INSTITUCIONES DE SEGURIDAD SOCIAL

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INSTITUCIONES DE SEGURIDAD SOCIAL – Unidad Nº 4
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UNIDAD Nº 4: SISTEMA INTEGRADO PREVISIONAL ARGENTINO (SIPA)
Contingencias cubiertas.
El sistema integrado previsional argentino tiende a cubrir las siguientes contingencias sociales:
 VEJEZ: La vejez es una de las contingencias sociales cubiertas por este subsistema de seguridad social.
Esta contingencia puede entenderse en dos sentidos diferentes: 1) como sinónimo de ancianidad, es decir del último período de la vida ordinaria del hombre;
y 2) en el sentido de senilidad, que se entiende cómo minusvalía psicosomática
producida por la acción del tiempo.
En el primer caso, basta el cumplimiento de una edad para tener por configurada la situación de vejez, y en tal caso la protección se fundamenta en el derecho al descanso tras un largo período de tiempo y de aportes. En el segundo, la
protección se fundamenta en la incapacidad fisiológica que imposibilita al individuo obtener sus propios ingresos.
Como veremos en esta unidad, nuestro sistema adopta el primer criterio para
determinar la vejez, estableciéndose una edad que es de 65 años para los
hombres y 60 para las mujeres (art. 19 y 47 ley 24.241), instituyendo además
una prestación por edad avanzada para quienes hubieran cumplido 70 años
(art. 34 bis, ley 24.441). No obstante, la ley no veda al jubilado la posibilidad de
continuar o reingresar a la actividad remunerada (art. 34 ley 24.241).
 INVALIDEZ: La invalidez es el estado de alteración orgánica o funcional que incapacita al individuo para el trabajo1. Sus características son las siguientes: a)
es patológica y no fisiológica; b) se refiere a una incapacidad sobreviviente de
un trabajador que desarrolla o ha desarrollado alguna actividad laboral; c) debe
ser total y no parcial; d) debe ser permanente y no transitoria. Para estos casos
se reconoce en nuestro de derecho, el derecho a un retiro por invalidez (arts.
17 inc c, 27 y 48 ley 24.241), exigiendo el cumplimiento de ciertos recaudos y la
observancia de un procedimiento para la acreditación de la invalidez (art. 49 a
52, ley 24.241).
 MUERTE: Si bien la misma, es un acontecimiento natural, es considerada una
contingencia social en tanto produce la privación de los ingresos con que subsistían quienes vivían al amparo de la persona fallecida. Esta contingencia es
atendida por la pensión por fallecimiento (arts. 17 inc. d y 46 inc. c ley 24.241),
de la que serán beneficiarios ciertos parientes denominados derechohabientes.
Régimen legal vigente. Conformación del sistema.
El Sistema Integrado Previsional Argentino fue instituido por la ley N° 26.425
la cual fue sancionada en noviembre del año 2008. Esta ley dispone la eliminación
del Sistema Jubilatorio Privado (régimen de capitalización) y el traspaso de sus afiliados al régimen previsional público.
ETALA, J. J. Derecho de la seguridad social, pág. 147, con cita de GAETE BERRIOS – SANTANA DAVIS,
Seguridad Social, pág. 15.
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El art. 1º de la ley 26.425 consagra: “Dispónese la unificación del Sistema Integrado de Jubilaciones y Pensiones en un único Registro Previsional Público que se
denominará Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA), financiado a través de
un sistema solidario de reparto, garantizando a los afiliados y beneficiarios del Régimen de Capitalización vigente hasta la fecha, idéntica cobertura y tratamiento que
la brindada por el Régimen Previsional Público, en cumplimiento del mandato previsto por el art. 14 bis de la Constitución Nacional. En consecuencia, elimínase el actual
régimen de capitalización, que será absorbido y sustituido por el régimen de reparto,
en las condiciones de la presente ley”.
De este modo, se unifica el antiguo Sistema Integrado de Jubilaciones y Pensiones (SIJP)2 en único Régimen Previsional Público de reparto y administrado por el
Estado.
El régimen previsional se financiará mediante un sistema de reparto y en
cuanto al órgano de gestión será el ANSES.
Ámbito de aplicación personal
Afiliados obligatorios.
El art. 2 de la ley 24.241 enumera los sujetos que quedan obligatoriamente
comprendidos en el Sistema Previsional. Ellos son “las personas físicas mayores de
dieciocho años”, que desempeñan tareas en relación de dependencia (que se enumeran en el inc. a del art. 2) y las que desarrollan una tarea en forma autónoma y no
en condiciones de dependencia (que se enuncian inc. b art. 2).
a) Personas que se desempeñan en relación de dependencia: comprende
a las que se encuentren bajo contrato de trabajo o relación de empleo público,
aun si el “contrato de trabajo o relación de empleo público fueren a plazo fijo”.
