Estudios sobre las vidas de David y Salomón

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Estudios sobre las vidas de
DAVID
Y
SALOMÓN
DR. BRIAN J. BAILEY
Publicaciones Sion
Un ministerio del Instituto Ministerial Sion
Título original: “Studies on the Lives of David and Solomon”
Estudios sobre las vidas de David y Salomón
Registrado © por Brian J. Bailey, Agosto 2001.
Todos los derechos reservados
Diseño de portada:
Registrado © por Brian J. Bailey y sus licenciadores.
Todos los derechos reservados.
Libro de texto de Zion University. Usado con permiso.
Edición en español impresa en Julio 2004.
Publicado por Zion Christian Publishers.
Traducción al español: Equipo de Honduras y México.
Edición: Gisela Casillas, Carla Borges, 2004.
A menos que se indique lo contrario,
todas las citas bíblicas fueron tomadas de la versión
Reina-Valera en su revisión de 1960, © 1960 Sociedades
Bíblicas Unidas.
Impreso en los EE.UU. de Norteamérica por:
Zion Christian Publishers
P.O. Box 70
Waverly, New York14892
EE. UU. de Norteamérica
Teléfono: (1-607) 565-2801
Fax (1-607) 565-3329
www.zionfellowship.org
ISBN # 1-890381-62-4
DEDICATORIA
A la gloria de Dios, y a mi esposa Audrey,
quien me ayudó e inspiró a acercarme al Hijo
mayor del rey David; aquel que es mayor que
Salomón—el Señor Jesucristo.
Brian J. Bailey.
AGRADECIMIENTOS
A los equipos de traducción de Honduras, México y
Guatemala, que realizaron la traducción de este libro,
corrección de pruebas y los detalles tipográficos de esta obra.
A Gisela Casillas de Fragoso y Carla Borges, por su
colaboración en la edición y revisión de este libro.
A Sarah Humphreys , por su excelente diseño de la portada.
Al equipo editorial de Zion Christian Publishers, Carla
Borges, Jason Glowski, Daniel Humphreys, David Kropf.
Deseamos extender nuestra gratitud a todos ustedes ya
que sin todas sus horas de arduo trabajo la publicación
de este libro no hubiera sido posible. Estamos
verdaderamente agradecidos por su diligencia,
creatividad y excelente labor en la compilación de este
libro para la gloria del Señor.
Índice
PRIMERA PARTE
LA VIDA DE DAVID
Capítulo 1
David y Goliat
Capítulo 2
David y Saúl
Capítulo 3
La formación de un rey
Capítulo 4
La experiencia de Siclag
Capítulo 5
David y Betsabé
Capítulo 6
El constructor del templo
SEGUNDA PARTE
LA VIDA DE SALOMÓN
Capítulo 7
Los años formativos de Salomón
Capítulo 8
La ascensión de Salomón al trono
Capítulo 9
La construcción del templo
Capítulo 10
El apogeo de su reinado y gloria
Capítulo 11
Sus años finales y decadentes
Capítulo 12
Comparación entre David y Salomón
PRIMERA
PARTE
BOSQUEJO DE
LA VIDA DE DAVID
A DAVID SE LE CONOCE POR:
A. Sus características piadosas y sus logros:
1. Un varón conforme al corazón de Dios
(1 Samuel 13:14).
2. El dulce cantor de Israel (2 Samuel 23:1).
3. Profeta (2 Samuel 23:2).
4. Sacerdote (Salmo 40).
5. El rey que recibió tres unciones:
a. Llamado como un pastorcillo.
b. Escogido como el rey de Judá.
c. Fiel como el rey de Israel.
6. Símbolo de Cristo.
7. El rey guerrero que condujo a Israel al reposo
(Hebreos 4:7; 2 Samuel 7:1, 7).
B. Su pecado de adulterio y las consecuencias:
1. Las razones:
a. No guardó las leyes para los reyes
(Deuteronomio 17:17).
b. Debió de estar en el campo de batalla, sin
embargo se quedó en casa (2 Samuel 11:1).
c. Debió de respetar la santidad del matrimonio
(2 Samuel 11:3).
2. El juicio:
a. Heridas, vergüenza y afrenta
(Proverbios 6:32, 33).
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David y Salomón
b. Su hija amancillada (2 Samuel 13:1).
c. Su hijo Amnón es asesinado (2 Samuel 13:29).
d. Su hijo Absalón lo traiciona (2 Samuel 15:1).
3. Su restablecimiento:
a. Su genuino reconocimiento del pecado
(Salmo 51:3, 4a).
b. Aceptación de los juicios de Dios
(Salmo 51:4b; Levítico 26:41).
c. Abandono del pecado
(Salmo 51:10; Oseas 14:2).
d. Espera con humildad que Dios lo libere
(Salmo 40:1).
La vida de David
Capítulo 1
DAVID Y GOLIAT
I. DAVID Y GOLIAT
A. GOLIAT—EL FILISTEO
B. DAVID—EL HOMBRE DE DIOS
1. Su genealogía—La tribu de Judá
2. Su misión—La liberación y la victoria
a. Derrotando a los Goliats
b. Recibió diez panes
c. Fiel en sus responsabilidades
d. Su actitud de sumisión
e. Él hablaba en fe constantemente
f. Fue preparado para ser rey
g. Sabía que la batalla era del Señor
h. Para llevar a una nación a la victoria
C. LOS GOLIATS PERSONALES
1. Representan ataduras
2. Un espíritu maligno
3. Una imagen
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David y Salomón
En las Sagradas Escrituras, y quizá en toda la historia, una de
las batallas más famosas es la de David y Goliat; de ella
podemos aprender lecciones aplicables a iglesias, familias e
individuos. A veces un Goliat espiritual (o enemigo) se levanta
y ataca al pueblo de Dios. Del relato en 1 Samuel 17 acerca
del combate entre David y Goliat, podemos aprender sobre
la naturaleza del enemigo y el camino a la victoria.
A. GOLIAT—EL FILISTEO
Se nos dice que Goliat era un paladín de los filisteos. De
acuerdo con la ley de la primera mención, podemos ver en
Génesis 26:12-16 que los filisteos representan la envidia y los
celos (cuando algo es mencionado por primera vez en la Biblia,
esa será la clave para la interpretación de la verdad). Es
frecuente que el obstáculo de la envidia se interponga en el
camino de cada uno de nosotros. ¡Tiene que ser derribado!
“Y ya también el hacha está puesta a la raíz de los árboles”
(Mt. 3:10).
En 1 Samuel 17:4-7 vemos que en la descripción de Goliat
hay una repetición constante del número seis. Este número
representa “la carne” y es un ejemplo o tipo del hombre de
pecado (el número 666, Apocalipsis 13:18). También puede
representar a un espíritu maligno. Goliat tiene una doble
connotación de las obras de la carne y de las de un espíritu
maligno.
Otro punto que cabe destacar es que Goliat es que era un
gigante. Él representa a un enemigo que no puede ser vencido
por fuerzas naturales, ya sea el poder humano, la sabiduría o
capacidad natural, o aun por un gran número de personas.
La vida de David
13
Goliat mantuvo con mucho temor y temblor a todo un ejército
y a una nación entera. En nuestros días, es posible que los
Goliats espirituales mantengan ciudades, naciones, familias y
personas, literalmente atadas.
La Escritura nos relata que durante cuarenta días, Goliat se
presentó por la mañana y por la tarde. No desistía de su
implacable oposición, intimidación y burla de Israel. Seguía
apareciendo y toda la nación sentía su presencia. Por eso
considero que Goliat representa una atadura de la que la gente
está muy consciente. En 1 Samuel 17 es evidente que ni los
líderes elegidos de Israel ni el que Dios mismo había escogido,
Saúl, podían liberar al pueblo. Tampoco Israel, actuando como
un bloque de gente unida, podía liberarse de semejante yugo.
No debemos olvidar que en el Salmo 108:9, hablando de los
filisteos, Dios dice: “Me regocijaré sobre Filistea” (los
filisteos), lo que demuestra que los Goliats que se nos oponen,
sea cual sea su estatura, están destinados a ser víctimas del
pueblo de Dios.
B. DAVID—EL HOMBRE DE DIOS
David, quien tuvo la clave de la victoria sobre Goliat, fue el
octavo hijo de Isaí. El número ocho significa vida nueva, un
nuevo comienzo. El manto davídico es el único capaz de
derribar cualquier Goliat espiritual, y ésta es una de las razones
por las que es tan importante estudiar la vida de David.
Cristo se humilló a sí mismo cuando se hizo llamar Hijo de
David porque en la vida de David, especialmente como lo
vemos en los Salmos, vemos muchos aspectos de la vida,
naturaleza y carácter de nuestro Señor Jesucristo que no
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David y Salomón
encontramos en los Evangelios. David, como el Señor Jesús,
es un ejemplo para nosotros.
Otro aspecto importante acerca de David, es que resucitará,
y será el rey que gobierne en Jerusalén durante el milenio. De
esta manera, David es símbolo de los que tendrán parte en la
primera resurrección y que serán “reyes y sacerdotes” con el
Señor durante el reino milenial.
Un aspecto de importancia particular es que David halló favor
y gracia ante los ojos de Dios. Él simboliza a las personas
incluidas en las promesas de Romanos 5:17, que reciben la
abundancia de la gracia y del don de la justicia, y que “son
capaces de gobernar y reinar” en esta vida presente. Este es
el llamado que Dios nos hace: gobernar y reinar en esta vida
presente. Su propósito es que ganemos las batallas que están
por delante, para que poseamos todo lo que Él ha preparado
para nosotros.
1. Su genealogía — la tribu de Judá
David era de la tribu de Judá y, por consiguiente, heredero de
las promesas de esa tribu. En Génesis 49:1, Jacob reúne a
sus hijos y les dice: “Juntaos y os declararé lo que os ha de
acontecer en los días venideros”. En Génesis 49:8 Jacob dice
(hablando de Judá): “Tu mano en la cerviz de tus enemigos”,
(en otras palabras: “derrotarás a tus enemigos”). Asimismo,
agrega en el versículo 10: “No será quitado el cetro [bastón
de mando para los gobernadores] de Judá, ni el legislador de
entre sus pies”. Esto es aplicable a David, que gobernó a
Israel como el más grande de todos sus reyes. Él sostuvo el
cetro y tipificó al Rey de reyes y Señor de señores.
La vida de David
15
David heredó las promesas que Dios dio por medio del
patriarca. Es importante que conozcamos y comprendamos
las promesas que Dios ha dado tanto para nuestras vidas
personales, como para las congregaciones en las que Él nos
ha puesto. Puede ser que hayamos recibido promesas hace
mucho tiempo, pero Él las honrará. David estaba consciente
de su genealogía y de su herencia, y se dirigió hacia todo
aquello que Dios le había prometido y le había provisto.
Como individuos, nos conviene conocer los rasgos negativos
de nuestra genealogía. Mi esposa y yo hemos visto a muchas
personas carentes de victoria en sus vidas, mas bajo la unción
del Espíritu de Dios, el Señor ha revelado que esa falta de
victoria radica en generaciones pasadas. Por ejemplo, hay
ataduras que se transmitieron de padre a hijo. Cuando éstas
se han revelado, reconocido y expuesto a la luz, estas sirven
como el medio para liberar a esos seres queridos. Por lo
tanto, la genealogía es importante no solo en lo que se refiere
a los aspectos positivos, sino también a los negativos, porque
éstos se pueden vencer por el poder de Dios y convertirse en
algo bueno.
2. Su misión — La liberación y la victoria
Existen muchos puntos importantes que el Espíritu Santo nos
revela en la vida de David, particularmente de su encuentro
con Goliat. Podemos resumirlos así:
a. David sabía que podía derrotar a Goliat debido a la unción
del Señor.
b. Recibió diez panes y diez quesos (1 S. 17:17, 18). Los
diez panes representan la ley, y los diez quesos, la Palabra
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David y Salomón
que Dios le habló. David fue un hombre que obedeció tanto
la ley como la palabra que recibió del Señor. Él caminó a la
luz de lo que Dios le reveló.
c. Cuando dejó atrás el rebaño, lo puso en manos de un
cuidador. Esto revela mucho de su carácter. Se preocupaba
por sus responsabilidades presentes y era fiel. No salió
simplemente a enfrentar un nuevo y mayor desafío (Goliat),
sino que se aseguró que todo estuviera en orden, antes de ir
a pelear contra el gigante.
d. David procedía en obediencia a su padre, con una actitud
sumisa (1 S. 16:19-23).
e. David hablaba en fe constantemente, y Dios quiere que
nosotros también hablemos en fe constantemente. ¡David
confesó lo que su Dios podía e iba a hacer!
f. David había recibido la preparación necesaria para entrar
en la presencia del rey; y fue comisionado por Saúl en vista
de sus victorias pasadas sobre el oso y el león. En otras
palabras, David había experimentado la victoria en
circunstancias menores (que vinieron por medio de la unción
del Espíritu de Dios), y esto contribuyó a prepararlo para
combatir a Goliat. Las pequeñas victorias ayudan a
capacitarnos para combatir a nuestro “Goliat”. Muchas veces,
agobiados por las batallas pequeñas, descuidamos la
preparación que Dios está forjando en nosotros para victorias
futuras.
g. David desechó la armadura de Saúl. Él no tomó consigo
ningún equipo que no hubiera probado. Tomó las armas que
estaba acostumbrado a usar (la honda y la piedra). Mas su
La vida de David
17
seguridad y confianza estaban puestas en lo que Dios haría y
no en su propia fuerza o habilidad. David gritó a Goliat (1 S.
17: 45-47): “Yo vengo a ti en el nombre de Jehová de los
Ejércitos, el Dios de los escuadrones de Israel, a quien tú has
provocado. Jehová te entregará hoy en mi mano y yo te
venceré y te cortaré la cabeza, y daré hoy los cuerpos de los
filisteos a las aves del cielo y a las bestias de la tierra; y toda
la tierra sabrá que hay Dios en Israel. Y sabrá toda esta
congregación que Jehová no salva con espada y con lanza;
porque de Jehová es la batalla y Él los entregará en nuestras
manos”. Esta es la actitud que Dios quiere que tengamos
cuando entramos en batalla contra los Goliats espirituales que
se levantan contra nosotros.
h. Lo más extraordinario de la victoria de David fue que se
llevó con él a toda la nación de Israel. Cuando David derribó
a Goliat, toda la nación de Israel despojó al resto de los
filisteos. Yo creo que cuando nosotros, como congregaciones
del pueblo de Dios, derribemos a los “Goliats” que se nos
oponen, experimentaremos no solo una victoria personal, sino
que todo el Cuerpo de Cristo en nuestros pueblos o ciudades,
conocerá la victoria y despojará por completo a los enemigos
que han estado estorbando los propósitos de Dios. Cuando
el paladín de los filisteos fue derrotado, la opresión fue rota
totalmente.
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David y Salomón
C. LOS “GOLIATS” PERSONALES
¿Qué representa Goliat en nuestras vidas? Hay tres
posibilidades:
1. Goliat puede representar una atadura familiar proveniente
de generaciones pasadas, que no ha sido eliminada todavía.
Las ataduras familiares pueden ser terribles. Hace poco, mi
esposa y yo escuchábamos a una abuela contarnos cómo
cierto pecado que predominaba en la familia, estaba ahora
manifestándose en su nieta. La abuela exclamaba: “¡Oh, esto
debe parar! ¡No debe propagarse a otra generación!”.
Yo creo que esta es la actitud que Dios quiere que tengamos
hacia tales ataduras. Si existe en usted una atadura familiar
proveniente de generaciones pasadas, de sus padres y
abuelos, es necesario hacer algo; de lo contrario, podría
transmitirse a sus hijos. La respuesta de Dios es que el “Goliat”
de las ataduras familiares puede ser, y será, derribado.
2. Goliat también puede representar un espíritu maligno que
oprime y tiene cautiva a una persona amada. Dios quiere
romper esa esclavitud y liberar a los cautivos.
3. Goliat también puede ser la imagen de un enemigo
espiritual, un poderoso Goliat, que se levanta contra una
congregación del pueblo de Dios, tratando de impedir que
ésta posea la herencia y la tierra que Dios le ha prometido.
Este Goliat puede impedir que el pueblo de Dios
espiritualmente se abra brecha hacia nuevas áreas y
“altiplanicies” en Dios. Dios quiere que el poder de este
enemigo sea quebrantado. Él quiere poner una santa
determinación en nuestros corazones, y hacer que broten la
La vida de David
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fe y la esperanza para que digamos: ¡Oh, este gigante será
derribado! He visto a Goliat erguirse tan alto, pero también
he visto la potencia del Espíritu de Dios derribarle. Debemos
entender que Dios ha dispuesto que tales enemigos sean
derribados por Su pueblo moviéndose en el poder de Su
Espíritu. ¡Oh cuán glorioso es saber que ciertos enemigos
están allí solo porque Dios dispuso que sean derribados. Es
alentador contemplar al enemigo y decirle: ¡Oh, tú has sido
ordenado por Dios para ser derrotado!
Después de destruir a Goliat, Israel obtuvo siempre la victoria
sobre los filisteos. A partir de ese momento, ya no importaba
lo que los filisteos trataran de hacer, Israel siempre prevalecía,
pues había quebrantado el poder del gigante.
Al poner nuestros ojos en el Señor, y confiar en que los
“Goliats” serán derribados, tanto en nuestras propias vidas
como en la congregación, debemos estar convencidos de que
cuando sean derribados, siempre venceremos en esas áreas.
Más tarde estos gigantes no podrán recobrar la vida por sí
mismos para seguir oprimiéndonos, porque una vez derribado
un “Goliat”, siempre tendremos el poder para triunfar sobre
aquello que antes nos agobió. Hagamos guerra bajo el manto
davídico, combatiendo y derribando a Goliat.
Es necesario dejar que el Espíritu de Dios se levante en
nuestros corazones y diga: “Oh Dios, por favor, Goliat será
combatido en nuestras vidas, en nuestras familias y en los
asuntos de nuestra iglesia”. Al igual que David, declaremos
ante Dios: “¿Quién es este filisteo incircunciso?, ¿Cómo puede
permanecer de pie ante la unción del Señor?”.
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David y Salomón
Al declararlo por el Espíritu de Dios, podremos ver, como
vio David, que Goliat ciertamente cae. Veremos cómo se
rompe todo aquello que nos ataba, y entraremos en una nueva
esfera de victoria que nunca antes habíamos conocido. Goliat
había mantenido cautiva a Israel por demasiado tiempo, pero
llegó un día divinamente señalado, en que Dios dijo: “Hay una
nueva unción, hay una palabra fresca, hay una esperanza, hay
una fe, hay una victoria por ganar. Goliat, hoy te toca caer
ante la unción de Dios que está en su pueblo”.
Por lo tanto, confiemos ahora en que Dios
quebrantará al Goliat que amenaza nuestras
familias y al Goliat que ha agredido a nuestra
congregación. Entonces, por la gracia del Señor,
avancemos a una mayor altura en Dios, y
entremos a poseer la tierra.
La vida de David
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Capítulo 2
DAVID Y SAÚL
I. DAVID Y SAÚL
A. SAÚL—LA RAMA SIN FRUTOS
(Ungido, mas no caminando en la luz)
1.
2.
3.
4.
¿Por qué fue escogido Saúl?
Las consecuencias de la elección
El significado de sus señales
Un corazón dividido y la desobediencia hacen
caer
5. Saúl y David
B. DAVID—LA RAMA FRUCTÍFERA
(Ungido y con un carácter desarrollado)
1. Sumisión
2. Servicio
3. Sabiduría
4. Fidelidad
C. COMPARACIÓN ENTRE DAVID Y SAÚL
(La obediencia, clave para ser fructífero)
1. Obediencia a medias
— El defecto fatal de Saúl
2. Obediencia completa
— Lo que Dios busca en su pueblo
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David y Salomón
TRASFONDO HISTÓRICO
En la época en que David peleó contra Goliat y le dio muerte,
Saúl reinaba en Israel. Saúl había sido ungido por Dios para
ser el primer rey de Israel, pero su vida fue una mezcla de
obediencia parcial a Dios y amor al mundo. La vida de Saúl
contrasta de manera impresionante con la de David, su servidor
por muchos años. De estos dos hombres podemos aprender
valiosas lecciones en cuanto a las características de un cristiano
que no produce fruto (Saúl) y las cualidades de un cristiano
fructífero (David).
A. SAÚL—LA RAMA SIN FRUTOS
Ungido, mas no caminando en la luz
Saúl fue como una rama muerta una rama que está unida a la
vid pero que no tiene la vida de la vid fluyendo por sus arterias.
En consecuencia, Saúl no produjo fruto. En Juan 15:2, el
Señor Jesucristo habló de la gente que es como Saúl: “Todo
pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará”. El rey Saúl
era una rama sin fruto y, con el tiempo, Dios tuvo que hacerlo
a un lado, para dar lugar a alguien que sí produjera fruto, el
rey David, un varón conforme al corazón de Dios.
Existe un nuevo mover del Señor en Su Iglesia, el cuál nos
llevará a nuevas alturas de gloria. Él desea que penetremos
en un nuevo ámbito de gloria y en una nueva dimensión del
Espíritu de Dios. Pero la “madera muerta” no podrá entrar a
este nuevo lugar en Dios.
En el Espíritu, yo he visto ramas que están muertas. Algunas
se han unido a la Iglesia pero no son totalmente obedientes al
La vida de David
23
Señor; y Dios desea realizar un cambio en estas personas. Lo
mejor que podemos hacer es siempre escuchar a Dios y
cambiar antes de que el Señor se mueva, ya que de esta
manera nosotros podremos tener parte en Sus gloriosos planes.
1. ¿Por qué fue escogido Saúl?
Saúl fue el primer rey de Israel (1 S. 9). Era hijo de Cis, de la
tribu de Benjamín y llegó a ser rey cuando el pueblo de Israel
rechazó a Dios y a Samuel para que los gobernaran. En
Oseas 13:11 el Señor, recordando esto, dijo: “Te di rey en mi
furor”. La tribu de Benjamín no había recibido promesas
concernientes al trono; y por lo tanto, a diferencia de David,
en Saúl no se estaba cumpliendo ninguna profecía. Entonces,
¿por qué fue escogido Saúl como rey?
1 Samuel 8:4, 5 nos relata que todos los ancianos de Israel
vinieron al profeta Samuel y le dijeron: “Constitúyenos un rey
que nos juzgue”. Cuando Samuel oró al respecto, Dios le
dijo: “No te han desechado a ti sino a Mí, para que no reine
sobre ellos”. Es muy peligroso desear ser como alguien más.
Los hijos de Israel vieron a las naciones que los rodeaban;
vieron que tenían reyes que los gobernaban y dijeron:
“Queremos ser como las otras naciones”.
A menudo sucede que aunque lo que anhelamos o deseamos
esté mal, en un momento dado Dios no lo niega más, y concede
los deseos de nuestro corazón. Pero antes de dar un rey a los
hijos de Israel, Dios dijo a Samuel que les advirtiera acerca
de las consecuencias (1 Samuel 8:11-18). Como resultado
de desear ser como los demás pueblos, ellos experimentarían
servidumbre y no libertad.
24
David y Salomón
El Salmo 106:15 ilustra el mismo principio al relatarnos un
incidente que tuvieron los hijos de Israel en el desierto: “Y Él
les dio lo que pidieron mas envió mortandad sobre ellos”.
Debemos ser muy cuidadosos al orar; debemos estar seguros
de que el deseo de nuestros corazones concuerda con la
voluntad de Dios. Hay épocas específicas de nuestras vidas
en que de repente creemos romper barreras invisibles en el
Espíritu, y sentimos que en esos momentos podemos recibir
lo que anhelamos. Cuán importante es verificar si nuestros
anhelos concuerdan con el sentir de Dios, y si nuestros
objetivos son lo que Él desea darnos. De otra manera,
tendremos escasez en el alma.
2. Las consecuencias de la elección
Los hijos de Israel se negaron a escuchar a Samuel porque
deseaban ser como las otras naciones (1 S. 17:19, 20). En
cierto modo, la gente encuentra seguridad en la esclavitud;
pero, habiendo puesto una cosa en movimiento, los hijos de
Israel comenzaron a cosechar las consecuencias.
Poner una cosa en movimiento es algo pavoroso, porque a su
tiempo se cosechan las consecuencias. Lo más sabio es ayunar,
orar y clamar a Dios: “Señor, escoge por mí”. Entonces, por
Su gracia, podremos poner en movimiento cosas que estaban
dispuestas para nosotros desde antes de la fundación del
mundo, de acuerdo con el plan celestial para nuestras vidas.
Y es entonces que tendremos una razón para gozarnos.
Pero Israel, echó a andar algo que era irrevocable. Los
israelitas pusieron en movimiento un deseo que se oponía a la
voluntad de Dios para sus vidas. Y Dios se los admitió. Uno
piensa que si algo contradice la voluntad de Dios, Él pondrá
La vida de David
25
todo obstáculo en nuestro camino. ¡Pero no, Dios no lo hará!
Él hará que acontezca aquello que hemos echado a andar,
aunque ello contradiga los más altos propósitos que tiene para
nuestras vidas.
He oído a algunos decir: “Yo sé que esto es de Dios porque
cuando oré, sucedió”. ¡Pero eso no significa nada! Lo
importante es que sea congruente con el plan Divino. Eso es
lo que determina si es la voluntad de Dios o no. Cuando los
ancianos de Israel llegaron a pedir un rey, Dios se los concedió.
No solamente les dio un rey, sino que también escogió al
hombre (Saúl) que habría de reinar, y además hizo proezas a
favor de ese gobernante.
Vemos pues, que es necesario tener mucho cuidado cuando
activamos algo por medio de la oración. En primer lugar,
debemos estar seguros de que lo que pedimos tiene la
aprobación del Dios Todopoderoso, porque una vez
bautizados en el Espíritu Santo, tenemos cierta autoridad y
habilidad para hacer que las cosas sucedan. Esto le sucedió a
Israel. Dios escogió por ellos. Eligió al rey que ellos querían.
En lo natural, Saúl tenía muchas cualidades. El pueblo deseaba
una persona que saliera por él a la guerra, y Dios les proporcionó
un hombre de elevada estatura, que de hombros para arriba
superaba a todos los del pueblo; un brillante guerrero.
3. El significado de sus señales
El propio representante de Dios, Samuel, se encontró con
Saúl, quien recibió ciertas señales (1 S. 10:1-7). El hecho de
que Dios dé señales no significa necesariamente que una
persona esté en la voluntad de Dios. Simplemente indica que
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David y Salomón
sigue el curso de una decisión tomada. Según estudiamos las
señales relacionadas con Saúl, vemos en ellas grandes signos
de interrogación:
a. La unción de Saúl (1 S. 10:1). Saúl fue ungido por
Samuel con una redoma (un frasco) de aceite. Una redoma
es hecha a mano, hablando de los esfuerzos del hombre. En
comparación, David fue ungido con el aceite vertido de un
cuerno, que indica la creación de Dios.
b. La ofrenda de los panes (1 S. 10:3, 4). A Saúl se le
dijo que se encontraría con unas personas que llevarían tres
panes, de los cuales le serían entregados solamente dos. El
número tres es el símbolo de la Deidad, de la Trinidad. (Hay
tres cielos, tres áreas en el Templo: el Atrio, el Lugar Santo y
el Lugar Santísimo). Esta señal significaba que Saúl no podría
participar de todo lo que estaba en el reino. Solo podría
llegar hasta el Lugar Santo, pero nunca experimentar toda la
abundancia y gloria de la presencia de Dios.
c. El don de profecía (1 S. 10:5-6, 9-11). Cuando Saúl se
alejó de Samuel, Dios le dio otro corazón, y cuando se
encontró con un grupo de profetas, empezó a profetizar de
tal manera, que los que lo vieron se preguntaron: “¿Saúl también
entre los profetas?”.
Sin embargo, el ejercicio de los dones espirituales no es en sí
ninguna evidencia de la aprobación de Dios. El mismo Jesús
dijo, en Mateo 7:22, “Muchos me dirán en aquel día: Señor,
Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre
echamos fuera demonios y en tu nombre hicimos muchos
milagros?”. Pero Jesús dijo que no reconocería a aquellos
que no hubiesen caminado en obediencia a Su voz.
La vida de David
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El hecho de que Dios dé señales no significa que
una persona esté dentro de la voluntad de Dios.
4. Un corazón dividido y la desobediencia hacen caer
a. Un corazón dividido: Saúl era un enigma. Su corazón tenía
doblez y por eso su conducta era variable. Un día seguía a Dios
ardientemente, y otro día caminaba con el mundo. Cuando llegó
el momento de elegir públicamente al rey, todo Israel se reunió y
empezó a echar suertes delante de Samuel para que el pueblo
entero pudiera ver al hombre escogido por Dios.
Entonces la tribu de Benjamín fue seleccionada, y de ella, la
familia de Cis, y finalmente, Saúl. Pero en el preciso momento
en que él como rey debía de estar presente para recibir el
homenaje del pueblo, Saúl se encontraba escondido entre el
bagaje. Al esconderse, su comportamiento fue el de un hombre
que evade sus responsabilidades. Esto fue lo que Saúl hizo
prácticamente toda su vida. Él evadió sus responsabilidades,
y nunca pudo hacerle frente a la realidad.
En el reino de Dios hay que darle la cara directamente a las
áreas de problema. Cuando Dios nos habla, tenemos que
atender, y dejarlo obrar en nuestros corazones. En momentos
de decisión, debemos tomar la determinación correcta, y no
esperar simplemente a que desaparezca el problema. En el
reino, no nos podemos esconder jamás. Sin embargo, Saúl,
el que había de guiar a Israel a las batallas, se ocultó y evadió
sus responsabilidades.
Muchos cristianos hacen lo mismo, aceptan todo muy
complacidos, hasta que llega el momento de la decisión. Pero
debemos entender que nosotros mismos estamos hechos de
28
David y Salomón
decisiones y opciones. Dios nos enfrenta a decisiones y
opciones una y otra vez. Lo que decidimos marca nuestro
rumbo. Cuando decidimos alinearnos con la palabra que Dios
nos ha hablado, elegimos bien y ponemos los pies en la senda
correcta. Pero cada vez que tomamos una decisión
equivocada, apartamos nuestros pies del camino de Dios. A
menudo ocurre que Dios guía a las personas a momentos de
decisión, pero ellas, en vez de enfrentar la prueba directamente
y con resolución, muchas veces procuran, como Saúl, evadir
la responsabilidad o la decisión. En el reino, tenemos que ser
resueltos y tratar las cosas de frente.
b. Desobediencia: Saúl desobedeció cuatro veces a Dios.
Estos incidentes ilustran lo inestable que era Saúl y cómo su
comportamiento oscilaba de aquí para allá, como un péndulo.
En los siguientes párrafos, observe por favor los repetidos
actos de desobediencia de Saúl, cuando se encontraba en
momentos cruciales de decisión.
La frecuente desobediencia de Saúl
•
1 Samuel 13:8-14 Saúl usurpó el ministerio sacerdotal.
En el momento en que debió estar presente para recibir
el reino, Saúl se escondió. Después, se atribuyó un
ministerio que Dios no le había dado y, desobedeciendo
la palabra de Dios, ofreció sacrificios que solo podían
ofrecer los sacerdotes. Aquel hombre que no sabía aceptar
sus propias responsabilidades, se atribuyó un ministerio
que no le correspondía.
•
1 Samuel 14:24 Cuando Israel salió a la guerra, Saúl
ordenó que nadie comiera. Su hijo Jonatán que no escuchó
la orden de su padre, comió un poco de miel. Por ello,
La vida de David
29
Saúl quiso matarlo. Saúl puso a su pueblo bajo esclavitud
y, luego, en un acto terriblemente impulsivo, quiso aniquilar
a su propio hijo.
•
1 Samuel 15:9 Dios le dijo a Saúl que matara a todos
los amalecitas y a su ganado. Saúl, el que había deseado
matar a su propio hijo Jonatán cuando éste inocentemente
desobedeció sus órdenes comiendo un poco de miel, él
mismo desobedeció a Dios dejando vivos a Agag, rey
de los amalecitas, y a todo el ganado. Dios le había dado
instrucciones específicas a Saúl de que matase al rey Agag,
pero él no obedeció.
•
1 Samuel 15:21-31 Cuando el profeta Samuel reprendió
a Saúl por no haber matado a Agag, su reacción fue pedir
a Samuel que lo honrara ante todo el pueblo. Saúl era
amador de la gloria de los hombres más que de la voluntad
de Dios. “¿Cómo podéis vosotros creer, pues recibís gloria
los unos de los otros y no buscáis la gloria que viene del
Dios único?” (Jn. 5-44).
5. Saúl y David - La inestabilidad de Saúl también se
manifestó en su forma de tratar a David.
a. Posesivo: Al principio, Saúl amó a David. Después de la
batalla con Goliat, le amó mucho, y le hizo su paje de armas
(1 S. 16:21). Pero siendo el amor de Saúl posesivo, no le
permitió a David regresar a la casa de su padre.
b. Celoso: Más tarde, movido por los celos, el corazón de
Saúl se volvió contra David cuando las mujeres de Israel
empezaron a cantar: “Saúl hirió a sus miles, y David a sus diez
miles”. Los celos son horrendos. Los celos constituyen uno
30
David y Salomón
de los juicios y maldiciones de Dios. Dios atormenta con el
espíritu de celos a los que no proceden con sinceridad. Acerca
de Israel, dice: “Los provocaré a celos con una nación que
no es nación”. Está diciendo: “Si no quieren andar en mis
caminos, ¿cómo los castigaré? Levantaré otra nación (y esta
nación aludida es especial, es la iglesia del Señor Jesucristo)
para provocarlos a celos, y ustedes verán cumplirse en ella
todas las bendiciones y las promesas, de modo que estén
celosos de ella”. Este es uno de los juicios de Dios. Hubo
veces en que Saúl intentó matar a David impulsado por los
celos. En cada ocasión, vemos que Saúl simboliza al cristiano
que no da frutos, el que ha sido ungido por el Espíritu Santo,
pero no camina en la luz.
Saúl simboliza al cristiano que no da frutos, el
que ha sido ungido por el Espíritu Santo, pero no
camina en la luz.
B. DAVID—LA RAMA FRUCTÍFERA
Ungido y con el carácter desarrollado
A pesar de que Saúl se apartó de los caminos de Dios, el
Señor lo usó para producir en David las cualidades que son
necesarias en un verdadero líder. Durante los casi trece años
que David sirvió fielmente a Saúl, Dios obró en su vida y
desarrolló en él las cualidades de sumisión, servicio, sabiduría
y fidelidad (1 S. 18:5).
1. Sumisión: David estuvo sujeto primero a su padre y luego
a Saúl, a pesar de la forma malvada e injusta en que lo trató.
Podemos comparar la actitud de David con la del centurión
que al hablar con Jesús le dijo: “Yo también soy un hombre
sujeto a autoridad”.
La vida de David
31
2. Servicio: Pese a los desatinos de Saúl, David le sirvió, y
al hacerlo, Dios le enseñó diversas cosas que desarrollaron
en él importantes cualidades. David aprendió a tener la actitud
de un verdadero siervo, y se mantuvo en ella aun sabiendo
que él había sido ungido para rey.
Mi esposa y yo hemos estado en situaciones en las que hemos
tenido que servir “en casa de Saúl”. Hemos estado sujetos a
personas que encajan en la descripción de Saúl y, a través de
esas experiencias, Dios nos ha enseñado mucho.
3. Sabiduría: Saúl atacaba constantemente a David, pero a
medida que aumentaban sus ataques, también aumentaba la
sabiduría de David. ¿En qué momento necesitamos sabiduría?
Cuando tenemos que caminar con mucho cuidado, como un
gato sobre un muro cubierto de pedazos de vidrio; con tanto
cuidado, que no podemos darnos el lujo de cometer un error
porque seremos criticados de una forma u otra. Hacemos
cuanto podemos para mantener el equilibrio. Entonces
necesitamos la sabiduría de Dios. Es bajo estas circunstancias
que Dios desarrolla la sabiduría. Así se encontraba David en
la casa de Saúl, tenía que caminar como si estuviera en el filo
de una navaja. Tuvo que comportarse con mucho cuidado, y
fue a través de ello que Dios desarrolló en él la sabiduría.
