la existencia de garantías para el pago del crédito; g) las tasas
de interés de las instituciones bancarias para operaciones
similares a las que se analizan, cuya apreciación únicamente
constituye un parámetro de referencia; h) la variación del índice
condiciones del mercado; y, j) otras cuestiones que generen
convicción en el juzgador. Lo anterior, sobre la base de que tales
circunstancias puede apreciarlas el juzgador (solamente si de las
constancias de actuaciones obra válidamente prueba de ellos)
para aumentar o disminuir lo estricto de la calificación de una tasa
como notoriamente excesiva; análisis que, además, debe
complementarse con la evaluación del elemento subjetivo a partir
de la apreciación sobre la existencia o no, de alguna situación de
vulnerabilidad o desventaja del deudor en relación con el
acreedor.
Contradicción de tesis 350/2013. Entre las sustentadas por el
Sexto Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito, el
Séptimo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito y
el Primer Tribunal Colegiado del Trigésimo Circuito. 19 de febrero
de 2014. La votación se dividió en dos partes: mayoría de cuatro
votos por lo que hace a la competencia. Disidente: José Ramón
Cossío Díaz. Mayoría de cuatro votos de los Ministros Arturo
Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena y Olga Sánchez Cordero de García Villegas,
respecto al fondo. Disidente: Jorge Mario Pardo Rebolledo, quien
reservó su derecho para formular voto particular. Ponente: Arturo
Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario: Mario Gerardo Avante Juárez.
Tesis y/o criterios contendientes El Primer Tribunal Colegiado del
Trigésimo Circuito, al resolver el juicio de amparo directo
193/2012, que dio origen a la tesis aislada XXX.1o.2 C (10a.) de
rubro:
"INTERESES
MORATORIOS
EN
UN
TÍTULO
DE
CRÉDITO. EL ARTÍCULO 174 DE LA LEY GENERAL DE
TÍTULOS Y OPERACIONES DE CRÉDITO, QUE PERMITE SU
PACTO IRRESTRICTO TRANSGREDE EL DERECHO HUMANO
DE PROHIBICIÓN LEGAL DE LA USURA ESTABLECIDO EN
.
AMERICANA SOBRE DERECHOS HUMANOS.", publicada en el
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Décima Época,
Libro XI, Tomo 2, agosto de 2012, página 1735, con número de
registro IUS 2001361. El Séptimo Tribunal Colegiado en Materia
Civil del Primer Circuito, al resolver el juicio de amparo directo
369/2012, que originó la tesis aislada I.7o.C.21 C (10a.), de rubro:
"USURA Y CUALQUIER OTRA FORMA DE EXPLOTACIÓN
DEL HOMBRE POR EL HOMBRE. EL ARTÍCULO 174 DE LA
LEY GENERAL DE TÍTULOS Y OPERACIONES DE CRÉDITO
SE CONTRAPONE CON LO DISPUESTO EN LOS ARTÍCULOS
1o. DE LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS
UNIDOS MEXICANOS Y 21 DE LA CONVENCIÓN AMERICANA
SOBRE DERECHOS HUMANOS.", publicada en el Semanario
Judicial de la Federación y su Gaceta, Décima Época, Libro XII,
Tomo 3, septiembre de 2012, página 2091, con número de
registro IUS 2001810. El Sexto Tribunal Colegiado en Materia Civil
del Primer Circuito, al resolver el juicio de amparo directo
144/2013, en el que esencialmente sostuvo que en el sistema
jurídico al que pertenece el artículo 174 de la Ley General de
Títulos y Operaciones de Crédito, existe una limitante a la libertad
contractual en lo referente al pacto de intereses que se puede
establecer en un título de crédito, de tal suerte que, la sola
circunstancia de que en el mencionado precepto no se haya
establecido literalmente cuáles son los parámetros que deben
tenerse en cuenta para pactar los intereses, no conlleva por sí
sola la inconstitucionalidad del precepto y de la misma manera,
tampoco sería procedente que en un aparente control de
convencionalidad ex oficio, se deje de aplicar dicho precepto.
Tesis de jurisprudencia 47/2014 (10a.). Aprobada por la Primera
Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha veintiuno de mayo
de dos mil catorce. Esta tesis se publicó el viernes 27 de junio de
y, por ende, se considera de aplicación obligatoria a partir del
lunes 30 de junio de 2014, para los efectos previstos en el punto
séptimo del Acuerdo General Plenario 19/2013.
Por consiguiente, en virtud de que la parte actora en su demanda
reclama además del pago de la suerte principal el pago de un
10% (diez por ciento) mensual 120% (ciento veinte por ciento)
anual, por concepto de intereses moratorios vencidos y de los que
se sigan venciendo hasta la total solución del presente juicio; en
consecuencia, con fundamento en lo dispuesto por los artículos 1º
y 133 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos
y el artículo 21 apartado tres, de la Convención Americana sobre
Derechos Humanos que establece la prohibición de la usura así
como cualquier otra forma de explotación del hombre por el
hombre, por lo tanto, en estas condiciones se estima que es
procedente
en
el
presente
caso
ejercer
"control
de
convencionalidad ex oficio en un modelo de control difuso de
constitucionalidad", de conformidad con el artículo 1º de la
Constitución General de la República sobre el contenido de los
artículos 152 y 174 de la Ley General de Títulos y Operaciones de
Crédito, impidiendo con ello que proceda la usura pretendida por
la parte actora, en perjuicio de la demandada.