Con respecto al trabajo privado, es indiferente si está formalizado el contrato
de trabajo; basta que exista la relación de trabajo3. La expresión “relación de
empleo público” está dada en el texto legal con el sentido de alcanzar a todo
agente que integre los cuadros de la Administración Pública Nacional.
En lo que respecta, a las personas que se encuentren bajo contrato de trabajo, quedan alcanzados:
1. Aquellos que presten servicios en cualquier lugar del país en relación
de dependencia en la actividad privada. Dichos servicios pueden ser
permanentes, transitorios o eventuales.
2. También quedan comprendidas en el sistema, como afiliados obligatorios, los que presten tareas en el extranjero cuando hayan tenido su
domicilio real en la República al momento de iniciarse el contrato o relación laboral, o de disponerse el traslado o comisión.
Respecto a los vinculados por relación de empleo público, quedan alcanzados
los siguientes:
1. Los funcionarios, empleados y agentes que presten servicios en forma
permanente o transitoria en4:
o cualquiera de los poderes del Estado Nacional;
o sus organismos centralizados, descentralizados o autárquicos;
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El SIJP fue instituido por la ley 24.241 en el año 1993, aunque fue cobrando vigencia de manera escalonada
La ley previsional no exige un contrato de trabajo suscripto entre el empleador y el trabajador sino que por el
contrario le basta con que el trabajador haya iniciado efectivamente las tareas laborales para el empleador.
4 Con exclusión del personal militar de las fuerzas armadas y del personal militarizado o con estado policial de
las fuerzas de seguridad social y policiales.
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o empresas del Estado, sociedades del Estado, sociedades anónimas
con capital mayoritario estatal;
o sociedades de economía mixta;
o servicios de cuentas especiales;
o obras sociales públicas.
2. El personal civil de las fuerzas armadas y de las fuerzas de seguridad
y policiales.
3. También abarca a quienes presten tareas en entes oficiales interprovinciales o integrados por la Nación y las provincias.
4. Asimismo abarca a los funcionarios, empleados y agentes civiles dependientes de los gobiernos provinciales y municipales que hayan adherido por convenio con el Poder Ejecutivo Nacional al SIJP (hoy
SIPA)5.
b) Personas que ejerzan actividades sin relación de dependencia (autónomos): son las siguientes:
1. Dirección, administración o conducción de cualquier empresa, organización, establecimiento o explotación con fines de lucro, o sociedad comercial o civil, aunque por esas actividades no obtengan retribución, utilidad o
ingreso alguno.
2. Profesión desempeñada por graduado en universidad nacional, provincial
o privada autorizada para funcionar por el poder ejecutivo nacional, o por
quien tenga habilitación legal para ejercer una profesión universitaria reglamentada6.
3. Producción o cobranza de seguros, reaseguros, capitalización, ahorro y
préstamo o similares.
4. Cualquier otra actividad lucrativa no comprendida en los puntos anteriores.
El decreto 433/94, reglamentario de ley 24.241, establece en su primer
artículo una enumeración de carácter meramente enunciativa de diversos
contribuyentes que deben entenderse comprendidos en la afiliación obligatoria. Son ellos: a) artistas y músicos en tanto asuman el riesgo económico propio del ejercicio de sus profesiones; b) profesionales de la salud que presten
sus servicios a pacientes asociados a organizaciones de medicina prepaga,
fundaciones, obras sociales o mutuales, en sus consultorios propios o provistos por las entidades, en tanto su ingreso se limite al honorario percibido de
los pacientes; c) fleteros o transportistas de carga que aportan su vehículo y
prestan a título oneroso servicios de fletes, asumiendo el riesgo económico
del ejercicio libre de la actividad; d) jugadores de fútbol excluidos de cierto
convenio gremial y que intervengan en torneos de AFA, ligas provinciales, regionales o locales; e) trabajadores embarcados, afectados a la pesca costera,
cuyos ingresos los perciban mediante “retribución a la parte”.
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Debe recordarse que el art. 125 de la CN después de la reforma de 1994, determinó que las provincias pueden
conservar organismos de seguridad social para los empleados públicos. De ahí que la afiliación de este personal
al SIJP no sea en rigor obligatoria, sino que está supeditada a la adhesión que las autoridades respectivas hagan
al sistema mediante convenios celebrados con el Gobierno nacional.
6 En el caso de los profesionales puede presentarse la situación de desempeño de dos actividades, una como
trabajador autónomo y otra en relación de dependencia, que se traduce en una doble afiliación jubilatoria.
