PROPUESTA DE TRABAJO PARA LA ARMONIZACIÓN DE DELITOS DE CORRUPCION DE FUNCIONARIOS, SERVIDORES O AGENTES PÚBLICOS, EXTRANJEROS PROPUESTA DE TRABAJO PARA LA ARMONIZACIÓN DE DELITOS DE CORRUPCION DE FUNCIONARIOS, SERVIDORES O AGENTES PÚBLICOS, EXTRANJEROS El grupo de trabajo de Lucha contra la Delincuencia Organizada de la Conferencia de Ministros de Justicia de los Países Iberoamericanos ha venido desarrollando esta línea, en consecuencia con el mandato emanado de la XVII Reunión Plenaria de la COMJIB, en octubre de 2010 en México. De tal forma que, se ha debatido el tema de la armonización de varios delitos, específicamente, el de la corrupción de funcionarios públicos, siendo que en este tema se han hecho las siguientes reflexiones: I.- La general preocupación internacional por tratar de erradicar la corrupción –la venalidad y el soborno- como fenómeno con evidente capacidad de alteración de la estabilidad de las sociedades (democráticas), se ha plasmado en diversos pactos y convenciones de alcance multilateral o general, encontrando su máxima expresión en la Convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción (2003), precedida por la Convención Interamericana contra la Corrupción, suscrita en el ámbito de la OEA (hecho en Caracas el 29 de marzo de 1996). II.- La previsión de ilícitos penales para la prevención y sanción de la corrupción se remonta al mismo origen de los Estados liberales y, por ello, a los propios Códigos Penales, mediante la tipificación del soborno activo y pasivo de funcionarios, servidores o agentes públicos (delitos de cohecho; más recientemente, y como adelantamiento de las barreras de protección penal, delitos de tráfico de influencias). Se trataba así de prevenir y castigar los ataques a la propia función pública (principios de objetividad, imparcialidad, eficiencia) derivados de la posible venalidad de los funcionarios, quedando en un segundo plano la pretensión, hoy explícitamente asumida como coprincipal, de evitar el enriquecimiento ilícito de los funcionarios. III.- Más moderna es la preocupación por el alcance transnacional de determinadas conductas de corrupción, relacionadas con el comercio internacional: en el marco de una economía cada día más globalizada en la que los Estados también interactúan como protagonistas del mercado, se ha advertido la generalización del soborno de funcionarios extranjeros orientada a obtener ventajas en las transacciones exteriores (inversiones en mercados extranjeros por medio de licitaciones públicas, etc.); por eso los Estados desarrollados promovieron, junto a otras iniciativas, la específica tipificación de esas prácticas corruptas en los Códigos Penales, singularmente mediante la promoción de Convenios internacionales. IV.- Sin embargo, asumida una política criminal común frente al fenómeno de la corrupción, resulta evidente la existencia de lagunas o déficits de incriminación y/o de perseguibilidad en los casos de persecución y enjuiciamiento de conductas, cada vez más concurrentes, de soborno o tráfico de influencias, consumadas por y/o respecto de funcionarios, servidores o agentes, públicos que, con funciones ajenas a las llamadas 1 “transacciones comerciales internacionales”, se encuentran destinados en terceros países. Porque junto a la creciente presencia de residentes extranjeros en un país, resulta cada vez más común el desplazamiento coyuntural, temporal o más o menos duradero de funcionarios extranjeros con misiones específicas ajenas a las relaciones diplomáticas. Dicho de otro modo: la creciente globalización determina la superación de la política criminal nacional dirigida a la prevención y castigo de la corrupción, entendida como el ataque a la función pública ejercida por los funcionarios, servidores o agentes públicos de cada Estado (ya sean adscritos a la administración local, comarcal, regional o estatal) y dentro del ámbito territorial sobre el que cada Estado ejerce su soberanía penal, y obliga a dirigir los ojos a las actividades de los funcionarios extranjeros. Con base en lo expuesto se propone la siguiente estrategia de trabajo en relación a la armonización del delito de corrupción: I. Por todo lo anterior se somete a la consideración de la Comisión Delegada de la COMJIB la conveniencia de coordinar los ordenamientos de los Estados firmantes i) ya sea mediante la reforma de los tipos penales de soborno en la función pública, ampliando el concepto del funcionario, como sujeto activo o pasivo del cohecho, a cualquier servidor público, sea de la nacionalidad que sea y que esté adscrito a cualquier administración