FOLLETO 12 APOSTOLADO

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FOLLETO 12 APOSTOLADO
FOLLETOS DEL MANUAL BÁSICO
NACIONAL
DEL M. J. V. C.
EL APOSTOLADO
1.- NOTA INTRODUCTORIA.
Estos folletos contienen el desarrollo de las pláticas tal y como vienen en el Manual
Básico. Son una opción para que el Auxiliar y/o el Asesor tengan una idea de cómo
desarrollar su plática. Habrá que adaptar algunas cosas según las circunstancias
específicas de cada grupo.
Siempre será necesario releer lo que el Manual Básico dice sobre esta plática, en especial
las págs 37-51, 83-84, 126-128 171-172. Sólo así podrán entenderse el objetivo y
contenido de este folleto.
2.- EXPLICACIÓN DE LA PLÁTICA.
A.- OBJETIVO:
El Manual Básico nos habla del objetivo de esta plática: Invitar al apostolado en la
Iglesia.
B).- JUSTIFICACIÓN:
El conocer a Jesús nos lleva necesariamente a anunciarlo y a compartir con otros este
mensaje de salvación. Es una prueba, nos dice Pablo VI, de la vitalidad de una
comunidad, cuando ésta a su vez, se convierte en misionera (cfr. E.N. 13). El mensaje de
la Jornada quedaría, pues, trunco, si no se incluye una explicación clara, aunque breve, de
lo que es el apostolado. Recordemos también que el joven necesita acción, poner en juego
sus facultades y aptitudes. Es en el trabajo concreto donde el joven va formando su
carácter y haciendo vida los criterios que ha descubierto en la Jornada. Es necesario
explicarle claramente cual es su papel en la Iglesia y lo que Cristo espera de él: que sea
"sus manos".
Finalmente, recordemos que "el joven es el mejor evangelizador del joven". Su
protagonismo en la Iglesia y la sociedad son esenciales. Debemos saber encauzar toda esa
energía juvenil al servicio del Evangelio. NOTA: A lo largo de toda la plática es
necesario, dar testimonio de qué ha significado el apostolado en la vida del expositor. Es
una plática que se presta de verdad para que sea de muchos testimonios.
C.-ENLACE:
Esta plática va íntimamente ligada a la de Iglesia, y deberán completarse mutuamente,
pues por su misma naturaleza la Iglesia es apostólica. Será bueno enfatizar el hecho de
que esta Jornada que están viviendo es un ejemplo vivo de lo que es el apostolado
juvenil. No habrá que olvidar que el joven tiene muchas ideas falsas tanto acerca de la
Iglesia como de las actividades que ésta desarrolla; que no tiene una idea clara de lo que
es el apostolado: a menudo piensa que las actividades de la Iglesia son aburridas o para
viejitos. No conoce la amplitud o alcance de las obras apostólicas. Estamos pues
introduciendo al joven a un ancho campo que a menudo desconoce totalmente. Es por eso
que una presentación teórica, si bien es necesaria, nunca será suficiente. Deberá
completarse con vivencias, testimonios, ejemplos vivos de lo que significa ser Apóstol.
También será bueno crear un espacio de diálogo y encuentro para resolver dudas, así
como ofrecer, ya desde la Jornada o inmediatamente después, en la Postjornada,
actividades concretas de apostolado bien organizadas y que estén al alcance de los
jóvenes.
3.-CONTENIDO DE ESTE FOLLETO:
El lector encontrará dos secciones en este folleto:
1.- PRIMERA SECCIÓN: un desarrollo práctico, ya dado en jornadas, pensado para los
muchachos del Movimiento. El texto de la plática viene en letra normal. Lo que viene en
negrita son los títulos del esquema del Manual Básico Nacional del M.J.V.C. (No es
necesario leerlos al dar la plática). Lo que viene en Proseantique son algunas ideas
adicionales que pueden insertarse en la plática o no, a juicio del expositor, según el
auditorio a quien se dirija. Las citas Bíblicas viene en Unicorn.
2.- SEGUNDA SECCIÓN: textos tomados del Magisterio de la Iglesia, para un estudio
más a fondo
DESARROLLO DE LA PLÁTICA
I.- Introducción.
Dios te ha llamado a participar de su Naturaleza Divina. Es decir a que sientas, pienses,
actúes, ames como Dios; no en igualdad pero sí en proporción. La Vida Nueva o la Vida
en Gracia que Jesús viene a ofrecerte es algo tan grande, que no puede quedarse en ti.
Cuando tienes una buena Noticia, tratas de comunicarlo a las personas que más quieres.
Eso mismo les pasó a los discípulos de Cristo. Son dos hechos los que ellos salieron a
proclamar por todo el mundo: la muerte y resurrección de Cristo gracias a la acción del
Espíritu Santo.
Basta leer el libro de los Hechos de los Apóstoles para confirmar que el ANUNCIO DE
LA BUENA NUEVA (Buena Noticia), gira en torna a los siguientes elementos:
 El amor de Dios.
 La salvación ofrecida por Jesús por su muerte y su resurrección.
 La Vida Nueva, o la Gracia que Dios nos ofrece por el Espíritu Santo.
Jesús anunció la salvación y los discípulos anunciaron a Jesús como quien realiza la
Salvación de los Hombres. Resultado de ese anuncio ha sido tu conversión y la
posibilidad de que puedas gozar de la Misma VIDA DE DIOS. La oportunidad de que
seas SANTO.
Después de resucitado, Jesús llamó a sus discípulos, y les envió a que predicaran esa
Buena Noticia. Los manda a predicar el Evangelio (Buena Nueva) que Él mismo les ha
enseñado.
ID POR TODO EL MUNDO Y PROCLAMAD LA BUENA NOTICIA A TODA
CRIATURA. EL QUE CREA Y SE BAUTICE, SE SALVARÁ." Mc 16, 15-16.
Date cuenta lo que Jesús hace con sus apóstoles. Les encomienda la misión por la cual
fue enviado al mundo, para que a través su predicación, las personas crean y se
conviertan, experimenten la Salvación por la muerte y resurrección de Cristo y reciban la
Gracia de Dios. Escucha la Palabra de Dios, en una parábola muy hermosa:
El Reino de los Cielos es semejante a un propietario, que salió a primera hora de la
mañana a contratar obreros para su viña. Habiéndose ajustado con los obreros en un
denario al día, los envió a su viña Salió luego hacia las nueve de la mañana, vio otros
que estaban en la plaza desocupados y les dijo: Id también vosotros a mi viña. Todavía
salió a eso de las cinco de la tarde, vio otros que estaban allí, y les dijo: ¿Por qué estáis
aquí todo el día parados? Le respondieron: Es que nadie nos ha contratado. Y él les dijo:
Id también vosotros a mi viña" (Mt 20, 1-7).
