1962-1964. El Sevilla, en la recopa de Europa

1962-64. El Sevilla, en la Recopa de Europa
En la temporada 1962-63, el Sevilla participa en la Recopa de Europa, aunque
su actuación no fue muy brillante, ya que quedó eliminado a las primeras de cambio.
El conjunto hispalense se había clasificado para la competición europea en la
campaña anterior en calidad de subcampeón de la Copa del Generalísimo, debido a
que el Real Madrid fue el Campeón de esta competición y ya había vencido en el
torneo liguero, por lo que ocupó su plaza en la Copa de Europa de Campeones.
1) Un paseo fugaz por Europa.
El bombo europeo emparejó en la primera ronda al Sevilla con el conjunto escocés
del Glasgow Rangers. El primer partido se jugó el 6 de septiembre de 1962 en el
estadio Ibrox Park, ante unos sesenta mil espectadores y bajo una lluvia torrencial. El
Sevilla, entrenado por Antonio Barrios y con Moreno Ortega como máximo
mandatario, alineó el siguiente equipo: Mut; Juan Manuel, Campanal, Luque; Ruiz
Sosa, Achúcarro; Canario, Diéguez, Areta, Mateos y Moya.
Desde el primer momento se evidenció sobre el terreno de juego una clara
superioridad del equipo británico, que se plasmó en el marcador en un contundente
resultado final de cuatro tantos a cero. Los dos primeros goles fueron marcados en los
minutos 14 y 17 por delantero centro escocés Miller, al que sus aficionados conocían
con el sobrenombre de “El Enterrador” por su gran capacidad goleadora.
Tras esta primera avalancha de juego por parte del Glasgow Rangers, el colegiado
del encuentro anuló una diana al sevillista Mateos por fuera de juego. Se llegó al
descanso del encuentro con el resultado de dos goles a cero a favor de los locales.
En la segunda mita no cambiaron las cosas y el Sevilla aguantó el vendaval como
pudo. Así, fue nuevamente Miller quien marcó en el minuto sesenta. Sólo uno más
tarde, Brand establecía el definitivo 4-0.
2) El partido de vuelta.
A pesar e la amplia derrota sufrida en la capital escocesa, lo sevillistas más
optimistas guardaban esperanzas de poder remontar la eliminatoria en el partido de
vuelta, que pasaría a la historia como el primer encuentro internacional de carácter
oficial jugado en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán. El partido se disputó en la noche
del 26 de septiembre y el estadio hispalense registró un lleno casi absoluto.
Barrios alineó el mismo once que en el partido de ida, con la única variación de la
inclusión de rivera en sustitución de Moya, además de algunos cambios tácticos y
estratégicos en la situación de los jugadores sobre el terreno de juego.
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A los siete minutos del comienzo del encuentro, el Sevilla se adelantó en el
marcador con un tanto de Diéguez, que aprovechó el rechace del guardameta Ritchie
a un duro disparo de Mateos. A pesar de que el conjunto hispalense tuvo más
oportunidades de gol, se llegó al final de los primeros cuarenta y cinco minutos con la
mínima ventaja.
En la continuación, el Sevilla no pudo remontar la eliminatoria y sólo consiguió un
segundo gol, obra de Mateos, al minuto de juego del segundo período. Poco antes de
finalizar el encuentro se produjo un triste incidente, cuando una violentísima entrada
de Baxter a Oliveros supuso la chispa que desató una auténtica batalla campal sobre
el terreno de juego, en la que participaron la mayoría de los jugadores de ambos
equipos. El partido finalizó con el resultado de dos tantos a cero favorable al conjunto
blanco, tanteo insuficiente para continuar adelante en la competición europea.
3) Una Liga mediocre.
