214-98. Cáceres vrs. Instituto Salvadoreño de Protección al Menor

Anuncio
214-98. Cáceres vrs. Instituto Salvadoreño de Protección al Menor
SALA DE LO CONSTITUCIONAL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: Antiguo
Cuscatlán, a las quince horas con cuarenta minutos del día once de junio de mil novecientos
noventa y ocho.
El presente proceso de Hábeas Corpus ha sido solicitado por el profesor Roberto Antonio
Cáceres, a favor de la menor MARÍA DEL ROSARIO CÁCERES GONZÁLEZ, quien se
encuentra internada por orden del Instituto Salvadoreño de Protección al Menor, y a la
orden del Juez de Familia de Apopa, en el Centro de Reeducación Rosa Virginia Pelletier.
Manifiesta el solicitante que considera que la detención de la favorecida es ilegal y
violatoria de derechos constitucionales, porque ella no ha cometido ningún hecho delictivo
ni falta alguna que amerite su reclusión en ninguna institución correctiva gubernamental.
El Juez Ejecutor es de la opinión, que los cuidados propios de la niñez corresponden a los
padres, y que la detención de la favorecida en el centro de reeducación es violatoria de los
derechos de la misma, ya que se ha tomado como primera medida correctiva, dejando fuera
otro tipo de procedimientos.
Esta Sala advierte que a fs. 31 del expediente de familia, se encuentra la resolución que
atiende al escrito de fecha veintisiete de abril de este año, presentado por el señor Roberto
Antonio Cáceres al Juzgado de Familia de Apopa, resolución en la que el juez le
manifiesta: "Es de aclarar al señor (...), que su hija (...), ha sido internada para su propia
recuperación, tanto en el ámbito correctivo como su orientación emocional, ya que según lo
manifestado por su madre a fs. 1 su mencionada hija se fue con un joven perteneciente a las
maras ya que se asocia a ellos en su tiempo fuera de casa y le manifestó no querer regresar
con ella al hogar; tomando en consideración lo expuesto por la madre señora (...), a quien se
concedió provisionalmente el cuido y guarda de (...), en el Juzgado Primero de Familia de
San Miguel, según consta a fs. 2, este Tribunal conforme a los derechos fundamentales tal
como lo establecen los Arts. 351 y 352 del Código de Familia respecto de los derechos
fundamentales de los menores así como sus obligaciones; se le hace ver que su
internamiento no obedece a un acto arbitrario sino como medida cautelar o un beneficio
rehabilitador en favor de su hija, para que no se sigan vulnerando sus derechos y deberes,
puestos en riesgo y se cumpla eficazmente la corrección y orientación de la misma, siendo
que en esta ocasión se auxilió de un tercero (Instituto Salvadoreño de Protección al Menor)
para llevar a cabo en forma adecuada y moderada su cuido, guarda, corrección y
orientación tal como se establece en los artículos 212, 215, 216 y 223 del Código de
Familia, en vista que su padre y madre no han podido ejercer tal deber; es de hacer notar
que en dicha institución también reciben estudio y enseñanzas técnicas para que sea
persona de provecho en el futuro; y no precisamente dicha orden de internamiento obedece
a que la menor (...) haya infringido una norma penal o sea producto de una sanción de esa
naturaleza, ya que eso es de competencia de otros tribunales. El suscrito se abstiene de
resolver sobre la petición hecha hasta que se complementen las diligencias actuadas en el
Juzgado Primero de Familia de San Miguel; lo anterior sin menoscabar el derecho del
peticionario de ejercer el derecho de visita en el centro reeducativo donde se encuentra su
hija...".
La resolución transcrita se considera esencial, por cuanto esta Sala comparte el criterio ahí
vertido, respecto de que la medida adoptada para la menor Cáceres González, no es una
medida penal en su contra por haber cometido alguna falta o delito; sino se trata de una
medida cuyo objetivo es el de conseguir un resultado correctivo tanto en su formación
emocional como académica, lo cual está legalmente permitido tal como se prescribe en el
art. 215 del Código de Familia. Además no resulta cierto que es la primera medida tutelar
que se toma para la favorecida, pues consta a fs. 2 que inicialmente luego de vivir ésta con
el padre, el Juzgado Primero de Familia de San Miguel, concede el cuidado personal a la
madre, con lo cual según aparece en el expediente respectivo tampoco se obtuvo un
resultado favorable. Por lo que en el presente caso, no considerándose existir violaciones a
derechos fundamentales de la menor favorecida, no es procedente acceder a la petición de
Hábeas Corpus solicitada.
Por lo antes expuesto, este Tribunal resuelve: a) Continúe el procedimiento seguido a la
favorecida MARÍA DEL ROSARIO CÁCERES GONZÁLEZ, en calidad de riesgo, peligro
y localización, según su estado; b) Vuelva el proceso al Tribunal de origen con certificación
de esta resolución; y c) Archívese el presente proceso constitucional.---E. ARGUMEDO--O. BAÑOS---ALEJANDRO GOMEZ V.---PRONUNCIADO POR LOS SEÑORES
MAGISTRADOS QUE LO SUSCRIBEN---J ALBERT ORTIZ---RUBRICADAS.
HS021498.98
Descargar