En este sentido, el Alto Tribunal al resolver el expediente varios
912/2010 en relación a la ejecución de la sentencia dictada por la
Corte Interamericana de Derechos Humanos en el ´Caso Radilla
Pacheco
contra
los
Estados
Unidos
Mexicanos´-,
cuyas
consideraciones se vean reflejadas en la tesis de rubro:
"CONTROL DE CONVENCIONALIDAD EX OFFICIO EN UN
MODELO DE CONTROL DIFUSO DE CONSTITUCIONALIDAD"
1 - sostuvo que, derivado de la reforma al artículo 1º de la Carta
Magna, todas las autoridades del país, dentro del ámbito de sus
.
derechos humanos contenidos en los instrumentos internacionales
firmados por el Estado Mexicano, sino también por los derechos
humanos contenidos en la Constitución Federal, adoptando la
interpretación más favorable al derecho humano de que se trate,
lo que se entiende en la doctrina como principio por persona.
Adujo el Máximo Tribunal de la Nación, que tales mandatos deben
leerse junto con lo establecido por el diverso artículo 133 del
Máximo Texto Legal de la Nación, para determinar el marco
dentro del que debe realizarse este control de convencionalidad, o
control difuso, lo cual claramente será distinto -se dice- al control
concentrado que tradicionalmente operaba en nuestro sistema
jurídico.
Estableció que en el ejercicio de la función jurisdiccional -como
está indicado en la última parte del artículo 133 en relación con el
artículo 1º- de nuestra ley fundamental, los jueces están obligados
a preferir los derechos humanos contenidos en la Constitución y
en los tratados internacionales, aún a pesar de las disposiciones
en contrario establecidas en cualquier norma inferior o ley
ordinaria.
Citó que si bien, los jueces no pueden hacer una declaración
general sobre la invalidez o expulsar del orden jurídico las normas
que consideren contrarias a los derechos humanos contenidos en
la Constitución y tratados como acontece en las vías de control
directas establecidas en los artículos 103, 105 y 107 de la
Constitución sí están obligados a dejar de aplicar estas normas
inferiores dando preferencia a los contenidos de la Constitución y
de los tratados de esta materia.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación determinó que el
parámetro de análisis de este tipo de control que deberán
siguiente: los derechos humanos contenidos en la Constitución
Federal y la Jurisprudencia emitida por el Poder Judicial de la
Federación; todos los derechos humanos contenidos en tratados
internaciones en los que el Estado Mexicano sea parte 3; criterios
vinculantes de la Corte Interamericana de los Derechos Humanos
establecidos en las sentencias en las que el Estado mexicano
haya sido parte 2, y criterios orientadores de la jurisprudencia y
precedentes de la citada corte, cuando el Estado Mexicano no
haya sido parte.
En relación a lo anterior, es oportuno citar algunos de los criterios
aislados que derivaron de la sentencia en comento, en relación
con los puntos destacados:
"CRITERIOS EMITIDOS POR LA CORTE INTERAMERICANA
DE DERECHOS HUMANOS CUANDO EL ESTADO MEXICANO
NO FUE PARTE. SON ORIENTADORES PARA LOS JUECES
MEXICANOS SIEMPRE QUE SEAN MÁS FAVORABLES A LA
PERSONA EN TÉRMINOS DEL ARTÍCULO 1o. DE LA
CONSTITUCIÓN
FEDERAL.
Los
criterios
de
la
Corte
Interamericana de Derechos Humanos que derivan de sentencias
en donde el Estado Mexicano no intervino como parte en el litigio
son orientadores para todas las decisiones de los jueces
mexicanos, siempre que sean más favorables a la persona, de
conformidad con el artículo 1o. constitucional. De este modo, los
jueces nacionales deben observar los derechos humanos
establecidos en la Constitución Mexicana y en los tratados
internacionales de los que el Estado Mexicano sea parte, así
como los
criterios emitidos
por
el Poder Judicial de
la
Federación al interpretarlos y acudir a los criterios interpretativos
de la Corte Interamericana para evaluar si existe alguno que
resulte más favorable y procure una protección más amplia del
.
de que sean los criterios internos los que se cumplan de mejor
manera con lo establecido por la Constitución en términos de su
artículo 1o., lo cual tendrá que valorarse caso por caso a fin de
garantizar siempre la mayor protección de los derechos
humanos." Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta,
Libro III, Diciembre de 2011, página 550, tesis P. LXVI/2011 (9ª.)
Décima Época.
PARÁMETRO PARA EL CONTROL DE CONVENCIONALIDAD
EX OFFICIO EN MATERIA DE DERECHOS HUMANOS. El
mecanismo para el control de convencionalidad ex officio en
materia de derechos humanos a cargo del Poder Judicial debe ser
acorde
con
el
modelo
general
de
control
establecido
constitucionalmente. El parámetro de análisis de este tipo de
control que deberán ejercer todos los jueces del país, se integra
de la manera siguiente: a) todos los derechos humanos
contenidos en la Constitución Federal (con fundamento en los
artículos 1o. y 133), así como la jurisprudencia emitida por el
Poder Judicial de la Federación; b) todos los derechos humanos
contenidos en tratados internacionales en los que el Estado
Mexicano en tratados internacionales en los que el Estado
Mexicano sea parte; c) los criterios vinculantes de la Corte
Interamericana
de
Derechos
Humanos
derivados
de
las
sentencias en las que el Estado Mexicano haya sido parte, y d) los
criterios orientadores de la jurisprudencia y precedentes de la
citada Corte, cuando el Estado Mexicano no haya sido parte"
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Libro III,
Diciembre de 2011, página 551, tesis P. LXVIII/2011 (9ª.), Décima
Época.
