94 Historia del pensamiento económico producción de una economía entre los que se dedican a producir. Smith examinó la distribución de la renta en el resto de los capítulos del Libro I. El significado del valor Smith creía que la palabra valor tiene dos significados distintos y unas veces expresa la utilidad de un objeto y otras el poder de compra de otros bienes que confiere la propiedad de ese objeto. Uno puede denominarse “valor de uso”; el otro, “valor de cambio”. Las cosas que tienen el máximo valor de uso a menudo tienen un escaso o nulo valor de cambio; y las que tienen el máximo valor de cambio a menudo tienen, por el contrario, un escaso o nulo valor de uso. Nada es más útil que el agua, pero con ella no se puede comprar casi nada; no se puede obtener casi nada a cambio. Un diamante, por el contrario, apenas tiene valor de uso, pero a menudo se puede cambiar por él una gran cantidad de bienes15. Según Smith, el valor de cambio es el poder de una mercancía para comprar otros bienes, es decir, su precio. Ésta es una medida objetiva expresada en el mercado. Su concepto de valor de uso es ambiguo y a ello se deben en buena medida sus dificultades para explicar los precios relativos. Por una parte, tiene connotaciones éticas y es, por tanto, una vuelta al escolasticismo. Los propios criterios puritanos de Smith son especialmente evidentes en su afirmación de que los diamantes apenas tienen valor de uso. Por otra parte, el valor de uso es el poder de una mercancía para satisfacer deseos, la utilidad que se obtiene por poseer o consumir un bien. Cuando se consume una mercancía, se obtienen varios tipos de utilidad: su utilidad total, su utilidad media y su utilidad marginal. Smith centra la atención en la utilidad total –los economistas no comprendieron la relación entre la utilidad marginal y el valor hasta cien años después de que escribiera Smith– y eso le impidió entender el papel que desempeña la demanda en la determinación de los precios. Es evidente que la utilidad total del agua es mayor que la de los diamantes; eso es a lo que se refería Smith cuando señaló el elevado valor de uso del agua en comparación con el de los diamantes. Sin embargo, como la utilidad marginal de una mercancía a menudo disminuye cuanto mayor es la cantidad que se consume de ella, es muy posible que otra unidad de agua generara menos utilidad marginal que otra de diamantes. El precio que estamos dispuestos a pagar por una mercancía –el valor que concedemos a la adquisición de otra unidad– no depende de su utilidad total sino de su utilidad marginal. Como Smith no lo reconoció (como tampoco ningún otro economista hasta la década de 1870), no pudo encontrar una solución satisfactoria a la paradoja de los diamantes y el agua ni ver la relación entre el valor de uso y el valor de cambio. Smith y los precios relativos Como Smith tenía unas ideas algo confusas sobre los factores que determinan los precios relativos, desarrolló tres teorías distintas sobre ellos: (1) una teoría del valor basada en el 15 Ibid., pág. 28. LANDRETH - Historia del pensamie94 94 04/04/2006 16:22:55 95 Capítulo 4. Adam Smith coste del trabajo, (2) una teoría del valor basada en la cantidad de trabajo que se puede comprar y (3) una teoría del valor basada en el coste de producción. Postuló dos estados distintos de la economía: el estado primero y rudo o sociedad primitiva, que es una economía en la que no se ha acumulado capital y nadie se ha apropiado de la tierra; y una economía avanzada, en la que el capital y la tierra ya no son bienes libres (tienen un precio mayor que cero). La teoría del valor basada en el coste del trabajo en una sociedad primitiva. En el estado primitivo de la sociedad que precede tanto a la acumulación de capital como a la apropiación de la tierra, la relación entre las cantidades de trabajo necesario para adquirir los diferentes objetos parece que es la única circunstancia que puede servir de regla para intercambiarlos. Por ejemplo, si en una nación de cazadores normalmente cuesta el doble de trabajo cazar un castor que cazar un ciervo, un castor debería intercambiarse naturalmente por, o valer, dos ciervos16. Según la teoría del coste del trabajo de Smith, el valor de cambio o precio de un bien en una economía en la que casi no hay tierra y capital o en la que estos bienes son libres, depende de la cantidad de trabajo necesario para producirlo. Eso nos lleva a la primera dificultad que plantea la teoría del valor basada en el coste del trabajo. ¿Cómo medimos la cantidad de trabajo necesaria para producir una mercancía? Supongamos que dos trabajadores están trabajando sin capital, que la tierra es libre y que en una hora el trabajador Jones produce una unidad de producto final y el trabajador Brown produce dos. Supongamos que todo lo demás se mantiene constante –o utilizando la expresión abreviada de la teoría, ceteris