Noticias sobre la pena de muerte, junio de 1998 NOTICIAS SOBRE JUNIO DE 1998 LA PENA DE MUERTE AMNISTÍA INTERNACIONAL 1 Easton Street Londres WC1X 8DJ Reino Unido Índice AI: ACT 53/03/98/s Distribución: SC/DP/PO/CO/GR (28/98) RESUMEN DE ACONTECIMIENTOS SOBRE LA PENA DE MUERTE Y AVANCES EN EL CAMINO DE LA ABOLICIÓN NACIONES UNIDAS Noticias sobre la pena de muerte, junio de 1998 Petición de una suspensión de las ejecuciones En su periodo de sesiones anual en Ginebra, la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas solicitó con mayor firmeza que se suspendieran las ejecuciones. En la Resolución 1998/8, adoptada el 3 de abril, la comisión «insta a todos los Estados que todavía mantienen la pena de muerte a que... consideren la posibilidad de suspender las ejecuciones, con miras a abolir completamente la pena de muerte». El lenguaje utilizado es más enérgico que el de la Resolución 1997/12, adoptada el año pasado por la misma comisión, que sólo pide a los Estados retencionistas que «consideren» la posibilidad de suspender las ejecuciones (véase Noticias sobre la pena de muerte de marzo de 1997). Otras características de la resolución de 1997 continúan invariables en la de este año, como la petición a los Estados de que «limiten progresivamente el número de delitos por los que se puede imponer», y la solicitud al secretario general de las Naciones Unidas para que elabore un suplemento anual del informe quinquenal de las Naciones Unidas sobre los cambios en la legislación y en la aplicación de la pena de muerte en todo el mundo. La resolución de este año tuvo un número mucho mayor de copatrocinadores (65 Estados frente a los 44 de 1997). El número de votos fue ligeramente inferior (26 a favor, 13 en contra y 12 abstenciones, frente a 27, 11 y 14 respectivamente el año pasado). Muchos de los nuevos países copatrocinadores habían abolido recientemente la pena capital o suspendido las ejecuciones. La resolución recibió con satisfacción el informe elaborado con arreglo a la petición del año anterior (documento de la ONU E/CN.4/1998/82), en cuyas conclusiones se dice, entre otras cosas, que la tendencia hacia la abolición continúa. Este informe también incluye un anexo en el que se reproduce la información presentada por los Estados. La remitida por México ofrece amplios detalles de las medidas tomadas por las autoridades de ese país para ayudar a sus ciudadanos condenados a muerte en Estados Unidos. Entre las organizaciones no gubernamentales que presionaron para que se adoptara una resolución más enérgica figuran Amnistía Internacional y Hands Off Cain. Ambas efectuaron declaraciones orales expresando su oposición a la pena de muerte. El relator especial solicita leyes que protejan a los deficientes mentales y ataca el uso de la pena de Page 1 of 6 muerte en Estados Unidos En su informe anual a la Comisión de Derechos Humanos, el relator especial sobre ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias abundó en sus declaraciones de informes anteriores sobre la conveniencia de abolir la pena de muerte y la necesidad de asegurar los máximos niveles de garantías en los juicios de casos de pena capital (véase Noticias sobre la pena de muerte de junio de 1997). El informe de este año insta particularmente a los gobiernos que continúan aplicando la pena de muerte a menores y deficientes mentales a que «armonicen su legislación penal interna con las normas jurídicas internacionales. Los Estados deben estudiar la posibilidad de promulgar medidas legislativas especiales que protejan a los retrasados mentales, que recojan las normas internacionales vigentes» (Ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias: Informe del Relator Especial..., 23 de diciembre de 1997, documento de la ONU E/CN.4/1998/68, párrafo 117). Este es el sexto informe anual que presenta Bacre Waly Ndiaye como relator especial, y el decimoquinto desde que en 1982 la Comisión de Derechos Humanos estableciera el mandato del relator especial. En un anexo también presentado ante la Comisión de Derechos Humanos (documento de la ONU E/CN.4/1998/68/Add.3, de 22 de enero de 1998), Bacre Waly Ndiaye informó sobre su misión a Estados Unidos, realizada en septiembre y octubre de 1997. El relator especial reiteró la postura del Comité de Derechos Humanos, según el