BOLETÍN 1677-14 ACTUALIZACIÓN I DESCRIPCIÓN DEL PROYECTO REFERENCIA : Prohíbe a notarios autorizar contratos de promesas de compraventa de viviendas SERVIU, sin estar canceladas INICIATIVA : Moción de los diputados Sres. Errázuriz, Kuschel, Pérez (Víctor), Sota y Montes MINISTERIO : De Vivienda y Urbanismo ORIGEN : Cámara de Diputados; pasó al Senado para segundo trámite constitucional INGRESO : 9 de agosto de 1995 CALIFICACIÓN : Sin urgencia ARTICULADO : Artículo único OBJETO, SEGÚN LA INICIATIVA Prohibir que los notarios autoricen contratos de promesa de compraventa o de cesión de derechos respecto de viviendas asignadas por el SERVIU, mientras no se encuentren en situación de poder ser enajenadas. FUNDAMENTO, SEGÚN LA INICIATIVA 1.El SERVIU enajena las viviendas a los adjudicatarios con prohibición para éstos de gravar y enajenar; pero los beneficiarios intentan burlar la prohibición celebrando un contrato de promesa de venta; ahora bien, quien promete comprar esa propiedad asume LIBERTAD Y DESARROLLO 31 de mayo de 1996 7 un riesgo, pues como se trata de operaciones a muy largo plazo, es probable que cuando se intente celebrar el contrato de compraventa definitivo, el promitente vendedor está inubicable o se niegue a celebrarlo, lo que termina en un juicio en los tribunales. 2.El problema tampoco se soluciona por la vía de que el promitente vendedor otorgue un mandato para que el promitente comprador otorgue la escritura pública de compraventa definitiva, pues esos mandatos son revocables. ACTUALIZACIÓN Con fecha 9 de mayo de 1996 la Cámara de Diputados remitió al Senado el proyecto aprobado por ella en primer trámite constitucional. DIFERENCIAS 1.Se limitó la aplicación del proyecto a viviendas de menos de 400 UF como valor original (adquiridas del SERVIU). 2.Se explicitaron los casos en que las viviendas se encuentran en situación de no poder ser enajenadas: - cuando no se ha acreditado ante el notario el pago del precio; - cuando existan prohibiciones vigentes de celebrar actos y contratos; - o cuando, en defecto de los casos anteriores, la operación no haya sido previamente autorizada por el SERVIU respectivo. 3.Se establece que para acreditar que la vivienda no ha sido adquirida de un SERVIU, se exhibirá al notario público, por parte del promitente vendedor, una copia autorizada de la inscripción de dominio vigente. 4.Se sanciona con nulidad absoluta a los actos y contratos celebrados en contravención a esta ley (aunque sean celebrados por escritura privada no autorizada por notario), sin perjuicio de la acción penal que fuere procedente. 8 LIBERTAD Y DESARROLLO II COMENTARIOS COMENTARIOS DE MÉRITO 1.Insuficiencia de la norma propuesta. Conforme al artículo 1554 del Código Civil, uno de los requisitos que debe cumplir un contrato de promesa es que "conste por escrito". Esta norma rige aun tratándose de prometer contratos que según la ley deben constar de escritura pública, como es el caso de la compraventa de bienes raíces. La formulación inicial del proyecto de ley hacía posible prometer vender y prometer comprar un inmueble mediante un contrato que no requiere otra solemnidad que constar de un documento escrito (además de otros requisitos de contenido de las estipulaciones). No se requiere, entonces, que un notario autorice el documento1 ni mucho menos que se protocolice o celebre mediante escritura pública. De ahí que la prohibición para que los notarios autoricen contratos de promesa de compraventa de inmuebles comprados al SERVIU, antes de que se cumpla el plazo de la prohibición de enajenar, no producía otro efecto que inducir a los promitentes a omitir toda intervención notarial, lo que no evita la celebración de la promesa, pero al mismo tiempo contratarán sobre la base de un documento de inferior valor probatorio. El proyecto aprobado por la Cámara de Diputados ha cerrado esta posibilidad declarando nulos los contratos de promesa de compraventa