nacional, extranjera o internacional, ii) o a través de la superación de las limitaciones derivadas de la vigencia de los principios de personalidad y de territorialidad, mediante la unificación de las normas de derecho internacional penal y, singularmente, con la incorporación al listado de delitos afectos por el principio de derecho universal los delitos de corrupción pública. II. En este sentido, en el proyecto de Armonización de la Legislación Penal en la Lucha Contra el Crimen Organizado en Centroamérica, que ejecuta la COMJIB con el apoyo financiero del Fondo España-SICA y a instancia de la Secretaría General del SICA, se está trabajando en la armonización en la región Centroamericana de los delitos relacionados con el cohecho, tráfico de influencias y peculado, cuyos documentos de trabajo se anexan, de modo que los avances que se logren en este ámbito se podrían utilizar como base de trabajo en la coordinación para atajar estos problemas. 2 ANEXOS CORRUPCIÓN DE FUNCIONARIOS PÚBLICOS: TRÁFICO DE INFLUENCIAS, PECULADO O MALVERSACIÓN Y COHECHO. DOCUMENTOS DE TRABAJO RELACIONADOS CON LOS DELITOS DE TRÁFICO DE INFLUENCIAS, PECULADO O MALVERSACIÓN Y COHECHO EN EL PROYECTO DE ARMONIZACIÓN DE LA LEGISLACIÓN PENAL EN LA LUCHA CONTRA EL CRIMEN ORGANIZADO EN CENTROAMÉRICA El Proyecto de Armonización de la Legislación Penal en la Lucha contra el Crimen Organizado en Centroamérica, lo implementan la Secretaría General de la Conferencia de Ministros de Justicia de los Países Iberoamericanos (COMJIB) y la Secretaría General del Sistema de la Integración Centroamericana (SG-SICA). Se enmarca en la Estrategia de Seguridad de Centroamérica, diseñada por los países miembros del SICA y respaldada por la Comunidad Internacional en la “Conferencia Internacional de Apoyo a la Estrategia de Seguridad de Centroamérica” (Guatemala, junio de 2011). Dicha Conferencia ha supuesto un salto cualitativo y exponencial en la forma en la que la Región Centroamericana se enfrenta al fenómeno de la violencia y la inseguridad, iniciándose así una nueva etapa en los esfuerzos para consolidar a Centroamérica como una Región de Paz, Libertad, Democracia y Desarrollo. 3 PROPUESTA DE ARMONIZACIÓN DE DELITO DE TRÁFICO DE INFLUENCIAS Legislación y resoluciones internacionales Convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción (2003) Propuesta de armonización de la legislación penal en la lucha contra el crimen organizado en Centroamérica (SICA/COMJIB/CAECID) (2011) Criterio I.- Autonomía Se trata de una de las infracciones que se integran en el ámbito de los delitos de corrupción, pero tiene sus propios perfiles, aun guardando alguna afinidad con el delito de cohecho. Al igual que en éste, con el tráfico de influencias se pretende interferir en la adopción de decisiones públicas, quebrando la imparcialidad u objetividad en el ejercicio de las funciones públicas; pero a diferencia del cohecho, en el tráfico de influencias se persigue situar al funcionario en una posición parcial respecto a su futura decisión utilizando medios distintos a las dádivas o presentes para influir en su proceso de motivación, como puedan ser la ascendencia, la amistad, el poder sobre él, y, al igual que en el cohecho, la infracción puede surgir tanto cuando se presiona o persuade al funcionario cuanto cuando el funcionario se deja influenciar y resuelve de acuerdo con los intereses del que recomienda o presiona, sin perjuicio de que en la toma de esa decisión pueda a su vez cometer prevaricación si es injusta. En este delito se ubican también los de venta de influencias cometida por particulares que ofrezcan actuar sobre funcionarios públicos para que éstos resuelvan o influyan en otros funcionarios. Tanto en una como en otra modalidad, la infracción no depende de que efectivamente se haya conseguido desviar al funcionario del recto cumplimiento de su función. Criterio II.- Definición. El Tráfico de influencias puede pues definirse como la conducta del funcionario público que influye o presiona a otro funcionario público o autoridad prevaliéndose del ejercicio de las facultades de su cargo o de cualquier otra situación derivada de su relación personal o jerárquica con éste o con otro funcionario o autoridad a fin de lograr una resolución que le pueda generar directa o indirectamente un beneficio económico para sí o para un tercero. También es constitutiva de tráfico de influencias la conducta del particular que aprovechándose de cualquier situación derivada de su relación personal con éste o con otro funcionario público o autoridad intentara influir en un funcionario público o autoridad para conseguir una resolución que le pueda generar, directa o indirectamente, un beneficio económico para sí o para un tercero. Criterio III.