cual la reserva sobre la imposición de la pena de muerte a delincuentes juveniles formulada por Estados Unidos al ratificar el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos es «incompatible con el objeto y fin» del Pacto y debe considerarse nula. Considera que la práctica de Estados Unidos de imponer la pena de muerte a delincuentes juveniles «viola el derecho internacional», y que «la reintroducción de la pena capital y la ampliación de su alcance, tanto a nivel federal como estatal, contradice el espíritu y la finalidad del artículo 6 del Pacto». El relator también mostró su preocupación por la ejecución de deficientes y enfermos mentales en violación de las normas internacionales. El relator especial afirmó que «es inquietante la falta de asistencia letrada y de representación jurídica en el caso de muchos acusados susceptibles de ser condenados a la pena capital», y señaló que la aplicación de la pena de muerte en Estados Unidos parece seguir marcada por la arbitrariedad. En palabras de su informe: «La raza, el origen étnico y la posición económica parecen ser los principales elementos determinantes de la imposición de esa pena.» El relator especial expresó sus dudas sobre la objetividad de la aplicación de la pena de muerte en Estados Unidos debido a su politización, «sobre todo en las campañas electorales», y afirmó que «el poder discrecional del fiscal para requerir, o no, la pena de muerte, plantea graves preocupaciones sobre la equidad de su administración». El relator reconoció que las encuestas continúan mostrando un apoyo aparentemente elevado de la opinión pública a la pena capital, pero afirmó que esto «no puede justificar la falta de respeto de las restricciones y salvaguardias concernientes a su aplicación. En muchos países, los linchamientos y muertes a mano de las multitudes cuentan con el apoyo público como medio de hacer frente a delitos violentos y se califican a menudo de "justicia popular". Sin embargo, no son aceptables en ninguna sociedad civilizada». El informe reconoce la dificultad de luchar contra los delitos violentos, pero indica que «la crueldad inherente a las ejecuciones no puede sino conducir a perpetuar una cultura de violencia» y que deben buscarse soluciones alternativas a la pena de muerte. También expresa la preocupación del relator por la forma en que se enfocan actualmente los derechos de las víctimas, y afirma que, «si bien las víctimas tienen derecho a respeto y compasión, acceso a la justicia y pronto resarcimiento, esos derechos no deben ejercitarse a expensas de los derechos del acusado. Los tribunales no deben convertirse en un foro para la represalia.» Informe del relator especial para Iraq El relator especial para Iraq, el ex primer ministro neerlandés Max van der Stoel, afirmó en el informe que presentó ante la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en abril (documento de la ONU E/CN.4/1998/67) que el gobierno de Iraq ejecutó al menos a mil quinientas personas el año pasado, en su mayoría por motivos políticos. La mayoría de las ejecuciones fueron ordenadas durante noviembre y diciembre de 1997, y obedecieron, según los informes, a un gran esfuerzo por liberar las cárceles de presos condenados a muerte o a quince o más años de cárcel. Las leyes iraquíes permiten la ejecución por delitos tales como insultar de forma pública y flagrante al presidente de la República, doble pertenencia a partidos políticos y desarrollar actividades políticas en el ejército. El control de los medios de comunicación es muy estricto. Page 2 of 6 ETIOPÍA REANUDA LAS EJECUCIONES Jamil Yasin Mohamed, destacado hombre de negocios de origen eritreo, fue ejecutado el 2 de junio en la Prisión Central de la capital etíope, Addis Abeba. Declarado culpable del asesinato del general de división Hayelom Araya en abril de 1996, su apelación y su petición de indulto fueron denegadas. Su ejecución fue la primera desde el derrocamiento del Dergue (gobierno militar) en 1991 y puede ser el preludio de nuevas ejecuciones si se imponen penas de muerte en el actual juicio de los miembros del Dergue y en futuros juicios de más de dos mil ex funcionarios acusados de genocidio. No obstante, el momento en que se produjo la ejecución la vinculó al estallido de combates fronterizos entre Etiopía y Eritrea, en