Doctrina Legal de la Corte de Constitucionalidad en asuntos civiles y de familia Astrid Vega y Alex Salazar No es procedente interponer un medio de impugnación contra otro medio de impugnación 2 Sentencia de 22/07/2011 Exp. 517-2011 “el uso de dicho medio impugnativo resulta inidóneo, ello porque contraviene el principio de certeza jurídica, pues no es posible someter reiteradas veces el análisis definitivo de una cuestión sobre la cual un órgano jurisdiccional ya realizó el pronunciamiento respectivo, es decir, no es procedente interponer un medio de impugnación (revocatoria) contra otro medio de impugnación ( nulidad), pues acceder a tal pretensión generaría un círculo interminable de impugnaciones lo que adversa el citado principio3…” El mismo criterio aparece en los expedientes 517-2011; 2416-2009;2257-2008 4 Procede la reposición contra un auto originario, el cual se caracteriza por no tener el efecto devolutivo de un recurso de alzada Sentencia de 1/04/2011 Exp.3162-2010 De conformidad con lo establecido en el artículo 600 del Código Procesal Civil: “Los litigantes pueden pedir la reposición de los autos originarios de la Sala, dentro de las veinticuatro horas siguientes a la última notificación(…)”. La decisión impugnada se enmarca dentro del supuesto previsto en esa disposición, dado que la misma derivó de conocimiento primigenio que efectuó la Sala -pues no obedeció al efecto devolutivo propio de un recurso de alzada-, sino que se trató de una decisión que la autoridad impugnada, una Sala, tuvo sobre la recusación planteada por el ahora postulante. Tal circunstancia permite definir el pronunciamiento de la Sala como un auto originario. En similar sentido se pronunció esta Corte en los expedientes 2966-2007; 3505-2008; y 31622010 No interrumpe la prescripción una solicitud presentada fuera de la jornada de trabajo de los Tribunales de Justicia, cuando su presentación se realizó en un Juzgado de Paz o Turno Sentencia 15/10/2009 Exp. 2864-2009 El hecho de que haya sido entregado ante un Juzgado de Paz y a una hora fuera del horario normal de labores de la Corte Suprema de Justicia, no implica que haya sido presentado en tiempo y que genere la obligación que posibilite su conocimiento, dado que para ello y en el afán de dar certeza a los actos de la administración de justicia, la Corte Suprema de Justicia, en uso de sus facultades ha instituido la jornada de trabajo y con ella, el horario de atención al público, que debe ser observado por todos los habitantes del país sin excepción”. En igual sentido se resolvió en los expedientes 2864-2009; 2479-2009 y 408-2010 No procede el arbitraje aunque existiendo un pacto arbitral, se pretende la anulación de una acta de asamblea de accionistas Sentencia de 15/03/2011 Exp. 878-2010 Según indica el artículo 3, numeral 1), de la Ley de la materia, la misma se aplicará: ´…en todos aquellos casos en que la controversia verse sobre materias en que las partes tengan libre disposición conforme a derecho…´. Aunque tal indicación parezca muy general, en el caso objeto de estudio es posible considerar que las materias sobre las que las partes –sociedades, sus órganos o accionistas– pueden disponer libremente y de conformidad con la ley, son todas aquellas que por conveniencia, pertinencia y oportunidad, sean de beneficio para el objeto social o estimulen el giro ordinario de la sociedad. … que la nulidad de la que estima el postulante adolece la multicitada Asamblea General, constituye una impugnación que solamente puede ser objeto de conocimiento jurisdiccional y, por tanto, el juez de la causa no debía acoger la tesis de una presunta incompetencia que la entidad demandada invocó al interponer la excepción correspondiente, y la Sala impugnada tampoco debía confirmar aquella decisión, pues, como quedó apuntado, el arbitraje no es la vía idónea para ventilar aquella demanda de nulidad En igual sentido se pronunció esta Corte en los expedientes: 878-2010; 1107-2010; y 17832011 No procede ningún medio de impugnación contra el auto para mejor fallar Sentencia de 23/03/2011 Exp. 4103-2010 Esta Corte considera que, al tenor de lo regulado en el artículo 613 del Código Procesal Civil y Mercantil, la nulidad es el medio impugnativo que tienen a su alcance los sujetos procesales cuando, a su juicio, existan resoluciones en que se infrinja la ley dentro de determinado juicio, es decir, la inobservancia de los procedimientos que condicionan la eficacia de un debido proceso; sin embargo, conforme al tercer párrafo del artículo 197 de dicho cuerpo normativo, no procede tal medio impugnativo pues el acto procesal contra el que se reclama deviene de una facultad propia del juzgador, aunque ésta haya sido dictada a solicitud de la parte demandada. En igual sentido en expedientes 4103-2010; 4067-2010 Algunos criterios en materia de familia y niñez Inconstitucionalidad del artículo 89, inciso 3), del Código Civil Texto impugnado: No podrá ser autorizado el matrimonio: “3º. De la mujer antes de que transcurran trescientos días contados desde la disolución del anterior matrimonio, o de