4. Fidelidad: Para que David pudiera ser líder del pueblo
de Dios, necesitó también de esta cualidad. Más que los otros,
él tuvo que ser fiel a Saúl, el ungido de Dios, aun cuando Saúl
trató de matarlo. Cuando David tuvo la oportunidad de matar
a Saúl, el Espíritu de Dios se lo impidió. David siempre fue
fiel.
32
David y Salomón
Dios desarrolla sus cualidades por medio
de la adversidad
Juntamente con la sabiduría, la fidelidad es una de las
cualidades exigidas en el líder. Ambas se desarrollan
en circunstancias muy irritantes. La sabiduría se
produce cuando caminamos “en el filo de la navaja”, y
la fidelidad resulta de ser fieles y sinceros con alguien
que nos trata con falsedad. Por medio de la adversidad,
Dios desarrolla en nosotros sus cualidades.
C. COMPARACIÓN ENTRE DAVID Y SAÚL
La obediencia—Clave para ser fructífero
1. Obediencia a medias: el defecto fatal de Saúl. La
vida infructuosa de Saúl se explica con su obediencia a
medias. En 1 Samuel 15, vemos que cuando Saúl desobedeció
a Dios perdonándoles la vida al rey de los amalecitas y a sus
ovejas y bueyes, Samuel le preguntó en el versículo 19: “¿Por
qué no obedeciste a la voz del Señor?”, a lo que Saúl respondió
diciendo que sí había obedecido, pero...
En otras palabras, su obediencia había sido parcial, no completa.
La obediencia a medias es probablemente la forma de
desobediencia más astuta y peligrosa. Obedeciendo a medias
podemos justificar nuestros propios actos. Puede ser que Dios
nos diga: “Avancen con los dos pies”, y que nosotros adelantemos
el pie derecho diciendo: “Señor, te estamos obedeciendo”. Sin
embargo, Dios pide una obediencia completa.
La respuesta de Samuel a Saúl es muy importante: “¿Se
complace Jehová tanto en los holocaustos y víctimas como
La vida de David
33
en que se obedezca a las palabras de Jehová? Ciertamente el
obedecer es mejor que los sacrificios” (15:22). La obediencia
completa es de vital importancia incluso más importante que
los sacrificios de nuestra parte.
Saúl estaba preparado para ofrecer a Dios toda clase de
sacrificios, y asimismo nosotros en nuestras vidas, a veces le
daríamos a Dios lo que fuera, con tal de no hacer lo que Él
indica.
En los días de Jesús, los escribas y los fariseos escudriñaban
esmeradamente la ley del Señor. Al pagar los diezmos, pesaban
hasta la semilla más diminuta de sus huertos, para estar seguros
de estar dando a Dios la décima parte. Sin embargo, a pesar
de ser tan minuciosos en sus sacrificios, sus corazones estaban
muy lejos de obedecer a Dios.
Podemos sacrificarnos. Podemos obedecer a Dios en ciertos
aspectos. Podemos recibir las bendiciones de Dios, pero lo
que Dios exige ahora son corazones que le obedezcan
completamente. “Ciertamente, el obedecer es mejor que los
sacrificios, y el prestar atención que la grosura de los
carneros”. “Prestar atención” significa oír y escuchar con
diligencia lo que Dios está diciendo, y hacerlo.
a. La obediencia a medias es rebelión. Samuel le dijo a
Saúl, “Porque como pecado de adivinación es la rebelión, y
como ídolos e idolatría la obstinación” (1 S. 15:23). La vida
de Saúl fue una mezcla terrible. En algunas ocasiones
profetizaba bajo la unción de Dios, pero en otras, bajo un
mal espíritu. Por no haber obedecido totalmente a Dios, su
rebelión le abrió la puerta a la hechicería y su obstinación fue
como idolatría a los ojos del Señor.
34
David y Salomón
b. La obediencia a medias acarrea juicio. Samuel le dijo
a Saúl: “Por cuanto tú desechaste la palabra de Jehová, él
también te ha desechado para que no seas rey” (1 S. 15:23).
Saúl no había rechazado a Dios; sin embargo, rechazó Su
Palabra, y rechazar la palabra de Dios acarrea juicio. Al morir
Saúl, David escribió una endecha: “¡Ha perecido la gloria de
Israel sobre tus alturas! ¡Cómo han caído los valientes!” (2 S.
1:19).
2. Obediencia completa: Lo que Dios busca en Su
pueblo. Hoy en día hay cristianos que, como Saúl, no
producen frutos para el Señor. No son decididos ni están
tomando las decisiones correctas y su entrega no es total.
Conocen lo que dice la Biblia pero no obedecen lo que Dios
habla a sus corazones. A pesar de que están unidos a una
iglesia y a Cristo, la vida de Cristo ya no está fluyendo a
través de ellos como fluyó una vez.
El Señor se está moviendo otra vez para traerle una nueva
vida a Su Iglesia. La primavera está llegando de nuevo al
reino espiritual. Como los árboles de pino y de ciprés pasan a
través del ciclo de las cuatro estaciones: primavera, verano,
otoño e invierno; así también sucede en lo espiritual. Al llegar
el invierno, a menudo vemos en esos árboles las hojas del
año anterior, que de alguna forma permanecieron durante todo
el año. Pero cuando el fluir de una nueva vida llega en la
primavera, esas hojas viejas se caen. Hay una hermosa verdad
espiritual escondida detrás de este ejemplo de la naturaleza.
Cuando la vida nueva de Dios llega a nosotros, la antigua
vida, como la hoja de un árbol, cae.
Cuando en nosotros entra la vida nueva en Dios,
la antigua vida se desprende como la hoja de un árbol
La vida de David
35
Pero existe una segunda interpretación de esta preciosa verdad.
Una nueva vida, junto a un nuevo mover, está por llegar a la
Iglesia. Con este nuevo mover, las hojas muertas se
desprenderán. El nuevo mover nos llevará a una gloria, plano
y dimensión del Espíritu, que no hemos conocido antes. El
nuevo mover del Espíritu será bienvenido y traerá inmensa
gloria a la mayoría de personas. Será la vida misma la que
desprenda las hojas muertas y haga que muchos que quizá
han caminado con insinceridad por mucho tiempo, sean
arrojados.
El Espíritu de Dios nos ruega, como Samuel le rogó a Saúl,
que nos conduzcamos con rectitud, que nos volvamos a Él, y
andemos con Él de todo corazón. El mensaje del Señor es:
“Hijo mío, hija mía, dame tu corazón; déjame hacer de ti un
David y quitarte el corazón de Saúl”.
Dios no desea que ninguno de nosotros perezca o quede
descalificado para alcanzar los propósitos divinos. Por el
contrario, quiere cambiarnos, poner Su mano sobre nosotros
para que nueva vida empiece a fluir por nuestras ramas y
seamos de nuevo fructíferos. Dios puede tomar nuestros
corazones y tornarlos firmes y sinceros. Dios puede hacer de
nosotros hombres y mujeres conforme a Su corazón, sacando
la naturaleza de Saúl y reemplazándola con un corazón
semejante al de David.
Pero Dios ha establecido un tiempo límite. Hoy es el día
de responder, porque un nuevo mover de Dios esta por
empezar y Él nos está diciendo que cuando se produzca, las
hojas muertas serán desechadas. ¿Por qué ser una hoja
muerta? ¿Por qué ser una rama que no produce fruto?
36
David y Salomón
Digámosle al Señor: “¡No quiero ser como Saúl; no quiero
ser débil! ¡Señor, transfórmame! Quiero producir fruto. Quiero
liberarme de los celos y de la envidia que me esclaviza. Señor
Jesús, quiero ser solo para ti; ¡quiero ser como David y no
como Saúl!”.
El final de la vida de Saúl fue infeliz. Dios ya no le hablaba
más, ni por sueños ni por urim (señales), ni por medio de los
profetas. En lugar de ello, Saúl era asesorado por la bruja de
Endor. Así ha sido mi propia experiencia con los “Saúles”
que he conocido. Se va la unción y ellos se vuelven a la brujería,
ya sea en forma consciente o inconsciente. Por eso, en vez de
bendecir al pueblo, lo maldicen, al grado de hacer sufrir a la
gente emocional, espiritual y físicamente.
David, por el contrario, el dulce cantor de Israel, era un hombre
conforme al corazón de Dios, el cual hacía todo lo que Dios
quería. Aun cuando cayó en pecado, buscó con vehemencia
al Señor en arrepentimiento, y fue gloriosamente rehabilitado.
Gobernó con justicia en el temor del Señor (2 S. 23:3), con
un corazón sincero. Lo único que David deseaba era la
presencia del Señor y agradarle en todo momento.
La vida de David
Capítulo 3
LA FORMACIÓN DE UN REY
Preparación para el milenio
I. LA FORMACIÓN DE UN REY
A. FIDELIDAD
1. Importancia bíblica de la fidelidad
2. El desarrollo de la fidelidad
a. La fidelidad en lo poco
b. La fidelidad y la compasión
c. La fidelidad y los adversarios
B. SABIDURÍA
1. Importancia bíblica de la sabiduría
2. El desarrollo de la sabiduría
a. Sabiduría en el comportamiento
el propósito de los provocadores.
b. Sabiduría en el discernimiento
el estudio de la palabra y la oración.
C. JUSTICIA
1. Importancia bíblica de la justicia
2. El desarrollo de la justicia
a. Forjada por muchos quebrantamientos
b. Forjada por el temor de Jehová
D. CONCLUSIÓN
37
38
David y Salomón
Esta maravillosa promesa del reino está al alcance de todos
los cristianos nacidos de nuevo, que estén dispuestos a rendir
sus vidas totalmente a Dios para que les prepare para reinar
con Cristo en el milenio. Con el fin de entender los principios
de la preparación que Dios da al hombre para ser rey, este
estudio contempla los primeros años de David, rey de Israel.
El rey David es símbolo o representación de los vencedores
que reinarán con Cristo en la tierra durante mil años. A medida
que veamos las cualidades desarrolladas en la vida de David,
preparándole para reinar sobre Israel, obtendremos una mayor
comprensión de lo que Dios quiere hacer en nuestras vidas
para equiparnos para gobernar en el milenio. Fidelidad,
sabiduría y justicia son las tres cualidades principales que
las Escrituras consideran esenciales para el reino, y que Dios
desea que se manifiesten en nuestras vidas, tal como se
manifestaron en la vida de David.
A. FIDELIDAD
1. Importancia bíblica de la fidelidad
En 1 Corintios 4:1, 2 el apóstol Pablo dice: “Así pues,
téngannos los hombres por servidores de Cristo, y
administradores de los misterios de Dios. Ahora bien, se
requiere de los administradores, que cada uno sea hallado
fiel”. Asimismo, Hebreos 3:2 hace hincapié en la importancia
de la fidelidad cuando menciona a Jesús como nuestro Apóstol
y Sumo Sacerdote y dice: “el cual es fiel a quien le constituyó,
como también lo fue Moisés en toda la casa de Dios”.
En el versículo 5 del capítulo 3 de Hebreos, dice sobre
La vida de David
39
Moisés, el cual mandó sobre Israel: “Y Moisés, a la verdad
fue fiel en toda la casa de Dios, como siervo, para testimonio
de todo lo que se iba a decir”.
Apocalipsis 19:11 nos muestra a Jesús, el Señor de la Gloria,
cabalgando en un caballo blanco. Los dos nombres que se le
dan aquí son: “Fiel y Verdadero”. Además, en Apocalipsis
17:14, los que siguen al Cordero adondequiera que va, son
los “llamados, escogidos y fieles”. (Notemos la secuencia:
Primero llamados, después escogidos y luego fieles).
2. El desarrollo de la fidelidad
a. La fidelidad en lo poco. El primer trabajo de David fue
de pastor (1 S. 17). Es interesante notar que David solo
cuidaba unas pocas ovejas. A menudo la gente se imagina a
David, el muchacho pastor, como responsable de muchas
ovejas. Pero Eliab, su hermano mayor, lo rebajó como suelen
hacer los hermanos, hablando de las “pocas ovejas” que David
apacentaba en el desierto (1 S. 17:28). Muchas veces
pensamos que nuestra labor es pequeña, pero la palabra de
Dios dice: “El que es fiel en lo muy poco, también en lo más
es fiel” (Lc. 16:10).
Dios nos prueba en lo poco, para ver si
podemos ser promovidos a mayores
responsabilidades en su reino.
b. La fidelidad y la compasión. Existe además otra lección
que podemos aprender de lo que la Palabra dice acerca del
rebaño que David cuidaba. En el Salmo 78:71 tenemos una
descripción de esas ovejas. Se nos dice que Dios trajo a
David de tras las ovejas paridas. La Palabra de Dios menciona
40
David y Salomón
esto porque hay otra cualidad que debe acompañar a la
fidelidad perfecta: la compasión.
Es muy importante que los líderes entiendan y acepten las
limitaciones de los demás. Deben dedicarle tiempo a los
débiles y a los incapacitados; al hacerlo, se irá desarrollando
la compasión y la nobleza de carácter. Los líderes deben
aprender a adecuar su paso a las necesidades de los que
están alrededor de ellos. El apóstol Pablo desarrolla este
pensamiento en Romanos 15:1: “Así que, los que somos
fuertes debemos soportar las flaquezas de los débiles y no
agradarnos a nosotros mismos”.
Es importante notar que David seguía a las ovejas; él no
caminaba adelante, sino en pos de ellas. En otras palabras,
dejaba que fueran las más débiles las que marcaran el paso.
Si usted está guiando un rebaño, es muy importante que le
permita a las ovejas débiles marcar el paso, con el objeto de
poder cuidarlas a todas.
Si tenemos esta actitud, nuestra fidelidad no será endurecida.
Muchas veces la fidelidad puede ser improvisada, dura e
insensible y puede adoptarse una actitud equivocada.
Podemos decir: “esta es la voluntad de Dios, así que debemos
apresurarnos a actuar de tal forma”; pero, si las demás
personas no actúan de igual forma, los reprochamos o los
dejamos atrás y nos separamos de ellos, ya sean parientes o
miembros de nuestro grupo.
Los líderes deben aprender a adecuar su paso
al de los que están cerca de ellos.
La vida de David
41
Hace algunos años estuve en un campamento en Derbyshire,
Inglaterra, y dediqué los días miércoles a llevar grupos de
personas a un bonito lugar llamado “la cueva azul”. Éste se
encontraba en la cumbre de una montaña. En una de esas
ocasiones, tuve un grupo de personas ancianas, algunas de
más de setenta años. Y yo, irreflexivamente, corrí hasta llegar
a la cúspide, (como líderes debemos ser cuidadosos, porque
las personas imitarán lo que hagamos). Una apreciable señora,
ya entrada en años, trató de imitarme; abandonó el sendero y
corrió cuesta arriba sobre el césped. Cerca de la cima se
resbaló y yo, por supuesto, traté de sostenerla; al hacerlo
puse mis pies sobre algunas piedras que empezaron a rodar y
provocaron una avalancha que hubiera podido golpear
seriamente a los que venían subiendo detrás de nosotros.
Mi espíritu clamó en ese instante: “¡Señor, Tú me has enviado
aquí a salvar y no a matar a las personas!” En ese preciso momento
el Señor abrió mis ojos y pude ver un ángel detrás de cada santo.
Fue hermoso verlos; los ángeles son espíritus ministradores que
tienen como misión velar por cada uno de los herederos de la
salvación. La Palabra de Dios dice que cada santo tiene un ángel
cuidándolo y que hay ocasiones en que los ángeles se manifiestan
físicamente cuando tenemos una necesidad.
Vi como esos ángeles, que eran bellos, majestuosos y regios,
estaban colocados detrás de estos amados, cuyas edades ya
eran avanzadas. Los ángeles estaban muy preocupados por
lo que se les había encomendado; en lugar de guiar su camino,
los seguían, caminando detrás de cada uno de ellos y, por
supuesto, ninguna piedra tocó a estos amados hermanos.
Dios quiere desarrollar en cada uno de nosotros un genuino
42
David y Salomón
interés por los demás. David, el joven pastor de ovejas, desde
muy temprana edad seguía a las ovejas y a sus crías,
demostrando que, en su vida, la preocupación por los demás
y la compasión, estuvieron ligadas a su fidelidad. Como
pastores nunca debemos ser insensibles y decir: “He oído
palabra de Dios, así que sigamos adelante”, sin que nos
importe que las ovejas débiles se queden atrás. ¡Un pastor
nunca debe hacer esto! Un pastor debe adecuar el paso de
acuerdo a las ovejas más débiles, porque así lo desea Dios.
La fidelidad también se desarrolla al enfrentar a
poderosos adversarios.
c. La fidelidad y los adversarios. La fidelidad se
desarrolló en la vida de David en el redil cuando iba en pos
de las ovejas y de sus crías. Pero la fidelidad también se
desarrolla al enfrentar a poderosos adversarios. La fidelidad
de David se reforzó en la casa de Saúl.
Mientras estuvo en la casa de Saúl (1 S. 18), David ocupó un
puesto de autoridad sobre el pueblo y el ejército de Israel.
David fue su capitán en batalla, y esto en una época de gran
angustia. Vemos aquí a David velando por personas, no por
ovejas, y en sus entradas y en sus salidas es el líder que va a
la vanguardia ¡Cuánto amaba Israel a David! (v.16). Ahimelec,
el sacerdote, dijo a Saúl: “¿Y quién entre todos tus siervos es
tan fiel como David, yerno también del rey, que sirve a tus
órdenes y es ilustre en tu casa?” Aun en la casa de su
adversario, David fue conocido por su fidelidad. En 1 Samuel
24:7, David le manifestó su fidelidad a Saúl, perdonándole la
vida pese a que Saúl procuraba matarle.
La vida de David
43
Dios arregla las circunstancias para desarrollar fidelidad en
nosotros. Al principio quizá nos haga ocupar puestos
insignificantes y sin importancia para ver si podemos ser fieles
en asuntos menores; porque si lo somos, nos pondrá en
puestos de mayor responsabilidad. También puede llevarnos
a la casa de nuestros adversarios, porque necesitamos
aprender a ser fieles tanto a los que nos hacen bien como a
los que nos hacen mal. Eso es verdadera fidelidad.
B. SABIDURÍA
1. Importancia bíblica de la sabiduría
La sabiduría es una cualidad esencial para reinar. Hablando
de la sabiduría, Proverbios 8:15, 16 dice: “Por mí reinan los
reyes, y los príncipes determinan justicia. Por mí dominan los
príncipes, y todos los gobernadores juzgan la tierra”. Por eso
Salomón, rey de Israel, dijo acerca de la sabiduría: “Sabiduría
ante todo; adquiere sabiduría; y sobre todas tus posesiones,
adquiere inteligencia. Engrandécela y ella te engrandecerá; ella
te honrará, cuando tú la hayas abrazado. Adorno de gracia dará
a tu cabeza; corona de hermosura te entregará” (Pr. 4:7-9).
2. El desarrollo de la sabiduría
La sabiduría es la habilidad de separar mentalmente los
asuntos para distinguir, discernir y tomar decisiones correctas
en el liderazgo. Fue desarrollada excepcionalmente en David;
y el pueblo sobre el que gobernó dio testimonio de su sabio
comportamiento cuando fue rey. Encontramos un ejemplo en
2 Samuel 14:17, 20: “Pues mi señor el rey, es como un ángel
de Dios para discernir lo bueno y lo malo... mi señor es sabio
conforme a la sabiduría de un ángel de Dios, para conocer lo
44
David y Salomón
que hay en la tierra”. Durante todo su reinado, David fue
conocido no solo por su fidelidad, sino también por su
sabiduría.
a. Sabiduría en el comportamiento—El propósito de
que exista gente que nos irrite. La sabiduría comenzó a
desarrollarse en David cuando estuvo en el aprisco. Él
aprendió sabiduría guiando a su rebaño (Sal. 78:72), “y los
apacentó conforme a la integridad de su corazón, los pastoreó
con la pericia de sus manos”.
Esta particularidad de tener un sabio comportamiento se
desarrolló todavía más en casa de Saúl, en la que David “se
conducía prudentemente en todos sus asuntos; y Jehová estaba
con él”, (ver 1 Samuel 18:14). Por esta conducta prudente,
Saúl le temía (1 S. 18:15). Así sucede con nosotros: la
manifestación de sabiduría por medio de un proceder
decoroso, hace que aun nuestros enemigos nos teman.
A veces Dios nos pone al lado de Saúles, o “inspectores de
frutos”. En cierta ocasión, una dama cristiana fue invitada a
alojarse en una casa ocupada por otra señora visitante. Esta
última aprovechaba cada oportunidad para irritarla
intencionadamente. El resultado fue que la primera se vio
obligada a clamar constantemente a Dios pidiendo sabiduría
para saber cómo proceder de palabra y de obra. Cuando
habían transcurrido varios días, la provocadora dijo: “¿Se da
usted cuenta de lo difícil que le estoy haciendo la vida? Y
antes de que la dama cristiana pudiera contestar, ella solamente
añadió: “Solo quería saber si usted era auténtica o no”. Y
después le dijo: “Usted ha pasado la prueba, querida”.
La vida de David
45
Dios desarrolla en nosotros un carácter prudente, al
colocar a nuestro lado un “Saúl” o “inspector de
frutos”, ya sea en la oficina o en cualquier
área de trabajo.
A veces Dios nos pone en situaciones en las que la gente nos
provoca adrede, solo para ver si somos auténticos o no. Por
eso recordemos clamar a Dios por misericordia si estamos
soportando personas “provocadoras” o “inspectoras de
frutos”. Esto es de suma importancia porque Dios desarrolla
en nuestras vidas un carácter prudente al colocar a nuestro
lado un “Saúl” o “inspector de frutos”, en la oficina o en el
lugar en que nos desenvolvemos. Esto con el fin de que
alcancemos una conducta irreprensible de palabra y de obra.
Tenemos que vigilar permanentemente nuestro proceder,
sabiendo que el “inspector de frutos” nos observa con
atención. Así es como Dios desarrolla en nuestras vidas
carácter y sabiduría en el área del comportamiento.
b. Sabiduría en el discernimiento—La oración y el
estudio de la Palabra. Otro aspecto de la sabiduría que
debe ser desarrollado en nuestras vidas, es la capacidad de
tomar las decisiones correctas. Este aspecto de la sabiduría
se desarrolla por medio de la oración y del estudio de la
Palabra de Dios.
El libro de Proverbios dice mucho acerca de la sabiduría. “Y
me hallan los que temprano me buscan” (Pr. 8:17). “Hijo mío,
si recibieres mis palabras, y mis pensamientos guardares dentro
de ti, haciendo estar atento tu oído a la sabiduría; si inclinares
tu corazón a la prudencia, si clamares a la inteligencia, y a la
prudencia dieres tu voz; si como a la plata la buscares, y la
escudriñares como a tesoros” (Pr. 2:1-4). “Porque Jehová
46
David y Salomón
da la sabiduría” (Pr. 2:6). “Cuando la sabiduría entre en tu
corazón...la discreción te guardará...para librarte del mal
camino” (Pr. 2:10-12). Estas escrituras ponen de relieve que
la sabiduría también es un don de Dios; un regalo que
obtenemos cuando lo buscamos a Él con sinceridad.
Además, en el área del discernimiento la sabiduría se recibe o
desarrolla por medio de la oración y del alimento sólido de la
Palabra de Dios. Cuando profundizamos en la Palabra de
Dios más allá de las doctrinas elementales y empezamos a
recibir de ella el alimento sólido, nuestros sentidos se ejercitan
en el discernimiento de lo bueno y lo malo (He. 5:14).
Es absolutamente esencial que comamos el alimento sólido
de la Palabra de Dios para adquirir discernimiento. Así lo
dice Pablo: “Sin embargo, hablamos sabiduría entre los que
han alcanzado la madurez; y sabiduría no de este siglo, ni de
los príncipes de este siglo que perecen” (1 Co. 2:6). El Señor
revela Su sabiduría a los que han alcanzado la madurez.
David se saturó de proverbios, lo cual era una fuente
de sabiduría para él.
Al contemplar la vida de David, es indiscutible que él estaba
saturado de proverbios, porque los citaba (y no del libro de
Proverbios dados por Dios a Salomón, hijo de David).
Después de perdonarle la vida a Saúl, dijo: “Como dice el
libro de los antiguos, de los impíos saldrá la impiedad; así que
mi mano no será contra ti” (1 S. 24:13). El conocimiento de
proverbios que David tenía, fue lo que le guardó de matar a
Saúl en las cuevas de En-gadi. David estaba saturado de
proverbios, lo cual era una fuente de sabiduría para él.
La vida de David
47
A diferencia de David, nosotros tenemos todos los treinta y
un capítulos del libro de Proverbios para meditar en ellos.
Dios nos los ha dado para que podamos “entender sabiduría
e instrucción... palabras de sabios y sus dichos profundos”
(Pr. 1:2-6). Este libro está diseñado especialmente para
enseñar sabiduría a jóvenes y a viejos.
C. JUSTICIA
1. Importancia bíblica de la justicia
Las Escrituras nos muestran la importancia que tiene la justicia
en la vida de un rey. Al final de su vida el rey David dijo:
“Habrá un justo que gobierne entre los hombres. Que gobierne
en el temor de Dios” (2 S. 23:3). También en el Salmo 45:37, al describir al Rey Jesús, se hace énfasis en su justicia:
“Ciñe tu espada sobre tu muslo, oh valiente, con tu gloria y tu
majestad. En tu gloria sé prosperado; cabalga sobre palabra
de verdad, de humildad y de justicia... Tu trono, oh Dios, es
eterno y para siempre; cetro de justicia es el cetro de tu reino.
Has amado la justicia y aborrecido la maldad”.
2. El desarrollo de la justicia
Un rey debe tener fidelidad, estar lleno de sabiduría y ser
justo. Ser justo significa hacer lo que es correcto, puro y
honesto. Parecerá extraño, pero una persona puede ser sabia
sin ser justa. Es posible discernir los asuntos y tener capacidad
para tomar decisiones correctas y, sin embargo, no ser justo.
Salomón es un buen ejemplo de una persona sabia pero no
justa. Él sabía lo que era correcto, pero no lo practicaba.
48
David y Salomón
Es extraño, pero cierto, que se puede ser sabio
y aún así no ser justo.
La justicia es necesaria para poder llevar a la práctica la
sabiduría que tengamos. Satanás, por ejemplo, se corrompió
a través de su sabiduría porque la empleó para obtener sus
propios fines (Ez. 28). La sabiduría por sí sola no es suficiente;
también es necesaria la justicia en nuestras vidas, porque si
usamos la sabiduría para satisfacer nuestros propios fines,
caminaremos hacia la destrucción. La justicia también es
importante porque el trono de un rey es afirmado en justicia
(Pr. 25:5). A medida que vayamos caminando en el Señor,
debemos comprender que nuestras vidas y nuestros derechos
al trono están afirmados o establecidos en justicia.
a. Forjada a través de muchos quebrantamientos. Con
base en Apocalipsis 21:18 “la ciudad era de oro puro,
semejante al vidrio limpio”, el Señor me dio una analogía en
cuanto a la justicia, y me habló de manera impresionante
respecto a su significado. El cristal claro o puro tiene un precio
muy alto porque no refracta ni distorsiona la luz de ninguna
manera.
Un cristal claro o puro permite que se vea a través de él una
imagen pura. Sentí que el Señor me hablaba muy claramente
respecto a esto: “Quiero que mi pueblo sea como el cristal de
la ciudad, tan puro que Mi justicia no sea distorsionada en
forma alguna cuando brille a través de él”.
Para que se forme este cristal, que es una imagen de la justicia,
se necesita constante pulverización y quebrantamiento. Así
también, un hombre justo, es producto de muchos
La vida de David
49
quebrantamientos y tribulaciones. “Y a causa de su
desfallecimiento hacen por purificarse” (Job 41:25).
Yo sentí que el Señor me decía: “Los justos pasarán por mucho
quebranto y trituración para que sus partes constituyentes sean
del todo molidas. Entonces, cuando Yo los junte de nuevo y
los meta en el fuego, saldrán como vidrio limpio y Mi justicia
brillará a través de ellos, no distorsionada ni refractada”.
Yo deseo que mi pueblo sea como el cristal de la
ciudad: tan puro que Mi justicia no se distorsione
cuando resplandezca a través de él.
b. Forjada en el temor del Señor. La justicia se desarrolla
también mediante la revelación del temor de Dios—el poder
convincente del Señor que nos golpea el corazón. Cuando
David estuvo en la cueva de En-Gadi, alargó su mano y cortó
el borde de la vestidura de Saúl, pero su corazón le golpeó; el
temor del Señor hizo que se arrepintiera de esto y que se
volviera a la justicia (1 S. 24:5).
El apóstol Pablo habló de “conocer el temor del Señor”. Este
poder convincente de Dios, endereza al hombre y le hace
justo (2 Co. 5:11).
c. Es necesario pagar un precio muy alto. La justicia
tiene un alto costo. Por ejemplo, el Salmo 15:4 describe al
hombre justo como el que “aun jurando en daño suyo, no por
eso cambia”. A veces cuesta mucho honrar una promesa que
hemos hecho, pero el hombre justo mantendrá su palabra, a
toda costa. Un cántico infantil dice: “Atrévete a ser un Daniel;
atrévete a mantenerte firme tú solo”. A veces, declararse a
favor de la justicia cuesta muchos años de sufrimiento. Como
50
David y Salomón
Daniel, quizá tengamos que mantenernos firmes nosotros solos.
Quizá signifique que nos expulsen de nuestra propia iglesia,
del círculo de amigos o de la familia, porque no están dispuestos
a caminar de lleno por las sendas de la justicia y de la verdad.
Hay que pagar un precio por la justicia.
La firme postura de David le significó muchos años
de vagar por el desierto; pero fue allí que la justicia
se forjó plenamente en su interior.
En ocasiones tendremos que declararnos firmes contra un
amigo. Yo he tenido que enfrentarme a otras personas; algunas
del ministerio y otras que son incluso mis amistades personales,
para decirles: “Eso no está bien. Dios me ha dicho que debes
dejar el ministerio por un tiempo”. Por lo tanto, hay cierta
soledad cuando caminamos por los senderos de la justicia.
Cualquiera que ingrese a un ministerio o a una puesto que
Dios le ha ordenado, conocerá momentos en que tendrá que
declararse completamente solo a favor de la justicia. El mismo
Jesús vio a muchos de sus seguidores darle la espalda cuando
se sintieron perturbados por la verdad (Jn. 6:66). También
Josué tuvo que mantenerse firme en una postura cuando dijo:
“pero yo y mi casa serviremos a Jehová”. Si escogemos la
senda de la justicia, a veces la caminata se tornará sumamente
solitaria. Pero hay Alguien más en el camino—el Señor de la
Gloria. ¡Y eso hace que todo valga la pena!
D. CONCLUSIÓN
La fidelidad, la sabiduría y la justicia son verdaderamente
esenciales para poder, por la gracia de Dios, tener parte en la
primera resurrección, entrar en el reino milenial y reinar y
La vida de David
51
gobernar con Cristo sobre la tierra. Esa era la meta del apóstol
Pablo y también la esperanza del rey David, quien será
resucitado para ser rey en Jerusalén. Estas cualidades deben
ser forjadas en nosotros si deseamos calificar, por la gracia
de Dios, para ser reyes y sacerdotes.
Entonces, resumamos nuestra responsabilidad:
Mantengamos frente a nosotros la visión de lo que el Señor
ha dispuesto para nuestras vidas: ser reyes y sacerdotes para
Él. Caminemos y vivamos con realeza y majestad, en fe,
sabiduría y justicia, como conviene a nuestro llamamiento
celestial.
Daniel 12:3 nos dice que “los entendidos resplandecerán como
el resplandor del firmamento; y los que enseñan la justicia a la
multitud, como las estrellas a perpetua eternidad”. Una estrella
tiene luz, y Dios quiere que Su pueblo esté lleno de Su justicia,
de modo que ésta resplandezca en nosotros como lo hace la
luz de una estrella. Además, una estrella mantiene su curso
(ver Prov. 4:26-27). No se vuelve ni a la derecha ni a la
izquierda.
Dejemos que el Espíritu Santo tome nuestros corazones, y
entendamos que Dios, en su infinita paciencia y amor, está
preparándonos para el trono. Pero, para sentarnos en el trono
como vencedores con Jesucristo, estas cualidades deben
forjarse en nuestras vidas, por Su gracia. Dejemos que el
Señor tome nuestras vidas de tal manera, que nos sometamos
al Espíritu Santo que nos induce a la fidelidad, a la sabiduría y
a la justicia. Al hacerlo, permitiremos que Dios forje en nuestras
vidas estas cualidades, y nos prepare para el trono.
52
David y Salomón
La vida de David
53
Capítulo 4
LA EXPERIENCIA EN SICLAG
I. LA EXPERIENCIA EN SICLAG
A. EL CAMINO A SICLAG
LAS PRUEBAS EN EL DESIERTO
1.
2.
3.
4.
La necesidad del consuelo de un líder espiritual
La necesidad del consuelo de un amigo
La incapacidad de entenderla guía de Dios
Sus colaboradores son atacados—asesinato de
Ahimelec
5. Encarcelado por Aquis
6. Errante
7. Aventando el grano
8. Compañeros poco comunes—la cueva de
Adulam
9. Advertencias proféticas
10. Traición—El desierto de Zif
11. Una vasija rota
12. Jonatán—El mensajero de Dios
13. La oportunidad de “Ayudar a Dios”
14. Dios habla a través del enemigo
15. La muerte de Samuel
16. David y Abigail
17. La segunda oportunidad
54
David y Salomón
B. LOS EVENTOS DE SICLAG– DE LA
DERROTA A LA VICTORIA
1. El reinado después de tres días
2. Siclag y la cruz
a. El rechazo
b. La pérdida de todo
c. La recuperación y la victoria
C. EL HOMBRE DE SICLAG—UN SÍMBOLO
DE CRISTO
1.
2.
3.
4.
5.
6.
El Pastor
La Tribu de Judá
El Pan de vida
El Profeta
El Rechazo
El Reinado
D. LA LECCIÓN DE SICLAG—ESPERANZA
La vida de David
55
INTRODUCCIÓN
“Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en
Cristo Jesús, que estando en la condición de hombre se humilló
a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte
de cruz. Por lo cual Dios le exaltó hasta lo sumo, y le dio un
nombre que es sobre todo nombre para que en el nombre de
Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en
la tierra, y debajo de la tierra” (Fil. 2:5, 8-10). El camino para
subir es hacia abajo. Para alcanzar las montañas de la victoria
espiritual, debemos caminar primero en el valle de la prueba.
Siclag fue uno de los periodos más sombríos de la vida de
David, quien estaba por convertirse en rey de Israel. Pero
una vez que lo hubo atravesado, Dios lo exaltó. En la
experiencia de Siclag, que fue la culminación de una serie de
pruebas puestas a David, hay una ilustración y prefigura de la
cruz de Jesucristo. De esta experiencia, podemos aprender
una valiosa lección que nos ayudará individualmente en nuestras
vidas cristianas.
A. EL CAMINO A SICLAG—PRUEBAS EN EL
DESIERTO
David empezó como pastor. Fue ungido por Samuel para
convertirse en rey después de que Dios rechazara a Saúl por
causa de desobediencia. Mas tarde, tras haber derrotado a
Goliat, se convirtió en capitán del ejército de Saúl. En diversas
ocasiones un espíritu de celos indujo a Saúl a intentar asesinar
a David, hasta que finalmente éste se vio obligado a abandonar
la casa de Saúl para salvar su vida. Luego siguieron para
David, casi diez años de viajes por el desierto.
56
David y Salomón
1. La necesidad del consuelo de un líder espiritual.
Al principio del periodo de David en el desierto, Samuel aún
vivía. David fue a él y le refirió todo lo que Saúl le había
hecho. Acudir al profeta fue de mucho aliento para David,
porque Samuel comprendía tanto a David como a Saúl.