mayo de 1998. AFGANISTÁN: EJECUCIÓN POR APLASTAMIENTO Cada vez hay más informes de ejecuciones públicas tras juicios sin garantías por tribunales rudimentarios. El gobierno talibán ejecuta a los reos colgándolos de grúas, degollándolos o aplastándolos bajo una pared. En los últimos meses, al menos cinco hombres, declarados culpables de sodomía por tribunales de la ley islámica, han sido ejecutados dejándoles caer encima una pared y enterrándolos bajo sus escombros. Dos de ellos no murieron hasta el día siguiente en el hospital, y uno sobrevivió. En marzo se convocó a 30.000 espectadores en el estadio nacional de la capital, Kabul, para presenciar cómo el hermano de un hombre asesinado disparaba contra el presunto asesino con una ametralladora. En respuesta a las críticas internacionales, altos funcionarios talibanes declararon a la agencia Reuters: «El emirato islámico no cederá ante ningún tipo de influencia a la hora de aplicar y promulgar las penas y las órdenes divinas de la Sharía (ley islámica)». RUANDA: EJECUCIONES POR EL GENOCIDIO DE 1994 Veintidós hombres y una mujer acusados de participar en el genocidio de 1994 fueron ejecutados por fusilamiento el 24 de abril en la capital, Kigali, y en otras cuatro ciudades. Las ejecuciones, realizadas en público, fueron seguidas por grandes masas de espectadores, entre los que había numerosos niños. Muchos de los ejecutados habían sido juzgados sin las debidas garantías, como un ex fiscal auxiliar, cuyos testigos habían sido amenazados e intimidados. Varios de los acusados no contaron con abogado defensor. Destacados líderes y organizaciones, como el papa Juan Pablo II, el secretario general de las Naciones Unidas, Kofi Annan, y la Unión Europea protestaron enérgicamente por las ejecuciones. PAKISTÁN: «ASESINATO DE LA JUSTICIA» Recientemente, en Pakistán se ha consumado una ejecución a pesar de la existencia de sólidos indicios de la inocencia del preso. Maqsood Ahmed fue arrestado en mayo de 1989, acusado de disparar contra un hombre durante un atraco. Condenado a muerte varios años después, la sentencia y la condena fueron confirmadas por el Tribunal Superior de Lahore. Mientras aguardaba su ejecución, dos presuntos delincuentes arrestados por otra causa confesaron ser los asesinos. Además, un superintendente de la policía afirmó que Maqsood no podía haber cometido el delito, ya que se hallaba bajo custodia policial por un delito menor en el momento del asesinato. A pesar de estos nuevos indicios, Maqsood fue ejecutado en febrero. Su abogado defensor calificó la ejecución de «asesinato de la justicia». Según la Comisión de Derechos Humanos de Pakistán (no gubernamental), a mediados de 1997 había unas 2.855 personas condenadas a muerte. Desde entonces esta cifra ha aumentado. Entre las 226 condenas a muerte registradas por AI en 1997, al menos 84 habían sido fijadas por tribunales especiales creados para delitos de «terrorismo» en agosto de ese mismo año. AI ha señalado que los procedimientos de estos tribunales distan mucho de cumplir las normas internacionales para juicios con las debidas garantías. CHINA: SE TORTURA A LOS PRESOS PARA OBTENER CONFESIONES El pasado mes de mayo apareció en una información del periódico China Youth Daily el caso de una persona aparentemente inocente condenada a muerte. Según el diario, Chen Jinchang, junto con otros tres jóvenes, fue Page 3 of 6 arrestado en abril de 1995 en la provincia de Yunnan por asesinato y atraco. Tras torturarlos durante siete días para que confesaran, Chen fue condenado a muerte, y los otros a penas de cinco a quince años de cárcel. En mayo de 1996, el Tribunal Superior del Pueblo decidió que la pena impuesta a Chen era demasiado dura y dejó en suspensión la condena a muerte. Aunque los jóvenes contaban con unas 25 personas que les podían proporcionar una coartada, hasta que otra persona bajo custodia confesó el delito no se abrió una investigación, cuyo resultado fue la aplicación de medidas disciplinarias contra diez policías, el despido de cuatro y el traslado de uno a otro equipo. Aunque AI tiene razones para temer que en China muchas confesiones les son extraídas a los presos bajo tortura, es raro que la prensa del país informe sobre el caso de un preso condenado a muerte. Estados Unidos Desafío a las leyes internacionales - El 14 de abril, el ciudadano paraguayo Ángel Francisco Breard fue ejecutado en el estado de Virginia, haciéndose caso omiso de un fallo de la Corte Internacional de Justicia por el que se ordenaba posponer la ejecución hasta que la Corte se pronunciara en firme sobre su causa. Los funcionarios que arrestaron a Ángel Francisco Breard no le informaron de su derecho a pedir ayuda a las autoridades de su país, recogido en el artículo 36 de la Convención de Viena sobre Relaciones Consulares. La ejecución se llevó a cabo a pesar de que la secretaria de Estado estadounidense, Madeleine Albright, pidió que fuera pospuesta, indicando su temor a que pusiera en peligro ese mismo derecho de los ciudadanos estadounidenses cuando fueran arrestados en otros países. En Estados Unidos hay más de sesenta ciudadanos extranjeros de 22 nacionalidades condenados a muerte. A casi todos ellos las autoridades no les notificaron al arrestarlos su derecho a comunicarse con sus representantes consulares. Desde 1993, Estados Unidos ha ejecutado al menos a cinco extranjeros, entre ellos ciudadanos de la República Dominicana, México y Cuba. Prejuicios raciales - En un caso de pena de muerte, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos determinó que Estados Unidos había violado las leyes internacionales a causa de prejuicios raciales, entre otras cosas. William Andrews fue condenado a muerte en Utah en 1974 por un jurado compuesto enteramente por blancos. Durante el juicio, se halló en poder del jurado una nota con el dibujo de un ahorcado y la frase «Colgad al negro». No se realizó ninguna investigación para determinar cuántos de los miembros del jurado habían visto la nota ni quiénes habían sido sus autores, y cuál fue el efecto que tuvo en sus deliberaciones. William Andrews fue ejecutado dieciocho años más tarde, en julio de 1992. Kentucky aprobó en abril una ley que permite a los presos condenados a muerte solicitar un estudio que determine si su raza desempeñó algún papel en su procesamiento. El senador Gerald Neal, que presentó el proyecto de ley, afirmó: «El objetivo del proyecto de ley 171 del Senado es garantizar que la raza no influye en la decisión de solicitar o imponer la pena de muerte». Dos delincuentes juveniles ejecutados en Texas - Joseph Cannon fue ejecutado el 22 de abril por un asesinato cometido en 1977, cuando tenía 17 años. Cannon, diagnosticado como esquizofrénico, había sufrido graves malos tratos en su infancia. Su abogado, Stanley Schneider, pidió al juez de distrito de San Antonio que impidiera la ejecución argumentando la inconstitucionalidad de la ley que permite aplicar la pena de muerte por delitos cometidos por menores. A pesar de los llamamientos intercediendo por él del papa Juan Pablo II, de miembros del parlamento italiano y del arzobispo sudafricano Desmond Tutu, el gobernador George Bush se negó a intervenir. Robert Carter fue ejecutado en Texas el 18 de mayo por un asesinato cometido en 1981, cuando tenía 17 años. El jurado sólo deliberó durante diez minutos antes de condenarlo a muerte basándose en una confesión hecha sin que hubiera ningún abogado presente y tras ser interrogado en aislamiento. Sus abogados no informaron al jurado de posibles atenuantes, como el importante retraso mental de Carter y los graves malos tratos sufridos durante su infancia. Su petición a la Corte Suprema estadounidense de detener la ejecución fue rechazada. Siete delincuentes juveniles han sido ejecutados en Texas desde que este estado reanudó las ejecuciones en 1982. BREVES MYANMAR - Seis hombres han sido condenados a muerte en relación con una presunta «conspiración» Page 4 of 6 antigubernamental para «perturbar el orden público». Al parecer todos fueron arrestados en enero. EGIPTO - Dos hombres fueron ejecutados en la Cárcel de al-Isti'naf (El Cairo) el 24 de mayo. En octubre de 1997 habían sido condenados a muerte en un juicio sin garantías como autores de un atentado con bombas incendiarias y pistolas contra un autobús turístico en el centro de El Cairo en septiembre de 1997, en el que murieron nueve turistas alemanes y el conductor egipcio. El 11 de junio fueron ejecutados en la Cárcel de Isti'naf dos hombres que habían sido condenados a muerte por el Tribunal Supremo de Seguridad del Estado (para estado de