TARJETA DE CRÉDITO Y DÉBITO, FRANQUICIAS, QUEJAS Concepto 2008023954-001 del 19 de junio de 2008. Síntesis: Las marcas “Visa” y “MasterCard”, son franquicias internacionales, cuya representación en el país la ostentan Credibanco y Redeban Multicolor S. A., respectivamente, pero respecto de dichas franquicias esta Superintendencia no ejerce inspección, vigilancia y control en tanto no son sistemas de pago de bajo valor. En el evento de inconsistencias e irregularidades que pudieran derivarse de la expedición y manejo de una tarjeta de crédito o débito emitida por un establecimiento de crédito, así como las relacionadas con la adecuada atención de los clientes en el desarrollo de las actividades relacionadas con su objeto social, es competencia de esta Superintendencia conocer y dar trámite a las quejas que se presenten en contra de dichas entidades. «(…) solicita “INFORMACIÓN PARA SABER QUE ENTIDAD ES LA ENCARGADA DE VIGILAR Y SANCIONAR A VISA Y MASTERCARD CUANDO SE SUSCITAN CONFLICTO (sic) ENTRE ESTABLECIMIENTOS DE COMERCIO Y ESTAS ENTIDADES, ASI MISMO CUAL ES EL ENTE ENCARGADO DE VIGILAR Y SANCIONAR LAS AEROLÍNEAS CUANDO SE SUSCITAN CONFLICTOS CON LAS TARJETAS DE CREDITO”. A efectos de atender su consulta, esta Dirección considera pertinente efectuar las siguientes aclaraciones: En primer lugar debe indicarse que (según) el artículo 8º del Decreto 4327 del 2005, es función de la Superintendencia Financiera, ejercer la inspección, vigilancia y control sobre las personas que realicen actividades financiera, bursátil, aseguradora y cualquier otra relacionada con el manejo, aprovechamiento o inversión de recursos captados del público. Así las cosas, de conformidad con lo previsto en el articulo 72 del citado decreto esta Superintendencia ejerce la función de inspección y vigilancia sobre las entidades previstas en el numeral 2 del artículo 325 del Decreto 663 de 1993 1 y las entidades y actividades 1 Establecimientos bancarios, corporaciones financieras, compañías de financiamiento comercial, sociedades fiduciarias, almacenes generales de depósito, organismos cooperativos de grado superior de carácter financiero, sociedades administradoras de fondos de pensiones y de cesantía, sociedades administradoras de fondos de pensiones, cajas, fondos o entidades de seguridad social administradoras del régimen solidario de prima media con prestación definida, entidades descentralizadas de los entes territoriales cuyo objeto sea la financiación de las actividades previstas en el numeral 2 del artículo 268 del Estatuto Orgánico del Sistema Financiero autorizadas específicamente por la Financiera de Desarrollo Territorial SA., Findeter, compañías de seguros, cooperativas de seguros, sociedades de reaseguro, sociedades de capitalización, sociedades sin ánimo de lucro que pueden asumir los riesgos derivados de la enfermedad profesional y del accidente de trabajo, corredores de seguros y de reaseguros. b) Oficinas de representación de organismos financieros y de reaseguradores del exterior; c) El Banco de la República; d) El Fondo de Garantías de Instituciones Financieras; previstas en el numeral 1 del parágrafo tercero del artículo 75 de la Ley 964 del 2005 2 , dentro de las que se encuentran los establecimientos de crédito y los sistemas de pago de valor. Dicha función de inspección y vigilancia tiene como finalidad velar porque la organización y funcionamiento de las citadas entidades se ajusten a las normas legales que las rigen. 2. Respecto a la supervisión de este Organismo sobre los sistemas de pago de bajo valor, resulta preciso aclarar que el literal o) del artículo primero del Decreto 1400 del 2005 define el sistema de pago de bajo valor, como un conjunto organizado de políticas, reglas, acuerdos, instrumentos de pago, entidades y componentes tecnológicos, tales como equipos, software y sistemas de comunicación, que permiten la transferencia de fondos entre los participantes, mediante la recepción, el procesamiento, la transmisión, la compensación y/o la liquidación de órdenes de transferencia y recaudo. Adicional a lo anterior, estos sistemas se encuentran autorizados para procesar órdenes de transferencia o recaudo, incluyendo aquellas derivadas de la utilización de tarjetas crédito o débito, por un valor promedio diario. En todo caso, un sistema de pago solo será considerado como tal cuando actúen, en calidad de participantes, tres (3) o más instituciones vigiladas por la Superintendencia Financiera. En este orden de ideas, en la actualidad ostentan la calidad de entidades administradoras de sistemas de pago de bajo valor, las siguientes: Asociación Gremial de Instituciones Financieras “Credibanco”, ACH Colombia S.A., Servibanca S.A., A Toda Hora SA., Redeban Multicolor S.A. y la Central Cooperativa y Solidaria de Servicios Múltiples ‘Visionamos’. Bajo los anteriores supuestos, resulta pertinente precisar que las marcas “Visa” y “MasterCard”, son franquicias internacionales, cuya representación en el país la ostentan Credibanco y Redeban Multicolor S. A., respectivamente, pero respecto de dichas franquicias esta Superintendencia no ejerce inspección, vigilancia y control en tanto no son sistemas de pago de bajo valor. e) El Fondo Nacional de Garantías SA.; f) El Fondo Financiero de Proyectos de Desarrollo Fonade; g) Las casas de cambio, y h) Las demás personas naturales y jurídicas respecto de las cuales la ley le atribuye funciones de inspección y vigilancia permanente. 