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c) Personal diplomático o dependiente de organismos internacionales:
El inciso c) del art. 2 comprende a las personas al servicio de las representaciones y agentes diplomáticos o consulares acreditados en el país, y a los dependientes de organismos internacionales que presten servicios en la República, quedando incluidos si resulta de los respectivos convenios o tratados internacionales.
d) Socios de sociedades: El inciso d del art. 2 establece que no es obligatorio encuadrarlos como dependientes en los siguientes supuestos: 1) los socios de cualquier tipo de sociedad cuya participación en el capital sea igual o
superior a la resultante de dividir 100 por el número de socios; 2) los socios
comanditados únicos de las sociedades en comandita simple o por acciones;
3) los socios de las sociedades civiles y de las sociedades irregulares o de
hecho ; 4) todos los socios de cualquier tipo de sociedad cuando la totalidad
de ellos estén ligados por vínculos de parentesco de hasta el segundo grado
de consaguinidad o afinidad.
Afiliados voluntarios.
El art. 3 de la ley 24.241 regula la incorporación al SIJP (hoy SIPA) que pueden realizar voluntariamente las personas mayores de 18 años y menores de 55 (art.
3 ap. 2 dec. regl. 433/94) que no están obligadas a hacerlo, con las mismas obligaciones y beneficios que corresponden a los afiliados obligatorios. La afiliación voluntaria está autorizada tanto para el régimen de los dependientes como de los autónomos.
La afiliación voluntaria subsistirá, generando la obligación de aportar mientras
no se denuncia su cese frente a la autoridad de aplicación, sin perjuicio de que operará su caducidad si se adeudaren seis mensualidades consecutivas de aportes.
Según el inciso a del mencionado articulo de la ley, pueden incorporarse al
régimen de trabajadores dependientes: 1) los directores de sociedades anónimas,
por los emolumentos que reciban por sus actividades subordinadas; 2) los socios de
cualquier sociedad que no estuvieran incluidos obligatoriamente de acuerdo a lo dispuesto en el art. 2 inc. d) de la ley.
Según el inciso b del art. 3º, pueden voluntariamente incorporarse al régimen
de trabajadores autónomos: 1) los miembros de consejos de administración de
cooperativas, sin retribución por tal función; 2) los socios no gerentes de sociedades
de responsabilidad limitada; 3) los síndicos de cualquier sociedad y fiduciarios; 4)
titulares de condominios y sucesiones indivisas, que no ejerzan la dirección, administración o conducción de la explotación común; 5) los miembros del clero y organizaciones religiosas de la Iglesia Católica u otro culto inscripto en el Registro; 6) los
profesionales que, por el ejercicio de su actividad, se encontraren obligatoriamente
afiliados a uno o más regímenes jubilatorios provinciales para profesionales; 7) las
amas de casa cuya incorporación voluntaria se hará en la categoría mínima de aportes.
Exceptuados de incorporarse al SIJP.
El art. 4 de la ley exceptúa de la incorporación obligatoria a los profesionales,
científicos, investigadores y técnicos que fueren contratados en el extranjero para
prestar servicios en el país, teniéndose en cuenta los siguientes recaudos: a) por un
plazo no mayor de dos años y por una sola vez; b) no tener residencia permanente
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en el país; c) que se encuentren amparados en su país de origen o de residencia
permanente contra las contingencias de vejez, invalidez y muerte.
El mismo artículo agrega que la exención no impedirá la afiliación al sistema
cuando el contratado y el empleador manifestaren su voluntad expresa en tal sentido, o el contratado efectuare su propio aporte y la contribución correspondiente al
empleador.
La exención deberá ser otorgada, previa petición por el interesado o su empleador, por la ANSES.
Actividades simultáneas.
El art. 5 de la ley 24.241 prevé la situación de las actividades simultáneas.
Dispone que quien realizara más de una actividad que pudiera ser subordinada o
autónoma, queda obligado a efectuar los aportes y contribuciones según corresponda por cada una de ellas.
Agrega el citado artículo que serán también de obligatoria realización los
aportes y contribuciones al SIJP (hoy SIPA), aun cuando la persona esté comprendida asimismo en otro régimen jubilatorio nacional, provincial o municipal, o cuando
goce de cualquier jubilación, pensión o retiro.
Aportes y contribuciones
El SIPA es un sistema contributivo, ya que en una sustancial proporción se
financia con los aportes personales de los trabajadores en relación de dependencia,
las contribuciones de los empleadores y los aportes personales de los trabajadores
autónomos (conf. art. 10 ley 24.241), aunque puede además financiarse con otras
fuentes de recursos.
El aporte jubilatorio es el pago obligatorio que realiza el trabajador dependiente o autónomo (sujeto beneficiario) como integrante del sistema de la Seguridad Social, con lo cual se hace acreedor a la prestación que le pueda corresponder, por
haber cumplido con uno de los recaudos legales.
