Geografía Humana y Demografía.

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Geografía Humana y Demografía.
Temario.
1. La población mundial. Distribución espacial de la población. Evolución histórica.
La transición demográfica. Perspectivas de futuro. El concepto de densidad de
población.
2. Los factores de crecimiento (I). El crecimiento natural de la población. Natalidad
y mortalidad. Evolución histórica y situación actual. Diferencias regionales.
3. Los factores de crecimiento (II). Los movimientos migratorios. Emigración e inmigración. Factores de los movimientos migratorios. Consecuencias de los movimientos migratorios.
4. Población y economía. Caracteres económicos de la población activa. Estructura
demográfica y gasto social. El fenómeno del envejecimiento. Hogares y familias.
5. Población y recursos. Antecedentes históricos: Malthus y los modelos maltusianos de adaptación. El concepto de “huella ecológica”. Producción de alimentos y
malnutrición.
6. Población y medio ambiente. La reducción de la cubierta vegetal. La pérdida de
suelos. Los recursos hídricos. El proceso de urbanización y sus implicaciones medioambientales.
7. Políticas demográficas y políticas migratorias. El debate sobre el crecimiento.
Políticas demográficas y migratorias en países desarrollados y en desarrollo. Población y pobreza.
8. El sistema mundial y el crecimiento demográfico. Desequilibrios geopolíticos y
población. Globalización y flujos migratorios. Población y relaciones internacionales: cooperación y ayuda al desarrollo.
Tema I. La Población mundial.
Las estimaciones globales y su valoración. Distribución espacial de la
población. La noción de sobrepoblación.
1. Las estimaciones globales y su valoración.
Hace unos pocos de años, cuando el siglo XX se acercaba a su fin, la población del
mundo alcanzó la cifra de 6.000 millones de personas. De acuerdo con el anuncio de
Naciones Unidas, tan destacado acontecimiento habría tenido lugar el 12 de octubre de
1999. Se trata de un anuncio simbólico. Lo importante era llamar la atención sobre el
crecimiento de la población mundial y sus múltiples implicaciones.
Cuadro 1.1: Algunos hitos en la historia de la población mundial
Año
Tamaño de la población
Años entre hitos sucesivos
1804
1.000.000
¿?
1927
2.000.000
123
1960
3.000.000
33
1974
4.000.000
14
1987
5.000.000
13
1999
6.000.000
12
Como pone de manifiesto el cuadro 1.1, la mitad del actual tamaño de la población mundial se ha generado en los últimos cuarenta años, y cinco sextas partes del mismo, en el
corto lapso de apenas dos siglos. Por consiguiente, el cuadro apunta a la existencia de
dos fases en la historia de la población humana, separadas inicialmente por la fecha en la
que se alcanzaron los primeros mil millones de habitantes. La primera fase muy larga, de
crecimiento lento, casi imperceptible, y otra muy corta de crecimiento acelerado.
Fácilmente, se puede deducir que desde el punto de vista del tamaño de la población
mundial, estamos viviendo un periodo excepcional. Para saber cuándo comenzó ese
tiempo, como ha evolucionado, a qué factores se ha debido, y qué cabe esperar en el
próximo futuro, conviene dar un somero vistazo al cuadro 1.2.
Cuadro 1.2: Evolución del tamaño de la población mundial. Fechas escogidas.
Tamaño de la poblaTasa de crecimiento
Años necesarios
Año
ción (en millones)
anual (en %)
para duplicación a esa tasa
-2.000.000
-------8.000
8
0,00076
91.204
0
300
0,0453
1.530
1.750
800
0,056
1.238
1.800
1.000
0,446
155
1.850
1.300
0,525
132
1.900
1.700
0,535
129
1.950
2.500
0,771
90
1.975
4.100
1,979
35
2.000
6.000
1,523
46
Fuente: United Nations Population Division. World Population Prospect. New York. Diversos años.
La primera columna del cuadro 1.2 se compone de cierto número de fechas escogidas por
simbólicas o indicativas. La segunda ofrece el tamaño estimado de la población mundial
para cada una de ellas. La tercera, la tasa de crecimiento de esa misma población entre
esa fecha y la inmediatamente precedente. La cuarta, presenta el número de años que
tardaría en duplicarse la población mundial si creciera a la tasa de crecimiento de ese
momento. No hace falta insistir en que las dos últimas columnas indican el ritmo de crecimiento de cada fase, en ellas, pueden reconocerse tres cambios de ritmo, especialmente llamativos: son las que corresponden a los años 1750, 1950 y 1975. La primera es la
que divide en dos grandes fases la historia de la población humana: una larga y lenta de
crecimiento pausado, casi imperceptible en el largo plazo; y una segunda breve y rápida.
Puede decirse que el grueso del volumen de la población que tiene la población en la actualidad se inicia a mediados del siglo XVIII, más bien a sus comienzos.
La segunda discontinuidad en la tasa de crecimiento de la población del mundo se produce en torno a 1950, y supone una marcada aceleración dentro del periodo sostenido que
se acaba de señalar. En consecuencia, la población mundial se triplica en tan sólo cuarenta años. Este crecimiento vertiginoso que convierte en la segunda mitad del siglo XX
en el momento histórico de mayor crecimiento de la población humana, es conocido entre
los demógrafos como el “Rápido Crecimiento de la Población” (RCP).
No cabe duda que esta tasa de crecimiento depararía tamaños de población pronto insostenibles. El descenso en la tasa de crecimiento ha comenzado, impulsada por el declive
de la fecundidad en el mundo menos desarrollado: de hecho tal desaceleración, claramente perceptible desde 1975, marca la tercera gran discontinuidad revelada por el cuadro 1.2.
En síntesis, la especie humana habrá crecido lentamente durante miles de siglos, rápidamente durante dos siglos y medio -ente 1700 y 1950- y aceleradamente durante apenas
uno, desde mediados del siglo XX a mediados del XXI.
La teoría de la transición demográfica.