¡Pues bien, este llamado también es para ti, que has asistido a esta Jornada! Dios te llama
personalmente, has recibido de Él una misión en favor de la Iglesia y del mundo. Cristo
quiere asociarte a su misión salvadora, y saliendo de esta Jornada te va a ENVIAR. Eso
significa la palabra "Apóstol": ENVIADO. El ser Apóstol es una consecuencia directa de
nuestro ser Cristiano y de nuestro Ser Santo:
CRISTIANO=SANTO= APÓSTOL
2.- VOCACION AL APOSTOLADO.
2.1 Participación en la misión salvadora de Cristo.
Es el mismo Cristo el origen y fuente de todo apostolado. Ya que el mismo es enviado del
Padre Celestial. Con nosotros Cristo está haciendo lo siguiente:
1. Él te ha escogido, no fuiste tú quien lo escogió.
2. Te ha llamado, para que tengas vida y vida en abundancia. LA GRACIA.
3. Quiere que compartas esa Vida con tus hermanos. Que seas un apóstol de la
Buena Nueva.
Por eso el ser Cristiano te lleva a ser una Apóstol. La Vocación Cristiana, es por
naturaleza vocación al Apostolado.
2.2 Qué es el apostolado.
Jesús quiere que tú también participes de su misión salvadora. El te ha llamado y ahora al
igual que a los discípulos te envía, para proclamar las maravillas que Dios ha realizado en
favor tuyo. Ese envío es el APOSTOLADO.
La palabra "Apóstol" es de origen griego y significa literalmente "Enviado". Este envío
Jesús propiamente lo realizó a los primeros discípulos, pero por ser parte de la Iglesia tú
también participas de este envío. Podríamos definir al apostolado de la siguiente manera:
Se llama APOSTOLADO a toda la
actividad de la Iglesia (o "Cuerpo
Místico") que tiende a propagar el
Reino de Cristo por toda la tierra. Cat
Univ. 863
2.3 Nuestra vocación como apóstoles: SOMOS LAICOS
Aceptar el llamado
Por eso yo quiero invitarte a que acojas esta llamada, que no te hagas el sordo, al
contrario, que tomes parte activa, consciente y responsable en la misión de Cristo y de la
Iglesia, ¡hoy más que nunca! El mismo Juan Pablo II te invita, ahora que eres joven.
"Sientan los jóvenes que esta llamada va dirigida a ellos de manera especialísima;
recíbanla con entusiasmo y magnanimidad. El mismo Señor, en efecto, invita de nuevo a
todos los laicos, por medio de este santo Concilio, a que se le unan cada día más
íntimamente y a que, haciendo propio todo lo suyo (cf. Flp 2, 5), se asocien a su misión
salvadora; de nuevo los envía a todas las ciudades y lugares adonde El está por venir (cf.
Lc 10, 1)".
NOTA: Quizás alguno piense :"Es que no sé hacer nada, no tengo nada que ofrecer,
nunca he trabajado por la Iglesia, yo ni falta hago". Entonces, permíteme preguntarte:
¿Acaso nunca has visto a esos niños pidiendo limosna en la calle? ¿Nunca has puesto tu
mirada sobre los alcohólicos, los drogos, los traga-fuego, los niños abandonados? ¿Acaso
no tienes dos manos, dos ojos, una boca? Con todo lo que Dios te ha dado, ¿no tienes
nada que compartir? Mira también nuestros barrios: crimen, prostitución, tugurios,
injusticia... ¿Y tú no haces nada? Para comprender mejor la voluntad de Dios en nuestras
vidas, escuchemos otro pasaje muy significativo del Evangelio de San Juan:
Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el viñador. El Padre corta todos los sarmientos
improductivos y poda los que dan fruto, para que den más fruto. Vosotros ya estáis
limpios, gracias a las palabras que os he comunicado. Permaneced unidos a mí, como yo
lo estoy a vosotros. Ningún sarmiento puede producir fruto por sí mismo, sin estar unido
a la vid, y lo mismo os ocurrirá a vosotros, si no estáis unidos a mi. Yo soy la vid,
vosotros los sarmientos. El que permanece unido a mí, como yo estoy unido a él, produce
mucho fruto; porque sin mí no podéis hacer nada. El que no permanece unido a mí, es
arrojado fuera, como los sarmientos que se secan y son amontonados y arrojados al
fuego para ser quemados. Si permaneceis unidos a mí y mis palabras permanecen en
vosotros, pedid lo que queráis y lo tendréis. Mi Padre recibe gloria cuando producís
fruto en abundancia, y os manifestáis así como discípulos míos.
Como el Padre me ama a mí, así os amo yo a vosotros. Permaneced en mi amor: Pero
sólo permaneceréis en mi amor, Si obedecéis mis mandamientos, lo mismo que yo he
observado los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor. Os he dicho todo
esto para que participéis en mi gozo, y vuestro gozo sea completo. Mi mandamiento es
éste: Amaos los unos a los otros, como Yo os he amado.
Cristo afirma aquí la íntima unión que existe entre El y su Discípulos. Nos invita a
permanecer en El, pues sin El no podemos hacer nada. Asimismo, subraya nuestra
vocación a "dar fruto", para gloria de Dios Padre. Esta viña, formada por la Vid o tronco
principal (Cristo) y los Sarmientos (nosotros) constituye la Iglesia.
Todos los que pertenecemos a la Iglesia debemos cumplir con la tarea que Cristo mismo
nos ha encomendado. Dios ha escogido algunos hombres, "tomados entre los hombres",
para desempeñar las tareas sacerdotales necesarias para la santificación del Pueblo de
Dios. Otros más, hombres y mujeres, han decidido seguir a Cristo más de cerca en la vida
religiosa, en conventos y monasterios, donde se dedican a la oración"y al servicio a los
demás.
NOTA: Quizás Dios te está invitando a seguirlo en una vocación sacerdotal y/o religiosa
y, ¿porqué no? ¡Ser misionero! Yo te invito a que te abras a la voz y a la voluntad de
Dios, para que puedas darle una respuesta generosa. Cientos, sino es que miles de
jóvenes salidos de jornadas se han ido al Seminario o al convento para vivir su "4`día".
Si nunca has pensado en la vocación sacerdotal/o religiosa, yo te invito a que la tomes
en serio: ¡Necesitamos sacerdotes! Millones de seres humanos no conocen a Cristo,
sencillamente porque no hay quien se los predique. Como dice San Pablo: "Todo el que
invoque el nombre del Señor se salvará. Ahora bien, ¿cómo van a invocar a aquél en
quien no creen? ¿Y cómo van a creer en él, si no les ha sido anunciado? ¿Y cómo va a
ser anunciado, si nadie es enviado? Por eso dice la Escritura: ¡Qué hermosos son los
pies de los que anuncian buenas noticias! (Rm10 .13-15).
Por lo pronto, y si Dios no te llama por ese camino, tú ahora eres un LAICO. Y conviene
ver qué entendemos por esta palabra y lo que Dios espera de ti.
Aceptar la espiritualidad del apostolado: Ser laico
Y para esto es importante que aprendas algo muy importante: TÚ ERES LAICO. Esta
palabra hay que entenderla bien, pues en México se usa mucho en un sentido equivocado:
¨La Escuela es libre y laica", significando que no tiene religión. Pero ese no es el
significado de esta palabra.
