11 Polaris Órgano de divulgación de la Sociedad Astronómica La Nueva Era de los Telescopios Gigantes Dentro de los próximos cinco años los astrónomos contarán con, al menos, una docena de nuevos telescopios de más de 8m de diámetro. Acompáñenos en un recorrido de los nuevos ojos de la Tierra Cuando se trata de construir telescopios grandes, los astrónomos no ahorran esfuerzos ni dinero. Y no es para menos: el poder de detectar estrellas débiles o pequeñas variaciones y detalles en el espectro de luz que ellas emiten depende, en principal medida, de la superficie colectora del espejo primario. En iguales condiciones, un telescopio de 4m de diámetro puede detectar objetos 16 veces más débiles que uno de 1m. El final del siglo 20 anticipa una febril inauguración de telescopios verdaderamente gigantes: TELESCOPIOS DINOSAURIOS En 1998 se conmemoró el cincuentenario del que, por casi 30 años, fue rey: el legendario telescopio de Monte Palomar. Su objetivo de 5m permitió descubrir la expansión del Universo y revelar la increíble riqueza del mundo de las galaxias. A pesar de que el crecimiento de la ciudad de Los Ángeles lo sumergió en un mar de luz urbana irremediable, el viejo telescopio continúa alerta gracias a aportes privados. En sugestiva coincidencia con este aniversario, dos nuevos telescopios gigantes vieron por primera vez la luz en ese año. El mayor, por ahora, es el Hobby-Eberly, un coloso con un espejo de 9,2m de diámetro efectivo, inaugurado oficialmente en octubre de 1997 y que se emplaza en el Observatorio McDonald de la Universidad de Texas. El poder de estos telescopios reside en su capacidad para resolver detalles y, en particular, en la posibilidad de observar objetos extremadamente débiles El principal factor que limita el poder de resolución de un telescopio es la turbulencia atmosférica que hace "bailar" la imagen estelar frente a la cámara, la distorsiona y evita que el astrónomo pueda, por ejemplo, observar dos estrellas muy juntas en el cielo. Los nuevos telescopios incorporan una nueva tecnología, conocida como óptica adaptiva", que permite subsanar en buena medida este inconveniente. La técnica consiste en monitorear continuamente el baile de la imagen estelar y aplicar sutiles tensiones al espejo para tratar de conseguir permanentemente el mejor foco posible (algo así como un fruncir de ojos). Se espera que, gracias a esta tecnología, el poder resolvente alcance la décima de segundo Polaris Órgano de divulgación de la Sociedad Astronómica de arco. Esto equivale a poder ver desde Buenos Aires una pelota de fútbol colocada en Mar del Plata. El espejo hexagonal del telescopio Hobby-Eberly de 11m colocado en el armazón del telescopio. El espejo es toda una hazaña tecnológica: consta de 91 espejos hexagonales pulidos individualmente conforme a su correcta curvatura y ensamblados de modo que componen un espejo de 11m de diámetro. Esto lo convertiría en el mayor telescopio del mundo, excepto que no toda la superficie puede utilizarse a un tiempo. Tal circunstancia reduce su diámetro efectivo a poco más de 9m, lo que lo baja al tercer puesto del ránking, detrás de los telescopios Keck, en Hawaii. De cualquier manera, el espejo es tan grande que podría acomodar fácilmente un departamento de tres dormitorios. Otra peculiaridad es que el telescopio, debido a su enorme tamaño, no se desplaza para seguir a las estrellas en su movimiento diurno, sino que un espejo secundario ejecuta ese movimiento, llevando la luz hacia los detectores. Este ingenioso mecanismo hace que el telescopio deba ser movido una sola vez, para ubicar inicialmente el objeto observado. Los ingenieros del HET lograron la primera observación de una estrella en diciembre del año pasado y, actualmente, lo están poniendo a punto para su utilización científica. Su precio