Estándares Internacionales de Educación Diabética

Atención sanitaria
Estándares Internacionales
de Educación Diabética
` Anne Belton
Con el aumento mundial del número de personas con
diabetes, habrá una creciente necesidad de educación
diabética. Se necesitan nuevos enfoques que aseguren que
se imparte educación diabética de manera económicamente
Los estándares de resultados describen
los objetivos generales de la educación
diabética. Unos servicios prestados con
éxito obtendrán los resultados definidos
en los estándares.1
eficaz para todas las personas con diabetes. La educación
Modo de empleo
diabética la impartirán tanto profesionales médicos como
En el momento de su publicación, no
había ningún sistema formal para
conocer la reacción del público que
determinase la utilidad del documento.
En 2003, se envió una encuesta informal
vía correo electrónico a 130 personas
pertenecientes a asociaciones miembro
de la FID y a oficinas regionales de la
FID, además de a educadores clave.2 Los
resultados del cuestionario mostraron
que los Standards eran bien conocidos
(el 86% de los recipientes sabía de su
existencia), ampliamente leídos (71%),
y extensamente utilizados (el 71%
utilizaba los estándares y el 41% sabía
de otras personas que los utilizaban).
no médicos. Se desarrollarán nuevos programas y los
educadores no médicos recibirán formación con el fin de
poder impartir educación diabética. Los Estándares
Internacionales de Educación Diabética ofrecen una base
sobre la que desarrollar cursos, a la vez que proporcionan
criterios para medir los contenidos de los programas.
>>
El libro International Standards for
Diabetes Education (Estándares
Internacionales de Educación
Diabética) fue publicado por
primera vez en 1997 por la
Federación Internacional de
Diabetes (FID). Estos estándares
procedían del consenso y fueron
adaptados a partir de los estándares
canadienses de educación diabética
(Standards for Diabetes Education,
1995, Canadá) por un equipo
multidisciplinar de profesionales
sanitarios.
Se desarrollaron estándares en tres
áreas: estructura, proceso y resultados.
Los estándares estructurales proponen un
marco de trabajo para servir a la diabetes.
Describen el personal, los recursos y las
estructuras físicas que son necesarias para
prestar un servicio de educación diabética.
Los estándares de procedimientos explican
la práctica de la educación diabética: los
pasos necesarios para la preparación, la
implementación y la evaluación de la
educación diabética.
17
Los estándares han demostrado ser
útiles de distintas maneras:
Š para orientar el desarrollo de
estándares locales (39%)
Š como punto de referencia para la
práctica médica y otros tipos de
atención a la diabetes (29%)
Š para el desarrollo de estándares
nacionales (14%)
Š para ejercer presión política sobre
los dirigentes sanitarios o el
gobierno (11%). >>
Diciembre 2003
Volumen 48
Número 4
Atención sanitaria
Profesionales sanitarios de todo el
mundo formaron grupos de trabajo
para discutir el borrador de los
Estándares Internacionales de
Educación Diabética (International
Standards for Diabetes Education).
Mundial de la FID celebrado en París, y
en la actualidad se pueden obtener
online en www.idf.org. Estos estándares
son dinámicos y necesitarán ser
evaluados y re-redactados con
regularidad; con dicho fin se ha incluido
una página para conocer la opinión del
público en la versión de 2003. Se
espera que, con su utilización, la oficina
mundial de la FID en Bruselas, reciba
opiniones tanto positivas como
negativas sobre los estándares.
La publicación de 1997 fue adaptada en
forma de estándares nacionales en seis
países y se tradujo al japonés, al turco, al
ruso y al portugués. Se distribuyó y
utilizó en todos los países que
antiguamente formaban la Unión
Soviética, y en Portugal.
Mejoras continuadas
En 2002, la Sección Consultiva para la
Educación Diabética de la FID (DECS, en
sus siglas inglesas) asumió la tarea de
evaluar y revisar el documento de 1997.
Se utilizó el mismo formato de
estructura, proceso y maquetación. Sin
embargo, también se evaluaron los
estándares de otros siete países y
organizaciones, y se compararon antes
de redactar un borrador. Después se
buscaron aportaciones en reuniones
cara a cara con profesionales sanitarios
de todo el mundo. Las discusiones que
tuvieron lugar en dichas reuniones se
centraron en temas como:
Diciembre 2003
Volumen 48
Número 4
Š la utilización de un lenguaje que se
entendiese fácilmente en distintos
escenarios culturales y lingüísticos
Š la viabilidad de los estándares
propuestos en países en vías de
desarrollo
Š prácticas actuales y maneras en las
que los estándares podrían utilizarse
para mejorar la práctica,
especialmente el papel del educador.
( )
Se puso cuidado en
asegurar la
viabilidad cultural,
lingüística y
práctica de los
estándares en una
amplia gama de
escenarios.