La contribución es la obligación legal del empleador de trabajadores en relación de dependencia de contribuir al sistema de la Seguridad Social la cuota parte
que le corresponde por cada trabajador subordinado que realice actividad bajo su
dependencia.
Régimen de trabajadores dependientes
La base a tomar para determinar los aportes y contribuciones que deban realizar trabajadores y los empleadores es la remuneración del trabajador, la cual está
definida por el art. 6º de la ley, trascripto a continuación:
“Se considera remuneración, a los fines del SIJP, todo ingreso que percibiere el afiliado en dinero o en especie susceptible de apreciación pecuniaria, en retribución o compensación o con motivo de su actividad personal, en concepto de sueldo, sueldo anual complementario, salario, honorarios, comisiones, participación en las ganancias, habilitación,
propinas, gratificaciones y suplementos adicionales que tengan el carácter de habituales y
regulares, viáticos y gastos de representación, excepto en la parte efectivamente gastada y
acreditada por medio de comprobantes, y toda otra retribución, cualquiera fuere la denominación que se le asigne, percibida por servicios ordinarios o extraordinarios prestados en
relación de dependencia.
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La autoridad de aplicación determinará las condiciones en que los viáticos y gastos
de representación no se considerarán sujetos a aportes ni contribuciones, no obstante la
inexistencia total o parcial de comprobantes que acrediten el gasto.
Las propinas y retribuciones en especie de valor incierto serán estimadas por el empleador. Si el afiliado estuviera disconforme, podrá reclamar ante la autoridad de aplicación,
la que resolverá teniendo en cuenta la naturaleza y modalidad de la actividad y de la retribución. Aun mediando conformidad del afiliado, la autoridad de aplicación podrá rever la estimación que no considerara ajustada a estas pautas.
Se consideran asimismo remuneración las sumas a distribuir a los agentes de la administración pública o que éstos perciban en carácter de:
1. Premio estímulo, gratificaciones u otros conceptos de análogas características. En este
caso también las contribuciones estarán a cargo de los agentes, a cuyo efecto antes de proceder a la distribución de dichas sumas se deberá retener el importe correspondiente a la
contribución.
2. Cajas de empleados o similares, cuando ello estuviere autorizado. En este caso el organismo o entidad que tenga a su cargo la recaudación y distribución de estas sumas, deberá
practicar los descuentos correspondientes a los aportes personales y depositarlos dentro del
plazo pertinente.”
Si bien podemos definir a la remuneración como la prestación que el dependiente percibe por su puesta a disposición de su capacidad de trabajo, a los fines del
SIJP (hoy SIPA) se entenderá por remuneración a la definición y a los alcances expresados en el art. 6 de la ley 24.
Vale aclarar a que se refiere el transcripto artículo con ciertas denominaciones. La comisión es un porcentual de cada operación realizada por el trabajador. La
participación en las ganancias es un porcentual sobre la totalidad de la actividad de
una empresa durante un mes de superávit. La habilitación implica la persecución de
un tanto por ciento de las ganancias de la empresa. Las gratificaciones son premios
otorgados al trabajador por su idoneidad o buen desempeño. El viático es la suma
entregada por el empleador a los efectos de que el dependiente afronte gastos ocasionados por una gestión determinada, que puede consistir en alojamiento, transporte, comidas, etc., y puede ser esporádico o permanente. Para que el viático integre
la remuneración, debe ser constante y permanente, y no justificado con los comprobantes respectivo; en caso contrario, existiría un mero integro de gastos no computables como remuneración. Los gastos de representación son los que tienen lugar
con motivo de gestiones especiales y particulares, tales como la atención especial a
ciertos clientes, transportes, comidas, etc.
Quedan excluidos del concepto de remuneración los rubros mencionados en
el art. 7 de la ley: asignaciones familiares, indemnizaciones por vacaciones no gozadas, prestaciones por incapacidad permanente por accidente de trabajo o enfermedad profesional, prestaciones por desempleo, pagos en concepto de becas, gratificaciones abonadas por el empleador con motivo de la extinción del contrato de trabajo.
Tampoco tiene carácter de remuneración los beneficios sociales previstos en
la ley de contrato de trabajo, tales como 1) los servicios de comedor de la empresa,
2) los vales de almuerzo y tarjetas de transporte hasta cierto monto, 3) los vales alimentarios y canastas de alimentos otorgados a través de empresas autorizadas hasta un tope máximo del 20 % de la remuneración bruta, 4) reintegros de gastos médicos y de medicamentos, 5) provisión de ropa de trabajo y demás indumentaria y
equipamiento al trabajador, 6) reintegros documentados de gastos de guardería o
sala maternal, 7) provisión de útiles escolares y guardapolvos para los hijos del trabajador, 8) otorgamiento o pago de cursos o seminarios de capacitación, 9) pago de
gastos de sepelio de familiares a cargo del trabajador. Esta remuneración no es ta-
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xativa y existen muchos supuestos más de percepción de sumas y beneficios que no
son considerados remunerativos. Los suplementos salariales dispuestos por el Poder Ejecutivo Nacional desde varios años carecen de carácter retributivo, según los
decretos que los establecían.
