Seguro Nacional de Enfermedades Catastróficas: Cómo y por qué Articulación pública y privada para la cobertura de enfermedades catastróficas Los beneficios de esta propuestas explicadas por el doctor Federico Tobar PÁG. 2 Trabajo desarrollado por el doctor Jorge Colina de IDESA PÁG.4 OBSERVATORIO Año I Nº 2 Agosto de 2011 4 Pá g i n a s DE SALUD La respuesta institucional a la innovación tecnológica y las enfermedades catastróficas ¿Qué son las enfermedades catastróficas? ESTEBAN LIFSTCHITZ Director de Consultorios externos de la Clínica Santa Isabel y profesor de la Maestría en Sistemas y Servicios de Salud de la UBA-Fundación Sanatorio Guemes lrededor de 150 millones de personas en todo el mundo cada año sufren efectos catastróficos sobre sus economías domésticas por padecer, ellos o sus parientes, enfermedades que requieren tratamientos de alto costo. De ellos, alrededor de 100 millones caen bajo la línea de pobreza y el 90% de estos últimos viven en países en desarrollo . Es en función de ese impacto económico que se denomina enfermedades catastróficas a un conjunto de patologías que empobrecen a quienes las padecen. Aún cuando no hay una definición universalmente aceptada, las Enfermedades Catastróficas comparten algunas características, entre ellas, el impacto económico para quien la padece y su familia. Ke Xu las definió como aquellas cuyo tratamiento involucra un costo directo igual o superior al 40% del ingreso del hogar donde hay un paciente afectado . Esta definición fue luego copiada por la OMS. Otra característica de estas patologías es que generan severos daños en la salud de quien las padece. Se trata en general de enfermedades crónico-degenerativas o infectocontagiosas que se cronifican y son causantes de discapacidad y muerte. Por último, y a diferencia de la mayoría de las enfermedades, en las que la evolución habitual en el gasto generado por una persona presenta el fenómeno de regresión a la media, esto es que quien gasta más el primer año lo hará en menor proporción en el siguiente, en las enfermedades catastróficas la evolución se realiza en forma extremadamente lenta, denominándose este comportamiento “reversión lenta a la media” . Si bien muchas de estas enfermedades requieren procedimientos de alta complejidad para su diagnóstico y/o tratamiento, son los medicamentos un elemento crucial, tanto por su elevado costo individual en algunos casos como por la cronicidad de su requerimiento en muchos otros. Las enfermedades catastróficas no tienen alto impacto sobre la carga de enfermedad. Sin embargo, se pueden enunciar cuatro motivos para formular políticas específicas : 1) Garantizar el acceso a bienes y servicios esenciales puede no resultar suficiente para A Articulo escrito por el doctor Carlos Vassalo, consultor Economía y Gestión, PÁG. 3 CONSULTOR DE SALUD Socio de difusión de la OPS SÍGANOS EN: consultordesalud @consultornews reducir las brechas en la salud de la población, 2) Es conveniente generar un adecuado pool de riesgos para el aseguramiento y cobertura, porque las respuestas individuales resultan menos eficientes que las colectivas, 3) También hace falta garantizar una respuesta segura y adecuada en términos clínicos y 4) En tanto se integre como parte al derecho a la salud, la respuesta frente a las enfermedades catastróficas debe ser homogénea en calidad. Algunos estudios concluyen que alrededor de 150 millones de personas cada año sufren efectos catastróficos sobre sus economías domésticas por padecer, ellos o sus parientes, enfermedades que requieren tratamientos de alto costo. De ellos, alrededor de 100 millones caen bajo la línea de pobreza y el 90% de estos últimos viven en países en desarrollo. ¿QUÉ APRENDIMOS DE LA EXPERIENCIA INTERNACIONAL? Diversos países brindan respuestas al desafío de disminuir la brecha existente entre los que acceden y los que no al tratamiento oportuno en enfermedades catastróficas. Pero aún no se ha establecido un modelo que pueda definirse como altamente satisfactorio y cuente con una integralidad en la cobertura horizontal y vertical, siendo la primera que se cubran a las personas con una misma patología y la segunda que se cubran todas las enfermedades catastróficas y todos los gastos por ellas generados. Es difícil identificar el modelo de cobertura más extendido, pero sí se puede inferir que el cómo abordar la problemática