¿QUÉ ES UN LAICO?
"Con el nombre de laicos se designan todos los fieles cristianos que, en cuanto
incorporados a Cristo por el Bautismo, integrados al Pueblo de Dios y hechos partícipes a
su modo del oficio sacerdotal, profético y real de Cristo, ejercen en la Iglesia y en el
mundo la misión de todo el pueblo cristiano en la parte que a ellos les corresponde ".LC
14.
Si retomamos la imagen bíblica de la viña, los fieles laicos somos los sarmientos
radicados en Cristo, la verdadera vid. Por la Gracia de Dios hemos sido convertidos por
Él en una realidad viva y vivificante.
Por esta inserción en Cristo por medio de la fe y de los sacramentos de la iniciación
cristiana, es decir, por medio de la Gracia, pasamos a ser auténticos Cristianos, Santos
por vocación. Creaturas nuevas.
Eso es un laico: UN MIEMBRO VIVO DE LA IGLESIA.
Ya Pío XII decía: "Los fieles, y más precisamente los laicos, se encuentran en la línea
más avanzada de la vida de la Iglesia; por ellos la Iglesia es el principio vital de la
sociedad humana. Por tanto ellos, ellos especialmente, deben tener conciencia, cada vez
más clara, no sólo de pertenecer a la Iglesia, sino de ser la Iglesia; es decir, la comunidad
de los fieles sobre la tierra bajo la guía del Jefe común, el Papa, y de los Obispos en
comunión con él. Ellos son la Iglesia (...)"
Desde tu Bautismo, pero más ahora que tienes una nueva comprensión de tu vocación, tu
eres la Iglesia, eres miembro del Cuerpo de Cristo, y por lo tanto participas de la TRIPLE
MISIÓN DE CRISTO. Ya el Padre nos hablaba ayer de cómo nos convertimos en HIJOS
DEL PADRE, HERMANOS DE CRISTO TEMPLOS DEL ESPIRITU SANTO. Y todo
esto a partir de nuestro Bautismo, donde Dios nos da Su Gracia y nos incorpora a Su
Iglesia. Y si estamos incorporados a Cristo, también estamos incorporados a su misión
salvadora. Esto significa que tú y yo, al igual que Cristo, somos
SACERDOTES
PROFETAS
REYeS
Escucha lo que te dice la Palabra de Dios en la 1ª carta de San Pedro (1 Pe 2,4-5. 9)
"Acercándoos a El, piedra viva rechazada por los hombres, pero elegida y preciosa ante
Dios, también vosotros, cual piedras vivas, sois utilizados en la construcción de un
edificio espiritual, para un sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales,
aceptos a Dios por mediación de Jesucristo"
Cristo es la Piedra Angular, San Pedro es el fundamento, y todos nosotros somos las
piedras vivas que formamos la Iglesia.: El Concilio Vaticano II nos ha recordado el
misterio de esta potestad y el hecho de que la misión de Cristo-Sacerdote, ProfetaMaestro, Rey--continúa en la Iglesia. Todos, todo el Pueblo de Dios es partícipe de esta
triple misión
Te apuesto que esto no lo sabías, pero es cierto: Tú eres, en primer lugar:
SACERDOTE:
Así como Cristo se ofreció en la Cruz y se ofrece continuamente en la Eucaristía, tú estás
unido a El en todas tus actividades. Escucha lo que nos dice la Iglesia en el documento
"Lumen Gentium":
Los fieles laicos participan en el oficio sacerdotal, por el que Jesús se ha ofrecido a sí
mismo en la Cruz y se ofrece continuamente en la celebración eucarística por la salvación
de la humanidad para gloria del Padre. Incorporados a Jesucristo, los bautizados están
unidos a El y a su sacrificio en el ofrecimiento de sí mismos y de todas sus actividades
(cf. Rm 12, 1-2).
En segundo lugar eres
PROFETA
La participación en el oficio profético de Cristo, "que proclamó el Reino del Padre con el
testimonio de la vida y con el poder de la palabra", habilita y compromete a los fieles
laicos a acoger con fe el Evangelio y a anunciarlo con la palabra y con las obras, sin
vacilar en denunciar el mal con valentía. Unidos a Cristo, el gran Profeta " (Lc 7, 16), y
constituidos en el Espíritu y testigos " de Cristo Resucitado, los fieles laicos son hechos
partícipes tanto del sobrenatural sentido de fe de la Iglesia, que " no puede equivocarse
cuando cree ", cuanto de la gracia de la palabra (cf. Hch 2, 17-18; Ap 19, 10). Son
igualmente llamados a hacer que resplandezca la novedad y la fuerza del Evangelio en su
vida cotidiana, familiar y social, como a expresar, con paciencia y valentía, en medio de
las contradicciones de la época presente, su esperanza en la gloria "también a través de
las estructuras de la vida secular".
Y finalmente eres
REY
Por su pertenencia a Cristo, Señor y Rey del universo, los fieles laicos participan en su
oficio real y son llamados por El para servir al Reino de Dios y difundirlo en la historia.
Viven la realeza cristiana, antes que nada, mediante la lucha espiritual para vencer en sí
mismos el reino del pecado (cf. Rm 6, 12); y después en la propia entrega para servir, en
la justicia y en la caridad, al mismo Jesús presente en todos sus hermanos, especialmente
en los más pequeños (cf. Mt 25, 40). Eres miembro del reino de Dios y colaboras a
instituirlo en el mundo.
En conclusión, podemos decir que esta participación de los laicos en el triple oficio de
Cristo Sacerdote, Profeta y Rey tiene su raíz primera en la unción del Bautismo, su
desarrollo en la Confirmación, y su cumplimiento y dinámica sustentación en la
Eucaristía. Cada quien participa en el triple oficio de Cristo porque es miembro de la
Iglesia.
3.- FINES QUE HAY QUE LOGRAR.
Como laicos, tenemos dos grandes tareas que realizar:


Junto con los sacerdotes y religiosos, eres responsable de la Iglesia.
Junto con los demás laicos, eres responsable del mundo. Esto significa que
debemos, en primer lugar:
3.1 Restauración del orden espiritual.
La Iglesia tiene como fin la Salvación del hombre, de todo el hombre cuerpo y alma. Por
lo mismo es necesario restaurar su naturaleza espiritual que ha sido herida por el pecado.
Esta salvación, ya lo hemos dicho, se da por medio de la Fe y de la Gracia. Es nuestra
vocación a la Santidad. El santo es el testimonio más espléndido de la dignidad conferida
al discípulo de Cristo. La Santidad es un presupuesto fundamental y una condición
insustituible para realizar la misión salvífica de la Iglesia.
Restaurar el orden espiritual, significa hacer que todos vivan en SANTIDAD.
Nos dice Juan Pablo II: "Todos los fieles están invitados y deben tender a la santidad y a
la perfección en el propio estado ".
