2.10.1.5 Aves La Clase Aves perteneciente al grupo de los vertebrados terrestres, es la que tiene el mayor número de especies a nivel mundial, cerca de 9000. La vistosidad y armonía de sus colores, suavemente dispuestos en sus plumas, atraen en gran cantidad admiradores y estudiosos, los cuales se interesan en el conocimiento de los procesos ecológicos de estos organismos. Gracias a su vuelo, despiertan un sentimiento de admiración lo que ha permitido que el ser humano las emplee como símbolo en diferentes ambientes, como por ejemplo: la paloma de la paz la cual representa la cercanía entre los pueblos y estrecha lazos de amistad; el cóndor de los andes el ave insignia de Colombia, la cual para comienzos del siglo XIX sobrevolaba numerosamente los cielos de los valles de los ríos Magdalena y Cauca; el ave fénix, ave mítica de origen etíope y de esplendor sin igual, que después de haberse consumido sobre una hoguera renace de sus cenizas. Todos estos casos son producto de la admiración y conexión entre las aves y el ser humano. Desde épocas primitivas, las aves han maravillado al hombre, han inspirado mitos inmortales y universales, creados por civilizaciones de todos los rincones del mundo. Son consideradas como deidades con capacidades curativas, además, su canto es considerado como el lenguaje de los dioses (Molina y Osorio 1995). Poco a poco los estudios sobre las aves, han permitido utilizarlas como indicadores que miden la calidad de los hábitats y a la vez relacionarlas con las variaciones en el paisaje a causa de los múltiples impactos de origen humano (efecto antrópico). Estos trabajos han permitido que algunas instituciones de carácter ambientalista inicien proyectos de conservación con el único objeto de mantener la gran biodiversidad que alberga nuestro país y el mundo en general. Ante el creciente impacto negativo de las actividades humanas sobre los bosques tropicales, es innegable afirmar que la biodiversidad afronta un riesgo inminente de extinción en un futuro cercano; alrededor del 5 % de la avifauna colombiana presenta algún riesgo de extinción, debido fundamentalmente a la fragmentación y destrucción de las zonas boscosas (Hilty y Brown 1986, Wilson 1992, Naranjo y Chacón 1997, IAvH 1998). Por tal razón, se hace primordial conocer las especies que se encuentran en determinados ambientes para poder formular propuestas de manejo y conservación de la fauna silvestre, entendiendo ésta última como patrimonio cultural de una nación. Cuando pensamos en las aves, pensamos en la majestuosidad de su vuelo y de la fortaleza de sus alas. Mediante el vuelo han adquirido la ventaja de colonizar diversos ambientes hasta los más inalcanzables e inimaginables. Para poder volar, las aves presentan algunas estructuras y condiciones morfológicas mínimas, como: a) una gran musculatura pectoral, insertada en el 634 esternón, en las aves voladoras termina en una prolongación llamada quilla; b) incremento en la superficie de sustentación; c) disminución en el peso total del ave, resultado del proceso de neumatización de los huesos (se llenan de aire), los cuales representan en conjunto aproximadamente un 5 % del peso total del cuerpo; d) homotermia (mantienen una temperatura corporal constante); e) aumento en la eficacia del metabolismo; f) incremento en la oxigenación durante el vuelo gracias al desarrollo de los sacos aéreos (Calderón 2002). Gracias al vuelo y a la gran musculatura pectoral de algunas aves, han desarrollado una estrategia de desplazamiento denominada, migración, la cual consiste en buscar nuevas zonas donde habitar para poder sobrevivir ante condiciones adversas en sus ambientes de origen. A Colombia llegan gran cantidad de aves migratorias del hemisferio norte y del hemisferio sur. Las aves provenientes del norte llegan en los meses de septiembre y octubre y permanecen hasta abril o mayo, las del sur llegan a mediados de junio y pueden partir en octubre. Durante éste tiempo realizan, entre otras, actividades de reproducción. Las aves al igual que muchos organismos son consumidores de primer, segundo y hasta tercer orden, y ésta característica le permite a los Biólogos conocer la dinámica de las poblaciones y relacionarla con factores abióticos y paisajísticos. Es así como, las aves se pueden dividir en diversos “gremios tróficos conductuales” y la frecuencia de observación de algunos gremios en alguna zona específica permite determinar la calidad y tipo de recursos alimenticios de las especies. Dentro de los gremios se pueden mencionar: los insectívoros, los frugívoros, los granívoros, los carnívoros y los omnívoros, y dentro de éstos otras especializaciones de acuerdo con las conductas alimenticias de los organismo en las estratos verticales y horizontales del bosque. 