Vivir con la incertidumbre

Su bienestar emocional:
Vivir con la incertidumbre
por Ellen Winchell, PhD
Primavera 1995
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inMotion Spring 1995: Your Emotional Well-being: Living with Uncertainty - English Version is available in
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Cuanto más conozca una situación, mejor puede preparase para enfrentarla.
No sé respecto a usted, pero cuando yo perdí mi extremidad, el solo pensar en mi amputación
evocaba terror, ansiedad, y temor acerca de un futuro incierto. Someterse a una amputación, es
arrojarse a un mundo lleno de desconocidos. La incertidumbre que significa para su vida diaria y
su futuro perder una extremidad puede ser causa de mucha ansiedad.
La incertidumbre
Cuanto más incierta o ambigua es la situación, más angustiosa será enfrentarla. Puede ser
desconcertador no saber lo que se debe esperar en una situación específica; muchas veces se
imagina el peor resultado posible. Cuándo se pierde una extremidad, de repente uno es lanzado
a un mundo nuevo lleno de desafíos extraordinarios y experiencias primerizas. Usted se sumerge
en una multitud de situaciones desconocidas e inciertas. Su experiencia pasada puede o no
haberle preparado.
Muchas preguntas todavía no contestadas pueden surgir: ¿Qué será de mi salud? ¿Empeorarán
mis dolencias médicas? ¿Cuáles serán los efectos en mis relaciones? ¿Encontraré a alguien que
me ame? ¿Cómo será afectado mi trabajo? ¿Cómo se afectará mi vida diaria?
Distinguir entre la ansiedad y el temor
La ansiedad a menudo se percibe como una mezcla vaga de respuestas tales como malestar,
aprensión, terror, y agitación, que surgen cuando se siente que hay alguna amenaza al bienestar.
Usted puede estar incómodo y ansioso. Los sentimientos no expresados pueden contribuir al
malestar. A menudo cuando usted está ansioso, puede encontrar que su nivel de energía decrece
o sus acciones se paralizan.
El temor tiende a diferenciarse de la ansiedad en que aquel está relacionado generalmente con
una situación específica, mientras la ansiedad es más un estado difundido y generalizado. No
puede saber la causa exacta de su ansiedad, pero generalmente está enterado de la fuente de
sus temores. Cuándo usted tiene miedo encara de alguna manera el peligro que amenaza su
vivencia. La causa del temor o la ansiedad puede ser real o imaginaria. En cualquier caso, los
sentimientos y las respuestas físicas que usted experimenta son verdaderos. Fisiológicamente,
cuando siente ansiedad o temor, sus instintos de supervivencia comienzan a dar golpes y su
cuerpo reacciona con una respuesta de "lucho o huyo". Puesto que el temor está tan relacionado
con la supervivencia, es inevitable que hubiera conocido el temor muchas vez en su vida.
Respuestas a la incertidumbre
Hay muchas reacciones de la gente a la incertidumbre. Algunos lanzarán un ataque preventivo y
renunciarán a sus metas antes de tratar con las incertidumbres inherentes a su situación. Otros
revisarán sus sueños y se dirán a sí mismo que no quieren seguir las cosas que ellos desean
verdaderamente. Los otros rendirán su voluntad a una autoridad exterior, como su médico: "Lo
que usted diga, doctor. Solo dígame qué hacer. Yo no sé qué decisiones tomar". Algunas
personas pasarán por una clase de parálisis emocional cuando se sientan que viven en la tierra
de nadie sin saber qué traerá el futuro para su bienestar físico. Puede ser difícil hacer planes a
largo plazo acerca de las finanzas, las vacaciones, la jubilación, y cosas similares, y ordenar otras
prioridades cuando el futuro es tan desconocido.
Aprender a vivir con la incertidumbre
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Una de las mejores maneras de reducir la ansiedad de la incertidumbre es obtener
información. Cuanto más conozca una situación, mejor puede prepararse para enfrentarla.
El conocimiento causará que bajen los niveles de la ansiedad. Por lo tanto, haga todo lo
posible para obtener información.
Acuda a su equipo de rehabilitación: hable con su médico acerca de sus preocupaciones
de salud, y hable con su trabajador social acerca de los recursos disponibles en su
comunidad. Discuta con su fisioterapeuta, o terapeuta ocupacional, las maneras de
recuperar la fuerza y agilidad óptimas. Hable con amputados que hayan triunfado sobre
sus preocupaciones prácticas.
Después de reunir tanta información como pueda, descubrirá que todavía hay preguntas
para cuales nadie tiene la respuesta. En tales casos, cuando mayor tolerancia tenga
respecto a su incertidumbre, le será más fácil el paso del tiempo. Acepte que su futuro
inmediato traerá consigo inevitablemente muchas situaciones nuevas y esa incertidumbre
tiene que estar presente.
Viva su vida plenamente. Vivir en el presente, antes que preocuparse por un futuro
incierto, contribuye a la riqueza de su experiencia. Reorganice sus prioridades para así
tener menos remordimiento y lamentarse menos acerca de lo que pudiera haber sido. No
se preocupe de cosas pequeñas. Incorpore las técnicas de ejercicio físico y relajación en
su rutina diaria. Ayude a otros. Ofreciéndose como voluntario puede sobrepasar sus
propias dificultades y sentirse mejor acerca de si mismo. Encuentre su propio modo de
disminuir la ansiedad y gozar de la vida aún cuándo exista la incertidumbre.
En conclusión
La incertidumbre forma parte de la vida. No es razonable tratar de saber cada resultado por
adelantado. A diferencia de la lectura de una novela, usted no puede adelantarse para averiguar
lo que ocurre a los personajes a medida que el argumento vaya desenvolviéndose. La historia de
su vida se escribe según usted la viva. La incertidumbre contribuye al entusiasmo y a la ansiedad
de vivir. Reconozca que usted puede gozar todavía de su vida sin tener todas las respuestas.
Una vez que usted entienda esto, puede relajarse un poco con la certeza de una cosa: la
incertidumbre debe ser esperada.
Acerca de la autora
Elena Winchell, Ph.D., esta formada en los campos de la medicina y la psicología. Ella tiene una
amputación arriba de la rodilla. Este artículo se adaptó del libro de Elena llamado "Enfrentando la
pérdida de la extremidad: Una guía práctica para vivir con una amputación, para usted y su
familia" (Avery Publishing Group). El libro puede ser pedido por ACA. Para reimprimir este artículo
de puede obtener permiso a E. Winchell, Ph. D., 6885 Paseo Laredo, La Jolla, CA 92037.
Teléfono y fax: (619) 551-9205.
Regreso al inicio
Actualizado en : 09/07/2005
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