LA METODOLOGIA DEL COSTE DEL VIAJE. BASES PARA UNA APLICACION A LOS DESTINOS TURISTICOS Turismo: recursos y estrategias Riera Font, Antoni Rossello Nadal, Jaume Tirado Bennasar, Dolores Universitat de les Illes Balears Resumen: El objetivo del presente trabajo es analizar el tratamiento convencional que reciben los turistas en la Metodología del Coste de Desplazamiento. Entendemos, al respecto, que existe una laguna a nivel teórico sobre la aplicabilidad de la Metodología cuando se tienen en cuenta a los turistas que visitan un espacio natural. En este sentido surgen preguntas como: ¿Cúal es el valor de los servicios recreativos que proporciona un espacio natural a sus visistantes incluyendo a los turistas que lo visitan? ¿ Existen razones de peso para dar un tratamiento diferenciado a los turistas en la Metodología del Coste de Deplazamiento? ¿ Sigue existiendo la misma relación entre la demanda de un espacio natural y el coste de viaje in-situ cuando contemplamos a los turistas? ¿ Qué papel juega en la demanda de un servicio recreativo el coste de viaje incurrido por el turista desde su país de residencia al destino turístico? ¿Qué proporción de estos costes es atribuible a la visita de un espacio natural? LA METODOLOGIA DEL COSTE DEL VIAJE. BASES PARA UNA APLICACION A LOS DESTINOS TURISTICOS Muchos de los espacios naturales que nos rodean son frecuentados, no sólo por los residentes en la zona sino también por los turistas, para realizar distintos tipos de actividades recreativas proporcionando importantes servicios. Desde una perspectiva económica, el valor de estos servicios depende de las características o atributos del espacio natural en que se desarrollan (masa forestal, grado de congestión, longitud de la playa, superficie total del espacio, superficie de la zona acuática, nº de zonas de ocio disponibles, nº de puntos de acceso, nº de zonas de picnic, nº de zonas de camping, nº de amarres, descriptores de la calidad del agua -oxígeno disuelto, pH, fosfatos, turbiedad,...- y otros descriptores en general). Estos atributos pueden verse afectados por dichas actividades recreativas, así como por actividades no-recreativas tales como: extracción de minerales, trasvases de agua,... De ahí la importancia de valorar estos atributos para, gestionar adecuadamente su uso. No obstante, el hecho de que su asignación no se realice a través de los mercados dificulta extremadamente su valoración al no disponer de información observada sobre precios. La superación de las carencias señaladas apunta la necesidad de hallar estimaciones de valor acudiendo a metodologías apropiadas. Entre éstas, centraremos nuestra atención en la conocida METODOLOGÍA DEL COSTE DE DESPLAZAMIENTO (Travel Cost Method). La primera versión del modelo (Clawson, 1959; Clawson y Knetsch, 1966) es muy sencilla: los individuos manifiestan una demanda por un espacio recreativo a partir de los gastos de transporte (y de entrada) que contratan para visitarlo. La función de demanda es la relación existente y entre el precio -aquí el coste de acceso C i - y la cantidad -aquí la tasa de frecuentación-. Siendo i el número total de trayectos efectuados por los residentes de la zona i , y Ni la población de la zona i. La demanda del trayecto es: i /Ni = ƒ ( Ci ) La hipótesis central del modelo, según la cual los individuos de diferentes zonas frecuentarán un espacio natural en la misma proporción si se enfrentan a costes de acceso iguales, es fácilmente vulnerable. - En primer lugar, si existen diferencias en las preferencias, o en los niveles de renta de una zona a otra,... éstas afectarán a la demanda. - En segundo lugar, la evidencia demuestra que los individuos, que participan de las actividades recreativas de un espacio natural, frecuentan más de un espacio o, que cuando menos, tienen la posibilidad de hacerlo. - En tercer lugar, cada región contiene espacios substitutivos que presentan diferencias de calidad que los individuos tienen en cuenta, practicando así un trade-off entre calidad y precio de la experiencia recreativa. A pesar de estas limitaciones, el modelo del coste de desplazamiento goza de prestigio académico, y son numerosas sus aplicaciones para valorar el valor recreativo de espacios naturales en países anglosajones. En este sentido, la metodología Clawson ha sido enriquecida de forma que no sólo el coste de la visita al espacio objeto de estudio entra como argumento en la función de demanda sino que además se toman en consideración las características socioeconómicas del visitante, (Si1 , Si2 , … , Sin ) tales como: renta personal, edad, nivel de estudios, estado civil, etc. ; y las posibilidades de sustitución entre espacios que presentan diferencias de calidad. Para ello, basta con introducir los costes de transporte a diferentes lugares Csk y aquellos atributos que permiten diferenciar un espacio de otro Ask (Klink, 1988; Kling y Weinberg, 1990). s s s s i /Ni = ƒ (Ci , C 1 , … , C k , Si1 , ... , Sin , Ai , A 1 , .. , A k ) Las justificaciones teóricas para estimar la demanda en función de la calidad de los atributos que integran un espacio natural se apoyan, a nuestro entender, en la condición de complementariedad débil de Mäler, 1974. Desde entonces, se han realizado algunos progresos en esta dirección (Bockstael, Hanemann y Strand, 1985; Desvousges y Smith, 1985; Mullen y Menz, 1985; Caulkins, Bishop y Bouwes, 1986; Sanders, Walsh y Mckean, 1991). Ello permitirá tener en cuenta las posibilidades de sustitución entre espacios y estimar, así, la disposición a pagar que tienen los visitantes por las características que presentan estos espacios. A tal fin podemos distinguir cuatro familias de modelos: los modelos regionales con integración explícita de la variable calidad (Mullen y Menz, 1985), los modelos denominados de parámetro variable (Vaugham y Russell, 1982), los modelos de elección discreta y el modelo del coste de desplazamiento hedónico (Brown y Mendelsohn, 1984). Este último está especialmente concebido para evaluar los atributos de un espacio natural siguiendo la metodología del coste de desplazamiento e intenta revelar los precios ficticios asociados a estos atributos estimando cuál es su demanda. De esta forma el método del Coste de Viaje Hedónico revela la disposición a pagar que tienen los usuarios por las características que presenta un espacio recreativo. Los precios de dichas características son estimados a partir de la regresión de estos atributos con el coste de viaje. La demanda de un espacio por la calidad de los atributos que presenta se pone de manifiesto a partir de la comparación que los usuarios hacen a la hora de seleccionar dichos atributos a diferentes precios. Brown y Mendelsohn apoyándose en la metodología del Coste del Viaje centran la atención en la elección que hacen los residentes de una zona cuando se enfrentan a un conjunto de bienes colectivos, cada uno de los cuales presenta diferentes características. Si nos movemos en un contexto de múltiples espacios, cada uno de los cuales presenta diferentes atributos, no cabe duda que el precio de dicho espacio puede ser descompuesto en un conjunto de precios implícitos por cada una de las diferentes características utilizando el conocido Método de Valoración de los Precios Hedónicos. Si las relaciones entre el gasto privado y el acceso a una zona determinada cambia entre los individuos, los individuos mostraran diferentes precios por estos atributos. Por ejemplo, cada residente geográficamente disperso en una región se enfrenta a un diferente conjunto de precios implícitos para acceder a las características que ofrece una zona recreativa. Observando la elección que los individuos hacen cuando se enfrentan a diferentes costes de oportunidad para comprar el acceso a un bien público, como por ejemplo, las playas, es posible estimar la demanda de las características de dicho bien. Situados en este punto, entendemos que el Método del Coste de Viaje Hedónico permite incorporar a los turistas in-situ, pero ¿debe ser incorporados como si se tratase de un residente?, o, ¿existen razones de peso para darle un tratamiento diferenciado en la Metodología del Coste de Desplazamiento? Tal y como Smith y Kopp sugieren, aquellos que utilizan el método en su versión más convencional tienden a olvidar las limitaciones espaciales del método: el concepto de frecuentación y su medida, e incluso, el coste unitario de desplazamiento adquieren matices diferentes para aquellos que recorren importantes distancias para utilizar principalmente los servicios recreativos de las playas, como es el caso de los turistas (Bell y Leeworthy, 1990). El modelo que proponen Bell y Leeworthy marca la diferencia entre la función de demanda recreativa del «turista» y la del «residente». Según estos autores el turista se enfrenta a un proceso de elección diferente al que se enfrentan aquellos que viven cerca del lugar (residentes), y por ello deben ser tratados de forma diferente. Hasta entonces, turistas y residentes habían sido tratados de forma homogénea. Los que acostumbran a trabajar con dicha metodologia suponen que el viaje tiene un único objetivo: disfrutar de los servicios recreativos de las playas, pescar en un río, practicar el senderismo en un paraje natural, etc. Fuera de esta metodología queda contemplar otros objetivos como disfrutar de la vida nocturna del lugar, de la cultura, ... Es mas, los viajes no tienen porque ser homogéneos: parece existir suficiente evidencia empírica para afirmar que aquellos que recorren largas distancias suelen permanecer más tiempo en el espacio que aquellos que viven en los alrededores del lugar. Ello hará que el individuo realice menos viajes pero más largos. Esta es la substitución a la que hacían referencia Smith y Kopp y la base teórica del pensamiento de Gibbs y Conner (1973) cuando establecían una relación directa entre coste del viaje y duración del mismo. Además, la forma de viajar cambia con