La canción del amor que redime Escrito por Héctor A. Olaiz El profeta Alma, el Hijo de Alma, en tres versículos de su libro habla de la canción (nosotros le llamaríamos himno) del amor que redime. En el pueblo de Zarahemla, Alma dejó el asiento judicial para dedicarse exclusivamente al sumo sacerdocio del santo orden de Dios “a fin de predicarles la palabra de Dios para despertar en ellos el recuerdo de sus deberes, y para abatir, por medio de la palabra de Dios, todo el orgullo y las artimañas, y todas las contenciones que había entre su pueblo…”, con lo cual mostró que el camino recto de un pueblo no se logra tanto por medio de la sana justicia, la que él administraba en el asiento judicial, como por el despertar en el corazón y en la mente del pueblo el deseo de ser, cada uno, recto, humilde y misericordioso. Y les recuerda la experiencia de los del pueblo del rey Noé que siguieron a Alma, su padre, que había sido un sacerdote del inicuo rey, y que fue convertido por las palabras de Abinadí; cómo ese pueblo fue rescatado del infierno, diciendo: “¿Fueron quebrantadas las ligaduras de la muerte, y desatadas las cadenas del infierno que los tenían atados? Os digo que sí; fueron desatadas y sus almas se ensancharon, y cantaron del amor que redime. Y os digo que son salvos.” (Alma 5:9) Y en ese mismo capítulo dice (Alma 5:26): ”Y ahora os digo hermanos míos, si habéis experimentado un cambio en el corazón y si habéis sentido el deseo de cantar la canción del amor que redime, quisiera preguntaros: ¿Podéis sentir esto ahora?” No es la canción la que redime; sino el amor; en el Libro de Mormón en inglés dice: “reediming love”, que con una traducción más clara que la que actualmente tenemos, yo pondría: ”cantar 1/3 La canción del amor que redime Escrito por Héctor A. Olaiz la canción del amor redentor”. Y en Alma 26:13, Alma pone en boca de Ammón, cuando este se gloría en el Señor: “He aquí, cuantos miles de nuestros hermanos ha librado Él de los tormentos del infierno, y se sienten movidos a cantar del amor redentor,…”. El amor redentor es un amor correspondido, de otra manera no llega a ser redentor. Porque, por un lado, es el amor de Dios que ha dado a su hijo unigénito; como dice Juan 3:16: “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”. Señalo la doctrina aquí expresada que la vida eterna es para el que cree en el Salvador. Y es el amor de Jesucristo, que fue quien llevó a cabo el sacrificio expiatorio, el de la redención: “Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos”. (Juan 15:13). Pero también ese amor redentor comprende al amor correspondido por nosotros hacia Dios el Padre y hacia el Hijo, sin el cual la redención, aún cuando ya ha sido hecho el sacrificio expiatorio, es ineficaz, porque no se concreta. En la sección 20 de Doctrina y Convenios dice: “Y sabemos que es preciso que todos los hombres se arrepientan y crean en el nombre de Jesucristo, y adoren al Padre en su nombre y perseveren con fe en su nombre hasta el fin, o no podrán ser salvos en el reino de Dios. … y también sabemos que la santificación por la gracia de nuestros Señor y Salvador Jesucristo es justa y verdadera, para con todos los que aman y sirven a Dios con toda su alma, mente y fuerza.” La evidencia de esa correspondencia en el amor se manifiesta por medio de la obediencia: “Si me amáis, guardad mis mandamientos”, dice Juan 14:15. En las escrituras citadas del libro de Alma, por el contexto en cual están insertas, al hablar del canto, se hace referencia al concepto expresado por el Señor en D. y C. 25:12: “Porque mi alma se deleita en el canto del corazón; sí, la canción de los justos es una oración para mí, y será contestada con una bendición sobre su cabeza”. Y como toda oración es una expresión de reconocimiento, de agradecimiento y de ruego al Padre en los cielos. El himno N° 57 de nuestro himnario: “El amor del Salvador” ¿no es acaso una canción del amor que redime? Sus estrofas dicen: 2/3 La canción del amor que redime Escrito por Héctor A. Olaiz Tal como el sol es el amor del Salvador. Su luz penetra nubes de dolor. Alumbra nuestra vida hacia su hogar, Y en su mansión podremos descansar. Nos habla Su espíritu al corazón; Es nuestra guía en la aflicción. Da esperanza ante duda yellos temor; une aestará Dios con lazos de amor. Escucha, Padre, nuestra humilde oración. Te damos gracias por la redención. Acataremos, Dios, tu sempiterna ley, Por gran amor por Cristo, nuestro Rey. ¿Se pueblo puede de Zarahemla? cantar este himno sin tener los mismos sentimientos que expresa al hablar al Y como este, tantos otros, por ejemplo el himno 112: “El Padre tanto nos amó”. No de mismo, la aconteció. diferencia los sabemos himnos porque de cuán que la que doctrina distinta nosotros para era entonamos la era música un actualmente, yun de cantaban las canciones al pero que mismo habría que el mensaje amor usaban de ypresidente suceder aAlma tiene los la misma santos que yiglesia. para haber redención, depara nosotros Zarahemla sido el con ya Al a ejemplo quien no haber sí cuando conozco, conocido dijo, que refiriéndose a Alma tan enfáticamente me lo a la imagino música ha expresándose yhablado la adoración: sobre como la música elespíritu la Boyd K. Por Packer, “La escogen, en nuestras música dirigen, es reuniones de enorme presentan de importancia lo que yun lo hacen en nuestros quienes la música, hablan. servicios influyen ¡Que de más adoración. Dios en los el espíritu bendiga!” Creo que de reverencia quienes testimonio.” puede crear una atmósfera de adoración que invita al de revelación yla dedel “Un nuestros reino. restauración organista ¡Si sentimientos escuchamos son, con en sensibilidad efecto, yatentamente lleva aacompañan que nuestras curso toca seacontecimiento de nos mentes doctrina!” suave enseñará anuestro preludio la lírica el evangelio, que musical enseña porque del himnario las cosas los himnos apacigua apacibles El completamos voluntad lograrlo, proclamándolo, sacrificio es decir, ya nuestra fue agradeciéndolo dispuesta si hecho, estamos parte sus para de dispuestos beneficios correspondencia hacerlo emisma implorándolo. si a están oramos cantar aaN° en o, ese canción lo que amor alcance, es del redentor, lo amor mismo, pero que yen los cantamos seguramente redime, recibimos side nuestra 3/3