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SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0005/2012
Sucre, 16 de marzo de 2012
SALA TERCERA
Magistrada Relatora: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de Libertad
Expediente: 00027-2012-01-AL
Departamento: La Paz
En revisión la Resolución 01/2012 de 20 de enero, cursante de fs. 59 a 62,
pronunciada dentro de la acción de libertad interpuesta por Amalia Quispe
Quispe en representación sin mandato de Javier Layme Flores contra Rafael
Alcón Aliaga, Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal y Liquidador de El Alto y
Lilian Calderón Mariaca, Fiscal de Materia adscrita a la División Menores, Trata y
Tráfico de Seres Humanos.
I.ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA
I.1. Contenido de la demanda
I.1.1. Hechos que motivan la acción
La accionante mediante memorial presentado el 17 de enero de 2012, cursante
de fs. 10 a 12, refiere que su esposo se halla detenido preventivamente de
manera ilegal desde el 18 de abril de 2011, habiendo transcurrido hasta la fecha
de presentación de esta acción nueve meses y que en ocho ocasiones solicito
cesación a la detención preventiva de su representado en audiencias que no
fueron instaladas por motivos ajenos a la defensa y atribuibles a la denunciante,
al Ministerio Público, a la defensoría y a la ausencia del Juez de la causa, es
decir, aun no se ha llevado a cabo la audiencia de medidas cautelares.
Aduce que su representado presento un incidente de actividad procesal
defectuosa, al amparo de los arts. 167 y 169 del Código de Procedimiento Penal
(CPP), toda vez que se inculpo a “Jaime Laime Flores”, persona distinta a Javier
Layme Flores y que en la imputación realizada por el supuesto delito de
Violación a Niño, Niña o Adolescencia existe error de tipicidad conformes
establece el art. 16 del Código Penal (CP), ya que con la prueba que acompaña
demuestra que la víctima al momento de la comisión del delito tenia 14 años de
edad, por lo que se encuentra indebidamente procesado
I.1.2. Derechos y garantías supuestamente vulnerados
La accionante estima vulnerados los derechos de su representado a la libertad
de locomoción, al debido proceso, a la seguridad jurídica y a la presunción de
inocencia, contenidos en los arts. 21.7, 109, 23 y 116 de la Constitución Política
del Estado (CPE), 11 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, 7 y 8
de la Convención Americana sobre derechos Humanos.
I.1.3. Petitorio
Solicita que se declare “procedente” la acción de libertad y consecuentemente,
se disponga la inmediata libertad de su representado, así también se sancione
con nulidad los actos realizados al margen de la ley.
I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías
Celebrada la audiencia pública el 20 de enero de 2012, según consta en el acta
cursante de fs. 57 a 58, se produjeron los siguientes actuados:
I.2.1. Ratificación de la acción
La accionante ni su abogado, concurrieron a la audiencia de consideración de la
acción de libertad presentada, pese a su legal notificación (fs. 20 vta.).
I.2.2. Informe de las autoridades demandadas
Por informe escrito cursante a fs. 21 y vta., Rafael Alcón Aliaga, Juez Cuarto de
Instrucción en lo Penal y Liquidador de El Alto, manifestó lo siguiente: El proceso
penal al que hace referencia la accionante, la etapa preparatoria ha culminado
con una acusación formal contra Javier Layme Flores. Por “Resolución 103/11 de
16 de abril de 2011, se ha dispuesto la detención preventiva de Javier Layme
Flores, por concurrir los requisitos previstos en el art. 233 del CPP y por ser
proporcional la medida solicitada con los hechos y riesgos procesales
demostrados, y no como la accionante sostiene, en sentido que existiría una
detención ilegal”; carece de veracidad lo indicado por la accionante en razón de
que no se hubiera atendido las solicitudes del imputado, por cuanto en las dos
oportunidades en que pidió el cese de su detención preventiva, estas fueron
rechazadas mediante las Resoluciones 366”A”/2011 de 9 de septiembre y
08/2012 de 12 de enero.