Los cristianos somos "santos porque participamos de la Vida Divina, y por eso estamos
capacitados y comprometidos a manifestar esa santidad en todas nuestras obras". Esta
santidad debemos vivirla no en un convento o encerrados en algún lugar, sino allá afuera,
en el "mundo", es decir, en la escuela, en la familia, en el taller, en el metro, en la fábrica,
en las fiestas, en todos lados a donde vayas, ¡debes ser santo! Cualquier actividad que
realices es una ocasión de unirte a Dios, de cumplir su voluntad, de servir a los demás. "
Todo cuanto hagáis, de palabra o de obra, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús,
dando gracias por su medio a Dios Padre " (Col 3, 17). Estamos hablando de
RESTAURAR, es decir algo que estaba bien, fue corrompido, a se alteró, se modificó, y
hay que arreglar. Esta misión del apóstol, será posible únicamente mediante la Fe en
Cristo y con su Gracia. Es necesario que por medio de nuestro apostolado el mundo se
santifique. Y para ello tenemos que manifestar de palabra y de obra el mismo mensaje de
Cristo, y poder así comunicar su Gracia. A través del testimonio de vida y de la
proclamación de palabra que en ocasiones tendremos que hacer. Como diría el San Pedro
"Dar razón de nuestra esperanza". Porqué actuamos y somos así.
Es necesario también ayudar a los demás a un mayor fervor en su fe, hay que instruirlos,
estimularlos, ayudarlos en lo que haga falta, para que alcancen cada día su crecimiento
como cristianos. Ejemplos de este tipo de restauración, es la Jornada misma, en donde
hemos comenzado ha restablecer nuestra naturaleza espiritual. Hay muchas expresiones
de la Iglesia que contribuyen a este fin: Retiros, Cursos de Espiritualidad, Catequesis,
toda la liturgia en Especial la EUCARISTÍA. ¿Podría dar alguien algún testimonio del
cambio que ha experimentado en la JVC?
3.2. Restauración del orden temporal.
Los laicos están llamados de modo particular para dar de nuevo a la entera creación todo
su valor originario. Cuando ordenan lo creado al verdadero bien del hombre participan en
el poder de Jesucristo Resucitado. Dios nos ha puesto en un mundo en el que muchas
veces encontramos entrelazados el bien y el mal, la justicia y la injusticia, la angustia y la
esperanza. Juan Pablo II nos describe algunos elementos del mundo:
 La indiferencia religiosa
 El secularismo, cuando el mundo se embriaga por su propio desarrollo y se olvida
de Dios.
 Ateísmo, y al mismo tiempo una imborrable necesidad de Dios.

La conciencia de la Dignidad humana, y al mismo tiempo un creciente atropello
de los derechos humanos
 Nuevas ideologías
 Leyes injustas
 Nuevas formas de participación política y ciudadana, y nuevas injusticias, a las
que nos hemos acostumbrado.
Ante esta situación, es cada vez más urgente anunciar, por la Palabra y por el testimonio,
el mensaje de Cristo y la vocación a la Santidad. Y esto es tarea de todos los laicos,
presencia de la Iglesia en el mundo, signo y fuente de esperanza y amor. El orden
temporal lo constituye los bienes de la vida, de la familia de la cultura, la economía, las
artes, las profesiones, las instituciones de la comunidad política, la ecología, y otras
realidades semejantes. Todo lo creado es bueno pero el hombre herido por el pecado, ha
utilizado en muchas ocasiones todos estos bienes y los ha desfigurado, y lo que en su
principio fue creado o establecido por Dios, para el servicio del hombre, se han
convertido en amos del Hombre. El hombre se ha vuelto esclavo de lo que en un
principio era el SEÑOR. Además de esta terrible situación el hombre a dado un mal uso,
a algunos bienes, por su egoísmo y orgullo, y únicamente a logrado un desorden de los
bienes temporales. Como apóstoles debemos de conocer cual es la voz de la Iglesia y de
Dios en las diversas circunstancias que afectan los bienes materiales. Por ejemplo,
conocer la Doctrina Social De la Iglesia.
Algunos ejemplos de esta aberración del hombre por destruirse a si mismo, al destruir los
bienes materiales, a temporales son los siguientes: los cambios en los climas, el problema
de la capa de ozono, extinción de animales, la pobreza extrema, la guerra, el aborto, las
drogas, etc.
Hoy en día en que la familia es atacada por todas partes, en que el aborto, las relaciones
prematrimoniales, el consumismo, el egoísmo y otras tantas fuerzas atacan a la familia, se
necesitan jóvenes de palabra que sepan vivir un ideal, para quienes la "pareja" no sea para
"aparejarse", sino para unir sus corazones, sus mentes, sus espíritus, sí, también sus
cuerpos, en esa comunión de vida perenne y estable llamada "familia". Se necesitan
jóvenes que sepan amar de verdad, para siempre, dispuestos al sacrificio, por el bien de
los demás. La persona humana tiene una nativa y estructural dimensión social en cuanto
que es llamada, desde lo más íntimo de sí, a la comunión con los demás y a la entrega a
los demás: " Dios, que cuida de todos con paterna solicitud, ha querido que los hombres
constituyan una sola familia y se traten entre sí con espíritu de hermanos ". y así, la
sociedad, fruto y señal de la sociabilidad del hombre, revela su plena verdad en el ser una
comunidad de personas. Se da así una interdependencia y reciprocidad entre las personas
y la sociedad: todo lo que se realiza en favor de la persona es también un servicio
prestado a la sociedad, y todo lo que se realiza en favor de la sociedad acaba siendo en
beneficio de la persona. Por eso, el trabajo apostólico de los fieles laicos en el orden
temporal reviste siempre e inseparablemente el significado del servicio al individuo en su
unicidad e irrepetibilidad, y del servicio a todos los hombres.
Nota: A ver, ¿quién de ustedes es estudiante? ¿Van muchos sacerdotes a tu prepa, a tu
universidad? No, pero tú vas diario! ¿Cuántos de ustedes trabajan en un taller o una
fábrica? ¿Hay muchas monjitas ahí? ¿Quién les va predicar el evangelio? Piensa:
¡Quizás Dios te puso en ese taller, en esa universidad, para que tú des a conocer Su
Amor a tus compañeros!
3.3 Instauración de la Civilización del Amor.
Estos dos puntos se resumen en una expresión: LA CIVILIZACIÓN DEL AMOR
Todo ejercicio de apostolado tiene su fundamento en la Caridad = Amor. En esto se
conocerán a los verdaderos discípulos de Cristo (cfr. Jn 13, 35).
Aquí no se trata de una restauración, sino de una instauración, es decir algo que todavía
no se da entre los hombres: EL AMOR. Todo ejercicio de apostolado tiene su
fundamento en la Caridad = Amor. Sin embargo hay que reflejar de una manera muy
especial esta caridad para con los hombres. Ser una expresión viva de esta caridad ante
los hombres. En esto se conocerán a los verdaderos discípulos de Cristo. Jn 13, 35
Es el mandamiento supremo de Dios. EL AMOR. Jesús en el Evangelio de San Mateo
nos hable de este gran fin del apostolado, como lo podemos concretizar en la vida. Mt 25,
31-46.