La acogida nacional del derecho internacional de los derechos
humanos se manifestó con la reforma al artículo 1º Constitucional,
"Artículo 1o. En los Estados Unidos Mexicanos todas las personas
gozarán de los derechos humanos reconocidos en esta
Constitución y en los tratados internacionales de los que el Estado
Mexicano sea parte, así como de las garantías para su protección,
cuyo ejercicio no podrá restringirse ni suspenderse, salvo en los
casos y bajo las condiciones que esta constitución establece.".
Del numeral transcrito se obtiene que la Constitución Federal
impone que las personas que se encuentren en el territorio
nacional gozarán de los derechos humanos reconocidos en la
Constitución y en los tratados internacionales de los que el Estado
Mexicano sea parte; de ello se sigue que el Constituyente dotó de
jerarquía constitucional a las normas convencionales en materia
de derechos humanos.
Así mismo, se puede colegir que el control de convencionalidad ex
officio obliga a todas las autoridades nacionales, incluido a quien
esto resuelve; sin embargo, es preciso acotar diversas hipótesis
que en su ejercicio y pronunciamiento se pueden suscitar, entre
otras, que este Juzgado se pronuncie oficiosamente al dictar
sentencia, sobre el control de convencionalidad de una norma de
derecho interno.
Este órgano jurisdiccional, considera que las normas ordinarias
internas aplicadas al asunto que nos ocupa, artículo 77 del Código
de Comercio, en relación con los numerales 152 y 174 de la Ley
General de Títulos y Operaciones de Crédito, son conformes con
el texto Constitucional, y por ende con la voluntad del
Constituyente, es decir que la voluntad de las partes es la máxima
ley de los contratos, formales e informales, siempre que las
prestaciones accesorias no sean usurarios, es decir que no exista
abuso del hombre contra el hombre, toda vez que es violatorio de
.
necesidad o error en que el ser humano se encuentre; en esa
tesitura el justiciable logra la aplicación de esa norma ordinaria al
caso en concreto, pero de manera justa, equilibrada y armónica
con el acuerdo de voluntades licitas no así ilícitas, de lo contrario
se evidencia la inconvencionalidad de la norma, esto es el
resultado del estudio oficioso de control de convencionalidad en la
sentencia definitiva.
Puntualizado lo anterior, este juzgado estima que el interés
moratorio convencional que reclama la parte actora es violatorio a
los derechos humanos y fundamentales de la demandada
consagrados en el artículo 21, apartado 3 de la Convención
Americana sobre Derechos Humanos, en cuanto proscribe la
usura; de ahí, conforme a los artículos 1º y 133 del Máximo Texto
Legal de la Nación, el suscrito juzgador está obligado a
emprender el estudio correspondiente.
En este orden de ideas, es menester definir qué se entiende por
usura.
En su sentido gramatical, el Diccionario de la Real Academia
Española refiere: Usura. (Del lat. Usura). 1. f. Interés que se lleva
por el dinero o el género en el contrato de mutuo o préstamos. 2.
f. Este mismo contrato. 3. f. Interés excesivo en un préstamo. 4. f.
Ganancia, fruto, utilidad o aumento que se salga de algo,
especialmente cuando es excesivo.
De ahí que pueda válidamente definirse a la usura como el cobro
de un interés excesivo en un préstamo.
Precisado lo anterior, es necesario remitirnos a las normas
mercantiles que regulan el pacto de réditos en caso de mora, esto
es, el cobro de intereses tratándose de títulos de crédito/pagaré.
Así, el artículo 362 señala que los deudores que demoren en el
pago de sus deudas, deberán satisfacer, desde el día siguiente al
del vencimiento, el interés que para ese caso se encuentre
pactado en el documento y que a falta de estipulación, el interés
será el 6% anual.
Los artículos 152, fracción II y 174, párrafo segundo, de la Ley
General de Títulos y Operaciones de Crédito refieren, que el
primero a la acción que se ejerce por incumplimiento de pago del
documento base y determina que los intereses moratorios se
fincan al tipo legal establecido para ello, a partir del día de su
vencimiento y el segundo de dichos artículos se refiere a las
opciones para la determinación del interés moratorio del
documento y al tipo estipulado para ellos; a falta de esa
estipulación, al tipo de rédito fijado en el documento, y en defecto
de ambos, al tipo legal.
En los actos mercantiles, ciertamente rige la voluntad contractual
prevista en el artículo 78 del Código de Comercio, de aplicación
supletoria conforme lo prevé el numeral 2º. de la invocada Ley
General de Títulos y Operaciones de Crédito, por tratarse de uno
de los elementos esenciales (voluntad) de las convenciones
comerciales y por no existir disposición expresa en la norma
especial, en el sentido de que en los contratos mercantiles cada
uno se obliga en la manera y términos que aparezca que quiso
obligarse.