Por otra parte Lilian Calderón Mariaca Fiscal de Materia -codemandada-se
adhirió al informe del Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal, añadiendo que la
accionante no mencionó qué normas fundamentales y procesales fueron
vulneradas, por otro lado infiere que en la audiencia conclusiva, el abogado del
imputado dio su conformidad para resolver la actividad procesal defectuosa y la
cesación de la detención preventiva, donde se resolvió los aspectos
denunciados, afirmando que lo único que hizo el abogado de la defensa fue “dar
falsas esperanzas al detenido” por cuanto de la lectura de la demanda se
observo “un carnaval de peticiones contradictorias”, por lo que solicito se
rechace la presente acción de libertad.
I.2.3. Resolución
El Juez Primero de Partido y Sentencia de El Alto, por Resolución 01/2012 de 20
de enero, cursante de fs. 59 a 62, denegó la tutela solicitada en base a los
siguientes fundamentos: i) La autoridad judicial demandada señaló que las
solicitudes de señalamiento de audiencias de cesación a la detención preventiva
fueron suspendidas por negligencia del abogado defensor del detenido no
atribuibles al órgano jurisdiccional, por ende no se vulnero los derechos de
locomoción del detenido al debido proceso, a la seguridad jurídica, previsto en
los arts. 21.7, 23 y 109 de la CPE; ii) La autoridad demandada, invocando la SC
0619/2005 de 7 de junio , mediante Resolución 08/2012 de 12 de enero, en
audiencia conclusiva, rechazo el incidente de actividad procesal defectuosa y la
solicitud de cesación de detención preventiva, aduciendo que los motivos que
fundaron la presente acción de libertad fueron resueltos en dicho acto, si bien la
indicada Resolución 08/2012, agravio los intereses del detenido, esta acción
constitucional no es el mecanismo idóneo para reparar algún agravio de un fallo
judicial que admite recurso ulterior; y, los hechos denunciados por la parte
accionante refieren en su contenido total a los actos procesales realizados por el
Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal y Liquidador de El Alto, y no así a algún
acto procesal de la Fiscal de Materia lo que hace inviable la tutela en su contra.
I.3. Trámite procesal en el Tribunal Constitucional Plurinacional
En vigencia de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, se realizó el
sorteo del presente proceso el 15 de febrero de 2012, por lo que el
pronunciamiento de la Sentencia se encuentra dentro de plazo.
II. CONCLUSIONES
Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las
conclusiones que se señalan seguidamente:
II.1.Dentro del proceso penal seguido a denuncia de Sandra Mariela Bautista
Chambi contra Javier Layme Flores -ahora representado de la accionante-, por la
presunta comisión del delito de violación agravada de niño, niña o adolescente
previsto en el art. 308 BIS del CP, el Fiscal de Materia emitió imputación formal
en su contra, solicitando la aplicación de medidas cautelares personales de
detención preventiva (fs. 22 a 26), habiendo el dispuesto el Juez su detención
preventiva mediante Resolución 103/11 (fs.29 a 31).
II.2. Por memorial de 11 de noviembre de 2011(fs. 37 y vta.) el imputado solicita
al Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal y Liquidador de El Alto, fije día y hora
de audiencia de cesación de detención preventiva, sin embargo fue observado
por decreto de 12 de noviembre del mismo año, en sentido de que no se
adjunto la “documentación idónea que respalde su solicitud” (fs. 37 y vta.)
pedido que fue reiterado el 17 de noviembre(fs. 40), habiendo la autoridad
ahora demandada fijado la audiencia para el 29 del mismo mes mediante
decreto de 18 de noviembre (fs. 41).
II.3. En la fecha fijada para la audiencia de cesación de la detención preventiva
(29 de noviembre de 2011), el Secretario del Juzgado Cuarto de Instrucción en lo
Penal mediante nota suspendió la audiencia y dispuso que las partes soliciten
nuevo día y hora de audiencia, con el argumento que el Juez titular se
encontraba de vacaciones y la Juez suplente tenia otras audiencias programadas
y actuaciones procesales a su cargo.
II.4.El Juez de Instrucción Mixto, Liquidador y cautelar de Corocoro de la
provincia Pacajes en suplencia legal del Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal y
Liquidador de El Alto suspendió la audiencia de cesación de detención
preventiva, según consta en el acta de 14 de diciembre de 2011 con el
argumento de que el imputado no se encontraba con su abogado defensor (fs.
48).
