EVALUACIÓN DE LAS POBLACIONES MICROBIANAS QUE INTERVIENEN EN LAS TRANSFORMACIONES DEL AZUFRE EN UN BIORREACTOR DE TIPO UASB Enriqueta AMORA-LAZCANO1, Sofía GARRIDO HOYOS2 y Elizabeth DÍAZBAUTISTA1 1 Escuela Nacional de Ciencias Biológicas, IPN. Carpio y Plan de Ayala s/n. Santo Tomás C. P. 11200. correo electrónico: [email protected] 2Instituto Mexicano de Tecnología del Agua, Paseo de Cuauhnáhuac 8532. Jiutepec, Mor. C. P. 62550. México. Palabras claves: bacterias sulfato reductoras, bacterias oxidadoras del azufre, tratamiento anaerobio RESUMEN Los reactores anaerobios UASB (Manto de Lodo Anaerobio de Flujo Ascendente), han sido empleados en distintas industrias, éstos tienen la capacidad de retener altas concentraciones de biomasa activa inmovilizada debido a la presencia de partículas granuladas en donde se favorece el crecimiento de diferentes tipos de poblaciones microbianas. Sin embargo, la mayoría de los estudios que se han realizado son sobre bacterias metanogénicas, hidrolíticas y acetogénicas. En el presente trabajo se cuantificó el número más probable de bacterias que intervienen en la oxidación del azufre y la sulfato reducción, en un biorreactor de tipo UASB. La toma de muestras se realizó en el influente, efluente, y en cinco diferentes alturas del biorreactor. El número de microorganismos oxidadores de azufre fue muy constante en las diferentes alturas del reactor (1.4x102 1.4x103/mL), no encontrándose bacterias en el influente (pH 10.9) y cuantificándose únicamente 25 bacterias/mL en el efluente. Mientras que el número de bacterias sulfato reductoras fue semejante en todos las alturas del reactor (1.4x108 bacterias/mL), mientras que en el influente el número fue de 3.5x103 y en el efluente de 6.75x107 bacterias/mL. El pH del agua en el influente fue muy alcalino con un valor de 11; en el resto de las muestras varió de 7.2 a 7.8. El estudio de las diferentes poblaciones microbianas que interactúan en este tipo de sistemas nos permitirá conocer mejor los procesos bioquímicos que se llevan a cabo en ellos y las relaciones que se dan entre las poblaciones microbianas. INTRODUCCIÓN El agua es el líquido más importante y fundamental para la vida en la Tierra, es el bien más apreciado cuando falta y es el más ignorado cuando abunda. Por tal motivo es importante prevenir y evitar la contaminación excesiva del agua (Ville, 1990). 1 El ciclo natural del agua tiene una gran capacidad de purificación. Pero esta misma facilidad de regeneración y su aparente abundancia, hace que sea el vertedero habitual en el que arrojamos los residuos producidos por nuestras actividades. Pesticidas, desechos químicos, metales pesados, residuos radiactivos, entre otros, se encuentran, en cantidades mayores o menores, al analizar las aguas de los más remotos lugares del mundo. Muchas aguas están contaminadas hasta el punto de hacerlas peligrosas para la salud humana, y dañinas para la vida (Arellano, 2002). Para tratar de evitar una contaminación aún mayor del agua y además contribuir a su limpieza, se han desarrollado procesos de tratamiento para distintos tipos de aguas residuales, entre ellos destacan: 1. 2. 3. Tratamientos Anaerobios Tratamientos Aeróbios Tratamientos Físico-Químicos Aunque los sistemas anaerobios de tratamiento de aguas residuales son conocidos desde el siglo XIX, fueron considerados ineficientes y lentos para el tratamiento de grandes volúmenes de aguas residuales, especialmente en áreas industriales y densamente pobladas. Sin embargo recientemente se ha demostrado que estos procesos son una alternativa económicamente atractiva para el tratamiento de diferentes tipos de aguas residuales industriales y domésticas en zonas semi-tropicales y tropicales (Lettinga y Hulshoff Pol, 1991). Los reactores anaerobios UASB “Upflow Anaerobic Sludge Blanket” (Manto de Lodo Anaerobio de Flujo Ascendente), han sido empleados exitosamente por muchos tipos de industrias de alta, media y baja contaminación de agua. El empleo de estos reactores se debe a la capacidad de retención de altas concentraciones de biomasa activa inmovilizada por la presencia de partículas granuladas de lodos, aunque la eficiencia de remoción de materia orgánica resulte menor al 82%. Se tienen reportes acerca de bacterias anaerobias que pueden adaptarse relativamente rápido