El preinvocado numeral consagra el principio pacta sunt servanda,
esto es, no exige alguna formalidad o requisito para que los
contratos mercantiles tengan validez, pues únicamente establece
que los mismos deben cumplirse en la forma y términos que las
partes quisieron obligarse; en otras palabras, lo estipulado por las
.
partes, en cualquier forma que se haya establecido, debe ser
llevado a efecto.
Empero, esa libertad contractual tiene la limitante prevista por el
numeral 77 de la codificación en cita, esto es, tiene que versar
sobre convenciones lícitas, como lo dispone el artículo 1830 del
Código Civil del Distrito Federal, en el que se señala que "Es ilícito
el hecho que es contrario a las leyes de orden público o a las
buenas costumbres", pues las ilícitas no producen obligación ni
acción.
En ese tenor, se tiene que la voluntad de las partes en materia
mercantil no es irrestricta, pues lo convenido siempre debe
referirse a cuestiones lícitas, esto es, no debe contravenir
disposiciones de orden público.
La Convención Americana de Derechos Humanos, en su numeral
21, refiere:
"Artículo 21. Derecho a la Propiedad Privada.
1. Toda persona tiene derecho al uso y goce de sus bienes. La
Ley puede subordinar tal uso y goce al interés social.
2. Ninguna persona puede ser privada de sus bienes, excepto
mediante el pago de indemnización justa, por razones de utilidad
pública o de interés social y en los casos y según las formas
establecidas por la ley.
3. Tanto la Usura como cualquier otra forma de explotación del
hombre por el hombre, deben ser prohibidas por la ley"
Del texto de dicho dispositivo internacional se puede apreciar que
se contempla como un derecho humano a proteger, el relativo a
quien no podrá ser privada de ellos salvo por subordinar su uso y
goce al interés social o por razones de utilidad pública; así mismo,
como norma de carácter prohibitivo, proscribe la usura por
considerarla como una forma de explotación del hombre por el
hombre, que indudablemente constituye una modalidad que afecta
la propiedad privada a que todo ser humano tiene derecho; esto
es, prohíbe su uso y práctica, como forma de protección del
derecho a la propiedad privada de las personas.
El numeral que se comenta establece en forma expresa un
derecho a favor de una persona, que se traduce en la protección
de su propiedad privada y para protegerla establece en forma
concreta que la usura debe ser prohibida por la ley; por lo que esa
norma protectora del derecho humano es ejecutable por sí misma,
ya que se encuentra dentro de una vocación de incorporación
inmediata y su aplicación en pro de la persona no puede estar
condicionada a regulación legislativa o desarrollo mediante leyes
reglamentarias, lo que permite su aplicación directa.
Como se ve, la Convención Americana sobre Derechos Humanos
- suscrita el veintidós de noviembre de mil novecientos sesenta y
nueve en San José de Costa Rica, que entró en vigor el dieciocho
de julio de mil novecientos setenta y ocho, de exigibilidad en
México a partir del veinticuatro de marzo de mil novecientos
ochenta y uno - establece en su artículo 21, inciso 3 que la usura
y cualquier otra forma de explotación humana por parte otros
hombres, debe ser motivo de prohibición legal.
Ahora, dicha norma es de observancia obligatoria para todos los
jueces nacionales y de aplicación oficiosa en virtud de lo
dispuesto por el primer y tercer párrafo del artículo 1°
Constitucional
y,
en
atención
al
método
de
control
de
.
Lo dispuesto por el artículo 21 de la Convención Americana de
Derechos Humanos transcrito, se trata de un derecho fundamental
más que, a la luz del numeral 1º de la Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos, amplía el catálogo de los derechos
humanos contenidos en el ordenamiento supremo del orden
jurídico nacional.
En ese orden de ideas, puede destacarse - en lo que interesa que:-Los artículos 152 y 174, segundo párrafo de la Ley General
de Títulos y Operaciones de Crédito, no establecen límite para el
pacto de intereses en caso de mora, pues la voluntad de las
partes rige - en principio - para dicho acuerdo, en correlación con
lo dispuesto por el numeral 78 de la codificación mercantil.
- La Convención Americana sobre Derechos Humanos, proscribe
la usura.
De ello se obtiene que, si bien la codificación mercantil contempla
la posibilidad de cobrar intereses por los préstamos basados en el
principio de libre contratación; no obstante, atento al contenido de
los artículos 21, inciso 3 de la Convención Americana sobre
Derechos Humanos y 1° de la Constitución Federal debe
reconocerse la Protección al deudor frente a los abusos y la
eventualidad en el cobro de intereses excesivos por constituir
usura.
Permitir que la voluntad de las partes esté sobre dicha disposición
convencional, sería solapar actos de comercio que conculquen
derechos humanos.
Cabe puntualizar la siguiente interrogante a dilucidar: ¿cuándo
debe considerarse que el interés es excesivo? Al respecto, el
diccionario de la Real Academia Española define el exceso como
medida o regla. 2. m. Cosa que sale de cualquier línea de los
límites de lo ordinario o de lo lícito.
De suyo entonces, se puede colegir que un interés será excesivo
cuando transgreda los límites de lo ordinario o lícito.