resulta condicionado por el modelo de sistema sanitario implementado en el país: sistema público, de seguro social y de seguros privados. Dentro del grupo del grupo de países con un Sistema Público la principal fortaleza es la cobertura universal y la debilidad es la dificultad para la contención del gasto dado que es estado es el garante del financiamiento, donde se usa la lista de espera como un mecanismo de contención del mismo. Por su lado, en países con sistema de seguros sociales como Holanda, el sistema de salud está organizado en función del ingreso de las personas. Por un lado están los “fondos de enfermedad” que cubren a todos los ciudadanos quienes están por debajo de determinado umbral de ingresos, representa le 72% de la población. A quienes superan ese umbral los obliga a contratar un seguro privado, muchas veces ofrecidos por los mismos fondos. Complementario a los fondos descriptos toda la población está cubierta por un seguro universal que cubre determinados siniestros, dentro de los cuales se encuentran algunas EC, el Exceptional Medical Expenses Act (AWBZ) que se financia con impuestos generales y rentas al salario. El AWBZ cubre aquellas situaciones sobre las que el estado prefiere no delegar como algunas, long term care para la tercera edad, prácticas preventivas y APS y que representan el 40% del gasto en salud. Muchas EC que no son cubiertas por el AWBZ lo son por los seguros. En Colombia el Consejo Nacional de Seguridad Social en Salud (CNSSS) estableció en 2003 una política de atención integral de patologías de alto costo que incluyó 4 componentes: mecanismos de redistribución del riesgo, control de selección del riesgo, ajustes al modelo de atención y procedimientos de vigilancia epidemiológica En el marco de esta política, se ordenó una redistribución de afiliados (con patologías de VIH-SIDA o Insuficiencia Renal Crónica) entre aseguradoras por una única vez con el propósito de que cada Empresa Promotora de Salud (EPS) y Administradoras de Régimen Subsidiado (ARS) tuvieran un número proporcional de casos en función del numero total de afiliados, procurando homogenizar el nivel de riesgo entre aseguradores. A su vez, entre los países con sistemas denominados “mixtos”, Singapur presenta un modelo que se basa en el ahorro personal mediante cuentas, que difiere del resto de los países. Hasta 1984 sistema de salud fue similar al inglés. En la actualidad presenta un sistema de cuentas de ahorro, las personas son responsables de financiar su salud . Combina responsabilidad individual para gastos menores como consultas ambulatorias, tratamientos baja complejidad, con financiamiento por gastos de bolsillo, ahorro personal para gastos más costosos y un seguro catastrófico complementario. Se describen tres sistemas que combinan cuentas de ahorro personales, seguros y cuentas de ahorro colectivas: • Medisave: Para gastos elevados pero no alcanzan la enfermedades catastróficas. Integrado por cuentas de ahorro personal donde capitalizan ahorros para gastos persoContinuación en Página 2 C O N S U LT O R D E S A L U D O N L I N E : W W W. C O N S U LT O R D E S A L U D . C O M Pá g i n a 2 C O N S U LTO R D E SA L U D | N º 2 Seguro Nacional de Enfermedades Catastróficas: Cómo y por qué FEDERICO TOBAR Doctor en Ciencia Política. Master en Administración Pública. Lic en Sociología y economista de la salud. Consultor internacional en Políticas de Salud. a propuesta es construir un Seguro Nacional de Enfermedades Catastróficas (SENEC) con la misión de consolidar el derecho universal a los cuidados adecuados frente a las enfermedades catastróficas. Todas y todos los argentinos que padezcan estas enfermedades recibirán la asistencia y tratamiento acordes al estadio de la misma, de forma independiente a su nivel de ingreso y lugar de residencia. Para alcanzar su misión el seguro dispone de autonomía, de fondos estables y administra riesgos. ¿Por qué un SEGURO? Un seguro es un mecanismo que permite reducir incertidumbres transfiriendo el riesgo de ocurrencia de un hecho fortuito (siniestro) a un tercero que por ello recibe un pago adelantado. La sostenibilidad del seguro tiene como requisito el reunir un conjunto de asegurados cuyos riesgos individuales se consolidan en un conjunto o pool de riesgo. Cuanto más grande el pool de riesgo más sostenible, es decir más “seguro” resulta el seguro. A