La denominada Transición Demográfica, formulada en la décadas centrales del S. XX,
sostiene que, como consecuencia del desarrollo económico, las poblaciones de los diferentes países y regiones, y eventualmente la del planeta en su conjunto, experimenta una
evolución desde un régimen demográfico presidido por altas tasa de mortalidad y natalidad a otro en el que ambas tasas son bajas. El punto de partida es un equilibrio demográfico de alta presión y alto gasto humano: nacen muchos individuos y mueren muchos; el
punto de llegada, otro en el que la presión y el gasto humano son pocos: nacen y mueren
pocos. Entre uno y otro, lo que constituye la transición, se produce un periodo de desequilibrio en el que la población crece deprisa, como consecuencia del descenso de las tasas
vitales: la de mortalidad declina antes que la de natalidad, y ello da lugar al periodo de
desajuste entre ambas, que se traduce en un crecimiento de la población mucho más
rápido. Aunque de duración variable, ese desequilibrio, ingrediente decisivo de la teoría,
suele prolongarse unos cuantos decenios, hasta que el posterior declive de la natalidad
termina por restaurar el equilibrio, esta vez en niveles bajos.
En la transición se distinguen cuatro estadios:
1. Antes que se inicie la transición, tanto la mortalidad como la natalidad son muy altas y la diferencia entre ellas exigua y fluctuante. El factor decisivo las malas condiciones de vida determinadas por el escaso desarrollo de la ciencia y la tecnología,
es la que da lugar a la alta mortalidad.
2. Inicio de la transición, comienza con el descenso de la mortalidad, mientras la
natalidad continúa elevada.
3. Transcurrido, unos decenios la natalidad comienza a descender, mientras la mortalidad continúa descendiendo.
4. En este, ambas tasas vitales se estabilizan en niveles bajos. La distancia entre
ambas se reduce de nuevo y, en consecuencia, el crecimiento se atenúa. En este
estadio se supone que la natalidad fluctuará menos que la mortalidad y devendrá la
variable crítica.
En la versión clásica, la autoría del cambio demográfico reside en el cambio de la economía, ante la alta mortalidad, sólo una elevada fecundidad, aseguraba la continuidad de
la población, bajo coste de los hijos, en oposición al comportamiento actual, baja tasa de
fecundidad y alto coste de los hijos.
Las etapas clásicas de la transición demográfica.
El crecimiento económico moderno, impulsado por la industrialización rompe esa dependencia de crecimiento: cambia los modos de vida, favorece la familia reducida. El control
de crecimiento deja de ser la mortalidad y pasa a la natalidad. El cambio de modo de vida
decide el comportamiento reproductivo.
En realidad la transición demográfica no es una teoría, sino una gran generalización de
base histórica, derivada de los países que primero conocieron la industrialización, el crecimiento económico y los grandes cambios demográficos. Estos fueron los países situados en el cuadrante noroeste de Europa, y algunas prolongaciones ultramarinas en
EE.UU. y Australia. Después los del sur y este de Europa, y Japón.
La teoría de la Transición Demográfica es una gran síntesis de la experiencia de estos
países.
2. Distribución espacial de la población.
El Planeta no está en términos demográficos lleno, pues existen grandes espacios de tierra vacíos. Esta situación viene motivada por la falta de condiciones de vida que permitan
un posible asentamiento en ellos. Por ejemplo, el continente de Australia, con un área de
tierra casi igual a la de Estados Unidos, sólo tiene 19 millones de personas. En Estados
Unidos viven en torno a 280 millones.
Aún así, y a pesar de que la población suele asentarse en lugares donde poder acceder
a un mayor grado de calidad de vida, 505 millones de personas viven en países que padecen escasez de agua y 420 millones viven con escaso terreno cultivable para poder ser
autosuficiente en su alimentación.
La población se reparte de forma desigual a lo largo del planeta. En la actualidad, en el
mundo hay unos 6.211 millones de personas, de las cuales el 80,7% se concentran en las
regiones menos desarrolladas, a pesar de que solamente tienen acceso al 20% de los
recursos. La población mundial se distribuye de la siguiente forma:
• En el hemisferio norte se concentra la mayoría de la población mundial. engloba
tanto a países desarrollados como en vía de desarrollo.
• En el continente asiático se concentra más de la mitad de la población total del
mundo.
• Las tierras montañosas están menos pobladas que las llanas y las cercanas a la
costa.
• La población se concentra en mayor grado en las ciudades, donde el número de
personas está creciendo a un ritmo mayor que el conjunto de la población, y en los
países en desarrollo más aceleradamente que en las regiones desarrolladas. Este
proceso de urbanización está determinando que la mayor parte de la población del
mundo se asiente en grandes ciudades.
Factores que originan la desigualdad de la distribución de la población:
Factores Naturales:
 El clima es el elemento que más incide en las zonas de grandes vacíos demográficos.
 En este sentido, el clima polar y el desértico son los que más alejan a la población,
En otros casos, el exceso de humedad y calor de los climas ecuatoriales tampoco
favorecen el asentamiento humano.
 La altitud. El clima de montaña y la falta de oxígeno alejan a la población, mientras
que las zonas bajas, especialmente las costas, son los lugares de mayor asentamiento, excepto en las latitudes ecuatoriales.
Factores Humanos:
 Motivaciones históricas y políticas.
 Motivaciones socioeconómicas: agua, tierras fértiles para la agricultura y zonas
industrializadas.
Altitud y latitud producen diversas combinaciones. Así, en Escocia a 300 metros de altitud
las posibilidades de vida son difíciles, mientras que en la meseta española a 700 metros
de altitud, si es posible la habitabilidad, debido a la diferencia de latitud entre España y
Reino Unido.
En los trópicos, la concentración de humedad y calor producen condiciones favorables
para la proliferación de enfermedades infecciosas, con el aumento de las temperaturas
que se está produciendo, estas enfermedades se van a trasladar a latitudes más altas.
Como ya ha quedado de manifiesto, la población urbana se ha igualado a la rural, con el
desplazamiento de la población a núcleos urbanos, nos lleva al problema de las mega
ciudades y de la sobrepoblación.
La distribución espacial de la población, se mide mediante la densidad de población, que
es el cociente resultante de dividir el número de habitantes entre el término que habitan:
densidad= nº de habitantes/ km2 (territorio)
La densidad nos da un dato, pero no nos precisa como esta distribuida la población en el
territorio, ya que no suele estar repartida de forma homogénea, como es el caso de Argentina y Australia, probablemente sea Europa uno de los territorios con un reparto más
homogéneo.