Es necesario reconocer a los demás como Templos de Dios y poder así, respetar su
libertad y dignidad. Y con aquellos hermanos en donde su dignidad se ha visto mermada,
nuestra caridad tiene que darse por completo. En ocasiones será en un lugar no muy
cotidiano, pero en ocasiones podrá ser en nuestra casa misma, con nuestros padres o
hermanos. En fin no hay que olvidar lo que dice el apóstol San Pablo acerca de la
Caridad. 1 Cor 13, 1-13.
4.- CAMPOS DE APOSTOLADO.
4.1 La Familia.
La familia es origen y fundamento de la sociedad; da testimonio de Fe y Amor.
La expresión primera y originaria de la dimensión social de la persona es el matrimonio y
la familia: " Pero Dios no creó al hombre en solitario. Desde el principio "los hizo
hombre y mujer" (Gn 1, 27), y esta sociedad de hombre y mujer es la expresión primera
de la comunión entre personas humanas". Jesús se ha preocupado de restituir al
matrimonio su entera dignidad y a la familia su solidez (cf. Mt 19, 3-9). La Familia es el
origen y fundamento de nuestra Sociedad, es el lugar en donde el ser humano aprende a
ser amado y amar. Entonces si no hay ese lugar, si no existe una buena familia en donde
sea una comunidad de amor, las personas no sabrán amar. Y ese es el resultado de
nuestros tiempos.
El primer lugar para nuestro apostolado debe de ser la Familia. Cuanto falta hacen en el
mundo familias cristianas. El matrimonio y la familia constituyen el primer campo para el
compromiso social de los fieles laicos. Es un compromiso que sólo puede llevarse a cabo
adecuadamente teniendo la convicción del valor único e insustituible de la familia para el
desarrollo de la sociedad y de la misma Iglesia. La familia es la célula fundamental de la
sociedad, cuna de la vida y del amor en la que el hombre " nace " y " crece ". Se ha de
reservar a esta comunidad una solicitud privilegiada, sobre todo cuando se atenta contra
la función propia de la familia. Ante todo hay que convencer a la misma familia de su
identidad de primer núcleo social de base y de su original papel en la sociedad, para que
se convierta cada vez más en protagonista activa y responsable del propio crecimiento y
de la propia participación en la vida social. Dios mismo es familia, es UNIÓN DE
PERSONAS. Él ha creado al hombre como un ser social, llamado a la comunión con los
demás y la entrega a los demás. La expresión primera y originaria de esta dimensión
social es por supuesto nuestra familia. Es la expresión primera de la comunión entre
personas humanas. Es por eso que el matrimonio y la familia son el primer campo para el
compromiso social de los laicos. Si cada uno de nosotros evangelizara a su familia, qué
distintas serían las cosas! ¡Si cada padre y madre de familia verdaderamente llevara a sus
hijos a Dios, educándolos en la fe y la moral, dándoles bienes espirituales y no solo
materiales, toda la sociedad cambiaría!
4.2 Los Jóvenes.
Apóstoles de sí mismos; valientes y entregados.
Es importante que los jóvenes que han conocido a Cristo den testimonio de ello a sus
semejantes. A otros jóvenes que entenderán mucho mejor de qué están hablando. Imagina
que la jornada te la hubiera dado un grupo de ancianos, no hubiera tenido el mismo
efecto.
Entre jóvenes nos entendemos muy bien y eso hay que aprovecharlo para anunciar a
Cristo. El Papa nos habla de esto.
"Pero vosotros jóvenes de México sabéis muy bien que muchos coetáneos vuestros viven
en este mundo como heridos por la desesperanza. El aguijón de la desilusión se ha
clavado en ellos. Creen que ya nada ni nadie podrá cambiar el rostro dolorido y sufriente
del mundo en que vivimos. Piensan que la marcha de los acontecimientos de la historia es
como un barco cuyo único timón está en manos del poder del dinero y de los intereses
políticos de unos pocos. Sus vidas se sumergen y se dejan arrastrar por lo que hoy se
denomina la crisis de las utopías. La sombra del tedio, del vacío y del desencanto han
dejado sus huellas en jóvenes vidas que deberán ser ilusión y promesa del futuro. Y os
preguntáis ¿Cómo es posible que muchos jóvenes compañeros y amigos nuestros estén
cansados y aburridos de la vida antes de empezar a vivirla? ¿ Cómo entender que estén ya
de vuelta sin haber llegado a ninguna parte? " "El mundo de hoy necesita no sólo de la
juventud como realidad sociológica, sino de la juventud del Espíritu de Cristo que habita
en vosotros. Se necesita escuchar la voz límpida de los jóvenes que han experimentado
cómo el fuego del amor de Cristo ardía en sus corazones. ¡Jóvenes, ayudad a vuestros
amigos a salir de la cárcel de la indiferencia y la desesperanza! ¡Cristo os llama a
resucitar en otros jóvenes la ilusión por la vida!."
4.3 La sociedad.
"Levaduras en la masa"; completa el Testimonio de Vida; Trabajo, escuela, colonia,
política.
Hay que realizar el apostolado en el lugar en donde Dios te haya colocado. Piensa que
por algo estas en ese lugar. Puedes ser ahí las manos de Cristo. Llamados a animar con
espíritu cristiano el orden temporal, los cristianos no pueden abandonar su compromiso
político: Toda acción legislativa, económica, social, administrativa, cultural, etc., forma
parte de aquella gran realidad llamada "Bien Común", es decir el bien de la sociedad, por
el cual deben de luchar los cristianos por razón del mandamiento del amor. No hay
excusa que valga: La indiferencia, la corrupción, el anti-catolicismo son otros tantos
motivos por interesarse en la política y luchar por el bien de todos. Incluso en esto
podemos colaborar con los hombres de buena voluntad de otras religiones o creencias,
con un respeto mutuo y sincero. Yo te invito a que te metas en política: afíliate a un
partido, participa en las elecciones, intégrate a un grupo u organización no
gubernamental, por ejemplo en favor de los Derechos Humanos, del medio ambiente, de
los niños de la calle, etc. Nadie hará el bien que tú dejes de hacer. Recuerda la Oración de
San Francisco. Que en donde no exista Dios, ahí tu lleves a Dios. En el trabajo, la
escuela, en algún Club, en tu colonia, etc. Este campo y todos los anteriores se basa en el
testimonio de VIDA. Si lo dices es porque ya lo estás viviendo.
5.- FORMAS DE APOSTOLADO.
5.1 Individual.
El apostolado individual es indispensable en la vida del cristiano. Todos somos apóstoles
las 24 horas del día. Es el dar testimonio de vida y en ocasiones de palabra. Sin embargo
aunque es un apostolado individual, no significa que es a titulo personal. Siempre lo
realiza como un miembro de la Iglesia.