Las remuneraciones sujetas a aportes y contribuciones tienen un tope mínimo
y un tope máximo, de acuerdo al art. 9 de la ley 24.214 (modificado por decreto
491/2004 y por la ley 26.222). De tal modo, no se practicarán aportes o contribuciones sobre las remuneraciones inferiores a los tres módulos previsionales –MOPREsy las remuneraciones superiores a los 75 MOPREs no sufrirán descuento de aportes
por la parte que excedan de dicho monto, aunque si se deberán pagar las contribuciones patronales sobre dicho exceso.
El art. 11 de la ley 24.241 determina que el aporte personal de los trabajadores en relación de dependencia será del 11 % y la contribución a cargo de los empleadores del 16%. Estos porcentajes sufren cada tanto variaciones, habiéndose
reducido en una época el aporte del trabajador. En algunos rubros empresariales,
los porcentajes también pueden ser distintos.
Régimen de trabajadores autónomos.
Los trabajadores autónomos deben realizar sus aportes obligatoriamente al
SIPA. Dichos aportes los harán sobre los niveles de rentas de referencias (también
llamadas rentas presuntas) calculadas sobre la base de categorías fijadas por las
reglamentaciones. A cada categoría se asigna un importe de renta imponible mensual, que será la renta de referencia sobre la cual los trabajadores deberán aportar.
El art. 11 de la ley 24.241 dispone que el aporte personal de los trabajadores
autónomos será del 27%, que se ha de aplicar sobre la renta imponible. Normas reglamentarias han impuesto a ciertas categorías aportes adicionales.
Prestaciones del SIPA: caracteres.
La ley 24.241, en su artículo 14, rodea a las prestaciones de ciertos caracteres que tienden concretamente a lograr los fines perseguidos por este sistema de la
seguridad social. Tales caracteres configuran el contenido de normas de orden público, dado que son imperativos, irrenunciables e indisponibles por los particulares.
Los caracteres enunciados son los siguientes:
1. son personalísimas: sólo corresponden a sus titulares (sujeto beneficiario).
2. no pueden ser enajenadas ni afectadas a terceros por derecho alguno: las
prestaciones no están en el comercio, no pudiendo ser objeto de contratos
(compraventa, cesión, donación, etc)7.
3. son inembargables, con excepción de las cuotas por alimentos y litisexpensas.
4. están sujetas a deducciones que las autoridades judiciales y administrativas
competentes dispongan en concepto de cargos provenientes de créditos a
7
Sin embargo, la ley 24.241 establece en el inc. b del art. 14 una excepción a la prohibición de afectar las prestaciones a favor de terceros, al permitir que la PBU y la PC -previa conformidad formal y expresa del beneficiariopuedan ser afectadas a favor de organismos públicos, asociaciones sindicales de trabajadores con personería
gremial, asociaciones de empleadores, obras sociales, cooperativas y mutualidades, con las cuales los beneficiarios convengan el anticipo de las prestaciones. Esto sucede cuando el beneficiario reintegra a las entidades
mencionadas los importes que éstas le han anticipado durante el lapso que insume la tramitación del beneficio.
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favor de organismos de la seguridad social o por la percepción indebida de
haberes de jubilaciones, pensiones, retiros o prestaciones no contributivas 8.
5. son imprescriptibles: es imprescriptible el derecho a acceder a los beneficios
acordados por la ley, o sea el derecho a adquirir el status de jubilado o pensionado9.
6. sólo se extinguen por las causas previstas por la ley (p. ej. el cumplimiento
del límite de edad para el goce del derecho a pensión de los derechohabientes)
Prestaciones: enumeración.
El sistema previsional de la seguridad social otorga las siguientes seis prestaciones:
1. Prestación básica universal (PBU)
2. Prestación compensatoria (PC)
3. Retiro por invalidez
4. Pensión por fallecimiento
5. Prestación adicional por permanencia (PAP)
6. Prestación por edad avanzada (PEA)
A continuación desarrollaremos en particular cada una de ellas.
Prestación Básica Universal (PBU)
Esta prestación se denomina “básica” porque constituye el componente primario e indispensable para poder tener derecho, en su caso, a la PC y a la PAP.
Para poder acceder a la misma, los afiliados deben cumplir con determinados
requisitos (art. 19):
o Con respecto a la edad, haber cumplido sesenta y cinco (65) años -para
el caso de los hombres- y sesenta (60) años -para las mujeres-.
o Acreditar treinta (30) años de servicios con aportes computables en uno
o más regímenes comprendidos en el sistema de reciprocidad10.