Este es un indicador con muchas limitaciones, tiene un valor comparativo sobre todo en
los niveles centrales, en los extremos carece de validez. Como todo indicador, por sí solo,
no es significativo. En términos de evolución histórica adquiere una cierta validez. Algunos
ejemplos de tasas de población más alta:
• Macao: 26.000 hab/km2.
• Hong-kong: 6.000 hab/km2.
• Singapur: 6.000 hab/km2.
• Franja de Gaza: 2.800 hab/km2.
• Malta: 1.222 hab/km2.
• Bangladesh: 822 hab/km2.
Territorios o países con una densidad de población más baja:
• Canadá: 3,1 hab/km2.
• Islandia: 2,7 hab/km2
• Australia: 2,4 hab/km2.
• Sahara Occidental: 1,1 hab/km2.
La mayoría de los microestados, el 30% se encuentran en el Caribe, son estados que
fueron colonias, y tras ascender a la independencia, tienen bajo nivel de recursos y posibilidades limitadas de desarrollo, es el turismo lo que se ha convertido en la principal
fuente de ingresos. Turismo que agrava la elevada densidad de población de estas islas,
así como el impacto ambiental debido a la eliminación de los residuos que generan.
El impacto ambiental, puede crear también modificaciones sobre la densidad en zonas,
como: Australia que en los próximos años, por el calentamiento de la Tierra, puede sufrir
cambios. Las islas tropicales se pueden ver afectadas por la subida del nivel del mar. En
los polos la subida del nivel de las aguas, también puede producir cambios, mientras que
en la Antártida la población se puede desplazar, hacía el norte, no es así en el Ártico.
Mapa de densidad de la población mundial
3. La noción de sobrepoblación.
La sobrepoblación o superpoblación es una condición en que la densidad de la población
se amplía a un límite que provoca un empeoramiento del entorno, una disminución en la
calidad de vida, o un desplome de la población. Generalmente este término se refiere a la
relación entre la población humana y el medio ambiente. La sobrepoblación no se determina en función del tamaño o densidad de la población, sino utilizando la proporción de
población que dispone de recursos sostenibles.
La tesis de la sobrepoblación se basa en tres premisas interconectadas:
 Primera: El mundo se encuentra en una “crisis” de sobrepoblación.
 Segunda: La tasa actual de crecimiento poblacional resulta insostenible.
 Tercera: De las dos anteriores, se deduce que el remedio se encuentra en la reducción de la tasa de natalidad.
Sin embargo, algunos autores, entre ellos Nicholas Eberstadt, afirman que estas premisas
“son absolutamente problemáticas …. y demostrablemente falsas”1. Ya que ni la densidad
poblacional ni su crecimiento, están en relación directa con un estado superpoblado, por
1 http://uwf.edu/gout/facultyformus/auzadesmintiendodogmasdemograficos.pud
6/12/09 ejemplo, Bélgica está más sobrepoblada que Ruanda. De hecho uno de los países con
densidad más alta del mundo, Mónaco, al mismo tiempo, disfruta de uno de los mayores
niveles de vida del mundo. La pobreza no es un problema poblacional, aunque se manifieste en un elevado número de personas.
No existe evidencia de que la población humana sea la que está acabando con la fuente
de recursos, sino del impacto que se está ejerciendo sobre el medio ambiente, de hecho,
las prácticas de desarrollo de algunos países han logrado aumentar sustancialmente su
capacidad de sustentabilidad mediante el uso de tecnologías modernas tales como la
agricultura, la desalinización o nuevas fuentes de energía.
Fuentes consultadas para la elaboración de este tema.
 Apuntes de clase curso 2009-10 Geografía Humana y Demografía. Prof. Suárez de
Vivero J. L.
 Romero J. (coordinador) (2004) Geografía Humana. Barcelona. Ariel
 Guía de trabajo en el aula. La población en el mundo. Ayuda en Acción. web
5/12/09
 www.profes.net/rep../2E% 20 Demografia &20 la densidad mundial PDF 2/12/09
 www.cprcalahorra. org/alfaro/Material/Geograf 6/12/09
 http://es.wikipedia.org/wiki 6/12/09
Tema 2. Los factores de crecimiento (I).
El crecimiento natural de la población. Natalidad y mortalidad.
Evolución histórica y situación actual. Diferencias regionales.
Tema 3. Los factores de crecimiento (II).
Los movimientos migratorios. Emigración e inmigración. Factores de
los movimientos migratorios. Consecuencias de los movimientos migratorios.
TEMA 4. Población y Actividad Económica.
Caracteres económicos de la población activa. Modelos socioeconómicos de desarrollo. Estructura demográfica y gasto social.
1. Caracteres económicos de la población activa.
POBLACIÓN ACTIVA: todas las personas de uno y otro sexo que aportan la oferta de
fuerza de trabajo para producir bienes y servicios económicos. Es decir: las personas dedicadas a la producción de bienes y servicios, o disponibles para ello (o sea no sólo ocupados sino también parados). Así que las tasas de actividad lo que reflejan es qué parte
de la población puede desarrollar un trabajo. Para la población activa suele tenerse en
cuenta la franja de edad entre 16 y 65 años.
EMPLEO: se consideran personas con empleo a todas las que, a partir de una determinada edad (normalmente 16-18 años), y durante un breve periodo de tiempo (que pueden
ser incluso días o semanas, lo cual da pie a manipulación) están en alguna de las situaciones siguientes:
- empleo asalariado.
- empleo independiente.
- trabajando pero en ninguna de las 2 categorías anteriores (trabajando sin
cobrar en la tienda de los padres por ejemplo).
SUBEMPLEO: según la OIT (Organización Internacional del Trabajo), el subempleo se
produce cuando las personas están provistas de empleo por debajo de su cualificación, o
cuando sus ingresos o su rendimiento se podrían ver aumentados si trabajasen en
mejores condiciones de producción o cambiasen de actividad.