la unión de hecho, o desde que se declare nulo el matrimonio, a menos que haya habido parto dentro de este término, o que uno de los cónyuges haya estado materialmente separado del otro o ausente por el término indicado. Si la nulidad del matrimonio hubiere sido declarada por impotencia del marido, la mujer podrá contraer nuevo matrimonio sin espera de termino alguno.” Sentencia de 01/06/2010 Exp. 794-2010 Analizando las secuencias del ADN puede establecerse con exactitud absoluta la herencia genética, superando los márgenes de duda de la prueba de histocompatibilidad. Además, la negativa a someterse a la prueba de ADN como a cualquier otro tipo de prueba biológica en los supuestos de reclamación de filiación tanto matrimonial como extramatrimonial, hará presumir el acierto de la posición contraria a la que sostiene en juicio a quien se niega a las pruebas, pues ninguna otra actitud en principio, puede justificar ese proceder, cuando se esta discutiendo el estado de familia de una persona. Inconstitucionalidad de los artículos 169 del Código Civil, en la frase “conserve buena conducta” y el artículo 226 de la ley ibid en la frase “llevó una vida notoriamente desarreglada” Texto impugnado: “ La mujer inculpable gozará de la pensión alimenticia a que se refiere el Inciso 3º del artículo 163, la cual será fijada por el juez, si no lo hicieren los cónyuges, teniendo en cuenta las posibilidades de quien debe prestarla y las necesidades de quien ha de recibirla. La mujer gozará de la pensión mientras observe buena conducta y no contraiga nuevo matrimonio; y el marido inculpable tendrá el mismo derecho, sólo cuando esté imposibilitado para dedicarse a trabajos que le proporcionen medio de subsistencia y no contraiga nuevo matrimonio”. … Artículo 226: “. La acción concedida en el artículo anterior y la declaratoria a que se refieren los incisos 3º y 4º del artículo 221 no proceden en los casos siguientes: 1º. Si durante la época de la concepción, la madre llevó una vida notoriamente desarreglada, o tuvo comercio carnal con persona distinta del presunto padre; y 2º. Si durante la época de la concepción fue manifiestamente imposible al demandado tener acceso carnal con la madre. Sentencia 29/11/2007 Exp. 541-2006 al existir un trato legal discriminatorio carente de razonabilidad, como el advertido en el segundo párrafo del artículo 169 del Código Civil, que debe llegarse a la conclusión de que la expresión "observe buena conducta y", es, en efecto, violatoria de lo dispuesto en el artículo 4 constitucional, y de ahí que tal expresión debe Respecto al artículo 169: “…que ser excluida del ordenamiento jurídico guatemalteco. Para arribar a tal determinación, este tribunal también reitera, para establecer el trato discriminatorio determinado como inconstitucional, la línea interpretativa del artículo constitucional precitado, Con la decisión de excluir del ordenamiento jurídico la expresión legal antes aludida, también se pretende hacer positivo en el ordenamiento jurídico guatemalteco, el espíritu del artículo 2.c. dE! la Convención antes citada, en cuanto a "eliminar la discriminación contra la mujer` y "establecer la protección jurídica de los derechos de la mujer sobre la base de igualdad con los del hombre“…” Ante la falta de certeza jurídica, dentro de parámetros objetivos legalmente establecidos respecto de cuándo o en qué eventos puede entenderse que una mujer lleva una vida "notoriamente desarreglada", se concluye que tal regulación conlleva prejuzgamiento irrazonable sobre la dignidad de una persona, en este caso de una mujer, que es Respecto al artículo 226: “… contrario a los postulados contenidos en los artículos 1, 2 y 4 de la Constitución. También se advierte que la ausencia de parámetros que sirvan para determinar la concurrencia de la conducta ("notoriamente desarreglada') que se pretende sancionar en la norma antes indicada, ello puede hace nugatorio, por determinaciones subjetivas, el cumplimiento de las obligaciones que se pretenden tutelar en los artículos 47, 50, 52 y 55 de la Constitución Política de la República”. Inconstitucionalidad sobre el orden de los apellidos Se cuestionó la inconstitucionalidad de una circular dirigida a los Registradores del Registro Nacional de las Personas, para que al inscribir el nacimiento de una persona se consignara de primero el apellido del padre y en segundo lugar el de la madre Sentencia 27/04/2011 Exp. 812-2010 En el caso del ordenamiento jurídico guatemalteco, debe tenerse en cuenta que la Constitución Política de la República de Guatemala no contempla el derecho al nombre como un derecho fundamental, sin embargo, dicho elemento de la persona ha adoptado relevancia constitucional en virtud de los instrumentos internacionales -reconocidos por Guatemala- que lo protegen. De esa manera tal derecho debe entenderse elevado al rango de fundamental conforme lo establecido en el artículo 46 de la Carta Magna. Entre los instrumentos internacionales a que se alude puede citarse la Declaración de los Derechos del Niño que, en su artículo 3º, establece: “…El niño tiene