mayor población cubierta, menor incidencia y mayor costo de las prestaciones involucradas, mejor resultará el funcionamiento de los seguros de salud como mecanismos de protección social frente a la adversidad económica que generan los eventos de enfermedad. Por ejemplo, como muestra Gabriela Hamilton, tratar a un paciente con Enfermedad de Gaucher puede costar hoy más de U$s 400 mil al año. Este valor resulta fatal si lo debe enfrentar el paciente o su grupo familiar. El costo del tratamiento también desequilibraría las finanzas de una obra social o prepaga pequeña. Pero repartido entre 40 millones de habitantes, el impacto sería mínimo y además, el monto se podría reducir a menos de la mitad utilizando recursos como protocolos de atención y compras centralizadas por licitación. L C M Y K OBSERVATORIO DE SALUD PUBLICACION DIRIGIDA A LOS PROFESIONALES DEL EQUIPO DE SALUD COORDINACIÓN GENERAL: Dr. Federico Tobar Doctor en Ciencia Política. Master en Administración Pública. Lic en Sociología y economista de la salud. Consultor internacional en Políticas de Salud. ¿Cómo se organiza el Seguro Nacional de Enfermedades Catastróficas? El SENEC se constituiría como un Ente Público No Estatal, administrado de forma autárquica por una estructura profesional estable y presidido por una Junta integrada por siete miembros: Un representante del Ministerio de Salud de la Nación (quien la preside), Un representante del Consejo Federal de Salud, un representante de las Obras Sociales Nacionales, un representante de las Obras Sociales Provinciales, un representante de las Empresas de Medicina Prepaga, un representante de los Prestadores privados y un representante de los Usuarios. Los miembros de la Junta directiva serán nombrados por el Congreso Nacional, su mandato será de cuatro años y no se corresponderá íntegramente con los mandatos de la presidencia del Poder Ejecutivo Nacional. ¿Cómo se financia? El Seguro conformará un fondo fiduciario integrado por aportes sobre una base capitada homogénea proveniente de diferentes fuentes: a) Tesoro Nacional, para sustentar la cobertura de los beneficiarios cautivos del subsector público, b) Obras Sociales Nacionales (incluyendo el INSJJP), que será debitada del Fondo de Redistribución y del actual presupuesto de la APE, c) aportes de los tesoros provinciales para brindar cobertura a los beneficiarios de las OSP, d) aportes de las empresas de medicina prepaga, sobre la base de su nómina de beneficiarios. Esto permitirá generar un padrón único de beneficiarios de salud que identificará quién es el financiador de cada ciudadana y ciudadano argentino. CUADRO 1 ¿CÓMO ADMINISTRA LOS RIESGOS EL SEGURO NACIONAL DE ENFERMEDADES CATASTRÓFICAS? Hay cinco hipótesis de intervención que permitirán al seguro lograr una respuesta adecuada: Viene de Tapa nales y familiares y de alli paga el beneficiario las prestaciones Capitalizan del 6-8% de las ganancias personales, compartido entre empleado y empleador. La consulta médica es pago de bolsillo. El 85% de los gastos en hospitales provienen de esa fuente. • Medishield: Para catastróficas. Es un seguro con deducibles altos, copagos y límites para reducir el moral hazard. Los aportantes al Medisave quedan automáticamente afiliados excepto que pidan ser eximidos. Hay una prima que se deduce de la cuenta de Medisave y las prestaciones son por reembolso (mayores para los más pobres y a mayor complejidad del tratamiento) • Medifund: Para los que no logran acumular suficiente dinero y no acceden al ************************************************************* www.consultordesalud.com [email protected] Fase Enfermedades a ser cubiertas I II III 1. Fibrosis Quística, 2. Enfermedad de Gaucher, 3. Enfermedad de Fabry, 4. Enfermedad de Pompe, 5. Enfermedad de Crohn, 6. Tratamiento con Hormona de Crecimiento, 7. Insuficiencia Renal Crónica, 8. Transplante y tratamiento Inmunosupresor post trasplante A las anteriores se agregan: 9. HIV/SIDA 10. Hemofilia A las anteriores se agregan: 11. Esclerosis Múltiple 12. Mieloma Múltiple 13. Tumores del Sistema Nervioso Central 14. Hepatitis C 15. Leucemias y GIST 16. Cáncer de mama 17. Cáncer de Riñón 18. Cáncer Colo-Rectal Medishield. Es un fondo financiado por el Estado para pagar los gastos de hospitalización de los que no pueden pagar. Se analiza caso por caso y acceden a servicios de menor confort pero de igual calidad de prestación. El cuadro 1 muestra el tipo de cobertura en EC de acuerdo al sistema de salud imperante en cada país. REFERENCIAS i Xu, K; Evans, D; Carrin, G; AguilarRivera, A.M; Musgrove, P & Evans, T (2007).” Protecting Hosuseholds From Catastrophic Health Spending”. Health Affairs 26 Nº 4: 972-983 ii Cf. K.Xu et.al.