Los recién llegados se apropian y hacen mal uso del espacio público?

Los recién llegados se apropian y hacen mal uso del espacio público?
Las ciudades son construcciones col·lectivas en constante evolución. En nuestro entorno, los
procesos migratorios han hecho una contribución decisiva a la transformación social,
impulsando el cambio demográfico y aportando elementos de innovación en la vida de las
ciudades. [Fuente: Diputación de Barcelona]
Los barrios se reafirman como espacios de referencia que facilitan tanto la relación vecinal
como actividad cotidiana, desde la proximidad de los equipamientos, servicios públicos, zonas
de recreo, espacios públicos y oferta comercial.
El hecho migratorio se relaciona, de manera frecuente, con la aparición de problemas sobre el
uso del espacio público y la seguridad ciudadana. Si generalizamos, es cierto que la población
extranjera hace un uso más intensivo del espacio público por un montón de factores sociales,
económicos, familiares y de condiciones de la vivienda, entre otros. Pero no hay motivo
porque este uso más intensivo se considere incívico. [Fuente: Generalitat de Cataluña]
Hacer uso del espacio público es negativo o positivo ?. Para qué sirven las plazas, parques o
cruces de las ciudades si no es porque la población los utilice? ¿Qué problema hay en ocupar
estos espacios siempre que se haga desde un punto de vista respetuoso y sin molestar a los
demás ocupantes? Hay que sancionar el mal uso de los espacios públicos, pero esto no implica
que un uso más intensivo se pueda cuestionar o sancionar.
Los espacios públicos de las ciudades deberían ser puestos de cohesión social y no de disputas.
Las administraciones locales han hecho inversiones para crear espacios públicos,
infraestructuras y equipamientos. Ahora sería el momento de garantizar el libre acceso del
conjunto de la ciudadanía y velar por su mantenimiento y la calidad. Es imprescindible una
buena actuación y socialización de las plazas y los parques de la ciudad para que la ciudadanía
los sienta como propios y, como consecuencia, tenga más respeto por el entorno. Tener
cuidado de los espacios públicos se convierte en una responsabilidad de todos los ciudadanos
y ciudadanas de L'Hospitalet.