- Estructura típica. Es preciso que los tipos distingan entre los supuestos de tráfico de influencias cometidos por funcionarios sobre funcionarios y los cometidos por los particulares. A su vez, en el primer grupo conviene diferenciar entre los casos en que el que influye tiene relación de superioridad con el influido y aquellos otros en los que el ascendiente o poder proviene de otra clase de relaciones. 4 El tráfico de influencias practicado por particular ha de ser descrito separadamente, diferenciando a su vez los casos de ofrecimiento de influencia real de aquellos otros en los que se ofrece, a cambio de dinero o recompensa, una capacidad de influencia de la que se carece, los cuales habrán de ser conducidos en su caso al ámbito del delito de estafa. Criterio IV.- Tipos agravados Cuando el tráfico tuviera como objeto persuadir al funcionario para la comisión de un acto constitutivo de delito, aunque éste no se hubiere producido. Criterio V.- Tipos súper agravados Cuando el que presiona al funcionario fuera un Juez, un miembro del Ministerio Fiscal o una Autoridad de la Nación y el objeto fuera un acto constitutivo de delito. Cuando la presión o influencia se ejerza sobre un Juez para que dicte una sentencia injusta o parcial. Cuando la presión haya consistido en el anuncio de una mal para el funcionario, su familia o allegados, si no accede a lo que se le solicita. Cuando se haya alcanzado la consecución efectiva del proyecto delictivo. Criterio VI. Tipos atenuados Se atenuará la pena al particular que hubiera ofrecido a terceros, a cambio de dinero o recompensa, influir o presionar a un funcionario público para conseguir una resolución favorable. Criterio VI.- Tipos autónomos Se castigará separadamente el tráfico de influencias sobre funcionarios o agentes públicos de otros Estados o de Organizaciones internacionales, que tendrán a todos los efectos, y en sus respectivos casos, la misma consideración que los funcionarios nacionales. Serán castigados separadamente, como delitos contra la Administración de Justicia, los actos de influencia que prevaliéndose de cualquier relación o posición se ejecuten sobre testigos o peritos o intérpretes para que falten a su deber en su actuación ante los Tribunales. Criterio VII.- Penas de prisión En principio las sanciones privativas de libertad a imponer han de ser lo suficientemente gravosas como para permitir la colaboración internacional, no dificultar la prisión preventiva, impedir las penas sustitutivas o alternativas y suponer una intimidación suficiente. Para los tipos de tráfico de influencias cometidos por funcionarios será precisa una pena mínima no inferior a un año de prisión, multa del triple del beneficio perseguido. En cuanto a los particulares la pena debiera ser de multa, del doble o el triple del beneficio perseguido, dependiendo de que hubiera logrado o no el beneficio pretendido. 5 Criterio VIII.- Penas privativas de derechos. a) para el funcionario Se le podrá imponer la pena accesoria de inhabilitación temporal o definitiva para la función pública, dependiendo de que el fin perseguido fuera la comisión de un acto delictivo o de otra naturaleza, con un mínimo de tres años de inhabilitación para la función pública. b) para el particular Se le podrá imponer la prohibición de contratar con cualquier Administración pública por un tiempo mínimo de cinco años. Criterio IX.- Personas jurídicas. Es posible la responsabilidad penal de personas jurídicas, en los términos legalmente previstos, sin que ello excluya la pena a imponer a las personas físicas que hubieren actuado en su nombre o interés. Criterio X.- Concursos. Cuando el tráfico de influencias tuviere como objetivo convencer al funcionario influido para la comisión de un delito, y éste se ejecutara o intentara, se impondrá la pena independientemente de la pena que corresponda a ese delito, del que responderán respectivamente como inductores y autores. Criterio XI.- Consecuencias accesorias Se declarará la nulidad de los actos judiciales o administrativos que se hubieran producido a consecuencia del tráfico de influencias. 6 PROPUESTA DE ARMONIZACION DE DELITO DE PECULADO O MALVERSACIÓN I. DECISIONES SUPRANACIONALES y RECOMENDACIONES Convención de las Naciones Unidas contra la corrupción (2003). Convención interamericana contra la corrupción (Costa Rica, El Salvador, Guatemala Honduras, Nicaragua, Panamá, República Dominicana). Propuesta de armonización de la legislación penal en la lucha contra el crimen organizado en Centroamérica (SICA/COMJIB). Criterio I.