excepción) en noviembre de 1997. En 1995, este mismo tribunal los había absuelto, al considerar que habían confesado bajo tortura. Sin embargo, ninguno de los dos quedó en libertad tras su absolución, y volvieron a ser juzgados por orden del primer ministro y condenados a muerte. Desde enero, unas treinta personas han sido condenadas a muerte en Egipto y 25 han sido ejecutadas, entre ellas dos mujeres. A partir de abril, las emisoras de televisión pueden transmitir la preparación de los condenados. Un periodista incluso llegó a preguntar a uno de ellos cómo se sentía antes de ser colgado. LÍBANO - El 19 de mayo a las cinco de la madrugada tuvieron lugar dos ejecuciones públicas en la plaza central de Tabarja, al norte de Beirut, a las que al parecer asistieron unas mil quinientas personas, entre ellas decenas de activistas de derechos humanos que protestaban contra la pena de muerte. Según los informes, los cadáveres de los dos ejecutados permanecieron expuestos durante una hora. SINGAPUR - El 29 de mayo fueron ejecutados dos hombres condenados por asesinato en 1996. El presidente Ong Teng Cheong conmutó la pena de un joven de 19 años condenado con ellos, algo realmente extraño en Singapur, donde en los últimos 35 años sólo se han concedido otras cinco conmutaciones. En junio, Singapur amplió el carácter preceptivo de la pena de muerte al delito de tráfico de más de 250 gramos de metanfetamina cristalizada. Desde comienzos de 1998, AI ha registrado ocho ejecuciones, seis de ellas por tráfico de drogas. TRINIDAD Y TOBAGO - A fin de eliminar apelaciones de presos condenados a muerte ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, las autoridades de Trinidad y Tobago anunciaron a finales de mayo que el país se retiraba como Estado Parte de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. Trinidad y Tobago también se ha retirado del Primer Protocolo Facultativo del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y se ha acogido a un instrumento para reincorporarse a este protocolo con una reserva que impediría que el Comité de Derechos Humanos, creado en virtud del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, estudiara las peticiones presentadas por presos condenados a muerte o en su nombre. Esta y otras decisiones parecidas tomadas por Jamaica (véase Noticias sobre la pena de muerte de diciembre de 1997) a fin de acelerar las ejecuciones, representan importantes amenazas para el sistema internacional de protección de los derechos humanos. GUINEA ECUATORIAL - Quince hombres fueron condenados a muerte por un tribunal militar el 1 de junio en la capital del país, Malabo, tras ser declarados culpables en mayo de traición, terrorismo y posesión ilegal de explosivos. Los acusados afirmaron haber sido torturados para hacerlos confesar, pero, a pesar de que la mayoría de ellos mostraba señales de torturas, como pies y manos fracturados, el tribunal hizo caso omiso de sus denuncias. AI cree que el presidente Obiang Nguema ha suspendido las ejecuciones, pero teme que esta suspensión se levante en cualquier momento. REINO UNIDO - La Cámara de los Comunes (cámara baja del Parlamento), aprobó el 20 de mayo, por 294 votos a favor y 136 en contra, la incorporación a la legislación del país del Protocolo número 6 al convenio Europeo de Derechos Humanos sobre la abolición de la pena de muerte. Posteriormente, el gobierno anunció que ratificaría el protocolo. El Reino Unido es el único miembro de la Unión Europea que no ha ratificado el Protocolo número 6. TRATADOS INTERNACIONALES Nepal ratificó el Segundo Protocolo Facultativo del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos Page 5 of 6 el 4 de marzo de 1998, elevando a 32 el número de ratificaciones. Otros cuatro Estados han firmado el protocolo. Costa Rica ratificó el 26 de mayo de 1998 el Protocolo Relativo a la Abolición de la Pena de Muerte, de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, elevando a cinco el número de ratificaciones. Otros dos Estados han firmado el protocolo. ESTADÍSTICAS SOBRE LA PENA DE MUERTE Países abolicionistas y retencionistas (a 15 de junio de 1998) Abolicionistas para todos los delitos Abolicionistas para delitos comunes Abolicionistas de hecho Retencionistas Noticias sobre la pena de muerte, junio de 1998 Page 6 of 6 63 16 24 92