La falta de años de servicios con aportes puede compensarse con el exceso
de edad: por cada dos (2) años de exceso de edad se computa un año (1) de servicios faltantes. Por ejemplo: en el caso de una mujer de 64 años con 28 años de servicios, tendría derecho a acceder a la prestación básica universal.
Esta prestación se caracteriza por ser única, pues una misma persona no
puede ser titular de más de una PBU (art. 33).
En lo que respecta al monto del haber mensual de la PBU, el art. 20 (que fuese modificado por vía de la ley 26.417) es de pesos trescientos veintiséis ($ 326.-).
8
Dichas deducciones no podrán exceder del 20% del haber mensual, salvo cuando en razón del plazo de duración de esta no resultara posible cancelar el cargo.
9 Si bien el derecho acordado a los beneficiarios es imprescriptible, si en cambio pueden prescribir los haberes
devengados emergentes de ese beneficio. El art. 82 de la ley 18.037 establece los plazos de prescripción según
se trate de haberes devengados antes o después de la presentación de la solicitud del beneficio: un año y dos
años respectivamente.
10 Por servicios con aportes debe entenderse: 1) tratándose de actividades en relación de dependencia, los períodos respecto de los cuales se hubieran devengado y retenido los aportes y contribuciones correspondientes, y
2) en el caso de actividades autónomas, los períodos respecto de los cuales se hubieran devengado e ingresado
las pertinentes cotizaciones (dec. 679/95).
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Prestación Compensatoria (PC)
En palabras de GRISOLIA podemos definirla como el “… derecho que tienen los
afiliados que han cumplido con los requisitos para poder acceder a la prestación básica universal a que se le reconozcan los años de aportes efectuados en el antiguo
régimen de jubilaciones, es decir que se compensan los años con servicios prestados con anterioridad a la implantación del sistema de la ley 24.241”11.
Los requisitos para poder acceder a esta prestación son los siguientes:
o Acreditar el cumplimiento de los requisitos para obtener la PBU.
o Acreditar servicios con aportes comprendidos en el sistema de reciprocidad jubilatoria prestados hasta la vigencia de la ley 24.241, o sea hasta
el 15/07/1994.
o No percibir retiro por invalidez.
El haber o monto de la prestación es variable y se calcula según la naturaleza
de los servicios computables:
 Si la totalidad de los servicios son en relación de dependencia, será
equivalente al 1,5 % por cada año de servicio o fracción mayor de 6 meses, hasta un máximo de 35 años, calculado sobre el promedio de las
remuneraciones sujetas a aportes y contribuciones actualizadas y percibidas durante el período de 10 años inmediatamente anteriores a la cesación de servicios.
 Si la totalidad de los servicios son como autónomo, será equivalente al
1,5% por cada año de servicios con aportes o fracción mayor de 6 meses, hasta un máximo de 35 años, calculado sobre el promedio mensual
de los montos actualizados de las categorías en que revistó el afiliado, al
momento de la solicitud de la prestación.
 Si se tratara de servicios mixtos (sucesivos o simultáneos), el monto se
establecerá sumando el que resulte para los servicios en relación de dependencia y el correspondiente a los servicios autónomos, en forma proporcional para cada clase de servicios.
El haber máximo de la PC será equivalente a una vez el MOPRE por cada
año de servicios con aportes computados.
Cabe destacar, que al igual que la PBU, ninguna persona puede ser titular de
más de una PC.
Retiro por invalidez
Es el derecho que tiene el afiliado a obtener una renta mensual cuando ha
perdido al menos el 66% de su capacidad física o intelectual (66% de incapacidad),
siempre que no cumpla con los requisitos para tener una jubilación ordinaria o no
esté percibiendo la jubilación anticipada12.
El art. 48 establece los siguientes requisitos para poder obtener esta prestación:
11
12

Que se trate de una incapacidad total (física o intelectual): se entiende
que la incapacidad es total cuando la capacidad laborativa del afiliado
GRISOLÍA, JULIO ARMANDO, “Manual de Derecho Laboral” Ed. LexisNexis, Buenos Aires, 2008, pág. 810.
Ídem 3, pág. 811
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


10
se reduce al menos en un 66%, sea cual fuere la causa de producción
(enfermedad o accidente inculpable, accidente de trabajo o enfermedad profesional).
El afiliado no debe haber alcanzado la edad prevista para obtener la
PBU (es decir, en el caso de los hombres no haber alcanzado los 65
años y en el de las mujeres los 60 años)
Que el afiliado no esté percibiendo la jubilación anticipada
La duración de la incapacidad debe exceder el tiempo en el que el afiliado en relación de dependencia podría ser acreedor de una remuneración u otra prestación sustitutiva13, o en el caso del afiliado autónomo
a un año.
