LA CONTAMINACION ATMOSFÉRICA EN EL ÁREA URBANA DE GUADALAJARA, JALISCO Y SU INFLUENCIA EN INFECCIONES AGUDAS DE LAS VÍAS RESPIRATORIAS EN MENORES DE CINCO AÑOS. Hermes U. RAMÍREZ SÁNCHEZ1, María Dolores ANDRADE GARCÍA2, Miguel E. GONZÁLEZ CASTAÑEDA3 1 Instituto de Astronomía y Meteorología, 2Depto. De Geografía y Ordenación Territorial, 3Depto. De Salud Pública de la Universidad de Guadalajara, Instituto de Astronomía y Meteorología Av. Vallarta 2602. Colonia Arcos Vallarta. C.P. 44130. Guadalajara, Jalisco, México. Correo Electrónico: [email protected]. Palabras clave: Contaminación atmosférica, Infecciones agudas de las vías respiratorias, área urbana RESUMEN El problema de la contaminación atmosférica del Área Urbana de Guadalajara (AUG), esta relacionado con su desarrollo urbano, tecnológico e industrial, que ha incrementado las emisiones de contaminantes a la atmósfera. Las principales fuentes de contaminación atmosférica son el transporte (74 %), el suelo (21 %), los servicios (4.2 %) y la industria (1.1%). El objetivo del estudio es describir las correlaciones entre la concentración de contaminantes atmosféricos (CCA) y el número total de consultas por Infecciones Agudas de las Vías Respiratorias (CIAVR) del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Instituto de Seguridad Social al Servicio de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) y de la Secretaria de Salud Jalisco (SSJ) del 2000-2002 en el AUG. Se realizó un estudio ecológico para definir las correlaciones entre las modas y medias móviles mensuales del monóxido de carbono (CO), bióxido de nitrógeno (NO2), bióxido de azufre (SO2), partículas menores a 10 micras (PM10) y ozono (O3) en el AUG mediante la red de monitoreo atmosférico de la Secretaria de Medio Ambiente y Desarrollo sustentable (SEMADES) del Gobierno del Estado de Jalisco (GEJ) y el total de CIAVR en menores de cinco años en clínicas y hospitales del IMSS, ISSSTE y SSJ en el periodo del 2000-2002. Las concentraciones de NO2 y CO tienen correlación significativa con las CIAVR, mientras que el O3, PM10 y SO2 no presentan correlación significativa. Los resultados sugieren que los contaminantes NO2 y CO inciden en la salud de menores de cinco años del AUG. INTRODUCCIÓN El problema de la contaminación atmosférica del Área Urbana de Guadalajara (AUG), esta relacionado con su desarrollo urbano, tecnológico e industrial, que ha incrementado las emisiones de contaminantes a la atmósfera. Guadalajara, desde 1934, ha sido un importante centro comercial y manufacturero, lo que ha provocado de manera directa e indirecta la creciente emisión de contaminantes atmosféricos desde entonces. En un inventario realizado por SEMARNAP, se estima que las principales fuentes de contaminación atmosférica 1 del Área Metropolitana de Guadalajara son el transporte (73.5 % del total de las emisiones), el suelo (21.2 %), los servicios (4.2%) y la industria (1.1%) (GEJ, SEMARNAP 1997). En diferentes países estudios han mostrado asociaciones significativas entre los contaminantes atmosféricos monóxido de carbono (CO), bióxido de nitrógeno (NO2), bióxido de azufre (SO2), partículas menores de 10 micras (PM10), ozono (O3) y las infecciones agudas de las vías respiratorias y otras enfermedades respiratorias en niños menores de 15 años, e incluso algunos contaminantes reportados por debajo de la norma oficial resultaron que inciden en la salud de la población infantil (Ruszkiewicz et al. 1997, Osman 1997, Álvarez-Sintes 1997). El desarrollo de esta investigación se aboca en un análisis ecológico, que consiste en el estudio de las conexiones entre las variables ambientales y humanas dentro de espacios geográficos bien delimitados (Jensen 1987). El propósito del estudio es describir correlaciones entre las variables ambientales, en este caso se refiere a la contaminación atmosférica y los casos por