(2003) ”Household Catastrophic Health Expenditure: A Multicountry Analysis” Lancet 362 nº 9378: 111-117 iii Beebe J (1988). "Medicare Reimbursement and Regression to the Mean". Health Care Financing Review 9, pp 9-22. iv Xu, K; Evans, D; Carrin, G; AguilarRivera, A.M; Musgrove, P & Evans, T (2007).” Protecting Hosuseholds From Catastrophic Health Spending”. Health Affairs 26 Nº 4: 972-983 v Toro W. Marco contextual: la enfermedades ruinosas o catastróficas-ERCen el régimen contributivo del sistema de salud revisado el 7 de enero de 2010 en http://www.eumed.net/tesis/wrtj/03.pdf vi Colina J. Propuesta para un sistema de cobertura de enfermedades catastróficas en Argentina. Fundación MAPFRE. Madrid.2004 CUADRO 1 EDICIÓN: Editado en Buenos Aires, República Argentina por Equipos Argentinos de Salud S.A. Las notas firmadas y lo expresado por los entrevistados y/o instituciones no necesariamente reflejan la opinión del medio. La reproducción total o parcial de los artículos está permitida, sólo con la autorización expresa, con excepción de los medios de prensa, siempre que se cite la fuente. Caso contrario, Equipos Argentinos de Salud S.A. se reserva el derecho de accionar legalmente. Impreso en Argentina. Listado de enfermedades catastrófica seleccionadas según etapa de implementación de la política 1) Generando Economías de escala: El seguro se constituirá en el único comprador (monopsonio) de un conjunto de prestaciones de servicios, pero fundamentalmente de bienes tecnológicos. Las tres cuartas partes de los gastos catastróficos son en medicamentos (en su mayoría biotecnológicos). Las compras se realizarán por Licitación Pública esto permitirá obtener importantes economías sobre los gastos actuales 2) Protocolizando tratamientos. Entre los mayores desafíos actuales para la salud pública se destaca el control de la variabilidad en la práctica clínica. Esta involucra la posibilidad de que se brinden diferentes tratamientos para un mismo problema de salud y se asocia potencialmente a dos riesgos: la sub-prestación y la sobreprestación. Ambas pueden generar complicaciones y encarecer el tratamiento. Por tal motivo, el seguro partirá de estandarizar el manejo de estas enfermedades, normatizando su diagnóstico y tratamiento. Cabe destacar que no se trata de un problema exclusivo de las enfermedades catastróficas, pero por el costo que involucra la atención de estas, las consecuencias económicas de la variabilidad de la práctica clínica, así como de la demanda inducida por los prestadores, son mucho mayores. Por eso el Seguro dispondrá de una comisión de efectividad clínica que evaluará la inclusión de tecnologías y diseñará y validará protocolos de atención a partir de la medicina basada en la evidencia. El propósito es desplegar líneas de cuidados como una función de producción para cada una de las enfermedades catastróficas incorporadas incluyendo criterios para la utilización de determinado medicamento y/o tecnología. Estas recomendaciones deberán tener carácter normativo y en caso de ser Continuación en Página 3 Tipos de cobertura para Enfermedades catastróficas según organización del sistema de salud de acuerdo a la fuente de financiamiento en países seleccionados Organización del sistema Países Sistema Publico Gran BretañaCanadá Alemania Holanda Colombia EEUU países del sudeste asiático Países desarrollados Chile Seguros Sociales Seguros privados Sistemas mixtos Fuente: Elaboración propia Característica Cobertura Universal y financiamiento estatal No discriminación positiva para Enfermedades Catastróficas. Tendencia a crear seguros sociales separados de cobertura universal y financiados por impuestos sobre el salario y aportes estatales especiales. Creación de seguros especiales de naturaleza privada. Diferentes modelos que van desde seguros publico complementarios a Seguros privado voluntarios complementarios a la cobertura. C O N S U LTO R D E SA L U D | N º 2 Pá g i n a 3 Viene de Página 2 requerido, se evaluará individualmente el caso para determinar la necesidad de un tratamiento no contemplado inicialmente. Además, la estandarización de tratamientos redundará en una disminución de los requerimientos de cobertura por vía judicial. 