2 Las bolsas de valores, las bolsas de bienes y productos agropecuarios y agroindustriales y sus miembros, las bolsas de futuros y opciones y sus miembros, las sociedades que realicen la compensación y liquidación de valores, contratos de futuros, opciones y otros; las sociedades comisionistas de bolsa, los comisionistas independientes de valores, las sociedades administradoras de fondos de inversión, las sociedades administradoras de depósitos centralizados de valores, las sociedades calificadoras de valores, las sociedades titularizadoras, los fondos mutuos de inversión que a 31 de diciembre de cada año, registren activos iguales o superiores a cuatro mil (4.000) salarios mínimos mensuales legales vigentes a la fecha del respectivo corte, los fondos de garantía que se constituyan en el mercado público de valores, las sociedades administradoras de sistemas de negociación de valores, las cámaras de riesgo central de contraparte, las entidades que administren sistemas de negociación y registro de divisas y las sociedades administradoras de sistemas de compensación y liquidación de divisas. No obstante lo anterior, esta Dirección considera pertinente poner de presente cual es la normatividad aplicable respecto de quienes adquieren una tarjeta de crédito y ante quien podrán dirigirse en el evento de alguna inconformidad para dichos efectos, se considera pertinente citar un concepto de esta Superintendencia, en el cual se aclaran dichos aspectos, así: “Respecto de las tarjetas de crédito valga recordar que su emisión obedece a la celebración del contrato mercantil de apertura de crédito, el cual se encuentra regulado en el articulo 1400 del Código de Comercio como “el acuerdo en virtud del cual un establecimiento bancario se obliga a tener a disposición de una persona sumas de dinero, dentro del limite pactado y por un tiempo fijo o indeterminado. “Es de destacar que en virtud de dicho acuerdo se crea una relación de crédito entre el establecimiento de crédito y el tarjetahabiente, el cual se rige por las normas contractuales, que constituyen ley para las partes de conformidad con lo señalado por el artículo 1602 del Código Civil, según el cual los contratantes se obligan a lo pactado y no podrán invalidar dicho acuerdo sino por su consentimiento o por causas legales. “Así mismo, debe indicarse que en virtud de dicho contrato surgen otras relaciones contractuales a saber Entre la entidad bancaria o de crédito y el establecimiento de comercio y, entre el tarjetahabiente y el establecimiento de comercio. “La existente entre la entidad de crédito emisora de la tarjeta y el establecimiento de comercio, generalmente llamada de afiliación, implica que éste último se obliga a recibir como medio de pago por la compra de sus mercancías o la prestación de sus servicios, la tarjeta de crédito expedida por el correspondiente establecimiento de crédito, y éste a su vez a pagar las facturas suscritas por su tarjetahabiente. “De otra parte, la relación existente entre el tarjetahabiente y el establecimiento de comercio, implica que este último se obliga a suministrar los bienes y/o servicios que requiera el primero, y a recibir de éste como medio de pago por dichos conceptos, la tarjeta de crédito expedida por el correspondiente establecimiento de crédito. Dichas relaciones, también se rigen por las normas contractuales y en virtud de las mismas, las partes estarán obligadas a lo por ellas pactado. “Lo anterior para precisar que la tarjeta de crédito es simplemente un medio de pago, como lo puede ser el dinero o el cheque, que emplean los clientes de los establecimientos de crédito a efectos de pagar los consumos que hubieren efectuado para la adquisición de bienes y/o prestación de servicios en los diferentes establecimientos comerciales afiliados (V.gr. las Agencias de Viaje), y como quiera que dichas relaciones se rigen por normas contractuales y por el principio de la autonomía de la voluntad, en ello no tiene injerencia ni competencia esta Entidad 3 ”’ 3 Concepto 2006045350-001 del 10 de octubre del 2006. Bajo esta perspectiva, debe concluirse que es función de esta Superintendencia supervisar el estricto cumplimiento de las normas que rigen la actividad de los establecimientos de crédito, motivo por el cual en el evento de inconsistencias e irregularidades que pudieran derivarse de la expedición y manejo de una tarjeta de crédito o débito emitida por un establecimiento de crédito, así como las relacionadas con la adecuada atención de los clientes en el desarrollo de las actividades relacionadas con su objeto social, es competencia de esta Superintendencia conocer y dar trámite a las quejas que se presenten en contra de dichas entidades, para lo cual resulta necesario radicar una queja dirigida al director legal para intermediarios financieros, relacionando en forma detallada los hechos que originan su inconformidad. (…).»