de una vivienda adquirida al SERVIU (de menos de 400 UF). No obstante, la prohibición y la sanción de nulidad no eliminan la posibilidad de que de todas maneras, sea por desconocimiento de la prohibición legal (de este proyecto) o por mutua confianza de las partes, se celebren en todo caso tales promesas. Ello hará que la nulidad del contrato de promesa pueda acarrear juicios tanto o más complejos que los que el proyecto intenta evitar, para el caso que posteriormente surja un problema con la celebración o no celebración del contrato definitivo. Es decir, no se evitará el juicio, sino que éste versará sobre nulidad del contrato de promesa y los efectos de esa nulidad (prestaciones mutuas2, etc.). Como se señaló anteriormente (Reseña Legislativa 259), en cualquier caso, la declaración de nulidad de un contrato es materia de competencia de los tribunales de justicia. 2 1 Al tenor de lo prescrito en el artículo 401 Nº10 del Código Orgánico de Tribunales, es más propio entender que los notarios autorizan las firmas puestas en el documento privado y no el documento mismo. En síntesis, las prestaciones mutuas constituyen la forma como se reconstituye la situación, entre las partes, anterior a la celebración del contrato declarado nulo: devolución de dineros percibidos, intereses, mejoras, frutos de la cosa objeto del contrato, etc. LIBERTAD Y DESARROLLO 9 En este sentido, el proyecto no soluciona el mal que pretende evitar. 2.Facultad de disposición. La facultad de disposición incluye la de enajenar por venta, por donación; poder hipotecar, constituir usufructo y otras limitaciones al dominio, y en general transferir total o parcialmente el dominio en cualquiera de las formas autorizadas por la ley. Ahora bien, existen prohibiciones de gravar y enajenar de origen contractual y de origen legal. En el primer caso, se trata de una prohibición establecida en un contrato, por ejemplo, cuando se paga el precio de una compraventa de un inmueble a plazo y se cauciona el pago con hipoteca; suele agregarse una prohibición -adicional- de gravar y enajenar el bien hipotecado3. Se ha discutido la validez de esta prohibición contractual. En la práctica, los conservadores de bienes raíces no inscriben enajenaciones que desconozcan una obligación contractual de gravar y enajenar; pero si de ello se reclama ante el juez de letras, conforme al Reglamento del Registro Conservatorio de Bienes Raíces, y se argumenta que la facultad de enajenar es de orden público, es decir, es irrenunciable, los jueces acogen el reclamo y ordenan la inscripción. Tratándose de prohibiciones de enajenar de origen legal, ni los conservadores ni los jueces autorizan a las partes para contravenirlas. Desde un punto de vista estrictamente legal, esta 3 La hipoteca no priva del derecho de vender la propiedad hipotecada; pero el que la compra, la adquiere con el mismo gravamen. 10 solución es adecuada, porque es difícil consentir en que se puede pasar por encima de texto legal expreso. Sin embargo, las consecuencias prácticas de la prohibición que afecta a las viviendas que vende el SERVIU, y que es de origen legal, suelen producir conflictos por las razones que señalan los autores de la moción. En efecto, la persona que le compró la casa al SERVIU puede tener la necesidad de vender (por traslado a otra ciudad, por ejemplo) la vivienda, pero no puede antes de que se cumpla el plazo legal, que suele ser extenso (del orden de los 10 años). La persona que la quiere comprar, por su parte, tiene el dinero para pagar y desea que la casa le sea entregada materialmente para habitarla y solucionar su problema habitacional. Ello lleva a la elaboración de figuras como la promesa, que efectivamente puede constituirse en una fuente de conflictos judiciales. Ahora bien, ¿qué sentido tiene establecer, en estos casos, una prohibición legal? La única explicación parece ser que el legislador está conciente de que una vivienda