2.10.1.5.1 Métodos Se muestrearon trece (13) zonas en la cuenca del río Coello, de las cuales una (1) zona solo se logró muestrear por una sola vez debido a problemas de orden público (zona 5). Las zonas de muestreo se relacionan por subcuencas en la Tabla 2.117. De campo Métodos de censado Los métodos más usados para determinar la composición taxonómica de un lugar, son los censos visuales y la captura con redes de niebla. Estas últimas son utilizadas para la recolección de aves, lo que permite estimar tamaños 635 poblacionales, capacidad de crecimiento, índices de sobrevivencia y anillamiento; mientras que con los censos visuales se pueden estimar índices de abundancia y de diversidad. Tabla 2.117 Relación de las zonas de estudio por subcuencas en la cuenca del río Coello, en el año 2003. ZONA MUNICIPIO COORDENADAS RANGO 1 Río Coello, Quebrada Potrerilla Coello N 4° 14’41’’W 74°28’32’’ 433 2 Río Coello, Quebrada La Barbona Ibagué N 4°18’30’’ W 75°3’33’’ 685 3 Río Andes Rovira N 4°17’22’’ W 75°12’53’’ 900 4 Río Bermellón, Quebrada La Cerrajosa Cajamarca N 4°25’33’’ W 75°22’11’’ 1400 5 Río Cocora, Vereda Laureles N 4° 33'23'' W 75°22' 02'' 1665 6 Río Combeima, Quebrada Cay Ibagué N 4°29’26’’ W 75°14’ 55’’ Río Combeima, Quebrada Perlas (zona Ibagué N 4°27’26’’ W 75°15’ 56’’ baja) Río Anaime, Quebrada Carrizales Cajamarca N 4°23’19’’ W 75°30’ 50’’ 1700 7 8 9 Ibagué 1800 2100 2152 11 Río Toche Cajamarca N 4°32’56’’ W 75°24’44’ Río Combeima, Quebrada Perlas (zona Ibagué N 4°35’22’’ W 75°18’53’’ alta) Río Cocora, Vereda Dantas Ibagué N 4°20’07’’ W 75°26’13’’ 12 Río Bermellón, Quebrada La Guala Cajamarca N 4°25’42’’ W 75°22’32’’ 2450 13 Páramo de los Valles Cajamarca N 4°15’28’’ W 75°33’35’’ 3600 10 SUBCUENCA 2400 2440 Método de captura con redes de niebla Se instalaron 5 redes de niebla: dos de 12 m X 2.5 m y tres de 6 m X 2.5 m, entre las 06: 00 y las 10: 00 horas y entre las 15: 00 y las 18:00 horas. La intensidad de muestreo fue de un (1) día en cada zona de muestreo. Los ejemplares capturados fueron colectados para dar inicio a la Colección de Referencia de Aves del Laboratorio de Zoología de la Universidad del Tolima. Los especímenes se registraron, sacrificaron, medieron ( Longitud: Total, Culmen, Tarso, Alar, Rictus, Cola) y pesaron; para luego ser conservadas con una solución de AFA (Alcohol isopropílico: Formol: Ácido acético, 5:3:1) inyectada en el abdomen del ave, simultáneamente se introdujo hasta el tracto digestivo algodón impregnado con dicha solución. Para su traslado al laboratorio las aves se almacenaron en neveras de icopor con hielo y fueron previamente envueltas en bandas de tela y bolsas plásticas para su posterior preparación en el laboratorio. 636 Determinación taxonómica de las especies Para la determinación taxonómica se emplearon las guías ilustradas de campo de Naranjo (1997), Alvarez-López (1999), Hilty & Brown (2001) y National Geograhic (2002). Adicionalmente, los ejemplares en los cuales existía alguna duda en la determinación taxonómica fueron confirmados en el Instituto de Ciencias Naturales de la Universidad Nacional de Colombia. Método de censo visual Paralelamente a la instalación de las redes de niebla se realizaron censos visuales mediante la metodología de conteo por puntos (Ralph et al. 1995), en donde para cada zona de muestreo se hizo un transecto de 1 km con puntos de observación cada 100 metros y con una duración de 10 minutos por punto. Adicionalmente, se empleó el método de búsqueda intensiva (Ralph et al. 1995), con el fin de registrar aquellas especies pocos conspicuas o que no fueron observadas