La determinación de la invalidez de los solicitantes estará a cargo de las Comisiones Médicas instituidas por el art. 51 de la ley 24.241.
En caso de considerar la comisión médica verificados en el afiliado los requisitos del art. 48 inc. a, de la ley, el trabajador tendrá derecho al retiro transitorio por
invalidez a partir de la fecha en que se declare la incapacidad. En este caso, el dictamen deberá indicar el tratamiento de rehabilitación psicofísica y de recapacitación
laboral que deberá seguir el afiliado. Estos tratamientos serán gratuitos para el afiliado.
El art. 50 de la ley 24.241 dispone que, transcurridos tres años desde la fecha
del dictamen transitorio, la comisión médica deberá citar al afiliado y procederá a la
emisión del dictamen definitivo por invalidez que ratifique el derecho al retiro definitivo por invalidez o lo deje sin efecto. El plazo señalado podrá prorrogarse excepcionalmente por dos años más, si la comisión médica considerare que en dicho plazo
se podrá rehabilitar al afiliado.
Pensión por fallecimiento
Consiste en la renta mensual que deben percibir los derechohabientes en caso de muerte del jubilado, del beneficiario de retiro por invalidez o del afiliado en actividad.
Según lo previsto, por el art. 53 son derechohabientes las siguientes personas:
 La viuda o viudo.
 El o la conviviente.
 Los hijos/as solteros/as e hijas viudas, que no gocen de jubilación, pensión,
retiro o prestación no contributiva, salvo que optaren por la pensión por fallecimiento, hasta la edad de 18 años14.
En lo que respecta a los convivientes, los mismos deben cumplir una serie de
requisitos para ser considerados tales a los efectos de la presente ley:
1. La convivencia debe haber sido pública, en aparente matrimonio y haber
tenido una duración de al menos cinco (5) años inmediatamente anterio-
13
Según el art. 208 LCT, el trabajador dependiente tiene derecho a la licencia paga por enfermedad por un período de 3 meses, si su antigüedad es menor de 5 años, y de 6 meses, si fuera mayor; plazos que se extienden a
6 y 12 meses, respectivamente, si el trabajador tuviera carga de familia.
14 Esta limitación de edad para los hijos no rige en el caso de que se encuentran incapacitados para el trabajo a
la fecha del fallecimiento del causante o a la fecha en que cumplieran los 18 años.
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res al fallecimiento del causante. Este plazo se reducirá a los dos años si
existe descendencia (hijos) reconocida por ambos convivientes.
2. El causante debe haberse encontrado separado legalmente o de hecho,
al momento del fallecimiento, o bien, haber sido soltero, viudo o divorciado.
3. La convivencia debe haber sido probada por cualquier medio previsto legalmente.
Si el causante se encontrare separado o divorciado, el o la conviviente excluyen al cónyuge supérstite sólo cuando éste hubiere sido declarado culpable de la
separación personal o del divorcio. De lo contrario, la prestación les será otorgada al
conviviente y al cónyuge supérstite por partes iguales, en caso de que el o la causante hubiere estado contribuyendo al pago de alimentos o si el causante hubiera
dado causa a la separación personal o al divorcio.
El art. 98 dispone el porcentaje del haber de la pensión: 1) 70% para la viuda,
viudo o conviviente, no habiendo hijos con derecho a pensión; 2) 50% para la viuda,
viudo o conviviente, cuando haya hijos con derecho a pensión; 3) 20 % para los hijos; 4) si no hubiere viuda, viudo o conviviente, el porcentaje del haber de la pensión
del causante del o de los hijos acrecerá distribuyéndose por partes iguales el porcentaje fijado para aquellos. El monto de las pensiones de todos los beneficiarios no
puede exceder el 100% de la prestación del causante.
Para la determinación del haber de las pensiones por fallecimiento del beneficiario, los porcentajes se aplicarán sobre el importe de la prestación que se hallaba
percibiendo el causante. En los casos de pensiones por fallecimiento del afiliado en
actividad, la determinación del haber de los porcentajes se aplicará sobre la prestación de referencia del causante determinada en el art. 97 (ingreso base).
Prestación Adicional por Permanencia (PAP)
Consiste en el derecho que se le otorga a los afiliados que opten por el régimen de reparto a partir del 15/07/94, a que les sean reconocidos los años de aportes
que van a realizar a él, en igual forma y metodología que lo establecido por la PC.
De este modo, se incorpora al haber mensual del beneficiario la porción que
corresponda en virtud de los años aportados después de la vigencia del nuevo sistema. Se adiciona a la PBU y a la PC.