Muy poca gente hubiera tenido la aptitud de comprender la
situación que David atravesaba, porque Saúl, para el resto
de Israel, era un hombre nombrado por Dios para ser rey. Lo
más probable es que muchos vieran a Saúl con sumo respeto.
Quizá le consideraban un gran libertador, no tomando en
cuenta el lado traicionero de su vida. No se hubiera nadie
imaginado lo que David estaba viviendo a manos de Saúl.
Por lo tanto, David, en su angustia, acudió a Samuel, el cual
podía verdaderamente comprender.
Cuando estamos experimentando pruebas, necesitamos tener la
posibilidad de acudir a alguien que pueda ver más allá del velo, y
que comprenda lo que nos pasa. Esto es porque necesitamos el
consuelo de alguien que pueda entender nuestra situación.
El camino para subir es hacia abajo. Para alcanzar
los montes del triunfo espiritual, debemos primero
atravesar el valle de la prueba.
Todos sentimos la necesidad de ser aceptados por los que
están en autoridad. Para David era muy difícil entender lo que
Saúl hacía, afligiéndolo y desechándolo. David en verdad no
entendía que Dios permitía tales actitudes para poder,
finalmente, ascenderle. En cierto modo, se nos dificulta ver
del otro lado del velo para comprender que Dios está detrás
de todas las pruebas.
La vida de David
57
2. La necesidad del consuelo de un amigo.
Por otro lado, el corazón humano no clama solo pidiendo la
fortaleza que da un Samuel (uno que está en autoridad
espiritual), sino que pide consuelo y comprensión de un
compañero o amigo. Por eso David buscó aliento en Jonatán
(1 S. 20:1). Cuando al igual que David, somos perseguidos
por alguien, hay una constante lucha por la reconciliación y
por justificar nuestro propio esfuerzo y existencia. ¡Cuánto
clamó e imploró David a Jonatán! Jonatán comprendió que
David realmente estaba diciendo: “Si tu padre tan solo
entendiera que no procuro causarle ningún mal”.
3. La incapacidad de entender la guía de Dios.
Luego David huyó buscando a Ahimelec, el sacerdote ungido,
(ver 1 Samuel 21). En todo nuestro vagar como gente
desechada, Dios está dirigiendo nuestras sendas. A menudo
no vemos la mano de Dios, y pensamos que solo
deambulamos sin destino. Una de las fases más difíciles de
una prueba, es aquella en la que no podemos entender ni la
prueba ni la intención que Dios tuvo para disponerla. Al no
haber revelación, simplemente no comprendemos lo que está
pasando. Pero en esto necesitamos ver una verdad
importante. El hecho mismo de que no entendamos,
ciertamente le añade un nuevo matiz y riqueza a nuestro
carácter, porque intensifica nuestra confianza en Dios.
4. Sus colaboradores reciben daño—asesinato de
Ahimelec. Ahimelec apoyó a David a costa de su propia
vida. Es evidente que David sufrió angustia sobre angustia,
porque no solo temía por su propia vida, sino que sus actos
le producían daño y muerte a otras personas. Aunque la muerte
de Ahimelec había sido profetizada con anterioridad, siendo
58
David y Salomón
consecuencia del juicio de Dios sobre la casa de Elí (1 S.
2:31-35), David no lo entendió así en ese momento y se sintió
responsable.
5. Encarcelado por Aquis. Después de esto, David no
podía permanecer en Judá y huyó a un país pagano en donde
fue puesto en prisión por el rey Aquis. Durante su
encarcelamiento, David escribió dos salmos maravillosos: los
Salmos 34 y 56. Cuando leemos los Salmos y descubrimos
la bella unción que tienen, tendemos a asumir que fueron dados
cuando David se encontraba adorando al Señor en medio de
la congregación. Pero no, David recibió estos dos en prisión.
Por lo tanto, si queremos ser dulces salmistas, ¡puede ser que
a veces nos encontremos en prisión! El tema principal del
Salmo 34 es el cuidado que Dios da al afligido. Pero en el
Salmo 56, escrito al mismo tiempo, David clamó: “Mis huidas
tú has contado; pon mis lágrimas en tu redoma [vasija]; ¿no
están ellas en tu libro?”.
6. Errante. ¿Alguna vez ha llorado usted, diciendo: “Señor,
qué sucede?”. Uno de los aspectos más difíciles de una prueba
es que no podemos entender la prueba ni el propósito por el
cual Dios la ha ordenado; ni podemos ver a Dios en ella. Si
usted todavía no ha pasado por esa experiencia, ¡la tendrá en
el futuro! Durante tal experiencia de vagar por el desierto, no
podemos entender a dónde vamos, a pesar de tratar de seguir
a Dios de todo corazón. Nos encontramos yendo en una
dirección y luego en otra y nada parece funcionar. Sin
embargo, podemos declarar sinceramente que sentimos que
Dios nos ha estado dirigiendo.
Eso es exactamente lo que le ocurrió a David. Todo santo se
La vida de David
59
encuentra errante en una determinada época de su vida.
Abraham tuvo esta experiencia y dijo: “Dios me hizo salir
errante...” (Gn. 20:13). En este periodo, cuando parece que
no hay sentido de dirección en nuestras vidas y que no
podemos explicárnoslo, empeoran las cosas cuando se
acercan amigos a decirnos: “¿Qué te ha dicho Dios? ¿Hacia
dónde vas?” Contestamos: “No puedo explicarlo”. Y ellos se
van meneando la cabeza y diciendo: “¡Qué terribles son los
reincidentes! Pierden todo sentido de dirección”. Pero eso
no tiene por qué ser así. Quizá usted haya avanzado más en
Dios que otros que parecen tener una clara dirección.
7. Aventando. Esto sucede cuando el trigo es sacudido de
abajo para arriba, para quitarle la paja. Por eso, si estamos
experimentando altibajos, es porque parte de la paja está
siendo separada del trigo. Es tiempo de quebrantamiento de
corazón; es tiempo de llorar. Pero es para nuestro máximo
beneficio.
8. Compañeros poco comunes—la cueva de Adulam.
El siguiente paso de David fue a la cueva de Adulam (1 S.
22), en donde otros se juntaron a su alrededor: los
endeudados, los afligidos y los que se hallaban en amargura
de espíritu. A veces Dios nos une a compañeros muy poco
comunes. A menudo no escogemos nosotros a la gente que
nos rodea; y hay épocas de nuestras vidas, en que en vez de
estar rodeados por personas de clara visión, nos rodean otros
que están en el mismo hoyo con nosotros. Es entonces cuando
podemos obtener mucha lástima, pero poca orientación.
9. Advertencia profética. Entonces el profeta Gad fue
enviado por Dios para prevenir a David. En un momento en
60
David y Salomón
que parecía que el enemigo lo atraparía con seguridad, Dios
envió un profeta. Porque mientras David estuvo en el desierto,
Dios lo cuidó con esmerada atención.
Si usted está pasando por una de estas experiencias de
desierto, tenga la seguridad que Dios no permitirá que usted
sucumba allí. Porque en el momento en que parezca que el
enemigo va a triunfar, habrá una voz de advertencia de parte
de Dios.
10. Traición—El desierto de Zif. Después, David se
trasladó al desierto de Zif (1 S. 23:13-29). Sin embargo, los
habitantes de Zif lo traicionaron. Esta es una experiencia difícil
de entender. Parecía que nada le salía bien a David, y que
hasta la gente que él trataba de socorrer, lo traicionaba. Se
vio obligado a huir de nuevo.
David escribió otro Salmo en este momento, el Salmo 31. A
pesar de que había sido forzado a huir hacia la rocosa fortaleza
de Maon, es interesante que aun en esta situación, él
constantemente se refería a Dios como su “roca y su fortaleza”
(Sal. 31:3). Cuando contemplaba los entornos de la sólida y
rocosa fortaleza en que se hallaba, David no consideraba a
esas rocas como su protección, sino que reconocía a Dios
como su fortaleza y su roca.
Él continúa en el Salmo 31:10, diciendo: “Porque mi vida se
va gastando de dolor”. David observaba además, que Dios
había conocido su alma en las angustias (vs. 7b). Dios conoció
y tomó nota de la congoja de su vida. El mismo concepto es
puesto de relieve en el Cantar de los Cantares: “¿Quién es
ésta que sube del desierto recostada sobre su amado?”. Es
La vida de David
61
en el desierto donde aprendemos y conocemos la presencia
de Dios más que en cualquier otro lugar.
Juntamente con su marido, una tía de mi esposa, mujer
sumamente devota, estaba viviendo un duro percance.
Mientras clamaba a Dios, el Señor le dijo: “Sabes, me
agradecerás por estos días, y haciendo memoria dirás: Oh
Señor, cuán precioso fuiste en aquellos momentos de negrura”.
Por alguna razón, llegamos a conocer la belleza del Señor en
estos tiempos de oscuridad.
11. Una vasija rota. David continuó diciendo: “Soy como
una vasija rota”. Se sentía como un recipiente que alguien
hubiera quebrado y descartado; aparentemente inservible—
rechazado por el hombre, así como Jesús fue rechazado por
el hombre. En momentos determinados de nuestras vidas,
nosotros experimentamos esta misma sensación—como una
vasija que ha sido descartada y que ya no tiene utilidad ni
para Dios ni para el hombre. De esta manera se sentía el rey
David.
12. Jonatán—el mensajero de Dios. Siempre, en
momentos así, llega el mensajero de Dios o el ángel de Dios.
En esta ocasión, fue Jonatán quien vino a fortalecer a David
(1 S. 23:16). Jonatán era un personaje hermoso. En realidad
él tenía más que perder al ayudar a David, pues no solo se
arriesgaba a desagradar a su padre, sino a perder el trono.
Sin embargo, puso la amistad de David por encima de sus
propios intereses.
Jonatán y David compartieron una de las amistades más bellas
de toda la historia y, ciertamente, de las Escrituras. Jonatán
62
David y Salomón
amó tanto a David, que se extralimitó poniendo en peligro su
propia vida, con el fin de confortar el alma de David en sus
momentos de angustia.
13. Oportunidad de “ayudar a Dios” con esfuerzos
propios. El siguiente episodio del vagar de David por el
desierto, ocurrió en las montañas de las cabras monteses (1
S. 24). Allí en el desierto de En-Gadi, David tuvo la
oportunidad de matar a Saúl, su adversario. De hecho, sus
hombres le instaron a hacerlo, diciendo que sería el
cumplimiento de la profecía (24:4). Después de todo, Dios le
había prometido a David la cabeza de sus enemigos, y he
aquí Saúl. Eso significaba indudablemente que debían
levantarse y matarlo. El cautiverio de David pudo haber
terminado en ese momento, pero después de cortar el borde
del manto de Saúl, se turbó su corazón.
14. Dios habla a través del enemigo. Es interesante notar
que Dios puede hablarnos a través de los labios de nuestros
enemigos. Cuando Saúl se dio cuenta de que era David el
que lo llamaba, la palabra profética salió de los labios de
Saúl, confirmando el hecho de que David le sucedería como
rey. De esta manera, David fue fortalecido por su enemigo (1
S. 24:20).
15. Muerte de Samuel. Poco después, falleció el profeta
Samuel, quien había ungido a David para ser rey, y quien le
dio también un inmenso respaldo al principio de sus pruebas
como fugitivo (1 S. 25:1). Esto significaba que no había en
Israel, ninguna persona con autoridad que estuviera del lado
de David. Él era un joven de menos de treinta años, y su
soledad aumentó.
La vida de David
63
16. David y Abigail—Una manifestación de majestad. A
pesar de ser joven, de andar como fugitivo, de tener el corazón
muy herido a causa de las continuas traiciones, y de ser
perseguido por su propio suegro que deseaba matarlo, David
se comportaba como un rey.
1 Samuel 25:2-17 nos da un ejemplo de esto al relatar la
historia de Nabal, un hombre a quien David protegía. Es
importante notar que hasta en nuestros momentos de angustia,
Dios tiene un ministerio para nosotros y espera que lo llevemos
a cabo. Él espera que cuidemos de los demás aun cuando
estemos pasando por momentos difíciles.
Nabal era un necio, un “hijo de Belial”; y Dios le quitó la vida.
Sin embargo, su esposa Abigail es un personaje muy
interesante. Abigail, una de las mujeres más distinguidas de
toda la Palabra de Dios, estaba casada con un hombre
conocido por su necedad. Cualquier mujer en semejante
situación de yugo desigual, puede ser usada por Dios así como
Abigail, a pesar de su cónyuge. Abigail era de mucha revelación
y alentó a David con estas palabras: “Jehová de cierto hará
casa estable a mi señor, por cuanto mi señor pelea las batallas
de Jehová” (1 S. 25:28).
En ese entonces, las personas de buena moral tenían el
testimonio en sus espíritus de que David, y no Saúl, estaba en
lo correcto. Pero, a pesar del criterio de la muchedumbre, los
que caminaban con Dios, como Abigail, eran usados por Él
para reanimar y vigorizar las manos de David. Vendrán
periodos de abatimiento. Mas siempre existirán personas que
podrán ver con claridad, personas de discernimiento; esas
que Dios a veces trae a nuestro lado para fortalecernos en los
64
David y Salomón
propósitos que tiene para nuestras vidas. De esta clase era
Abigail.
17. Segunda oportunidad de “ayudar a Dios”. En 1 Samuel
26, David nuevamente le perdona la vida a Saúl. Dios mismo
dio lugar a esta segunda oportunidad, porque hizo que Saúl
acampara en las cercanías del refugio de David, y fue Dios
quien puso a Saúl a dormir profundamente. Detrás de ello
estaba el propósito de dar a David la victoria total. ¡Y la
obtuvo! Aunque pudo fácilmente haber matado a Saúl esta
vez, no tocó ninguna de sus pertenencias. Fue capaz de
declarar: “Aquí estoy, y te he perdonado otra vez la vida”.
Hay pruebas en las cuales no salimos victoriosos a la primera
vez. A veces la prueba se repite con el fin de que tengamos un
triunfo total la segunda vez. Por supuesto, es mejor salir
triunfantes la primera vez, para que la prueba no vuelva.
Saúl profetizó nuevamente acerca de David: “Sin duda
emprenderás cosas grandes y prevalecerás” (26:25). Y ésta
fue la última vez que ambos se encontraron.
B. LOS SUCESOS DE SICLAG
A LA VICTORIA A TRAVÉS DE LA DERROTA
Tras dejar a Saúl, David regresó a Aquis, el rey pagano, quien
le dio una ciudad. Hasta ese momento, David había andado
errante. ¿Alguna vez se ha encontrado usted en una situación
en la que no tiene morada fija, quizá mudándose de
apartamento en apartamento, o de casa en casa? Cada vez
que se muda, usted declara que Dios le ha provisto ese nuevo
domicilio, y dice: “aquí descansaré para siempre”. Pero luego,
hay un temblor, y tiene que moverse de nuevo.
La vida de David
65
Esa fue la experiencia de David. Finalmente, después de pasar
años sin radicarse, un rey pagano le da por fin la ciudad de
Siclag para sus hombres y las familias de ellos. ¡Podrían residir
allí! Durante un año y cuatro meses, David se estableció
cómodamente, en Siclag como base. Aunque salía a combatir
al enemigo, regresaba a su base para descansar.
Pero un día, al retornar a Siclag con sus hombres después de
una rotunda victoria sobre los filisteos, se encontró con que
otro enemigo había invadido la tierra desde atrás, destruyendo
a Siclag, y llevando cautivos a hijos, mujeres y pertenencias.
David estaba agobiado. Tras diez largos años como fugitivo,
Dios, al fin, le había concedido a Siclag como refugio, y hasta
eso había quedado en humo. Sus esposas e hijos, cautivos.
En esos instantes David estaba tan afligido que lloró hasta
que le faltaron las fuerzas para llorar (1 S. 30:4). Su angustia
se acrecentó cuando los hombres que le rodeaban, sus amigos
y compañeros de lid, hablaron de apedrearlo.
¡Esta fue la experiencia de Siclag! Después de
haber vivido errante por diez años, parecía que el
enemigo por fin tenía la victoria, habiendo destruido
todo lo que era valioso para David.
Hay una sorprendente semejanza entre la cruz de Cristo
y la experiencia de Siclag.
1. Después de tres días, él reinó. Tres días después de
recuperar todo lo que le había sido quitado en Siclag, llegó la
palabra de Dios: “Saúl ha muerto, David es el rey”. En solo
tres días, David emergió del hoyo de una aparente derrota
absoluta; no solo para recuperar todas las cosas, ¡sino para
ser rey de Judá!
66
David y Salomón
Así ocurrió exactamente cuando Jesucristo colgaba de la cruz
entre la multitud que con escarnio decía: “Si eres el Hijo de
Dios, baja y te creeremos”. Pero el Hijo de Dios permaneció
en la cruz aparentemente rechazado y del todo vencido. Luego
descendió hasta las entrañas de la tierra y se levantó llevando
cautiva la cautividad. Cristo liberó a todos los santos de
generaciones pasadas. Él rescató a cada persona que el
enemigo, príncipe de la muerte, tenía prisionera.
Porque al entregar Cristo Su vida en la cruz, diciendo:
“Consumado es”, ganó las llaves del infierno y de la muerte.
Así como David descendió a la fortaleza de los amalecitas,
Jesús descendió y rescató a todo Su pueblo. Descendió al
infierno, y todas las potestades del infierno y de la muerte no
pudieron prevalecer contra un guerrero tan valiente, ¡el Hijo
de Dios! Con un imponente grito de triunfo, levantó a los
santos hacia el cielo, y se convirtió en Rey de reyes y Señor
de señores.
2. Siclag y la cruz. Vale la pena reiterar que existe una
impresionante semejanza entre la cruz de Cristo y la
experiencia de David en Siclag.
a. Rechazo. Así como la propia gente de David lo rechazó
y quiso apedrearlo, Cristo vino a los suyos, y los suyos no le
recibieron (Jn. 1:11). Fue el propio pueblo de Jesús el que
gritó: “¡Crucifícale, crucifícale!”. La Biblia dice que los
enemigos del hombre serán los de su propia casa.
b. Pérdida de todo. Aparentemente, los dos lo habían perdido
todo; Cristo en la cruz, y David en las ruinas de Siclag. Todo
parecía estar listo para la victoria más colosal lograda por Satanás
contra David y contra el hijo más admirable de David.
La vida de David
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c. Recuperación y victoria. Pero las derrotas se tornaron
en espléndidas victorias. David se fortaleció en Jehová (1 S.
30:6). Quizá usted esté en un hoyo muy profundo. Si es así, el
Señor le está diciendo: “Vuélvete a Mí y fortalécete en Mí”.
Luego, la Palabra de Jehová vino de nuevo a David: “Síguelos,
porque ciertamente los alcanzarás, y de cierto librarás a los
cautivos” (1 S. 30:8). Entonces David se armó de valor y
persiguió al enemigo. En eso, un muchacho egipcio indicó en
dónde se encontraban los amalecitas; David y sus hombres
los encontraron, los mataron y recuperaron todo.
Quizá usted esté en un hoyo muy profundo.
Si así es, el Señor le está diciendo:“Vuélvete a Mí
y fortalécete en Mí”.
C. EL HOMBRE DE SICLAG—SÍMBOLO DE
CRISTO
Como hemos visto, el carácter de David era como Dios y era
como rey. Existen hermosas semejanzas entre David y el Señor
Jesucristo. Tan parecidos eran algunos aspectos de sus vidas,
que la gente de la época de Cristo, se refería a él como “el
hijo de David”. Estas personas distinguían las similitudes, y la
forma en que las dos vidas estaban vinculadas. He aquí algunas
semejanzas:
1. Pastor. Tanto David como Jesús eran pastores. Jesús
fue llamado “el Buen Pastor” (Jn. 10) y el “Príncipe de los
Pastores” (1 P. 5:4).
2. Tribu de Judá. Tanto David como Cristo eran de la tribu
de Judá, y ambos heredaron las promesas que pertenecían a
esa tribu. Ambos fueron legisladores y reyes.
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David y Salomón
3. Pan de vida. Tanto David como Cristo nacieron en Belén
que significa “casa de pan”. Ellos dos alimentaron a su pueblo
con el pan de vida. Jesús es el Pan de Vida.
4. Profeta. En Hechos 2:30, Pedro se refiere al hecho de
que David era profeta. Cuando el Señor se puso de pie en la
fiesta de los Tabernáculos, haciendo la solemne declaración:
“Si alguno tiene sed, venga a mí y beba... de su interior
correrán ríos de agua viva”, los que le rodeaban dijeron:
“Ciertamente, éste es el profeta” (Jn. 7:37-40). Ellos
reconocieron en Jesús a Aquel de quien Moisés había dicho:
“Profeta de en medio de ti, de tus hermanos, como yo, te
levantará Jehová tu Dios”. Por eso, David y Jesús fueron
profetas. De hecho, David fue más que profeta, porque tipificó
a Jesucristo y su vida entera fue una prefigura de la vida de
Cristo.
5. Rechazo. David y Jesús fueron ungidos para desempeñar
un ministerio, que fue seguido por un periodo de rechazo David
en Siclag y Jesús en la cruz.
6. Reinado. Inmediatamente después de esta experiencia,
los dos se convirtieron en reyes. David llegó a ser rey de
Israel. Cristo, después de la cruz, llegó a ser Rey de reyes y
Señor de señores, y hoy está sentado a la derecha de la
Majestad, en lo Alto.
D. LA ENSEÑANZA DE SICLAG ES ESPERANZA
Para nosotros es importante entender cuál es el propósito de
Siclag y del andar por el desierto. El profeta Jeremías nos da
una clave en Lamentaciones 3:19-21: “Acuérdate de mi
aflicción y de mi abatimiento, del ajenjo y de la hiel; lo tendré
La vida de David
69
aún en memoria, porque mi alma está abatida dentro de mí...
por lo tanto esperaré”.
Al contemplar las experiencias de David en el desierto, vemos
como deambuló de un lugar a otro; rechazado, infeliz y
abandonado; siendo la experiencia de Siclag el punto
culminante de su aflicción, cuando parecía que todo estaba
perdido.
Sin embargo, en tres días, Dios le dio un giro completo, liberó
a todos los cautivos e hizo reinar a David. Dios desea sembrar
esperanza en nuestros corazones. La palabra de Dios dice
que “a través de las Escrituras, podemos tener esperanza”.
Sabemos que el Siclag de David se convirtió en victoria, y
que la crucifixión de Cristo se volvió un triunfo maravilloso.
Por medio de la crucifixión Jesús despojó a los principados y
a las potestades, y está ahora sentado a la diestra de la
Majestad en lo alto.
De la misma forma, Dios quiere confirmarnos que por muy
profundo que sea nuestro abismo, ese cautiverio también
terminará. Debemos ser prisioneros de esperanza, porque
Dios le dará un giro a nuestras circunstancias, como lo hizo
con David. Él nos sacará de la obscuridad, del hoyo, de detrás
de las rejas. Nos sacará al lugar que ha reservado para
nosotros: “lugares celestiales en Cristo Jesús” (Ef. 2:6).
Reinaremos en donde una vez fuimos prisioneros. Dios nos
levantará para gobernar y reinar sobre las circunstancias que
una vez nos mantuvieron cautivos.
Confiemos en Dios, y declaremos desde el fondo de nuestros
corazones: “Mi Siclag se tornará en triunfo. Mi crucifixión
70
David y Salomón
será gloriosa, porque aún he de ver cómo esta prueba mía se
convierte en una posición de gloria, en la que Dios me levantará
por encima de estas circunstancias. Gobernaré y reinaré sobre
ellas. Quedarán bajo mis pies”. Así les ocurrió a David y a
Cristo, y esa es la herencia que Dios tiene ahora para todos
nosotros (Is. 54:17).
La vida de David
Capítulo 5
DAVID Y BETSABÉ
I.
DAVID Y BETSABÉ
A. INTRODUCCIÓN
1. Los motivos de su caída
B. LOS JUICIOS PRONUNCIADOS
1. Para David por medio de Natán
2. Ejecución de los juicios
C. EL ARREPENTIMIENTO Y
LA RECUPERACIÓN DE DAVID
1. Los pasos hacia el arrepentimiento
y la restauración
D. EXISTE UN REGRESO PARA EL
PIADOSO
1. El poder protector de Dios
2. Dios se especializa en la restauración
71
72
David y Salomón
E. DAVID EN EL MILENIO
1. El rey-pastor de Israel
2. Conclusión
F. REFLEXIONES SOBRE LAS TRES
BATALLAS DE DAVID
1. Contra los filisteos – La envidia
2. Contra los jebuseos – La división, desunión
3. Contra la concupiscencia y la avaricia
G. UNA MIRADA A ABSALÓN
La vida de David
73
A. INTRODUCCIÓN
Pocos sucesos de la historia son tan famosos como la triste
caída de David con Betsabé. Los hombres son conocidos y
recordados por sus grandes hazañas, como David dándole
muerte a Goliat. Pero también se les recuerda por sus grandes
pecados, como el cometido por este hombre admirable—su
adulterio y posterior acto de homicidio. Asimismo, Sansón es
conocido en el mundo entero por su fuerza, pero también por
su deshonra con Dalila.
¿CÓMO PUDO SUCEDER?
Nos hacemos con frecuencia esta pregunta: ¿Cómo pudo un
hombre de Dios cometer tan horrendo pecado? (Mayormente
un santo de la talla de David, el hombre ungido de Dios, el dulce
cantor de Israel, quien simboliza a Cristo como profeta, sacerdote
y rey). Y más todavía, ya que Jesús de hecho fue llamado Hijo
de David, tan alta puesto le adjudicaba Dios a David.
Lamentablemente, este acto de adulterio no es un caso aislado
ocurrido en la historia sobre un hombre de Dios que cayó en
debilidad, sino que simboliza lo que, por generaciones, ha
sido el hoyo en que muchos de los siervos más selectos del
Señor han sucumbido a la tentación, enlazados por el diablo
y la carne. Por la gracia de Dios, examinaremos ahora las
razones y juicios resultantes de esta tragedia de tragedias.
¿POR QUÉ DIOS NO PREVINO
NI PROTEGIÓ A DAVID?
¿Por qué no protegió ni defendió Dios a David en esta área
de su vida? El Señor estuvo con David siempre que salió a la
74
David y Salomón
guerra. “Y puso guarnición en Edom; por todo Edom puso
guarnición, y todos los edomitas fueron siervos de David. Y
Jehová dio la victoria a David por dondequiera que fue” (2 S.
8:14). David era protegido en batalla. ¿Por qué? Porque
consultaba a Jehová en toda circunstancia.
“Entonces consultó David a Jehová, diciendo: “¿Iré contra
los filisteos? ¿Los entregarás en mi mano?” Y Jehová respondió
a David: “Ve, porque ciertamente entregaré a los filisteos en
tus manos” (2 S. 5:19).
La confianza de David siempre estuvo puesta en el Señor;
guardó las leyes sobre la guerra (ver Dt. 20), pero no guardó
las leyes que regulaban la vida doméstica de los reyes. “Ni
tomará para sí muchas mujeres, para que su corazón no se
desvíe, ni plata ni oro amontonará para sí en abundancia”
(Dt. 17:17). “Y tomó David más concubinas y mujeres de
Jerusalén, después que vino de Hebrón, y le nacieron más
hijos e hijas” (2 S. 5:13). Por lo tanto, el rey David no guardó
las leyes para los reyes que se referían a tener varias esposas.
Por eso, en esta área de su vida, no hubo protección del
Señor.
Dios nos ampara en toda área en que nos proponemos
obedecerle, pero en los otros campos en que lo ignoramos y
rechazamos, la muralla de protección a nuestro alrededor es
derribada por Dios mismo. “¿Por qué aportillaste sus vallados,
y la vendimian todos los que pasan por el camino? La destroza
el puerco montés, y la bestia del campo la devora” (Sal.
80:12,13). También nosotros con nuestra desobediencia,
hemos sido culpables de derribar nuestras propias murallas
de defensa.
La vida de David
75
De manera que aquella fatídica noche, fueron varias las causas
de su trágica caída:
RAZONES DE SU CAÍDA
1. Desobediencia en la vida de David con relación a esposas
y concubinas (Dt. 17:17).
2. Se había relajado: Cuando le correspondía estar en la
guerra, se quedó en casa. Separado de la voluntad de Dios,
era ahora fácil presa para el enemigo, siendo vulnerable en su
área de mayor debilidad (ver 2 S. 11:1, 2). Ni él, ni sus ojos,
estaban en el lugar apropiado.
3. Cuando contempló a Betsabé desde la azotea, violó el
mandamiento del Señor: “No desearás (o codiciarás) la mujer
de tu prójimo” (Dt. 5:21).
4. El éxito desmedido y el exceso de confianza, le aturdieron.
5. Creía poder tener todo lo que deseaba.
6. Aunque David era un hombre conforme al corazón de
Dios, había en él una debilidad innata en cuanto a la impureza
moral, debilidad no vigilada con cuidado. En su árbol
genealógico estaba la inmoralidad. (Judá fue inmoral - Gn.
38; Rahab fue prostituta - Jos. 2:1; y otros más).
7. En cuanto a mujeres, su corazón estaba dividido, y le
faltaba sabiduría en el área moral. Después de su pecado,
David le pidió a Dios que le hiciera comprender sabiduría en
lo secreto, en vista de que antes había sido tan deficiente en
ese sentido. También oró para que su corazón fuera afirmado
(Sal. 51:6; 86:11).
76
David y Salomón
8. David consideraba estar por encima de la ley; lo cual es
tentación para muchos cristianos.
¿Por qué no protegió Dios a David en esta área de
su vida? Porque Dios nos protege solamente en
las áreas que nos proponemos obedecerle. Pero en
las demás, en las que lo ignoramos, desobedecemos
o rechazamos, no recibimos protección.
EL PECADO DE DAVID
“Y sucedió un día, al caer de la tarde, que se levantó David
de su lecho y se paseaba sobre el terrado de la casa real; y
vio desde el terrado a una mujer que se estaba bañando, la
cual era muy hermosa” (2 S. 11:2). David estaba
desobedeciendo los siguientes mandatos de la Escrituras:
•
“No codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su siervo, ni su
criada, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna de tu prójimo”
(Ex. 20:17).
•
“¿Y por qué, hijo mío, andarás ciego con la mujer ajena,
y abrazarás el seno de la mujer extraña?” (Pr. 5:20).
•
“Así es el que se llega a la mujer de su prójimo; no quedará
impune ninguno que la tocare” (Pr. 6:29), por lo tanto,
cayeron sobre David los juicios de Dios.
•
“Mas el que comete adulterio es falto de entendimiento;
corrompe su alma el que tal hace” (Pr. 6:32).
•
“Heridas y vergüenza hallará y su afrenta nunca será
borrada” (Pr. 6:33).
La vida de David
77
PERO DAVID PROCURÓ OCULTAR SU PECADO
“¿Acaso he cubierto mis transgresiones como Adán,
ocultando en mi seno mi iniquidad, porque temí a la gran
multitud, o el desprecio de las familias me aterró, y guardé
silencio y no salí de mi puerta?”. Job no escondió su pecado
(Job 31:33-34 LBLA).
A diferencia de Job, que reconoció su pecado, el rey David
decidió ocultarlo (2 S. 11:6-27). Pero finalmente, David
confesó su iniquidad, quebrantándose ante el profeta Natán
después de meses de presión y convicción, (ver 2 S. 12:13;
Sal. 32:1-5; 38:1-18). Durante esos meses David trató de
ocultar su iniquidad de las siguientes maneras:
1. Transfiriendo al esposo de Betsabé, Urías heteo, del
campo de batalla a la compañía de su esposa. Pero Urías se
negó porque el Arca, Israel, Judá, Joab y el resto de los siervos
de David, se encontraban acampando en campo abierto. Ni
siquiera emborrachándolo, pudo David lograr que Urías se
fuera a su casa. David quería que el embarazo no deseado,
pareciera ser de Urías.
2. Entonces, David le escribió a Joab una carta que envió
por mano del mismo Urías, ordenándole ponerle en lo más
recio de la batalla para que muriera.
Antes de observar los juicios que siguieron, examinemos de
nuevo el carácter y personalidad de Betsabé, ya que con este
estudio deseamos ayudar a quienes puedan ser tentados de
esta manera.
78
David y Salomón
BETSABÉ
Betsabé era nieta de Ahitofel gilonita, consejero de David. “Y
el consejo que daba Ahitofel en aquellos días era como si se
consultase la Palabra de Dios. Así era el consejo de Ahitofel,
tanto con David como con Absalón” (2 S. 16:23). Por derecho
propio, Betsabé era como diríamos hoy: una “mujer bíblica”,
alguien a quien David respetaba, obviamente por su sabiduría.
David mencionó a Betsabé, al amonestar a su hijo Salomón
en sus postrimerías, diciendo: “Oye, hijo mío, la instrucción
de tu padre, y no desprecies la dirección de tu madre” (Pr.
1:8). “Guarda, hijo mío, el mandamiento de tu padre, y no
dejes la enseñanza de tu madre” ((Pr. 6:20). “Átalos siempre
en tu corazón, enlázalos a tu cuello”, (Pr. 6:21).
Betsabé era una mujer de singular belleza. Pero David
quebrantó la advertencia bíblica: “No codicies su hermosura
en tu corazón, ni ella te prenda con sus ojos” (Pr. 6:25).
“Engañosa es la gracia, y vana la hermosura; la mujer que
teme a Jehová, esa será alabada” (Pr. 31:30).
Aunque David y Betsabé eran espirituales y muy versados en
la ley, lamentablemente creyeron estar por encima de la ley—
un peligro para muchos ministros y cristianos espirituales. Ellos
creyeron ser las excepciones. Los que caen en este pecado,
a menudo reaccionan diciendo:
•
Que no pensaron que se les descubriría.
•
Que el Señor nunca les castigaría.
•
Que pueden seguir impunemente con su relación adúltera,
(o sea, exentos de castigo y consecuencias). ¡Ay de ellos,
porque no conocen los caminos del Señor!
La vida de David
79
Dios advierte que Él no hace excepciones—“No hagáis
distinción de persona en el juicio; así al pequeño como al
grande oiréis; no tendréis temor de ninguno porque el juicio
es de Dios” (Dt. 1:17).
“Porque no hay acepción de personas para con Dios” (Ro.
2:11).
“Porque todos los que sin ley han pecado, sin ley también
perecerán; y todos los que bajo la ley han pecado, por la ley
serán juzgados” (Ro. 2:12).
“Y vosotros, amos, haced con ellos lo mismo, dejando las
amenazas, sabiendo que el Señor de ellos y vuestro está en
los cielos, y que para Él no hay acepción de personas” (Ef.
6:9).
Entonces cayeron sobre David alrededor de
diecisiete juicios y, en cierto modo, sobre Betsabé.
B. JUICIOS PRONUNCIADOS POR DIOS
1. Para David por medio de Natán
a) “Por lo cual, ahora, no se apartará de tu casa la
espada...” (2 S. 12:10)
b) “He aquí Yo haré levantar el mal sobre ti de tu
misma casa...” (2 S. 12:11)
c) “Tomaré tus mujeres delante de tus ojos, y las daré
a tu prójimo, el cual yacerá con tus mujeres a la
vista del sol” (2 S. 12:11)
d) “El hijo que te ha nacido ciertamente morirá”
(2 S. 12:14)
2. Ejecución de estos juicios sobre David
80
David y Salomón
a) La muerte de su hijo, el cual Betsabé dio a luz
(2 S. 12:15-18)
b) La violación de Tamar (2 S. 13:2-14)
c) La muerte de Amnón (2 S. 13:29-32)
d) Absalón roba el corazón de los hombres de Israel
(2 S. 15:6)
e) Absalón conspira con Ahitofel (Sal. 55:13)
Absalón reina en Hebrón (2 S. 15:10-12)
f) Diez de sus concubinas son violadas (2 S. 16:22)
g) David es exiliado (2 S. 15:14)
h) Las maldiciones de Simei, quien arrojó piedras y
polvo a David cuando éste estuvo abatido,
(ver 2 S. 16:5-14). Nota: El Señor le había dicho:
“Maldice a David”. Pero, entonces, David dijo en
el versículo 12: “Quizá mirará Jehová mi aflicción, y
me dará Jehová bien por sus maldiciones de hoy”.
i) Absalón es asesinado (2 S. 18:14)
j) La rebelión de Seba (2 S. 20)
k) Las concubinas son encerradas en viudez perpetua
(2 S. 20:3)
l) La muerte de Amasa (2 S. 20:9,10)
m) La enfermedad de David (Sal. 32:3-5)
n) Su confesión pública y eterna (Sal. 51)
o) Fue provocado para cometer el pecado de censar
a Israel (2 S. 24:1; 1 Cr. 21:1)
p) La rebelión de Adonías (1 R. 1:5)
q) La inmoralidad de David y Betsabé pasó a
Salomón, culminando en la destrucción del reino
unificado.