II.5.Por memorial presentado el 19 de diciembre de 2011 (fs.49), el imputado
nuevamente solicitó día y hora de audiencia de cesación de detención
preventiva, habiendo el Juez señalado audiencia conclusiva para el 29 de
diciembre de 2011 (fs. 49 vta.), fecha en la cual la autoridad judicial demandada
nuevamente suspendió la audiencia y dispuso que las partes interesadas
soliciten nuevo día y hora de audiencia, aduciendo que no se presentaron las
pruebas de cargo y descargo, además de la inasistencia de la defensa técnica del
imputado (fs. 50).
II.6.En la misma fecha el imputado solicitó nuevo día y hora de “incidente de
cesación a la detención preventiva” (fs. 51), audiencia que fue fijada para el 12
de enero de 2012 (fs. 51 vta.).
II.7. Celebrada la audiencia pública de cesación a la detención preventiva de 12
de enero de 2012, mediante Resolución 08/2012 de 12 de enero (fs. 54 a 55
vta.) el juez demandado rechazó los incidentes de actividad procesal defectuosa
así como el cese a la detención preventiva del imputado. Esta resolución no fue
apelada conforme lo dispuesto por el art. 403 de CPP.
III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO
La accionante alega la vulneración de los derechos fundamentales y garantías
constitucionales a la libertad de locomoción, al debido proceso, a la seguridad
jurídica y a la presunción de inocencia de su representado, toda vez que: 1) No
obstante de que en ocho oportunidades solicito la cesación a la detención
preventiva, el Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal y Liquidador demandado,
no fijó ni instaló la audiencia de consideración de cesación a la detención
preventiva, por motivos ajenos a su representado y mas bien atribuibles a la
denunciante, Ministerio Público, Defensoría y a la ausencia del Juez demandado
quien gozaba de vacaciones, sin que hasta la fecha -de interposición de la
presente acción- se haya llevado la audiencia de medidas cautelares;2) El
imputado presentó un incidente de actividad procesal defectuosa por que se
imputó a “Jaime Laime Flores”, persona distinta a Javier Layme Flores y existía
error de tipicidad en la calificación del hecho por cuanto la imputación fue
realizada por el supuesto delito de violación de niño, niña o adolescente
conforme establece el art. 16 del CP; sin embargo la victima tenia 14 años de
edad al momento de la presunta comisión del hecho delictivo denunciado. En
consecuencia corresponde determinar en revisión, si se concede o no la tutela
solicitada.
III.1.De la finalidad y los alcances de la acción de libertad
La acción de libertad ha sido instituida por el art. 125 de la CPE, que tiene por
finalidad la protección de los derechos a la vida y a la libertad, cuando la
persona creyera estar ilegalmente perseguida, indebidamente procesada o
privada de su libertad o considere que su vida está en peligro.
Esta norma constitucional es más amplia en cuanto a su ámbito de protección,
pues se extiende al derecho a la vida, la libertad física o personal, el debido
proceso, en lo que se refiere al procesamiento indebido y la libertad de
locomoción, ésta última dada la íntima relación que existe con el derecho a la
libertad física.
Así la SC 0011/2010-R de 6 de abril, estableció que: “La acción de libertad, es
una acción jurisdiccional de defensa que tiene por finalidad proteger y/o
restablecer el derecho a la libertad física o humana, y también el derecho a la
vida, …sea disponiendo el cese de la persecución indebida, el restablecimiento
de las formalidades legales y/o la remisión del caso al juez competente, la
restitución del derecho a la libertad física, o la protección de la vida misma,
motivo por el cual se constituye en una acción tutelar preventiva, correctiva y
reparadora de trascendental importancia que garantiza como su nombre lo
indica, la libertad, derecho consagrado por los arts. 22 y 23.I de la CPE”.
Sin embargo, en cuanto a los alcances de protección que brinda la actual acción
de libertad la SC 0199/2010-R de 24 de mayo, reiterando lo previsto por la SC
0160/2005-R de 23 de febrero, aclaró lo siguiente: “No obstante, la naturaleza
de esta acción tutelar, al constituirse en un mecanismo de protección contra las
lesiones al derecho a la libertad, y medio eficaz e inmediato reparador de ese
derecho; empero la existencia de esta garantía constitucional, no implica que
todas las lesiones al derecho a la libertad tengan que ser necesariamente
reparadas de manera exclusiva y excluyente a través del hábeas corpus,
actualmente acción de libertad; pues no se trata de una garantía que tenga la
vocación de reparar, en exclusiva, todas las formas de lesión a la libertad que
pudieran invocarse, sino la de dotar a la persona de un medio de defensa
sencillo, eficaz y oportuno, para restablecer la lesión sufrida” (las negrillas nos
corresponde).