(GRÁFICA “Población de 16 y más años: activos, inactivos, población contada aparte
(varones en servicio militar, monjes,…, no están presentes en el mercado de trabajo).
TASAS DE ACTIVIDAD (= de población activa): puede calcularse la actividad:
- relacionando los activos con la población total.
- comparando sólo con la población de más de 16 años.
- comparando a los que van de 16 a 65 años.
TASA DE PARO: número de parados dividido por población activa multiplicado por 100:
nº parados
x 100
población activa
TASAS DE ACTIVIDAD:
(GRÁFICA TASAS DE ACTIVIDAD: global, masculina y femenina)  por ejemplo en
EEUU las tasas de actividad son muy altas con muy poco paro.
El valor de las tasas de actividad femenina es considerado un factor de desarrollo: cuanto
más desarrollado está un país mayor es su tasa de actividad femenina. Un caso aparte lo
constituyen los países del Este, Cuba,…, que son países con una alta tasa de actividad
(como dicen en Portugal: “pobreza pero bien repartida”) y con una actividad femenina casi
tan alta como la masculina.
DIFERENCIAS ENTRE PAÍSES DESARROLLADOS Y EN DESARROLLO EN CUANTO
A LA POBLACIÓN ACTIVA:
En los países desarrollados la participación de la mujer es mayor. En los subdesarrollados
se entra antes en el mercado de trabajo y se sale también antes (esto está biológicamente determinado, una persona empieza a trabajar en cuanto puede y deja de hacerlo cuando ya no puede); en los países desarrollados sucede al revés (se entra más tarde y se
sale más tarde) debido a las prestaciones sociales de que disfrutamos.
Otro factor que influye en la población activa es el de urbanización: en las áreas rurales la
incorporación al trabajo es más temprana que en las áreas urbanas, y hay una mayor participación de la mujer en el ámbito agrario (no en el resto de actividades económicas); en
el ámbito urbano las diferencias hombre – mujer quedan más suavizadas.
Otro factor es la fecundidad, pues tiene una relación directa con el crecimiento de la fuerza de trabajo; la fecundidad alta de los países en desarrollo tiene también su lado negativo, y es que en estos países cuando el crecimiento económico no permite crear las infraestructuras necesarias, la economía no puede asumir esta fuerza de trabajo que va llegando a ser población activa, produciéndose así muchísimo desempleo (como en Marruecos y Argelia), quedando esta población abocada a la emigración al darse un exceso
de población activa.
En los países desarrollados, hasta ahora, la demanda de mano de obra tenía un carácter
expansivo: era necesaria una cada vez mayor fuerza de trabajo (hecho que está cambiando), pero el trabajo de la mujer sin embargo ha tenido y sigue teniendo un carácter
sustitutorio. En los países subdesarrollados que intentan industrializarse se ve que va
aumentando la demanda de mano de obra femenina, típica de la industrialización.
Tasas de actividad por grupos de edad: hay determinados aspectos resaltables, por ej. en
países subdesarrollados los grupos de edad mayor continúan trabajando, cosa que no
ocurre en los países desarrollados, en los que suele ser la parte más o menos intermedia
de la pirámide la que sustenta a los mayores.
REPARTO DE LA POBLACIÓN ACTIVA ENTRE LOS DISTINTOS SECTORES DE ACTIVIDAD:
Diferenciaremos aquí tres sectores de actividad:
 el primario (agricultura).
 el secundario (industria).
 el terciario (servicios).
Este reparto también diferencia gravemente a los países desarrollados y en desarrollo. En
los desarrollados la población activa está incluida sobre todo en los sectores secundario y
terciario, y muy poca población activa se incluye en el primario, mientras que en los en
desarrollo ocurre al revés. Hasta los años 60 más del 60 % de la población activa mundial
trabajaba en el sector primario, y en el último tercio del siglo XX esto cambió y actualmente no se llega al 50 %. Pero a escala regional las variables son mucho más dispares:
El SUBEMPLEO es otro factor a tener en cuenta con respecto a la población activa, y
fundamental a la hora de analizar las tasas de empleo. El subempleo no suele estar recogido en las estadísticas oficiales. Hoy, sobre todo gracias a la iniciativa de los sindicatos,
empiezan a conocerse datos sobre el subempleo al conocerse datos sobre los tipos de
contratación: contratos indefinidos y contratos a tiempo parcial. Hay así dos lecturas de
las cifras de empleo, pues los gobiernos no tienen en cuenta el tipo de contrato. Los sindicatos ponen de manifiesto que crece el empleo precario al tiempo que disminuye el trabajo indefinido. España es el país de la UE con más contratos a tiempo parcial. Y esto por
no hablar de los contratos en prácticas.
En el DESEMPLEO influyen multitud de factores, que van desde la propia naturaleza de
las administraciones públicas hasta rasgos del comportamiento humano como por ej. la
mayor o menor tendencia a la movilidad espacial y ocupacional (los españoles por ej.
tienden a moverse poco, los nortemericanos no conciben el empleo sin moverse, y esto
se ha convertido en un factor estructural de la economía española y norteamericana).
2. Modelos socioeconómicos de desarrollo.
A partir de los años 50 se empieza a constatar el fuerte crecimiento de la población en
los países en desarrollo, y es cuando surge toda esta terminología desafortunada de
‘desarrollado’, ‘en desarrollo’, ‘tercer mundo’,…etc. Se englobó bajo el término Tercer
Mundo a todos los países que no estaban ni en el bloque soviético ni en el norteamericano, países que además se caracterizaban por un nivel de desarrollo muy bajo y unas tasas de crecimiento muy altas. Surge la idea de ayudar al desarrollo de estos países controlando su crecimiento poblacional. Se constató que una fecundidad alta genera una necesidad de invertir gastos en sectores no productivos: educación, sanidad y servicios sociales. Lo que se invertía en cubrir esas demandas para un mayor volumen de población
se restaba a los sectores netamente productivos.