La vida de David
81
C. EL ARREPENTIMIENTO Y LA
RECUPERACIÓN DE DAVID
La ley exige que “si un hombre comete adulterio con la mujer
de su prójimo, el adúltero y la adúltera indefectiblemente serán
muertos” (Lv. 20:10). (Dada la magnitud del pecado de
David—adulterio y homicidio—¿Cómo pudo el Señor no solo
perdonar a David, sino también restituirle el trono y una
relación todavía más íntima con Dios?).
La razón fue que en el irrefutable conocimiento de Dios, Su
Amado Hijo, el Señor Jesucristo, pagaría el precio supremo
con Su muerte en el Calvario, por nuestros pecados. Por el
derramamiento de Su sangre, quedarían expiados los pecados
de David.
Pero, ¿por qué concedió Dios a David arrepentimiento y
perdón? Con Saúl y Esaú no hizo así, habiendo Esaú
procurado esa oportunidad con lágrimas. “Porque ya sabéis
que aun después, deseando heredar la bendición, fue
desechado, y no hubo oportunidad para el arrepentimiento,
aunque la procuró con lágrimas?” (He. 12:17). ¿Por qué
encontró Pedro arrepentimiento y no Judas? ¿Por qué Jacob
y no Esaú? ¿Por qué David y no Saúl?
Dios ha declarado: “Tendré misericordia del que tendré
misericordia, y seré clemente para con el que seré clemente”
(Ex. 33:19). Dios no es caprichoso. Siempre hay una razón
para que un individuo alcance misericordia y otro no. En mis
numerosos años de ministerio, he conocido Davides y Saúles,
Jacobs y Esaúes, y hay siempre una diferencia entre ellos.
Los auténticos, tienen la característica de amar la rectitud,
pero los falsos no la tienen. Observaremos esto en David, a
82
David y Salomón
medida que contemplemos los pasos que dio para arrepentirse
y recuperarse.
Pasos de David hacia el arrepentimiento
y la recuperación
1. Convicción. La convicción indiscutiblemente ocurrió por
medio de Natán, cuando éste le relató la parábola del hombre
rico que tomó la oveja amada del hombre pobre, con el fin de
alimentar a un huésped. David reaccionó con ira, y ese fue el
medio por el cual Dios pudo señalarle cuán abominable era
su pecado (2 S. 12:1-13).
2. Reconocimiento. Era necesario reconocer y confesar la
falta públicamente, ya que el pecado de un gobernante
equivale al pecado de toda la congregación o nación de Israel.
Sin embargo, esto según parece no fue fácil. De hecho, el
Salmo 32 insinúa que solo a través de una grave enfermedad,
David llegó a reconocer públicamente su pecado: “Porque
de día y de noche se agravó sobre mí tu mano; se volvió mi
verdor en sequedades de verano” (Sal. 32:4). “Mi pecado te
declaré y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis
transgresiones a Jehová; y tu perdonaste la maldad de mi
pecado” (Sal. 32:5). “Porque yo reconozco mis rebeliones, y
mi pecado está siempre delante de mí” (Sal. 51:3).
3. Arrepentimiento. Esto significa:
• Deseo de ser limpiado del pecado: “Purifícame con hisopo y
seré limpio; lávame y seré más blanco que la nieve” (Sal. 51:7).
• Deseo de ser cambiado: “Crea en mí, oh Dios, un corazón
limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí” (Sal. 51:10).
La vida de David
83
4. Restitución. La ley exige restitución, pero eso no es
siempre posible, como en este caso. “Pero si fuere de día, el
autor de la muerte será reo de homicidio. El ladrón hará
completa restitución; si no tuviere con qué, será vendido por
su hurto” (Ex. 22:3).
5. Aceptación de los juicios de Dios. “Yo también habré
andado en contra de ellos, y los habré hecho entrar en la
tierra de sus enemigos; y entonces se humillará su corazón
incircunciso, y reconocerán su pecado” (Lv. 26:41). David
aceptó el castigo de Dios diciendo: “Contra ti, contra ti solo
he pecado, y he hecho lo malo delante de tus ojos; para que
seas reconocido justo en tu palabra, y tenido por puro en tu
juicio” (Sal. 51:4).
Así lo demostró con las declaraciones
que hizo cuando huía de Absalón:
“Y él rey respondió: [refiriéndose a Simei] ¿Qué tengo yo
con vosotros, hijos de Sarvia? Si él así maldice es porque
Jehová le ha dicho que maldiga a David. ¿Quién, pues, le
dirá: Por qué lo haces así?” (2 S. 16:10).
6. Esperar humildemente que Dios libere. David esperó
en el Señor soportando el juicio divino en periodos de
enfermedad, algunas tan severas, que parecían de muerte.
“Mis enemigos dicen mal de mí, preguntando: ¿Cuándo morirá
y perecerá su nombre?” (Sal. 41:5).
En momentos de conspiración:
“Y mientras Absalón ofrecía los sacrificios, llamó a Ahitofel
gilonita, consejero de David, de su ciudad de Gilo. Y la
84
David y Salomón
conspiración se hizo poderosa, y aumentaba el pueblo que
seguía a Absalón” (2 S. 15:12).
David manifestaba una serena esperanza en Dios:
“Al músico principal. Salmo de David. Pacientemente esperé
a Jehová, y se inclinó a mí, y oyó mi clamor” (Sal. 40:1).
David tenía la segura expectativa de que Dios le libraría de la
prueba que había ordenado. Sin embargo, sus enemigos no
le ofrecían esperanza alguna. “Muchos son los que dicen de
mí: No hay para él salvación en Dios” (Sal. 3:2).
Ni tampoco muchos de sus amigos:
“Muchos son los que dicen: ¿Quién nos mostrará el bien? Alza
sobre nosotros, oh Jehová, la luz de tu rostro” (Sal. 4:6).
Pero la respuesta de David fue:
“En paz me acostaré, y asimismo dormiré; porque solo tú,
Jehová, me haces vivir confiado” (Sal. 4:8). “No temeré a
diez millares de gente, que pusieren sitio contra mí” (Sal. 3:6).
El Salmo 23 fue escrito en este tiempo, y es una clara
demostración de la gran confianza de David, y de la conciencia
que tenía de la presencia del Señor en esta época, aunque de
hecho fue un tiempo ordenado por Dios por causa de sus
pecados. “Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis
angustiadores; unges mi cabeza con aceite; mi copa está
rebosando” (Sal. 23:5).
Ciertamente, el comportamiento de David en medio de las
pruebas y juicios divinos, nos dejan con esperanza:
La vida de David
85
• Si hemos cometido el mismo pecado de David.
• Si estamos aconsejando a hermanos que han caído.
C. EXISTE UNA VÍA DE REGRESO
PARA LOS PIADOSOS
“Porque siete veces cae el justo y vuelve a
levantarse” (Pr. 24:16).
1. El poder protector de Dios
Para terminar esta parte de la vida de David, me gustaría
animar a los demás poniendo de relieve el poder protector
de Dios que se menciona en los siguientes versículos:
•
“Y he hallado más amarga que la muerte a la mujer cuyo
corazón es lazos y redes, y sus manos ligaduras. El que
agrada a Dios escapará de ella; mas el pecador quedará
en ella preso” (Ec. 7:26).
•
“No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea
humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados
más de lo que podéis resistir, sino que dará también
juntamente con la tentación la salida, para que podáis
soportar” (1 Co. 10:13).
•
“…que es poderoso para guardaros sin caída, y
presentaros sin mancha delante de su gloria con gran
alegría…” (Judas 1:24). Pedro dice que somos “guardados
por el poder de Dios” (1 P. 1:5).
86
David y Salomón
2. Dios se especializa en la restauración
¡Dios se especializa en la restauración! Los que han caído no
deben pensar nunca que han quedado descalificados para
alcanzar las grandezas de Dios. Así lo declaró Isaías: “Tus
cuerdas se aflojaron; no afirmaron su mástil, ni entesaron la
vela; se repartirá, entonces, botín de muchos despojos; los
cojos arrebatarán el botín” (Is. 33:23).
Como dijimos al comienzo de este periodo de la vida de
David, a él se le restituyó una intimidad con el Señor todavía
más intensa que la anterior. Tras esta restitución, David escribió
salmos como el 27, el 15 y el 24, en los cuales su vida de fe
recibió una visión superior y enfocada a lo venidero. “Una
cosa he demandado a Jehová, esta buscaré; que esté yo en la
casa de Jehová todos los días de mi vida, para contemplar la
hermosura de Jehová y para inquirir en su templo” (Sal. 27:4)
Y en la época de David, ¿en dónde estaban el templo y el
tabernáculo, la morada de Dios? En ninguna otra parte sino
en el monte de Sion, esa santa montaña de Dios.
En los salmos 15 y 24, él hace esta pregunta:
“¿Quién subirá al monte de Jehová? ¿Y quién estará en su
Lugar Santo?” (Sal. 24:3). “¿Jehová, quién habitará en tu
tabernáculo? ¿Quién morará en tu monte santo?” (Sal. 15:1),
¿Quién ascenderá, estará de pie, permanecerá y habitará
en tu íntima presencia?
Entonces llega la respuesta divina: “El limpio de manos y puro
de corazón; el que no ha elevado su alma a cosas vanas, ni
jurado con engaño”(Sal. 24:4). Imploremos al Señor juntos
todos los rehabilitados y protegidos, que nazca esta misma
La vida de David
87
visión de Sion en las vidas de todos nosotros. “Y de Sion se
dirá: Este y aquél han nacido en ella, y el Altísimo la
establecerá” (Sal. 87:5).
E. DAVID EN EL MILENIO
1. El Rey-Pastor de Israel.
Fue tan extraordinario el restablecimiento de David, que
resucitará para ser rey en Jerusalén durante los mil años en
que Cristo ha de reinar sobre la tierra. Varios versículos
declaran claramente que el Señor levantará a David para ser
el Rey-Pastor de Israel en el reino milenial de Cristo sobre la
tierra. Especialmente los siguientes:
•
“Sino que servirán al Señor su Dios y a David su rey, a
quien yo levantaré para ellos” (Jer. 30:9).
•
“Mi siervo David será rey sobre ellos, y todos ellos tendrán
un solo pastor; andarán en mis ordenanzas y guardarán
mis estatutos y los cumplirán. Y habitarán en la tierra que
di a mi siervo Jacob, en la cual habitaron vuestros padres;
en ella habitarán ellos y sus hijos, y los hijos de sus hijos
para siempre; y mi siervo David será su príncipe para
siempre” (Ez. 37:24, 25).
•
“Entonces pondré sobre ellas un solo pastor que las
apacentará, mi siervo David; él las apacentará y será su
pastor. Y yo, el Señor, seré su Dios, y mi siervo David
será príncipe en medio de ellas” (Ez. 34: 23, 24).
•
“Después, los hijos de Israel volverán y buscarán al
Señor su Dios y a David su rey; y acudirán temblorosos
88
David y Salomón
al Señor y a su bondad en los últimos días” (Os. 3:5).
David tendrá características únicas para ministrar a los hijos
de Israel que se encuentren en la tierra durante la segunda
venida de su Mesías. Incluso, se nos dicen de antemano
las palabras que intercambiarán Cristo y los defensores de
Sion cuando Él descienda en las nubes para liberarles de
las naciones que acampen contra ellos. “Ved, ahora, que
yo soy el Señor, y fuera de mí no hay Dios. Yo hago morir
y yo hago vivir, yo hiero y yo sano y no hay quién pueda
librar de mi mano... Y digo: Yo vivo para siempre” (Dt.
32:39-40).
Los defensores responderán: “He aquí, éste es nuestro Dios,
le hemos esperado, y nos salvara; éste es Jehová a quien
hemos esperado, nos gozaremos y nos alegraremos en su
salvación” (Is. 25:9).
Pero después de regocijarse porque el Señor les ha liberado,
le observarán más de cerca y exclamarán: “¿Qué heridas son
estas en tus manos? Y Él responderá: “Con ellas fui herido en
la casa de mis amigos” (Zac. 13:6).
Entonces su gozo se tornará lamento: “Y derramaré sobre
la casa de David y sobre los moradores de Jerusalén,
espíritu de gracia y de oración; y mirarán a mí, a quien
traspasaron, y llorarán como se llora por hijo unigénito,
afligiéndose por él como quien se aflige por el primogénito”
(Zac. 12:10).
Será en este momento en que el rey David tendrá todas las
cualidades para restaurar a la nación compungida. El que dio
muerte al inocente Urías para cubrir su pecado con Betsabé
La vida de David
89
su esposa, será capaz de ministrar restauración y consuelo a
una nación que reconoce con dolor, haber sido responsable
de la muerte de su inocente Mesías en la cruz del Calvario.
El pecado de David y de Israel como nación, es comparable,
y ahora el rey que Dios les ha levantado, será el que les lleve
a la reconciliación. Él, que conoció la recuperación tras haber
pecado y que clamó: “Líbrame de homicidios, oh Dios, Dios
de mi salvación; cantará mi lengua tu justicia” (Sal. 51:14),
podrá consolar y guiar a la futura Israel arrepentida. La
consolará a través del periodo de intenso pesar y lamento,
hasta entrar en una relación correcta con Aquel de quien David
después podrá decir: “Has cambiado mi lamento en baile;
desataste mi cilicio, y me ceñiste de alegría” (Sal. 30:11).
En esa forma llevará David a la nación abatida a una correcta
relación con el Señor, y hará que sus habitantes se conviertan
en los sacerdotes de Jehová y en los ministros de Dios
mencionados en Isaías 61:6. Por fin llegarán a ser los árboles
de justicia y el plantío de Jehová, para que Dios sea glorificado
en Israel, una nación que dará frutos de justicia para Él.
David también es símbolo de las personas de la era de la
Iglesia que asimismo calificarán para tener parte en la primera
resurrección y serán reyes y sacerdotes que gobernarán y
reinarán con el Señor en todo el milenio (Ap. 20:6).
2. Conclusión
Para concluir, repitamos las lecciones principales de la vida
de David que pueden aportarnos beneficio:
a) Primero, la necesidad de prepararnos aprendiendo los
90
David y Salomón
caminos del Señor antes de ser lanzados de lleno al ministerio
para el cual Dios nos ha ordenado.
b) Segundo, mantener con el Señor de gloria, una correcta
y progresiva relación personal para poder decir de corazón,
como David: “Una cosa he demandado a Jehová, ésta buscaré;
que esté yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida,
para contemplar la hermosura de Jehová, y para inquirir en su
templo” (Sal. 27:4).
F. REFLEXIONES SOBRE LAS BATALLAS
DE DAVID
TRES IMPORTANTES BATALLAS EN LA VIDA DE DAVID
QUE NOS AYUDAN A SABER QUÉ CÓSAS VENCER
PARAPODER REINAR
1. Contra los filisteos—La envidia
Espiritualmente hablando, los filisteos representan la envidia.
Lo podemos ver en Génesis 26:14. El pecado de la envidia
es uno de los mayores enemigos que tenemos que combatir.
Como líderes, debemos ganar una victoria personal sobre él
en nuestras vidas. Esto solo puede lograrse mediante un
encuentro personal con el Señor, en el cual Él bondadosamente
nos concederá liberación para que de nuestras mentes y
corazones sea quitado ese pecado. Sin esa victoria personal,
no venceremos a quienes nos envidian, como se ve claramente
en la vida de Saúl. A él le consumían los celos y la envidia que
le tenía a David. Saúl fue atormentado por el Señor con un
espíritu de celos por causa de su desobediencia, la cual le
costó el trono y tener la certidumbre de que otro, más digno,
La vida de David
91
ocuparía su sitio en vez de su propio hijo. Para ganar la victoria
sobre un Saúl, no debemos tocarle, como hizo David, sino
perdonarle, hacerle bien, y luego esperar la liberación y
reivindicación de Dios.
2. Contra los jebuseos—La desunión, la división
Estos son los que causan división entre hermanos. Esto se
puede comprobar al comparar las siete naciones mencionadas
en Dt. 7:1, con las siete cosas que Dios aborrece (Pr. 6:1619). Los jebuseos son aquellos que tuvieron que ser arrojados
para que Israel tomase posesión de Sion. En mi opinión, solo
les venceremos cuando Dios en primer lugar nos conceda lo
que David pidió en el Salmo 86:11, “un corazón firme”, y
luego produzca en nosotros la visión de Sion, que en resumen,
son las pautas de Sion declaradas en el Salmo 15 y 24.
3. Contra los deseos de la carne: la lujuria o la codicia
El método para vencer la lujuria se obtiene según lo expresó
David en el Salmo 51:10, pidiendo a Dios crear en nosotros
un corazón limpio. En cuanto a la codicia, la forma de
vencerla es haciendo la oración de Proverbios 30:8, de
modo que podamos llegar al nivel que Pablo obviamente
había alcanzado cuando dijo: “Gran ganancia es la piedad
acompañada de contentamiento” (1 Ti. 6:6). No obstante,
esto tiene que aprenderse con pruebas y circunstancias a
las que nos lleva la infinita sabiduría de Dios. Pablo lo
explica así: “Sé vivir humildemente y sé tener abundancia;
en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado
como para tener hambre, así para tener abundancia como
para padecer necesidad (Fil. 4:12).
92
David y Salomón
EN LAVIDA DE DAVID, SE VE CLARAMENTE LAVICTORIA
EN EL SALMO 27:4
“Una cosa he demandado a Jehová, ésta buscaré; que esté yo
en la casa de Jehová... para inquirir en su templo” (Sal. 27:4).
David había alcanzado la verdadera grandeza—la grandeza
de un corazón que ahora no deseaba para sí mismo ninguna
de las posesiones de este mundo, ya fuesen bienes materiales,
posiciones seculares o logros personales; sino un corazón que
exclusivamente quería contemplar la belleza de Jesús y ser así
transformado a su imagen, con el único propósito de agradar
a Dios e inquirir de Él para hacer toda Su voluntad.
Considero que estas tres victorias no deben ser únicamente
la meta de los líderes, sino el victorioso lugar que todos, solo
por la gracia, debemos alcanzar y en donde debemos
permanecer.
G. UN VISTAZO A ABSALÓN
LA TRAICIÓN DE ABSALÓN
Ningún estudio sobre la vida de David estaría completo si no
profundizáramos en la traición de su hijo Absalón, el cual
personifica la traición, la deslealtad y la conspiración contra
un líder cercano. ¡Cuán despreciable es actuar de esta manera!
Sin embargo, un Absalón por lo general es alguien con
extraordinarias cualidades de líder. Es un hombre dotado por
Dios de grandes talentos, es una persona distinguida por
méritos propios. Si tales capacidades, estuvieran unidas a un
carácter intachable que es fiel y genuino, ciertamente harían
que un Absalón alcanzara notables alturas.
La vida de David
93
Un Absalón tiene un enorme potencial, pero desgraciadamente
sus aspiraciones van más allá del lugar que Dios le ha designado.
Por eso, en vez de ser el vaso de honra para lo que fue creado,
a Absalón le corrompe el deseo de posición y poder. ¡Cuánto
se asemeja a la pauta dejada por Satanás, su antecesor!
SIGUIENDO LA PAUTA DE LUCIFER
Lucifer, el querubín ungido de quien leemos en Ezequiel 28:17,
permitió que su corazón se exaltara con orgullo a causa de su
deslumbrante belleza, corrompiendo así su sabiduría. Y por
el deseo insaciable de mercancías y de controlar el comercio,
se llenó de gran violencia (Ez. 28:16 NVI). “Puso su corazón
como corazón de Dios” (Ez. 28:6), y dijo: “Seré como el
Altísimo” (Is. 14:12-14). Literalmente, Lucifer es la pauta para
un Absalón. Y ahora, en lugar de ser el “querubín protector
ungido”, su nombre ha sido cambiado a Satanás, el adversario,
el que odia, el engañador, el espíritu opositor. Así es un
Absalón.
Pero en este momento, queremos observar específicamente
la vida de Absalón en las Sagradas Escrituras. Fue el tercer
hijo de David nacido de Maaca, hija del rey de Gesur, la que
no era israelita sino de origen sirio (2 S. 3:3, 15:8), siendo
Siria un implacable enemigo de Israel, célebre por su odio.
Absalón conservaba su odio hacia Amnón, el que había
forzado a su hermana Tamar (2 S. 13:22), y al que luego
mató. Semejante a éste fue el caso de Esaú, perseguidor de
su hermano Jacob con espada y sin misericordia, cuyo enojo
le desgarró perpetuamente como lo declara Amós 1:11. Por
consiguiente, Esaú no halló lugar para arrepentirse (He.12:17;
Mt. 6:14, 15).
94
David y Salomón
Debido a la muerte de Amnón, la sentencia del rey David fue:
“Váyase a su casa y no vea mi rostro”. (2 S. 14:24) Los
falsos no pueden soportar el rechazo. Así como Satanás
ansió en otro tiempo ser aceptado, Absalón ansió la aceptación
del rey. Incluso quemó los plantíos de Joab para llamar la
atención y ser llevado a la presencia de David.
Pero después de que David le hubo aceptado y besado,
Absalón comenzó a agitar los corazones de los israelitas,
nombrándose juez para impartir justicia en lugar de David.
Más tarde blasfemó diciéndole al rey que había hecho voto
de servir a Jehová. Luego en Hebrón, se proclamó rey,
usurpando de nuevo lo que el Señor había decretado para
David (2 S. 15:1-11).
Doscientos hombres de Jerusalén siguieron a Absalón con
sencillez. ¡Sin lugar a dudas, son muchos los que no distinguen
a los Absalones modernos! A los ojos de los hombres, los
Absalones parecen intachables, hombres dignos, que se ganan
el elogio de la gente. Los simples, carentes del genuino
discernimiento espiritual, les siguen.
(15:12) Ahora, otro hombre de gran influencia se le une. Este
varón es Ahitofel, el consejero privado de David. El motivo
que tuvo Ahitofel para traicionar a David, radica aparentemente
en el hecho de que era abuelo de Betsabé (2 S. 23:34; 11:3),
y de estar resentido porque David hizo pecar a su nieta. Es
indiscutible que Ahitofel es aquel de quien David dice en el
Salmo 55:12,13: “me enfrentó…el amigo íntimo mío, mi guía
y mi familiar”.
Después, David exclama en el Salmo 55:15: “¡Que la muerte
les sorprenda!”, lo cual en efecto se cumplió. En aquellos
La vida de David
95
días, el consejo que daba Ahitofel era como si se consultase
la Palabra de Dios. Así era todo consejo de Ahitofel, tanto
con David como con Absalón. David oró para que el consejo
de Ahitofel se volviese necedad, lo cual Dios concedió, porque
cuando Ahitofel daba un buen consejo era estimado como
una tontería: “Porque Jehová había ordenado que el acertado
consejo de Ahitofel se frustrara, para que Jehová hiciese venir
el mal sobre Absalón” (2 S. 15:31; 17:14, 23).
Ahitofel entonces se suicidó al comprender que el fin se
acercaba y que Absalón estaba destinado a un inevitable
fracaso y al juicio de la mano de David. Sin embargo, Absalón
continuó, sin percatarse de este hecho. Persiguiendo a David
con una fuerza superior, fue derrotado y él mismo fue
suspendido del mulo en que iba, quedando atrapado por la
cabeza en las ramas de una encina. A pesar de que no era la
intención de David perjudicar a Absalón, Joab lo mató.
¿QUÉ LECCIONES APRENDEMOS
DE UN “ABSALÓN”?
¿Qué podemos aprender del relato de Absalón? ¿Por qué
existen individuos que aspiran a puestos que Dios no les ha
dado? ¿Por qué se les permite parecer prósperos y engañar
a tantos, al menos por un tiempo? Consideremos los
propósitos de Dios. Él desea tener comunión con el hombre
a quien hizo a Su imagen y semejanza. solo pueden tener
comunión aquellos que han pasado por situaciones similares.
Dios Padre pasó por la más profunda tristeza y humillación
cuando Lucifer lo traicionó, encabezando una conspiración
pre-terrenal en la que la tercera parte de las huestes angelicales
se sublevó contra Dios.
96
David y Salomón
Cuando Dios dictó la sentencia, creando el infierno y
destinando a prisiones eternas de oscuridad a cierto número
de ángeles hasta el juicio del gran día (Judas 1:6), es aparente
que Lucifer acusó a Dios de no tener amor ni sabiduría. Por
lo tanto, este mundo y la humanidad fueron creados
fundamentalmente para exponer el amor y la sabiduría de
Dios, en donde Satanás es usado para probar a Jesucristo
hombre, y a otros varones y mujeres de fe, que al final
ocuparán las puestos de supremacía en el reino de los cielos,
gobernando como reyes y sacerdotes y convirtiéndose en
coherederos con Cristo.
LA TRAICIÓN ES NECESARIA
Una parte indispensable de la comunión con Dios es conocer
la participación de Sus sufrimientos, que incluye la traición.
Así, vemos a Coré, Datán y Abiram, traicionando a Moisés.
Vemos a Absalón traicionando a David. A Daniel lo
traicionaron los príncipes del reinado de Darío. Y por supuesto,
a Jesús lo traicionó Judas. Debemos conocer a Absalón, un
hombre que para ser aceptado no se detendrá ante nada,
pues lleno de orgullo y envidia, no tolera el rechazo. Él procuró
ser aceptado por David, habiéndolo traicionado. El Absalón
suyo se empeñará en una reconciliación, y preparará el terreno
para traicionarlo y conspirar contra usted todavía más que
antes.
¿CÓMO MANEJAMOS ESAS SITUACIONES?
¡El primer paso es entrar en el reposo de Dios! Permítale
pelear por usted y frustrar el consejo de los muchos asesores
de Absalón, porque sus compañeros son muchos y también
La vida de David
97
lo odian a usted. En segundo lugar, no toque a Absalón, así
como David no tocó a Saúl y así como Jesús no se vengó de
Judas. En tercer lugar, conserve un espíritu recto, amoroso y
limpio. El resultado será un corazón que conoce los
sufrimientos de Jesús y del Padre de una manera nueva y más
profunda. Una puerta se nos abrirá al tener comunión con
Dios más íntimamente, cuando veamos a nuestro Absalón
desde el ángulo correcto y agradezcamos a Dios el privilegio
de permitirnos pasar por estas experiencias.
EN DEFINITIVA, DIOS USA A ABSALÓN PARA
BENDECIRNOS
Una bendición más de tener un Absalón, es que él está siendo
usado por Dios para eliminar a aquellos cuyo corazón no es
sincero para con Dios y para con usted, el líder. Agradezcamos
a Dios que Absalón depura a las personas que Dios nos confía.
Sin Absalón, la mezcla no se notaría. Por eso, desde todos
los ángulos, aunque nos duela la etapa de rebeldía de Absalón,
recordemos esto—¡Todo valdrá la pena!
Usted indudablemente tendrá severas batallas espirituales, y
quizá se enferme porque Absalón se rebela, lo que Samuel
califica de “pecado de hechicería” (1 S. 15:23). Él proferirá
maldiciones contra usted y sus seguidores, porque se ha
pasado de la raya y el Espíritu Santo le ha entregado al mal
(2 Ts. 2:10, 11); y efectivamente practica la hechicería. Pero,
alabado sea el Señor, el alboroto del periodo de obscuridad
de Absalón tiene un final para los justos, quienes entran en
una gloria todavía mayor.
98
David y Salomón
CONCLUSIÓN
Que este pequeño capítulo le ayude a comprender, amado
lector, que la existencia de Absalón está dirigida a bendecirlo
a usted, pues él es colocado en su vida por la sabiduría de
Dios, por un periodo. Los Absalones nos acongojan a tal
extremo, que llegamos a participar de los padecimientos de
Cristo en nuevas formas. Pero, Absalón es también necesario
para la depuración de la Iglesia. El hermano de Absalón,
Adonías, otro usurpador, completó la remoción de la escoria,
así como Joab, cuya deslealtad a David impedía un nuevo
mover del Espíritu de Dios (ver 1 R.1:5-8).
Espere que tanto Absalón como Adonías se manifiesten justo
antes de un avivamiento o de un nuevo mover de Dios en su
iglesia. Ellos son como los jebuseos que causan discordia
entre hermanos y son indispensables para sacar a los
descontentos, logrando así la verdadera unidad entre los
hermanos, porque allí envía el Señor bendición y vida eterna
(Sal. 133).
Recuerde que no fue sino hasta que Judas abandonó el grupo,
que el Señor rogó por unidad en Juan 17:21-22, en donde
dijo: “Para que ellos sean uno... como el Padre y yo somos
uno”. Cuando los Absalones, los Adonías y los Judas son
quitados, llega la verdadera unidad y entonces la gloria se
revela. ¡Bendito sea el nombre del Señor!
Jesús no rogó por la unidad sino hasta que Judas
hubo abandonado el grupo.
La vida de David
99
Capítulo 6
EL CONSTRUCTOR
DEL TEMPLO
I. EL EDIFICADOR DEL TEMPLO
A. LOS PREPARATIVOS PARA EL TEMPLO
1. La visión
2. Lo material y lo financiero
3. El modelo
B. LOS SÍMBOLOS DENTRO DEL TEMPLO
1. El edificio físico
2. La iglesia universal
3. La iglesia local
C. LAS PIEDRAS DENTRO DEL TEMPLO
1.
2.
3.
4.
5.
La principal cabeza del ángulo
Las piedras de fundamento
Las piedras
Las esquinas labradas (piedras angulares)
El acabado
a. Empleo secular
b. La repetición.
100
David y Salomón
D. LAS MEDIDAS DEL TEMPLO
1.
2.
3.
4.
5.
6.
Fecha de inicio
Longitud
Anchura
Altura
Extensión de la parte frontal
Dimensiones del Lugar Santo
E. LOS MATERIALES DEL TEMPLO
1.
2.
3.
4.
5.
Cedro
Flores abiertas
Querubines de madera de olivo
Palmeras
Dos columnas
a. Fuerza
b. Gobierno
c. Gracia
d. Pureza
e. Las granadas
F. EL PROPÓSITO DEL TEMPLO
1. Purificarnos
2. Pulirnos
3. Madurarnos
G. APLICACIÓN PRÁCTICA
La vida de David
101
Desde su niñez hasta su madurez, y desde el pastoreo hasta
el reinado, Dios perfeccionó y usó a David en muchas formas
asombrosas. Pero tal vez el logro más notable de Dios por
medio de David, ocurrió en los últimos días de su vida, cuando
Dios le dio el modelo del templo. (El templo fue construido
después por Salomón). Este modelo contiene muchas
enseñanzas maravillosas para nosotros, tanto en lo que se
refiere a nuestras vidas cristianas individuales, como a la obra
que Dios nos ha encomendado colectivamente.
A. LOS PREPARATIVOS PARA EL TEMPLO
1. La visión.
Antes de poder realizar cualquier cosa para Dios, necesitamos
una visión. Antes de la construcción del templo, David le hizo
un encargo a Salomón: “Guardad e inquirid todos los
preceptos de Jehová vuestro Dios, para que poseáis la buena
tierra, y la dejéis en herencia a vuestros hijos después de
vosotros perpetuamente... Mira, pues, ahora, que Jehová te
ha elegido para que edifiques casa para el santuario; esfuérzate
y hazla” (1 Cr. 28:8, 10). Dios quiere que poseamos la herencia
que Él nos ha ordenado poseer.
2. Los preparativos materiales y financieros.
David compró la tierra sobre la cual Dios había ordenado
que se construyera el templo (1 Cr. 21:24, 25). Es interesante
que David pagó el precio total de la tierra; sin ningún descuento.
Dios no quería que existiera ningún reproche ni que alguien
pudiera venir después a decir: “¡Bueno, nosotros les
ayudamos!” La tierra que Dios quiere para sí, ya está totalmente
pagada.
102
David y Salomón
David preparó también una gran cantidad de materiales para
el templo (1 Cr. 22:2-4). Lo hizo porque, según dijo: “...La
casa que se ha de edificar a Jehová ha de ser magnífica por
excelencia, para renombre y honra en todas las tierras” (1 Cr.
22:5). Este no sería un edificio pequeño e insignificante.
Cuando respondemos al llamado de Dios, nosotros también
podemos ser usados para glorificar a Dios en muchas partes
de la tierra, cuando la gente se maraville de las grandes cosas
que Dios ha hecho.
3. El modelo.
Otro preparativo muy importante para el templo era el modelo
de la casa. David dio a Salomón el modelo o plano del: “pórtico
del templo y sus casas, sus tesorerías, sus aposentos…y…el
propiciatorio. Asimismo, el plano de todas las cosas que tenía
por el Espíritu, de los atrios de la casa de Jehová, para todas
las cámaras alrededor, para las tesorerías de la casa de
Dios…Además para los grupos de sacerdotes y de los levitas,
para toda la obra del ministerio de la casa de Jehová, y para
todos los utensilios del ministerio de la casa de Jehová” (1 Cr.
28:11-13).
El modelo vino de Dios. “Todas estas cosas, dijo David, me
fueron trazadas por la mano de Jehová, que me hizo entender
todas las obras del diseño” (1 Cr. 28:19). No era solo cuestión
de prepararse material y económicamente para el templo, sino
que el diseño del templo era muy importante porque este
modelo en sí iba a revelar a Dios y a Su verdad.
Dios incluso le dio a David los detalles de cómo se dividirían
los levitas, de tal manera que los ministerios pudieran colocarse
en orden. Porque todo simbolizaría a Dios y a Sus caminos.
La vida de David
103
B. SÍMBOLOS EN EL TEMPLO
Hay tres símbolos o figuras importantes en la
construcción del templo:
1. El edificio físico—El templo era un edificio real y
tangible, edificado para la gloria de Dios. A veces Dios exige
que, bajo Su dirección, su pueblo construya literalmente
edificios físicos para Su gloria.
2. La iglesia universal—El Templo de Salomón es un
símbolo de la Iglesia de Jesucristo.
3. La iglesia local—El Templo de Salomón también se
aplica a la iglesia local y contiene enseñanzas para ella.
C. LAS PIEDRAS DENTRO DEL TEMPLO
1. La principal piedra angular—El Señor Jesucristo.
Antes de iniciar la construcción de cualquier edificio, se debe
colocar una piedra angular. La piedra angular es aquella a
partir de la cual se toman todas las otras medidas del edificio.
Por lo tanto, es la piedra más importante de cualquier
edificación. Una piedra angular debe ser probada. Es una
piedra preciosa, la más valiosa de todo el edificio, y tiene que
ser de cimiento estable.
Jesucristo es la principal piedra angular (Is. 28:16). “He aquí
que yo he puesto en Sion por fundamento una piedra, piedra
probada, angular, preciosa, de cimiento estable”. En el Nuevo
Testamento, el apóstol Pablo hace eco de este concepto. Él
se autodenomina el perito arquitecto que colocó el fundamento
de la iglesia de Corinto. Pero el fundamento puesto fue
104
David y Salomón
Jesucristo. “Conforme a la gracia de Dios que me ha sido
dada, yo como perito arquitecto puse el fundamento... Porque
nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto,
el cual es Jesucristo” (1 Co. 3:10-11).