a bajas temperaturas por lo que este tipo de tratamientos pueden emplearse bajo condiciones psicrofílicas (Lettinga y Hulshoff Pol, 1991). Sin embargo, Syutsuo et al. (1997) han realizado experimentos exitosos bajo condiciones mesofílicas y termofílicas obteniendo eficiencias de remoción de materia orgánica del 85%. Los UASB pueden actuar a la vez como tratamiento primario y secundario para manejo de aguas residuales (Lettinga et al. 1983). Las ventajas de esta tecnología son sus costos reducidos de inversión y operación. Además de generar tres productos valiosos que son: un abono orgánico, biogás (metano), y agua tratada baja en nutrientes. La limitante es su aplicación a efluentes relativamente calientes, característicos de la industria. La formación de un lodo estratificado, en el cual se desarrollan diferentes tipos de poblaciones microbianas que degradan la materia orgánica y generan metano; así 2 como el diseño y operación del reactor, que permiten la eliminación del gas y la recirculación de la biomasa, son entre otros los factores que han permitido la difusión de los reactores UASB en América Latina desde 1988 (Lettinga y Hulshoff Pol, 1991). Hasta el momento, las poblaciones microbianas estudiadas con detalle en estos reactores han sido solo cuatro grupos (Sosa et al. 1995): 1. Bacterias hidrolíticas y fermentativas, las cuales convierten una variedad de compuestos orgánicos tales como polisacáridos, lípidos y proteínas en ácido acético, H2, CO2, compuestos monocarbonados, ácidos grasos orgánicos y compuestos policarbonados. 2. Bacterias acetogénicas productoras de hidrógeno, incluyen obligatoriamente a las dos especies facultativas que pueden transformar los productos del primer grupo (los ácidos orgánicos de más de dos átomos de carbono, por ejemplo el butírico y el propiónico y los alcoholes policarbonados tales como el etanol y el propanol) en hidrógeno y acetato. 3. Las bacterias homoacetogénicas que convierten un espectro amplio de compuestos multi o monocarbonados en ácido acético. 4. Bacterias metanogénicas, que transforman el H2, CO2, compuestos monocarbonados como metanol, monóxido de carbono (CO) y la metilamina en acetato, o pueden formar metano de la descarboxilación del acetato. (Sosa et al.1995) Debido a la gran cantidad de materia orgánica y sustancias nitrogenadas y azufradas contenidas dentro de las aguas residuales es imposible pensar que no existan otras poblaciones microbianas que participan sin duda alguna en los procesos bioquímicos que se llevan a cabo en el biorreactor. Se han llevado a cabo estudios donde se han realizado cuantificaciones de las poblaciones bacterianas y observaciones microbiológicas de los lodos que forman parte de los reactores UASB en la Universidad de Tsinghua, Beijing. Las bacterias fueron clasificadas en tres grupos, en los cuales se cuantificaron dentro del reactor. GRUPO I : 9.3 x 108 – 4.3 x 109 células /mL (Bacterias Fermentativas) GRUPO II : 4.3 x 107 – 4.3 x 108 células / mL (Bacterias Acetogénicas) GRUPO III : 2.0 – 4.3 x 108 células / mL (Bacterias Metanogénicas) 3 Estos resultados mostraron que la formación de los lechos granulados depende principalmente de la organización y arreglo de las bacterias. Una observación del lecho granular empleando un microscopio electrónico reveló que las bacterias fermentativas y las bacterias metanógenas hidrogenotrópicas existen sobre la superficie del granulo, mientras que, las bacterias acetogénicas y metanógenas ocupan estratos internos. Así mismo, se encontró una nueva asociación bacteriana de tipo sintrófica conformada por Methanosaeta sp y Syntrophomonas sp, basada en la degradación de ácidos de cadena corta y la alta actividad metanogénica en el lecho granular (Jianrong et al. 1997). Además, el oxígeno que pudiese encontrarse disuelto no altera la eficiencia del reactor en la práctica, así como las bajas temperaturas no implican que el tratamiento anaerobio no sea factible (Kato et al. 1997). Los compuestos de azufre reducido pueden propiciar el crecimiento de un grupo de bacterias quimioautotróficas bajo condiciones estrictamente aerobias y un grupo de bacterias fotoautotróficas bajos condiciones estrictamente anaerobias. Adicionalmente, un número de microorganismos heterótrofos aerobios (bacterias y hongos), oxidan el azufre