No debe haber “opción a excluirse” de los derechos fundamentales

AMNISTÍA INTERNACIONAL
Carta abierta
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Servicio de Noticias
15 de octubre de 2007
IOR 61/024/2007
197/07
http://web.amnesty.org/library/Index/ESLIOR610242007
Carta abierta a los jefes de Estado y de gobierno de la Unión Europea
NO DEBE HABER “OPCIÓN A EXCLUIRSE” DE LOS DERECHOS
FUNDAMENTALES
La víspera de la reunión informal en la que el Consejo Europeo tiene previsto fijar el nuevo Tratado
de Reforma, Amnistía Internacional desea expresar a los jefes de Estado y de gobierno su firme
protesta contra el establecimiento de criterios dispares en la esfera de los derechos fundamentales.
En la práctica, toda “opción a excluirse” (opt-out) de la aplicación de la Carta de los Derechos
Fundamentales de la Unión Europea crearía desigualdad en Europa, puesto que algunos países
ofrecerían menos protección que otros. Esto supondría un debilitamiento de la noción de
ciudadanía europea que proclaman los tratados de la UE y pondría en entredicho la autenticidad
de su compromiso con los derechos humanos.
La protección y promoción de los derechos humanos forma parte de los principios fundacionales de
la Unión Europea. Así pues, permitir alguna excepción en este ámbito no sólo sería incoherente,
sino que iría en menoscabo del propio fundamento de la unión de valores.
Además, transmitiría al resto del mundo un mensaje negativo respecto a la importancia que la
Unión Europea concede a los derechos humanos. Al aceptar criterios dispares en este ámbito, la
UE pondría en grave compromiso su credibilidad y socavaría la eficacia de su política general de
derechos humanos.
En un momento en que los dirigentes de Europa todavía no han dado respuesta a los casos de
secuestro, tortura y desaparición forzada que ocurrieron como consecuencia de las actividades
ilegales de la CIA estadounidense con la complicidad europea, el debate debería centrarse en la
manera de que la UE refuerce colectivamente la protección de los derechos humanos, y no en
cómo algunos Estados miembros intentan eludir sus obligaciones.
Ahora que la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea está a punto de adquirir
fuerza de ley, Amnistía Internacional pide a los jefes de Estado y de gobierno que no pongan en
peligro los avances logrados desde su solemne proclamación en Niza en el año 2000 aceptando
retractaciones de lo declarado colectivamente como derechos fundamentales de la Unión Europea.