causado a otras personas y sentir la necesidad de reconciliación y de perdón. Este es un proceso muy lento que tiene que tener en cuenta a las víctimas y a los victimarios. “No me encuentro bien, estoy muy cansado de librar la batalla diaria contra mí mismo. Veo lo que fui en mi pasado, lo que soy en mi presente, pero no veo lo que seré en mi futuro. Tengo miedo, no quiero ser la misma persona. Esa persona era mala, le gustaba hacer sufrir, fanfarrón, mentiroso, egocéntrico, ¿quién quiere ser una persona así?. Estoy derrotado, ¿qué puedo hacer?” (Carta de Roberto, de 27 años, desde los 9 en centros de menores y desde los 18 en prisión) Me han hecho partícipe de momentos dolorosos de sus vidas. Uno de los más fuertes ha sido dar la triste noticia de la muerte de su madre a Carlos. Ese reducto chiquito de la prisión donde estábamos con él, se cargó de toda la densidad humana de acompañar, estar, llorar, abrazar, callar…Salimos de allí en silencio y llevándolo en el corazón. “Sé que os ha sido duro darme esta amarga noticia, pero quiero agradeceros esos abrazos, esa comprensión, mejor así enterarme por gente que 90 ODN Anuario 2014 me quiere, porque de otra manera no sé cómo hubiera reaccionado”(Carta de Carlos ,de 41 años y con 20 de condena; lleva cuatro en la cárcel y en ese tiempo han muerto su padre y su madre) También me han hecho partícipe de momentos alegres, de disfrutar con ellos en representaciones de teatro, en días de puertas abiertas, con pequeños logros personales, con permisos bien vividos y también con risas distendidas ante sus anécdotas y ocurrencias. “Aquí sigo, tratando de mejorar, intentando pensar que va a ser para bien; quiero ganarme mi derecho a vivir en soledad, que por fin los míos se sientan orgullosos de mí”(Carta de Juan de 27 años, guineano. Vino a España por reagrupación familiar y ha sido expulsado a su país) Han sido significativos los momentos de acompañarlos a juicios en los que sólo podemos ofrecerles nuestra presencia silenciosa y nuestra mirada de apoyo y refuerzo. Las despedidas de personas inmigrantes expulsados a su país han estado cargadas de impotencia y de preguntas. He podido comprobar la importancia del permanecer al lado de…, la necesidad de que