3) Acreditando prestadores: Para programar y controlar la implementación de líneas de cuidados el seguro dispondrá de tres instrumentos centrales: a) un Padrón Único de de Beneficiarios, b) Protocolos de atención detallados para cada patología; y a estos se agrega un esquema de acreditación de servicios racional y adecuado a las necesidades de la población objetivo. Por lo tanto, las prestaciones médicas, así como la dispensación de medicamentos serán brindadas desde centros acreditados. Como consecuencia de este conjunto de medidas complementarias se lograrían tres conquistas relevantes para la respuesta social frente a enfermedades catastróficas. En primer lugar, se incorporarían herramientas para controlar el gasto. En segundo lugar, se incorporarían herramientas para controlar la variabilidad de la práctica clínica. En tercer lugar, como consecuencia de las anteriores, la población cubierta tendría acceso igualitario a prestaciones de calidad y efectividad homogénea y controlada. 4) Gradualidad. El seguro expandirá la cobertura vertical de forma progresiva buscando incorporar protecciones pero al mismo tiempo controlar los costos como para garantizar la sostenibilidad financiera. A medida que la cobertura vertical se expande, las prestaciones involucradas serán excluidas del Programa Médico Obligatorio (PMO), puesto que se habrá conquistado la implantación de líneas de cuidados homogéneos y universales a través del seguro. Se prevé la incorporación escalonada de las patologías cubiertas para privilegiar la gobernanza del seguro y cuidar su solvencia. Extensión de cobertura vertical: La propuesta consiste en avanzar en tres fases sucesivas de extensión de cobertura, cada una de las cuales requerirá, idealmente un año de operación del seguro (cuadro 1) Extensión horizontal de cobertura: Para que el seguro genere derechos, brinde respuestas adecuadas y mejore la equidad es imprescindible no desistir de la universalidad. Sin embargo, la viabilidad de obtener la financiación no es aún similar en todos los casos. Se pueden distinguir tres situaciones claramente diferenciadas. I. Beneficiarios de OSN. Para cuya cobertura la financiación está prácticamente garantizada a través del Fondo Solidario de Redistribución. Respetando el otorgamiento del Subsidio Automático N ominal restan recursos suficientes como para que el elenco de las 18 patologías definidas resulten asegurados. Es decir, los fondos ya disponibles resultarían suficientes como para que las patologías catastróficas seleccionadas resulten garantizadas de forma homogénea a toda la población beneficiaria de las OSN de forma inmediata. II. Beneficiarios de OSP y prepagas. En este caso, las entidades aseguradoras aportarían una mensualidad capitada al SENEC. El costo de la cápita resulta inversamente proporcional al tamaño de la población asegurada. De modo que aunque se podría plantear la posibilidad de avanzar progresivametne por las fases mencionadas, también es relativamente viable cubrir a las 18 patologías de entrada. III. Beneficiarios exclusivos del sector público. En el caso de la población sin cobertura de seguro de salud la totalidad del costo capitado debería ser aportado por el Tesoro Nacional. Esto involucraría un costo adicional de alrededor de 500 millones de pesos anuales para la fase I, $1200 millones de pesos anuales para la fase II y alrededor de $2.300 anuales para la fase III. La respuesta institucional a la innovación tecnológica y las enfermedades catastróficas CARLOS VASSALLO Consultor Economía y Gestión de la Salud as innovaciones no se detienen y estamos en pleno desarrollo de la medicina predictiva en la que se diagnostican factores (genéticos) de riesgo pasivo y se buscan tratamientos personalizados. Vamos hacia una medicina personalizada, donde se podrá conocer en forma anticipada cual es el tratamiento con mejores resultados para el paciente. Por el ejemplo en el caso de un medicamento denominado Trastuzumab es un agente oncológico eficaz para el grupo de pacientes que tienen la proteína HER2 sobreexpresada. Cada tratamiento comienza a estar vinculado con un biomarcador clínico. Diagnóstico y tratamiento diluyen sus fronteras y puede ser una fuente de