infecciones agudas de las vías respiratorias (CIAVR) de las Unidades de Medicina Familiar y Hospitales del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), las clínicas de Medicina Familiar del Instituto de Seguridad Social al Servicio de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) y los Centros de Salud Urbanos de la Secretaría de Salud Jalisco (SSJ) del área urbana Guadalajara (AUG) en el periodo 2000-2002, relacionados en el espacio geográfico delimitado por el área de influencia trazado a partir de un radio de 2 kilómetros de cada una de las estaciones de monitoreo atmosférico. MATERIALES Y MÉTODOS La información de las CIAVR se obtuvo por medio de la Secretaria de Salud Jalisco; de las clínicas, hospitales y centros de salud urbanos del IMSS, ISSSTE y SSJ del AGU. Se trabajo con la información mensual de los años 2000, 2001 y 2002 del número total de CIAVR en menores de 5 años; de 28 Unidades de Medicina Familiar y Hospitales Generales del IMSS, 3 Clínicas de Medicina Familiar del ISSSTE y 34 Centros de Salud Urbanos de la SSJ, siendo un total de 65 unidades de atención médica. Las infecciones agudas de las vías respiratorias consideradas para el estudio correspondieron a las codificadas por la Décima Clasificación Internacional (Hernández-Cadena et al. 2000) de las Enfermedades como: rinofaringitis aguda (J00), sinusitis aguda (J01), faringitis aguda (J02), amigdalitis aguda (J03), laringitis y traqueitis aguda (J04), Laringitis obstructiva aguda y epiglotitis (J05), infecciones agudas de las vías respiratorias superiores de sitios múltiple o no especificados (J06). Así mismo; neumonía viral, no clasificada en otra parte (J12), neumonía, organismo no especificado (J18), bronquitis aguda (J20), bronquiolitis aguda (J21) consideradas infecciones agudas de las vías respiratorias inferiores. Por otro lado se trabajo la información de las modas, medias móviles y máximos mensuales de las concentraciones de los contaminantes atmosféricos (CCA) de las estaciones de monitoreo, ubicadas en el AUG en base a los datos generados por la Secretaria del Medio Ambiente para el Desarrollo Sustentable (SEMADES) del Gobierno del Estado de Jalisco (GEJ), la cual realizan mediciones 2 cada 10 minutos las 24 horas del día y los 365 días del año. En los casos donde no fue posible obtener los registros de las concentraciones, se calculó la media anual. Los parámetros medias móviles, modas y máximos fueron analizados en tablas de distribución de frecuencias y se pudo evidenciar que el valor al cual estaban expuestos con mayor frecuencia la población estudiada en sus actividades diurnas (donde desarrollan sus actividades los niños) fueron los valores representados por las modas y medias móviles mensuales, mientras que los máximos solo representaban menos del 0.2% de los datos, por lo que se consideró que no eran representativas de la variable CCA; por lo que se decidió utilizar como índice de concentración a la moda promedio y medias móviles mensuales de los contaminantes atmosféricos: CO, NO2, NOX, SO2, PM10 y O3, de las ocho estaciones de monitoreo: Las Águilas, Atemajac, Centro, Loma Dorada, Miravalle, Oblatos, Tlaquepaque y Vallarta, de la Red Automática de Monitoreo Atmosférico (RAMA) del AUG, operada por SEMADES del GEJ. Se localizaron en campo las 65 unidades de atención médica y las 8 estaciones de monitoreo atmosférico por medio de coordenadas Universal Transversa de Mercator (UTM) con un Sistema de Posicionamiento Global (GPS). En base a la ubicación de las estaciones de monitoreo se delimitó el área de estudio considerando el radio de influencia de dos km de cada una de ellas, unidos por una línea desde su parte exterior hasta cerrar el polígono en el AUG. La cartografía del AUG utilizada fueron las cartas topográficas y ortofotos F13D65 Guadalajara Oeste, F13D66 Guadalajara Este, a escala 