En periodos de fecundidad baja, se ha comprobado que la población activa permanece
constante, y mediante la inversión se puede aumentar la producción aumentando así la
renta per cápita. Esta es la ventaja de no tener un exceso de población. Otras ventajas
son que aumenta la riqueza y el ahorro y no se altera la estructura de la población activa,
y además con una población reducida no aumenta la demanda de inversiones productivas. Pero, ¿qué ocurre a largo plazo con una baja fecundidad?: por una parte la renta per
capita crece, pero a largo plazo la productividad sí depende de la fecundidad, y por eso la
Europa desarrollada ha tenido que recurrir a la inmigración masiva como mano de obra.
La relación entre el tamaño del hogar y su capacidad de ahorro resulta así paradójica: se
supone que con una familia más extensa hay menos capacidad de ahorro, pero hay situaciones que muestran todo lo contrario: en países asiáticos con familias muy grandes las
tasas de ahorro han sido muy altas.
Las caídas de la fecundidad tienen tantas implicaciones de carácter social, que es muy
compleja su manipulación. Hoy el panorama es el de dos situaciones ambas vigentes y
contradictorias: la de los países cuya mejora económica depende de su control demográfico (en desarrollo), frente a la de los países que tienen que aumentar la natalidad para
mantener su nivel de desarrollo (desarrollados).
Se tiende a identificar desarrollo con desarrollo económico. Los indicadores económicos
siempre van a ser fundamentales, pero hoy ya se tienen en cuenta otros indicadores que
también influyen en el nivel de vida: educación, sanidad,… Cada país tiene carencias específicas, aunque las carencias económicas son las que más siguen acaparando nuestra
atención por ser desastrosas en tantos casos.
La evolución política y socioeconómica de estos últimos años ha aumentado de forma
dramática las desigualdades entre países en desarrollo y desarrollados. Hoy el 80% de la
riqueza se concentra en un 20% de la población aproximadamente, y el 80% restante de
población apenas cuenta con el 20% de la riqueza. Esta brecha no sólo no se está suavizando, sino que se está agravando en los últimos años. El peso de EEUU como único
imperio mundial está íntimamente relacionado con esto. Los países en desarrollo no sólo
tienen que producir para pagar la deuda sino que no tienen acceso a nuestro mercado, no
pueden vender sus productos libremente, aunque el capital sí penetra en todos los países. Es muy llamativo el caso de países árabes como Kuwait, Bahrain,…, ejemplos de
estados nacidos puramente del interés económico suscitado por el petróleo en los años
60/70 .
Otra forma de medir el grado de desarrollo de un país es por el consumo de energía.
3. Estructura demográfica y gasto social.
El gasto social es un fenómeno inédito en la historia de las sociedades humanas. La evolución de la población y el envejecimiento de la misma tienen como uno de sus efectos
más graves el de poner en peligro la supervivencia de los sistemas de protección social.
(GRÁFICA PIRÁMIDES  la caída de la fecundidad típica de los países desarrollados se
va a extender a los países en desarrollo).
(APARTADO “Envejecimiento de la población” del informe Highlights)  en los próximos
50 años el problema del envejecimiento se va a agravar. La edad media de la población
mundial ha pasado de ser de 23 años en 1950 a 26 años en el 2000, y se proyecta que
será de 36 años en el 2050, con unas variaciones enormes entre las regiones más desarrolladas y las en desarrollo: la media para las desarrolladas es de 46 años en el 2050, la
media de las en desarrollo de 35 = ¡11 años de diferencia!. // La proporción de niños también afecta a este problema del envejecimiento (consideramos niños a las personas entre
0 y 14 años):
MEDIA MUNDIAL
1950
NIÑOS
34 %
VIEJOS
8%
2000
30 %
10 %
2050
21 %
21 %
A nivel regional es aún peor: se calcula para el 2050 un porcentaje de niños de 16 % frente a un porcentaje de viejos de 33 % en los países desarrollados (¿y en los países en desarrollo?).
Para el 2050 habrá 2000 millones de personas con más de 60 años, lo que significa 1/3
de la población total, frente a los 600 millones que son hoy.
Hoy hay 69 millones de viejos mayores de 80 años, para el 2050 serán más de 300 millones. Muchos países van a tener para esa fecha un 10% aproximadamente de población
con más de 80 años, y esto va a provocar cambios en las políticas sociales, en la sanidad,…
The oldest old: en el año 2000 había 180.000 centenarios en el mundo, para el 2050
serán 3’2 millones. Japón va a ser el país con un porcentaje más alto de centenarios
(1%), seguido de Finlandia, Suecia, Suiza,… (0’2%). En términos absolutos, hay en Japón
casi un millón de centenarios, en EEUU + China unos 500.000 y en la India unos 150.000.
La edad media española será la más alta del mundo en el 2050: 55 años, de modo que se
reducirá drásticamente la población activa y va a haber un niño por cada 4 personas mayores.
Se va a producir un crecimiento muy relentizado a nivel mundial, pero a nivel regional va a
haber grandes diferencias, de modo que las diferencias Norte-Sur quedarán patentes: los
países desarrollados envejecerán mucho más que los países en desarrollo. Las consecuencias de esto son múltiples: provocará un incremento de gastos para mantener a la
población mayor al tiempo que hará disminuir los gastos para mantener a los más jóvenes
(menos gastos educativos por ejemplo), al tiempo que tendrá otro tipo de consecuencias
como por ejemplo cambios en el sistema educativo,…
LA TASA DE DEPENDENCIA, cuya existencia es otra consecuencia del envejecimiento
poblacional, mide qué cantidad de población activa tiene que mantener a qué cantidad de
población no activa:
nº de jóvenes + nº de viejos
TD =
nº de adultos
Al aumentar el número de no activos (jóvenes
por debajo de los 16 años y viejos mayores de
65), la tasa de dependencia con respecto a los
activos (resto de la población) aumenta: menos
activos tienen que mantener a más activos.
Los países más desarrollados van a aumentar su población activa, de modo que podrán
también incrementar su tasa de producción, el ahorro y la renta per cápita. Pero en los
casos en que esta tendencia demográfica no vaya acompañada de una política económica capaz de absorber este aumento de población activa, que es el caso de los países en
desarrollo, el efecto va a ser que va a aumentar el fenómeno migratorio. Un ejemplo es
África Subsahariana, también enfrentada al impacto del Sida. (EL SIDA: El SIDA está
afectando a todos estos fenómenos, puede provocar que muchas de nuestras predicciones no se cumplan y provocar cambios drásticos en las pirámides de población. En Botswana están infectados uno de cada tres adultos).