2. Las piedras de fundamento — Los dones ministeriales.
En el libro de Efesios, el apóstol Pablo continúa con el mismo
tema: “Porque por medio de Él [Cristo] los unos y los otros
tenemos entrada por un mismo Espíritu al Padre. Así que ya
no sois extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de
los santos, y miembros de la familia de Dios, edificados sobre
el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal
piedra del ángulo Jesucristo mismo” (Ef. 2:18-20). Por lo
tanto, los dones ministeriales son también piedras
fundamentales. El Señor Jesucristo es el Príncipe de los
pastores y la piedra del ángulo a partir de la cual todas las
medidas son tomadas. Sin embargo, un edificio espiritual es
construido también sobre los dones ministeriales de los
apóstoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros que Dios
da a las iglesias locales.
3. Piedras— todos los creyentes.
Cada uno de nosotros es comparado en las Escrituras con una
piedra que Dios quiere colocar en la iglesia. “En quien todo el
edificio, bien coordinado, va creciendo para ser un templo santo
en el Señor; en quien vosotros también sois juntamente edificados
para morada de Dios en el Espíritu” (Ef. 2:21, 22).
4. Esquinas labradas (piedras angulares)—Las hijas.
En el Salmo 144:12 David exclama: “...Nuestras hijas como
La vida de David
105
esquinas labradas como las de un palacio”. El Señor le da
esperanzas a todo padre cristiano. Él quiere que nuestras hijas
sean esquinas labradas (piedras angulares).
Un edificio grande consta de muchas piedras angulares. Jesús
es la principal piedra angular, pero se necesitan además
muchas otras piedras angulares que juntas deben encajar a la
perfección, pues a partir de ellas se deben tomar otras medidas.
El Señor quiere hijas cuyo simple caminar, comportamiento,
actitud y vocabulario, sean de tal calidad, que los demás (niños
o adultos), puedan tomar sus medidas a partir de ellas, vean
la verdad y entiendan los caminos de Dios al observarlas. Las
hijas pequeñas no vienen completamente pulidas. Debe
impartírseles cierto refinamiento. ¡Pero qué gran estímulo! Las
estamos puliendo y puliendo para que puedan ser esquinas
labradas a partir de las cuales otros puedan calibrar sus vidas.
Esta es la visión para nuestras hijas.
El Salmo 144:12 dice: “hijas como esquinas labradas como
las de un palacio”. Su conducta debe ser tal, que otros puedan
ver cómo se desenvolvería Cristo en diversas situaciones. Esta
es la esperanza que sentí que Dios implantaba en mi corazón,
esperanza que Él desea transmitir a todo padre y madre—
que Él quiere que sus hijas se conviertan en bellas esquinas
labradas.
5. El acabado (1 R. 6:7).
“Y cuando se edificó la casa, la fabricaron de piedras que
traían ya acabadas, de tal manera que cuando la edificaban,
ni martillos ni hachas se oyeron en la casa, ni ningún otro
instrumento de hierro”. Las piedras para el Templo de Salomón
eran labradas lejos de la ubicación del templo. Cada piedra
106
David y Salomón
era preparada conforme a especificaciones exactas, y una
vez pulida y con las medidas precisas, era marcada y llevada
al sitio en donde era colocada. No hubo ni herramientas ni
ruido en el templo. Dios está trabajando hoy en nosotros,
Sus piedras vivas, para que llegada la hora, estemos listos
para encajar juntos.
Dios está construyendo un templo santo
con Sus piedras vivas
a. Empleo secular. ¿En dónde nos pule Dios? ¡En nuestro
empleo secular! Por eso es de suma importancia estar en el
trabajo correcto. En nuestro empleo secular, el Señor
desarrolla en nosotros el carácter y la habilidad que nos
equipan para ocupar directamente la posición que nos tiene
asignada aquí y también en la eternidad. En nuestro empleo
secular, Dios tiene los “pulidores” apropiados sentados a
nuestro lado, los cuales tienen la bondad de pulirnos día tras
día. A estos “pulidores” Él los ha escogido cuidadosamente,
y ellos pueden limar nuestras asperezas.
b. Repetición. Ciertas virtudes se desarrollan por repetición,
y de ella está hecha la vida. En un hogar, las camas deben ser
tendidas y la comida preparada a diario. Cuando trabajamos
en una oficina, fábrica, etc., el trabajo generalmente implica
rutina. Pero el trabajo repetitivo es importante porque
desarrolla las cualidades de diligencia y fidelidad que son
esenciales para el ministerio y para toda “piedra viva”. Por
ello, en lugar de referirnos a nuestra labor diaria como
monótona, alabemos a Dios por habernos enviado a la cantera
en donde seremos “pulidos” y nuestras capacidades
perfeccionadas.
La vida de David
107
¡No despreciemos nuestro empleo secular! Es posible que
a menudo dejemos de entender lo que Dios quiere, por creer
que el empleo secular y la iglesia son dos cosas separadas.
Reconozcamos que Dios nos ha puesto en el lugar correcto
para que Su santa obra se realice en nuestro interior.
D. LAS MEDIDAS DEL TEMPLO
En la Biblia, los números tienen un significado
espiritual , y podemos aprender mucho de los
números asociados con el templo.
1. 480 - El Año en que se comenzó el Templo (1 R. 6:1).
Salomón comenzó a construir el templo 480 años después de
que los hijos de Israel salieron de Egipto. Cuarenta y ocho es
el número del sacerdocio (había cuarenta y ocho tablas en el
Tabernáculo de Moisés), y diez es el número de la ley. Así
que 480 (48 X 10) significa el desarrollo de un fiel sacerdocio.
2. 60 - Longitud del Templo (1 R. 6:2).
El templo tenía sesenta codos de largo. Sesenta (6 X 10)
representa al hombre (6) formado conforme a la ley (10). Ya
que es una medida de longitud, se refiere a nuestra caminata.
3. 20 - Anchura del Templo (1 R. 6:2).
La anchura se refiere al entendimiento, y 20 significa madurez,
lo que quiere decir que la anchura del Templo de Salomón
indica madurez de entendimiento.
4. 30 - Altura del Templo (1 R. 6:2).
108
David y Salomón
Treinta era la edad en que un levita podía ingresar al ministerio.
Por ser la medida vertical del templo, significa adoración.
Por lo tanto, las dimensiones clave del templo son ilustrativas
de una iglesia en donde los santos tienen las leyes de Dios
escritas en las tablas de carne de sus corazones y caminan
conforme a ellas, una iglesia en donde tienen madurez de
entendimiento, y en donde Dios ha desarrollado en lo interno
de su ser, una adoración en el Espíritu.
1 Reyes 6:12 lleva ligada una amonestación que no podemos
ignorar, porque resume estos pequeños conceptos: “Con
relación a esta casa que tú edificas, si anduvieres en mis
estatutos e hicieres mis decretos, y guardares todos mis
mandamientos andando en ellos, yo cumpliré contigo mi
palabra que hablé a David tu padre”. Observemos los
versículos en que incursiona David cuando las medidas están
siendo registradas. Hay en ellos una pausa y una pequeña
exhortación de parte de David, es una amonestación para
Salomón para que recuerde que esta casa (que tiene la forma
de un hombre que cumple la ley) solo sería bendecida si el
hombre caminara en los estatutos de Dios, ejecutara Sus
juicios, y guardara todos sus mandamientos. Luego en el
versículo 13, sigue una promesa: “y habitaré en ella en medio
de los hijos de Israel”.
5. 40 - Longitud de la sección frontal del templo
(1 R. 6:17).
El templo, que tenía 60 codos de largo, estaba dividido en
dos secciones; una de ellas medía cuarenta codos de largo y
la otra veinte. En primer lugar, se entraba por la parte del
edificio que medía cuarenta codos; el número cuarenta significa
La vida de David
109
probado o comprobado. Moisés estuvo cuarenta años en el
desierto, y también los hijos de Israel. Así como Moisés fue
una vasija probada, comprobada y fiel, así también a nosotros
Dios nos ha estado probando y comprobando. Él desea que
entremos en una nueva dimensión espiritual, de la cual el Lugar
Santísimo del templo es una ilustración.
6. 20 X 20 X 20 - Dimensiones del Lugar Santísimo del
templo.
“Asimismo hizo al final de la casa un edificio de veinte codos,
de tablas de cedro desde el suelo hasta lo más alto; así hizo
en la casa un aposento que es el Lugar Santísimo” (1 R. 6:16).
“El lugar santísimo [el santuario interior]... tenía veinte codos
de largo, veinte de ancho y veinte de altura” (1 R. 6:20). El
número clave es el veinte, que significa madurez. A un individuo
que ha alcanzado la madurez se le trata como a un adulto.
Por ejemplo, un joven adolescente y un hombre adulto que
han cometido el mismo crimen, recibirán un castigo diferente.
Cuando los adultos delinquen, son juzgados y penados de
acuerdo con una ley de adultos, porque las personas maduras
deben proceder de manera madura. Después de habernos
probado y comprobado año tras año, Dios desea llevarnos al
Lugar Santísimo, detrás del velo, en donde las medidas son
20 X 20 X 20 y en donde todo sobre nosotros habla de
madurez.
Esto tiene dos implicaciones principales: La primera es una
enorme responsabilidad, y la segunda, que si desobedecemos
cuando somos maduros, Dios nos trata como adultos y no
como niños. Con mucha frecuencia, Dios casi cierra un ojo
ante las cosas que hacemos, pero Él quiere que crezcamos.
110
David y Salomón
Los hombres se dan cuenta de que ya no pueden pensar ni
hacer lo que les da la gana, como antes. Es que Dios les está
señalando estas cosas con Su dedo.
Solamente las personas maduras pasarán detrás del velo al
Lugar Santísimo. La longitud de veinte codos significa una
caminata madura. ¿Y quiénes son los que tienen un caminar
maduro en la vida cristiana? Todos los que son guiados por el
Espíritu de Dios, éstos son hijos (maduros) de Dios (Ro. 8:14).
Dios está diciendo: “Ahora que me preparo para hacerte cruzar
el velo, requiero que seas guiado por mi Espíritu”.
La anchura de veinte codos indica madurez de entendimiento.
1 Corintios 14:20 dice: “no seáis niños en el modo de pensar;
sino sed niños en la malicia, pero maduros en el modo de
pensar”. La altura de veinte codos muestra que Dios espera
que nuestro ministerio y nuestra adoración sean maduros.
E. LOS MATERIALES DEL TEMPLO
1. Cedro.
“Y la casa estaba cubierta de cedro por dentro, y tenía
entalladuras de calabazas silvestres y de botones de flores1.
Todo era cedro; ninguna piedra se veía” (1 R. 6:18). El cedro
significa fortaleza ya que para ser maduros necesitamos ser
fuertes. A Josué se le dijo que se “esforzara y fuese valiente”
para hacer todo lo que el Señor requería. Como hijos maduros
de Dios y como Iglesia madura, debemos ser fuertes para
hacer todo lo que Dios nos pide.
El hecho de que las piedras no estaban a la vista era un detalle
significativo, porque cuando traspasamos el velo, solamente
La vida de David
111
vemos a Uno allí dentro, el Señor Jesucristo. Cristo desea
habitar dentro de nosotros y morar con nosotros de tal manera
que la gente ya no nos vea más a nosotros, sino a Jesús en
nosotros.
2. Flores abiertas.
Las flores abiertas también hablan de madurez.
3. Querubines de madera de olivo.
En el Lugar Santísimo había dos querubines de madera de
olivo, que medían diez codos de alto cada uno. Estos
querubines significaban la presencia misma de Dios como paz,
porque el olivo significa paz y el diez habla de la ley. “Mucha
paz tienen los que aman tu ley” (Sal. 119:165).
Una de las cosas que Dios hará en estos últimos días es poner
sobre nosotros la cobertura de Su presencia. Cosas
aterradoras sucederán en este mundo, pero la cobertura de
la paz de Dios sobre Su pueblo será nuestra salvación y
defensa.
Hace algún tiempo, estábamos en cierta ciudad una noche,
cuando el Señor me dio esta palabra: “Vienen momentos
inquietantes”. Eso concordaba con mi escatología (doctrina
de lo venidero), así que dije: “Gracias Señor”. Pero no le
pregunté por qué me había dado esa palabra específica en
aquella noche particular. Al día siguiente, alrededor de las
ocho de la mañana, la ventana del motel comenzó a sacudirse
de dentro a fuera; el piso a moverse de arriba a abajo; y yo le
pregunté a mi esposa: ¿Qué está pasando? Ella respondió:
“¡Es un terremoto!” Ella sabía, porque ya había estado
112
David y Salomón
anteriormente en uno. Antes de que pudiéramos gritar, fue
como si una carpa cayera sobre nosotros, y fuimos cubiertos
por la paz de Dios. Debido a que la paz de Dios era tan
grande, contemplamos las paredes agrietarse, el piso saltar y
las ventanas sacudirse, con la misma actitud con que se observa
la pantalla del televisor. En el Lugar Santísimo, Dios hará que
Su paz nos envuelva. Por esto, muchos se maravillarán.
4. Las palmeras.
Las palmeras estaban esculpidas en las paredes del templo
(1 R. 6:29), representan la justicia (rectitud) de Cristo (Sal.
92:12).
5. Las dos columnas.
Había dos columnas fuera del templo (1 R. 7:15). Estas
columnas simbolizan o representan a los vencedores, (ver
Apocalipsis 3:12): “Al que venciere, yo lo haré columna en el
templo de mi Dios”. Hay una cantidad de templos en el cielo,
y dentro de ellos hay columnas. La columna simboliza también
a un anciano, y las medidas dadas para la columna son muy
importantes.
a. Fortaleza. En el versículo 15 se nos dice que la altura de
la columna era de dieciocho codos, indicando fortaleza.
b. Gobierno. La circunferencia de doce codos se refiere al
gobierno, el cual descansa sobre los hombros de un anciano.
c. Gracia. El versículo 16 nos dice que la altura de los
capiteles sobre las columnas era de cinco codos, lo que indica
gracia. Los ancianos necesitan estar llenos de gracia.
La vida de David
113
d. Pureza. Los lirios (versículo 19) se refieren a la pureza
que un anciano debe tener forjada en su corazón.
e. Granadas. En los versículos 18 y 20 se mencionan las
granadas. Éstas significan el fruto del amor, que debe
desarrollarse en un anciano. El número de las granadas (200)
es importante; porque 200 indica la recompensa de un siervo
fiel. La fidelidad es un atributo muy importante en un anciano.
F. EL PROPÓSITO DEL TEMPLO
Tanto el Tabernáculo de Moisés como el Templo de Salomón
tenían el mismo propósito subyacente. En Éxodo 25:8, Dios
dijo a Moisés: “Y harán un santuario para mí, y habitaré en
medio de ellos”. El Templo de Salomón fue construido por la
misma razón: “Y habitaré en ella en medio de los hijos de
Israel” (1 R. 6:13).
En 1 R. 8:1-4, cuando fue edificado el templo, trajeron el
arca del pacto (en donde estaba la presencia del Señor), desde
la Ciudad de David, que es Sion, en el séptimo mes (que
significa la fiesta de los Tabernáculos) hasta el Templo de
Salomón. Cuando depositaron el arca del pacto en el Lugar
Santísimo, la nube de la presencia de Dios llenó la casa de
Jehová “y los sacerdotes no pudieron permanecer para
ministrar por causa de la nube; porque la gloria de Jehová
había llenado la casa de Jehová”.
Dios está construyendo en el ámbito del Espíritu. Con Sus
piedras vivas está construyendo un templo santo. Su intención
es llenar este templo de Su gloria visible. He visto en el Espíritu
que en la fiesta de los Tabernáculos, se manifestará la gloria
visible de Dios.
114
David y Salomón
Nadie tendrá que preguntar: “¿Está Dios entre ustedes?” Pues
verán la nube de gloria y sentirán la asombrosa presencia de
Dios. La gloria de Dios se moverá entre nosotros haciendo
milagros. Cuando la gente ocupe su asiento, será sanada y
liberada. Dios hará cosas extraordinarias.
Mientras nosotros construimos edificios físicos en la tierra,
que solo durarán poco tiempo, Dios trabaja en nuestras
vidas para la eternidad. Él es el Maestro Constructor que
nos labra y moldea para que “encajemos” en Su edificio,
la Nueva Jerusalén. Dios desea forjar lo siguiente en
nuestras vidas:
1. Purificarnos.
El llamado de Dios para nosotros es a dejar todo pecado e
inmundicia y ser puros. Amados, lo que Dios está haciendo
en cada una de nuestras vidas es eterno. Se nos está dando la
forma de la Nueva Jerusalén, la que está arriba en los cielos.
“Salid de entre ellos, no toquéis lo inmundo”. ¡Oh, purifíquense
las vasijas del Señor! Ese es el clamor de Dios para nosotros.
¡Oh, sed puros!
2. Pulirnos.
Como ya lo dijimos, en el templo del Señor habrá muchas
piedras angulares. Dios quiere que tengamos la visión de estar
tan conformados a la imagen de Jesús, que otros al vernos
puedan calibrarse y orientar su vida y conducta.
Reconozcamos que Dios nos ha colocado en nuestros
empleos seculares específicos, para poder pulirnos y darnos
la forma de piedras angulares.
La vida de David
115
3. Madurarnos.
Al prepararnos para entrar en el Lugar Santísimo en nuestra
experiencia espiritual, comprendamos que esta madurez
acarrea responsabilidades adicionales y un patrón de
conducta que quizá sea más alto del que antes se nos exigió.
¡Prosigamos por la gloria de Dios!
G. APLICACIÓN PRÁCTICA
Somos piedras vivas que Dios está preparando y tallando,
para colocarnos en Su templo eterno, “...vosotros sois el
templo del Dios viviente, como Dios dijo: Habitaré y andaré
entre ellos, y seré su Dios, y ellos serán mi pueblo. Por lo
cual, salid de en medio de ellos, y apartaos, dice el Señor, y
no toquéis lo inmundo; y yo os recibiré, y seré para vosotros
por Padre, y vosotros me seréis hijos e hijas, dice el Señor
Todopoderoso” (2 Co. 6:16-18).
SEGUNDA
PARTE
118
La vida de Salomón
La vida de Salomón
119
ESTUDIO SOBRE
LA VIDA DE SALOMÓN
Capítulo 7 Los años formativos de Salomón
Capítulo 8 La ascensión de Salomón al trono
Capítulo 9 La construcción del templo
Capítulo 10 El apogeo de su reinado y gloria
Capítulo 11 Sus años finales y decadentes
Capítulo 12 Comparación entre David y Salomón
120
La vida de Salomón
INTRODUCCIÓN
Me gustaría comenzar esta serie con algunas observaciones
basadas en hechos, acerca de los reyes de Israel. Solamente
fueron tres los que gobernaron sobre el reino unido de Israel—
Saúl, David y Salomón. Éstos representan cierta clase de
líderes de la era de la Iglesia.
EL REY SAÚL
•
Ungido dos veces – por Samuel, y luego por los ancianos
de Israel cuando fue instalado en el cargo. Comenzó bien,
pero fracasó por su desobediencia.
•
Fue atormentado por el Señor con un espíritu de celos.
•
Simboliza a la Israel física, que desobedeció los
mandamientos de Dios, y que por haber pecado, fue
movida a celos por una nación que no es nación—la iglesia
gentil (ver Romanos 10:19).
•
Simboliza a un dirigente de la iglesia, que por desobedecer
al Señor, ha perdido la unción y es reemplazado por otro
varón conforme al corazón de Dios.
EL REY DAVID
•
Siguió al Señor por completo.
•
Peleó las batallas de Jehová y llevó a Israel a poseer la
herencia que Dios había prometido.
•
Simboliza la iglesia de los primeros días (ver Amós 9:11;
Hechos 15:16).
La vida de Salomón
121
•
Su tabernáculo estaba en el monte de Sion. Sion
representa la santidad de Jehová.
•
Él personifica a Cristo como profeta, sacerdote y rey.
•
Él es como la Iglesia de los primeros días, la cual avanzó
como ese real sacerdocio, a combatir y conquistar el
mundo para Cristo.
•
David ilustra la iglesia de nuestros días, contendiendo
contra las potestades del enemigo y ganando las naciones
para Jesús.
a. Una etapa en que la iglesia llega a poseer la herencia
y la posición en el Espíritu, que Dios le ha designado.
b. La iglesia en ese periodo de guerra espiritual.
•
David, en el acto final de su vida, recibió el modelo para
el templo. Hoy en día, vemos al Señor hablar en tantos
lugares acerca de avivamiento, multitudes y la gran
cosecha. Dios está hablando de la necesidad de edificios
muy espaciosos. ¿Por qué? En mi opinión, la era de
Salomón como Baal Hamón, “el Señor de la Cosecha”,
“el Señor de Multitudes”, “El Príncipe de Paz”, está
haciendo Su entrada.
EL REY SALOMÓN
•
Así como la vida y ministerio de David están representados
en la llenura del Pentecostés de la iglesia de los primeros
días, o lluvia temprana; la vida de Salomón está regida
por la lluvia tardía, o fiesta de los Tabernáculos, que se
122
La vida de Salomón
celebró después de que el templo estuvo terminado. Es
un lugar en que la gloria de Dios se manifiesta.
•
Es de suma importancia que captemos la idea en torno al
reinado de Salomón. Su reinado simboliza la Iglesia de
los últimos días en toda su plenitud, antes de la venida del
Señor. A este templo vendrá súbitamente el Señor (Mal.
3:1). “¿Quién podrá permanecer en Su presencia? Porque
vendrá como refinador a purificar a los hijos de Leví, de
modo que traigan a Jehová ofrenda en justicia”.
(Paráfrasis).
•
En las vidas de estos tres reyes está la iglesia de nuestros
días. Saúl—desobediente, eliminado; David—que
introduce a la iglesia en su herencia; y, Salomón—que
introduce a la Iglesia en el templo, su verdadero lugar de
reposo, y en la gloria de la fiesta de los Tabernáculos.
La vida de Salomón
123
Capítulo 7
LOS PRIMEROS AÑOS DE
FORMACIÓN DE SALOMÓN
I. LOS PRIMEROS AÑOS DE
FORMACIÓN DE SALOMÓN
A. GENEALOGÍA
B. INSTRUCCIÓN PARA EL TRONO
1. La fidelidad a los padres
a. La sumisión
b. El hijo de la vejez
c. La obediencia
d. La diligencia
2. La maldición de las malas compañías
3. Los lazos de la lujuria
4. La contienda y sus frutos
5. Los errores de la codicia
124
La vida de Salomón
A. GENEALOGÍA
Dios puede transformar las situaciones más inmorales
y con ello producir algo que le glorifique. Salomón nació
de una relación adúltera entre David y Betsabé. Hoy en día,
el adulterio está arrasando no solo el mundo sino la Iglesia.
Sin embargo, éste que nació de tal relación, fue amado por
Dios. Dios puede transformar las situaciones más inmorales,
y con ello producir algo que le glorifique. Considero que esta
verdad debería ser esperanzadora para muchos. En la vida
de Salomón hubo debilidad carnal. Nosotros heredamos la
naturaleza de nuestros padres y abuelos. Por lo tanto, cuando
hay un grave pecado como el de David y Betsabé, éste se
transmite a los hijos. De ahí que Salomón naciera con esa
misma debilidad de la carne.
David, e incluso Betsabé, se esmeraron en preparar a Salomón
para el trono. Ellos se empeñaron en reforzar, mediante la
instrucción, esa área frágil y vulnerable de su naturaleza que
lo había expuesto a esos apetitos carnales. En los primeros
nueve capítulos del libro de Proverbios, quedaron registradas
para nosotros sus enseñanzas.
B. INSTRUCCIÓN PARA EL TRONO
Estos capítulos de Proverbios fueron preparatorios para que
un hombre se sentara en el trono de David. Constituyen la
instrucción impartida por un rey a otro rey. Son un excelente
adiestramiento para nosotros, ya que todos estamos
designados para ocupar el trono. (1 S. 2:8; Ap. 1:6; 5:10).
Por lo tanto, estamos contemplando instrucciones para reyes.
La vida de Salomón
125
En los primeros nueve capítulos de Proverbios, se cubre lo
fundamental de los temas siguientes:
1. La fidelidad a los padres
2. La maldición de las malas compañías
3. Evitar los lazos de la sensualidad y la lujuria
4. La contienda y sus frutos
5. Los errores de la codicia
Todos estos temas pueden resumirse en una sola
frase: Instruirse en sabiduría.
Proverbios 1:1-9 es un prólogo en que se muestra el propósito
de estos capítulos:
1:4—“Para dar sagacidad a los simples, y a los jóvenes
inteligencia y cordura” [Para dar sabiduría a los simples, y a
los jóvenes conocimiento y discreción—(parafraseado). Ese
es el propósito de esta instrucción. Dondequiera que leamos
la expresión: “jóvenes”, se refiere también a una joven mujer.
1:7—“El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; los
insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza”.
1:22—“¿Hasta cuando, oh simples, amaréis la simpleza?”
No hay ningún galardón por ser ignorantes en el día y
generación presentes. Isaías 33:6 dice (hablando de los últimos
días), “...y reinarán en tus tiempos la sabiduría y la ciencia...?”
Como es en lo secular, así es en lo espiritual. Para cada uno
de nosotros, sea cual sea el área en que estemos, hay un
126
La vida de Salomón
llamado a estudiar y mejorar nuestras capacidades y
conocimientos, porque nos salvarán.
En el prólogo hay un ruego que se repite a menudo: “Oye,
hijo mío, la instrucción de tu padre, y no desprecies la
dirección de tu madre”. Es interesante notar que Betsabé
también era una maestra.
1. La fidelidad a los padres
a. La sumisión.
Proverbios 3:1 empieza con: “Hijo mío”. David le está
hablando a Salomón; “Hijo mío, no te olvides de mi ley, y tu
corazón guarde mis mandamientos”. “Y hallarás gracia y buena
opinión ante los ojos de Dios y de los hombres” (vs. 4). Esto
nos recuerda a Lucas 2:51, en donde Jesús, después de estar
en el templo respondiendo y haciendo preguntas a los
doctores de la ley, se sometió a Su madre y a Su padre.
Entonces, por esa sumisión, dice el versículo 52 que “Jesús
crecía en sabiduría y en estatura, y en gracia para con Dios y
con los hombres”.
Proverbios 4:1 continúa con ese mismo pensamiento: “Oíd,
hijos, la enseñanza de un padre, y estad atentos, para que
conozcáis cordura”.
b. El “hijo de la vejez”.
“Porque yo también fui hijo de mi padre” (Pr. 4:3). Aquí
Salomón empieza a recordar y a transmitir a su generación,
las enseñanzas de David. Salomón fue en Israel tanto el
predicador como el rey.
La vida de Salomón
127
“Porque yo también fui hijo de mi padre, delicado y único
delante de mi madre”. Salomón fue el hijo de la “vejez de
David”. Hay algo especial en los hijos de la vejez de un hombre.
José, el hijo escogido de Jacob, fue también hijo de la vejez
de su padre. Yo creo además que este es un símbolo espiritual
de la Iglesia de los últimos días. Un hijo de la vejez, tiene el
privilegio de la madurez y experiencia de su progenitor. Yo
creo que la Iglesia de los últimos días tendrá toda la riqueza y
experiencia de la Iglesia de todas las épocas. Será
singularmente bendecida por el Señor, porque es el “hijo de
Su vejez”. Así como José y Salomón, la Iglesia de los últimos
días será llena de la sabiduría y conocimiento de Dios, como
lo estuvieron estos hijos de la vejez, y será amada
particularmente por el Padre. Asimismo, en Juan 2:10, acerca
del milagro del vino, dice que Jesús guardó el mejor para el
final. Hay muchos privilegios extraordinarios para los
miembros de la iglesia de los últimos días antes de la venida
del Señor Jesús. Algo especial está programado para cada
uno de nosotros.
c. La obediencia.
Este concepto de obediencia a los padres continúa y se repite
una y otra vez. En Proverbios 4:10 dice que como resultado
de esa obediencia, “se te multiplicarán años de vida”. (Ver
Efesios 6:2, que habla del primer mandamiento con promesa).
Es algo que debemos hacer incluso en la vejez. Yo todavía
obedezco y respeto a mis padres. Mi esposa, cuyos padres
ya fallecieron, atesora sin embargo su recuerdo, sus vidas y
sus dichos. Ella todavía los recuerda. En esto hay una bendición
especial: “Y se te multiplicarán años de vida sobre la tierra”.
Es muy importante tener una larga vida que nos sirva para
128
La vida de Salomón
prepararnos para la eternidad. Efesios 5:16 habla de “redimir
el tiempo”. El Salmo 90:12 dice: “Enséñanos de tal modo a
contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría”.
Atesoremos cada día que Dios nos da. La clave para la
longevidad es honrar a nuestros padres sea cual sea
nuestra edad.
d. La diligencia.
“Hijo mío, está atento a mis palabras...guárdalas en medio
de tu corazón...sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón,
porque de él mana la vida” (Pr. 4:20-23). “No te desvíes a la
derecha ni a la izquierda” (vs. 27). Aquí hay algo muy
importante: Isaías 30:21 dice: “Tus oídos oirán a tus espaldas
palabra que diga: Este es el camino, andad por él”. En nuestra
época existe la tendencia a no ser diligentes ni comprometidos.
Esto se aplica a todo aspecto de nuestras vidas. Es necesario
que nos comprometamos a seguir los caminos y sendas de
Dios. Dios promete que si nos desviamos, oiremos una voz
decir: “No. El camino es este, síguelo”. Pero si hacemos caso
omiso, negándonos y endureciendo nuestros corazones contra
Dios cuando nos alerta, Él nos dejará andar por otro camino.
Él incluso llega al extremo de endurecernos de manera que
no podamos retroceder. Estas instrucciones son muy
importantes no nos desviemos a la izquierda ni a la derecha.
2. La maldición de las malas compañías
Hay muchas advertencias en Proverbios 2:12-22 contra las
malas compañías, inclusive dentro de la iglesia. “No entres
por la vereda de los impíos, ni vayas por el camino de los
malos. Déjala, no pases por ella; apártate de ella, pasa” (Pr.
La vida de Salomón
129
4:14, 15). Luego, en el capítulo 6: 12,13, aparece nuevamente
la solemne advertencia: “El hombre malo, el hombre
depravado, es el que anda en perversidad de boca; que guiña
los ojos, que habla con los pies, que hace señas con los dedos”.
El apóstol Pablo toma ese refrán en 1 Corintios 15:33: “...las
malas conversaciones [compañías] corrompen las buenas
costumbres”.
Después, en el transcurso de su vida, el rey David comienza
el Salmo 1 exactamente con esas observaciones:
“Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos,
ni estuvo en camino de pecadores, ni en silla de
escarnecedores se ha sentado” (Sal. 1:1).
3. Evitar los lazos de la sensualidad y la lujuria
David comienza a advertir contra la sensualidad (vea los
capítulos 5:3-23; 6:24-35; 7:1-5). Al guardar los
mandamientos de un padre, podemos ser librados de las
mujeres extrañas. Estas mujeres se encuentran en la casa del
Señor, al igual que los hombres malos. El capítulo 5:14 dice:
“Casi en todo mal he estado, en medio de la sociedad y de la
congregación”. John Wesley dijo que nunca debemos
subestimar el pecado dentro de la iglesia. El problema tanto
de jóvenes como de adultos, no son las compañías fuera de
la iglesia, sino las de dentro que ya no escuchan a los maestros
y se desvían. Proverbios 2:12, 13 es una advertencia para las
muchachas: “Para librarte del mal camino, de los hombres
que hablan perversidades, que dejan los caminos derechos”.
Si alguien ha dejado el camino derecho, es porque una vez
estuvo allí. Los versículos 16 y 17 son para los muchachos en
su trato con las muchachas: “Serás librado de la mujer extraña,
130
La vida de Salomón
de la ajena que halaga con sus palabras, la cual abandona al
compañero de su juventud, y se olvida del pacto de su Dios”.
Solamente podemos olvidar aquello que una vez supimos.
4. La contienda y sus frutos
David dice: “No tengas pleito sin razón” (Pr. 3:30). ¡Cuántas
cosas se pierden por medio de pleitos innecesarios! Las
palabras de Pablo a Timoteo son muy importantes en este
sentido: “Porque el siervo del Señor no debe ser contencioso,
sino amable para con todos, apto para enseñar, sufrido” (2
Ti. 2:24). Hebreos 12:14 dice: “Seguid la paz con todos”.
Todas estas instrucciones producen un rey, si las obedecemos.
5. Los errores de la codicia
(Proverbios 1:10-19, codiciosos de ganancias). En 1 Timoteo
6:10 Pablo dice: “Porque raíz de todos los males es el amor
al dinero”. Hay un antídoto contra la codicia en Proverbios
3:9, 10: “Honra a Jehová con tus bienes, y con las primicias
de todos tus frutos; y serán llenos tus graneros con
abundancia”. Esta es la promesa. El Señor Jesús dijo: “Dad y
se os dará” (Lc. 6:38).
La codicia es muy peligrosa. Hace algún tiempo, mi esposa y
yo conversábamos con la esposa de un pastor, la cual hizo
este comentario: “La codicia conduce a la lujuria e inmoralidad
[o la genera]”. Continuó diciendo que el codicioso comienza
por ir tras cosas: carros, casas, terrenos, dinero, etc., y luego
mujeres. Luego explicó el peligro de la codicia, diciendo:
“He notado una y otra vez, que la codicia genera inmoralidad”.
Es necesario que combatamos la codicia de inmediato, porque
puede conducirnos a toda clase de otros pecados.
La vida de Salomón
131
La amonestación de David puede resumirse en estas palabras
del capítulo 4:5: “Adquiere sabiduría, adquiere inteligencia;
no te olvides ni te apartes de las razones de mi boca”.
Los versículos 7 y 8 dicen: “Sabiduría ante todo; adquiere
sabiduría, y sobre todas tus posesiones adquiere inteligencia.
Engrandécela, y ella te engrandecerá; ella te honrará, cuando
tú la hayas abrazado”.
Esas son unas pocas recomendaciones que tienen que ver
con la formación de un rey. A través de sus primeros diecinueve
años de vida, Salomón fue instruido esmeradamente por David
y Betsabé. La mayor parte de sus enseñanzas, registradas en
los primeros nueve capítulos de Proverbios, recomiendo que
se estudien con empeño.
“Honra a Jehová con tus bienes, y con las
primicias de todos tus frutos; y serán llenos tus
graneros con abundancia”.
Proverbios 3:9, 10
132
La vida de Salomón
La vida de Salomón
133
Capítulo 8
LA ASCENSIÓN DE SALOMÓN
AL TRONO
I. LA ASCENSIÓN DE SALOMÓN
A. ACONTECIMIENTOS CIRCUNDANTES
1.
2.
3.
4.
Adonías se exalta a sí mismo
Adonías nunca fue disciplinado
Adonías es ayudado por compañeros
Adonías se precipitó
a. Sus derechos al trono
b. Su autoproclamación como rey
c. Ayudado por impíos
5. A sus seguidores les falta carácter
a. No tienen discernimiento
b. No tienen un corazón entregado
B. SALOMÓN ES HECHO REY
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
Nombrado por David
Ungido con aceite
Autoridad
Protección de ángeles
Ungido en Gihón
Adhesión
Abundancia
134
La vida de Salomón
8. Aparición
9. Cielos abiertos
10. Súplica
C. CONCLUSIÓN
La vida de Salomón
135
A. ACONTECIMIENTOS CIRCUNDANTES
He aquí un principio que necesitamos aprender para el día y
época en que vivimos.
Los personajes principales de este episodio de la vida de
Salomón, son:
Salomón
Adonías
David
Betsabé
Abisag
Además de ser personajes históricos, también son símbolos.
Hay una razón para que este suceso sea descrito con tanto
esmero en la historia de Israel. He sentido una inmensa
agitación en mi espíritu, para incluir este particular episodio,
ya que un individuo puede estar preparado para el trono y no
alcanzarlo.