elemental a tiosulfato y sulfato (Mauer et al. 1999). Los compuestos oxidados con más frecuencia son el sulfhídrico (H2S), el azufre elemental (S0) y el tiosulfato (S2S32-), cuyo producto final de la oxidación es el ión sulfato (SO42-). En el ambiente, la oxidación del azufre se combina con la reducción asimilatoria y desasimilatoria de sulfato. El género Thiobacillus posee especies que en su mayoría son capaces de oxidar indistintamente diferentes compuestos reducidos del azufre. Algunas de éstas son quimiolitótrofos obligados (Thiobacillus thiooxidans, tolerante a pH’s ácidos; Thiobacillus ferrooxidans, responsable de la formación de ácidos; Thiobacillus denitrificans, anaerobio facultativo que puede sustituir al oxígeno por nitrato como aceptor final de electrones de cadena respiratoria), mientras que otras como Thiobacillus novellus y Thiobacillus intermedius son microorganismos mixótrofos (Parés y Juárez, 1997; Mauer et al. 1999). Por otro lado, la reducción de sulfatos es llevada a cabo por bacterias reductoras de sulfatos (SRB), que son un grupo de microorganismos metabolicamente versátil debido a la diversidad de familias y géneros bacterianos que lo conforman. Las SRB son anaerobios obligados que emplean el sulfato u otros compuestos oxidados del azufre como aceptores finales de electrones en su cadena respiratoria, cuyos sustratos más comunes (donadores de electrones y fuentes de carbono y energía) son lactato, etanol, propionato e hidrógeno. La reducción de sulfato se ha asociado a una actividad microbiológica que durante el tratamiento anaerobio de aguas residuales ricas en sulfatos, causa el decremento en la producción de metano y en la remoción de materia orgánica, además de crear un ambiente de toxicidad y corrosión en el reactor. Las primeras investigaciones sobre la reducción de sulfato estuvieron enfocadas hacia la disminución de los efectos negativos; sin embargo, las más recientes han buscado la manera de reducir la toxicidad del ácido sulfhídrico (Hulshoff Pol et al. 2000). 4 En el presente trabajo se cuantificó el número más probable de bacterias que intervienen en la oxidación del azufre y en la sulfato reducción, en un biorreactor de tipo UASB. MATERIALES Y MÉTODOS El biorreactor UASB se encuentra en la planta productora de grenetina “GELITA S.A. de C.V.”, ubicada en la zona industrial del valle de Toluca y se emplea para tratar aguas residuales provenientes del proceso de obtención de grenetina a partir de huesos, cartílago y piel de animales aceptado por la SSA. Las dimensiones del biorreactor son 8 m de altura y 11 m de diámetro, operando en un intervalo de temperatura de 25 a 28 ºC. Los puntos de muestreo se representan en la figura 1, estos se encontraron distribuidos uniformemente en el biorreactor con una distancia aproximada de un metro entre cada uno. A5 A4 A3 A2 A1 Figura 1. Esquema del biorreactor, mostrando los puntos de muestreo La cuantificación de las poblaciones microbianas se llevó a cabo mediante la técnica del número más probable (Schmidt y Belser, 1982) utilizando medios de cultivo específicos para cada grupo microbiano. 5 El medio para cuantificar a la población de microorganismos oxidadores del azufre elemental, fue formulado por Starkey (1935), el cual contenía azufre en su estado elemental, por lo que las bacterias capaces de crecer en él, emplearon el azufre elemental como fuente de energía. El medio para cuantificar microorganismos sulfatoreductores, propuesto por Lapage et al. (1970), contenía iones SO4-2 que se adicionaron como Na2SO4, MgSO4·7H2O y FeSO4·7H2O. Los microorganismos que fueron capaces de utilizar como último aceptor de electrones a los iones sulfato en su cadena respiratoria se desarrollaron en este medio. Los medios de cultivo se incubaron a 28°C durante un periodo de tres semanas. También se midió el pH de los lodos. Todas las evaluaciones se realizaron por triplicado RESULTADOS Y DISCUSIÓN La tabla 1 muestra los resultados obtenidos de las poblaciones microbianas que intervienen en las transformaciones del azufre en cada uno de los puntos de muestreo del biorreactor. Tabla 1. Cuantificación de las Poblaciones Microbianas del Azufre. (m.o./mL de muestra) ALTURA Población Microbiana Oxidadores de azufre elemental Reductores de sulfatos A1 A2 A3 A4 4x102 1.4x103 1.4x102 