1;50,000, actualizadas al año 1994. Procesamiento de la información Se creó el ambiente de trabajo en el programa de IDRISI© con las coordenadas extremas del AUG, así como la ubicación de las estaciones de monitoreo atmosférico y las unidades de atención médica. Se digitalizó el límite del área de estudio y las principales vías de comunicación sobre las ortofotos georeferenciadas (Fig. 1). Se aplicó la técnica de interpolación de “aproximación numérica” en la elaboración de los mapas (IDRISI©), y para ello se diseñaron bases de datos con los valores de las modas y medias móviles mensuales para cada año y para cada contaminante atmosférico, de tal forma que resultaron 216 mapas de modas mensuales y 216 mapas de medias móviles mensuales interpoladas (Fig. 2). A partir de los mapas se obtuvieron las modas y medias móviles mensuales interpoladas para cada una de las 65 unidades de atención médica por medio de un proceso realizado en IDRISI©. Dichos resultados se exportaron al programa de Excel© en bases de datos por mes y por contaminante. Se editaron los mapas de las modas mensuales y medias móviles mensuales interpoladas en el programa de ARCVIEW©, con el fin de describir tendencias de la distribución espacial de los contaminantes atmosféricos (Fig. 2). Se elaboró la base de datos en Excel©, integrada con 2324 registros con sus respectivo numero total de consultas de infecciones agudas de las vías respiratorias de las unidades de atención médica (948005 consultas) y 2324 datos 3 de los resultados de la interpolación de cada uno de los contaminantes; CO, NO2, O3, PM10 y SO2 de las 65 unidades de atención médica, del 2000 al 2002. Figura 1. Límites del área de estudio; principales vías de comunicación; ubicación de estaciones de monitoreo atmosférico, centros de salud, clínicas de medicina familiar del ISSSTE y unidades de medicina familiar y hospitales del IMSS. 4 Figura 2.Tendencias de la distribución espacial de bióxido de nitrógeno (mayo 2002). Por otro lado, se calcularon coeficientes de correlación, de determinación, regresión simple y múltiple, análisis de varianza (ANOVA) y prueba t-student de las CIAVR con CO, NO2, NOX, SO2, PM10 y O3, del 2000 al 2002. El conjunto de pruebas estadísticas permitió determinar que las correlaciones con valores de r ≥ 0.05 fueran consideradas estadísticamente significativas. RESULTADOS Comportamiento de los contaminantes atmosféricos El análisis de los máximos registrados muestra que 61 días del 2000, 46 del 2001 y 51 del 2002 rebasaron la norma para CO (11 ppm); en el caso de NO2 (0.21 ppm), los días fuera de norma fueron 18 días del 2000, 21 del 2001 y 27 del 2002. El O3 (0.11 ppm) presentó los siguientes días fuera de norma: 75 días para el 2000, 37 para el 2001 y 78 para el 2003. Las PM10 (150 mg/m3) es el contaminante que registra la máxima cantidad de días fuera de norma con 334 para el 2000, 310 para el 2001 y 311 para el 2002 (Tabla I). Finalmente el SO2 (0.13 ppm) es el que menos rebaso el máximo permitido por la norma con 4 días para el año 2000 y 2001 y 10 días para el 2002 (DOF 1993, 1994, 2000). Tabla I. Concentración máximas permisibles de contaminantes y número de días que se rebaso la norma en el área urbana de Guadalajara, 2000-2002. Valores límite Contaminante Monóxido de carbono (CO)1 Bióxido de nitrógeno (NO2)2 Ozono (O3)3 Partículas Fracción Respirable (PM10)4 Bióxido de azufre (SO2)5 2000 2001 2002 11 ppm (8 Horas) 0.21 ppm (1 Hora) 0.11 ppm (1 Hora) Exposición aguda 1 vez al año 1 vez al año 1 vez cada 3 años 61* 18 75 46* 21 37 51 27 78 150 mg/m3 (24 Horas) 1 vez al año 334** 310** 311** 0.13 ppm (24 Horas) 1 vez al año 4** 4** 10** * Los valores de CO aunque no en todos los casos se presentaron en 8 horas continúas si rebasaron en ciertos momentos de los días registrados la normatividad. ** Los valores de PM10 y SO2 aunque no en todos los se presentaron en 