5.2 En Comunidad:.
Buscar un grupo; trabajar en Iglesia. El hombre es social por naturaleza y que Dios ha
querido unir a los creyentes en Cristo en el Pueblo de Dios (1 Pe.2,5-10) El apostolado
organizado o en comunidad, responde de una manera más adecuada a las exigencias
humanas y espirituales de nosotros como personas. Como Iglesia, somos además
realmente sacramento de unidad, entre los hombres y con Cristo. Recordemos lo que dice
Jesús "Donde están dos o tres reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos"
(Mt 18, 20). Un lugar privilegiado para el Apostolado comunitario es la parroquia porque
"la parroquia ofrece un modelo clarísimo del apostolado comunitario, porque reduce a
unidad todas las diversidades humanas que se ella se encuentran y las inserta en la
universalidad de la Iglesia." Se puede hablar de las diversas expresiones que existen en la
parroquia como catecismo, coros, grupos de jornadas, misiones, cursos, etc.
Al igual que en la Fogata, si se deja un leño fuera de la misma se apaga en poco tiempo,
nosotros sino permanecemos en un grupo que nos ayude a crecer en nuestra vida en
santidad, podremos muy pronto desanimarnos y olvidar a Dios mismo.
Es grande la variedad existente en las asociaciones de apostolado, unas se proponen el fin
general apostólico de la Iglesia, otras buscan de modo particular los fines de la
evangelización y de la santificación; algunas tienden a la inspiración cristiana del orden
temporal, otras dan testimonio de Cristo, especialmente por las obras de misericordia y de
caridad.(A. A. n.lg).
En esta variedad está nuestro M.J.V.C. que lleva al joven a un encuentro con Cristo y a
una relación más consciente con toda la Iglesia. Entre todas las organizaciones de
apostolado organizado destaca el Concilio la importancia de aquellas que favorecen y
alientan la unidad más íntima entre la vida práctica y la fe, de sus miembros. Por eso
entre nosotros debemos poner en primer lugar un amor efectivo, sincero, que se
manifieste en obras concretas de la vida diaria. El M.J.V.C., como los demás organismos
de apostolado, no es un fin en sí mismo, sino que tiene que unirse a la misión que tiene la
Iglesia en el mundo. Estamos unidos en esta empresa con ancianos y niños, esposos y
solteros. Nuestro Movimiento será más eficaz en su apostolado en la medida en que se
conforme a los fines de la Iglesia y en la medida en que sus integrantes den testimonio
cristiano y vivan el espíritu evangélico. El Concilio recomienda evitar la dispersión
fuerzas en el apostolado. Entonces es importante integrarnos muy bien en nuestra Escuela
de Jornadas, en todo nuestro Movimiento en la Diócesis y abrimos hacía un trabajo
común con la Pastoral Juvenil y, a través de ella, con toda la Iglesia Santa y Universal,
expresada en toda la variedad de grupos, movimientos, asociaciones y organismos
apostólicos.
Dice el Concilio hablando de los fieles laicos: " Todas sus obras, sus oraciones e
iniciativas apostólicas, la vida conyugal y familiar, el trabajo cotidiano, el descanso
espiritual y corporal, si son hechos en el Espíritu, e incluso las mismas pruebas de la vida
si se sobrellevan pacientemente, se convierten en sacrificios espirituales aceptables a
Dios por Jesucristo (cf. 1 P 2, 5), que en la celebración de la Eucaristía se ofrecen
piadosísimamente al Padre junto con la oblación del Cuerpo del Señor. De este modo
también los laicos, como adoradores que en todo lugar actúan santamente, consagran a
Dios el mundo mismo".
6.- ORDEN QUE HAY QUE OBSERVAR.
6.1 Relación con la jerarquía.
Por ser miembros del Cuerpo de Cristo, no estamos solos en nuestro apostolado, y
necesitamos de los demás. Pero no todos tienen que hacer la misma labor o desempeñan
la misma función. La Iglesia es el cuerpo de Cristo y nosotros realizamos apostolado en
nombre de la Iglesia, así es que tenemos que observar el orden que en ella existe, para
hacer más eficaz nuestra acción apostólica. El Espíritu Santo es el alma de todo
apostolado, y que para eso ha dado y sigue dando a la Iglesia diferentes MINITERIOS Y
CARISMAS. 1 Cor 12, 1-27.
A.- MINISTERIOS ORDENADOS.
Existen en primer lugar los MINISTERIOS ORDENADOS, es decir, que derivan del
Sacramento del orden. Expresan y realizan una participación en el sacerdocio de Cristo y
están ordenados a la santificación del Pueblo de Dios. Los Ministros Ordenados forman
la JERARQUÍA DE LA IGLESIA, con el PAPA a la cabeza, los CARDENALES, sus
ayudantes, los OBISPOS y SACERDOTES.
Algunos ministerios, sin embargo, pueden ser ejercidos por los laicos, ya que no
requieren del sacramento del orden. Algunos misterios litúrgicos están reconocidos
oficialmente por la Iglesia, y tú puedes ejercerlos si te preparas y la Iglesia te llama.
Tenemos por ejemplo los ministerios de
LECTOR: para proclamar la Palabra de Dios en la Misa CANTOR: Para dirigir los
cantos
MÚSICO: para tocar los instrumentos
MECE: O Ministro Extraordinario de la Comunión Eucarística: para repartir la comunión
en Misa y llegar la Sagrada Comunión a los Enfermos.
NOTA: A ver, ¿Qué otro ministerio se les ocurre que pudiéramos tener en nuestras
parroquias o en nuestro movimiento? ¿Quién me puede dar una idea? (se pide una
lluvia de ideas para que piensen en nuevas formas de apostolado, con el objetivo de
despertar su interés en el apostolado). Como ves, la Iglesia te ofrece posibilidades bien
concretas de colaborar a la salvación del mundo. Si tu parroquia no te ofrece las
posibilidades, tú debes ayudar a tu párroco a crear esos ministerios e involucrar a más
jóvenes.
B.- LOS CARISMAS.
El Espíritu Santo no sólo confía diversos ministerios a la Iglesia-Comunión, sino que
también la enriquece con otros dones e impulsos particulares, llamados carismas. Estos
pueden asumir las más diversas formas, sea en cuanto expresiones de la absoluta libertad
del Espíritu que los dona, sea como respuesta a las múltiples exigencias de la historia de
la Iglesia. El Concilio nos invita a frecuentar el sacramento de la Eucaristía, donde se nos
comunica y alimenta aquel amor a Dios y a los hombres, que es el alma de todo
apostolado. Dicho apostolado no lo hemos de hacer para quedar bien o para recibir
aplausos, sino para convertirnos en testigos y al mismo tiempo en vivos instrumentos de
la misión de la misma Iglesia.