Pasos a seguir para determinar la norma positiva que servirá de
parámetro para proscribir la usura en el cobro de réditos. En este
tenor, para poder resolver qué norma positiva debe ser aplicable
para establecer una limitación al cobro de intereses excesivos
este juzgado atenderá a lo establecido por el Pleno de la
Suprema Corte de Justicia de la Nación en la tesis.
3. Artículo 1o. En los Estados Unidos Mexicanos todas las
personas gozaran de los derechos humanos reconocidos en esta
Constitución y en los tratados internacionales de los que el estado
mexicano sea parte, así como de las garantías para su protección,
cuyo ejercicio no podrá restringirse ni suspenderse, salvo en los
casos y bajo las condiciones que esta constitución establece. Las
normas relativas a los derechos humanos se interpretaran de
conformidad
con
esta
constitución
y
con
los
tratados
internacionales de la materia favoreciendo en todo tiempo a las
personas la protección más amplia. Todas las autoridades, en el
ámbito de sus competencias, tienen la obligación de promover,
respetar, proteger y garantizar los derechos humanos de
conformidad con los principios de universalidad, interdependencia,
indivisibilidad y progresividad. En consecuencia, el estado deberá
prevenir, investigar, sancionar y reparar las violaciones a los
derechos humanos, en los términos que establezca la ley. Está
prohibida la esclavitud en los estados unidos mexicanos. Los
esclavos
del
extranjero
que
entren
al
territorio
nacional
alcanzaran, por este solo hecho, su libertad y la protección de las
.
étnico o nacional, el género, la edad, las discapacidades, la
condición social, las condiciones de salud, la religión, las
opiniones, las preferencias sexuales, el estado civil o cualquier
otra que atente contra la dignidad humana y tenga por objeto
anular o menoscabar los derechos y libertades de las personas.
LXIX/2011 (9ª.), localizable en el Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta Libro III, del mes de Diciembre de 2011,
página 552, décima época, de rubro: "PASOS A SEGUIR EN EL
CONTROL
DE
CONVENCIONALIDAD
CONSTITUCIONALIDAD
EX
OFFICIO
EN
MATERIA
Y
DE
DERECHOS HUMANOS" en donde se precisó la posibilidad de la
aplicación de la interpretación conforme en sentido estricto por los
jueces del país.
En el criterio contenido en la tesis, se estableció que el Poder
Judicial al ejercer un control de convencionalidad ex officio en
materia de derechos humanos, debe realizar los siguientes pasos:
a) Interpretación conforme en sentido amplio, lo que significa que
los Jueces del país, al igual que todas las demás autoridades del
Estado Mexicano, deben interpretar el orden jurídico a la luz y
conforme a los derechos humanos establecidos en la Constitución
Federal y en los tratados internacionales en los cuales el Estado
Mexicano sea parte, favoreciendo en todo tiempo a las personas
con la protección más amplia;
b) Interpretación conforme en sentido estricto, lo que significa que
cuando hay varias interpretaciones jurídicamente válidas, los
Jueces deben, partiendo de la presunción de constitucionalidad de
las leyes, preferir aquella que hace a la ley acorde con los
derechos humanos reconocidos en la Constitución y en los
tratados internacionales en los que el estado Mexicano sea parte,
para evitar incidir o vulnerar el contenido esencial de estos
derechos; y,
c) Inaplicación de la ley cuando las alternativas anteriores no son
posibles. Lo anterior no afecta o rompe con la lógica de los
principios de división de poderes y de federalismo, sino que
fortalece el papel de los jueces al ser el último recurso para
asegurar la primacía y ampliación efectiva de los derechos
humanos establecidos en la Constitución y en los tratados
internacionales de los cuales el Estado Mexicano es parte.
Código Penal Federal. En este orden de ideas y al tratarse la
usura de un acto motivo de represión por las legislaciones
penales, habrá que remitirnos a lo que sobre el particular refiere el
Código Penal Federal en sus artículos 386 y 387, fracción VIII:
"Artículo 386. Comete el delito de fraude el que engañando a uno
o aprovechándose del error en que este se halla se hace
ilícitamente de alguna cosa o alcanza un lucro indebido […]".
"Artículo 387. Las mismas penas señaladas en el artículo anterior,
se impondrán:
[…] VIII. Al que valiéndose de la ignorancia o de las malas
condiciones económicas de una persona, obtenga de esta
ventajas usurarias por medio de contratos o convenio en los
cuales se estipulen réditos o lucros superiores a los usuales en el
mercado".
El punto de referencia a destacar para el caso que nos ocupa es
que la indicada norma prevé como usura la estipulación de
intereses superiores a los "usuales en el mercado".