Los países en desarrollo parten de tasas de dependencia muy altas (o sea pocos activos
para mantener a muchos no activos) que van bajando, y los desarrollados parten de tasas
de dependencia muy bajas que van.
El fenómeno del envejecimiento tiene también consecuencias en el terreno laboral, pues
se traduce en un aumento de los costes laborales: una población con una edad media
mayor va a estar más afectada por enfermedades (bajas laborales), va a tener una mayor
dificultad de adaptación a las innovaciones tecnológicas, va a tener una menor tendencia
a la movilidad geográfica.
Desde el punto de vista económico está el problema del mantenimiento de las pensiones,
las cuales se van a privatizar y pasarán a depender de los individuos y no del Estado: se
exige una cada vez mayor capacidad de ahorro, y el nivel de endeudamiento es cada vez
mayor.
ÍNDICE DE SUPERVIVENCIA: es el porcentaje de población que, habiendo superado los
15 años, llega a los 65.
Un estado progresista es aquel en que el gasto social va dirigido al bienestar de su población, y un estado no progresista lo contrario.
TEMA 5. Población y recursos.
Antecedentes históricos: Malthus y los modelos maltusianos de adaptación. El concepto de “huella ecológica”. Producción de alimentos y
malnutrición.
1. Antecedentes históricos: Malthus y los modelos maltusianos de
adaptación.
Los temores hacia un crecimiento demográfico muy intenso, con respecto a los recursos,
no es una preocupación actual, el primero en reparar en esto fue Malthus.
A finales del siglo XVIII y principios del XIX, con la revolución industrial, se abrió una etapa de optimismo y creció la confianza en la expansión comercial, esto hace que se sustituya el mercantilismo por las doctrinas del libre comercio. El segundo gran tirón de la colonización se dio en plena revolución industrial, el objetivo era repartirse el continente africano entre algunos países, puesto que todavía quedaban tierras por conocer (Noruega
tiene aun algunas islas en el Atlántico).
En este orden de cosas se originó la idea del crecimiento y los recursos como algo inagotable, esto aumentó el optimismo en occidente, esta idea se refleja en la mentalidad de
Adam Smith y en su obra Riqueza de las Naciones. Sin embargo, Malthus (1766-1844)
vino a desmontar esa idea, en 1798 edita Ensayo sobre el principio de la población.
Malthus explica que mientras los recursos alimenticios crecen según una progresión
aritmética, la población mundial lo hace en progresión geométrica. Según esto llegaría un
momento en que la población superaría los recursos y los alimentos se encontrarían por
debajo de la subsistencia. Como solución propone controlar la población mediante algunas medidas que no fueron del todo bien acogidas: la abstinencia en el matrimonio o retrasar la edad del mismo. (La edad media en España es de 31 años. En los últimos años
ha bajado debido a la inmigración). Otras medidas pensadas por Malthus para controlar la
población son las propias de una transición demográfica como hambrunas, guerras, etc.,
estas medidas se conocen como el “malthusianismo”. La obra de Malthus da comienzo a
una etapa de pesimismo.
Con respecto a este tema, hay otros autores clásicos, en la línea de lo que piensa Malthus, como David Ricardo (1772-1823). Para él la tierra es un recurso limitado. Defiende
que para controlar la población hay que mejorar su renta con el objetivo de extender la
capacidad de compra y consumo, con lo que se genera un mecanismo: los más ricos serían menos prolíficos; y los más pobres serían más prolíficos.
Stuart Mil (1806-1876) propuso un concepto que con bastante tiempo de retraso lo aceptaron algunas escuelas económicas: “el estado estacionario”. Esto se explica en su obra
Principios de economía política (1848). Se refiere al crecimiento cero, que en épocas de
crisis suele resurgir (El crecimiento cero se da en Europa en estos momentos). El término
se recuperó con la depresión del 29. En la medida en que las economías no crecen, los
países en desarrollo no pueden sobrellevar una situación así, de modo que esto altera su
forma de vida.
Vemos dos mecanismos de funcionamiento de procesos vinculados al crecimiento de la
población con respecto a los recursos alimenticios:
Inicio de Creci-­‐
miento Aumento de población Pocos alimentos para toda la pobla-­‐
ción Equili-­‐
brio Pobla-­‐
ción Más defun-­‐
ciones Es el mecanismo maltusiano, se produce un feedback negativo por lo que siempre existe
un control de la población.
Inicio de Creci-­‐
miento Aumento de población Más pobla-­‐
ción Alimentos suficientes Número de Defunciones normales Es el mecanismo que se da desde la revolución industrial, se produce un feedback positivo cuando existe más población y sigue el crecimiento.
El debate general está en torno a la cuestión de cuánto va a durar este segundo sistema.
Se dice que si se usaran los mismos recursos usados en las crisis alimenticias, en la crisis
económica, ésta se hubiese subsanado. Aunque este es el panorama existente, todavía
no podemos hablar de que los recursos no puedan abastecer a la población.
El cultivo de alimentos transgénicos es otra opción barajada actualmente para intentar
satisfacer las necesidades alimenticias de la población, aunque hay países donde estas
prácticas están prohibidas.
Pero dentro de todo esto existe otro problema: la población sigue creciendo sin saber
cuándo se va a estabilizar (El crecimiento mundial es más bajo por año ahora que hace
unas décadas. Del 3% de crecimiento anual se ha pasado al 1,6%). Malthus plantea que
nos adaptaremos a un llamado “techo poblacional”, esto se debería, según él, a los vicios
poblacionales (guerras, hambre, etc.) Por analogía con las especies animales y en relación al techo poblacional, se presentan tres posible escenarios:
•
Ajuste Instantáneo. Se trata de llegar al techo poblacional estabilizándose de
forma radical. Malthus explica que se puede dar al llegar una catástrofe.
•
Ajuste Progresivo. Para que se pueda producir hay que conocer el techo o
límite poblacional y así aplicar las estrategias, también conocidas, para
adaptarse a este límite.