en los conteos. Para todas las observaciones, se tuvo en cuenta el número de individuos, el estrato de vegetación en el cual se observó, dieta alimenticia y la estrategia de forrajeo. En todos los muestreos participaron cuatro (4) personas entrenadas con anterioridad, con el fin de minimizar el error que se pudiera presentar en la determinación visual y auditiva de especies. Los muestreos se realizaron en los meses de marzo, mayo, julio y septiembre de 2003. En cada muestreo se empleó un total de 13 días, dedicando un día por zona de muestreo. Colección de referencia El montaje y curación de aves para la colección se realizó en el Laboratorio de Investigaciones en Zoología (LABINZO) de la Universidad del Tolima. Las aves se prepararon de acuerdo con la metodología convencional de colecciones científicas según criterios del Instituto de Ciencias Naturales de la Universidad Nacional de Colombia; teniendo en cuenta todas las técnicas de preparación, almacenamiento y protección contra agentes contaminantes. De Análisis Se realizaron análisis descriptivos, a partir de la organización e interpretación de los datos mediante el manejo de la información en matrices en EXCEL 5.0. Adicional a esto se estimaron los índices ecológicos de Shannon-Weaver (H´) y Margalef en cada estación de muestreo con el objeto de comparar la diversidad y riqueza. 637 2.10.1.5.2 Resultados e Interpretación Se registraron 297 especies de aves distribuidas en 200 géneros, 44 familias y 16 órdenes empleando un total de 1.274 horas / red y 1.456 horas de observación. El orden passeriformes presentó el mayor porcentaje del total de géneros (59.5 %), especies (66%) y familias (19%) (Tabla 2.118). La zona de estudio con mayor número de especies fue la zona 3 perteneciente a la subcuenca del río Andes con 92 especies; la de menor número de especies fue la zona 5 perteneciente a la subcuenca del río Cocora - Vereda Laureles con 41 especies; las otras zonas presentaron valores intermedios como lo muestra la Figura 2.46. El total de especies registradas representa el 38,47 % de las especies reportadas para la región Andina (Salaman et al. 2001); lo que representa un porcentaje considerable que hay que valorar para efectos de conservación en una escala regional pequeña. Tabla 2.118 Número y porcentaje de géneros, especie y familias reportadas para cada orden en la Cuenca del río Coello en el año 2003. ORDEN Anseriformes Apodiformes Caprimulgiformes Charadriiformes Ciconiiformes Columbiformes Coraciiformes Cuculiformes Falconiformes Galliformes Gruiformes Passeriformes Piciformes Psittaciformes Strigiformes Trogoniformes TOTAL NÚMERO GÉNEROS 2 32 4 2 2 5 2 3 8 3 1 119 8 6 1 2 200 % GÉNEROS 1 16 2 1 1 2,5 1 1,5 4 1,5 0,5 59,5 4 3 0,5 1 100 NÚMERO ESPECIES 2 41 4 2 2 8 3 5 8 3 1 196 13 6 1 2 297 % ESPECIES 0,67 13,8 1,35 0,67 0,67 2,69 1,01 1,68 2,69 1,01 0,33 66 4,4 2,02 0,33 0,67 100 NÚMERO FAMILIAS 1 2 1 2 1 1 2 1 3 2 1 19 4 1 1 2 44 % FAMILIAS 2,27 4,54 2,27 4,54 2,27 2,27 4,54 2,27 6,81 4,54 2,27 43,2 9,1 2,27 2,27 4,54 100 Con respecto al número de especies por subcuencas se observó que la subcuenca del río Cocora registró el menor número promedio de especies (54) y la subcuenca del río Andes presentó el mayor número de especies (92); las otras subcuencas presentaron promedios intermedios: subcuenca río Coello parte baja (80 especies), subcuenca río Combeima (75 especies), subcuenca río Toche (66 especies), subcuenca río Bermellón y subcuenca río Anaime (64 especies cada una). Las familias mas representativas de la comunidad de aves de la cuenca 638 fueron Tyrannidae con el 14.14% del total de especies registradas, Thraupidae y Trochillidae con el 13.13%, Fringillidae con el 10.1%, Furnariidae con el l 4%, Coerebidae con el 3.7% y Parulidae con el 3.36%; siendo familias Thraupidae, Tyrannidae y Trochilidae las más diversas para la región Andina (Rangel 1997). 