1. Adonías se exalta a sí mismo.
Nuestra referencia es 1 Reyes capítulo 1. En el versículo 3
está una de las cinco personas que tuvieron una participación
preponderante—Abisag sunamita, la cual sirvió al rey David
en sus últimos días. En el versículo 5 se nos presenta Adonías,
el que se exaltó a sí mismo. ¿Por qué Adonías? Su hermano
mayor, Amnón, había sido asesinado; Quileab murió; Absalón
también había muerto. Por lo tanto, el trono le correspondía a
Adonías por herencia, porque era el cuarto hijo varón.
Entonces, Adonías se enalteció a sí mismo. Mateo 23:12
136
La vida de Salomón
dice:. “El que se enaltece será humillado”. Adonías dijo: “Yo
seré rey”. ¡Seré!. Eso nos recuerda los cinco “serés” de Isaías
14:13, l4 pronunciados por Lucifer en los cielos y que también
fueron su ruina. He aquí la férrea voluntad de Adonías.
“El que se enaltece será humillado”
2. Adonías nunca fue disciplinado.
¿Cuál era la actitud de David hacia Adonías? David era el
padre de Adonías y de Salomón, aunque tenían diferente
madre. 1 Reyes 1:6 dice acerca de Adonías: “Y su padre
[David] nunca le había entristecido en todos sus días con
decirle: ¿Por qué haces así?”.
La idea aquí es que David nunca disciplinó a Adonías; éste
nunca tuvo que soportar la reprensión de un padre, y no hubo
absolutamente nada que frenara su vida. Es que Adonías no
estaba destinado al trono como Salomón. Salomón sí tuvo
que soportar el castigo de su padre. A él se le corregía
constantemente, recordándole las enseñanzas y dichos de sus
padres. Adonías, por el contrario, podía hacer lo que quisiese.
Su padre nunca le entristeció ni lo reprendió. Nunca fue
enseñado ni formado, porque nunca se ordenó que él fuera
rey.
3. Adonías es ayudado por compañeros impíos.
En el versículo 7 Adonías consultó con Joab. Joab anduvo
con David, sin embargo había matado a hombres más
honorables que él mismo. Existía pecado en la vida de Joab,
pecado que no había sido combatido, ni rectificado. Luego
estaba Abiatar, un sacerdote que también había seguido a
La vida de Salomón
137
David. Abiatar procedía de la casa de Elí, conocido también
por no disciplinar a sus hijos.
4. Adonías se precipitó.
Las lecciones que quiero observar en Adonías para nuestros
tiempos, son estas:
a. A los ojos de los hombres, parecía tener el legítimo
derecho al trono.
b. Se enalteció; se autoproclamó rey.
c. Fue ayudado por aquellos cuya vida no era totalmente
recta.
En este tiempo existe en la iglesia un vacío. Hay personas
que se apresuran a entrar en este vacío antes del nuevo mover
de Dios, porque una ola tiene que irse para que otra llegue.
Cuando contemplamos las olas en la playa, hay casi una
ausencia de agua antes de que la nueva ola haga su entrada.
Hoy, en la Iglesia alrededor del mundo, hay un vacío porque
una ola se va antes de que entre la nueva. Eso era exactamente
lo que pasaba en los días de Adonías. La salud de David
decaía rápidamente. En el trono de Israel no había un
gobernante propiamente dicho, y Adonías se precipitó a entrar
en ese vacío. Hoy, existen líderes autodesignados que se
precipitan al vacío. Son seguidos por personas aparentemente
sinceras—tal como los otros hijos del rey siguieron a Adonías.
Hoy en día, existe en la iglesia alrededor del mundo
un vacío porque una ola se va antes de que entre
otra nueva. Hoy, existen líderes autodesignados
que se precipitan al vacío.
138
La vida de Salomón
Los seguidores de Adonías carecían de lo siguiente:
a. No tenían discernimiento. No oyeron lo que Dios decía.
Dios había dicho con claridad que Salomón sería el
gobernante.
b. No vivían enteramente para el Señor. Tenían pecados
no confesados en algunas áreas de sus vidas, los cuales no
habían rendido a Dios.
c. Ellos se autodesignaron para el puesto. Adonías es una
clase de líder que estamos viendo en muchos lugares en la
Iglesia contemporánea. Líderes que se autodesignan para el
puesto, y extravían a las personas con mensajes de fe extrema
y otros errores. Ellos son los Adonías modernos, y sus
seguidores son gente de motivos torcidos, en cuyas vidas
hay áreas que Dios no ha tratado.
5. Adonías conquistaba a la gente.
1 Reyes 1:6 dice que también él era de “muy hermoso parecer”.
Se parecía mucho a su hermano Absalón y procuraba ganarse a
la gente. Joab y Abiatar intentaban hacer rey a Adonías para
sacar provecho para sí mismos. Joab sabía que iba a perder su
puesto de general del ejército de David. Abiatar se consideraba
desplazado por otro sacerdote—Sadoc. Por consiguiente,
querían hacer rey a Adonías para conservar sus posiciones.
Pero Adonías nunca se acercó a Sadoc, el fiel sacerdote, ni a
Natán el profeta. Nunca se acercó a los grandes de David.
Ninguno de éstos fue convidado. La gente busca a los de su
clase. Es por eso que necesitamos exclamar: “Oh, Dios,
dame un corazón limpio”.
La vida de Salomón
139
B. SALOMÓN ES HECHO REY
Betsabé y el profeta Natán se presentaron delante de David,
y le informaron sobre la autoproclamación de Adonías como
rey. David, en cierto sentido, simboliza al Señor Jesucristo.
Cuando el impostor se instaló, David declaró poco después
quién era verdaderamente el escogido de Dios—Salomón.
SALOMÓN:
1. Designado - por David, símbolo del Señor Jesucristo.
2. Ungido - con aceite del tabernáculo. La unción
verdadera.
3. Autoridad - Cabalgó sobre la mula real.
4. Protección de ángeles - Le rodeaban los guardaespaldas
del rey. Esto se aplica a los ángeles. ¿Por qué lo interpreto
así? A veces Dios me abre los ojos para ver dentro del ámbito
espiritual, y veo quiénes rodean a los impostores—los rodean
los ángeles caídos, y éstos son los que realizan los milagros.
Por lo tanto, Salomón estaba rodeado por la escolta del rey,
los ángeles de Dios.
5. Ungido - en Gihón, el lugar del tabernáculo : la iglesia
verdadera. Adonías fue ungido en Rogel que significa “colina
del consejo malo”.
6. Adhesión - Salomón, al principio, anduvo en los estatutos
de David. Él amaba al Señor.
7. Abundancia - En Gabaón ofreció mil holocaustos,
símbolo de su reino, el reino milenial. Un reino ilimitadamente
fructífero Baal Hamón, “El Señor de la cosecha”.
140
La vida de Salomón
8. Aparición - Entonces el Señor se apareció a Salomón
en un sueño. Otros habían querido capturar el reino por medio
de la unción falsa, pero cuando el legítimo rey fue ungido,
Dios se le apareció y le dijo: “Pide lo que quieras que yo te
dé”. Los Adonías del mensaje de la fe extrema, dicen: “Dile
a Dios lo que quieres”. Sin embargo, a los auténticos, Dios
les dice: “¿Qué quieres que haga por ti?” La diferencia es
grande. Hace algún tiempo, el Señor trató conmigo acerca de
los Adonías, y de cómo debemos estar prevenidos en cuanto
a ellos.
9. Cielos abiertos - Comprendamos el día en que estamos
viviendo. Vamos a entrar en la era espiritual de Salomón. Es
de suma importancia conocer las lecciones de su vida, y el
hecho de que recibió una formación y una disciplina tan
esmeradas, que lo capacitaron para llegar a ver a Dios cara a
cara. A este hombre Dios podía darle un cielo abierto. Eso es
lo que Dios quiere dar a la Iglesia y a cada uno de nosotros
en los últimos días. Jesús tuvo esa bellísima comunión con el
Padre. Incluso en el camino a la crucifixión, dijo: “Si yo lo
deseara, podría pedir a mi Padre que me enviara doce legiones
de ángeles” (Mt. 26:53, paráfrasis). Lo que Jesús pedía, lo
recibía. Dios quiere llevarnos a un nivel en que pueda
confiarnos un cielo abierto así como se lo confió a Jesús,
para que podamos pedir, y Él, dar. Pero sería para Su gloria
y en Su voluntad.
Los cielos están abiertos para todo hombre o mujer
que pida en la voluntad de Dios. Dios quiere
llevarnos a un nivel en el que pueda confiarnos un
cielo abierto.
La vida de Salomón
141
Dios ciertamente desea darnos más gloria. En Gales, en la
década de 1850, se llevó a cabo una reunión de avivamiento
en la que estaba un hermano cuyo rostro brillaba con la gloria
de Dios. Alguien hizo un comentario acerca de la maravillosa
reunión y de la gloria de Dios que se manifestaba. Este
hermano contestó: “Y Dios quiere darnos más y más gloria,
¡si tan solo nos la pudiera confiar!” Salomón es la muestra
del hombre a quien Dios se aparece, diciéndole: “Pide lo que
quieras que te dé”. Dios desea llevar a la Iglesia a este nivel.
Es a los Salomones a quienes Dios se aparece, no a los
Adonías, porque éstos seguramente le pedirían mal.
10. Súplica - ¡Qué invitación! Cuando Salomón estuvo cara
a cara con Dios, y Dios le dijo: “Pide lo que quieras que yo te
dé”, aquel que había sido enseñado y disciplinado respondió:
“Señor, dadme sabiduría”. ¿Cómo hubiera contestado una
persona no adiestrada? Dios se le apareció al disciplinado,
al que podía participar de esa relación. Dios sabía, como lo
mencionó Jesús más tarde en el evangelio de Juan, que era
cuestión de pedir según la voluntad de Dios. Para los
hombres y mujeres que piden según la voluntad de Dios, los
cielos están abiertos. Fue a un hombre adiestrado y
disciplinado, a quien Dios se le apareció, diciendo: “Pide lo
que quieras que te dé”. Salomón dijo: “Dadme sabiduría”
porque quien es auténtico conoce los verdaderos valores. Él
no desperdició esa oportunidad pidiendo riquezas; pidió lo
más importante—la sabiduría.
C. CONCLUSIÓN
¿Qué podemos aprender de la vida de Salomón? 1) Fue
disciplinado; 2) Fue adiestrado; 3) Su orientación era hacia
142
La vida de Salomón
Cristo y 4) Era un hombre de compromiso. Debemos confiar
en que los “cielos abiertos” venideros, nos encontrarán
aprobados, designados, ungidos y pidiendo según la voluntad
de Dios, para Su gloria. Es en ese lugar que Dios desea que
estemos. ¿Estaremos bajo los cielos abiertos? Lo estaremos,
si nos hacemos como Salomón, permitiéndole al Padre
disciplinarnos de tal manera que nos inculque verdaderos
valores, y pidamos las cosas según la voluntad de Dios. En
este día en que vivimos no habrá límite, ¡así como no lo hubo
en el reinado de Salomón!
La vida de Salomón
Capítulo 9
LA CONSTRUCCIÓN
DEL TEMPLO
I. LA EDIFICACIÓN DEL TEMPLO
A. INTRODUCCIÓN
B. LA EDIFICACIÓN DEL TEMPLO
1. Construcción
a. El modelo
b. La ubicación
c. El tiempo
d. El propósito
e. Las piedras
f. Las dimensiones
g. Un estímulo
C. COMPOSICIÓN
1. Pureza
2. Perfección
3. Columnas
143
144
La vida de Salomón
II. DEDICACIÓN DEL TEMPLO
A. LIMPIEZA
B. TÉRMINO
C. CONSAGRACIÓN
D. EL ARCA DEL PACTO
1. Llevada al reposo
2. Un nuevo pacto
3. Los cantores
a. Vestidos de justicia
b. Crucificados con Cristo
c. Combinados como uno solo
4. La gloria y el fuego
a. Llegando al templo
b. Vista claramente en la Iglesia
c. Acerca de los últimos días
E. CONCLUSIÓN—MENSAJE Y VISIÓN
1. Sacrificio y adoración
2. Llenos de Su gloria
3. Símbolo de pureza
La vida de Salomón
145
A. INTRODUCCIÓN
En nuestros estudios, hemos visto que Salomón representa a
la Iglesia de los últimos días. De la vida de Salomón se pueden
derivar enseñanzas que influyen de manera significativa en
nuestras vidas en estos tiempos. Consideraremos el edificio
del templo en dos partes:
I. La edificación del templo
II. La dedicación del templo
B. LA EDIFICACIÓN DEL TEMPLO
1. Construcción
a. El modelo. El modelo del templo le fue dado por el
Espíritu al rey David, así como todas las obras del modelo.
La mano de Dios vino sobre David, quien por inspiración
divina, escribió cada detalle y diseño del templo (1 Cr. 28:19).
b. La ubicación. Dios escogió el monte Moriah en Jerusalén
como el lugar para edificar el templo, (ver 2 Cr. 3:1). Fue allí
que el Señor se le apareció a David en la era de Ornán jebuseo,
cuando se detuvo la plaga enviada por Dios en juicio por el
pecado de levantar un censo del pueblo, (ver 1 Cr. 21:1427; 2 S. 24).
Hoy se recalca mucho el crecimiento de la Iglesia
Hoy se recalca mucho el crecimiento de la Iglesia. Es casi una
“manía de crecimiento” en la que los números parecen
haberse vuelto un objeto de idolatría. Debemos poner mucho
cuidado en no caer en el mismo lazo del rey David.
146
La vida de Salomón
El monte Moriah no fue solo el lugar en que David vio al
ángel que llegaba a matar a los habitantes de Jerusalén, sino
que el profeta Gad habló con David en ese lugar, y le dijo que
comprara esa tierra. Anteriormente, el monte Moriah había
sido escenario de otro episodio heroico —la ofrenda que
Abraham hizo de Isaac, quien es símbolo de Cristo. Así, pues,
David compró la tierra por la totalidad del precio, y algunos
años después, hizo preparativos para la construcción del
templo, antes de morir. Lo que estamos analizando ahora, es
el periodo de tiempo en que Salomón ascendió al trono y
comenzó a edificar el templo en el cuarto año de su reinado.
c. El tiempo. Los detalles relativos al inicio de la construcción
del Templo de Salomón son muy importantes. 1 Reyes 6:1 nos
dice que la construcción comenzó en el mes de Zif, que significa
“esplendor”. También se habla de este mes como de “la apertura
de la belleza”. Sería una obra esplendorosa y magnífica. Se
inició durante el cuarto año del reinado de Salomón, indicando
que el templo sería de bendición universal, para toda la humanidad.
(El número cuatro significa universal).
Estamos analizando ahora el periodo de tiempo
en que Salomón ascendió al trono y empezó a
edificar el templo en el cuarto año de su reinado.
d. El propósito. “En el año cuatrocientos ochenta después
que los hijos de Israel salieron de la tierra de Egipto...comenzó
él a edificar la casa del Señor” (1 R. 6:1) ¿Por qué se nos
proporciona el año con tanta exactitud? Cuarenta y ocho
significa que en el templo se intensificaría la adoración. El
número diez es el cumplimiento de la ley. De manera que
sería una adoración según la ley, ejecutada por sacerdotes
fieles (48 x 10 = 480).
La vida de Salomón
147
2 Crónicas 2:5, 6 recalca esta idea del ministerio sacerdotal del
templo: “Y la casa que voy a edificar será grande; porque nuestro
Dios es grande, más que todos los dioses. ¿Pero quién será
capaz de edificarle una casa cuando los cielos de los cielos no
pueden contenerle? ¿Quién soy yo para edificarle una casa
aunque sea solo para quemar incienso delante de Él?” Aquí
tenemos uno de los propósitos de la edificación de la casa.
Juan 4:23, 24: “Mas la hora viene, y ahora es, cuando los
verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en
verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que
le adoren. Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y
en verdad es necesario que le adoren”. En el Templo de
Salomón se ponía el énfasis en la adoración. De igual manera,
en la Iglesia de los últimos días, el Padre está buscando
personas que le adoren en espíritu y en verdad. Luego, en 1
Pedro 2:5, acerca de nuestras propias vidas, dice: “Vosotros
también, como piedras vivas, sed edificados como casa
espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios
espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo”.
e. Las piedras. 1 Pedro 2:5 resalta la idea de que somos
“piedras vivas”. Hablando de las piedras usadas para el
templo, 1 Reyes 7:10 dice: “El cimiento era de piedras
costosas, piedras grandes, piedras de diez codos y piedras
de ocho codos”. El número diez se refiere al cumplimiento de
la ley y el número ocho lleva la idea de vida nueva.
1 Reyes 6:7 dice: “Y cuando se edificó la casa, la fabricaron
de piedras que traían ya acabadas”. Todo era preparado
antes de ser traído al sitio. Hoy, hay muchas personas
comprometidas en un proyecto de construcción de iglesia.
148
La vida de Salomón
Dios quiere preparar a cada uno de nosotros antes de que se
complete ese edificio. Él quiere darnos forma y cortar nuestros
bordes de modo que cumplamos toda la Palabra de Dios.
Además, la idea de vida nueva (el número ocho) indica que
en nosotros debe nacer una unción fresca, así como la visión
de lo que Dios se propone hacer con la casa que nos ha
pedido construirle. Dios está haciendo una obra profunda en
muchas vidas, preparándonos de antemano para que nos
traslademos a ese nuevo edificio.
f. Las dimensiones. 1 Reyes 6:2 dice: “La casa que el
Rey Salomón edificó a Jehová tenía sesenta codos de largo y
veinte de ancho, y treinta codos de alto”. El Tabernáculo de
Moisés fue el primer santuario que Dios ordenó que el hombre
le construyera. Hasta cierto punto, el primer tabernáculo (así
como el Tabernáculo de David) refleja la Iglesia de los
primeros días; y sus medidas eran exactamente la mitad de
las del Templo de Salomón. He aquí una verdad muy bella. El
Tabernáculo de Moisés medía treinta codos por diez codos,
mientras que el Templo de Salomón medía sesenta codos por
veinte codos; de manera que las medidas del Templo de
Salomón duplicaban exactamente las del tabernáculo de
Moisés. Esto se refiere a la “doble porción” del Espíritu
Santo que será concedida a la iglesia en los últimos días.
Habrá un cumplimiento de las palabras de Jesús en Juan 14:12
“De cierto, de cierto os digo: el que en mí cree, las obras que
yo hago, él las hará también; y aun mayores hará, porque yo
voy al Padre”. También se cumplirán las palabras del profeta
Hageo: “La gloria postrera de esta casa será mayor que la
primera” (2:9). En la Iglesia de los últimos días habrá un mayor
derramamiento del Espíritu Santo y una gloria mayor que la
que experimentó la iglesia de los primeros días.
La vida de Salomón
149
La altura del Templo de Salomón triplicaba exactamente la
del Tabernáculo de Moisés, que era de diez codos. El Templo
de Salomón tenía treinta codos de altura. El número treinta
indica servicio; era la edad en que un levita podía iniciar las
labores sacerdotales. También el arca de Noé tenía una altura
de treinta codos (Gn. 6:15). El arca estaba dividida en tres
secciones distintas— inferior, segunda y tercera. La
interpretación que le damos es que en los últimos días habrá
un ministerio en el Espíritu, que influirá tanto sobre la tierra
como sobre el segundo y tercer cielo.
g. Un estímulo. La Escritura en 1 Reyes 6:11, 12 apremia
a los que están comprometidos en un proyecto de
construcción: “Y vino palabra de Jehová a Salomón, diciendo:
Con relación a esta casa que tú edificas...”. El Señor no
solamente visitó a Salomón antes de empezar la obra del
templo y después de que la hubo terminado, sino que le dio
claramente una palabra de estímulo durante el proceso de
construcción. El versículo 15 da la impresión de que Dios
efectivamente hablaba mientras las paredes se levantaban.
Dios desea dar palabras de estímulo a medida que las paredes
comienzan a construirse. “No nos cansemos de hacer el bien,
porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos”. ¿Segar
qué? Las bendiciones asociadas con la vida y Templo de
Salomón. El Señor desea cumplir en nosotros y hacer que
ardan en nuestros corazones como una visión clara y
refulgente, las bendiciones específicas del reino de Salomón,
de modo que podamos animarnos con el gozo puesto delante
de nosotros, y soportemos y corramos con paciencia la
carrera que tenemos por delante ahora mismo.
“No nos cansemos de hacer el bien, porque a su tiempo
segaremos, si no desmayamos”
150
La vida de Salomón
C. COMPOSICIÓN
1. Pureza. El Templo de Salomón se caracterizaba por su
gran extensión. El Lugar Santo medía cuarenta codos de largo
(1 R.6:17). El número cuarenta indica “purificación por medio
de pruebas de fuego”. Muchos de ustedes están pasando por
candentes pruebas que les purificarán y equiparán para entrar
en su nuevo edificio con la bendición de Dios. He aquí el
concepto de purgar para producir santidad. Eso es lo que
está ocurriendo en este momento, porque las piedras eran
preparadas lejos, para que al ser llevadas a su sitio, encajaran
a la perfección.
Muchos de ustedes están pasando por pruebas de
fuego que les purificarán y equiparán para entrar
en su nuevo edificio con la bendición de Dios.
2. Perfección. El número veinte dominaba en el Lugar
Santísimo, el cual estaba detrás del Lugar Santo, indicando
“la madurez de la perfección” (1 R.6:20). Efesios 4:12 nos
dice que el propósito del ministerio es perfeccionar a los
santos para la obra del ministerio, para la edificación del
Cuerpo de Cristo, hasta que todos lleguemos a la unidad de
la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto.
El Templo de Salomón indica perfección. El Señor viene por
una Iglesia sin mancha ni arruga. Por consiguiente, todas las
medidas del Templo de Salomón señalan la perfección. ¿Quién
es perfecto? Efesios 4:13 dice: “A la medida de la estatura
de la plenitud de Cristo”.
3. Columnas. 1 Reyes 7:21 dice: “Estas columnas erigió en
el pórtico del templo; y cuando hubo alzado la columna del
lado derecho, le puso por nombre Jaquín, y alzando la columna
La vida de Salomón
151
del lado izquierdo, llamó su nombre Boaz”. Jaquín significa
“Él sostiene”, y Boaz “en Él hay fuerza”. La idea es que la
obra está sostenida por el Dios Todopoderoso, “y debajo
están los brazos eternos” (Dt. 33:27). El edificio no se
construyó de tierra o de concreto, sino de Dios mismo.
Hay una preciosa promesa en Isaías 40:31 relacionada con el
nuevo mover de Dios que se avecina: “Los que esperan a
Jehová tendrán nuevas fuerzas”. Se trata de intercambiar
nuestra fuerza por la Suya, aunque seamos muy vigorosos. El
versículo 30 la compara con la fuerza de los jóvenes: “Los
muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y
caen”. Sin embargo, los que esperan a Jehová intercambiarán
la fuerza humana—que no podrá sostenerlos en los días
venideros, por la fuerza misma de Dios.
“Los muchachos se fatigan y se cansan, los
jóvenes flaquean y caen”, Sin embargo, los
que esperan a Jehová intercambiarán la
fuerza humana por la de Dios.
Las cabezas de las columnas tenían lirios bellamente tallados.
Esto da la idea de fuerza que se basa en pureza. Tenían
también los capiteles de las dos columnas, 200 granadas. Las
granadas indican los “frutos del Espíritu”, y 200 es “la
recompensa del siervo fiel”. A mi criterio esas columnas
significan la fidelidad de una incesante labor para el Señor. Su
belleza era indescriptible.
4. Oro puro. El Templo de Salomón costó billones de
dólares. Estaba cubierto de oro puro por dentro y por fuera.
Esto simbolizaba las hijas de Sion—los adoradores de estos
días. En el Salmo 45:13 tenemos una ilustración de estas hijas:
152
La vida de Salomón
“Toda gloriosa es la hija del rey en su morada”. El templo
tenía por dentro una capa de oro, indicando la “vida interior”.
Luego dice: “de brocado de oro es su vestido”. La vida
exterior es también enteramente gloriosa—el ministerio. Está
lleno de la presencia y naturaleza de Dios.
II. LA DEDICACIÓN DEL TEMPLO
A. LIMPIEZA
El templo fue terminado en el onceavo año del reinado de
Salomón. El número once simboliza “limpieza”. Hubo doce
tribus de Israel, pero Génesis 49:17 describe una de ellas, la
de Dan, como “una víbora junto al sendero” (el anticristo, o
el engañador). En el Nuevo Testamento, tras la eliminación
de Judas, los apóstoles eran once en número. De nuevo
percibimos aquí la idea de limpieza.
B. TÉRMINO
El templo se construyó en un periodo de siete años, lo cual
simboliza término. Israel había ahora alcanzado un lugar estable
y seguro en cuanto a la vida secular y espiritual, porque habitaba
en la heredad que Dios había señalado. David peleó todas
las guerras. Salomón fue el príncipe de paz. Él entró en
posesión de la herencia obtenida por las victorias de David.
C. CONSAGRACIÓN
Los servicios de consagración comenzaron con el traslado
del arca del pacto, de todos los utensilios sagrados del monte
de Sion, y de los que estaban en el Tabernáculo de Moisés en
La vida de Salomón
153
Gabaón, al glorioso Templo de Salomón. El holocausto
ofrecido fue tan grande, que por su multitud no se podían
contar ni numerar las ovejas y bueyes (1 R. 8:5). Aquéllos
que están comprometidos en proyectos de construcción de
iglesias, han hecho grandes sacrificios que por su gran número,
no se pueden numerar. Múltiples sacrificios han sido
necesarios.
D. EL ARCA DEL PACTO
1. Llevada al reposo. El arca del pacto fue colocada con
reverencia en el Lugar Santísimo del Templo de Salomón,
debajo de las alas de los querubines. Entonces sacaron las
varas que se usaban para transportar el arca. Antes, las varas
permanecían siempre con el arca, para poder llevarla de un
lugar a otro. Pero ahora, éstas fueron quitadas y podían verse
en el Lugar Santo. Ya Israel no andaría más de viaje, había
entrado en su reposo.
2. Un nuevo pacto. El arca contenía solamente las dos tablas
de piedra que Moisés había colocado en su interior. Sobre
ellas estaban escritos los diez mandamientos—el símbolo del
pacto que el Señor había hecho con los hijos de Israel cuando
los sacó de Egipto. También es un símbolo del nuevo pacto
que Dios haría con Su pueblo. Nosotros tenemos las mismas
dos tablas de piedra, la misma arca del pacto, solo que están
colocadas en un templo diferente. ¿Cuál es el nuevo pacto?
Son las leyes escritas en las “tablas de carne” de nuestros
corazones (He. 8:10). Este es el pacto que Dios quiere hacer
con cada uno de nosotros. Dios dice en Ezequiel 36:27: “Y
haré que andéis en mis estatutos”. En estos últimos días, existirá
un pueblo de Dios que habrá entrado en el nuevo pacto, y en
154
La vida de Salomón
los corazones de ellos estarán escritas las leyes divinas. El
Espíritu de Dios cubrirá a estas personas de tal manera, que
Dios mismo las hará caminar por Sus veredas. ¡Dios tendrá
un pueblo santo!
3. Los cantores
a. Vestidos de Justicia. 2 Crónicas 5:12 menciona que
los cantores estaban “vestidos de lino fino”, el cual simboliza
la justicia de Dios (ver Ap. 19:8). Cierta vez visitamos una
iglesia en la cual la congregación y los cantores comenzaron a
alabar al Señor con las manos en alto. El Señor abrió los ojos
de mi esposa al ámbito espiritual, y ella vio que solo unas
pocas manos estaban blancas, todas las demás estaban sucias.
Algunos de los cantores no estaban ataviados de lino fino.
No estaban vestidos de justicia.
b. Crucificados con Cristo. Había 120 cantores (vs. 12),
símbolo de “el fin de toda carne” (Gn. 6:3). Los cantores no
solo estaban vestidos de la justicia de Cristo, sino que con Él
estaban juntamente crucificados. La carne estaba en la cruz.
c. Eran como uno solo. “Cuando sonaban, pues, las trompetas,
y cantaban todos a una...” (2 Cr. 5:13). Aquí tenemos la bella
reflexión de los hermanos viviendo en unidad. El Salmo 133 habla
de esta concordia y dice: “Porque allí envía Jehová bendición, y
vida eterna”. Dios produce esa bella unidad, no solo en el espíritu,
sino que hace que nuestro hablar tenga una sola voz. En el Templo
de Salomón cantaban todos a una para que se escuchara un
sonido único al alabar y al dar gracias a Dios. Además de estar
unidos en corazón, espíritu y fe, ellos hablaban como uno solo.
¿Por qué? Porque estaban vestidos de la justicia del Señor y
crucificados para la carne.
La vida de Salomón
155
4. La gloria y el fuego
a. Llegan al templo. Cuando los que estaban en el templo
empezaron a alabar al Señor por Su bondad y misericordia,
el templo se llenó de una nube y no podían los sacerdotes
estar allí para ministrar, por causa de la gloria del Señor (2
Cr. 5:13,14). En los postreros días veremos la misma gloria.
Sin embargo, debemos fijarnos con atención en las
particularidades que condujeron a la manifestación de aquella
gloria.
En el capítulo 6 se encuentra la plegaria que hizo Salomón en
la ceremonia de dedicación del templo. Y cuando Salomón
acabó de orar, descendió fuego de los cielos, y consumió el
holocausto y las víctimas (7:1). Cuando los hijos de Israel
vieron esto, se postraron sobre sus rostros en el pavimento y
adoraron, y alabaron a Jehová, diciendo: “Porque Él es bueno,
y su misericordia es para siempre”.
En el desierto, Israel fue guiado de día por la nube de gloria,
y de noche por la columna de fuego. Estos símbolos se
manifestaron de nuevo por medio de la presencia de Dios,
cuando el Señor retornó a ellos en la dedicación del Templo
de Salomón.
b. Claramente vistos en la iglesia de los primeros días.
En el día de Pentecostés, descendió otra vez el fuego y la
gloria de Dios se manifestó. Al contemplar muchas pinturas
de los santos de la iglesia primitiva, notamos la gloria de Dios
en sus reuniones y el fuego divino sobre sus santos.
c. Acerca de los postreros días. El Templo de Salomón
es un cuadro de la Iglesia de los postreros días. Isaías 4:4,5
156
La vida de Salomón
es una promesa acerca de la Iglesia del fin, porque nos dice
que habrá manifestaciones de gloria y de fuego divinos,
semejantes a las del Templo de Salomón. “Cuando el Señor
lave las inmundicias de las hijas de Sion, y limpie la sangre de
Jerusalén de en medio de ella, con espíritu de juicio y con
espíritu de devastación”. En estos días Dios está hablando
por doquier acerca de santidad a Jehová. El versículo 3
dice: “Y acontecerá que el que quedare en Sion, y el que
fuere dejado en Jerusalén, será llamado santo”. Entonces,
debido a esa purificación y limpieza, y porque la santidad de
Dios será evidente en las personas, el versículo cinco dice: “Y
creará Jehová sobre toda la morada del monte de Sion, y
sobre los lugares de sus convocaciones, nube y oscuridad de
día, y de noche resplandor de fuego que eche llamas; porque
sobre toda gloria habrá un dosel”.
E. CONCLUSIÓN
¿Qué mensaje y visión tiene el Templo de Salomón?
1. 2 Crónicas 2:6 dice: “Será construido para ofrecer y
quemar holocaustos delante de Dios” (parafraseado). Uno
de los grandes propósitos de la Iglesia que Dios nos ha guiado
a construir, es ofrecer al Señor un continuo sacrificio de
nuestras vidas y labios. El propósito es que la iglesia sea un
lugar de adoración.
2. 2 Corintios 3:17, 18 dice: “Donde está el Espíritu del
Señor, allí hay libertad”. Por tanto, nosotros todos, mirando a
cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos
transformados de gloria en gloria en la misma imagen [la imagen
de Jesús], como por el Espíritu del Señor”. ¿De qué manera
La vida de Salomón
157
somos transformados a la semejanza de Jesús?
¡Contemplando la gloria de Dios! El Templo de Salomón
estaba lleno de su gloria. Allí se encontraba la presencia
manifiesta y el fuego de Dios. El fuego para limpiar, purificar y
hacer aceptables las ofrendas.
3. 1 Reyes 8:60 dice: “A fin de que todos los pueblos de la
tierra sepan que Jehová es Dios, y que no hay otro”.
El Templo de Salomón simboliza pureza y santidad; allí tuvo
lugar un gran derramamiento del Espíritu de Dios. Dios quiere
que seamos partícipes de las bendiciones de Salomón.
En el Templo de Salomón tuvo lugar un gran
derramamiento del Espíritu de Dios.
Es un cuadro de la Iglesia de los postreros días.
158
La vida de Salomón
La vida de Salomón
159
Capítulo 10
EL APOGEO DEL REINADO Y
DE LA GLORIA DE SALOMÓN
I. EL APOGEO DEL REINADO Y DE LA
GLORIA DE SALOMÓN
A. INTRODUCCIÓN
B. EL TEMPLO DE SALOMÓN
1. La parábola de las diez vírgenes
a. Todas eran vírgenes
b. Todas tenían lámparas
c. Todas iban en la misma dirección
d. Todas tenían entendimiento
e. Juntas lo hacían todo
2. Ríos de agua
3. Ríos de sangre
C. LA SABIDURÍA DE SALOMÓN
1. La petición de Salomón
2. La respuesta de Dios
3. Los requisitos para el discernimiento
a. Reverencia a Dios
b. Consejo confiable
160
La vida de Salomón
c. Entrega Total
d. Distinguir lo que es falso
4. El alimento espiritual correcto
5. Recibir sabiduría e instrucción
6. Vivir rectamente
a. El ámbito de la creación
b. Los resultados
D. LAS BENDICIONES DE SALOMÓN
1. La revelación de la gloria de Dios
2. Riquezas y honra
3. El papel de un padre espiritual
a. La fiesta de la Pascua
b. La fiesta de Pentecostés
c. La fiesta de los Tabernáculos
d. Avanzando para alcanzar la paternidad
e. La parábola de las diez vírgenes
E. CONCLUSIÓN
1. Los ríos de vida
2. El candelero de la sabiduría
3. Provisión amplia.
La vida de Salomón
161
A. INTRODUCCIÓN
En esta serie hemos estado asociando la vida y época de
Salomón con la vida y época de la iglesia de los últimos días.
Fue un periodo de bendición y de reposo espiritual en que se
manifestó la gloria de Dios (ver Is. 4:5, 6). Cuando Salomón
construía las paredes del templo, el Señor lo animaba. También
el Señor animará a los que estemos comprometidos hoy en
un proyecto de construcción de iglesias, para que acabemos
la obra encomendada por Él (Zac. 4:9).
B. EL TEMPLO DE SALOMÓN
Los que están preparados. En el Tabernáculo de Moisés
(símbolo de la Iglesia de los primeros días), había un candelero
con siete lámparas en su parte superior. Esto simboliza los
siete espíritus de Jehová (Is. 11:2). En el Atrio del tabernáculo,
entre su puerta y el altar de la ofrenda quemada, había una
fuente de medidas no especificadas, usada para lavarse.
Sin embargo, el Templo de Salomón tenía diez candeleros
sencillos, representando las manifestaciones del Espíritu de
Dios. Y había además diez fuentes que contenían agua para la
limpieza, cinco estaban a la derecha y cinco a la izquierda de
la casa. Cada fuente contenía cuarenta batos y su base medía
cuarenta codos. Esto es símbolo de “una limpieza universal a
través de la prueba”, que se menciona en 1 P. 1:22: “Habiendo
purificado vuestras almas por la obediencia a la verdad,
mediante el Espíritu”.
Acerca de estos diez candeleros, el Espíritu Santo desea
exponer una verdad en particular. No digo que sea la única
interpretación, mas pienso que Dios quiere que los usemos
162
La vida de Salomón
para ilustrar la parábola de las diez vírgenes. Dios quiere hacer
hincapié sobre ciertos temas de instrucción y advertencia. Toda
la enseñanza de Jesús es de suma importancia, pero la
expresión más pura de ella, se dio en los últimos días de Su
vida terrenal. Una de las parábolas que Jesús relató en esa
época, fue la de “las diez vírgenes”, a solo dos o tres días de
Su crucifixión. Por lo tanto, es de enorme importancia. La
vida del Señor Jesucristo es un modelo para la Iglesia, por
eso esta parábola se aplica particularmente a la Iglesia de los
postreros días.