•
Aproximación progresiva. Se acerca al límite poblacional y mediante diferentes aproximaciones se ajusta, oscilando, al techo.
En la actualidad podemos ver que hay estrategias parecidas a las mencionadas, sobre
todo a la de ajuste progresivo y aproximación progresiva. Hay expertos que otorgan una
alta probabilidad a que se produzca la estabilidad por medio de una catástrofe (primer
modelo). En general, el modelo de aproximación progresiva es el que se considera mejor
para la especie humana.
Existen otros modelos, originados en manos de Slobodkin, que reflejan el hecho de que
dos poblaciones compiten por los mismos recursos. Estos modelos son:
•
Coexistencia. Si las dos poblaciones no llegan a su techo poblacional, las
dos pueden existir.
•
Superviviente Único. Si una de las dos poblaciones llega a su techo poblacional, la otra desaparece.
Hoy hay un volumen pequeño de población que accede al 80% de los recursos, sin embargo, hay un gran volumen de la población mundial que accede al resto de los recursos.
Capacidad de Carga.
La capacidad de carga se refiere a la cantidad de individuos que se pueden sostener en
un área en particular, de forma constante, dentro de los límites de los recursos existentes
y sin degradar el ecosistema para las generaciones presentes y futuras.
La capacidad de carga no es fija, y cambia de acuerdo con las necesidades básicas de
cada población y los recursos naturales disponibles para satisfacer estas. La ley de Liebig
nos dice que el recurso menos disponible, de acuerdo con los requerimientos per cápita,
es el que establecerá la cantidad de individuos que el medio ambiente puede sostener. El
recurso en cuestión puede ser alimento, agua, espacio, aire, energía, o cualquier otra cosa que un individuo necesite para sobrevivir.
La capacidad de carga humana tiene que ser interpretada como la tasa máxima de consumo de recursos y descarga de recursos que se puede sostener indefinidamente sin
desequilibrar progresivamente la integridad funcional y la productividad de los ecosistemas principales, sin importar dónde se encuentren estos últimos.
La correspondiente población humana es una función de las relaciones entre el consumo
material y la producción de residuos per cápita, o la productividad neta dividida por la demanda per cápita (Rees 1990).
Impacto humano total sobre la ecosfera = Población x impacto per cápita.
La capacidad de carga hace plantearnos ese equilibrio entre recurso, población y la capacidad de ecosistemas para eliminar los deshechos.
En la tierra hay 13,4 mil millones de hag. (Hectáreas globales) que hacen referencia a la
suma de todas las porciones de tierra “útiles” para fines de subsistencia. Si dividimos esa
cifra por el número de habitantes del planeta (6’5 mil millones) obtenemos las hectáreas
que cada ser humano puede emplear para vivir sin reducir la capacidad de regeneración
de la tierra: 2’1 hag. por persona.
Si consideramos las necesidades del resto de los animales no-humanos, que se estimulan en un 12% de esas hectáreas globales para las 10 millones de especies, nos quedaríamos con 1’8 hag. per cápita.
2. El concepto de “huella ecológica”.
William Rees y Mathis Wackernagel propusieron un indicador que daba la vuelta al de
capacidad de carga. Si esta venía expresada en número de individuos por hectárea de
superficie, ahora ellos proponían que se calculara la superficie necesaria para mantener
un número de individuos dado. La aportación de Rees y Wackernagel concicte en proponer una metodología concreta que permita evaluar numéricamente este indicador al que
denominaron “Huella ecológica” y que definieron como:
“El área del territorio productivo o ecosistema acuático (entendida como superficie biológicamente productiva) necesaria para producir los recursos utilizados y para asimilar los
residuos producidos por una población definida con un nivel de vida específico donde sea
que se encuentre esa área”
Veremos cuál es la huella ecológica en Andalucía:
 Cada andaluz necesita 21874 m2 para satisfacer su consumo de alimentos.
 Cada andaluz consume 112,5 gigajulios de energía al año.
 A cada andaluz le corresponden 232 m2 de superficie ocupada por edificios o infraestructuras.
 La Huella Ecológica de cada andaluz es de 5,35 ha. de territorio productivo.
 A cada andaluz le corresponden solamente 2,42 ha. de territorio productivo en
Andalucía.
 Por consiguiente, la población andaluza necesita algo más de otra Andalucía
(vacía) para satisfacer sus necesidades de forma sostenible.
Medidas de presión poblacional
I= P1-P2 / A
P1-P2
I=
A
P1: Población capaz de ser soportada por los recursos de la región.
P2: Población actual.
A: Área país
I < 0: Presión negativa (sobre-poblamiento).
I > 0: Presión positiva (sub-poblamiento).
Nivel de vida= Recursos naturales x Tecnología/ Población.
Las interpretaciones posibles son: sobre-poblamiento, sub-poblamiento y doblamiento
óptimo.
Hay países donde los recursos pueden sostener la población están todavía relativamente
poco poblados (Brasil, Argentina, etc.). La situación ideal pasa por adecuarse al equilibrio
entre personas y recursos.
3. Producción de alimentos y malnutrición.
Existen dos situaciones extremas:
 Regiones con excedentes masivos de alimentos (EEUU o UE).
 Regiones con déficit de alimentos.
Esto demuestra que el acceso al número de calorías per cápita se encuentra actualmente
desequilibrado.
Un concepto a considerar, relacionado con esto, es el de “seguridad alimentaria” y se da
cuando toda persona, en todo momento, tiene acceso a la alimentación necesaria para
llevar una vida sostenible y activa. Pero es difícil establecer los límites y surge una pregunta: ¿Qué es una vida saludable y activa?
La seguridad alimetaria depende de varios factores como por ejemplo la disponibilidad,
accesibilidad, etc. Factores como la accesibilidad están ligados a la capacidad adquisitiva.
Con la situación existente se dan muchos casos de hambrunas (no por la ausencia de
alimentos, sino por su inaccesibilidad). Se ha llegado a demostrar que esto se podía solucionar proporcionando un salario a todas las personas, en vez de pretender dar alimentos
para todos (aunque hay lugares donde parece que no hay otra opción que repartir alimentos).