la distancia. Sólo con el fin de ilustrar estas ideas, tal vez sea bueno hacer una pequeña referencia a la ENCUESTA del GASTO TURISTICO en BALEARES que se realiza desde el año 1984 para determinar, fundamentalmente, el gasto turístico por persona y día realizado, tanto en su país de origen, como en el país de destino; y conocer aspectos relativos a la motivación y al grado de satisfacción del turista. La muestra realizada en temporada alta es de 5.3000 turistas y el muestro se realiza por cuotas de nacionalidad. Esta encuesta, junto a otra encuesta realizada en el 1994 para elaborar el Plan de Marketing, revela aspectos tales como: - las actividades que realizan los turistas durante su estancia en las Islas (Gráfico1); - los lugares que consideran interesantes para visitar. (Gráfico 2); -los motivos que le impulsaron a visitar las Islas. (Gráfico 3); - el número de veces que han visitado las Islas (Gráfico 4); - la importancia que atribuyen a la variable calidad del entorno (Graficó 5 y 6). En este sentido, la importancia que la variable «Calidad del entorno» está adquiriendo en los últimos años queda patente en el siguiente cuadro donde la variable «Precio» tiene un peso menor que la «Calidad del entorno» en la demanda de determinadas zonas, así como para algunas nacionalidades (la tabla presenta el porcentaje de turistas que consideran prioritarias ambas variables para elegir pMallorca com destino turístico). Alemana Española. S.Tramuntana B. Pollença Precio 31,3 17,7 20 26,8 Calidad entorno 36,6 31,7 56,4 27,3 Fuente: Encuesta del Gasto Turístico, 1995 PRACTICED ACTIVITIES DURING THE STAY ON THE ISLAND CHART 1 90 80 70 all 60 50 german 40 30 british 20 10 Sports Nightlife visits Tipical hikes cruises Water sports sea walks /pool Sunbathing /beach Sunbathing 0 Excursions Sport Tranquility Environment Quality of hotels The Beach Climate Price REASONS FOR TO VISIT THE ISLAND CHART 3 90 80 70 60 50 40 30 20 10 0 parks Amusement Entertaintment Tipocal villages Scenery Attractive Historic sites Museums INTERESTING PLACES TO VISIT CHART 2 70 60 50 40 30 20 10 0 TIMES WICH HAVE BEEN TO THE BALEARIC ISLANDS CHART 4 40 35 30 25 20 15 10 5 0 Once twice three four More than four IMPORTANTS REASONS PRICES VERSUS ENVIRONMENT BY NATIONALITY CHART 5 60 50 40 30 Price 20 environment 10 Scandinavian BENELUX Italian French Spanish British German 0 ENVIRONMENT BY TIMES WICH HAVE BEEN TO THE BALEARIC ISLANDS . CHART 6 40 30 20 10 0 Once 2 to 4 More times than four A través de un modelo de elección discreta tipo Logit, hemos modelizado la respuesta a la pregunta ¿ Ha considerado prioritaria la calidad del en el momento de elegir la Isla como destino turístico? Esta variable de respuesta cualitativa se explica en función de las diversas categorias de nacionalidad, edad, profesión, tipo de alojamiento, nº de dias de estancia, nº de veces que ha visitado las Islas,... siendo significativas (test de Wald) las de nacionalidad (los alemanes con signo positivo y el resto negativo), la impresión del viaje (cuanto mejor opinión mayor valoración del entorno), el número de veces (aquellos que repiten su estancia muestran mayor probabilidad de valorar el entorno) y el nº de días de estancia (cuanto mayor es la estancia, mayor es la apreciación del entorno). Por ello, a nuestro modo de ver, existen razones suficientes para diferenciar a los turistas de los residentes; sin embargo, extender la metodología en este sentido no es fácil. La mayor parte de los turistas viajan a través de viajes organizados, contratan un paquete turístico cuyo precio lleva implicito una duración determinada, excursiones muchas de ellas ya programadas,... que condicionan el proceso de elcción del turista. Además, existe suficiente evidencia empirica para demostrar que se producen asimetrias en la información que dispone un turista in-situ: desconen el entorno del país que visitan, se mueven por tópicos,... lo cual producirá sesgos importantes en la estimación. Pero en todo caso, y situados en el mejor de los escenarios, para responder a la pregunta que encabeza este articulo cabe responder a cuestiones tales como: ¿ Es diferente el mecanismo de decisión que conduce a frecuentar un espacio natural según se trate de un turista in-situ o de un residente? ¿ Sigue existiendo la misma relación entre la demanda de un espacio natural y el coste de viaje in-situ cuando contemplamos a los turistas? ¿ Qué papel juega en la demanda de un servicio recreativo el coste de viaje incurrido por el turista desde su país de residencia al destino turístico? Es decir, ¿ Qué proporción de este coste es atribuible a la frecuentación de un espacio natural de los muchos existentes en una zona turística? Bibliografía: BELL F., LEEWORTHY V.R. (1990) « Recreational Demand by Tourists for Saltwater Beach Days», Journal of Environmental Economics and Management,18, 189-205. BOCKSTAEL N.E., HANEMANN M., STRAND I.E. 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