Entonces, para poder determinar cuándo los intereses pactados
.
considerarse como excesivos o desproporcionados a criterio de
este juzgado y ante la ausencia de la legislación que de manera
concreta así lo establezca, se debe tomar como parámetro el
término medio aritmético derivado de las tasas de interés mínimas
y máximas permitidas en el mercado financiero del país, puesto
que aún partiendo de que es potestad de las partes pactar de
manera libre la tasa de interés ordinario y aún moratorio que
estimen conveniente de acuerdo al principio denominado pacta
sut servanda, esa libre voluntad contractual no puede ir más allá
de lo excesivo o de lo desproporcional y por lo mismo, se debe
atender a las regulaciones que sobre el particular expida el Banco
de México en relación a la tasa de interés mínima y a la máxima,
cuya aplicación autoriza respecto al uso de las tarjetas de crédito
clásicas a las diversas instituciones bancarias del país y de ahí
partir para determinar un término medio aritmético entre la tasa de
interés más baja y la tasa de interés más alta; ello de acuerdo a
los artículos 24 y 26 de la Ley del Banco de México, que lo faculta
para expedir disposiciones generales con el propósito, entre otros,
de proteger los intereses del público y establece que las
características de las operaciones activas, pasivas y de servicios
que realicen las instituciones de crédito, se ajusten a las
disposiciones del banco central .
Efectivamente, es necesario precisar que -dentro de otras
múltiples funciones- el Banco de México regula los sistemas de
pago para las transacciones con cheque, tarjeta de débito, tarjeta
de crédito y las transferencias electrónicas a fin de que sean
seguros y expeditos.
Así mismo, el Banco de México calcula y publica el CAT (Costo
Anual Total) para que los usuarios de los servicios financieros
puedan comparar el costo de los diversos productos servicios que
establece restricciones sobre las comisiones que los bancos
pueden cobrar a sus clientes a fin de promover la sana
competencia y para proteger los intereses de los usuarios de
servicios financieros.
Así, para estar en condiciones de determinar si el interés
constituye un acto de usura porque sobrepasa los promedios de
las tasas de interés bancarias, habrá que remitirse a la
información que como referencia se desprende de la consulta de
los cuadros comparativos de la Comisión Nacional para la
Protección y Defensa de los Usurarios de Servicios Financieros 4
de las comisiones para tarjeta de crédito que para las
denominadas básica -que son las de más alta tasa de interés
promedio en el mercado (en comparación con las oro, platino y
clásica) oscilan entre el 18.30% (tarjeta de crédito Banorte Fácil)
al 89.80% (tarjeta de crédito Congelada Bancomer). Así mismo,
las tasas de interés promedio los préstamos personales, van del
21.6% (Reforma S.F.P) al 93.60% (Crédito Afirme).
Atendiendo a lo anterior, para poder obtener el término medio
aritmético, una vez advertidas con meridiana claridad cuáles son
las tasas de interés mínimas y máximas que se aplican por el uso
y disposición del crédito que se otorga a los particulares y que, por
una parte se ejerce a través de las mencionadas tarjetas de
crédito clásicas, a la fecha en que se emite la presente sentencia,
resulta de la suma de la tasa de interés más baja (18.30%) y la
tasa de interés más alta (89.80%) que sumados, arroja una tasa
de 108.10%, la que dividida entre dos, da como resultado una
tasa de interés anual de 54.05% (cincuenta y cuatro punto cero
cinco).Mientras que, tratándose de créditos personales, se obtuvo
como resultado de la suma de la tasa de interés más baja
(21.60%) y la tasa de interés más alta (93.60%) lo que arroja una
.
una tasa de interés anual de cincuenta y siete punto sesenta
(57.60%).
En esa directriz, en seguimiento de la interpretación conforme la
tasa señalada en el penúltimo párrafo es la que, a criterio de este
juzgado, es la que debe servir de parámetro, al momento de emitir
la presente resolución, para determinar si un pacto de intereses
ordinarios y aún moratorios, es o no usurario en perjuicio de
alguna de las partes contratantes.
Dichos parámetros mínimo y máximo, para obtener un término
medio aritmético, como ya se indicó, son los permitidos en el
mercado financiero por el Banco de México y, por lo tanto, a
consideración de este juzgado, deben servir de base (aplicando el
término medio aritmético indicado) para determinar si un interés
(ordinario
o
moratorio)
convencional
pactado
en
distintas
operaciones entre particulares, excede dicho límite para poder
considerarlo o no, como excesivo o desproporcional.
En el presente caso, se pretende el cobro de intereses moratorios
convencionales a razón del ciento veinte por ciento (120%) en
términos anuales, lo que equivale al quince por ciento (10%)
mensual; siendo por tanto, este porcentaje el que constituye el
motivo de estudio en el presente asunto.
Conforme con lo anterior, un interés (ordinario o moratorio)
constituye usura cuando sobrepasa el término medio aritmético de
las tasas de interés mínimas y máximas usuales en los mercados
financieros del país.
En la especie, el término medio aritmético derivado del interés
más bajo y el interés más alto, fijado de manera anual en el
mercado financiero, sin prejuzgar si es o no justo, sino
México para las operaciones bancarias relacionadas con las
tarjetas de crédito clásicas, a la fecha de la presente sentencia, es
como ya se vio, el de cincuenta y cuatro punto cinco por ciento
anual (54.05%) al que se sujetan las señaladas tarjetas de crédito
clásicas.
Así, se puede determinar como un interés usurario la fijación de la
tasa de interés moratorio anual, que se encuentra plasmada en
los documentos base de la acción, puesto que ahí se pactó una
tasa mensual del diez por ciento mensual (10%) y que en términos
anuales es del ciento veinte por ciento (120%) porcentaje que
sobrepasa en demasía la tasa de interés anual que se deriva del
término medio aritmético entre la tasa más baja que es del 18.4 y
de la tasa más alta consistente en el 52.5 que se fija por las
instituciones financieras para la tarjeta de crédito más cara en el
mercado bancario.