Los dones del Espíritu Santo exigen —según la lógica de la originaria donación de la que
proceden— que cuantos los han recibido, los ejerzan para el crecimiento de toda la
Iglesia, como lo recuerda el Concilio. Por tanto, ningún carisma dispensa de la relación y
sumisión a los Pastores de la Iglesia. El Concilio dice claramente: " El juicio sobre su
autenticidad (de los carismas) y sobre su ordenado ejercicio pertenece a aquellos que
presiden en la Iglesia, a quienes especialmente corresponde no extinguir el Espíritu, sino
examinarlo todo y retener lo que es bueno (cf. 1 Ts 5, 12.1921) " con el fin de que todos
los carismas cooperen, en su diversidad y complementariedad, al bien común. En
resumen: Los CARISMAS Son un DON PARTICULAR Se conceden una persona
concreta Son una gracia recibida al servicio de los demás Deben ser puestos al servicio de
los demás, no para engrandecerse o apantallar. Deben ser acogidos con gratitud. ¿Tendrás
tú algún carisma? Yo estoy seguro que sí, que Dios ha puesto en ti el deseo y la
capacidad de amarlo y servirlo a El y a tus hermanos. Busca en ti mismo lo que te gusta
hacer, lo que puedes poner al servicio de los demás: ¿Sabes cantar, enseñar, instruir,
animar, consolar? Cualquier aptitud o capacidad que tienes, o te gustaría tener, Dios
seguramente te la dará y aumentará para bien de su Iglesia.
Debes incluso PEDIR los carismas que te ayuden a realizar tu apostolado. Es necesario
que nuestro Movimiento, como todo organismo organizado en la Iglesia, se mantenga en
estrecha relación con la autoridad eclesiástica. Por eso es muy importante estar integrados
con nuestro sacerdote asesor, con nuestro párroco y en comunión con nuestro obispo.
6.2 Sirviendo juntos a Cristo y a nuestro hermano.
Cristo mismo nos enseñó que servir al hermano, sobre todo a los más pequeños, era
servirlo a Él mismo (cfr. Mat.25). Nuestro apostolado será tanto más valioso cuanto se
dirija a los que la sociedad considera como inútiles o despreciables. En el servicio
humilde y alegre encontraremos la felicidad que sólo Cristo puede dar a quienes buscan
asemejarse a él.
7.- FORMACIÓN PARA EL APOSTOLADO.
Finalmente, hablemos de la FORMACIÓN necesaria para realizar nuestro apostolado. En
efecto, no basta con querer hacer lo que Dios nos pide, ni de saber lo que Dios nos pide,
sino que es necesario hacerlo en realidad! ¿De qué nos sirven las buenas intenciones?
Dios nos llama a la santidad, que ya ha empezado en ti, pero que ahora es necesario
acrecentar a través de un continuo proceso personal de maduración en la fe y de
configuración con Cristo. En el cristiano, no puede haber dos vidas paralelas: por una
lado la fe, la religión, la Gracia, y por otro la vida secular, diaria, "real", cotidiana, con
otros valores, incluso anti-cristianos. Dios te llama a ser santo ahí donde estás, te llama a
una sola VIDA, la del hombre santificado por la Gracia. Los carismas son siempre
gracias del Espíritu Santo que tienen, directa o indirectamente, una utilidad eclesial, ya
que están ordenados a la edificación de la Iglesia, al bien de los hombres y a las
necesidades del mundo.
Esta formación es un proceso que dura toda la vida, en el que vas madurando tu fe,
siendo cada vez más adulto, y conociendo mejor la voluntad de Dios.
7.1 Necesidad de la formación.
La acción de Dios es la que nos capacita o dicho de otra manera nos forma. Dios ha
llamado a cada uno de nosotros. A un encuentro personal, el cual ya nos ha interpelado y
nosotros libremente hemos aceptado este llamado, el cual nos va conducir por toda
nuestra vida a una continua formación, a una vida de continuo crecimiento. Es
indispensable una formación integral para cada uno de nosotros. Una formación integral
es aquel proceso contínuo por el cual podemos ir madurando en la Fe, Esperanza y
Caridad, y cada día nos vamos transformando en la persona de Cristo: "ya no soy Yo,
sino Cristo quien vive en mí", según la voluntad del Padre, con la guía del Espíritu Santo.
7.2 Formación espiritual, humana, intelectual: INTEGRAL.
La formación integral no es llenarse de conocimientos y saber cual es la voluntad de
Dios, se trata de hacerla vida, De hacer la que Dios quiere que hagamos de nuestra vida, y
repetir como la Santísima Virgen " Hagan lo que Él les diga" o en los momentos difíciles
poder decir " que no se haga mi voluntad sino la tuya" Dicha formación debe abarcar
todos los aspectos de la persona humana, fomentar un desarrollo armonioso de la persona
y tener en cuenta las características propias de cada joven. _
7.3 FARO: Formación, Acción, Revisión, Oración.
Hay que recordar siempre nuestro
FARO
F ORMACIÓN
A CCIÓN
R EVISIÓN
O RACIÓN SACRIFICIO Y
SACRAMENTOS.
8.- EXHORTACIÓN.
NOTA: Hay que dar a conocer a los jornadistas los grupos y/o movimientos que existen
en su parroquia, es decir, las diversas opciones que ellos tienen para realizar su
apostolado. Lo ideal sería que los diversos grupos de la parroquia vinieran a
presentarse, ya sea durante la Jornada o la Post-Jornada. En cualquier caso, será
importante darles una opción real y acompañarlos de cerca en su "4º día".
Cristo nos invita a ser sus manos. Debemos recibir ese llamado con entusiasmo y unirnos
a su misión salvadora, viviendo según sus criterios y dando Testimonio, para atraer más
almas a Cristo. Hoy comienza una nueva etapa en nuestra vida. Hoy resuena en lo más
íntimo de nuestro ser la palabra de Jesús que nos dice a cada uno: *ven y sígueme*.
Somos libres en nuestra respuesta, pero no olvidemos que estamos marcados desde
nuestro bautismo, que hay una huella impresa en nosotros que nos compromete a ser
apóstoles de Cristo en adelante, en cualquier lugar o circunstancia de nuestra vida, ante
cualquier persona o grupo de gentes y a pesar de que las dificultades, tentaciones y
debilidades están siempre al acecho.
Vale la pena entregarse a la causa de Cristo y enamorarse de El. De ese encuentro y
relación ardiente con Cristo brotará la necesidad de compartir tan grande tesoro, de
difundir en intimidad e identidad con todos nuestros hermanos.
TEXTOS DEL MAGISTERIO
I.- Introducción.
La misión de Evangelizar que Cristo encargó a Su Iglesia es la misión misma del
Movimiento de Jornadas de Vida Cristiana: Somos testigos de Jesucristo entre los
jóvenes de nuestra patria en los inicios del Siglo XXI. De ahí la necesidad de ser siempre
fieles a la Misión que Cristo nos ha encomendado. El Espíritu Santo de Dios ha
enriquecido a su Iglesia a través de la enseñanza perenne transmitida por la Tradición de
la Iglesia. Tenemos en especial en nuestro Papa, S.S. Juan Pablo II, un tesoro de
enseñanza y doctrina dirigida especialmente a los jóvenes. Ponemos estos textos a
continuación, para que el Auxiliar los use libremente, insertándolos en su esquema y/o
adaptándolos a sus oyentes. Estamos seguros que el Movimiento de Jornadas de Vida
Cristiana de nuestro país encontrará así un medio de ser más
fieles a Cristo y a Su Iglesia.
