MEDICINA SEMANA DEL 12 AL 18 DE OCTUBRE DE 2015 MERCEDES DE LA TORRE ESPÍ. Los efectores de RAS, clave de nuevos antitumorales dirigidos La urgencia infantil no debe ser ni traumática ni dolorosa 25 PÁG. 27 PÁG. 28 Clasifican el cáncer de colon en cuatro subtipos biológicos RADICALMENTE DISTINTOS En este consorcio, la colaboración entre científicos y clínicos ha ofrecido un algoritmo de consenso "sin precedentes", cuyos resultados han sido la identificación "de cuatro subtipos biológicos de cáncer colorrectal muy consistentes: el de respuesta a la inmunidad, el epitelial canónico, el epitelial metabólico y el mesenquimal, todos ellos muy diferentes y, por tanto, con respuestas terapéuticas distintas", ha añadido Salazar. Se podría incluso hablar de tumores radicalmente diferentes, indica el especialista del ICO. Por ejemplo, los datos, se- gún Rodrigo Dienstmann, han permitido "saber que uno de los subtipos biológicos es muy resistente a quimioterapia. Cada uno de los cuatro subtipos es muy distinto biológicamente, sus vías de señalización alteradas están muy diferenciadas, por lo que las dianas terapéuticas para cada subtipo clave son diferentes". Considera que uno de los subtipos tumorales que puede empezar a beneficiarse con mayor prontitud de los abordajes de la inmunoterapia es el que se encuadra dentro de la respuesta inmunológica. Las vías de transducción y los programas de expresión transcriptómica son diferentes en cada uno de los cuatro, lo que pone de relieve la importancia del "potencial terapéutico diferenciado. Cuando predomina el ICO Un consorcio internacional ha establecido, por primera vez, una nueva y pionera clasificación para el cáncer colorrectal (CCR) basándose en datos genómicos. El estudio ha reunido 4.000 muestras de pacientes y ha definido un patrón de subtipos genómicos de consenso que, además de identificar las características biológicas intrínsecas de los tumores, también correlaciona estos datos con el comportamiento clínico y el pronóstico de los pacientes. Toda esta información big data, ofrecida por la bioinformática y que ha analizado toda la plataforma de ARN del cáncer de colon, persigue el claro objetivo de encontrar y desarrollar tratamientos dirigidos contra dianas para saber qué abordajes no funcionan en un paciente y dar así respuesta a los no respondedores. "Esta nueva clasificación constituye un cambio terapéutico radical que se producirá en los próximos cinco años. La aplicación más inmediata es la posibilidad de estratificar al paciente. Las terapias vendrán un poco más tarde", ha indicado a DM Rodrigo Dienstmann, responsable del Grupo de Ciencia de Datos en Oncología (ODysSey) del Valle de Hebrón Instituto de Oncología (VHIO), y primer autor del informe. El trabajo, que se publica esta semana en Nature Medicine, ha contado también con la participación de Josep Tabernero, director del VHIO y coautor del trabajo, y de Ramón Salazar, jefe de Servicio de Oncología Médica de los hospitales Duran i Reynals, Moisès Broggi & Costa de Ponent, y del Instituto Catalán de Oncología (ICO), y Beatriz Pérez Villamil, del Hospital Clínico de Madrid. Rodrigo Dienstmann, del VHIO, en Barcelona. Ramón Salazar, del ICO, en Barcelona. Características de los nuevos clasificados CMS1: inestabilidad microsatélite inmune. 15% de los tumores. Caracterizado por una potente activación inmunológica. El grupo de pacientes afectados por este tumor es el que más beneficio obtendría con la inmunoterapia. CMS2: epitelial canónico. 40% de los tumores. El de mayor inestabilidad cromosómica. Sigue la carcinogénesis clásica del CCR con activación de las rutas WNT, MYC y EGFR. subtipo de respuesta inflamatoria o autoinmune, se podría incidir más con las CMS3: epitelial metabólico. 15% de los tumores. Presenta una desregulación de las vías metabólicas asociadas a mutaciones del gen KRAS. CMS4: mesenquimal. 30% de los tumores. Los pacientes que sufren este tumor tienen un pronóstico muy desfavorable con el tratamiento estándar del CCR, debido a una activación de las vías de TGFB, angiogénesis e invasión estromal. nuevas inmunoterapias. Si el peso recae en la vía de las MAC cinasas, con EGFR, el Un estudio prospectivo confirmará el valor pronóstico del predictor MADRID S. MORENO [email protected] La clasificación atendiendo al perfil molecular del cáncer de colon se investiga desde hace tiempo y ha sido objeto de varios artículos científicos. Uno de los pioneros, coordinado por la científica Beatriz Pérez Villamil, del Instituto de Investigación Sanitaria San Carlos, en el Hospital Clínico de Madrid, se publicó en BMC Cancer en 2012. "A partir de esta publicación, empezaron a aparecer otros trabajos similares, basados en la misma meto- dología, con microarrays que analizan la expresión del ARN tumoral". Las clasificaciones resultantes no coincidían totalmente, si bien había rasgos moleculares compartidos. "La nuestra fue la única que proponía cuatro subtipos moleculares. Finalmente, se decidió crear un consorcio para llegar a un consenso de subtipos", recuerda Pérez Villamil, una de las firmantes del actual estudio en Nature Medicine. La investigadora valora el hecho de que varios grupos internacionales hayan MARUICIO SKRYCKY. MADRID RAQUEL SERRANO [email protected] JAUME COSIALLS El análisis completo de la expresión genética del cáncer de colon ha identificado cuatro subtipos muy diferentes Beatriz Pérez Villamil, del Hospital Clínico San Carlos, en Madrid. aunado esfuerzos para alcanzar esta nueva clasificación, diferente a la patológica, que redundará en una medicina personalizada para tratar el cáncer colorrectal. "Ahora iniciaremos un estudio prospectivo para trasladar a la clínica este predictor y confirmar su valor pronóstico y su capacidad para predecir la respuesta al tratamiento". papel preponderante lo tendrán los anti-EGFR. En el mesenquimal, con destacada presencia de TGF-beta, se podría modelar la quimioterapia con inhibidores de TGF-beta", indica el investigador del ICO, quien adelanta que, derivado de este conocimiento, el siguiente paso es la creación de un consorcio europeo, liderado por el Valle de Hebrón y en el que también participa el ICO. Su objetivo es la puesta en marcha, en 2016, de tres ensayos clínicos dirigidos a pacientes con tumores encuadrados en un solo tipo biológico, como el mesenquimal, por ejemplo. Salazar lanza, en este sentido, una petición a la industria farmacéutica para que hagan un esfuerzo para desarrollar moléculas "en consonancia con estos subtipo". Parte de la investigación, impulsada por la Obra Social La Caixa, se centrará también en desarrollar test diagnósticos.