paribus– por lo que la única causa de las diferencias de productividad es la diferencia de cualificaciones de los trabajadores. ¿Se necesita una hora de trabajo para obtener una unidad de producción o dos horas? Smith reconoció que la cantidad de trabajo necesaria para producir un bien no puede medirse simplemente en horas de reloj, ya que también hay que tener en cuenta, además del tiempo, el ingenio o la cualificación y las dificultades o los aspectos desagradables de la tarea. Llegado a este punto, Smith se encontró con una dificultad con la que se han encontrado todas las teorías del valor basadas en el coste del trabajo y que no han conseguido resolver los autores posteriores. Si la cantidad de trabajo es una función de más de una variable, debemos encontrar la manera de determinar la importancia relativa de todas las variables. Supongamos que tenemos la siguiente información sobre la producción de los bienes A y B: Bien A Bien B Tiempo Dificultad Ingenio 1 hora 2 horas X 2X 2Y Y ¿Cómo se compara la cantidad de trabajo necesaria para producir el bien A con la cantidad de trabajo necesaria para producir el bien B? Las unidades para medir el tiem16 Ibid., pág. 47. LANDRETH - Historia del pensamie95 95 04/04/2006 16:22:56 96 Historia del pensamiento económico po son las horas de reloj, pero no se dan las unidades para medir el ingenio y la dificultad. Aunque no es fundamental conocer estas unidades para el problema que nos ocupa, es esencial ser capaz de medir el grado de dificultad y de ingenio necesario para producir cada uno de los dos bienes. Smith trató de resolver este problema de reducir el tiempo, la dificultad y el ingenio a un denominador común manteniendo que las diferencias de tiempo, dificultad e ingenio se reflejan en los salarios que se pagan al trabajo. Si el trabajador Brown recibe un salario de 2 dólares por hora y el trabajador Jones recibe un salario de 1 dólar por hora, estos salarios reflejan las diferencias de cualificación o de ingenio. Si trabajan en sectores distintos, sus salarios también reflejarán (en parte) los aspectos desagradables o difíciles de su trabajo. La sugerencia de Smith replantea meramente el problema en lugar de dar una solución. El fin de su teoría del valor es explicar las fuerzas que determinan los precios relativos, pero los propios salarios son uno de los numerosos precios de la economía que su teoría debe explicar. Cuando llegó a la conclusión de que el salario pagado al trabajo es una medida de las cantidades relativas de tiempo, dificultad e ingenio necesarias para producir una mercancía, estaba eludiendo la cuestión. Estaba diciendo que un bien tiene un valor acorde con los salarios pagados al trabajo, no acorde con la cantidad de trabajo que contiene el bien. Este razonamiento es circular. Smith utilizó un conjunto de precios, a saber, los salarios, para explicar otro conjunto de precios. La cantidad de trabajo que se puede comprar en una sociedad primitiva. Una vez analizada la teoría de los precios relativos basada en el coste del trabajo en el caso de una sociedad primitiva, la teoría basada en la cantidad de trabajo que se puede comprar resultará muy sencilla. Según Smith, en la teoría de la cantidad de trabajo que se puede comprar, el valor de un bien “para los que lo poseen y que quieren intercambiarlo por algunos nuevos productos es exactamente igual a la cantidad de trabajo que pueden comprar o de la que pueden disponer”17. Smith llegó a la conclusión de que si se necesitan dos horas para cazar un castor o dos ciervos, dos ciervos serán iguales a un castor en el mercado, es decir, el precio de un castor será el doble del precio del ciervo, 1Ca = 2Ci. La teoría del trabajo en una economía avanzada. El modelo de Smith para una sociedad avanzada se diferencia de su modelo para una economía primitiva en dos importantes aspectos: se ha acumulado capital y ha habido apropiación de la tierra. Ya no hay bienes libres y el precio final de un bien también debe incluir los rendimientos del capitalista en forma de beneficios y los del terrateniente en forma de rentas. Los precios finales generan unos ingresos formados por los pagos de salarios, beneficios y rentas a los factores. La teoría de los precios relativos basada en el coste de producción. Smith se esforzó en desarrollar una teoría del valor trabajo para una economía que incluyera en los precios de los bienes finales no sólo los costes del trabajo, pero al final abandonó la idea de que pudiera aplicarse cualquier teoría del valor trabajo a una economía tan avanzada como la de su época. Una vez que se ha acumulado capital y ha habido apropiación de la tierra y una vez que deben pagarse beneficios y rentas, además de salarios, parece que la única explicación correcta de los precios que encontró fue una teoría basada 17 Ibid., págs. 30–31. LANDRETH - Historia del pensamie96 96 04/04/2006 16:22:56