AMNISTÍA INTERNACIONAL Declaración pública http://web.amnesty.org/library/Index/ESLAFR250072007 Etiopía: Preocupación por los ‘‘rehenes’’ chinos y los homicidios en ataque rebelde A Amnistía Internacional le preocupa la seguridad de siete ciudadanos chinos secuestrados el 24 de abril por el Frente Nacional de Liberación de Ogadén (ONLF), grupo de oposición armada, en el este de Etiopía. Los secuestrados fueron llevados a un lugar desconocido tras atacar el ONLF una instalación de prospección petrolífera defendida por el ejército perteneciente a una empresa subsidiaria de la China Petroleum and Chemical Corporation. El ataque se produjo en Abole, distrito de Degabur, a más de 500 kilómetros al este de AddisAbeba hacia la frontera con Somalia. Otros nueve empleados civiles chinos murieron en el ataque. Puede haberse tratado de homicidios selectivos. Según los informes, también murieron 65 etíopes, aunque no está claro cuántos de ellos eran soldados que protegían las instalaciones y cuántos trabajadores civiles. Amnistía Internacional pide al Frente Nacional de Liberación de Ogadén que trate humanamente a las personas secuestradas y las ponga en libertad de forma inmediata y segura. Los siete ciudadanos chinos secuestrados han sido identificados como Li Genhai, director de producción; Xu Jianfeng, director de recursos humanos; Yang Qingwu, médico; Zhang Xiaoyu, ingeniero civil; You Jindong, jefe de material; Ke Weitao, operario de material; y Chen Wenxiang, trabajador de mantenimiento. No se conocen con certeza todos los detalles del incidente. Los secuestros y homicidios selectivos de civiles son violaciones del derecho internacional humanitario, que es de aplicación a todos los grupos armados. Información complementaria El Frente Nacional de Liberación de Ogadén lleva más de una década luchando por la autodeterminación de la zona de Ogadén, región de Etiopía cuya población es mayoritariamente de etnia somalí y que tiene su propia asamblea regional y sus partidos políticos. El Frente Nacional de Liberación de Ogadén había amenazado a las empresas petrolíferas y de gas extranjeras para que salieran de la región. El gobierno etíope calificó el ataque de ‘‘matanza’’ y acusó al gobierno eritreo de estar tras él, algo que Eritrea niega. Este país alberga y apoya al Frente Nacional de Liberación de Ogadén. La tensión entre Etiopía y Eritrea sigue siendo alta tras su guerra fronteriza de 1998-2000