1. Parábola de las diez vírgenes.
“Entonces el reino de los cielos será semejante a diez
vírgenes que tomando sus lámparas, salieron a recibir al
esposo” (Mt. 25:1).
a. Todas eran vírgenes. En la palabra de Dios, una virgen
representa a “los limpios y puros de espíritu”. En 2 Corintios
11:2, el apóstol Pablo, dirigiéndose a la iglesia de Corinto
dice: “...para presentaros como una virgen pura a Cristo”.
Una persona virgen es alguien que está limpia y purificada; es
alguien que ha experimentado el “lavamiento de agua por la
Palabra” (Ef. 5:26), y que a sí mismo se ha depurado
obedeciendo la palabra de Dios.
b. Cada una de las vírgenes tenía una lámpara. “Cinco
de ellas eran prudentes y cinco insensatas. Las insensatas,
tomando sus lámparas no tomaron consigo el aceite; mas las
prudentes tomaron aceite en sus vasijas, juntamente con sus
lámparas. Y tardándose el esposo, cabecearon todas y se
durmieron” (ver Mt. 25:2-5).
La vida de Salomón
163
c. Todas iban en la misma dirección.
d. Todas entendían los tiempos y sabían que el esposo
aparecería pronto.
e. Juntas lo hacían todo - en este momento dormían. Pero,
a la media noche se oyó un clamor: “¡Aquí viene el esposo;
salid a recibirle! Entonces todas aquellas vírgenes se
levantaron, y arreglaron sus lámparas. Y las insensatas dijeron
a las prudentes: dadnos de vuestro aceite; porque nuestras
lámparas se apagan. Mas las prudentes respondieron diciendo:
Para que no nos falte a nosotras y a vosotras, id más bien a
los que venden, y comprad para vosotras mismas. Pero
mientras ellas iban a comprar, vino el esposo; y las que estaban
preparadas entraron con él a las bodas; y se cerró la puerta”.
Y no participaron de aquello que habían estado esperando
(Mt. 25:6-10).
El apóstol Pablo dice que las cinco vírgenes prudentes estaban
constantemente “llenándose del Espíritu de Dios”, (paráfrasis
de Ef. 5:18). Eran semejantes a la sabia mujer de Proverbios
31:18 cuya “lámpara no se apaga de noche”, porque tiene
suficiente provisión de aceite. Siendo así, no basta con ser
purificados ni con ser entendidos en los tiempos actuales, ni
con proseguir a la meta, sino que es sumamente indispensable
que nos llenemos más y más del Espíritu Santo, y que
nuestras lámparas estén ardiendo.
2. Los ríos de agua
En el octavo mes del onceavo año se terminó la obra del
templo (1 R. 6:38). El número once denota “limpieza de lo
que es impuro” y el número ocho indica “vida nueva”. Por
164
La vida de Salomón
eso, tenemos aquí un edificio limpio y preparado para avanzar
a una experiencia nueva. La ceremonia inaugural no se llevó a
cabo ese mismo año, sino en el séptimo mes del doceavo año
(1 R. 8:2). El número doce denota gobierno y autoridad. La
Iglesia de los postreros días desempeñará un papel
importante con Dios y con el hombre.
Luego, 1 Reyes 8:2 dice: “Y se reunieron con el rey Salomón
todos los varones de Israel en el mes de Etanim, que es el
mes séptimo, en el día de la fiesta solemne”. Etanim significa
“arroyos que fluyen”, y en este mes estaba incluida la fiesta
de los Tabernáculos. Podemos también relacionar esto con
lo dicho por Jesús durante la fiesta de los Tabernáculos en
Juan 7:37, 38: “En el último y gran día de la fiesta, Jesús se
puso en pie y alzó la voz, diciendo: Si alguno tiene sed, venga
a mí y beba. El que cree en mí, como dice la Escritura, de su
interior correrán ríos de agua viva”, (ver Jn. 7:2). Entonces,
por medio de esa promesa, entendemos que la consagración
de este templo en la fiesta de los Tabernáculos, era también
exponente de un gran derramamiento del Espíritu y de
una liberación del Espíritu desde lo más íntimo del
creyente.
3. Los ríos de sangre
Hubo asimismo en el templo una multitud de holocaustos. No
solo estuvo presente la sensación de “agua fluyente” (el
Espíritu), sino que corrió la sangre. Literalmente corrieron
ríos de sangre debido a los numerosos holocaustos. Esto
indica que en los postreros días, en muchos países fluirán ríos
de sangre de los mártires de la Iglesia final. A algunos se les
llamará para ofrecer el supremo holocausto—poner la vida
por la causa y el amor de Cristo.
La vida de Salomón
165
C. LA SABIDURÍA DE SALOMÓN
1. La petición de Salomón.
Habiendo ascendido al trono a los diecinueve años de edad,
Salomón empezó las obras de edificación del templo en el
cuarto año de su reinado. Esto le tomó siete años y medio, y
luego dedicó trece años a edificar su propia casa y todos los
demás edificios y lugares de almacenamiento. Al final de esta
época, “Jehová se le apareció la segunda vez” (1 R. 9:2).
Sin embargo, para entender el apogeo del poder y gloria de
Salomón, debemos retroceder a la primera vez que Dios se
le apareció, después de la ofrenda quemada de 1.000 víctimas
en Gabaón (1 R. 3). En el versículo 5, Jehová le dijo a
Salomón: “Pide lo que quieras que yo te dé”. Salomón
respondió: “Tú hiciste gran misericordia a tu siervo David mi
padre, porque él anduvo delante de ti en verdad, en justicia, y
con rectitud de corazón para contigo; y tú le has reservado
esta tu gran misericordia, en que le diste hijo que se sentase
en su trono... Y yo soy joven, y no sé como entrar ni salir...Y
tu pueblo al cual tú escogiste; un pueblo grande…no se puede
numerar ni contar por su multitud” (vs. 6-8). Después, en el
versículo 9 dice: “Da, pues, a tu siervo corazón entendido
para juzgar a tu pueblo, y para discernir entre lo bueno y lo
malo”. El clamor del corazón de Salomón era éste: “Dadme
un corazón oidor, que oiga Tus palabras en toda ocasión en
que tenga que distinguir entre el bien y el mal, de modo que
sepa lo que es bueno y lo que es malo”.
Dame un corazón oidor. . .He aquí lo he hecho
conforme a tus palabras.
166
La vida de Salomón
2. La respuesta de Dios.
El Señor respondió en 1 Reyes 3:12,14: “He aquí lo he hecho
conforme a tus palabras; he aquí que te he dado corazón
sabio y entendido, tanto que no ha habido antes de ti otro
como tú, ni después de ti se levantará otro como tú. Y aun
también te he dado las cosas que no pediste, riquezas y gloria...
Y si anduvieres en mis caminos, guardando mis estatutos y
mis mandamientos...yo alargaré tus días”. Salomón recibió lo
que pidió—un corazón sabio y entendido.
Esto pronto salió a la luz. En este mismo capítulo leemos sobre
las dos rameras que comparecieron ante Salomón. Las dos
tenían un hijo, y uno de ellos falleció. Una ramera acusaba a
la otra de haberle quitado a su hijo vivo, y de haber puesto en
su lugar al occiso. Por eso fueron llevadas a la presencia de
Salomón, para que él determinara a quién pertenecía el niño
vivo. Fue cuando Salomón ordenó que el niño fuese partido
en dos, que la verdadera madre se descubrió. Ella estuvo
dispuesta a sacrificar su derecho de maternidad, con tal de
que el bebé viviera. Por lo tanto Salomón, viendo que ella era
la madre genuina, le adjudicó el bebé.
Luego leemos en 1 Reyes 3:28: “Y todo Israel oyó aquel
juicio que había dado el rey; y temieron al rey, porque vieron
que había en él sabiduría de Dios para juzgar”.
3. Requisitos para el discernimiento.
Quizá la cualidad que más se necesita hoy, es ser capaces de
determinar lo que es correcto y saber qué dirección tomar.
Estamos viviendo en los postreros días, días que, en símbolo,
son gobernados por el Templo de Salomón y sus bendiciones.
La vida de Salomón
167
Una bendición clave que poseía Salomón, era su habilidad
para discernir entre el bien y el mal. ¿Cuáles son los requisitos
del discernimiento?
a. Reverenciar a Dios. Malaquías 3:16 dice: “Entonces
los que temían a Jehová.” El temor de Jehová es un requisito
clave para tener discernimiento (ver Is. 11:3).
b. Consejo fiable. “Hablaron cada uno [frecuentemente] a
su compañero” (Mal. 3:16). Nosotros hemos notado que a
menudo conversando se establece el criterio del Señor.
Proverbios 11:14 dice: “...en la multitud de consejeros hay
seguridad”. Al conversar con las personas apropiadas, se
obtiene la mente del Señor y se recibe discernimiento.
c. Compromiso firme. (Mal. 3:18) “Entonces os volveréis”.
Es muy importante que nos volvamos al Señor de todo
corazón. Hoy en día hay mucho deambular. Hay gente que le
pertenece al Señor, deambulando muchas veces fuera de
Sus sendas. Dios quiere que estemos totalmente
comprometidos con Él. Entonces, la promesa de Dios es: “Y
discerniréis la diferencia entre el justo y el malo, entre el que
sirve a Dios y el que no le sirve”.
d. Reconociendo lo falso. Quizá ahora usted diga que
discernir entre el justo y el malo debe ser fácil. Sin embargo,
en Mateo 13 está la parábola del trigo y la cizaña. Esta es una
de las siete parábolas del Señor que ayuda a entender la era
de la Iglesia y las fiestas de Jehová. “Les refirió otra parábola
diciendo: El reino de los cielos es semejante a un hombre que
sembró buena semilla en su campo; pero mientras dormían
los hombres, vino su enemigo y sembró cizaña entre el trigo,
y se fue” (Mt. 13:24, 25). Tal incidente no es extraño en ciertos
168
La vida de Salomón
países. Un buen hombre prepara con el arado su campo y
siembra buena semilla. Su enemigo, que quiere perjudicarlo,
ataca su más preciada pertenencia, el campo. En el debido
momento, cuando se siembra el trigo, viene él y siembra la
mala hierba, conocida mejor como cizaña, usada en el Medio
Oriente. Es una planta que no se distingue del trigo. solo
cuando está madura, se puede determinar si es trigo o cizaña.
Versículos 26-30: “Y cuando salió la hierba y dio fruto,
entonces apareció también la cizaña. Vinieron entonces los
siervos del padre de familia y le dijeron: Señor, ¿no sembraste
buena semilla en tu campo? ¿De dónde, pues, tiene cizaña?
Él les dijo: Un enemigo ha hecho esto. Y los siervos le dijeron:
Quieres, pues, que vayamos y la arranquemos? Él les dijo:
No, no sea que al arrancar la cizaña, arranquéis también con
ella el trigo. Dejad crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la
siega; y al tiempo de la siega yo diré a los segadores: Recoged
primero la cizaña, y atadla en manojos para quemarla; pero
recoged el trigo en mi granero” (vs. 26-30).
En Mateo 13 Jesús les relató cuatro parábolas a las
multitudes, y luego, despedida la gente, entró en la casa
con los discípulos (vs. 36). Entonces, acercándose, le
dijeron: “Explícanos la parábola de la cizaña del campo”.
No pidieron explicación de las otras parábolas; era ésta la
que les interesaba. Y sucedió que a los discípulos, a los
que estaban totalmente comprometidos con el Señor, les
fue dada la interpretación.
“El que siembra la buena semilla es el Hijo del hombre” [El
Señor Jesucristo (vs. 37)]. “El campo es el mundo; la buena
semilla son los hijos del reino, y la cizaña son los hijos del
La vida de Salomón
169
malo. El enemigo que la sembró es el diablo; la siega es el fin
del mundo; y los segadores son los ángeles” (vs. 38, 39).
Para entender esta interpretación en su totalidad, vea de nuevo
el versículo 25: “Pero mientras dormían los hombres, vino su
enemigo y sembró cizaña entre el trigo”. Cuando Dios hace
algo en un lugar determinado del mundo, el diablo lo ve y
siembra lo falso en el mismo lugar de lo verdadero. Cada
vez que Dios opera en poder, gloria y sanidad, lo falso se
manifiesta en forma idéntica. Aparentemente habrá poder
y sanidad porque el diablo también puede sanar. Satanás está
tratando de ‘trastornar’ el campo de Dios, y nada podemos
hacer nosotros al respecto pues si extraemos la cizaña
podríamos arrancar el trigo. A los neófitos, les es imposible
determinar entre lo bueno y lo malo.
Con relación a los últimos días Mateo 24:24 dice: “Porque se
levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes
señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere
posible, aun a los escogidos”. Lo falsificado será tan parecido
a lo verdadero, que solo un discípulo podrá reconocer la
diferencia. Esta parábola no fue explicada a las multitudes
porque ellos no eran capaces de ver la diferencia. Necesitamos
clamar a Dios para que nos dé discernimiento.
Porque aparecerán falsos Cristos y falsos
profetas...Mis ovejas reconocen mi voz y a ningún
otro seguirán...
Satanás puede transformarse (disfrazarse) en ángel de luz (2
Co. 11:14). Cuando venga el anticristo no tendrá “cuernos”
ni “tridente”; porque hasta un niño lo reconocería de ese modo.
Por el contrario, vendrá como lo verdadero. El impostor
anhela aceptación. Si usted tuviera un billete de diez dólares,
170
La vida de Salomón
no le sería necesario persuadir a nadie de que es genuino,
pero un falsificador sí intentaría convencernos de que el billete
falso es auténtico. ¿Qué desea el falsificador? Ser aceptado
por bancos, comerciantes, y gente común y buena. Eso es
exactamente lo que Satanás quiere en estos últimos días.
Quiere ser aceptado por el pueblo de Dios, y por eso se
presentará como lo genuino. Tenemos que clamar: “Oh Dios,
dadnos discernimiento”.
4. Comida espiritual correcta.
“Porque debiendo ser ya maestros, después de tanto tiempo,
tenéis necesidad de que se os vuelva a enseñar cuáles son los
primeros rudimentos de la palabra de Dios; y habéis llegado
a ser tales que tenéis necesidad de leche, y no de alimento
sólido. Y todo aquel que participa de la leche es inexperto en
la palabra de justicia, porque es niño” (He. 5:12, 13). ¿Quién
conoce la voz de Jesús? Jesús dijo: “Mis ovejas oyen mi voz
y a otro no seguirán” [(Jn. 10), parafraseado]. Él no dijo “mis
corderos” sino “mis ovejas”. Hebreos 5:14 dice: “Pero el
alimento sólido es para los que han alcanzado madurez, para
los que por el uso tienen los sentidos ejercitados en el
discernimiento del bien y del mal”. Esto depende mayormente
de la clase de alimento espiritual que ingiramos. La comida
que el Señor Jesús ingería se describe en Isaías 7:15: “Comerá
mantequilla y miel hasta que sepa desechar lo malo y escoger
lo bueno”. La mantequilla simboliza la abundancia de la palabra
de Dios, y aquí, la miel simboliza la vida del Espíritu. A medida
que alimentemos aun a los bebés con “mantequilla” y “miel”,
sabrán escoger lo bueno y desechar lo malo.
La vida de Salomón
171
5. Recibiendo sabiduría e instrucción.
En Proverbios 1:2, 3 está el propósito del libro de Proverbios:
juicio y equidad”. Proverbios es uno de los libros clave para
aprender sabiduría.
La sabiduría no solo se adquiere a través del estudio, es
también un don. Proverbios 1:23 da esta promesa: “Volveos
a mi reprensión; he aquí yo derramaré mi Espíritu sobre
vosotros, y os haré saber mis palabras”. Hay un espíritu de
sabiduría, y nosotros debemos clamar a Dios que la sabiduría
nos haga conocer Sus caminos. Santiago 1:5 dice: “Y si alguno
de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da
a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada”.
Proverbios 2:1-4 dice: “Hijo mío, si recibieres mis palabras,
y mis mandamientos guardares dentro de ti, haciendo estar
atento tu oído a la sabiduría; y si inclinares tu corazón a la
prudencia; si clamares a la inteligencia... Si como a plata la
buscares, y la escudriñares como a tesoros”. Recibe
sabiduría el que tiene un corazón indagador.
En el versículo 11 se da una promesa: “La discreción [el
discernimiento] te guardará”. La necesidad de sabiduría es
tan importante ya que si tomamos la senda equivocada, las
consecuencias serán pavorosas. ¿Cómo distinguir el camino
correcto? Mi esposa recibió una visión en la que vio a un
pastor, conocido nuestro, viendo dos sendas. Ambas parecían
iguales y su blancura resplandecía. Ella le preguntó al Señor
cuál era el camino correcto. Él la orientó hacia el de la derecha,
y su fulgor se volvió como el de la luz fluorescente, y titilaba.
Finalmente, se oscureció y condujo a un bosque. El otro
camino era muy puro y ascendente. Mi esposa dijo: ¿Cómo
172
La vida de Salomón
sabrá él cuál es el correcto? El Señor contestó: “Si me lo
pregunta, se lo mostraré”. Una de las claves es preguntarle
al Señor cada vez que tenemos que tomar una decisión. Lo
que mata al simple es su renuencia a preguntar y a escuchar
(Pr. 1:32 LBLA).
6. Vida recta.
Proverbios 9:10 dice: “...El conocimiento del Santísimo es la
inteligencia”. El Salmo 36:9 dice: “En tu luz veremos la luz”.
Cuando por la gracia de Dios andamos en la luz que hemos
recibido, y obedientes a lo que Dios nos ha mostrado, en esa
luz recibiremos todavía más luz.
a. El ámbito de la creación. La sabiduría de Salomón se
manifestó en otras áreas y esferas del discernimiento. 1 Reyes
4:33 dice: “También disertó sobre los árboles, los animales,
las aves, los reptiles y los peces”. ¿Por qué? Romanos 1:19,
20 dice: “Porque lo que de Dios se conoce les es manifiesto,
pues Dios se lo manifestó. Porque las cosas invisibles de Él,
Su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde
la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las
cosas hechas, de modo que no tienen excusa”. Toda cosa
creada contiene una verdad divina que revela al Creador y
Sus caminos.
b. Los resultados. 1 Reyes 4:34 dice: “Y para oír la sabiduría
de Salomón venían de todos los pueblos y de todos los reyes
de la tierra, adonde había llegado la fama de su sabiduría”.
Entre los visitantes más notables estuvo la reina de Sabá. 1
Reyes 10:1-3 dice: “...vino a probarle con preguntas
difíciles...ella le expuso todo lo que en su corazón
tenía...Salomón le contestó todas sus preguntas, y nada hubo
La vida de Salomón
173
que el rey no le contestase”. Isaías 33:6 promete que: “Y
reinarán en tus tiempos la sabiduría y la ciencia, y abundancia
de salvación”.
Los reyes y los gobernantes valoran la sabiduría. El rey
Nabucodonosor acudió a los sabios de su reino para que le
revelaran sus sueños (Dn. 2:2). También Faraón buscó quien
le interpretara un sueño (Gn. 41:8). Tanto el uno como el otro
eran mandatarios que tenían por costumbre consultar a
agoreros, a magos y a los sabios de este mundo. Sin embargo,
no pudieron obtener respuestas, porque estos sueños
provenían de Dios. A Daniel y a José, ambos célebres por su
sabiduría, les dio Dios las respuestas. En el presente, algunos
gobiernos buscan la orientación de pitonisas, de brujos y de
foros de pensamiento integrados por los eruditos de este
mundo. Pero el día viene en que todos estos recursos fallarán,
y los líderes se volverán a la Iglesia.
La reina de Sabá se maravilló ante la sabiduría de Salomón y
dijo: “Mis ojos han visto que ni aun se me dijo la mitad; es
mayor tu sabiduría y bien, que la fama que yo había oído” (1
R.10:7). Ella dio al rey Salomón un obsequio de 120 talentos
de oro (vs. 10), que indica “el fin de toda carne”. La sabiduría
de Salomón no era la terrenal, animal y diabólica mencionada
en Santiago 3:15, sino la sabiduría pura de Dios venida del
cielo (ver Santiago 3:17). En estos últimos días, Dios dará
esta sabiduría a la Iglesia.
174
La vida de Salomón
D. BENDICIONES DE SALOMÓN
1. La revelación de la gloria de Dios.
Uno de los aspectos del Templo de Salomón fue la gloria de
Dios evidente el día de su dedicación. Una manifestación de
la gloria llega por medio de la sabiduría. A medida que
busquemos la sabiduría, se nos dará una corona o cobertura
de gloria (Pr. 4:9).
2. Las riquezas y honra.
El reino de Salomón se destacó por el cumplimiento de las
promesas que Dios le había hecho. No solo le había
prometido sabiduría y entendimiento sino también riquezas y
honra. A mi parecer, en los últimos días los que participen de
estas bendiciones de Salomón, habrá abundante riqueza para
llevar a cabo toda la voluntad de Dios y para respaldar toda
Su palabra.
El reino de Salomón se destacó por el cumplimiento de
las promesas del Señor.
3. El papel de un padre espiritual.
1 Reyes 9:25 dice: “Y ofrecía Salomón tres veces cada año
holocaustos y sacrificios de paz sobre el altar que él edificó a
Jehová, y quemaba incienso sobre el que estaba delante de
Jehová, después que la casa fue terminada”. Esto cumplía las
palabras de Deuteronomio 16:16, donde Dios dijo que tres
veces al año aparecería todo varón delante de Jehová, mas
no con las manos vacías. Tenían que presentarse en:
a. LA FIESTA DE LA PASCUA—que simboliza la
La vida de Salomón
175
salvación. En sentido espiritual, nosotros tenemos que
presentarnos delante del Señor con las almas que hemos
vuelto al Señor para salvación.
b. LA FIESTA DE PENTECOSTÉS—que simboliza el
bautismo del Espíritu Santo. También debemos comparecer
ante el Señor con las almas que hemos conducido al bautismo
del Espíritu Santo.
c. LA FIESTA DE LOS TABERNÁCULOS—que simboliza
perfección cristiana o rectitud, y las almas que hemos vuelto a
las sendas de la madurez.
1 Juan 2:12-14 muestra otra manera de medir el crecimiento
espiritual, en grupos de tres:
•
“Hijitos”—aquéllos cuyos pecados están perdonados
•
“Jóvenes”—los que han vencido al maligno.
•
“Padres”—los que conocen a Dios (Fil. 3:10).
Los padres son los que conocen a Dios, y otro aspecto del
reinado de Salomón es la paternidad. 1 Reyes 4:29 dice: “Y
Dios dio a Salomón sabiduría y prudencia muy grandes, y
anchura de corazón como la arena que está a la orilla del
mar”. Esa anchura significa también generosidad, que es
propia de la paternidad.
Mateo 13:52 describe el corazón de un padre en sentido
espiritual: “...Por eso, todo escriba [la interpretación del idioma
original podría asociarse con amo, indicando padre] docto
en el reino de los cielos es semejante a un padre de familia,
que saca de su tesoro cosas nuevas y cosas viejas”. Un padre
176
La vida de Salomón
espiritual es como una “tesorería” de sabiduría y conocimiento.
También hay otro aspecto de la paternidad que puede verse
en la vida de Abraham. La tierra prometida estaba delante de
Abraham y de Lot, pero no había suficiente espacio para
todos sus rebaños, y hubo contienda entre los pastores de
ambos. Abraham adoptó una actitud muy generosa hacia Lot.
Le permitió ser el primero en escoger su parte de la tierra.
No había codicia en Abraham. Él estaba mucho más
interesado en el bienestar del joven que en sí mismo. Esa
es una característica de un padre espiritual.
En Génesis 22:17 el Señor dio a Abraham una promesa:
“Multiplicaré tu simiente como las estrellas del cielo”.
Entendemos que se refiere a una simiente espiritual. Pero
después, Dios añadió: “y como la arena que está a la orilla del
mar”. De manera que tenemos aquí el concepto de anchura
de corazón, como la misma arena de la playa. Espiritualmente,
todo verdadero hijo o hija de Abraham es como un grano de
arena. Un padre en Cristo tiene un corazón lo suficientemente
grande como para contener cada grano. En el corazón, tiene
un sitio especial para cada persona que Dios le ha confiado.
d. Avanzando hacia la paternidad Habrá multitudes en el
valle de la decisión. Dios ansía crear en cada uno de nosotros,
ese corazón de padre o de madre, para que a medida que
nazcan bebés cristianos en el reino de los cielos y se incorporen
a la Iglesia, sean como granos de arena que tienen un lugar en
nuestros corazones.
Con amorosa ternura podemos cuidarlos, nutrirlos y
fortalecerlos. Podemos sacar palabras que los alienten, del
La vida de Salomón
177
abundante almacén de tesoros de la sabiduría y del
conocimiento de los caminos de Dios.
e. La Parábola de las Diez Vírgenes. Ellas eran puras, tenían
la meta correcta y entendían los tiempos. Ellas estaban bien
acompañadas. Sin embargo, cinco de ellas no tenían suficiente
aceite. Es indispensable que nuestras “lámparas” estén llenas de
aceite—que la unción esté sobre nuestras vidas.
Todas las vírgenes eran puras. Eran creyentes que
se habían lavado en la sangre. Todas estaban
conscientes de la venida del Señor, de lo cual no se
percatan los incrédulos. Esta parábola no es acerca
de salvos o perdidos, sino de quiénes serán dignos
de estar presentes en las bodas y de reinar con
Cristo.
E. CONCLUSIÓN
Las bendiciones de Salomón son para nosotros si no
desmayamos. Es importante tener una visión progresiva para
ver más allá de donde nos encontramos, ver lo que Dios le ha
deparado a su iglesia y a toda persona que prosiga hasta
alcanzar las bendiciones de Salomón.
1. El Templo de Salomón estuvo gobernado por la fiesta de
los Tabernáculos en el mes de Etanim (“arroyos que fluyen”).
Dios quiere liberar ríos de vida desde lo más profundo de
nuestro ser. La vida debe manar constantemente de nosotros,
de modo que cuando hablemos, las palabras que
pronunciemos ministren vida. Que al conversar, por estar
ungidos por Dios, hasta los comentarios más insignificantes
puedan ser dadores y transformadores de vida.
178
La vida de Salomón
2. La brillante luz del candelero de la sabiduría en medio de
nosotros, simboliza discernimiento, y es una de las bendiciones
que Dios nos da. Esta luz brillante es discernimiento,
conocimiento, entendimiento y la solución de preguntas y
decisiones difíciles.
3. Habrá provisión. Salomón no careció de nada. Hubo
un abundante abastecimiento de bienes para llevar a cabo
todas las obras. Cuando Dios nos pide realizar algo que
requiere esfuerzo físico y dinero, Él puede proveer, dentro de
esas bendiciones de Salomón, la riqueza para que haya un
vasto suministro.
La tragedia es que una gran cantidad de creyentes
no camina cerca del Señor, ni mantiene una vida
ungida. En la venida de Cristo, muchos creyentes
no tendrán suficiente aceite para estar en las bodas.
Clame a Dios para que éste no sea su caso.
La vida de Salomón
179
Capítulo 11
LOS ÚLTIMOS Y DECADENTES
AÑOS DE SALOMÓN
I. LOS ÚLTIMOS Y DECADENTES
AÑOS DE SALOMÓN
A. INTRODUCCIÓN
B. LAS BENDICIONES CONDICIONADAS
DE SALOMÓN
1. Longevidad
2. Derechos eternos al trono
C. LA CORRUPCIÓN DE SALOMÓN
1. Estadísticas de su reino
a.Símbolo de Cristo
b. Símbolo de Lucifer
2. Satisfizo sus propios deseos
3. Obstinado
4. Egocéntrico
5. Voluntarioso
a.Con relación a los caballos
b. Con relación a las esposas
c.Con relación al dinero
180
La vida de Salomón
D. CONCLUSIONES DE SALOMÓN
1. Las bendiciones
2. Las advertencias
E. CONCLUSIÓN
La vida de Salomón
181
A. INTRODUCCIÓN
Este periodo de la vida de Salomón comienza en el vigésimo
año de su proyecto de construcción, en el vigésimo cuarto
año de su reinado. Salomón tenía aproximadamente cuarenta
y tres años de edad y se encontraba en el pináculo de su
gloria. El reino estaba establecido en sus manos, su fama era
internacional y por su sabiduría y por la gloria de su reino,
multitudes acudían en masa a Jerusalén.
Como ya mencionamos, la reina de Sabá fue una de las
personas que vinieron a escuchar su sabiduría y a ver su gloria.
En 2 Crónicas 9, algunas de sus observaciones están
registradas. Versículos 3 y 4: “Y viendo la reina de Sabá la
sabiduría de Salomón, y la casa que había edificado, y las
viandas de su mesa, las habitaciones de sus oficiales, el estado
de sus criados y los vestidos de ellos, sus maestresalas y sus
vestidos, y la escalinata por donde subía a la casa de Jehová,
se quedó asombrada”. Versículos 5-6: “Y dijo al rey: Verdad
es lo que había oído en mi tierra acerca de tus cosas y de tu
sabiduría; pero yo no creía las palabras de ellos, hasta que he
venido, y mis ojos han visto; y he aquí que ni aún la mitad de
la grandeza de tu sabiduría me había sido dicha; porque tu
superas la fama que yo había oído”. Yo pienso que esas
mismas palabras estarán en los labios de cada santo que vea
las glorias del cielo y del Señor Jesucristo. Esta será también
la exclamación de muchos de nosotros cuando veamos la
gloria de Dios sobre Su Iglesia en estos últimos días
Entonces la reina de Sabá dijo: “Bienaventurados tus hombres,
y dichosos estos siervos tuyos que están siempre delante de
ti, y oyen tu sabiduría” (vs. 7).
182
La vida de Salomón
B. LAS BENDICIONES CONDICIONADAS DE
SALOMÓN
¿Qué hicieron Salomón e Israel con todas las bendiciones
que Dios les deparó? Para responder esta pregunta
necesitamos contemplar las promesas que el Señor le hizo al
rey Salomón en dos diferentes ocasiones. Por lo general, las
promesas de Dios son condicionadas.
1. Longevidad.
En 1 Reyes 3 aparece Dios por primera vez a Salomón y le
otorga sabiduría, entendimiento, riquezas y honra. Luego le
dijo: “Y si anduvieres en mis caminos, guardando mis estatutos
y mis mandamientos, como anduvo David tu padre, yo
alargaré tus días” (vs. 14). Pero Salomón no guardó los
mandamientos de Dios, por eso Dios redujo de setenta a
sesenta los años de vida de Salomón.
2. Derechos eternos al trono.
Cuando Salomón hubo terminado todas sus edificaciones, el
Señor se le apareció por segunda vez. En 1 Reyes 9:4 el
Señor dijo: “Y si tú anduvieres delante de mí como anduvo
David tu padre, en integridad de corazón y en equidad,
haciendo todas las cosas que yo te he mandado, y guardando
mis estatutos y mis decretos…”. Luego, en el versículo 5,
Dios da una promesa que tiene esas mismas condiciones: —
“Yo afirmaré el trono de tu reino sobre Israel para siempre,
como hablé a David tu padre”.
Esta promesa nos atañe también a nosotros en lo que tiene
que ver con el milenio y con toda la eternidad. Eso es lo que
Dios le deparaba a Salomón. El reino de Salomón comenzó
La vida de Salomón
183
con la ofrenda de mil holocaustos (1 R. 3:4). El número 1000
simboliza o domina su reinado (ver Cantar de los Cantares
8:12). También simboliza el reino milenial de Cristo en la tierra.
Por lo tanto, el reinado y las bendiciones de Salomón fueron
símbolo de las bendiciones que llevarán a la Iglesia al milenio.
La misma idea se expresa en el Salmo 72:17, donde se habla
de un nombre y un reino perpetuos.
Dios tiene muchas promesas preciosas para nosotros en lo
que se refiere a la eternidad. El Salmo 110:4 dice: “Tú eres
sacerdote para siempre, según el orden de Melquisedec”.
En Apocalipsis 20:4 está la promesa explícita de que los que
califiquen y sean benditos y santos, gobernarán y reinarán
con Jesucristo durante mil años.
Esas promesas no se cumplieron en Salomón por su
desobediencia. Cuando su hijo Roboam ascendió al trono,
reinó solamente sobre una porción de Israel, tres tribus—
Judá, Benjamín y Leví.
C. LA CORRUPCIÓN DE SALOMÓN
¿Cuáles fueron los pecados que privaron a Salomón de las
promesas? ¿Cuál fue el estilo de vida que hizo que alguien tan
bendecido fuese destituido del plan y designio de Dios para
su vida? Nadie fue tan sabio como Salomón, sin embargo,
esta misma sabiduría se convirtió en la base de su corrupción.
1. Estadísticas de su reinado:
a. Símbolo de Cristo. Salomón debió haber sido el símbolo
perfecto del reinado de Cristo en el milenio; época en que la
creación será restaurada a su estado original, y en que se
184
La vida de Salomón
honrará la ley. La Palabra del Señor fluirá desde Jerusalén, y
todas las naciones vendrán a adorar al Señor en ese lugar,
como lo hacían en los tiempos de Salomón.
Otro número que gobernó el reinado de Salomón fue el 120,
que simboliza el fin de toda carne (Gn. 6:3). Ese número es
usado en 2 Crónicas 5:12 en donde la ofrenda de los cantores
se hacía en justicia; y en 2 Crónicas 9:9, representa sabiduría
divina pues la ofrenda era de oro.
Esta es otra característica del milenio. Hebreos 8:11 dice con
relación a los últimos días: “Y ninguno enseñará a su prójimo,
ni ninguno a su hermano, diciendo: “Conoce al Señor; porque
todos me conocerán, desde el menor hasta el mayor de ellos”.
Pero en 1 Reyes 10:14 se encuentra otro número de las
estadísticas del reinado de Salomón, que indica el peso del
oro que Salomón recibía como renta anual, que era de 666
talentos de oro (ver también 2 Cr. 9:13). La interpretación de
este impresionante número nos la da Apocalipsis 13:18: “Aquí
hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número
de la bestia, pues es número de hombre. Y su numero es
666”. Esto es indicativo de la marca y nombre de la bestia, o
del número de su nombre. Es el número de Satanás; el número
del Hombre de Pecado—el anticristo.
Salomón usó su sabiduría para exaltarse adquiriendo riquezas
mediante el comercio, como lo hiciera Lucifer a través del rey
de Tiro, y como también lo hará a través del anticristo venidero.
b. Símbolo de Lucifer. Salomón, siendo el símbolo de
Cristo, también se convierte en el símbolo de Lucifer, el
querubín protector que cayó y se convirtió en Satanás, el cual
La vida de Salomón
185
hará morada en el anticristo venidero. ¿Cuál fue la razón de la
caída de Lucifer y de Salomón? Ezequiel 28 habla del rey de
Tiro, el cual es un símbolo de Lucifer. El versículo 12 dice:
“Tú eras el sello de la perfección, lleno de sabiduría, y acabado
de hermosura”. Esa era una descripción de Lucifer. Versículos
13-15: “...de toda piedra preciosa era tu vestidura; de
cornerina, topacio, jaspe, crisólito, berilio y ónice; de zafiro,
carbunclo, esmeralda y oro; los primores de tus tamboriles y
flautas estuvieron preparados para ti en el día de tu creación.
Tú, querubín grande, protector, yo te puse en el santo monte
de Dios, allí estuviste; en medio de las piedras de fuego te
paseabas. Perfecto eras en todos tus caminos desde el día
que fuiste creado, hasta que se halló en ti maldad”. Luego, el
versículo 16 demuestra por qué cayó Lucifer, y también la
causa de la caída de Salomón. Esta es una aterradora
advertencia para cada uno de nosotros: “A causa de la
multitud de tus contrataciones”.