- Autonomía de la malversación y el peculado Los recursos y fondos públicos han de ser administrados por funcionarios en sus diferentes fases (recaudación, custodia, aplicación de gasto). La deslealtad en cualquiera de ellas podría ser tratada como un delito común cualificado (apropiación indebida), como delito de funcionario cualificado (omisión de cumplimiento de los deberes del cargo), o como corresponde a su naturaleza jurídica de acto administrativo injusto (prevaricato o prevaricación). Pero la esencial vinculación a los recursos financieros aconseja, y así es en todos los sistemas penales, el tratamiento conjunto de las diferentes infracciones que componen este grupo. Es frecuente diferenciar entre peculado y malversación. El primero viene integrado por el apoderamiento de caudales o fondos públicos cometido por el funcionario encargado de su administración y custodia. La malversación consiste en dar aplicaciones diferentes y desviadas de la cosa pública a los fondos que se administran. En algunos sistemas se utiliza únicamente la denominación peculado o la de malversación para ambas formas de conducta delictiva. Emplearemos la denominación de malversación para todas las modalidades. En la presente propuesta no entran los actos de desviación cometidos por administradores o empleados de fundaciones u organizaciones privadas, que deben tratarse en el campo de la apropiación indebida, ni tampoco los cometidos por beneficiarios de subvenciones públicas, que deben ser castigados por el específico delito de fraude a la subvención. Criterio II.- Definición. Cometen este delito los funcionarios públicos que sustraigan o desvíen dinero o bienes cuya administración, depósito, custodia, aplicación o percepción les haya sido confiada por razón de su cargo. Cometen también este delito los funcionarios públicos que en provecho propio o de un tercero, y con abuso de su cargo, utilice recursos humanos o servicios o bienes propiedad de la Administración pública. Estos delitos los cometen también los administradores o gerentes de Empresas públicas, teniendo por tales aquellas en las que la Administración pública sea la principal propietaria, así como a los particulares que por cualquier título fueran depositarios o administradores de bienes o fondos públicos, así como a los depositarios de bienes embargados o depositados por orden de autoridad administrativa o judicial. Las diferentes situaciones imaginables, por razón del autor, por razón del volumen económico del hecho, por las consecuencias para el servicio o interés público, dan lugar a una escala de gravedad plasmada en diferencias de tipos. 7 Criterio III.- Estructura típica. Es preciso que los tipos de malversación distingan entre los siguientes supuestos: a) Sustracción o apoderamiento de bienes o dinero cometido por funcionario público por sí mismo o permitiendo que otra persona lo haga. Las mismas penas se impondrán, en sus respectivos casos, al particular que haya participado en la ejecución del hecho. b) Casos en los que se produce un grave quebranto del servicio público o aquellos en que la cantidad es de notoria importancia. c) Distracción y aplicación diferente y ajena a la cosa pública, casos en los que el funcionario, con ánimo de lucro propio o ajeno y con perjuicio para la causa pública, da una aplicación privada a bienes muebles o inmuebles pertenecientes a cualquier Administración o Entidad pública. d) Apoderamiento de bienes pertenecientes al patrimonio nacional. e) Apoderamiento de bienes o cantidades de poco valor ( valor inferior a una determinada cantidad). f) Desviar y dar aplicación privada a los bienes muebles o inmuebles o caudales públicos que se administran o custodian ( la desviación presupuestaria por aplicación a finalidad pública diferente de la prevista puede dar lugar a responsabilidad disciplinaria, pero no criminal). g) Previsión de los efectos de la restitución de bienes o cantidades sustraídas o desviadas. h) Extensión de la tipicidad a particulares en relación con determinadas situaciones de depósito, administración o custodia. Criterio IV.- Tipos agravados Cuando la malversación provocara perjuicios en el servicio público o en los intereses de los ciudadanos. Cuando el valor de los bienes o la cantidad malversada sea de notoria importancia. Criterio V.