24 horas continuas, si rebasaron en ciertos momentos de los días registrados la normatividad 1 2 3 4 5 NOM - 021 - SSAI – 1993, NOM - 023 - SSAI – 1993, NOM - 020 - SSAI – 1993, NOM - 025 - SSAI – 1993, NOM - 022 SSAI - 1993 La distribución de los niveles de concentraciones de las modas mensuales y medias móviles mensuales interpoladas de los contaminantes atmosféricos en el AUG difieren enormemente de un contaminante a otro, debido a que algunas de las estaciones de monitoreo registran con regularidad niveles más bajos que otras, así como los diferentes tipos de contaminantes (Tabla II). 5 Tabla II. Concentración promedio de las modas de contaminantes y promedio del CIAVR en el área urbana de Guadalajara, 2000-2002. Contaminante CO NO2 O3 PM10 SO2 Infecciones respiratorias Promedio 1.170 0.025 0.010 37.892 0.007 Desviación Estándar 0.340 0.008 0.006 31.117 0.002 Valor Mínimo 0.246 0.000 0.000 2.310 0.001 Valor Máximo 3.811 0.066 0.062 499.730 0.020 408 556 3 3942 CO, NO2, O3, SO2 su unidad de medida es partes por millón (ppm) 3 PM10 su unidad de medida es microgramo por metro cúbico (Mg/m ) En lo que corresponde a la distribución de CIAVR en el AUG, fueron analizadas 948005 consultas en total, sin embargo, existe una marcada diferencia en cuanto al número de consultas, esto es; mientras en una clínica se tiene un registro de 3 consultas mensuales, en otra hasta 3942 consultas mensuales, presentando una alta dispersión con respecto al promedio (Tabla III). Tabla III. Matriz de correlaciones de contaminantes atmosféricos y las infecciones agudas de las vías respiratorias en niños menores de cinco años, del 2000 al 2002. P = significancia. CO P NO2 P O3 P PM10 P SO2 P Infecciones respiratorias 0,05 0,01 0,09 0,00 0,01 0,80 0,02 0,33 0,04 0,09 CO 0,12 0,00 -0,17 0,00 0,21 0,00 0,15 0,00 NO2 0,05 0,02 0,15 0,00 0,19 0,00 O3 -0,03 0,17 0,08 0,00 PM10 0,15 0,00 Comportamiento de los contaminantes atmosféricos con las infecciones agudas de las vías respiratorias Las correlaciones entre los contaminantes atmosféricos: CO, NO2, O3, PM10 y SO2, con el número total de CIAVR en menores de cinco años, de centros de salud urbanos, clínicas y hospitales del IMSS, ISSSTE y SSJ del 2000-2002 del AUG mostraron asociaciones estadísticamente significativas (r ≥ 0.05) para el CO con r = 0.05 y para el NO2 con r = 0.09, mientras que los contaminantes; O3, PM10 y SO2 no mostraron correlación significativa con las infecciones agudas de las vías respiratorias (Tabla III). El análisis de correlación múltiple evidenció, que la presencia de un contaminante en la atmósfera se correlaciona con la de otros; en el caso del CO muestra correlación significativa asociado con el NO2 (r = 0.12), O3 (r = -0.17), PM10 (r = 0.21) y SO2 (r = 0.15). De igual forma, el NO2 manifiesta correlación significativa con el O3 (r = 0.05), PM10 (r = 0.15) y SO2 (r = 0.19). Asimismo, el SO2 encuentra correlación significativa con el O3 (r = 0.08) y PM10 (r = 0.15). Esta sinergia provocada por la combinación de dos o más especies contaminantes podría potencializar el desarrollo de CIAVR (Tabla III). 6 DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES La exposición a los contaminantes atmosféricos representa un riesgo para la población que vive en las grandes ciudades de América Latina (Belmar et al. 1994) y el AUG no esta exenta de ello, los niños y los ancianos son la población más vulnerable y presentan mayores riesgos en su salud cuando son expuestos a contaminación atmosférica intensa. La RAMA de la AUG, permite obtener información confiable, de forma oportuna y en un formato accesible para ser trabajada en programas de computo. Previo a decidir utilizar a las modas promedio y medias móviles mensuales como variable a analizar, se analizó toda la información generada por las estaciones de monitoreo cada 10 minutos y se observó que la población se