De ahí que sea evidente que el interés pactado en el pagaré base
de la acción, sobrepasa el límite permitido en el mercado
financiero bancario para créditos otorgados a través de las tarjetas
de crédito clásicas, aplicando en su término medio aritmético, en
favor de los particulares, por lo que al existir dicho exceso, esto
es,
pueden
ser
considerados
intereses
excesivos
o
desproporcionales, ello permite considerar que existe usura en el
pacto de los intereses consignado en los títulos de crédito base de
la acción y, por lo tanto, atento al principio de interpretación
conforme en sentido estricto que se ejerce, debe ser objeto de
control de convencionalidad ex officio en un modelo de control
difuso de constitucionalidad.
Si bien el pronunciamiento de interpretación conforme en sentido
estricto de los artículos 152 y 174 de la Ley General de Títulos y
.
apartado 3 de la Convención Americana de Derechos Humanos
que proscribe la usura, conduce a determinar un límite para el
cobro de intereses moratorios (como se ha desarrollado en
párrafos que anteceden) conlleva a que, en caso de que los
réditos se excedan, el juez estará en posibilidad de reducirlos a
ese porcentaje, sin que pueda considerarse que ello trae como
consecuencia absolver de su pago, o su reducción hasta el interés
legal.
Este aserto es así porque si bien del contenido del artículo 77 del
Código de Comercio se advierte que las convenciones ilícitas no
producen obligación ni acción, empero, no debe pasar inadvertido
que la materia mercantil de que se trata, supone la existencia de
una ganancia.
En efecto, la tasa de interés o (tipo de interés) es el porcentaje al
que está invertido un capital en una unidad de tiempo. En
términos generales, a nivel individual, la tasa de interés
(expresada en porcentajes) representa un balance entre el riesgo
y la posible ganancia (oportunidad) de la utilización de una suma
de dinero en una situación y tiempo determinado.
En ese sentido, la tasa de interés es el precio del dinero, el cual
se debe pagar/cobrar por tomarlo prestado/cederlo en préstamo
en una situación determinada.
Así, los préstamos en dinero llevan aparejado el pago de un
dinero extra en concepto de intereses, lo que es lógico, pues de lo
contrario ningún prestamista se desprendería de un dinero que
recuperará en el futuro con riesgos y sin poder disponer de él
durante la vigencia del préstamo.
Por tanto, partiendo de la premisa de que primigeniamente existe
materia mercantil y que, atento al control de convencionalidad
ejercido, se protege el derecho humano contenido en el apartado
3, artículo 21, de la Convención Americana sobre de Derechos
Humanos, al proscribir que en el cobro de intereses moratorios
éstos no sean usurarios, es que este juzgado considera lo
siguiente:
Que si bien la parte actora amparado en los documentos base de
la acción reclama en su demanda un interés del 10% (diez por
ciento) mensual, lo que se traduce en un 120% (ciento veinte por
ciento) anual, contrario al contenido del artículo 1° de la Carta
Magna, pues dentro del ámbito de su competencia, este juzgado
se encuentra obligado a aplicar la interpretación conforme en
sentido estricto, ello, en aras de proscribir la usura en términos del
artículo 21, apartado 3 de la Convención Americana sobre
Derechos Humanos, a fin de velar por los derechos humanos
contenidos tanto en los instrumentos internacionales firmados por
el Estado Mexicano, como aquéllos contenidos en la Constitución
Federal; adoptando que la interpretación más favorable al derecho
humano de que se trate.
La presente resolución tiene como precedente el criterio
sustentado por el Séptimo Tribunal Colegiado en Materia Civil del
Primer Circuito, al resolver el juicio de amparo directo 369/2012,
que originó la tesis aislada I.7o.C.21 C (10a.), de rubro: "USURA
Y CUALQUIER OTRA FORMA DE EXPLOTACIÓN DEL
HOMBRE POR EL HOMBRE. EL ARTÍCULO 174 DE LA LEY
GENERAL DE TÍTULOS Y OPERACIONES DE CRÉDITO SE
CONTRAPONE CON LO DISPUESTO EN LOS ARTÍCULOS 1o.
DE LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS
MEXICANOS Y 21 DE LA CONVENCIÓN AMERICANA SOBRE
DERECHOS HUMANOS.", publicada en el Semanario Judicial de
.
septiembre de 2012, página 2091, con número de registro IUS
2001810. El Sexto Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer
Circuito, al resolver el juicio de amparo directo 144/2013, en el
que esencialmente sostuvo que en el sistema jurídico al que
pertenece el artículo 174 de la Ley General de Títulos y
Operaciones de Crédito, existe una limitante a la libertad
contractual en lo referente al pacto de intereses que se puede
establecer en un título de crédito, de tal suerte que, la sola
circunstancia de que en el mencionado precepto no se haya
establecido literalmente cuáles son los parámetros que deben
tenerse en cuenta para pactar los intereses, no conlleva por sí
sola la inconstitucionalidad del precepto y de la misma manera,
tampoco sería procedente que en un aparente control de
convencionalidad ex oficio, se deje de aplicar dicho precepto.