100 Número de Especies 90 80 70 92 87 85 82 75 68 64 66 71 66 63 60 50 45 41 40 30 20 10 Po t La reri l lo B ar bo na La And e C er s ra jo La s a ur el es Pe Ca rl a y s B aj C o ar ri z al es To Pe ch e la s Al to D an t La as G ua l Pa a ra m o 0 Zonas Figura 2.46 Número de especies encontradas en cada zona de muestreo en la cuenca del río Coello (Tolima), entre los meses de Marzo de 2003 y Octubre de 2003. El bajo número de especies registrado en la zona de estudio de la vereda Laureles, se puede deber al bajo número de muestreos en la misma, puesto que por dificultades de orden público únicamente se logró muestrear una vez en todo el transcurso del proyecto. Sin embargo, al realizar un análisis a nivel de subcuenca se apreció un rango considerable de especies entre 41 y 66 especies, permitiendo de ésta manera acercarse al número promedio de especies de la cuenca del río Coello, 70. Desde ese punto de vista y teniendo en cuenta las variables ambientales y ecológicas de la cuenca, el menor número de especies se presentó en la zona 13 perteneciente al Páramo de Los Valles con 46 especies; lo que tiene sentido puesto que por encima del límite de la vegetación arbórea la diversidad de especies de aves disminuye debido a las drásticas variaciones climáticas y la reducción de la estructura vertical y horizontal de la vegetación, lo cual trae como consecuencia limitaciones en el recurso hábitat y alimento. Entre las zonas con mayor número de especies se encuentran las localizadas por debajo de los 1600 m.sn.m (sin embargo este no es el caso de Laureles y La Cerrajosa en donde se debe considerar el menor número de muestreos), éstas zonas presentan una gran diversidad de hábitats, producto de las modificaciones antrópicas en el mismo; es posible encontrar áreas cultivadas, potreros, matorrales, diferentes tipos de zona abiertas con árboles y arbustos, zonas de 639 sucesión, bordes de bosque, bosques de galería y relictos boscosos de tamaños variables, entre otros. Esta características las convierte en zonas potenciales para el mantenimiento un alto número de especies de hábitos diversos; se encontraron especies generalistas con flexibilidad para ocupar cualquier ambiente dentro de sus límites fisiológicos, especies limitadas a hábitat específicos, y vale la pena mencionar que 5 de la 7 especies endémicas reportadas se localizan en estas zonas y se han adaptado a circunstancias específicas de hábitat intervenidos. No obstante cabe mencionar que el número de especies en un área no es un estimativo del estado de conservación de un ecosistema, ya que muchas de las especies encontradas en estas zonas son oportunistas. Al comparar los valores promedios de la variable número de especies se puede ver la tendencia de disminución del número de especies a medida que se asciende sobre el nivel del mar para cada una de las subcuencas; en contraposición, a lo observado por Terborgh (1977), en donde la diversidad de especies aumenta paralelamente con la altitud hasta el límite de la vegetación arbórea a partir del cual el recurso se limita y disminuye la diversidad de especies. El Índice de Diversidad de Shannon-Weaver promedio para la comunidad aviaria en la cuenca del río Coello fue de 3,68. El valor más alto se registró en la zona 1 perteneciente a la subcuenca del río Coello (3,94) y el valor más bajo se registró en la zona 13 perteneciente a la subcuenca del río Anaime en el Páramo de los Valles (3,38); las otras zonas presentaron valores intermedios (Figura 2.47). El índice de riqueza de Margalef presentó los mayores valores en la Zona de la vereda Laureles en la subcuenca del río Cocora (21.45) y en La Cerrajosa en la subcuenca del río Bermellón (16.83) (Figura 2.48). Las variaciones en los índices reflejan las fluctuaciones que se pueden presentar en una escala regional y como los procesos y patrones ecológicos en una escala local pueden variar significativamente. A pesar que las zonas correspondientes a la Guala y Toche presentan aparentemente bosques más extensos que otras zonas como Potrerillo y Andes; sus índices de diversidad fueron los más bajos (sin tener en cuenta la zona de páramo). Lo anterior sugiere que la intervención sobre los ecosistemas elimina zonas de vida y hábitats importantes, afectando la comunidad aviaria, posiblemente aún más, a especies distribuidas en áreas elevadas altitudinalmente como los bosques andinos. Temporalmente se presentaron variaciones en el número de especies para cada una de las zonas de muestreo. Los valores más altos se presentaron en el primer semestre del año en siete (7) zonas de trece (13); mientras que en el segundo semestre del año los valores más altos se presentaron en cinco (5) zonas de trece (13). Es de aclarar que la zona 5 (subcuenca río Cocora - vereda Laureles) no se incluyó en éste análisis por tener un solo dato debido a un solo muestreo (Tabla 2.119). 