Los requisitos para poder acceder a la misma son:
o Acreditar los requisitos para obtener la PBU.
o No percibir retiro por invalidez.
El haber mensual de la prestación se determina computando 1,5% por cada
año de servicios con aportes realizados al SIJP (aportes realizados a partir del
15/07/1994) en igual forma y metodología que la establecida para la PC.
También es una prestación única.
Prestación por edad avanzada (PEA)
Fue introducido por la ley 24.347, pues no estaba previsto originariamente por
la ley 24.241.
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Esta destinada a dar cobertura a aquellas personas que inician su actividad
laboral a cierta edad o que se ven imposibilitadas, por las más diversas razones, de
acreditar la totalidad de los servicios cumplidos a lo largo de su vida laboral. Confiere
cobertura tanto a los trabajadores en relación de dependencia como a los trabajadores autónomos (art. 34 bis de 24.241).
Para ser beneficiario de esta prestación, se debe cumplir con los siguientes
requisitos:
 Tener setenta (70) años de edad, cualquiera sea el sexo.
 Acreditar diez (10) años de servicios con aportes computables en uno
o más regímenes jubilatorios comprendidos en el sistema de reciprocidad, con una prestación de servicios de al menos 5 (cinco) años con
aportes durante el período de 8 (ocho) años inmediatamente anteriores
al cese de la actividad.
 En el caso de los trabajadores autónomos, deberán acreditar además
una antigüedad en la afiliación no inferior a los cinco años, en las condiciones que establece la reglamentación del decreto 679/95.
El haber mensual de la prestación será equivalente al 70% de la PBU, más la
PC y la PAP.
El goce de la PEA es incompatible con la percepción de toda jubilación, pensión o retiro civil o militar, provincial o municipal, sin perjuicio del derecho del beneficiario a optar según su conveniencia. Si el afiliado mayor de sesenta y cinco años se
incapacitare, tendrá derecho al PEA.
Régimen de compatibilidades.
El art. 34 de la ley 24.241 establece la compatibilidad entre la jubilación y las
tareas remuneradas, al disponer que los beneficiarios podrán reingresar a la actividad remunerada tanto en relación de dependencia como en carácter de autónomos.
El reingresado tiene la obligación de efectuar los aportes que en cada caso
correspondan, los que serán destinados al Fondo Nacional de Empleo. En cambio,
las contribuciones de los empleadores y el 16% de los 27% correspondientes a los
aportes de los trabajadores autónomos, se ingresarán al régimen previsional público.
El empleador tiene la obligación de comunicar a la autoridad de aplicación la
situación del beneficiario que reingresa a la actividad remunerada en relación de dependencia. La obligación de comunicar también recae sobre el beneficiario, pero en
este caso ante al AFIP.
Pese al principio general, en el inc. 4 y 5 del citado artículo prevén unas situaciones de incompatibilidades:
 Los beneficiarios de prestaciones previsionales que hubieren accedido a tales
beneficiarios amparados en los regímenes especiales para quienes presten
servicios en tareas penosas, riesgosas o insalubres, determinantes de vejez o
agotamiento prematuro, no podrán reingresar a la actividad ejerciendo alguna
de las tareas que hubieran dado origen al beneficio previsional. Si así lo hicieren, se le suspenderá el pago de los haberes correspondientes al beneficio
previsional otorgado. La ley, en cambio, no prohíbe el reingreso del beneficiario en tareas comunes.
 El goce de la prestación de retiro por invalidez es incompatible con el desempeño de cualquier actividad en relación de dependencia.
INSTITUCIONES DE SEGURIDAD SOCIAL – Unidad Nº 4
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 El desempeño de una función o cargo remuneratorio o prestación contractual
bajo cualquier modalidad en la Administración Pública Nacional, es incompatible con la percepción de un beneficio previsional o haber de retiro proveniente de cualquier régimen de previsión nacional, provincial o municipal
Movilidad previsional
Podemos definir a la movilidad previsional como el mecanismo que se utiliza
para aumentar las jubilaciones.
En virtud de la sanción de la Ley Nº 26.417 (octubre de 2008) se establece
que a partir de marzo de 2009 las prestaciones previsionales del SIPA se ajustarán
dos veces al año (marzo y septiembre) según lo prescripto por el vigente art. 32 de
la ley 24.241.
La fórmula que se aplicará sobre las prestaciones a los efectos de actualizarlas tiene básicamente dos componentes:
 La evolución de los salarios que mide el INDEC.
 Los ingresos previsionales, nutridos de los aportes y contribuciones de
los trabajadores activos y los recursos tributarios.
Si por ejemplo, en un caso hipotético, los salarios aumentasen en ese período
un 18% y la recaudación un 22%, se dividirán por dos ambos coeficientes y el aumento semestral para los jubilados será del 20%
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