El derecho del trabajo frente al sector informal

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El derecho del trabajo frente al sector informal
por Alfredo Sánchez-Castañeda
A partir En las últimas décadas, la explosión urbana, el crecimiento demográfico, el fenómeno
migratorio, la disminución de los servicios que ofrece el Estado a la población de los países en vía
de desarrollo, las crisis económicas recurrentes y el desempleo han contribuido al nacimiento de
una serie de fenómenos o sectores no estructurados o informales.
La complejidad del fenómeno informal se manifiesta en las diferentes acepciones de lo informal o
no estructurado, las cuales no son más que una prueba de los diversos aspectos que los autores han
tratado de abordar: Economía no oficial, economía no declarada, economía disimulada; economía
sumergida; economía paralela; economía alternativa; economía autónoma; economía gris; economía
marginal; contra economía; economía invisible; economía ilegal; economía no-registrada; economía
no observada; economía oculta; economía subterránea; economía clandestina; economía secundaria;
economía dual; economía oculta; economía oscura; economía irregular; economía periférica;
economía a la sombra; y entre otros nombres, economía informal.
Las anteriores acepciones son un ejemplo manifiesto de los diferentes análisis y de los numerosos
puntos de vista sobre un mismo fenómeno. Actualmente, no obstante que aún no sabemos a ciencia
cierta que abarca lo informal o no estructurado eta se habla de neo-informalidad.
Lo informal o no estructurado aparece en lo social, familiar, cultural y económico, siendo a la vez
complejo y heterogéneo. Según algunos autores, se puede hablar de una nueva cultura que afecta
las identidades nacionales. En algunas regiones del mundo, particularmente en África, lo informal
se ha convertido en uno de los elementos esenciales en la elección de toda estrategia de desarrollo
económico y de política social. Es evidente que nos encontramos frente a un fenómeno o una serie
de fenómenos que han dejado de ser coyunturales y se han convertido en estructurales.
Independientemente de la dificultad que representa saber qué es el sector informal o no
estructurado, actualmente no se duda de la existencia de dicho sector ni de las dinámicas
económicas y sociales que produce. La discusión se sitúa en otro nivel: sobre el futuro del sector
informal.
En América Latina, la crisis económica de carácter estructural que ha golpeado a las economías
nacionales, así como la falta de puestos de trabajo o de bajos salarios en los puestos existentes, han
forzado a los trabajadores asalariados, a los trabajadores independientes y a los pequeños
empleadores a dirigirse cada vez más hacia lo informal o no estructurado. Particularmente en
México, aunque se reconoce el desafío que representa el sector informal (más del 35% de la
actividad económica) aún no se han elaborado las políticas públicas necesarias para tratar de
solucionar los múltiples retos que representa lo informal en materia económica, de empleo y de
condiciones de trabajo.
Por otro lado, los cambios operados en los modelos tradicionales de relaciones laborales, la nueva
división internacional del trabajo así como el cuestionamiento que se hace del derecho del trabajo,
directa o indirectamente se han manifestado en el sector informal.
Actualmente el mundo del trabajo se interroga sobre el futuro de las relaciones del trabajo y del
derecho del trabajo. Qué hacer con la flexibilidad laboral, con la emergencia del trabajo
independiente y la subcontratación, con los efectos de las privatizaciones, con la terciarización y
precarización del empleo, en fin, con las nuevas formas de subordinación laboral, que algunos
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juristas alemanes e italianos denominan parasubordinación. En pocas palabras como afrontar la
crisis del modelo tradicional de relaciones laborales que presuponía un trabajo indeterminado y
una subordinación estricta.
Sin embargo, poco se ha atendido el gran dilema que representa el sector informal. Sobre todo
tomando en cuenta que actualmente en México y en general en América Latina, el sector informal
es el generador de 8 de cada 10 nuevos empleos.
Alfredo Sánchez-Castañeda
Investigador y Catedrático de derecho del trabajo
Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, México
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