mantenía expuesta con una mayor frecuencia al valor establecido por la moda, más que al de la media aritmética. Sin embargo evaluar las correlaciones con las medias móviles mensuales mostraba resultados similares. Los resultados muestran que la frecuencia de CIAVR está directamente correlacionada con la CCA: CO y NO2, esta asociación, aunque débil, resulta significativa. Asimismo, aunque los resultados muestran que las modas promedio mensuales no rebasan la normatividad establecida, los máximos registrados si lo rebasan en los días mostrados en Tabla I; esto nos permite indicar que aunque en la mayoría del día no hay un exposición potencial de riesgo para la población a estos contaminantes, si existe durante algunas momentos de ciertos días riesgo de la población a respirar el aire con concentraciones fuera de norma, lo que puede influenciar el desarrollo CIAVR. Una debilidad de la RAMA es que la distribución de las estaciones de monitoreo atmosférico en AUG no permite obtener información de un lugar en especifico, aun tomando en consideración los dos km de radio que maneja SEMADES como área de influencia de cada estación, no obstante existen grandes zonas que no son cubiertas por el área de influencia (Fig. 1); debido a ello, se elaboraron mapas de interpolación de las modas y medias móviles mensuales de cada uno de los contaminantes atmosféricos, lo que permitió obtener información de concentraciones de cada una de las unidades de atención médica. La mayoría de los estudios sobre correlaciones entre la exposición a CCA y el número de CIAVR se han realizado en lugares que presentan CCA elevadas; sin embargo, estudios realizados en lugares con bajos niveles CCA también han encontrado asociaciones positivas (Hernández-Cadena et al. 2000). Hernández-Cadena et al. (2000) en un estudio de consultas a urgencias por enfermedades respiratorias en dos hospitales del IMSS, respecto a los niveles de contaminación del aire en Ciudad Juárez, registraron un total de 12 721 consultas en menores de 15 años por CIAVR en los servicios de urgencias. El mayor número de consultas por enfermedades respiratorias en niños se presentó en el grupo de 1 a 4 años, con aproximadamente 50% de los casos, seguido por el grupo de niños menores de un año. Las correlaciones de los contaminantes entre los monitores utilizados para estimar la exposición media diaria fluctuaron entre 0.85 y 0.99 (p<0.01) para O3, y entre 0.32 y 0.91 (p<0.05) para PM10. En el presente estudio no se encontraron correlaciones tan elevadas y significativas 7 para el O3 y PM10 por lo que es manifiesta una contradicción en el comportamiento de estos dos contaminantes con respecto a los autores mencionados. Estudios epidemiológicos demuestran que la exposición a diferentes contaminantes, incluso a niveles situados por debajo de la norma, se asocian con el deterioro de la función pulmonar y presencia de enfermedades respiratorias en niños y adolescentes. En un estudio realizado en la Habana relacionando a la contaminación atmosférica, asma bronquial e infecciones respiratorias agudas en menores de edad, se evidenció que la exposición a SO2 se asoció con un incremento en el número de visitas de urgencia por IAVR. En dicho estudio, el incremento de los niveles de CCA, especialmente de humo, se asoció con un aumento en las visitas de urgencia hospitalaria por IAVR en niños menores de 14 años de edad. Las CCA del aire (PM10 y SO2), también se asociaron con el número de visitas a urgencias. Sus resultados concluyen que el humo, el SO2 y las PM10 se asocian con el número de CIAVR; ello coincide con otros estudios, los cuales refieren un efecto adverso de los CCA sobre el sistema respiratorio del individuo. Finalmente la exposición a la mezcla de los contaminantes del aire, incrementa el riesgo de IAVR (Romero-Placeres et al. 2004). Estas dos aseveraciones coinciden con los