Diego J. Benítez Pazmiño Respecto a la contribución, es interesante destacar que la evolución de la contribución es significativamente distinta entre un tratamiento y otro. En la figura 1, que muestra la contribución promedio a lo largo de los 11 periodos pagados, puede apreciarse este hecho. Esencialmente, mientras que en el tratamiento de Rivalidad la contribución promedio cae marcadamente, en el tratamiento de N o Rivalidad esta caı́da no se da de la misma manera, es decir, la contribución se mantiene. Figura 1: Contribuciones promedio al bien público a lo largo de 11 periodos. Este hecho se ratifica con los datos del cuadro 7, que muestra cinco especificaciones de un modelo de MCO en los que la variable dependiente es la contribución. En ellos, el término de interacción P eriodo.Rivalidad es el que recoge el efecto de la variación en el monto de contribución debido al tratamiento de Rivalidad a lo largo de los periodos. Como puede apreciarse, el coeficiente de esta variable es significativo negativo sin importar las variables de control que se incluyan. Esto implica que en el tratamiento de Rivalidad la tasa de contribución fue menor a lo largo de los perı́odos de estudio. También llama la atención del cuadro 7, que según las columnas 2 a la 5, la contribución aumenta a medida que el castigo en el periodo previo es mayor, que se refleja en el coeficiente significativo de la variable Castigo en T − 1. Esto sugiere cierta racionalidad en la respuesta de los participantes al castigo recibido. Es decir que cuando el participante recibe un castigo, aumenta su contribución en el siguiente periodo. Estos resultados sugieren que aunque el tratamiento de Rivalidad no tiene efecto sobre el tipo de castigo propinado, sı́ lo tiene sobre la variación del monto de la contribución, lo que 14 46 Analítika, Revista de análisis estadístico, (2015), Vol. 10