III.2.Sobre el trámite de las solicitudes de cesación de detención preventiva al
amparo del art. 239 del CPP regidas por el principio de celeridad procesal
Conforme la uniforme línea jurisprudencial del Tribunal Constitucional, todas las
solicitudes vinculadas a la libertad personal y de locomoción tienen que
tramitarse y regirse por el principio de celeridad.
Así, la SC 0248/2002-R de 8 de marzo, citando jurisprudencia desde el año 2001,
en un caso, en el que el Juez demandado no resolvió la petición de cesación de
detención preventiva en la audiencia señalada para el efecto aduciendo
ausencia del Ministerio Público, el Tribunal Constitucional, concedió la tutela y
dispuso que dicha autoridad judicial resuelva la cesación de detención
preventiva solicitada por los detenidos con la mayor celeridad, con los
siguientes argumentos:
“… la uniforme jurisprudencia constitucional contenida en las Sentencias
Constitucionales 792/2001-R y 1036/2001-R, entre otras, ha establecido que la
petición de cesación de detención preventiva debe ser resuelta de manera
inmediata, ya que es una solicitud que está vinculada al restablecimiento de un
derecho fundamental como es el derecho a la libertad, que no puede ser
restringido ni suprimido en forma arbitraria; lo contrario significa prolongar
indebidamente la detención e incurrir en un procesamiento y detención
indebidos.
Que esta línea jurisprudencial es aplicable al presente asunto, toda vez que el
Juez recurrido suspendió la audiencia señalada para resolver la cesación de
detención preventiva, arguyendo la ausencia de la autoridad fiscal, sin tomar en
cuenta que ese acto procesal no podía ser suspendido por ningún motivo y
menos por ausencia de los sujetos procesales, dado que los preceptos legales
invocados no pueden de ninguna manera dilatar el procedimiento en cuestión,
al estar en juego el derecho a la libertad de los detenidos. Que con esa falta de
pronunciamiento oportuno, el juzgador demandado ha prolongado la privación
de libertad de los representados de la recurrente y los ha hecho objeto de una
detención y procesamiento indebidos, en flagrante violación del derecho a la
libertad consagrado en el art. 6 de la Constitución Política del Estado, y del art.
16 del mismo texto constitucional que resguarda el derecho a ser juzgado sin
dilaciones indebidas; derecho que guarda concordancia con el principio de
celeridad procesal que debe regir en todo proceso por disposición de los arts.
116-X de la Constitución Política del Estado y 8-1 del Pacto de San José de Costa
Rica. Que la circunstancia de que exista un señalamiento de audiencia para el 31
de enero de 2002, de ninguna manera hace desaparecer la ilegal dilación que ha
sufrido la petición referida” (las negrillas nos pertenecen).
En ese mismo sentido, la SC 0078/2010-R de 3 de mayo fue complementada por
la 0384/2011-12, citando la SC 0224/2004-R de 16 de febrero, recogiendo y
reiterando los fundamentos constitucionales sobre la referida línea
jurisprudencial, señaló que si bien no existe una norma procesal penal que
expresamente disponga un plazo máximo en el cual deba realizarse la audiencia
que resuelva una medida cautelar vinculada al derecho a la libertad personal o
al de locomoción, sostuvo que dicha línea jurisprudencial se sustenta en la
interpretación del valor dignidad y libertad (art. 8.II de la CPE) con relación al
deber de los jueces de observar el principio de celeridad procesal (art. 180.I de
la CPE), a cuyo efecto, desarrolló las siguientes sub reglas:
“Bajo la égida que el derecho a la libertad ocupa un lugar importante, junto a la
dignidad humana en el catálogo de derechos civiles como parte integrante a su
vez de los derechos fundamentales, tal cual lo establece el art. 22 de la CPE al
señalar que: 'La dignidad y la libertad de la persona son inviolables. Respetarlas
y protegerlas es deber primordial del Estado', norma que debe ser interpretada
en base a los valores de la misma Constitución, la cual en el art. 8.II establece
que el Estado se sustenta en los valores de dignidad y libertad, entre muchos
otros; se debe tener en cuenta que la restricción o límite al derecho a la libertad
física en materia penal, con carácter provisional o cautelar, conforme a los
requisitos constitucionales y legales, tienen naturaleza instrumental y por ende
modificable.