TEXTOS DE S.S. JUAN PABLO II.
1. si nos mostramos íntimamente convencidos de esta verdad, si la comunicamos
integralmente al Pueblo de Dios, si damos testimonio de ella con nuestra vida, entonces
las dificultades de nuestros tiempos no nos asustarán2. El Evangelio no promete la
riqueza, ni condiciones de vida fáciles, ni incluso el pan de cada día. aunque tengamos el
deber de trabajar por ello solidariamente, con valentía y sentido de la justicia; sin
descuidar, por otra parte, el pedírselos a Dios y darle gracias a la vez.
3. Somos guardianes de la Palabra de Dios y, por tanto, no tenemos derecho a mutilarla
en nuestras predicaciones ante cualquier auditorio.
4. Es deber de la Iglesia, especialmente en nuestro mundo, la proclamación de lo absoluto
de Dios, del misterio de Jesucristo, de la trascendencia de la salvación de la fe y de los
sacramentos de la fe.
5. El Evangelio es la palabra de la verdad. Es verdad que esta palabra nos coloca ante
exigencias; recordad que estas exigencias son dictadas siempre por el amor hacia el
hombre, y, precisamente, a causa del bien del propio hombre, todo el servicio, el
ministerio de la Iglesia, busca siempre contribuir para que la vida humana, también aquí
en la tierra, sea cada vez más digna del hombre.
6. El Evangelio da una respuesta total, que va completamente hasta el fondo de las cosas.
7. ¡Que esta Buena Nueva de Jesús sea siempre vuestra alegría! ¡Qué su Evangelio
penetre siempre, con su luz y su fuerza, el fondo de vuestros corazones, de vuestras
familias, de vuestras costumbres, de todas las realidades de vuestra vida como benineses !
¡Qué sea vuestra salvación!
8. "El campo propio de su actividad evangelizadora es el mundo vasto y complejo de la
política, de lo social, de la economía y también de la cultura, de las ciencias y de las artes,
de la vida internacional, de los medios de comunicación de masas, así como otras
realidades abiertas a la evangelización como el amor, la familia, la educación de los niños
y jóvenes, el trabajo profesional, el sufrimiento, etc.
9. Ante vosotros se abre una nueva etapa. La evangelización debe continuar, extenderse a
otros y, sobre todo, afectar de modo más profundo las realidades de vuestra propia vida.
¿No tenéis acaso muchos de vuestros compatriotas que no conocen verdaderamente aun
el Evangelio y que no pueden, por tanto, otorgarle su fe?
TEXTOS DEL CATECISMO UNIVERSAL DE LA IGLESIA
940 "Siendo propio del estado de los laicos vivir en medio del mundo y de los negocios
temporales, Dios los llama a que movidos por el espíritu cristiano, ejerzan su apostolado
en el mundo a manera de fermento" 1324 La eucaristía es "fuente y cima de toda la vida
cristiana" (LG 11). "Los demás sacramentos, como también todos los ministerios
eclesiales y las obras de apostolado, están unidos a la eucaristía y a ella se ordenan.
TEXTOS DEL DERECHO CANÓNICO DE LA IGLESIA
255. /1. Puesto que, en virtud del bautismo y de la confirmación, los laicos, como todos
los demás fieles, están destinados por Dios al apostolado, tienen la obligación general, y
gozan del derecho, tanto personal como asociadamente, de trabajar para que el mensaje
divino de salvación sea conocido y recibido por todos los hombres en todo el mundo;
obligación que les apremia todavía más en aquellas circunstancias en las que sólo a través
de ellos pueden los hombres oír el Evangelio y conocer a Jesucristo.
/2. Tienen también el deber peculiar, cada uno según su propia condición, de impregnar y
perfeccionar el orden temporal con el espíritu evangélico, y dar así testimonio de Cristo,
especialmente en la realización de esas mismas cosas temporales y en el ejercicio de las
tareas seculares.
TEXTOS DE LA "CHRISTIFIDELES LAICI"
17. La vocación de los fieles laicos a la santidad implica que la vida según el Espíritu se
exprese particularmente en su inserción en las realidades temporales y en su participación
en las actividades terrenas.... El Concilio afirma categóricamente: « Ni la atención de la
familia, ni los otros deberes seculares deben ser algo ajeno a la orientación espiritual de la
vida"... "La unidad de vida de los fieles laicos tiene una gran importancia. Ellos, en
efecto, deben santificarse en la vida profesional y social ordinaria. Por tanto, para que
puedan responder a su vocación,los fieles laicos deben considerar las actividades de la
vida cotidiana como ocasión de unión con Dios y de cumplimiento de su voluntad, así
como también de servicio a los demás hombres, llevándoles a la comunión con Dios en
Cristo" El fiel laico « no puede jamás cerrarse sobre sí mismo, aislándose espiritualmente
de la comunidad; sino que debe vivir en un continuo intercambio con los demás, con un
vivo sentido de fraternidad, en el gozo de una igual dignidad y en el empeño por hacer
fructificar, junto con los demás, el inmenso tesoro recibido en herencia.
23. La misión salvífica de la Iglesia en el mundo es llevada a cabo no sólo por los
ministros en virtud del sacramento del Orden, sino también por todos los fieles laicos. En
efecto éstos, en virtud de su condición bautismal y de su específica vocación, participan
en el oficio sacerdotal, profético y real de Jesucristo, cada uno en- su propia medida. Los
pastores, por tanto, han de reconocer y promover los ministerios, oficios y funciones de
los fieles laicos, que tienen su fundamento sacramental en el Bautismo y en la
Confirmación, y para muchos de ellos, además en el Matrimonio.
OTROS AUTORES
Para 1999 habrá en México veinte millones de jóvenes entre 15 y 24 años, la tercera parte
de la población. Muchos sacerdotes ahora sólo atienden a niños y adultos. Urge que los
laicos jóvenes atiendan a los actuales jóvenes, que ni acuden al templo ni buscan
reuniones, ni reflexiones. Urge ganar la calle, y hacer presente el Evangelio allí donde el
joven de hoy gasta su vida con sus compañeros. Mons. José Pablo Rovalo A. Asesor
Nacional de M.J.V.C.
No debemos transmitir una doctrina o un mensaje, sino la experiencia de nuestro
encuentro con Cristo. . . La evangelización es el impacto humano que damos a una
persona, a un grupo de personas, o a una realidad social; solamente así la evangelización
es una presencia impulsora. L. Giussani
mejor actuar que llorar
Dios necesita: más personas que mejoren al mundo, y menos personas que condenen al
mundo; más trabajadores y menos habladores; más personas que digan: tal cosa es
posible; y menos peronas que digan; esto es imposible; más inspiradores de confianza, y
menos desalentadores; más gente que haga algo, y menos gente que busque faltas en los
demás: más gente que subraye lo bueno, y menos gente que grite lo malo; más gente que
encienda velas, y menos gente que las apague.
TODO A JESÚS POR MARÍA
TODO A MARÍA PARA JESÚS
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