1.75x102 1.725x102 1.4x108 1.4x108 1.4x108 1.4x108 A5 1.4x108 IN EF 0 25 3.5x103 6.75x107 * Resultados de la media aritmética de 3 series; IN: Influente; EF: Efluente Como se muestra en los resultados el número de microorganismos reductores de sulfatos es mayor al observado en las poblaciones de microorganismos oxidadores de azufre elemental. La mayor concentración de microorganismos oxidadores del azufre se presentó en la altura A2 con 1.4x103 m.o/mL. Kitada et al. (2000) han reportado que en los procesos anaerobios de degradación que se llevan a cabo en los reactores UASB 6 favorecen la proliferación de microorganismos oxidadores del azufre elemental, su principal función es la remoción de metales pesados, empleando el ácido sulfúrico producido por este grupo microbiano. Sin embargo, es necesario para incrementar dicho grupo adicionar azufre elemental dentro del biorreactor en concentraciones mínimas de 5 g/L de agua por tratar. Otros reportes indican que cuando el azufre elemental es introducido en un reactor anaerobio es convertido rápidamente a sulfuro por medio de las bacterias reductoras, un ejemplo de ellas es Wollionella sp. Las sulfolobales pueden realizar esta misma transformación bajo condiciones aerobias y anaerobias. Sin embargo, también las bacterias metanogénicas pueden reducir el azufre hasta sulfuro (Lens y Kuenen 2000). Los microorganismos reductores de sulfatos presentaron una concentración constante a los largo del biorreactor UASB siendo esta de 1.4x108 m.o/mL, lo cual indica que este grupo microbiano encuentra las condiciones favorables para su proliferación dentro del reactor. Su presencia fue la esperada debido a que este grupo de microorganismos requiere de sustratos como acetato, lactato y piruvato, los cuales son productos de la degradación bioquímica de los diversos sustratos del agua tratada (Lettinga y Hulshoff Pol, 1991). Estos resultados concuerdan con Mauer, et al. (1999) y, Atlas y Bartha (1999) quienes han reportado que los géneros microbianos que utilizan a los sulfatos como aceptores terminales de electrones, están ampliamente distribuidos en la naturaleza y se encuentran especialmente en ambientes anaerobios, así como en agua mezclada con grandes cantidades de suelo. Los reportes de Sosa et al. (1995), indican que los microorganismos reductores de sulfatos forman parte del consorcio microbiano anaerobio que incluye microorganismos hidrolíticos y fermentativos, acetogénicos, homoacetogénicos y metanogénicos. El agua del influente está compuesta principalmente por una mezcla de residuos de colágeno, álcali, residuos de piel, huesos, aminoácidos (principalmente glicina, prolina e hidroxiprolina) (Charley, 1970). Debido al empleo de un álcali para facilitar la obtención de gelatina, el pH de esta agua a tratar es sumamente alcalino (pH 10.9). La tabla 2 muestra la evaluación del pH a lo largo del reactor UASB en sus diferentes puntos de muestreo. Los microorganismos oxidadores del azufre elemental viven en ambientes sumamente ácidos, siendo su pH óptimo de crecimiento 4.0 (Egorova y Deryugina, 1963; Williams y Hoare, 1972), por lo que su desarrollo y proliferación en el biorreactor UASB en estudio es muy bajo. 7 Tabla 2. pH de las muestras tomadas a lo largo del reactor UASB. ALTURA pH A1 A2 A3 A4 A5 IN EF 7.2 7.15 7.2 7.35 7.6 10.9 7.85 Los pH’s ligeramente alcalinos del biorreactor favorecen el desarrollo de los microorganismos reductores de sulfatos puesto que estos proliferan en un pH de 7.4 aunque pueden sobrevivir en pH’s bajos (Lapage et al. 1970). El estudio de las diferentes poblaciones microbianas que interactúan en este tipo de sistemas nos permitirá conocer mejor los procesos bioquímicos que se llevan a cabo en ellos y las relaciones que se dan entre las poblaciones microbianas. REFERENCIAS Arellano D. J. (2002). Introducción a la Ingeniería Ambiental. Alfa Omega. España pp. 21-24, 27-47. Atlas M. R y Bartha R. (1999). Microbial Ecology Fundamentals and Aplications.4ta. Ed. Addison Wesley Longman. pp. 414-437. Charley H. (1970). Tecnología de Alimentos. Limusa. pp. 615-618. Egorova A. A. y Deryugina, Z. P. (1963). The spore forming thermophilic thiobacterium Thiobacillus thermophilica Imschenetskii nov.sp Mikrobiologiya 21:281-288 Fang H. 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