derecho desde su nacimiento a un nombre y a una nacionalidad”. Similar disposición contemplan los artículos 24 del Pacto internacional de Derechos Civil y Políticos y 18 de la Convención Interamericana sobre Derechos Humanos que regulan: “…Toda persona tiene derecho a un nombre propio y a los apellidos de sus padres o al de uno de ellos. La ley reglamentará la forma de asegurar este derecho para todos, mediante nombres supuestos, si fuere necesario”, por citar dos casos. Ese derecho, en la legislación ordinaria guatemalteca se encuentra establecido en el artículo 4º. del Código Civil, el cual prescribe: … el nombre es un derecho humano relacionado con el derecho a la identidad y que corresponde a cada individuo como medio de identificación en las esferas familiares, sociales, jurídicas y demás. La existencia de tal elemento trae consigo el derecho de los padres de elegir cuál será el nombre que identificará a su hijo, debiendo entenderse que, a menos que la dinámica social imponga un motivo razonable, los “… progenitores quedan en la facultad de elegir el orden en el que se deberán consignar los apellido en el Registro correspondiente…” … la falta de legislación que norme en forma exhaustiva dicha temática pone de manifiesto la incertidumbre jurídica que podría surgir ante el posible desacuerdo entre los padres al momento de inscribir el nacimiento de sus hijos o bien, la falta de identidad o de certeza que podría generar la decisión de inscribir a algunos hijos con el apellido paterno al inicio y a otros con el materno … (El RENAP) En el ejercicio de las funciones encargadas a dicho ente público puede válidamente incluirse la emisión de circulares que persigan dotar de seguridad y certeza jurídica a las inscripciones que tienen a su cargo. Sin embargo, debe insistirse en que, en atención a que el artículo 4°. del Código Civil no contempla limitación para que las partes puedan arribar a un acuerdo que disponga el orden en el que deberán colocarse los apellidos del descendiente, deberá entenderse que la recomendación contenida en la circular impugnada regirá únicamente en los casos en los que no exista acuerdo de los padres o cuando éstos no manifiesten interés en invertir el orden mencionado. No existe violación al artículo 97 del Código de Trabajo en la fijación de la obligación de pago de pensión alimenticia Sentencia de 11/08/2011 Exp.1676-2011 “… Esta norma no hace alusión a los límites para la fijación de una pensión alimenticia propiamente dicha sino que, únicamente, establece un parámetro de afectación del salario en concepto de embargo, para el caso de que el obligado no cumpla voluntariamente con pagar la pensión que le fuera fijada, situación distinta a la del caso que nos ocupa, ya que en éste prevalece la protección del interés prioritario del derecho alimentario, tal y como se encuentra regulado en el artículo 279 del Código Civil, el cual reza: “Los alimentos han de ser proporcionados a las circunstancias personales y pecuniarias de quien los debe y de quien los recibe, y serán fijados por el juez, en dinero…”, norma legal que establece los aspectos que el juez debe tomar en cuenta para la fijación de la aludida pensión alimenticia …” En similar sentido se pronunció en los expedientes 1676-2011; 37382010; y 2663-2009 El interés superior del niño Sentencia de 12/08/2011 Exp. 2180-2010 Uno de los ejes fundamentales de la Convención mencionada es la regulación de la relación niño - familia, y en particular niño - padres. Los artículos 5 y 18 -de la Convención sobre los Derechos del Niño- antes transcritos, reconocen el derecho de los padres a la crianza y la educación; a su vez, el derecho del niño a ejercer sus derechos por sí mismo, en forma progresiva y de acuerdo a la evolución de sus facultades. (…) En concordancia con lo anterior, el artículo 18, luego de reconocer el derecho y responsabilidad de los padres a la crianza y la educación y el deber del Estado de garantizarlo, señala que los padres ejercerán sus funciones de acuerdo a una orientación Al realizar una interpretación sistemática de las dos disposiciones mencionadas, es claro que los derechos y responsabilidades de los padres, en relación a la orientación y dirección de sus hijos, tienen por objeto la protección y desarrollo de la autonomía del niño en el ejercicio de sus derechos (“El Interés Superior del Niño en el marco de La Convención fundamental: “el interés superior del niño”. Internacional Sobre los Derechos del Niño, Miguel Cillero Bruñol, página 13). Las facultades de los padres se encuentran limitadas, justamente, por esta función y objetivo. El Estado tiene el deber de apoyar a los padres en esta función, pero también el deber de garantizar a los niños que su crianza y educación se dirija hacia el logro de la autonomía en el ejercicio de sus derechos. Los roles de los padres no son derechos absolutos, ni meramente poderes / deberes, son derechos limitados por los derechos de los propios niños, es decir, por su interés superior. Similar sentido en expedientes 4299-2008 y 2180-2010 Muchas gracias por su atención! 36