Aunque la participación en la Recopa de Europa había levantado gran expectación
entre los seguidores sevillistas, lo cierto es que la temporada no pudo ser pero para el
club hispalense. En la Liga no levantaría cabeza y los malos resultados obligaron a la
Directiva a realizar cambios en el banquillo. Antonio Barrios fue sustituido por el
mítico cancerbero del club José María Busto. Posteriormente, debido a que os
resultados no mejoraban, éste dejaría su cargo a Diego Villalonga.
El equipo blanco quedó finalmente clasificado en undécimo lugar de la tabla
clasificatoria, con veintisiete puntos y tres negativos, tras ganar once partidos,
empatar cinco y perder catorce.
4) Eliminado por el Betis en la Copa.
En la Copa del Generalísimo de esta temporada, el Sevilla comenzó eliminando al
Jaén en dieciseisavos de final, al derrotarle en los dos partidos por 2-0 y 0-1.
En los octavos de final le tocó en suerte el Real Betis, al que se tuvo que enfrentar
por segundo año consecutivo en esta competición. En esta ocasión y a diferencia de la
anterior, la victoria correspondería a los verdiblancos.
El primer partido de la eliminatoria se jugó el 12 de mayo de 1963 en el Benito
Villamarín y fue arbitrado por el colegiado navarro Zariquiegui.
José María busto alineó para el derby de máxima rivalidad al siguiente equipo:
Manolín; Juan Manuel; Campanal II, Valero; Luque, Achúcarro; Agüero, Mateos,
Ruiz Sosa, Rivera y Oliveros.
Por el Betis actuaron: Pepín; Colo, Ríos, Paquito; Bosch, Montaner; Pallarés,
Luis, Ansola, Lasa y Portilla.
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Según las crónicas de la época, el partido fue jugado de poder a poder y mientras
el primer tiempo fue de cierto dominio bético, en el segundo los visitantes se
mostraron superiores.
El equipo local se adelantó en el marcador con el tanto de Bosch en el minuto 22,
al aprovechar un rechace de Manolín. Ya en el segundo tiempo, el Sevilla logró la
igualada en el minuto 55, mediante un gol de Agüero al cabecear un centro de Rivera.
Los verdiblancos protestaron este tanto por considerar que fue conseguido en fuera de
juego, pero finalmente subió al marcador. Sin embargo, el resultado no quedó así, ya
que en el minuto 90 y cuando las agujas del reloj señalaban el final de partido, el
Betis consiguió el gol de la victoria, al aprovechar Ansola una cesión defectuosa de
Ruiz Sosa hacia su guardameta.
El partido de vuelta se disputó el 19 de mayo en el estadio Sánchez Pizjuán y el
Sevilla no pudo remontar la mínima ventaja verdiblanca, quedando apeado de la
Copa del Generalísimo. En el minuto 31, el Betis consiguió el primer tanto por
mediación de Luis; el Sevilla, que jugó un mal partido, se tuvo que conformar con el
empate a un gol, conseguido a siete minutos del final por mediación de Rivera al
rematar un centro pasado de Achúcarro.
5) Otto Bumbel, al frente de la plantilla.
En la temporada 1963-64, nuevamente el Sevilla cambia de técnico y Pedro Otto
Bumbel fue el hombre elegido para dirigir al conjunto hispalense. Los resultados no
mejoraron todo lo que se esperaba y el equipo blanco concluyó en noveno lugar de la
clasificación liguera, con 26 puntos y cuatro negativos, tras ganar nueve partidos,
empatar once y perder diez.
En la Copa del Generalísimo, la andadura no fue mucho más brillante, ya que tras
eliminar en la primera ronda al modesto Constancia por el tanteo global de dos goles
a uno, cayó en octavos de final frente al Español de Barcelona, ya que perdió en la
Ciudad Condal por 3-1 y en Sevilla sólo pudo empatar a cero.
En esta temporada comenzó la andadura presidencial de Juan López Sánchez,
sustituto en el cargo de máximo dirigente sevillista de Guillermo Moreno Ortega.
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