|5 Diario del AltoAragón / Sábado, 6 de junio de 2015 Cambiar las divagaciones por ilusiones Gabriela (50 años) “Me parece bien querer ser amado por tus hazañas y no por ser un miserable” Antonio Santos dirigió un taller creativo y firmó sus cuatro nuevos libros MYRIAM MARTÍNEZ HUESCA.- Las hazañas de los hé- roes griegos, referidas con entusiasmo por el ilustrador oscense Antonio Santos, sirvieron ayer de detonante para el desarrollo de un nuevo taller creativo en la Feria del Libro de Huesca, donde niños y niñas desplegaron todas sus dotes artísticas en la elaboración de las más variadas y originales máscaras. La cultura griega despierta un gran interés en Antonio Santos, quien destaca especialmente su influencia en la religión católica y la idea de la gloria que promueve. “Hay una frase muy bonita en la película Troya de Brad Pitt, que recomiendo ver porque es bastante fiel a la Iliada. Aquiles, hijo de la diosa Tetis y el rey mortal Peleo, decide ir a la guerra, y su madre le dice: si te quedas aquí, tendrás hijos y tus hijos tendrán hijos; y mientras tus hijos, tus nietos y todos los que te conocieron vivan, serás rcordado; y cuando mueran, desaparecerás. Si vas a Troya, tendrás la gloria, pero no volverás”. Antonio Santos valora esa idea de persecución de la gloria, “de querer dejar huella y ganarse el respeto de los demás”, y más en estos tiempos en los que, en su opinión, solo se tiene en cuenta el dinero. “Me parece bien querer ser amado, respetado y admirado por tus gestas y hazañas, y no por ser un miserable”, comenta. Por eso, el taller creativo de la feria se inició ayer con historias de héroes, dioses griegos, inventos y seres mitológicos, con referencias a las tragedias, las comedias y las epopeyas, con la Iliada y la Odisea. Y con cajas de cartón, hueveras, pinturas al temple, cúter y otros elementos que se fueron adhiriendo a las máscaras. Como ya había vaticinado Antonio Santos, los chavales fueron infalibles. Cuatro libros en 2015 Aunque Antonio Santos llegó a la feria con el objetivo primordial de impartir el taller, los lectores no quisieron dejar pasar la ocasión para que les firmara ejemplares de los cuatro libros (y otros anteriores) que ha publicado este año. Los títulos son El entierro de Genarín, de Julio Llamazares y editado por Alfaguara; La Verdadera muerte de Francisco Franco, de cuadernos del Vigía y con texto de Max Aub; La Metamor- Los niños y niñas crearon originales máscaras. PABLO SEGURA El ilustrador relató historias de los héroes griegos. PABLO SEGURA fosis de Franz Kafka, editada por Nórdica; y Kafka con sombrero, del mismo sello editorial y con texto de Jesús Marchamalo. La Verdadera muerte de Francisco Franco fue una “suerte” para el ilustrador de Lupiñén, porque Max Aub es un autor que le “encanta” por su originalidad, inteligencia y sentido del humor. “Empieza por reírse de sí mismo y en este libro también por algunos aspectos del bando republicano y fíjate que es un tema en el que, pocas bromas -observa el artista-. Y además, a mí, que estuve viviendo en México, es un libro que me encanta porque está lleno de mexicanismos y admiro cómo se impregnó del habla mexicana”. El entierro de Genarín es otro libro que le gusta mucho, porque entronca con la novela picaresca. “Es la historia de un desheredado, un borrachín nacido en el hospicio que malvive y que por el capricho de unos aficionados a la literatura pasa a ser una personalidad y se convierte en una leyenda. Es un texto muy bonito de Julio Llamazares”. La Metamorfosis fue una iniciativa suya, porque Kafka es un escritor que siempre le ha cautivado. Le presentó el proyecto a Diego Moreno, propietario de la editorial Nórdica, quien recibió muy bien la idea y decidió publicar el libro. “Éste era un libro que yo quería hacer, me daba igual que se publicase o no. Tengo bastantes libros en los cajones que no he logrado publicar”, señala. Kafka con sombrero lo define como “un trabajo entre tres amigos”, Diego Moreno, Jesús Marchamalo y él, que como resultado ha dado un libro. Después, han realizado una gira por varias ciudades para presentarlo, con una buena acogida. “Yo creo que Diego será uno de los grandes editores españoles con el tiempo, porque tiene todo para serlo: es trabajador, listo y mima a toda la gente que trabaja en un libro y eso es fundamental”, estima Santos. El ilustrador conoció recientemente a Francisco Uría en Zaragoza, un reconocido traductor del sueco al español, con dos Premios Nacionales. “Me contó que la labor del traductor no figura en ningún sitio y que en sesenta años de profesión, nunca le había felicitado nadie hasta hace cinco o seis años, cuando un joven fue ‘de propio’ a Zaragoza para decirle cuánto le gustaba su trabajo. Era Diego y eso es lo que le hace distinto a los demás, y lo que hace que sus libros sean diferentes. Los libros se hacen de dentro a fuera, y cuando tú mimas a todos los que intervienen en ellos, a lo mejor la mayoría de la gente no lo nota, pero te aseguro que eso está en el libro. Es lo que pensamos Marchamalo y yo, esos libros los haríamos gratis. Pero no se lo podemos decir a Diego”.