Los estándares revisados se publicaron
en 2003, se pusieron a la disposición
del público durante el Congreso
18
Utilizar los estándares en
territorios nuevos…
Estándares estructurales
En una región en la que no existan
servicios de educación diabética
establecidos, los estándares pueden
utilizarse como guía para la creación
de un programa. Los estándares
estructurales ofrecen apoyo al
principio en una serie de áreas:
asignación de recursos, necesidades del
personal, requisitos físicos, mecanismos
adecuados de realización de informes,
implicación de la comunidad y
desarrollo de un currículum.
Estándares de procedimientos
Los estándares de procedimientos
ayudarán a determinar el proceso
de enseñanza, la valoración, la
planificación, la implementación
y la evaluación. Los indicadores
enumerados en cada una de las áreas
forman una imagen clara de cómo
Atención sanitaria
preparar y planificar una
educación eficaz.
Estándares de resultados
Los estándares de resultados indican
cómo medir los servicios de educación
diabética a distintos niveles. Estos
indicadores cubren la evaluación de
actividades dentro de la comunidad,
tanto la prevención primaria como
la labor de apoyo.También dan
indicadores para la evaluación de
los conocimientos adquiridos, la
aplicación de los conocimientos
y los resultados clínicos.
Al establecer un nuevo servicio, lo
primero debería ser identificar las
necesidades de la comunidad. A esto
le debería seguir un proceso de
priorización, con el fin de determinar
qué estándares son más relevantes
para la comunidad. Sólo entonces se
puede empezar a trabajar en estas
áreas. No se espera que un servicio
nuevo vaya a cumplir todos los
estándares enumerados en el
documento. Sin embargo, todos los
servicios deberían intentar cumplir
todos los estándares en el futuro.
( )
Aunque no se pueda
esperar que todos
los servicios nuevos
cumplan todos los
estándares, su
objetivo debería ser
llegar a cumplirlos.
… y con los veteranos
Los Standards for Diabetes Education
proporcionan un punto de referencia
para comparar un servicio ya
establecido. Cada uno de los
indicadores debería ser revisado con el
fin de determinar hasta qué punto la
práctica actual cumple con las áreas
que cubren los estándares. Los
procedimientos actuales de evaluación
deberían analizarse para asegurar la
recepción de datos en todas las áreas
destacadas en la sección de estándares
de resultados. Deberían identificarse
las lagunas en la prestación de
servicios, y utilizar los estándares
como guía para el desarrollo de un
programa que cumpla todas las
necesidades de la comunidad.
(
Los Estándares
ofrecen un servicio
de educación
diabética con
pruebas de actividad
y éxito que pueden
utilizarse para
ejercer presión en la
búsqueda de
financiación.
)
Los Estándares deberían utilizarse
habitualmente para medir los servicios
de educación diabética, quizá una vez
al año. Deberían mantenerse unos
registros para realizar un seguimiento
de los modos en que se cumplen
los estándares y que registren la
planificación de nuevas actividades.
Éstos se pueden utilizar para ejercer
presión en la búsqueda de financiación
o de un aumento de recursos.
Resumen
Los Estándares de Educación Diabética
no describen un programa de estudios
específico, ni el contenido de un
programa de educación diabética. En
su lugar, proporcionan orientación
sobre cómo desarrollar un programa
que sea relevante para las necesidades
que se han identificado en la comunidad.
Ni los estándares de la FID pretenden
reemplazar a los estándares ya
existentes, sino integrarse hasta
19
donde sea posible. Si los estándares
se utilizan en el desarrollo de
programas de educación diabética, los
consumidores disfrutarán de un cierto
grado de protección en lo referente a
la calidad del programa. Los servicios
de educación diabética podrán
demostrar los modos en que
cumplen los estándares, o en que
están trabajando con el fin de
cumplirlos. Los servicios podrán
utilizar esta evidencia con el fin de
anunciar sus cursos, ejercer presión
para obtener fondos y defender el
reconocimiento de la educación
diabética como componente integral
de la atención a la diabetes.
` Anne Belton
Anne Belton es en la actualidad
especialista en el terreno de la educación
para la salud tanto en su país como
internacionalmente, y trabaja a tiempo
parcial como educadora de diabetes en el
centro sanitario William Osler, EEUU.
También forma parte de la Sección
Consultiva de la FID sobre Educación
Diabética de la Federación Internacional
de Diabetes.
Bibliografía
1. Sección Consultiva de la FID para la
Educación Diabética. International
Standards for Diabetes Education.
Bruselas: Federación Internacional de
Diabetes, 1997.
2. Wright E. Personal communication,
2003.
Ver página 28 para solicitar una copia
de International Standards for Diabetes
Education.
Diciembre 2003
Volumen 48
Número 4