rentabilidad muy grande si logra generalizar el uso a grandes segmentos de la población a un precio rentable. El abordaje del problema no puede ser por un solo lugar sino que debe plantearse tanto desde la oferta como desde la demanda. En primer lugar no todas las innovaciones constituyen un adelanto, ni mejoras en la salud, calidad o esperanza de vida. El costo efectividad aceptado por la comunidad académica, no es considerado en nuestro país para decidir el financiamiento o no de determinada práctica. El accionar de los pacientes organizados en asociaciones (en algunos casos financiadas por los mismos laboratorios), los medios de comunicación, los profesionales prescriptores y los magistrados constituyen agentes potenciadores de algunas tecnologías que no han demostrado costo efectividad. Tenemos que convivir con la idea que será difícil sino imposible ignorar las dificultades técnicas de la evaluación de tecnologías, no podemos evaluar todo dado que no tendremos evidencia que pueda soportar cada decisión clínica La dinámica del cambio tecnológico es mayor que la de los estudios de evaluación. Por el lado de la demanda surge la necesidad de establecer un paquete de prioridades y coberturas así como la sistematización de los pasos y tratamientos que implica cada programa. La definición de guías clínicas y protocolos no puede ser dejada de lado si se quiere introducir equidad en las prestaciones financiadas en forma solidaria. Si no logramos normatizar estas cuestiones básicas, terminará sucediendo la historia de siempre que las relaciones, amiguismo y clientelismo se impondrán a lo que debería ser criterios objetivos de cobertura de salud. El riesgo de las organizaciones aseguradoras (obras sociales y prepagas) surge en la medida que el costo medio por asegurado se dispara como consecuencia de la ocurrencia de enfermedades costosas. En Argentina el mecanismo utilizado por el sistema de obras sociales nacionales (sindicales y empresariales) fue la creación de la Administración de Prestaciones Especiales. Surgida durante los años noventa vino a intentar reducir los incentivos a la selección de riesgo y al mismo tiempo cubrir en forma equitativa las prestaciones más caras y más complejas que comienzan aparecer en el mercado. La demanda sobre la APE fue en aumento y desnudo sus problemas de transparencia y capacidad técnica para dar respuestas. L Una de las razones que justifico su creación fue la presencia de casos catastróficos o de alto riesgo a interior de los asegurados. La creciente judicialización de la salud a partir de la reforma constitucional de 1994 que fue una puerta abierta al reclamo sumado a la indefinición de las garantías y la regulación del derecho a la salud. En efecto, es posible encontrar una gran cantidad de patologías catastróficas asociadas a los mayores riesgos en salud, que aparentemente exhiben una condición de aleatoriedad respecto a las características de sexo y edad de quienes las padecen. Está aceptado por los operadores que participan del sector salud que para las prestaciones mencionadas en el cuadro 1 requieren un tratamiento especial, es necesario buscar mecanismos nuevos para poder financiar y cubrirlas pero para ello es necesario plantearse la concreción de algunas instituciones hoy ausentes en el sistema de salud: • armado de guías clínicas y protocolos; • costeo de las prestaciones considerando precios de referencia; • acreditación de los centros donde se realizan las intervenciones correspondientes; • utilización del mecanismo de negociación centralizada por parte de la nueva institución reaseguradora que pueda utilizar el poder que brinda la capacidad de compra pero además explorar y avanzar en mecanismos de riesgo compartido en los casos donde las innovaciones todavía no han acreditado la relación costo efectividad exigida. • creación de una instancia de evaluación de tecnologías que en un primer momento brinde elementos de juicio a todos los actores que participan del sistema (profesionales, jueces, financiadores, pacientes, medios de comunicación y reguladores); Finalmente me animo a decir que en muchos casos es más conveniente comenzar algo nuevo que intentar reciclar algunas organizaciones que cargan con un fuerte desprestigio y lo digo respecto a la Administración de Prestaciones Especiales que sin dudas tuvo la virtud de adelantarse al problema pero que tuvo