2. Satisfizo sus propios deseos.
1 Reyes 10:22 dice con relación al gobierno de Salomón:
“Porque el rey tenía en el mar una flota de naves de Tarsis”.
El propósito de esa flota era transportar hacia Jerusalén: oro,
plata, marfil, monos y pavos reales. Tenía el objetivo de
enriquecer el reino. Salomón usó su sabiduría para comerciar,
y el rey y todo Israel se enriquecían. Este es un peligro y nos
lo demuestra la propia geografía de Israel. Hay dos mares en
Israel. Primero, el mar de Galilea, en el cual desemboca y
vuelve a salir el río Jordán. Este mar rebosa de vida y de
bendición y está lleno de peces. En segundo lugar está el mar
Muerto, en el cual también desemboca el río Jordán pero sin
volver a salir. Por lo tanto, no hay vida en el mar Muerto. El
186
La vida de Salomón
rey Salomón estaba usando su sabiduría en el área de las
mercaderías y del comercio. Todo estaba “desembocando”
en Jerusalén e Israel, pero no “salía”. ¡Observe el
cargamento! Oro, plata, marfil, monos—que simbolizan
sensualidad, y pavos reales—que simbolizan orgullo.
3. Obstinado.
Isaías 14:12 denomina a Lucifer “hijo de la mañana”. En los
versículos 13 y 14 se ve lo que entró en su corazón: “Subiré al
cielo; en lo alto, junto a las estrellas de Dios, levantaré mi trono,
y en el monte del testimonio me sentaré, a los lados del norte;
sobre las alturas de las nubes subiré, y seré semejante alAltísimo”.
Estas eran las cinco intenciones de Lucifer.
4. Egocéntrico.
Ezequiel 28:17 dice: “Se enalteció tu corazón a causa de tu
hermosura”. Lucifer se contempló. Quedó abrumado por la
belleza que Dios le había dado. “Corrompiste tu sabiduría a
causa de tu esplendor”. Eso es exactamente lo que hizo el rey
Salomón; se embelleció a sí mismo. Usó su sabiduría para
aumentar la riqueza y el esplendor de su reino. Sobrepasó
los límites que Dios había determinado. Salomón fue exaltado
por Dios para edificarle un santuario, pero él continuó
construyendo para sí mismo. Corrompió su sabiduría con
la riqueza que acumuló.
5. Voluntarioso.
Salomón desobedeció abiertamente las leyes para los reyes.
En Deuteronomio 17:16, Dios dio a través del legislador
Moisés, las leyes pertinentes a los reyes.
La vida de Salomón
187
a. Con relación a los caballos. “Él no aumentará para sí
caballos...”. Salomón había juntado carros y gente de a
caballo. Había traído caballos de Egipto (1 R.10:26, 28), los
cuales llenaban el reino de Israel. Dios no prohibía a los reyes
tener caballos, sino multiplicarlos. No hay error alguno en
suplir nuestras necesidades básicas, pero la multiplicación
de esos bienes produce idolatría. David, su padre, no confió
ni en carros ni en caballos (Sal. 20:7).
b. Con relación a las esposas (Dt.17:17). “Ni tomará para
sí muchas mujeres para que su corazón no se desvíe”.
Proverbios 18:22 dice: “El que halla esposa halla el bien”.
Dios dijo, en Génesis 2:18: “No es bueno que el hombre esté
solo”. Es bueno tener una esposa. Pero Dios dice: “¡No
multipliques las esposas!”—que es lo que Salomón hizo. 1
Reyes 11:1 dice: “Pero el rey Salomón amó, además de la
hija de Faraón, a muchas mujeres extranjeras; a las de Moab,
a las de Amón, a las de Edom, a las de Sidón, y a las heteas”.
El versículo 3 dice: “Y tuvo setecientas mujeres reinas y
trescientas concubinas; y sus mujeres desviaron su corazón”.
Hay hombres en África que tienen más de trescientas esposas,
lo cual es común. Un príncipe que conocimos era considerado
sumamente pobre porque solo tenía trescientas esposas.
A nosotros pueden parecernos muy improbables estos
pecados de Salomón, pero el Señor Jesús dijo que se puede
cometer adulterio en el corazón (ver Mt. 5:28). En el Nuevo
Testamento, pueden ser en verdad muy probables. 2 Pedro
2:14 dice: “Tienen los ojos llenos de adulterio, no se sacian
de pecar”. Por esta conducta podemos ser descalificados y
no recibir las promesas y bendiciones de Salomón.
188
La vida de Salomón
c. Con relación al dinero. Deuteronomio 17:17 advierte:
“...ni plata ni oro amontonará para sí en abundancia”. Ya vimos
que eso fue exactamente lo que hizo Salomón. No hay error
alguno en el dinero. Pero el amor al dinero es la raíz de todos
los males. Dios no le prohibió a los reyes el oro o la plata. Lo
que sí les prohibió es que los multiplicaran y amontonaran. Lo
que a Dios le preocupa es que no multipliquemos nuestros
haberes. Es la multiplicación y la adoración de esos bienes lo
que puede destruirnos, como sucedió con el rey Salomón y
con Lucifer.
D. CONCLUSIONES DE SALOMÓN
Salomón escribió la biografía de su vida. La autobiografía del
hombre más rico que jamás ha existido, se encuentra en la Palabra
de Dios—en el Libro de Eclesiastés. ¡El rey Salomón era un
predicador y de verdad sabía predicar! Pero resumió su vida en
una frase muy recurrente en Eclesiastés: “Vanidad de vanidades,
todo es vanidad”. El capítulo 1:4 comienza: “Generación va y
generación viene, mas la tierra permanece”. He visto a través de
los años a muchos predicadores alcanzar considerables alturas,
para luego desvanecerse. Hemos visto obras “enaltecidas” que
luego pasan. Pero hay una obra perdurable y resistente que el
Señor está realizando en muchos lugares.
Dios, a través de la vida de Salomón,
está ilustrando dos verdades principales.
1. Todas las bendiciones de su reinado.
La gloria y sabiduría salomónicas que Dios nos está ofreciendo
a todos. ¡Dios quiere llevarnos a poseer la gloria y las
bendiciones del reinado de Salomón ahora!
La vida de Salomón
189
2. Las advertencias.
Debemos proseguir hasta alcanzar todo lo que Dios nos ha
deparado, y no volvernos como Salomón, el cual dejó de
obedecer todos los estatutos de su padre David. Salomón
fue sabio, pero no tuvo un corazón sincero y se ocupó en
una diversidad de asuntos. Él da testimonio de ello en
Eclesiastés 2:3: “...y que anduviese mi corazón en sabiduría,
con retención de la necedad...”. Más tarde enumera todas
esas necedades, mencionando la plata y el oro. Sin embargo,
en el capítulo 5:10, afirma: “El que ama el dinero, no se saciará
de dinero; y el que ama el mucho tener, no sacará fruto.
También esto es vanidad”. Precisamente las cosas a que
Salomón entregó su corazón, (el acumular posesiones
mundanas), no le produjeron ninguna satisfacción, tal como
lo declaró al final de su vida.
Luego menciona a las mujeres. Un pecado general hoy en día
es la multiplicidad de matrimonios, divorcio y nuevo
matrimonio; o bien, estar casado y desear a otra persona. En
estos términos, dice Salomón para concluir en Eclesiastés 7:26:
“Y he hallado más amarga que la muerte a la mujer cuyo
corazón es lazos y redes, y sus manos ligaduras. El que
agrada a Dios escapará de ella; mas el pecador quedará en
ella preso”. Si dirigimos hacia Dios nuestro corazón, Él nos
librará de los lazos del adulterio y de la lujuria.
E. CONCLUSIÓN
¿Cómo resume su propia vida el rey Salomón? Eclesiastés
4:13 dice: “Mejor es el muchacho pobre y sabio, que el rey
viejo y necio que no admite consejos”. En ese estado murió
190
La vida de Salomón
el rey Salomón. Dios se le había aparecido dos veces. Le
había hablado quizá tres veces y le había hecho solemnes
advertencias para que obedeciera sus estatutos; para que
obedeciera las leyes de Dios, y las leyes pertinentes a los
reyes. Pero a pesar de ser amonestado por Dios mismo e
indudablemente por los profetas de su época, Salomón no
quiso recibir más consejo. ¿Por qué? Porque su voluntad ya
estaba definida.
¿Cómo resume Dios la vida y reinado de Salomón? — “Su
corazón no era perfecto con Jehová su Dios, como el corazón
de su padre David” (1 R. 11:4b). No negó a sus ojos ninguna
cosa que desearan. ¡La voluntad propia fue un factor
dominante en su vida! (Ec. 2:10).
Lo que Salomón quería, lo hacía. Pero, vale más tener un
corazón como el descrito en Proverbios 21:1. Ése sí es un
rey, ese sí calificará para entrar. “Como los repartimientos de
las aguas, así está el corazón del rey en la mano de Jehová; a
todo lo que quiere lo inclina”. Ese es el corazón que nosotros
debemos tener; no el de Salomón que era tan terco, duro y
empecinado, que desestimó todo lo que estaba en la ley de
Dios. Nosotros necesitamos un corazón tierno y semejante al
agua, que Dios pueda “inclinarlo a todo lo que Él quiera”.
¿Cuál es la conclusión de todo esto? Nos la da Salomón en
Eclesiastés 12:13: “El fin de todo el discurso oído es este:
Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es el
todo del hombre”. Tener ese reverente temor de Dios—
manejar con prudencia cada detalle de nuestras vidas y hacer
lo que agrada a Dios, debe ser nuestro objetivo central.
Seamos incondicionales al desempeñar el trabajo que Dios
nos ha encomendado.
La vida de Salomón
191
Capítulo 12
COMPARACIÓN ENTRE DAVID
Y SALOMÓN
I. COMPARACIÓN ENTRE
DAVID Y SALOMÓN
A. INTRODUCCIÓN
B. VIDA DE DAVID—LOS FUNDAMENTOS
1. Con relación al Templo
a. Concepción
b. Patrón
c. Ubicación
d. Dedicación
2. Con relación a las promesas
a. Trono establecido
b. Longevidad
3. Con relación al juicio
a. Una vara de medir
b. Un juicio benigno
4. Con relación a la Iglesia
a. Tomar posesión de sus bendiciones
b. Permanecer en las bendiciones
192
La vida de Salomón
C. LA VIDA DE DAVID—EL PRINCIPIO
1. Un corazón definido
2. Un corazón entregado
3. Un corazón contrito
D. EXPLICACIÓN DEL SALMO 51
1. Sal. 51:1 - La misericordia
2. Sal. 51:1 - Pecados son borrados
3. Sal. 51:2 - El lavamiento
4. Sal. 51:3 - La confesión
5. Sal. 51:4 - La justificación
6. Sal. 51:5 - El reconocimiento del pecado
7. Sal. 51:6 - La transformación
8. Sal. 51:8 – La restitución del gozo
9. Sal. 51:10 – La limpieza
10. Sal. 51:13 - El restablecimiento
a. De David
b. De Israel
E. UN CORAZÓN CON UNA VISIÓN
F. CONCLUSIÓN
La vida de Salomón
193
A. INTRODUCCIÓN
Esta serie ha demostrado que la Iglesia está pasando
espiritualmente, de la época davídica a la salomónica.
Salomón, un reinado de sabiduría y gloria, representa la Iglesia
de los postreros días. Su vida puede ser comparada con el
templo que él construyó, en cuanto a fastuosidad, esplendor
y gloria. El reinado de David se asemeja a los fundamentos
pues las bendiciones de Salomón fueron el resultado de la
vida de David. Por lo tanto, la vida de David es la clave para
poseer y conservar las bendiciones de Salomón.
B. LA VIDA DE DAVID—LOS FUNDAMENTOS
1. Con relación al templo.
a. La concepción. El templo en sí fue concebido por David.
Esto lo reconoció Salomón en repetidas ocasiones. En 1 Reyes
8:17 dijo: “Y David mi padre tuvo en su corazón edificar casa
al nombre de Jehová Dios de Israel”.
b. El patrón. El patrón fue dado por Dios a David, y éste
lo dio a Salomón. 1 Crónicas 28:6 testifica: “Y me ha dicho:
Salomón tu hijo, él edificará mi casa y mis atrios; porque a
éste he escogido por hijo, y yo le seré a él por padre”. “Y
David dio a Salomón su hijo el plano del pórtico del templo y
sus casas, sus tesorerías, sus aposentos, sus cámaras y la
casa del propiciatorio. Asimismo, el plano de todas las cosas
que [David] tenía en mente para los atrios de la casa de Jehová,
para todas las cámaras alrededor, para las tesorerías de la
casa de Dios, y para las tesorerías de las cosas santificadas”
(1 Cr. 28:11, 12).
194
La vida de Salomón
c. La ubicación. David escogió la ubicación del templo. 2
Crónicas 3:1 dice: “Comenzó Salomón a edificar la casa de
Jehová en Jerusalén, en el monte Moriah, que había sido
mostrado a David su padre, en el lugar que David había
preparado en la era de Ornan jebuseo”.
d. Dedicación. 1 Reyes 8:66 dice: “Y al octavo día
[Salomón] despidió al pueblo; y ellos, bendiciendo al rey, se
fueron a sus moradas alegres y gozosos de corazón, por todos
los beneficios que Jehová había hecho a David su siervo y a
su pueblo Israel”. En la ceremonia de dedicación del templo,
la gente le agradeció a Dios Su generosidad para con David.
2. Con relación a las promesas.
a. Trono establecido. Salomón ocupó el trono gracias a
las promesas de Dios a David. En la oración que elevó durante
la ceremonia de dedicación del templo, Salomón dijo: “que
has cumplido a tu siervo David mi padre lo que le prometiste;
lo dijiste con tu boca, y con tu mano lo has cumplido, como
sucede en este día” (1 R. 8:24). De esta manera, Salomón
reconoció que era el heredero como consecuencia de las
promesas hechas a David.
b. Longevidad. Las promesas relacionadas con Salomón
dependían de que él fuese obediente como David su padre.
Cuando Dios se apareció a Salomón por primera vez, le dijo:
“Y si anduvieres en mis caminos, guardando mis estatutos y
mis mandamientos, como anduvo David tu padre, yo alargaré
tus días” (1 R. 3:14). En una segunda ocasión, Dios de nuevo
le mencionó a David: “Y si tú anduvieres delante de mí como
anduvo David tu padre, en integridad de corazón y en
equidad, haciendo todas las cosas que yo te he mandado, y
La vida de Salomón
195
guardando mis estatutos y mis decretos, yo afirmaré el trono
de tu reino sobre Israel para siempre, como hablé a David tu
padre” (1 R. 9:4, 5).
3. Con relación al juicio.
a. Una caña de medir. La vida de David fue usada por
Dios como medida para evaluar el testimonio de la vida de
Salomón. 1 Reyes 11:6 dice: “E hizo Salomón lo malo ante
los ojos de Jehová, y no siguió cumplidamente a Jehová como
David su padre”. La vida de casi todos los reyes de Judá
que sucedieron a Salomón, fue medida según la vida de David;
hayan andado cumplidamente como David o no.
b. Un juicio más benigno. Gracias a la vida de David, el
juicio de Dios sobre Salomón se redujo. 1 Reyes Salomón.
11:9-12 dice: “Y se enojó Jehová contra Salomón, por cuanto
su corazón se había apartado de Jehová Dios de Israel, que
se le había aparecido dos veces, y le había mandado acerca
de esto, que no siguiese a dioses ajenos; mas él no guardó lo
que le mandó Jehová. Y dijo Jehová a Salomón: Por cuanto
ha habido esto en ti, y no has guardado mi pacto y mis estatutos
que yo te mandé, romperé de ti el reino, y lo entregaré a tu
siervo. Sin embargo, no lo haré en tus días, por amor a David
tu padre”. De modo que la vida entera de Salomón estuvo
basada en la de David.
4. Con relación a la Iglesia. Dios pone la vida de David
como Su norma:
a. Que nos capacita para poseer las bendiciones del reinado
de Salomón.
196
La vida de Salomón
b. Que nos hace residir, establecernos, o permanecer en la
sabiduría y gloria de esas promesas.
Este es un periodo muy trascendental para la Iglesia, porque
estamos siendo preparados y calificados para ingresar en las
glorias del reino de Salomón. Ahora es cuando tenemos que
estar seguros, por la gracia de Dios, de que los principios de
la vida de David se han forjado en nuestras vidas, ya que las
bendiciones de Salomón y su vida entera, se basaron en
la vida de David.
C. LA VIDA DE DAVID—LOS PRINCIPIOS
Las bendiciones de Salomón deben ser como una visión, pero
la vida de David debe ser la caña de medir y la clave para
“poseerlas”. Vamos a contemplar algunos principios del
reinado y vida de David, y veremos si Salomón estuvo a la
altura de ellos. Por lo cual tenemos ante nosotros las normas
de la vida de David, así como las aterradoras advertencias de
la propia vida de Salomón, que no calificó.
1. Un corazón definido
Aunque no tuvo la gloria ni el esplendor del reino de Salomón,
David fue un poderoso rey y un recio guerrero. Pero
observemos su corazón. A pesar de tener una infinidad de
cosas a su disposición, dijo: “Una cosa he demandado a
Jehová” (Sal. 27:4). Nada hay tan fuerte y poderoso, como
el individuo que con corazón definido toma un rumbo bueno
o malo. David dijo: “Una cosa he demandado a Jehová, ésta
buscaré; que esté yo en la casa de Jehová todos los días de
mi vida, para contemplar la hermosura de Jehová, y para
inquirir en su templo”.
La vida de Salomón
197
¿Cuál fue la actitud de Salomón? En Eclesiastés 2:10 él dijo:
“No negué a mis ojos ninguna cosa que desearan, ni aparté
mi corazón de placer alguno”. Los ojos de David veían en
una sola dirección, mientras que los de Salomón eran
“vagabundos”. Lo que veía, lo deseaba y tomaba.
2. Un corazón entregado
El Salmo 9:1 dice: “Te alabaré, oh Jehová, con todo mi
corazón” (ver también Sal. 111:1). En el Salmo 86:11 vemos
por qué David pudo hablar así. Esta es una plegaria muy
significativa que David formuló varias veces. Él dijo:
“Enséñame, oh Jehová, tu camino; caminaré yo en tu verdad;
afirma mi corazón para que tema tu nombre”. David tenía un
corazón entregado porque oraba de esta manera.
3. Un corazón contrito
David tenía un corazón contrito. Ello se revela en siete salmos
penitenciales: 6, 32, 38, 51, 102, 130 y 143. En este estudio
veremos solamente el Salmo 51.
Uno de los rasgos más sobresalientes del carácter de David
fue su gran docilidad de corazón. Con esto se hizo querer
por Dios inmensamente. Sin embargo, esa cualidad estuvo
completamente ausente en la vida de Salomón. El amor a los
placeres endureció por completo el corazón de Salomón, el
cual era impenitente e incapaz de recibir censura. Por el
contrario David, al ser amonestado por el profeta, se quebrantó
a fondo. Muchos salmos surgieron de esta etapa de su vida,
durante la cual David permaneció sumamente arrepentido y
compungido delante de Dios. David vivía con la unción del
arrepentimiento. ¡Pidámosla al Señor!
198
La vida de Salomón
Creo que estamos mudándonos a una nueva época de ganar
almas, y que la Iglesia recibirá una fresca afluencia de personas.
¿Qué clase de personas ingresará? Habrá de toda
procedencia, pero algunos vendrán de lo que Jesús llamó:
“esta generación adúltera”. Ellos tendrán que experimentar
un corazón contrito o penitencial y la aceptación de Dios.
Nosotros necesitamos darles esa seguridad.
D. EXPLICACIÓN DEL SALMO 51
1. Salmo 51:1—La misericordia de Dios.
David dice en el Salmo 51:1: “Ten piedad de mí, oh Dios,
conforme a tu misericordia...”. Necesitamos tener una
revelación de la misericordia de Dios. En Éxodo 34:6, el Señor
se le apareció a Moisés y le habló con estas palabras: “Yo
soy misericordioso y piadoso; tardo para la ira, y grande en
misericordia y verdad”. El Señor Jesús recalcó esto en Mateo
9:10-12: “Y aconteció que estando él sentado a la mesa en la
casa, he aquí muchos publicanos y pecadores, que habían
venido, se sentaron juntamente a la mesa con Jesús y sus
discípulos. Cuando vieron esto los fariseos, dijeron a los
discípulos: ¿Por qué come vuestro Maestro con los publicanos
y pecadores? Al oír esto Jesús, les dijo: Los sanos no tienen
necesidad de médico, sino los enfermos”. ¿Qué personas
acuden al médico? ¡Los enfermos! Es muy raro que un
médico ausculte a una persona saludable. En cierta ocasión
alguien me dijo: “¿No tiene usted algo que comunicarnos sino
problemas?” Yo le contesté: “Bueno, la verdad es que la gente
llama al pastor solo cuando hay problemas”. Esto es lo que
el Señor Jesús está diciendo: “Los enfermos son los que
necesitan un médico”.
La vida de Salomón
199
En el versículo 13 dice: “Id, pues, y aprended lo que significa:
Misericordia quiero, y no sacrificio. Porque no he venido a
llamar a justos, sino a pecadores, al arrepentimiento”.
Necesitamos una revelación personal de la misericordia de
Dios, la cual es capaz de descender muy abajo para recoger
al individuo que ha caído en el hoyo profundo. David clamó
en el Salmo 40:1: “Pacientemente esperé a Jehová, y se inclinó
a mí, y oyó mi clamor”. Dios quiere que nosotros seamos Su
brazo extendido para sacar a otros de ese horrendo hoyo.
solo se requiere una persona para caer en un hoyo, pero se
requieren alrededor de seis para sacarlo de ahí.
Hay individuos que son hábiles para caer en hoyos. Son
sacados de uno, y cuando menos se espera, han caído en
otro. Debemos tener misericordia de ellos. La misericordia
simplemente significa que les hemos advertido, diciéndoles:
“Si toman ese rumbo, resbalarán”. Y seguimos alertándolos
una y otra vez, pero caen en ese hoyo, habiéndoles nosotros
prevenido. Es misericordia rescatar a éstos voluntariamente
y con amor, y no reñir diciéndoles: “¡Yo te lo dije!”. La
misericordia siempre está asociada con las buenas obras. “Me
hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso;
puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos. Puso luego
en mi boca cántico nuevo” (Sal. 40:2, 3). Tenemos la tendencia
a perder la esperanza con la gente, pero Dios no. ¡Nuestra
misericordia debe ser tan duradera como la de Dios, porque
Él es misericordioso!
2. Salmo 51:1—Los pecados son borrados.
“Borra mis rebeliones”. Antiguamente, se escribía sobre
pergamino y cuero. Mas, por no tener la tinta ningún ácido,
200
La vida de Salomón
no “mordía” el pergamino. Todo lo que había que hacer para
eliminar lo escrito, era frotar el pergamino con un paño húmedo
y no quedaba rastro de tinta. A esto se refería el rey David
aquí. David estaba evidentemente escribiendo este Salmo en
profecía, pues es lo que Dios hace. Dios sencillamente borra
nuestras transgresiones. No queda registro de ellas.
3. Salmo 51:2—Lavando la maldad.
“Lávame más y más de mi maldad”. Oseas 14:2 dice: “Quita
toda iniquidad”. En el versículo 8, Efraín (la tribu idólatra)
dice: “¿Qué más tendré yo con los ídolos?”. El lavar la maldad
implica eliminar todo deseo de pecado. A algunas personas
les agrada ser libradas del poder del pecado pero siguen
amando el pecar. La verdadera contrición es desear un
lavamiento minucioso de la iniquidad, y una limpieza del
pecado.
4. Salmo 51:3—Confesión de pecado.
“Porque yo reconozco mis rebeliones, y mi pecado está
siempre delante de mí”. También Oseas 14:2: “Llevad con
vosotros palabras de súplica, y volved a Jehová, y decidle:
Quita toda iniquidad y acepta el bien”. Debe haber un rotundo
reconocimiento de las transgresiones y una confesión ante
Dios. Ver también Jeremías 3:13.
5. Salmo 51:4—Justificación.
David dice: “Contra ti, contra ti solo he pecado, y he hecho lo
malo delante de tus ojos; para que seas reconocido justo en tu
palabra, y tenido por puro en tu juicio”. El rey David sabía que
sería juzgado. Por eso reconoció su pecado en público, de
La vida de Salomón
201
manera que cuando Dios lo juzgara, nadie acusara a Dios de ser
injusto. A David le preocupaba el nombre de Dios y Su justicia.
6. Salmo 51:5—Reconocimiento del pecado original.
“He aquí, en maldad he sido formado, y en pecado me
concibió mi madre”. Ahora David reconocía el pecado original.
Cierta vez oí a un hombre dar testimonio después de haber
procedido mal. Lo que dijo fue: “¡Oh, qué raro que yo haya
hecho algo así!”. Dios respondió al instante y dijo: “Tan capaz
eras de hacerlo, que lo hiciste”. El detalle aquí es este: pecamos
porque somos pecadores.
Por lo general conocemos las debilidades de nuestros padres
y abuelos, y quizá fue Dios quien nos hizo ver esas tendencias.
Sin embargo, no las hemos combatido en nuestras propias
vidas. Es de suma importancia que cuando Dios nos muestre
algo en nuestras vidas, lo enfrentemos, si ya sabemos que
esas flaquezas existen en nosotros y en nuestros parientes.
Dios espera que acudamos a Él para combatirlas y que no
quede manifestación de ellas en nuestras vidas. La Palabra
de Dios dice: “Cuando el pecado abundó, sobreabundó la
gracia” (Ro. 5:20). La gracia de Dios nos capacita para
vencer y quedar libres de las tendencias heredadas al pecado.
7. Salmo 51:6—Transformación interior.
“He aquí, tú amas la verdad en lo íntimo, y en lo secreto me
has hecho comprender sabiduría”. Tiene que haber una
transformación en nuestras vidas, y no tan solo una liberación
y limpieza, porque Dios desea reemplazar esa maldad, esa
iniquidad, y ese engaño, con verdad y sabiduría. David dice:
“y en lo secreto me has hecho comprender sabiduría”.
202
La vida de Salomón
Necesitamos ayudar a los demás a entender que sus puntos
de debilidad deben ser edificados, de modo que desarrollen
fortaleza. A veces nuestras áreas más raquíticas se pueden
convertir en las de mayor firmeza, porque les prestamos más
atención y reciben más gracia.
8. Salmo 51:8—Restitución del gozo.
“Hazme oír gozo y alegría, y se recrearán los huesos que has
abatido”. David había pecado muy penosamente, pero en el
Salmo 4:7 vemos la transformación completa que Dios le
concedió. Él dice: “Tú diste alegría a mi corazón, mayor que
la de ellos cuando abundaba su grano y su mosto”. Después
de haber pecado, el rey David pudo decir: “Puedo ver al
granjero con su abundante cosecha y el gozo que ella le
produce; sin embargo, Dios ha puesto una mayor alegría en
mi corazón”. En el Salmo 51:12 dice: “Vuélveme el gozo de
tu salvación, y espíritu noble me sustente”. Dios puede poner
tal gozo en el corazón humano. Es por fe que afrontamos la
necesidad que hay en nuestras propias vidas y en las ajenas.
9. Salmo 51:10—Limpieza.
“Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu
recto dentro de mí”. Dios puede limpiar y transformar a una
persona. Dios me mostró una visión de dos jarrones: uno
limpio y otro completamente sucio. El Señor dijo: “Todo lo
que el jarrón sucio necesita, es ser lavado, limpiado y secado;
y los dos serán idénticos. Valen lo mismo”. Y añadió: “Alguien
puede caer en el fango del pecado, pero cuando yo lo levanto
y limpio, es tan valioso como los demás”. Dios puede hacer
una obra creadora en nuestros corazones, y si tenemos
corazones limpios, es como si nunca hubiéramos pecado.
La vida de Salomón
203
10. Salmo 51:13—Completo restablecimiento.
David dice: “Entonces enseñaré a los transgresores tus
caminos, y los pecadores se convertirán a ti”. A partir de un
completo restablecimiento, surge el bello ministerio del maestro
y el del evangelista. Así ocurrió en la vida de David. En los
avivamientos venideros, Dios quiere socorrer a los que están
en el abismo, y usarnos a nosotros para producir un hermoso
restablecimiento en sus vidas, de manera que ellos puedan
tener un corazón limpio y un ministerio que a su vez alcance a
miles de personas más.
a. Completo restablecimiento—DAVID. El rey David es
el hombre que Dios levantará en el milenio. Jeremías 30:9,
refiriéndose a la restauración de Israel, dice que ellos “servirán
a Jehová su Dios y a David su rey, a quien yo les levantaré”.
Esto alude además la restauración de Judá e Israel en el milenio
y segunda venida del Señor. Ezequiel 37:19-23 dice que ellos
ya no se contaminarán con ídolos sino que llegarán a ser un
palo (nación) en la mano de Dios, y que un rey reinará sobre
ellos. El versículo 24 nombra ese rey: “Mi siervo David será
rey sobre ellos, y todos ellos tendrán un solo pastor; y andarán
en mis preceptos, y mis estatutos guardarán, y los pondrán
por obra”. David fue preparado para dirigir una nación
particularmente bendecida por Dios, y que con todo, no había
calificado para alcanzar los propósitos de Dios.
b. Completo restablecimiento—ISRAEL. En Zacarías
12:10, 11, vemos el corazón contrito de la nación de Israel
cuando sea restaurada al regreso del Señor. Dice así: “Y
derramaré sobre la casa de David, y sobre los moradores de
Jerusalén, espíritu de gracia y de oración; y mirarán a mí, a
204
La vida de Salomón
quien traspasaron, y llorarán como se llora por hijo unigénito,
afligiéndose por él como quien se aflige por el primogénito.
En aquel día habrá gran llanto en Jerusalén” (ver también Ro.
11:26).
En Oseas 4:11 y 5:4, se muestra el pecado que predominaba
en Israel: “Fornicación, vino y mosto quitan el juicio”. “No
piensan en convertirse a su Dios, porque espíritu de
fornicación está en medio de ellos, y no conocen a Jehová”.
Israel fue entregado a un espíritu de prostitución y adulterio, y
acabó por asesinar a Cristo. Ellos eran adúlteros y asesinos
como nación. El rey que gobernará sobre ellos durante el
milenio, es uno que también adulteró con Betsabé y que luego
asesinó a Urías, el esposo. ¡Qué bien se entenderán
mutuamente el rey David y su pueblo! Pero, Dios lo rehabilitó
de esos dos pecados cardinales y lo colocará sobre un pueblo
que ha pecado de manera similar contra el Señor. A veces la
persona que mejor alcanza a los demás, es aquella que ha
estado en el mismo abismo de ellos.
E. UN CORAZÓN CON UNA VISIÓN
David tenía un corazón visionario. Era un hombre de mucha
visión. En el Salmo 40:6, vemos este aspecto del corazón de
David: “Sacrificio y ofrenda no te agrada; has abierto mis
oídos”. David vivió durante la época de la ley, cuando Dios
ordenaba sacrificios y ofrendas quemadas. Sin embargo,
David, por revelación divina, entendía lo que estaba por venir.
Él tuvo una revelación del sacerdocio que vendría con la era
de la Iglesia.
La vida de Salomón
205
“Entonces dije: He aquí, vengo; en el rollo del libro está escrito
de mí. El hacer tu voluntad, Dios mío, me ha agradado, y tu
ley está en medio de mi corazón” (Sal. 40:7, 8). David tuvo
una revelación de la dispensación de los últimos días (la era
de la Iglesia), en que Dios le confirmará a la Iglesia el nuevo
pacto, y escribirá Sus leyes en las tablas de carne de nuestros
corazones. Además, David tuvo una revelación del sacerdocio
de los creyentes, porque en el Salmo 110:4 lo encontramos
diciendo: “Tú eres sacerdote para siempre según el orden de
Melquisedec”. Salomón y su pueblo solo pudieron vivir para
el presente porque anduvieron “tras las bendiciones” y usaron
los dones y llamamientos de Dios para enriquecerse y
satisfacerse ellos mismos. Sin embargo, David vio más allá,
pues anduvo “tras Cristo”. Hechos 2:25 dice: “Porque David
dice de Él: Veía al Señor siempre delante de mí; porque está
a mi diestra no seré conmovido”.
El Salmo 16:8, que está traducido de manera levemente
diferente, dice: “A Jehová he puesto siempre delante de mí;
porque está a mi diestra, no seré conmovido”. En el Salmo
42:1, 2 David exclama: “Como el ciervo brama por las
corrientes de las aguas, así clama por ti, oh Dios, el alma mía.
Mi alma tiene sed de Dios, del Dios vivo; ¿cuándo vendré, y
me presentaré delante de Dios?” También el Salmo 63:1,2
dice: “Dios, Dios mío eres tú; de madrugada te buscaré; mi
alma tiene sed de ti, mi carne te anhela, en tierra seca y árida,
donde no hay aguas, para ver tu poder y tu gloria, así como te
he mirado en el santuario”. David tuvo siempre al Señor delante
de sí, y anduvo “tras Cristo”. Por eso, su visión trascendía la
de sus contemporáneos.
Yo creo que Dios quiere que seamos como David, con una
206
La vida de Salomón
visión progresiva y un anhelo de encontrarnos con el Señor
con más intensidad que nunca. David era un hombre conforme
al corazón de Dios porque tenía esa visión progresiva, esa
hambre y sed de Dios que lo llevó a la era venidera. Dios
desea darnos una visión, un deseo y avidez por lo que está
más allá, y llevarnos a un nuevo ámbito en Él.
F. CONCLUSIÓN
Vemos que la manera de recibir las bendiciones y la gloria de
Salomón, es identificándonos con la vida de David. El reinado
de Salomón se basó en la vida de David. Es por la vida de
David que Salomón pudo poseer todo lo que tuvo. Las claves
para apropiarnos de lo que Dios nos ha deparado, se basan
en la vida de David, en que se forje en nosotros su carácter.
Que Dios nos ayude a aprender Sus caminos, para que
recibamos todo lo que nos ha deparado y lleguemos a ser Su
luz.
¿Cuáles son las claves?
1. Ser un hombre o mujer conforme al corazón de
Dios—De corazón sincero, recto, contrito y dócil al Espíritu
Santo. Seamos personas que con prontitud piden perdón y
se arrepienten cuando Dios toca sus vidas. Como David,
tengamos un corazón de carne (Hch.13:22).
2. Ser un hombre o mujer de visión—que veamos más
allá del velo de este periodo de la historia de la Iglesia, a la
gloria y manifestación del Espíritu y el poder que está por
venir.
La vida de Salomón
207
El propósito de Dios es multiplicarnos. ¿Cómo puede haber
multiplicación si no nos damos de lleno a los demás? La idea
de tener un pastor no es que las ovejas acudan a él, sino que
él salga a buscar a las perdidas. Estando nosotros en el umbral
de un nuevo ministerio, que es una nueva acometida
evangelizadora, Dios está diciendo: “Quiero que mediten en
el corazón de David para que Yo pueda crear en ustedes ese
mismo corazón”. David, el hombre conforme al corazón de
Dios, es quien ha puesto a los demás en situación de obtener
las bendiciones.
Animémonos, porque David es la clave para poseer las
bendiciones, la gloria y la sabiduría de todo lo que Dios tiene.
A medida que se desarrolle en nosotros el corazón de David,
poseeremos todo lo que Dios nos ha deparado. El reino de
Salomón es la visión—la vida de David es el camino a la
realidad. Debemos clamar: “Oh, Dios, dame un corazón
como el de David”. Descubriremos entonces que se forja en
nosotros un corazón de pastor y que nos convertimos en la
mano extendida del Príncipe de los Pastores. Veremos el
avivamiento en una nueva ola de personas que ingresan a la
Iglesia, las cuales serán bendecidas, limpiadas, y enaltecidas,
para convertirse ellas mismas en evangelistas que salen a ganar
otras vidas.
¡El reino de Salomón es la visión,
la vida de David es el camino a la realidad!
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