Siglo nuevo O frecer mejores posibilidades de desarrollo económico a sus habitantes, es el principal desafío que enfrenta hoy México, ya que con el constante crecimiento de la población y el endurecimiento de las políticas migratorias por parte de Estados Unidos, la migración dejará de ser una alternativa para liberar las presiones sociales que se generan en nuestro país debido a la falta de empleo y oportunidades. El problema del desarrollo económico es que no podemos hablar de él si antes no hemos pasado por la etapa del crecimiento y, en el caso mexicano, el promedio de crecimiento del PIB en los últimos 25 años ha sido poco más del 0.6 por ciento al año. Otro factor que determina el desarrollo económico tiene que ver con la entidad federativa donde cada individuo decide vivir, pues aunque estamos todos dentro de territorio mexicano, no es lo mismo vivir en el D.F., donde el PIB per cápita es de $36,500 (millones de pesos a precios de 1993) en promedio, mientras que en Oaxaca es de $6,400 aproximadamente. Esta desigualdad, también se manifiesta en la concentración de riqueza en algunos estados de la República, ya que en nueve estados –Distrito Federal, Estado de México, Nuevo León, Jalisco, Chihuahua, Veracruz, Guanajuato, Coahuila y Puebla- se concentra aproximadamente el 64 por ciento del PIB generado en el país, mientras que otros 19 estados -entre ellos Durango- reúnen el 19 por ciento. Son cifras contundentes que nos permiten ver que en México las desigualdades en Veracruz vez de ir aminorando se agudizan, y no se deben a que en unas regiones del país se quiera trabajar más y en otras menos, ni tampoco a que en un estado sus pobladores sean más inteligentes que en otro. Esto tiene que ver con el entorno económico y con las ramas productivas que estén fortalecidas en ese sitio, así como aquellas ramas que sean apoyadas por los gobiernos. De esa forma, vemos que estados como Oaxaca, Nayarit, Hidalgo, Guerrero, Tabasco y Chiapas, con baja participación del PIB nacional, privilegian actividades primarias como la minería, agricultura, silvicultura y/o pesca; mientras que estados como Nuevo León, Baja California, Chihuahua o Coahuila privilegian a la industria, las comunicaciones y el comercio, que son actividades con más alto valor agregado. Los puntos a considerar en el desarrollo económico nacional son la relativa estabilidad macroeconómica y las Distrito Federal Sn • 53