Otro factor puede ser la regularidad de abastecimiento (se dio por ejemplo en el bloque
socialista), aunque los acontecimientos bélicos puede hacer peligrar esa regularidad.
Un elemento más a tener en cuenta es el de la aceptabilidad cultural. Existen ciertos tabúes hacia ciertos hábitos alimentarios.
En relación con la malnutrición se entiende que la medida “Standard” a partir de la cual
una persona está correctamente alimentada sería la ingesta diaria de 2500 o 2600 Kcal.
Por otra parte es necesario que tengamos en cuenta la capacidad para producir alimentos, es decir, las posibilidades biológicas.
En el mundo hay ecosistemas ricos, repartidos de forma desigual. Veremos los tres grandes ecosistemas:
•
Aguas someras. Estuarios, arrecifes, manglares, etc, suelen ser espacios semiconfinados, con poca profundidad donde la luz entra con facilidad y donde también es más fácil que las corrientes circulen verticalmente, por lo que nutrientes
y organismos se mezclan. La producción de materia orgánica es muy intensa
debido a la fotosíntesis y como consecuencia de la concentración de gran
número de nutrientes. Produce de 10 a 25 gramos por día y m2.
•
Bosques, lagos profundos, etc. Produce de 3 a 10 gramos por día y m2 de materia orgánica.
•
Desiertos, estepas, etc.
Cómo vemos, hay dos grandes ecosistemas en relación con la producción biológica, pero
son precisamente estos ecosistemas que más producen, los que son más reducidos a
escala global. A esto se une que la capacidad para acceder a esa riqueza es también muy
reducida.
Debemos saber que toda esa producción no es aprovechable como alimento. El bosque
tropical tiene una superficie del 3,9% del planeta, la cantidad máxima de materia orgánica
que produce al año es del 30.2% y la máxima cantidad de esa producción que es comestible es del 6,1%. Los océanos son los espacios dominantes del planeta pero, junto con
los lagos, sólo producen un 2,5% de alimentos. La mayor parte de alimentos comestibles
proviene de las tierras cultivadas (71,1%) pero estas tierras no son más del 2% de la superficie mundial.
En todos estos procesos está también la cadena trófica de la producción de alimentos, de
manera que para obtener 1 Kg. De carne hay que agotar, entre otros recursos, una gran
cantidad de pasto. Para obtener un atún agotamos fitoplancton y zooplancton, además
de otros peces, por lo que hay que destruir gran parte de su cadena trófica. A veces, para
conseguir algunos alimentos, llegamos a consumir un 90% de otros recursos o energía.
Se deduce que el problema está en la transformación y el procesado de alimentos. La
propia producción de alimentos se reduce.
El total de las personas que vive en la tierra necesita al año 107 t de alimento (siempre
sujeto a un crecimiento), hay un total de 1011t de materia orgánica disponible al año en el
planeta, a lo que debemos añadir factores de conversión, con lo que se producen 109t de
alimento al año.
La agricultura sólo produce una pequeña parte de este potencial, se pueden incrementar
las cosechas pero el procesado del alimento es muy desfavorable. Las pérdidas, en las
que se cuentan factores como la erosión, el error en el cultivo o en el agua, o transporte,
también son muy significativas. Sólo con mejorar la red de transportes de agua se podría
mejorar la producción y el consumo. La cadena de frío también se interrumpe varias veces, por lo que también provoca deterioros.
La industria agrícola opera al 15% de su capacidad, así que existe un margen considerable para producir, si a esto se suma las nuevas tecnologías, el resultado puede ser aún
mayor.
Centrándonos a escala global, decimos que existe gran diferencia entre el primer y el tercer mundo en todo lo relacionado a la producción y al consumo de alimentos pero, ¿hasta
que punto? Se considera que por cada persona bien alimentada hay 6 que no lo están. En
países desarrollados, el coste el alimento supone una pequeña proporción de nuestros
ingresos, relacionado con esto, conocemos el concepto de “free lunch”, que hace referencia al acceso de alimentos a precio reducido. Pero esto es así porque extraemos mucha
de la producción del tercer mundo (por ejemplo hamburguesas), pero la subida del precio
del petróleo se refleja también en el precio de la comida.
Según la FAO (Food and Agriculture Organization) el precio insostenible de la alimentación es el principal culpable del aumento de la desnutrición o la malnutrición. Un estudio
de la misma organización señala que el 20% de la población de los países subdesarrollados está desnutrida y un 60% sufre algún tipo de carencia o insuficiencia en la nutrición.
Parece que existe un consumo muy reducido de proteínas animales, pero además también de carbohidratos, cuya principal fuente de ingestión está en los cereales, que se producen principalmente en los países ricos. La producción de ciertos países más desfavorecidos de cacao, piña o café (productos que no resultan válidos para el consumo diario)
hace que sean más importantes aún las importaciones. Esto arrastra también ciertos problemas entre los mercados, por ejemplo, si cierto producto español se abre al mercado
europeo, habrá otros países, sobre todo entre los subdesarrollados, que como respuesta
encuentren pérdidas.
Un buen indicador sobre la alimentación es, en definitiva, la ingesta diaria de calorías, algo que se sujeta a cambios atendiendo a la edad y el clima.
Nota: El documento que se adjunta pertenece al informe de la FAO de Inseguridad alimentaria 2009. Como materia de examen entra:
o “mensajes claves” (Pág. 2)
o “¿Qués es la seguridad alimentaria y cuales son los objetivos de reducción del hambre? (Pág. 8)
o figura 15 (Pág. 28)
o “Derecho a la alimentación” (Pág. 48)
Tema 6. Población y medio ambiente.
La reducción de la cubierta vegetal. La pérdida de suelos. Los recursos
hídricos. El proceso de urbanización y sus implicaciones medioambientales.
Tema 7. Políticas demográficas y políticas migratorias.
El debate sobre el crecimiento. Políticas demográficas y migratorias en
países desarrollados y en desarrollo. Población y pobreza.
Tema 8. El sistema mundial y el crecimiento demográfico.
Desequilibrios geopolíticos y población. Globalización y flujos migratorios. Población y relaciones internacionales: cooperación y ayuda al
desarrollo.
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