adquirida a través del SERVIU, como antes de las cajas de previsión, constituye total o parcialmente una casa regalada por el fisco y no se desea que el beneficiario transforme el regalo en dinero. Sin embargo, ante los problemas señalados, parece preferible que se elimine la prohibición legal, y que quien le hubiere comprado una casa al SERVIU, pueda enajenarla desde que esté perfeccionada la venta e inscripción de la propiedad. Ello permite una mayor movilidad de la propiedad raíz, LIBERTAD Y DESARROLLO soluciona problemas prácticos de los asignatarios de habitaciones del SERVIU, y permite a otras personas adquirir propiedades modestas y de bajo precio. dominio vigente a favor del vendedor, probablemente carecerá de sentido un contrato de promesa y se procederá directamente al contrato de compraventa. 3.Modificaciones de la Cámara de Diputados. La Cámara de Diputados hizo aplicables los efectos del proyecto de ley sólo a viviendas de menos de 400 UF y explicitó en qué casos no se podía celebrar un contrato de promesa que tuviera por objeto la venta de estas viviendas. La razón por la cual las partes pueden llegar a pactar una promesa, es precisamente el hecho de que actualmente no pueden vender; por eso se celebra un contrato, cuyo objeto es a su vez otro contrato4 (el de compraventa) y no la vivienda o cosa vendida. Las modificaciones antedichas no alteran el sentido original del proyecto y pueden producir un efecto adicional, derivado de la precisión efectuada respecto del valor máximo de las viviendas afectas al proyecto y del hecho de que para acreditar que la vivienda no fue adquirida a través del SERVIU haya que exhibir, para celebrar toda promesa de compraventa, una inscripción de dominio vigente a favor del promitente vendedor. Al respecto debe tenerse presente que el Código Civil desconfía, por así decirlo, del contrato de promesa (cualquiera: promesa de compraventa, de arrendamiento, etc.). La posición del Código Civil se manifiesta en la declaración de que la promesa de celebrar un contrato "no produce obligación alguna" (artículo 1554), a menos que: a) conste por escrito; b) que el contrato prometido sea permitido por las leyes; c) que se fije un plazo o condición para la celebración del contrato definitivo; d) que el contrato esté especificado de tal manera que sólo falten para que sea perfecto, la tradición de la cosa o las solemnidades que las leyes prescriban (por ej. el otorgamiento de escritura pública). Desde luego, esta norma afectará los contratos de promesa respecto de todas las viviendas de menos de 400 UF., lo cual constituye una instancia burocrática que es contraria a la solución del problema planteado. Como se ha dicho, la solución va por el camino de eliminar las prohibiciones existentes (o acortar sus plazos) y no por la vía de establecer mayores prohibiciones. Luego, la norma puede resultar completamente inoperante, pues nadie celebra un contrato de compraventa de una propiedad sin hacer previamente el estudio de títulos, que supone, necesariamente, la inscripción de dominio vigente. Ahora bien, si hay Frente a los resguardos que ya ha tomado el Código Civil, parece inconducente establecer nuevos requisitos o prohibiciones, sobre todo si su origen son prohibiciones de carácter legal; en tal caso, lo razonable es 4 Si una de las partes del contrato de compraventa se niega a la celebración del contrato definitivo, se puede recurrir al juez para que él, en representación del renuente, celebre el contrato prometido. LIBERTAD Y DESARROLLO 11 suprimir tales prohibiciones establecer otras adicionales. y no 5.Conclusión. Siendo real el problema planteado por los autores de la moción, la solución no consiste en 12 aumentar las prohibiciones existentes, pues éstas darán a su vez origen a otro tipo de litigios, pero no solucionarán el problema de fondo, derivado, como se dijo, de la existencia de prohibiciones legales. LIBERTAD Y DESARROLLO