RIBUNALES egún recoge el Estatuto de los Trabajadores, en su artículo 67.3, los miembros del comité de empresa sólo dejarán de ejercer sus funciones de representación, antes de cumplir los cuatro años de duración normal, por los siguientes motivos: ..- Acuerdo de los trabajadores que los hayan elegido. c..- Mediante asamblea convocada al efecto. c..- Por dimisión del interesado. c..- Por extinción de la relación laboral. En este último supuesto, el despido habrá de ser procedente, dado que en caso contrario Ja posibilidad de privar temporalmente a los miembros del comité de empresa de todos sus derechos quedaría en manos del empresario y no de los trabajadores que los eligieron. De esta forma se evita que el empresario pueda proceder simplemente a despedir a los miembros del comité sin causa justa y pueda apropiarse de un derecho -el de elegir o reemplazar a un representante- que corresponde únicamente a los trabajadores. El supue to que nos ocupa analiza el conflicto colectivo promovido ante la Magistratura de Trabajo por el demandante, para que se reconozca que, si un representante de los trabajadores es despedido, conserva todos sus derechos y funciones de representación colectiva, hasta que se celebre el juicio de instancia que resuelva la impugnación del despido, y mientras tanto puede celebrar reuniones y asambleas con los trabajadore del centro de trabajo. Desestimada esta pretensión por Magistratura, el demandante recurrió al Tribunal Central de Trabajo, cuyo fallo reconoce la subsistencia del mandato representativo del miembro del comité de empresa durante la tramitación del proceso de despido. - S 11 Sentencia del Tribunal Central de Trabajo El representante sindical mantiene sus funciones mientras se tramita la demanda de despido Los miembros del comité de empresa tienen derecho a conservar plena e íntegramente sus competencias y garantías, así como la posibilidad de ejercerlas en la práctica, desde el despido hasta que se celebre el juicio correspondiente ante la Magistratura de Trabajo, y niantienen el derecho a celebrar reuniones y asanibleas en el interior del centro de trabajo Fundamento de Derecho de la Sala 5.ª del Tribunal Central de Trabajo " ... tal como lo configura y reconoce el Título 11 del Estatuto de los Trabajadores, el art. 67.3 de la propia Ley estatutaria da a entender que el mandato de los miembros del comité de empresa únicamente pierde eficacia, antes de concluir los cuatro años de duración normal, por acuerdo de los trabajadores que los hayan elegido, mediante asamblea convocada al efecto, por dimisión del interesado y por extinción de la relación laboral, siendo este último supuesto el que se controvierte ahora, a fin de precisar si la resolución laboral queda absoluta y definitivamente extinguida desde que e: empresario adopte la decisión de despedir al representante, con la consecuencia obligada de que ese acto extingue a su vez los derechos de representación sindical. Prescindiendo ahora de cual sea el calificativo que mejor cuadre a la situación en que se encuentra la relación jurídica laboral desde el despido hasta la sentencia, cabe subrayar que la impugnación del despido presupone que la decisión del empresario queda sometida a la condición que implica el signo (12-04-88) del fallo que pueda dictarse, de suerte que solamente cuando el despido sea calificado de procedente la medida disciplinaria surte efectos desde el momento en que fue adoptada, pero no sucede igual cuando el despido se declare nulo o improcedente pues, además de privarle de efectos, la opción por la readmisión o la indemnización corresponde siempre al representante legal de los trabajadores consiguiente; de seguirse la tesis de la sentencia, quedaría en manos del empresario la posibilidad de privar temporalmente a los miembros del comité de empresa de todas sus prerrogativas y derechos, procediendo simplemente a despedirlos sin causa justa, y si a esto se añade que no es el derecho personal y privativo del despedido el que está en juego sino el prevalente del conjunto de los trabajadores que lo eligieron, debe accederse a lo pedido para garantizar, durante el periodo de tiempo a que se refieren las peticiones, la subsistencia del derecho de representación colectiva de todos los trabajadores de la empresa, al menos hasta que transcurran los 20 días hábiles que para impugnar el despido concede el art. 59.3 del Estatuto de los Trabajadores, como plazo de caducidad, si es que en el mismo no ha reclamado el representante contra el despido." MARZO -ABRIL 1992 METAL 15