discurso del ministro de economia y hacienda

DISCURSO DEL MINISTRO DE ECONOMIA
Y HACIENDA
Excmo. Sr. D. MIGUEL BOYER SALVADOR
Majestad, Excmo. Sr. Ministro de Asuntos Exteriores, Excrno. Sr. Presidente de la
Comunidad Autónoma de Madrid, Excrno. Sr. Alcalde de Madrid, Excr7as. Sres., Sras. y
Sres.:
Siento gran orgullo y satisfacción al inaugurar en Madrid este Congreso del Instituto
Internacional de Estadí ^ tica y lo siento triplemente, como español, como rniembro del
Gobierno y como profesional de la Economía.
Como español, no puedo dejar de señalar que hace más de 50 años que no se reunía
en 1Vladrid un Congreso del referido Instituto, dándose además, en esta ocasión, la
especial circunstancia de estar presidido por un español, D. Enrique Cansado, de relevante y justarnente reconocida personalidad en el campo de la estadística.
Como miembro del Gobierno, como Ministro encargado de las respansabilidades de
Economia y Hacienda, siento la satisfacción de poder reunir a especialistas de una ciencia
que, entre todas las ciencias matemáticas, es la que tiene, sin duda, una relación más
estrecha con la disciplina económica.
La estadística y los estadísticos en su función suplen, en el campa de las ciencias
sociales, el método experimental de las ciencias naturales, y para una persana que
praviene, como yo, de los estudios de la física no deja de resultar impresionante el
desarrollo de la estadística en el análisis de los datos y en los métodos para extraer
conclusiones, desarrallo mucho más formidable que el que necesitaron las ciencias natureales, al menos las ciencias físicas para alcanzar el mismo objetivo. A pesar de ese gran
desarrollo de la estadlstica, su aplicacian a laa ciencias sociales y concreta.mente al campo
de la econornía, presenta serias dificultades, pues al no poderse realizar experiencias de
laboratoria -a pesar de que la actividad de los dirigentes políticos a veces parece
experimentación--, al no existir el equivalente a esas experiencias, aí observarse casos
siempre úrlicos, hace falta un ingenio y una técnica perfectos para extraer consecuencias
sobre la realidad, realidad que, por otra parte, no muestra regularidades estables, como
muestras las ciencias físicas o las ciencias naturales, y que por consiguiente está sujeta
permanentemente a esa nueva apertura hacia distintos horizontes, a esa sucesión de
teorías y a una menor estabilidad que las ciencias naturales.
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E:5TA[)ISTI(:'A E:5PAIVC^)LA
Es curioso, y sig,nificativo del progreso que todavía queda por recorrer a la ciencia
estadistica, que cuando damos magnitudes econámicas ni siquiera damos márgenes de
error de la observacián, lo que es costumbre, por ejemplo en la ^sica que antes
mencionaba. El profesor Morgensterm, como Vds. recordarán, se sorprendía de que no se
dijera que conocemos el producto bruto con un enor de más-menos una determinada
cantidad, o que conocemos la inversión con un error de m^s-menos el S 96. Ni siquiera
somos capaces todavía en la ciencia económica de ñjar los m^rgenes de error de las
magnitudes que manejamos.
Creo que el progreso de la estadística es decisivo y que naturalmente en él debe
confiarse para sacar a la disciplina económica y a la práctica de la política económica de
las dificultades en que actualmente se encuentra. Todavía tenemos un conocimiento extraordinariamente imperfecto de esa realidad, medimos mal, seguimos mal los fenómenos
complicadísimos de la sociedad, y todo esfuerzo en este sentido ya sea en la obtención de
datos, ya sea en el desarrollo de técnicas cada vez más refinadas para analizar esos datos,
es una ayuda inapreciable para la ciencia econbrnica y para la politica económica.
En los paises que no son los más avanzados en la obtención y análisis de datos,
sentimos continuamente las lirnitaciones de ese conocimiento insuficiente de la realidad
para el diseño y puesta en pr^ctica de la política econámica cotidiana. Por estas razones
es una prioridad importantisima del Gobierno actual el apoyar el desarrollo de la estadística en España, el apoyar al Instituto Nacional de Estadística. Como dato de esa
importancia quiero decirles a Vds. que, siendo Ministro de Economía y Hacienda, la
primera salida que hice desde el Ministerio, primera salida quiero decir, de un radio de
acción de 15 metros de mi despacho -que es lo único que me permitieron los primeros
dos meses de gobierno- fue al Instituto Nacional de Estadística y una de las primeras
actuaciones del gobierno fue promulgar un Decreto que desarrollase las facultades y la
nueva organización del Instituto Nacional de Estadística.
En meses sucesivos nos proponemos dotar de una autoridad máxima al Instituto
Nacional de Estadística. Quisierarnos, y es esencial en una democracia, que las estadís- ^
ticas sean un elemento tan objetivo que sea indiscutible, que sea la base común sobre la
cual podamos todos discutir racionalmente los problemas sociales, los problemas económicos, los problemas sanitarios y todos aquellos de los campos que cubre la estadística.
Nos proponemos elevar la dependencia del Instituto Nacional de Estad^ística de su actual
status de dependencia del Ministeño de Economía y Hacienda hasta hacerlo depender
directamente del Presidente del Gobierno, y relacionarlo con una Comisión del Parlamento que siga estrechamente el progreso de las estadisticas, que controle y supervise la
tarea estadistica. Nos parece por consiguiente que esta tarea y el Instituto Nacional de
Estadística son elementos esenciales, no solamente en la política econámica, no solamente
de conocimiento de 1a realidad, sino y precisamente por eso son también elementos
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fundamentales de una dernocracia rnoderna.
DISCURSOS DE LA SESION DE APERTURA
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Por tanto, señoras y señores, no hemos exagerado la importancia de esta reunión y no
se ha exagerado la importancia que le atribuye el Gobierno. Todo apoyo que pueda
prestarse a sus investigaciones en el campo internacional o en el campo nacional; todo lo
que pueda hacerse por difundir los estudios estadísticos; por inspirar el máximo respeto a
la tarea de investigar la realidad social cuantitativamente, objetivamente, desapasionadamente; todo lo que esté en nuestra mano para apoyar esa actividad se ha hecho, y todo lo
que en estos días pueda hacer el Gobierno para realzar su trabajo, también se hará para
faciliar a Vds. esa tarea.