640 4 3,8 3,6 H' 3,4 3,2 Po La t rer B il lo ar bo na La An C de er s ra j La os a ur el es Pe C rl a ay s C Ba ar ri z jo al e To s Pe ch la e s Al D to an La tas G ua Pa l a ra m o 3 Zona Figura 2.47 Índice de diversidad de Shannon-Weaver calculado en cada zona de muestreo en la cuenca del río Coello (Tolima), entre los meses de Marzo de 2003 y Octubre de 2003. 25 Valor 20 15 10 5 Po La tre Ba rillo rb on La A a Ce nde rra s j La osa ur el es Pe rla Ca s y C Ba ar jo ri z al es Pe Toc rla he s Al D to an La tas G ua Pa l a ra m o 0 Zona Figura 2.48 Índice de riqueza de Margalef calculado en cada zona de muestreo en la cuenca del río Coello (Tolima), entre los meses de Marzo de 2003 y Octubre de 2003. De ésta manera se puede ver como las variaciones ambientales actúan de diversas maneras sobre las comunidades aviarias en escales locales. Es así como en el mes de marzo, época de transición de sequía a lluvias, el mayor número de especies (56) se presentó en la subcuenca del río Andes. Para el mes de mayo, época de sequía, el mayor número de especies (57) se presentó en la subcuenca del río Combeima quebrada Cay. Para el mes de julio, época de transición de sequía a lluvias, el mayor número de especies (50) se presentó en la subcuenca del río Andes. Y para el mes de septiembre, época de transición de sequía a lluvias, el mayor número de especies (54) se presentó en la subcuenca del río Andes. 641 Como se puede apreciar, es la subcuenca del río Andes la más importancia en cuanto al número de especies, lo que podría explicarse por ser una zona de transición altitudinal con una altura de 900 m.s.n.m., y esto sumado a su ubicación geográfica donde existe una conexión (corredor biológico) con las subcuencas: a) del río Coello parte baja, b) del río Combeima y c) del río Cocora por detrás del cerro de La Martinica; estos atributos permiten que se presenten intercambios faunísticos en éste grupo de organismos a los cuales se les facilita el desplazamiento en zonas de topografías variadas. Tabla 2.119 Relación del número de especies de aves por meses de muestreo en la cuenca del río Coello en el año 2003. Convenciones: 1: Marzo, 2: Mayo, 3: Julio; 4: Septiembre; (s.m).: sin muestrear por problemas de orden público. SUBCUENCA 1 2 3 4 Río Coello, Quebrada Potrerilla 47 44 46 46 Río Coello, Quebrada La Barbona 34 40 35 33 Río Andes 56 42 50 54 Quebrada La Cerrajosa 36 38 s.m. 24 Río Cocora, Vereda Laureles 41 Río Combeima, Quebrada Cay 45 57 38 44 Río Combeima, Quebrada Perlas (zona baja) 48 35 25 32 Río Anaime, Quebrada Carrizales 41 35 38 43 Río Toche 22 34 17 40 Río Combeima, Quebrada Perlas (zona alta) 17 44 28 41 Río Cocora, Vereda Dantas s.m. 28 46 31 Río Bermellón, Quebrada La Guala 29 38 30 41 Páramo de los Valles 20 22 36 13 Adicionalmente, a nivel general en la cuenca del río Coello, se destacó la presencia de siete (7) especies endémicas: Atlapetes flaviceps, Anthocephala floriceps, Myiarchus apicalis, Leptotila conoveri, Euphonia concinna, Habia cristata y Chloropipo flavicapilla (Stiles, 1997); seis (6) 6 especies casi endémicas Amazilia cyanifrons, Eriocnemis mosquera, Anairetes agilis, Urothraupis stolzmanni, Tangara vitriolina y Myioborus ornatus (Stiles, 1997); cuatro (4) especies bajo algún grado de amenaza: Leptotila conoveri, Anthocephala floriceps, Atlapetes flaviceps y Leptosittaca branikki (Rengifo et al 2002); y ocho (8) especies migratorias Piranga flava, Piranga rubra, Piranga olivacea, Dendroica fusca, Dendroica petechia, Wilsonia canadensis, Seiurus noveboracensis, Catharus ustulatus, y Tyrannus savana (National Geograhic 2002). Finalmente, las fichas taxonómicas de referencia de cada una de las especies de aves encontradas en la cuenca del río Coello se pueden observar en el Apéndice 2.13. 642