De acuerdo al sistema procesal penal vigente, plasmado en la Ley 1970 o Código
de Procedimiento Penal, el art. 239, establece los casos en que procede la
cesación de la detención preventiva, empero, el presente análisis no se aboca a
los casos particulares, a ninguno de los incisos del art. 239 del CPP, ni a los
aspectos positivos o negativos, legales o doctrinales, o a su interpretación o
efectos, sino sólo y exclusivamente a aspectos generales como es la celeridad en
su trámite una vez efectuada la solicitud.
En ese sentido, es preciso puntualizar que la detención preventiva, no tiene por
finalidad la condena prematura, por cuanto la presunción de inocencia, sólo es
desvirtuada ante un fallo condenatorio con calidad de cosa juzgada, por ello su
imposición como medida precautoria está sujeta a reglas, como también su
cesación, lo cual implica el trámite a seguir; y si bien no existe una norma
procesal legal que expresamente disponga un plazo máximo en el cual debe
realizarse la audiencia de consideración, corresponde aplicar los valores y
principios constitucionales, previstos en el ya citado art. 8.II de la CPE, referido
al valor libertad complementado por el art. 180.I de la misma norma
constitucional, que establece que la jurisdicción ordinaria se fundamenta en el
principio procesal de celeridad entre otros; motivo por el cual toda autoridad
jurisdiccional que conozca una solicitud de un detenido o privado de libertad,
debe tramitar la misma, con la mayor celeridad posible, y dentro de los plazos
legales si están fijados, y en un plazo razonable, si no está establecido por ley.
De no ser así, tal actuación procesal provocaría efectos dilatorios sobre los
derechos del detenido y en consecuencia repercute o afecta a su libertad que de
hecho ya está disminuida por la sola privación de libertad en que se encuentra,
sin que este razonamiento implique que necesariamente se deba deferir a su
petición, sino, se refiere a que sea escuchado oportunamente a fin de que
obtenga una respuesta positiva o negativa.
En consecuencia, se considera acto dilatorio en el trámite de la cesación de la
detención preventiva, cuando:
a) En lugar de fijar directamente la fecha y hora de la audiencia y notificar a
las partes, se dispongan traslados previos e innecesarios no previstos por
ley.
b) Se fije la audiencia en una fecha alejada, más allá de lo razonable o
prudencial. Plazo que puede ser en un límite de tres o cinco días máximo,
dependiendo de la particularidad de cada caso, cuando por ejemplo
existan varias partes imputadas o víctimas múltiples que tengan que ser
notificadas, o por la distancia donde se deba efectuar un determinado
acto previo y esencial -como sucede con algunas notificaciones-, o que el
juzgado esté de turno, etc. Con la excepción única y exclusiva en los casos
que exista complejidad por la naturaleza propia y la relevancia del
proceso, como los derechos e intereses comprometidos y relacionados a
la petición; situación que deberá ser justificada por la autoridad judicial
competente a momento de señalar la fecha de audiencia, teniendo en
cuenta la razonabilidad.
c) Se suspende la audiencia de consideración, por causas o motivos que no
justifican la suspensión, ni son causales de nulidad. Tal el caso de la
inasistencia del representante del Ministerio Público o de la víctima y/o
querellante, si es que han sido notificadas legalmente y no comparecen a
la audiencia. En el caso del Ministerio Público al estar regido por el
principio de unidad tiene los medios para asistir a través de otro fiscal, y
en cuanto al querellante al ser coadyuvante y estar notificado, su
participación es potestativa en dicho acto, y por ende, su inasistencia no
vincula a la autoridad jurisdiccional al estar cumplida la formalidad. No
obstante, en caso de que la suspensión se deba a la falta de notificación o
a la inasistencia del propio imputado, no existe dilación indebida ni
afectación a derecho alguno, en cuyo caso deberá fijarse nueva fecha de
audiencia conforme a las directrices expuestas”.