resultados del presente estudio donde existe correlación de ciertos CCA con el número de CIAVR y los efectos sinérgicos de la presencia de varios contaminantes al mismo tiempo lo que potencializa su influencia en las IAVR. Los resultados de este estudio sugieren que los niveles permitidos en las normas internacionales no protegen a los niños del efecto adverso que producen las CCA sobre las funciones respiratorias. El estudio de la Habana, así como el presente sugieren que aun los bajos niveles de CCA en las ciudades son dañinos para el tracto respiratorio de los menores de edad, lo que se relaciona con el incremento del riesgo de padecer IAVR. Un estudio realizado por Téllez-Rojo et al. (1997) en el IMSS del suroeste del Distrito Federal, determinó la relación entre el número de CIAVR, con los niveles diarios de los principales contaminantes. Se utilizaron mediciones diarias de O3, SO2 y NO2, de la estación Pedregal de la RAMA del Distrito Federal. Durante el periodo del estudio se presentaron un total de 19 139 consultas de niños menores de 15 años por IAVR. El 74.3% de días se rebasó la norma mexicana para el O3, mientras que la norma para SO2 quedó muy lejos de alcanzarse; la norma de la Organización Mundial de la Salud para el promedio de 24 horas de NO2 es de 0.08 ppm la cual solo se rebasó tres días del año. En el presente estudio se encontraron valores diferentes a los reportados por los autores mencionados, ya que para el caso del O3 solo se presentaron 17.35% días fuera de norma durante el periodo de estudio, para el SO2 se presentaron 14 días fuera de norma durante los 3 años analizados y para el NO2 con norma de 0.21 ppm se presentaron 6% de días fuera de norma. Estos mismos autores sugieren una posible asociación entre los días con niveles altos del contaminante O3 con incrementos en el número de CIAVR. Asimismo, demuestran que los padecimientos de vías superiores presentan una tendencia creciente con incremento de O3, conforme aumenta el tiempo entre la exposición y el evento; en lo que se refiere al NO2, las asociaciones también resultaron altamente significativas; no obstante, se perdió la tendencia creciente 8 detectada para O3. Sus resultados sugieren que la exposición de los menores de 15 años al O3 y de NO2 incide significativamente sobre el número de consultas ocasionadas por motivos respiratorios en esta zona de la Ciudad de México. En el caso particular del AUG se obtuvo una influencia del NO2 sobre el número CIAVR lo que coincide con lo presentado en el suroeste de la Ciudad de México, pero difiere en el comportamiento para O3 el cual no fue significativa en este estudio. En 1948 los niveles extremadamente altos de CCA se asociaron con episodios de exceso de mortalidad en Donora, Pennsylvania, en Estados Unidos de América (EUA), al igual que en Londres, Inglaterra, en 1952 y en Mouse Valley, Bélgica, en 1930. Esos episodios se caracterizaron por elevados niveles de partículas, SO2 y mezclas. En un estudio realizado en la Ciudad de México, se observó un incremento de la mortalidad asociado de manera independiente con O3, SO2 y partículas totales en suspensión. Cuando se consideraron los tres contaminantes simultáneamente en el mismo modelo, sólo las partículas totales en suspensión se asociaron con la mortalidad (Lacasaña-Navarro et al. 1999). Aunque en el presente estudio no se presentaron, ni evaluaron la mortalidad, se confirmo que la presencia simultanea de varios contaminantes a la vez, eleva la presencia de las CIAVR. Algunos estudios hacen referencia a una relación del incremento en hospitalizaciones por enfermedad respiratoria atribuidas al CO (Ruszkiewicz et al. 1997, Osman 1997, Ocaña-Servin et al. 1991). El CO expirado por sujetos fumadores presentó una tendencia de incremento en la concentración conforme aumentaba el número diario de cigarrillos consumidos por día y el