TEXTO DE LA INTERVENCIÓN DEL EMBAJADOR OBSERVADOR

Anuncio
TEXTO DE LA INTERVENCIÓN DEL EMBAJADOR OBSERVADOR
PERMANENTE DE ESPAÑA EN EL DIÁLOGO DE LOS JEFES DE
DELEGACIÓN DE LA OEA CON LOS REPRESENTANTES DE LOS PAÍSES
OBSERVADORES
Santo Domingo, República Dominicana, 4 de junio de 2006
Señor Presidente,
Señores Ministros y Embajadores Representantes de los Países Miembros y
Observadores,
Señor Secretario General,
Señor Secretario General Adjunto,
Señoras y Señores,
Gracias Señor Presidente por concederme la palabra, que me honro en tomar en
primer lugar, entre todas las Misiones de los Países Observadores, por ser España el
primer país que adquirió el estatuto de Observador en 1971, hace ya 35 años.
No somos observadores externos o distraídos de lo que ocurre en las Américas,
sino atentos y conscientes. Por razones históricas y culturales de la época de la historia
compartida por España con tantos países de la OEA y porque también estamos
condicionados por otras nuevas realidades como las inversiones, la migración o el
interés económico que se entremezclan con los principios democráticos, sociales y
económicos que todos compartimos, seguimos la realidad de las Américas como si fuera
propia. Y queremos que nuestras relaciones exteriores con el hemisferio americano
reflejen lo que el actual Gobierno de España aspira a realizar en nuestro propio país, en
Europa y en el resto del mundo. Las principales líneas maestras de esa proyección
exterior de España en las Américas son:
o El apoyo a las políticas que aúnan el desarrollo económico con mejores
distribuciones de renta.
o La colaboración en la búsqueda de consensos, tanto a nivel regional como
hemisférico.
o La defensa y el compromiso con los procesos de paz en América.
Cuando en el continente americano se habla de desintegración económica y de
fracturas políticas, con excesivo y prematuro pesimismo, España, por medio de su
Misión Observadora en la OEA, se permite apostar por reforzar la vía multilateral para
afrontar los objetivos que en la región se presentan cada vez con mayor nitidez y
exigencia: el fomento y defensa de la democracia, la prevención de conflictos, el respeto
de los Derechos Humanos y del Derecho Internacional, la lucha contra la droga y el
crimen organizado, la defensa del medio ambiente, la lucha contra la pobreza y la
exclusión social, entre otros.
En el presente año, mi país ha renovado su interés por el proceso normalizador de
Haití, reiterando su presencia en MINUSTAH, a donde España envía 50 miembros de la
Policía y la Guardia Civil para contribuir a su estabilidad. También ofrecerá becas y
ayuda técnica para que nacionales haitianos mejoren su formación y conocimientos con
el fin de asegurar la estabilidad en su propio país. Igualmente se mantendrá el apoyo
financiero español a la Misión de la OEA en Haití. El proceso de paz en Colombia
contará con un importante respaldo financiero español a la Misión de la OEA: un millón
de dólares. La contribución de mi país al sistema de defensa de los derechos humanos se
1
va a cuantificar en un apoyo de 190.000 dólares a la Corte Interamericana de Derechos
Humanos. Otros 250.000 dólares se ofrecerán al proyecto “Descentralización de las
políticas de drogas en los Países Andinos, 2005-2007”, de la CICAD.
España continúa con interés la evolución del CARICOM como lo prueba la
celebración en Madrid, hace pocos días, de la Tercera Cumbre España-CARICOM, a
nivel de Ministros de Relaciones Exteriores. El Presidente del Gobierno español, Sr.
Rodríguez Zapatero, habló de que España quiere convertirse en “amigo privilegiado del
CARICOM”. Ya existen programas y sectores en los que mi país participa, como son
los de la lucha contra el narcotráfico o el aumento de becas e intercambios para
promocionar la lengua española y la mayor presencia de empresas turísticas españolas
en el área. España aspira a convertirse en miembro donante del Banco de Desarrollo del
Caribe y ya contribuye al Fondo Especial para el Desarrollo del grupo. Mi país, que es
miembro de la Comunidad Iberoamericana de Naciones, país Observador en la OEA y
Observador del Sistema de Integración Centroamericana, se ha ofrecido en la Tercera
Cumbre con el CARICOM para apoyar la intensificación de relaciones del CARICOM
con los países iberoamericanos.
También hace pocas semanas España ha sido admitida como primer país
Observador en la Junta Interamericana de Defensa.
El Gobierno español está apostando por el multilateralismo para hacer frente a los
desafíos del continente. Y lo hace incluso en los novedosos instrumentos bilaterales que
España tiene en marcha para poner al día sus relaciones con los países de América. En
los Planes de Asociación Estratégica, firmados ya con México, Brasil, Argentina y
Chile, expresamente se resalta la necesidad de coordinar estrategias en todos los
ámbitos multilaterales.
Por eso también España apuesta por la OEA. Si el pasado año el Ministro español de
Asuntos Exteriores y de Cooperación hizo una visita al Secretario General en funciones,
desde la pasada Asamblea General, el Secretario General de la Organización ha
efectuado dos visitas de trabajo a Madrid. España, como muestra de nuestro interés por
la Organización ha ofrecido muy recientemente al Secretario General la firma de un
Acuerdo por el que se establece un Fondo español para la OEA con el fin de financiar
programas de interés común. Se procederá a la firma del importante documento, por
ambas Partes, en pocas semanas, una vez termine su redacción. Puedo adelantar, Sr.
Presidente, que la dotación inicial del Fondo será de unos dos millones y medio de
dólares, con lo que España se convertiría en el segundo país Observador contribuyente a
los programas de la Organización.
Si España hace este esfuerzo por la Organización de los Estados Americanos, lo
hace también convencida de que su larga trayectoria como país Observador, con
Embajadores Jefes de Misión desde 1972 y con aportaciones continuadas y estables a
los programas de la OEA, merece que, Señores Ministros, los miembros del Consejo
Permanente y el Secretariado de la OEA se planteen si no ha llegado ya el momento
para que España mejore su estatus en la Organización. Es algo que creo mi país merece
y a lo que legítimamente aspira conseguir a corto plazo. Hay soluciones para todo y
ejemplos clarificadores en otros organismos regionales que pueden servir de guía para
dar satisfacción a esa aspiración española, ahora renovada.
Muchas gracias, Señor Presidente.
2
Descargar