III.3.Análisis del caso
III.3.1.Respecto a la dilación en el señalamiento de audiencia de cesación a la
detención preventiva
En el caso de examen, se evidencia que dentro del proceso penal seguido contra
el representado de la accionante por la supuesta comisión del delito de
violación agravada de niño, niña o adolescente tipificado en el art. 308 BIS del
CP, el imputado solicitó en varias oportunidades se fije día y hora de audiencia
para la consideración de la cesación de su detención preventiva; sin embargo,
sus solicitudes no fueron atendidas con la prontitud y diligencia debida
ocasionando dilación en su tramitación y consideración.
En efecto, las dilaciones injustificadas respecto de la tramitación de la cesación
de detención preventiva se pueden advertir que en las resoluciones y decisiones
del Juez demandado, quien ante la primera solicitud del imputado realizada el
11 de noviembre de 2011, en lugar de señalar día y hora de audiencia observó la
falta de documentación idónea. Posteriormente, pese a que el imputado reiteró
su petición el 17 de del mismo mes y año, fijó audiencia para el 29 de ese mes y
en la fecha fijada para su realización, ésta no se llevó a cabo suspendiéndose
porque el Juez titular se encontraba de vacaciones y la Juez suplente tenía otras
audiencias programadas y actuaciones procesales a su cargo, conforme señaló
el Secretario del Juzgado Cuarto de Instrucción en lo Penal y Liquidador de El
Alto, mediante nota de 29 de noviembre del mismo año (fs. 43) quien además,
atribuyéndose funciones jurisdiccionales que no le competen suspendió la
audiencia establecida para esa fecha y dispuso que las partes soliciten nuevo día
y hora para la realización de la misma.
Ulteriormente, el Juez de Instrucción Mixto, Liquidador y cautelar de Corocoro
de la provincia Pacajes, en suplencia legal del Juez Cuarto de Instrucción en lo
Penal, también suspendió la audiencia de cesación de detención preventiva,
según consta en el acta de audiencia pública de cesación a la detención
preventiva de 14 de diciembre de 2011, con el argumento de que el imputado
no se encontraba con su abogado defensor (fs. 48).
No obstante a que el imputado nuevamente pidió día y hora de audiencia de
cesación a su detención preventiva, por memorial de 19 de diciembre de 2011
(fs. 49) el Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal y Liquidador señaló audiencia
conclusiva, para el 29 del mismo mes y año (fs. 49 vta.), fecha en la cual
nuevamente suspendió la audiencia y dispuso que las partes interesadas
soliciten nuevo día y hora de audiencia, aduciendo el mismo argumento, esto
es, que no se presentaron las pruebas de cargo y de descargo y que no asistió la
defensa técnica del imputado (fs. 50); por lo que el mismo día el imputado instó
nuevo día y hora de “incidentes de cesación a la detención preventiva” (fs. 51),
audiencia que se señaló para el 12 de enero de 2012 (fs. 51 vta.), fecha en la que
rechazó los incidentes de actividad procesal defectuosa así como el cese a la
detención preventiva del imputado.
De lo señalado se evidencia que el Juez demando en algunas oportunidades no
fijó día y hora de audiencia de consideración de la cesación de detención
preventiva y en otras, suspendió injustificadamente las mismas, sin tener en
cuenta que no constituye justificación razonable dilatar su trámite porque el
imputado no adjuntó la prueba a tiempo de la solicitud, en razón a que ésta
puede ser aportada en la audiencia. De otro lado, tampoco constituye causal de
suspensión de audiencia la inasistencia del abogado defensor del imputado, en
razón a que la autoridad judicial, precautelando el derecho a la defensa técnica
del imputado, debió nombrar un defensor de oficio, con mayor razón si la
solicitud de cesación fue impetrada el 11 de noviembre de 2011.
III.3.2. Respecto de la resolución que resuelve la actividad procesal defectuosa
La parte accionante señala que presentó un incidente de actividad procesal
defectuosa en mérito a que se imputó a “Jaime Layme Flores” que es persona
distinta a Javier Layme Flores y que existe un error de tipicidad con relación a la
calificación del delito y que su esposo estaría indebidamente procesado,
además que la acusación presentada por la autoridad fiscal lo realizó
extemporáneamente.
El art. 167 del CPP, señala que “No podrán ser valorados para fundar una
decisión judicial ni utilizados como presupuestos de ella, los actos cumplidos
con inobservancia de las formas y condiciones previstas en la Constitución
Política del Estado, Convenciones y Tratados Internacionales vigentes y en este
Código, salvo que el defecto pueda ser subsanado o convalidado”, es decir que
todos los actos que vulneren derechos o garantías constitucionales, o no se
encuadren a los principios procedimentales establecidos en las citadas leyes y
fundamentalmente en el referido Código, simple y llanamente serán nulos.