claros errores de instrumentación, de falta de transparencia y turbulencia que en nada favorecen un proceso que debe iniciarse. El establecimiento de prioridades en los sistemas de salud es un proceso eminentemente político que debe ser guiado por objetivos socialmente consensuados y realizarse en forma explícita para garantizar la legitimidad del racionamiento en el contexto en el cual se aplica. Prestaciones de Alto Costo y Baja Incidencia TRANSPLANTES MEDICAMENTOS (Hepático, hepato-renal, medula osea, renal, cardíaco, cardiopulmonar, pulmonar, óseo, páncreas e intestino) (Módulos de tratamiento para HIV / SIDA adultos y pediátricos; Medicamentos para enfermedades de baja incidencia y alto costo; Drogas inmunosupresoras Post-trasplante; Enfermedad fibroquística del páncreas; Enfermedad de Gaucher; Insuficiencia hipofisiaria; Hemofilia; Fenilcetonuria; Esclerosis múltiple y lateral amiotrófica; Neutropenias severas; Infecciones por estafilococos meticilinoresistentes; Fibrinolíticos; Eritropoyetina ALTA COMPLEJIDAD (Ablación por radiofrecuencia, Cirugía articular compleja de miembro sup. y/o inf.; Microcirugía de reimplante de miembros; Cirugía vásculo renal; Cirugía compleja de la columna vertebral ; Implante de cardiodesfibrilador; Injerto oseo ; Hemodiálisis con riñón artificial; Neurocirugía de alta complejidad; Cirugía estereoatáxica incl. Radioneurocirugía; Implante coclear; Tratamiento de grandes quemados; Internación neonatológica de AC con asist. Resp.; Litotricia extracorpórea renal y/o ureteral; Ureterorenoscopía con litotomía/litotricia y ectomía por cualquier método; Colocación de stent uretral ; Terapia radiante; Operaciones en el aparato de la visión (Laser) ; Cirugía digestiva compleja; Vías biliares - Derivaciones portosistémicas; Duodenopancreatectomía; Esplenopancreatectomía ; Colocación de prótesis esofágicas; Colocación de stent endobronquial; Enfermedades crónicas de largo tratamiento y alto costo; Cirugía cardiovascular central de adultos y pediátrica. ; Cirugía vascular periférica mayor ACCESORIOS TERAPÉUTICOS (Prótesis de cadera - Prótesis de rodilla; Estabilizadores de columna Válvulas hidrocefálicas; Sistemas de derivación ventricular extracraneal; Stent uretral (esfinter urinario externo); Prótesis coclear (electroestimulador auditivo); Equipo de respiración externa presión positiva negativa; Stent coronario o periférico; Material descartable cirugía cardiovascular c/bomba de circulación extracorpórea; Prótesis valvulares mecánicas y/o biológicas; Parches bioprotésicos y dispositivos oclusores mayores y menores; Endoprótesis arteriales - Prótesis vasculares; Filtros venosos; Cardiodesfibrilador implantable; Marcapaso cardíaco; Materiales descartables para hemodiálisis Pá g i n a 4 C O N S U LTO R D E SA L U D | N º 2 Articulación pública y privada para la cobertura de enfermedades catastróficas gestión, cuando no hay controles. LA ARTICULACIÓN DEL ESTADO CON EL SECTOR PRIVADO Alternativamente, existe la posibilidad de que el Estado detente su rol indelegable de normatización y control, pero delegue en entidades privadas especializadas en gestión de riesgos catastróficos la administración de los recursos y la provisión de las prestaciones médicas. De esta forma, los grandes financiadores existentes (grandes obras sociales y empresas de medicina prepaga de mayor envergadura), asociados con compañías de seguro del ramo vida y coberturas catastróficas, podrían erigirse en reaseguradores del conjunto de las carteras más chicas (obras sociales medianas y pequeñas, empresas de medicina prepaga pequeñas, mutuales, cooperativas, etc) para atender financiera y prestacionalmente a los pacientes con enfermedades catastróficas. El sistema ganaría en sustentabilidad porque al formarse grandes carteras se generan los beneficios de la economía de escala; y ganaría en menos corrupción al dar libertad a las carteras medianas y pequeñas para elegir su administradora de riesgos catastróficos. C M Y K JORGE COLINA (IDESA) L as enfermedades catastróficas son aquellas cuyo costo para su atención es tan elevado que no es posible financiarlas con los seguros convencionales (obras sociales y empresas de medicina prepaga), sin poner al sistema en riesgo de quiebra por acumulación de estos casos. Por eso, en los países avanzados estas enfermedades se atienden con esquemas especiales ya sea de