- Tipos súper agravados Cuando los bienes muebles o inmuebles sustraídos o distraídos pertenecieran al patrimonio nacional. Criterio VI. Tipos atenuados Cuando la cantidad sustraída sea de pequeña entidad. Se puede apreciar una excusa absolutoria plena en los casos de restitución completa de la cantidad apropiada, junto con los beneficios que hubiera reportado al autor, antes de que se haya abierto procedimiento penal o expediente administrativo. Se puede apreciar una atenuación por reparación del daño en los casos de restitución de la cantidad desviada antes de que se dicte sentencia. 8 Criterio VI.- Tipos autónomos Las penas del delito de malversación, en su modalidad básica, se pueden imponer a quienes, sin ser funcionarios, estén temporal o permanentemente encargados por cualquier concepto de fondos, rentas o efectos de las Administraciones públicas, así como a los particulares legalmente designados como depositarios de caudales o efectos público o de bienes embargados secuestrados o depositados por autoridad pública. Criterio VII.- Penas de prisión En principio las sanciones privativas de libertad a imponer han de ser lo suficientemente gravosas como para permitir la colaboración internacional, no dificultar la prisión preventiva, impedir las penas sustitutivas o alternativas y suponer una intimidación suficiente. Criterio VIII.- Penas privativas de derechos. a) para el funcionario Se le podrá imponer la pena accesoria de inhabilitación temporal o definitiva para la función pública. b) para el particular Se le podrá imponer la inhabilitación para recibir cualquier clase de nombramiento para el ejercicio de una función pública por un tiempo mínimo de cinco años. Criterio IX.- Personas jurídicas. Es posible la responsabilidad penal de personas jurídicas, en los términos legalmente previstos, sin que ello excluya la pena a imponer a las personas físicas que hubieren actuado en su nombre o interés. Criterio X.- Concursos. Las penas imponibles al delito de malversación son independientes de las que puedan corresponder a otros delitos cometidos en la ejecución del plan. Criterio XI.- Consecuencias accesorias Se declarará la nulidad de los actos de disposición que el funcionario responsable hubiera podido realizar, ordenándose la restitución de los bienes o su valor equivalente, incluso si se hallan en poder de terceras personas. 9 PROPUESTA ARMONIZADORA DEL DELITO DE COHECHO I. Legislación y documentos internacionales Convención Interamericana contra la Corrupción (1996) (suscrita por Costa Rica, Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua. Panamá y República Dominicana) Propuesta de armonización de la legislación penal en la lucha contra el crimen organizado en Centroamérica (SICA/COMJIB/CAECID) Convención para combatir el cohecho de servidores públicos extranjeros en transacciones comerciales internacionales (1997) Proyecto de Ley Modelo sobre Declaración de Intereses, Ingresos Activos y Pasivos de Quienes Desempeñan Funciones Públicas (OEA/2011) Proyecto de Ley Modelo para facilitar e incentivar la denuncia de actos de corrupción y proteger a sus denunciantes y testigos (OEA/2011) Criterio I.- Autonomía El delito de cohecho ha de ser perseguido respecto de particulares y funcionarios o servidores públicos con plena autonomía, sin condicionar la infracción y su alcance a la conducta de uno u otro. La bilateralidad o unilateralidad del cohecho constituye un problema técnico y un problema político criminal, pues la posible desigual posición de corruptores y corrompidos ha de ser contemplada en cualquier fórmula que aspire a la eficacia. Las decisiones legislativas deben contemplar la vez esa doble dimensión de suceso en el que intervienen dos partes y, a la vez, delito que como cada parte por su cuenta. Criterio II.- Definición. El cohecho es el concierto producido o intentado, entre particulares y funcionarios públicos, para que el funcionario o empleado público realice u omita una acción correspondiente a su función que sea constitutiva de delito, o injusta, o arbitraria, o que suponga una retribución indebida de sus actuaciones. De acuerdo con las posibilidades imaginables se clasifica el cohecho en activo (cometido por particular) , pasivo ( cometido por funcionario), propio (tiene por objeto un acto delictivo, o injusto o arbitrario) e impropio (retribución indebida a funcionario) El objeto del cohecho puede ser constitutivo de delito o no serlo. El instrumento del cohecho será la dádiva, regalo o recompensa medible en dinero, pero también pueden considerarse instrumentos aptos los favores de otras naturalezas, incluyendo las promesas de promoción social o política o la de relaciones sexuales. El cohecho es uno de los delitos – el más grave - que se pueden englobar en el concepto de corrupción, junto a los de malversación o peculado, tráfico de influencias o de información privilegiada, actividades prohibidas a funcionarios por colisión de intereses. El cohecho puede ser también cometido por y sobre funcionarios extranjeros o de organizaciones internacionales Criterio III.