Según informa los antecedentes del proceso, se evidencia que la Resolución
08/2012 pronunciada por la autoridad ahora demandada, rechazó el incidente
planteado, toda vez que a criterio del juzgador demandado las observaciones
procesales realizadas por la defensa técnica y que fueron objeto del incidente
planteado se enmarcaron dentro de las normas procedimentales, y
considerando el carácter subsidiario de la presente acción, si la Resolución
invocada vulneró alguno de sus derechos fundamentales, previamente a acudir
a la justicia constitucional, debieron agotar los recursos establecidos en el
Código de Procedimiento Penal, que de acuerdo a las SSCC 0636/2010-R y
1465/2011-R, han cambio de línea jurisprudencial el entendimiento
desarrollado en la SC 0636/2010-R de 19 de julio, indicando que el incidente de
actividad procesal defectuosa es susceptible de apelación incidental conforme
establece el art. 403 del CPP, para que el tribunal de alzada, previa verificación
de alguna irregularidad o arbitrariedad que exista en la Resolución emitida por
el Juez ahora demandado, disponga su corrección, pero al no haberlo hecho,
desconociendo los mecanismos que franquea la propia ley, y al utilizar la
presente acción como medio de defensa de sus intereses, no cumplieron con la
subsidiariedad excepcional de la acción de libertad, correspondiendo denegar la
tutela.
Del derecho a impugnar incidentes de actividad procesal defectuosa en materia
penal
El art. 394 del CPP, señala:“Las resoluciones judiciales serán recurribles en los
casos expresamente establecidos por este Código, el derecho a recurrir
corresponderá a quien le sea expresamente permitido por ley…”, artículo que es
concordante con el art. 8 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos
y en el art. 180.II CPE establece como una garantía el principio a la impugnación
en los procesos judiciales, así la SC 0636/2010-R, modificó la línea
jurisprudencial indicando que en los incidentes de actividad procesal defectuosa
son apelables y debe interpretarse bajo el marco del art. 403 inc. 2) del CPP, que
constituye como resolución recurrible.
Asimismo, la SC 1465/2011-R de 10 de octubre, hace una diferenciación entre lo
que es la excepción y el incidente; conceptuando a la primera como un motivo
jurídico que se utiliza para defenderse u oponerse a la acción incoada; y, la
segunda como aquella cuestión procesal vinculada con el proceso principal,
aunque independiente de él, pero cuya resolución es necesaria para resolver.
III.4.Falta de legitimación pasiva de la Fiscal de Materia codemandada
La SC 0691/2001-R de 9 de julio, entiende a la legitimación pasiva como “… la
calidad que se adquiere por la coincidencia que se da entre la autoridad que
presuntamente causó la violación a los derechos y aquélla contra quien se dirige
la acción”; en el presente caso no se ha llegado a establecer el vínculo causal
que hubiera existido respecto a los presuntos derechos, garantías y principios
que fueron invocados por la accionante, razón por la que ésta autoridad carece
de legitimación pasiva para ser demandada en la presente acción ya que no
especificó de que modo con su accionar hubiera incidido sobre la libertad de su
representado.
En consecuencia el Juez de garantías, al denegar la acción tutelar respecto del
Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal de El Alto no ha actuado correctamente.
POR TANTO
Por lo expuesto el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera en
virtud de la autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado
Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional
Plurinacional en revisión resuelve:
1º CONCEDER la tutela impetrada, respecto al Juez Cuarto de Instrucción en lo
Penal de El Alto, con relación a la dilación injustificada en la tramitación de la
cesación de detención preventiva incoada por el representado de la accionante,
sin ingresar al análisis de la Resolución que resolvió la cesación de detención
preventiva.
2º APROBAR la Resolución 01/2012 de 20 de enero de 2012; respecto a la Fiscal
de Materia adscrita a la División Menores, Trata y Tráfico de Seres Humanos de
El Alto.
Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional
Fdo. Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
MAGISTRADA
Fdo. Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños
MAGISTRADA
http://www.tribunalconstitucional.gob.bo/modules/ver_resolucion/indexnew.php?id=124099
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