es de sólo 13 millones de dólares, cifra relativamente baja para semejante diámetro. En el hemisferio austral, la región central de Chile ofrece, quizás, una de las mejores terrazas para contemplar el Universo. Desde allí funciona, hace años, el Observatorio Europeo Austral integrado por un consorcio de universidades del viejo continente. Su más reciente emprendimiento es la construcción de un telescopio literalmente bautizado como "muy grande" (Very Large Telescope o VLT). El telescopio, en realidad, consta de otros cuatro de 8m de apertura cada uno. Estos podrán operar el unísono, si se lo desea, y mediante una computadora. Una imagen estelar obtenida por los cuatro al mismo tiempo y combinada será equivalente a la que obtendría un telescopio con un espejo de 16m de apertura. Aunque, cuando se trata de ver quién posee el telescopio más grande, algunos afirman que en realidad no es uno sino cuatro "pequeños", su capacidad para detectar objetos débiles está fuera de toda discusión. Según se anuncia en el momento de escribir esta nota, la "primera luz" de la primera unidad habrá ocurrido el 27 de mayo. Polaris Órgano de divulgación de la Sociedad Astronómica La familia de telescopios de más de 8m Telescopio Ubicación Apertura (m) Keck I Keck II Mauna Kea, Hawaii Id. 10,0 10,0 Hobby-Eberly Texas, EE.UU. 9,2 Subaru Mauna Kea, Hawaii 8,3 Mediados de 1998 VLT # 1 VLT # 2 VLT # 3 VLT # 4 Paranal, Chile Id. Id. Id. 8,0 8,0 8,0 8,0/16,0* Mayo, 1993 Marzo, 1999 Diciembre, 1999 Julio, 2000 Géminis Norte Géminis Sur Mauna Kea, HawaiiCo. Pachón, Chile 8,1 8,1 Mt. Graham Internacional LBT Mt. Graham, Arizona 8,4/11,2* Roque de los Muchachos GTC Islas Canarias 10,0 Observatorio Keck McDonald Astron. Nacional de Japon Europeo Austral Géminis Primera Luz Mayo, 1993 Octubre, 1996 Octubre, 1997 Diciembre, 1998 Septiembre, 2000 Mediados 2002 Fines del 2002 Lo fundamental es que los nuevos instrumentos podrán detectar estrellas y galaxias cientos de millones de veces más débiles que las estrellas más tenues visibles a simple vista. En general, los instrumentos serán empleados para obtener imágenes y espectros de objetos celestes, tanto en luz visible como infrarroja. ¿Qué nuevos descubrimientos podemos esperar de estos "dinosaurios ópticos?” Sin duda, gran cantidad de tiempo se concentrará en el vasto reino de las galaxias, sobre todo, las más lejanas que, gracias a la velocidad finita de la luz, nos retrotraen al principio del tiempo y del espacio. El 2 de mayo se anunció, precisamente, el descubrimiento de la galaxia más lejana conocida desde el Observatorio Keck. A una distancia de 12.300 millones de años luz, se ubicaría a apenas 700 millones de años del momento en que los astrónomos estiman que ocurrió el Big Bang, la gran explosión que originó todo. Calendario de inicio de operación de algunos grandes observatorios (desde 1994 hasta el 2004) Polaris Órgano de divulgación de la Sociedad Astronómica Una pregunta de grandes implicancias filosóficas, que los telescopios grandes podrían contribuir a responder, es si vivimos en un universo cerrado o abierto. Es decir, si la fuerza de gravedad detendrá o no la expansión del universo iniciada hace unos 13 mil millones de años. Para ello, es necesario contabilizar la materia total en el universo. Sabemos que hay galaxias y objetos en extremo pequeños y muy difíciles de detectar a través de las fabulosas distancias intergalácticas: galaxias azules o de bajo brillo superficial, planetas y débiles estrellas en los extensos halos de galaxias comunes, e incluso de nuestra propia galaxia. Los mapas del universo que generen estos instrumentos, probablemente, mostrarán su estructura y riqueza en gran escala con mayor fidelidad que lo conseguido hasta el presente. Información de http://www.ciencia-hoy.retina.ar/hoy46/tele01.htm