tiempo del hábito (Quezada et al. 1997). Esto ratifica la correlación significativa obtenida con esta investigación entre las CIAVR en menores de cinco años con el CO. El NO2 es otro contaminante que llama la atención, ya que ha sido relacionado significativamente con el número de CIAVR (Téllez-Rojo et al. 1997, Hernández-Garduño et al. 1991). En esta investigación se encontró una correlación significativa entre las IAVR con el NO2. Asimismo, se intentó definir la relación entre los contaminantes: O3, SO2 y PM10 con IAVR y no se encontró correlación alguna, a diferencia de otros estudios en los que si se definió correlación significativa (Téllez-Rojo et al. 1997, Romero et al. 2004, Molina et al. 2001, Cuesta et al. 2004). Este trabajo se realizó con los Sistemas de Información Geográfica (SIG), utilizando nuevas tecnologías en el tratamiento de la información y se abordo con un enfoque geográfico, desde el punto de vista de la distribución espacial de las CCA y de las IAVR, lográndose correlaciones significativas de las CIAVR con dos de los cinco contaminantes estudiados (CO, NO2) durante un periodo de tres años. En este sentido, los resultados de la presente investigación permiten tener conocimiento de que los contaminantes CO y NO2 inciden en la salud de la población y con los mapas de isoconcentraciones es posible inferir la distribución de los niveles más altos de CCA, y por ende definir las áreas expuestas y la población en riesgo del AUG (Fig. 2). Los resultados indican que todavía falta mucho por hacer: inventarios de emisiones de CCA, definir áreas con altas CCA y la población expuesta a los mismos, con el fin de aplicar programas y concretar acciones que conduzcan a disminuir los niveles de CCA. Bajo estas condiciones concluimos que: 9 1. A pesar de que los niveles de CCA se mantienen por debajo de la norma oficial: el CO y NO2 inciden en la salud de la población infantil del AUG. 2. Aunque los resultados muestran que las modas y medias móviles mensuales no rebasan la normatividad establecida, los máximos si la rebasan. Si bien, en la mayoría del día no hay un riesgo latente de exposición de la población a altas CCA, si existen algunas horas del día con concentraciones fuera de norma que representan riesgo para la población y pueden influenciar el desarrollo de IAVR. 3. Se sugiere continuar con este tipo de investigación, para evaluar de manera más precisa la influencia de contaminantes en la desarrollo de IAVR, a través de la conformación de grupos multidisciplinarios de especialistas de la salud y de calidad del aire. AGRADECIMIENTOS Se agradece la colaboración del personal de la Secretaria del Medio Ambiente para el Desarrollo Sustentable (SEMADES) del Gobierno del Estado de Jalisco por proporcionar los datos generados por la Red Automática de Monitoreo atmosférico. Asimismo, al personal del Instituto de Astronomía y Meteorología (IAM) de la Universidad de Guadalajara (U de G) por el trabajo estadístico de la información de las concentraciones de los contaminantes atmosféricos de las ocho estaciones de monitoreo de la RAMA y al departamento de Geografía de la Universidad de Guadalajara por su colaboración en el empleo de las ortofotos del área urbana de Guadalajara en formato digital. BIBLIOGRAFIA Álvarez-Sintes R, Álvarez-Sintes R, Álvarez-Castro M R, Toledo-Villa H. Asociación entre manifestaciones respiratorias atípicas y contaminantes primarios de la atmósfera. Revista Cubana Med Gen Integr 1997; 13. Belmar R, Hofmerst-Vera A, Michaels D, Moreno A R, Romieu I. Epidemiologia Ambiental. Un proyecto para América Latina y el Caribe. Organización Panamericana de la Salud 1994: p 39. Cuesta O, Wallo A, Collazo A, Arriba A, González M, Labrador R. Enfermedades respiratorias y calidad del aire en la zona de la Ribera Este de la Bahía de La Habana. 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