- Estructura típica. Es preciso describir separadamente las conductas de unos y otros, y señalar la pena tanto en las hipótesis de acuerdo como en aquellas en que éste no se produzca. El 10 cohecho activo ( de particular) y pasivo ( de funcionario) se consuman como delitos con independencia de que el ofrecimiento o la solicitud sean o no atendidos. La diferencia de objetivos (actos delictivos, actos injustos, actos arbitrarios) e incluso la ausencia de objetivos concretos (pago innecesario o indebido al funcionario) que puede tener el pacto criminal aconseja distinguir los tipos de delitos según los fines perseguidos. Se considera funcionario a todo aquel que participe de cualquier modo en el ejercicio de funciones públicas. Si se trata de un Juez o Fiscal, y solo en ese caso, procederá la aplicación de un tipo cualificado. La producción efectiva del proyecto delictivo puede producir consecuencias penales diferentes de las que conlleva el cohecho que le precede, pues constituirá por lo menos delito de prevaricación. Criterio IV.- Tipos agravados Cuando el cohecho tuviera como objeto la comisión de un acto constitutivo de delito y el funcionario hubiera aceptado el soborno, con independencia de que hubiera ejecutado el acto delictivo. Criterio V.- Tipos súper agravados Cuando el solicitante de la dádiva o soborno fuera un Juez, un miembro del Ministerio Fiscal o una Autoridad de la Nación y el objeto fuera un acto constitutivo de delito. Cuando la recompensa se haya exigido mediando amenaza expresa o tácita de causar un mal al particular o a su familia o amigos. Criterio VI. Tipos atenuados Se atenuará la pena al particular que, habiendo recibido y aceptado una solicitud de parte de un funcionario, denunciara el hecho sin que el acto objeto del cohecho se hubiera producido. Criterio VI.- Tipos autónomos Se castigará separadamente la corrupción de funcionarios o agentes públicos de otros Estados o de Organizaciones internacionales, que tendrán a todos los efectos, y en sus respectivos casos, la misma consideración que los funcionarios nacionales Serán castigados separadamente, como delitos contra la Administración de Justicia, los delitos de cohecho que tengan por objeto la corrupción de testigos o de peritos o intérpretes para que falten a su deber en su actuación ante los Tribunales Criterio VII.- Penas de prisión En principio las sanciones privativas de libertad a imponer han de ser lo suficientemente gravosas como para permitir la colaboración internacional, no dificultar la prisión preventiva, impedir las penas sustitutivas o alternativas y suponer una intimidación suficiente. Para los tipos de cohecho agravado y súper agravado, activo o pasivo, será precisa una pena mínima no inferior a los tres años de prisión. En cualquier caso las penas imponibles al cohecho pasivo han de ser superiores a las que en los mismos casos corresponda al cohecho activo. 11 Criterio VIII.- Penas privativas de derechos. a) para el funcionario Se le podrá imponer la pena accesoria de inhabilitación temporal o definitiva para la función pública b) para el particular Se le podrá imponer la prohibición de contratar con cualquier Administración pública por un tiempo mínimo de cinco años Criterio IX.- Personas jurídicas. Es posible la responsabilidad penal de personas jurídicas, sin que ello excluya la pena a imponer a las personas físicas que hubieren actuado en su nombre o interés. Criterio X.- Concursos. Cuando el cohecho tuviere como objetivo la comisión de un delito, y éste se ejecutara o intentara, se impondrá la pena independientemente de la pena correspondiente a ese delito. El particular que hubiera ofrecido la dádiva o recompensa será castigado con la pena correspondiente a los cómplices. No forman parte del cohecho los supuestos de amenazas o coacciones a funcionarios para que hagan o se abstengan de hacer un acto relativo a su función. Criterio XI.- Consecuencias accesorias Las dádivas o recompensas que hayan sido instrumento del cohecho, o su transformación, serán objeto de comiso. Si las mismas procedieran de otro Estado se ordenará la restitución de los mismos al Estado de procedencia. Se declarará la nulidad de los actos judiciales o administrativos que se hubieran producido a consecuencia del cohecho 12