“LA EVALUACIÓN DE LOS JUECES EN EL PODER JUDICIAL DE

“LA EVALUACIÓN DE LOS JUECES EN EL PODER JUDICIAL DE
GUANAJUATO”
“En la justicia no cabe demora: y el que dilata su cumplimiento, la vuelve contra
sí.”
José Marti
La evaluación puede definirse como un proceso en el que se
comprueban los resultados de una actividad, basándonos en objetivos
cuantificables.
Se
trata
de
una
herramienta
esencial
para
cualquier
organización, debido a que después del proceso evaluativo, nos encontramos
en condiciones de señalar los resultados positivos alcanzados, comprobar y
entender por qué algunas partes de la planificación no fueron tan buenas, y
analizar si la solución elegida fue la más conveniente.
El tema de la evaluación en el Poder Judicial del Estado implica
diagnosticar el funcionamiento de un determinado órgano judicial para
entonces efectuar los ajustes necesarios en afán de su mejoramiento; también
a efecto de establecer si se lograron los objetivos y se dio cumplimiento a las
tareas asignadas a los funcionarios jurisdiccionales, en afán de lograr como
objetivo general que la impartición de justicia sea acorde a los principios de
independencia judicial, imparcialidad, eficiencia, eficacia, legalidad, excelencia
profesional, honestidad invulnerable, diligencia, celeridad, honradez, veracidad,
objetividad, competencia, honorabilidad, lealtad, probidad y rectitud, que rigen
la función judicial.
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Licenciada María Beatriz Hernández Cruz, Consejera del Poder Judicial del Estado de Guanajuato.
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Además de ese objetivo genérico, esta evaluación, pretende también
objetivos concretos, tales como generar información para adoptar decisiones
respecto a la promoción, capacitación o remoción de los funcionarios judiciales,
fomentar en los funcionarios el deseo de superación profesional y personal,
brindar al funcionario información periódica y actualizada sobre su desempeño,
así como reconocer la labor meritoria de los funcionarios y detectar debilidades
en el desempeño de la función jurisdiccional.
Se trata entonces de que existan instrumentos que permitan establecer
cuando un juez ha ajustado su actuar a los principios de la función judicial,
máxime que tanto la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, la
Constitución Política del Estado de Guanajuato y la Ley Orgánica del Poder
Judicial del Estado, establecen que la impartición de justicia será expedita y se
llevará a cabo en forma pronta, completa e imparcial.
De esta forma, al estar contemplado orgánicamente, que el Consejo del
Poder Judicial de Guanajuato, tiene como atribuciones, entre otras, la de
disciplina y evaluación de los funcionarios judiciales y al ser necesario
establecer los criterios, lineamientos y procedimientos para el desempeño de
los jueces, se ha creado un Reglamento de Evaluación que comprende el año
anterior al de la evaluación y es aplicable a todos los jueces menores, de
partido, civiles, penales y para adolescentes, con carácter interino o definitivo
que hayan desempeñado la función.
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Dentro de los elementos a considerar para efectuar la evaluación,
destaca la antigüedad del juez, sus antecedentes disciplinarios, su puntualidad
y asistencia, la capacitación profesional que hubiere tenido, la oportunidad en
el dictado de autos y sentencias, la calidad de las mismas, la productividad, el
resultado de las visitas de inspección que se le hubiesen practicado, así como
la administración de los valores a su cargo.
La evaluación se realiza mediante un puntaje de 0 a 100 puntos, en el
que cada uno de los estándares referidos con antelación y otros diversos,
constituye un determinado puntaje. Así, por ejemplo, se otorgan 6 puntos a
aquél juez que haya acreditado la totalidad de los cursos que imparta el
Instituto de Formación de Servidores Públicos, siendo posible incrementar esta
calificación por los diplomados, especialidades, maestrías y doctorados
realizados. De la misma forma, se otorgan 9 puntos al juez que haya emitido la
totalidad de sentencias dentro de los plazos legales.
Destaca dentro de estos estándares de evaluación, el concerniente a la
calidad de los autos y sentencias, en el que se consideran varios factores, tales
como el número de resoluciones emitidas, modificadas, revocadas en
apelación, amparos concedidos en relación a tales resoluciones, empleándose
para tales efectos una formula aritmética que determina la asertividad de los
jueces, mediante un determinado puntaje, tratándose así de un instrumento
idóneo y objetivo para medir la calidad de las resoluciones de los jueces por
parte de los órganos superiores.
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También dentro de estos estándares destaca la llamada productividad
en el desempeño judicial, en el que se consideran las cargas de trabajo de los
distintos juzgados del Estado, durante el periodo sujeto a evaluación, que
considera el número de sentencias recibidas, diligencias practicadas, acuerdos
realizados y que constituye también un referente para establecer la puntuación.
Cabe destacar que este estándar es muy importante para medir y comparar
las cargas de trabajo de los órganos judiciales para en todo caso efectuar los
ajustes necesarios, en afán de lograr un servicio de excelencia, aunque por
otra parte pudiera no reflejar a cabalidad la aptitud del juez para el desempeño
de la función, pues el número de entradas que se tengan en el órgano
jurisdiccional al que se encuentre adscrito no depende del funcionario judicial.
Cabe destacar que de acuerdo a la Ley Orgánica del Poder Judicial, al
juez se le darán a conocer desde el inicio del cargo los criterios de evaluación
fijados, siendo que los resultados de las evaluaciones practicadas serán dados
a conocer por escrito, mediante un dictamen, otorgándose un plazo de 30 días
hábiles desde la notificación para que se hagan las manifestaciones que se
estimen procedentes, en el entendido de que las deficiencias o faltas graves
serán causa de remoción.
Es así que, grosso modo, podemos referir que el diagnóstico que el
Consejo del Poder Judicial del Estado de Guanajuato efectúa respecto a sus
jueces, con la firme intención de mejorar día a día la importantísima labor que
corresponde a la Judicatura: lograr la excelencia en la impartición de justicia.
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