reaseguros y/o de seguros universales. En esta línea incluso se inscriben Uruguay (con el Fondo Nacional de Recursos) y Chile (con el sistema de Cobertura Adicional para Enfermedades Catastróficas). En cualquier caso, lo que se busca es agrandar el colectivo de personas cubiertas para lograr sustentabilidad financiera. En Argentina no hay un sistema especial de cobertura para estas enfermedades. Se apela rudimentariamente a forzar con medidas legales y judiciales a las obras sociales y medicina prepaga a financiarlos. En esta línea se inscriben los innumerables proyectos de ley incrementado las prestaciones del PMO, los amparos judiciales y, más recientemente, la regulación de las prepagas. Pero como los seguros convencionales no son actuarialmente aptos para soportar financieramente estas enfermedades, el abuso de medidas legales, sin soporte financiero, va a terminar haciendo colapsar la seguridad social y el sistema privado. Ante este panorama, no avanzar hacia un sistema especial va a implicar, tarde o temprano, el desamparo de muchas personas con estas enfermedades. Por eso, es importante pensar un sistema especial de enfermedades catastróficas. ¿CÓMO ORGANIZAR UN SISTEMA ESPECIAL? LA MODALIDAD PÚBLICA No hay una sola receta, son muchas las formas. Básicamente hay que definir un listado de las enfermedades que se considerarán catastróficas; reglas de acceso y alcance de la cobertura; guías clínicas y protocolos de tratamiento; fuentes de financiamiento; y la modalidad de gestión. En esta modalidad, el Estado concentra todos los recursos y se erige en un único comprador de medicamentos y servicios médicos especializados. La ventaja es el enorme poder de compra que se deposita en un ente estatal, lo que le permitiría conseguir importantes descuentos. La desventaja es que este gran poder de compra fácilmente puede trasmutar en un descomunal mecanismo de corrupción. La posibilidad de manejar grandes sumas de dineros públicos, con amplios grados de libertad en la elección de proveedores, marcas, precios, calidad, etc, es un campo muy propicio para la corruptela; el atractivo opera sobre el funcionario público que tiene la decisión de elegir, y sobre los proveedores que tienen la posibilidad de “coimear” para ser elegidos. No se pasa por alto que hay herramientas administrativas para evitar o reducir la corrupción, como las licitaciones públicas; la publicación de listados de proveedores, marcas, precios, volúmenes; la difusión de estados contables auditados y analizados por firmas de prestigio internacional; los controles estatales; etc. Pero la experiencia indica que en Argentina estos mecanismos son inexistentes, y cuando existen no funcionan. Sin institucionalidad de control, un monopolio estatal con discrecionalidad para comprar centralizadamente genera una atracción irresistible a la corrupción. De hecho, la APE constituye un arquetipo de falta de transparencia y desvíos de fondos que generan la modalidad pública de En cualquier caso, la presencia del Estado es central. Lo que puede tener matices es su rol: se puede optar por una modalidad pública o un modelo de articulación público-privado. En ambos casos el objetivo es el mismo, lo único que cambiaría es el rol del sector público y el sector privado. ¿Cuáles serían las potencialidades y debilidades de cada alternativa? Obviamente que el buen funcionamiento de un esquema de reaseguro también depende de la calidad con la que el Estado diseñe las normas y controle los desvíos. Pero eximiéndolo de que opere como “comprador”, puede ayudar a que se fortalezca como buen regulador y buen controlador. CONCLUSIÓN Cualquiera sea el sistema, lo imprescindible es fortalecer al Estado en su capacidad de regulación y control. Luego, se puede elegir la alternativa, pudiendo actuar además como comprador o se delega la gestión de los riesgos catastróficos en el sector privado especializado. La experiencia de baja calidad y poca transparencia en la gestión del sector público en Argentina genera dudas de que la centralización estatal sea el mejor camino. Delegando la gestión de riesgos en agentes privados especializados podría ser un camino factible para lograr que el Estado se fortalezca en su rol de regulador y controlador, y que el sistema especial de cobertura catastrófica opere con razonables niveles de calidad y sustentabilidad apoyado en el sector privado.