Documento descargado de http://www.elsevier.es el 31/05/2011. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. > INSPIRAR EL CAMBIO ¿Qué método de medición de la temperatura corporal es más preciso? Kathleen J. Dunleavy, MSN, MA, RN, CNRN, CNA Al retirarse los termómetros de mercurio convencionales hacia finales del siglo pasado, en los hospitales, consultas y domicilios se introdujeron muchos dispositivos distintos de medición de la temperatura. Nuestro centro utilizó termómetros digitales orales y rectales durante algunos años, y posteriormente utilizó termómetros timpánicos en las unidades de pacientes ingresados. En el año 2005 algunas enfermeras se preocuparon por la precisión de los termómetros timpánicos, así como su eficacia en la UCI de neurociencias. ¿Eran lo suficientemente fiables para los pacientes de la UCI donde la temperatura se controla muy de cerca? Para responder a esta pregunta decidimos llevar a término un estudio para determinar qué aparto de medición de la temperatura de nuestros pacientes era más preciso. No obstante, en primer lugar cabe considerar por qué la medición de forma precisa de la temperatura es tan importante en la UCI de neurociencias. Temperaturas críticas En la UCI se utilizan métodos de medición de la temperatura corporal invasivos y no invasivos. El catéter de la arteria pulmonar que mide la temperatura sanguínea es considerado el mejor aparato estándar para medir la temperatura corporal1. La temperatura corporal se regula con los receptores centrales y periféricos, integrados en el hipotálamo2. Tanto las respuestas anatómicas como las conductales a los cambios de temperatura mantienen la homeostasis o un rango normal alrededor de los 37 °C. En la UCI de neurociencias prestamos mucha atención al control de la temperatura, ya que la hipertermia puede producir un gran efecto en el cerebro. Se considera hipertermia la temperatura 48 Nursing. 2011, Volumen 29, Número 3 superior a 38 °C3. Este aumento de temperatura puede ser deletéreo porque los productos derivados del aumento celular del metabolismo, incluyendo el dióxido de carbono, puede contribuir a elevar la presión intracraneal. En pacientes neurológicos gravemente enfermos la fiebre se relaciona con los peores resultados3. Intentamos mantener a los pacientes febriles con una lesión cerebral por debajo de condiciones térmicas normales (37 °C)4. En estas circunstancias, la monitorización continua de la temperatura en pacientes con lesiones neurológicas, guía cada decisión del tratamiento5. Aumenta la preocupación Las enfermeras de la UCI de neurociencias se dieron cuenta de que algunos termómetros timpánicos del mismo fabricante daban tres lecturas diferentes para un mismo paciente, lo que les llevó a considerar su eficacia y su precisión. De la misma forma nos preguntamos si la técnica de la persona que los utiliza, la limpieza, el estado de los sensores, la variabilidad general y la precisión del instrumento influían en la eficacia. En el año 2007 las enfermeras de nuestra unidad llevaron a cabo un estudio sobre los instrumentos para medir la temperatura. Las lecturas de los termómetros timpánicos mostraron una variación de la temperatura cerebral de 0,9 °C, aunque la variación podía ser significativa (de más de 2,5 °C) en determinados pacientes6. En nuestro estudio de 10 pacientes, al comparar las mediciones timpánicas con las de un termómetro digital oral, se observó una diferencia de 0,8 °C o más en el 58% de las mediciones. Luego comparamos 241 temperaturas timpánicas con las temperaturas de la vejiga. El 35% (85 de 241) mostraron una diferencia de 0,8 °C o más, y de este 35% casi el 38% mostró una variación de 1,5 °C o más. Del total comparado, el 10% mostró una variación de 1,5 °C o mayor. Comparamos las temperaturas de la vejiga con las de la arteria pulmonar, estudiando 27 mediciones, de las que 4 (15%) mostraron una diferencia de 0,8 °C o mayor, pero nunca fueron superiores a 1,0 °C. Las temperaturas de la vejiga y de la arteria pulmonar casi siempre mostraban una diferencia de sólo 0,1 o 0,2 °C, siendo superior la temperatura de la vejiga. Con los hallazgos del estudio se inició un termosensor de las temperaturas de la vejiga como modelo para nuestros