Nota: La presente tesis abandona el criterio sostenido en la
jurisprudencia 1a./J. 132/2012 (10a.) y en la tesis aislada 1a.
CCLXIV/2012 (10a.), de rubros: "INTERÉS USURARIO EN
MATERIA MERCANTIL. CUÁNDO DEBE CONSIDERARSE QUE
EXISTE
Y
EN
QUÉ
MOMENTO
PROCESAL
DEBE
ESTUDIARSE." e "INTERESES USURARIOS EN EL PAGARÉ.
SUS CONSECUENCIAS.", que aparecen publicadas en el
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Décima Época,
Libro XVII, Tomo 1, febrero de 2013, páginas 714 y 826,
respectivamente.
Tesis
de
jurisprudencia
46/2014
(10a.).
Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de
fecha veintiuno de mayo de dos mil catorce. Esta tesis se publicó
el viernes 27 de junio de 2014 a las 09:30 horas en el Semanario
Judicial de la Federación y, por ende, se considera de aplicación
obligatoria a partir del lunes 30 de junio de 2014, para los efectos
previstos en el punto séptimo del Acuerdo General Plenario
19/2013.
Razón por la cual, no ha lugar a condenar a la parte demandada
al pago por concepto de los intereses moratorios al tipo pactado
que le reclaman vencidos, pues, al tenor de lo establecido por el
artículo 152 de la Ley General de Títulos y Operaciones de
Crédito, según el cual mediante el ejercicio de la acción cambiaria
directa el último tenedor de un pagaré puede reclamar el pago de
su importe, de los intereses pactados y de los demás gastos
legítimos; resulta procedente condenar a ********, al pago de la
cantidad de ******** por concepto de suerte principal, más al pago
de los intereses moratorios vencidos a razón del ******** mensual,
más los que se sigan venciendo hasta la total solución del
presente juicio, los que se liquidarán en ejecución de sentencia; y
por lo que hace a la cantidad líquida su pago deberá hacerse
dentro de los CINCO días siguientes al en que cause ejecutoria
esta sentencia y, para el caso de que no lo haga, deberá
procederse
a
hacer
trance
y
remate
del(los)
bien(es)
embargado(s) y, con su producto, pago al acreedor, como lo
dispone el artículo 1408 del Código de Comercio.
Sin que sea óbice a lo anterior, el hecho de que en el auto de
exeqüendo, se hubiese tenido a la parte actora por reclamando a
la parte demandada el pago de intereses moratorios vencidos a
razón del 10%, y que no se han liquidado", pues dicha
determinación no vincula al juzgador, si lo que está facultado para
resolver en la sentencia si procede o no dicha reclamación.
En la inteligencia de que, para computar el ******** mencionado,
se consultaron en la página www.********.org.mx. Los indicadores
básicos de tarjeta de crédito, datos a junio del año dos mil quince,
visibles en la página 22, tomándose como referencia la tasa de
interés más baja del ******** correspondiente a ******** y la más
alta del ******** correspondiente a ********, las cuales sumadas dan
.
******** anual, entre doce meses que tiene el año, resulta el
******** mensual.
QUINTO.- Tomando en consideración que, al tenor de la
fracción III, del artículo 1084 del Código de Comercio, siempre
será condenado en costas el perdidoso en un Juicio Ejecutivo,
resulta procedente condenar al demandado, al pago de las costas
causadas en esta Instancia.
Por lo anteriormente expuesto y fundado, y con
apoyo además en lo prescrito por los artículos 17 y 116,
fracción III, de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos; 135, 140, 141, 154, 155 y 156 de la Constitución
Política del Estado Independiente, Libre y Soberano de
Coahuila de Zaragoza y 1° y 33 de la Ley Orgánica del Poder
Judicial del Estado, es de resolverse y se resuelve:
PRIMERO.-
Procedió
la
Vía
Ejecutiva
Mercantil
intentada y tramitada.
SEGUNDO.- La parte actora el Licenciado ******** en su
carácter de Endosatario en Procuración de ********, justificó los
elementos constitutivos de su acción, en tanto que la parte
demandada ********, no compareció a juicio; en consecuencia:
TERCERO.- Se condena a la parte demandada ********,
al pago de la cantidad de ******** por concepto de suerte principal,
más al pago de los intereses moratorios vencidos a razón del
********
mensual, y los que se sigan venciendo hasta la total
solución del presente juicio; pago que deberá hacer dentro de los
cinco días siguientes al en que cause ejecutoria esta sentencia.
CUARTO.- En su caso hágase trance y remate de los
bienes embargados, siempre y cuando sean propiedad de la parte
demandada, para con su producto, pagar al acreedor.
QUINTO.- Se condena a la parte demandada al pago de
las costas causadas en esta Instancia.
SEXTO.-
NOTIFÍQUESE.-
Así,
definitivamente
juzgando, lo resolvió y firma el Licenciado REYNARIO PADILLA
VALDEZ, Juez Segundo de Primera Instancia en Materia
Mercantil de este Distrito Judicial de Saltillo, por ante la
Licenciada ANA LUISA CAMPOS AMAYA, Secretaria de
Acuerdo y Trámite que autoriza y da fe.- DOY FE.- - - - - -
En la misma fecha se fijó el acuerdo de Ley. CONSTE.Exp. No. 1228/2015 tjgh.
.
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