pacientes gravemente enfermos, excepto para los que no permanecían en el centro durante más de 24 h (los pacientes que se sometían a una craneotomía o a procedimientos de neurorradiología). Se utilizaron catéteres con termistores sensoriales de vejiga para medir la temperatura de forma práctica en pacientes que necesitaban sondas vesicales. La monitorización de la temperatura en la vejiga es eficaz, comparada con la medición de la temperatura en la arteria pulmonar7. Se utilizan métodos de monitorización de la temperatura alternativos en pacientes anúricos, como son la medición rectal o del esófago8. Existen tantas variables que influyen en los termómetros timpánicos (estado del sensor, presencia de cerumen, colocación en el canal de audición, técnica de quien lo utiliza y equipo de mantenimiento), que, combinadas, se traducen en mediciones poco fiables para una UCI de neurociencias. La máxima limitación de nuestro estudio fue el pequeño tamaño de la muestra. No obstante, otros estudios hallaron resultados similares Documento descargado de http://www.elsevier.es el 31/05/2011. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. Ahora es el momento… ¡Pon al día tu Inglés Saludable! relacionados con el impacto negativo de los termómetros timpánicos9. Los termómetros timpánicos no son tan buenos A finales de 2007 decidimos prescindir de los termómetros timpánicos dentro de nuestra UCI, ya que los resultados de este pequeño estudio iban en la misma línea que informes recientes. Los pacientes con lesiones cerebrales graves requerían una medición de la temperatura muy precisa, y la temperatura de la vejiga reflejaba la temperatura corporal. La mayoría de estos pacientes necesitaban una sonda vesical para controlar su balance de líquidos durante el período crítico, por lo que se podían utilizar las sondas vesicales con termosensores. Aunque no se midió en el estudio, probablemente la disminución de la carga de trabajo de la enfermería sea un segundo beneficio de la monitorización de las lecturas de la temperatura frente a la lectura manual. Durante el año en que se hizo el estudio y a causa de la preocupación del centro, se abandonó la utilización de termómetros timpánicos. N Indicado para todos los profesionales de la sanidad que deseen mejorar su inglés técnico BIBLIOGRAFÍA 1. Bridges E, Thomas K. Noninvasive measurement of body temperature in critically ill patients. Crit Care Nurse. 2009;29(3):94-97. 2. Sessler DI. Thermoregulatory defense mechanisms. Crit Care Med. 2009; 37(suppl 7):S203-S210. 3. Hickey JV. The Clinical Practice of Neurological and Neurosurgical Nursing. 6th ed. Philadelphia, PA: Lippincott Williams & Wilkins; 2009. R. Citores / M. Pellegrinelli / I. Morquecho >cXajnZjcY^XX^dcVg^dbY^Xd>c\ah":heVda# 4. Badjatia N. Hyperthermia and fever control in brain injury. Crit Care Med. 2009;37(suppl 7):S250S257. 8dceg{Xi^Xd89eVgVedYZgegVXi^XVg ijegdcjcX^VX^cnijXdbegZch^cdgVa# 5. Mcilvoy L. Comparison of brain temperature to core temperature: a review of the literature. J Neurosci Nurs. 2004;36(1):23-31. 8dcZ_ZgX^X^dhfjZbZ_dgVg{c ij^c\ahiVcid]VWaVYdXdbdZhXg^id# 6. Kirk D, Rainey T, Vail A, Childs C. Infra-red thermometry: the reliability of tympanic and temporal artery readings in predicting brain temperature after severe traumatic brain injury. Crit Care. 2009;13(3):R81. http://ccforum.com/ content/13/3/R81. 7. Fallis WM. The effect of urine fl ow rate on urinary bladder temperature in critically ill adults. Heart Lung. 2005;34(3):209-216. 8. Seder DB, Van der Kloot TE. Methods of cooling: practical aspects of therapeutic temperature management. Crit Care Med. 2009;37(suppl 7):S211S222. 9. Hooper VD, Andrews JO. Accuracy of noninvasive core temperature measurement in acutely ill adults: the state of the science. Biol Res Nurs. 2006;8(1):2434. Kathleen J. Dunleavy es directora del cuidado del paciente de la unidad neurológica de cuidados intensivos del Columbia University Medical Center, New York-Presbyterian Hospital, en Nueva York (Nueva York). Nursing. 2011, Mayo 49 OFERTA ESPECIAL P.V.P. HEALTHY ENGLISH 49€ .%'---,)% >C9>86C9D:A 8â9><D%%'&&-%& Oferta válida en España hasta el 31/12/2011 envío gratuito lll#ZahZk^Zg#Zh >CIGD9J8>:C9D:A 8â9><D%%'&&-%&