ACTUALIDAD DE DESCARTES A la hora de resolver el último apartado del comentario de texto, hemos de procurar, como insistía nuestro filósofo, ser metódicos. Se nos pide qué expliquemos en que sentido, el tema tratado en el texto actualmente nos da que pensar, en que aspectos de la cultura y la sociedad actual encontramos la huella del pensamiento cartesiano. Queda claro que es muy importante tomar, como punto de partida el tema del texto, lo que explico a continuación son unas sencillas pautas para que, con lo que hemos estudiado en clase, puedas desarrollar correctamente esta cuestión, evitando utilizar el texto de Descartes como un pretexto para hacer una reflexión general sobre el Racionalismo filosófico. No es que sea una mala estrategia, pero está mucho mejor hacer ver que entiendes el tema del texto y sabes hacer una interpretación contemporánea de su sentido. Podemos dividir los temas tratados en la segunda parte del Discurso del método en tres cuestiones generales: Descartes expone el objetivo de su trabajo, la renovación del saber, explica las razones por la que se inspiró en la lógica y las matemáticas, expone las reglas del método, y concluye con la aplicación exitosa del método a la revisión del álgebra y la geometría. “Razones de actualidad son aquellas que permiten decir que el pensamiento de Descartes está bien porque todavía da que pensar. Descartes es actual, en primer lugar, porque nos encontramos hoy en una situación de discordancia de opiniones similar a la de su tiempo. A él le llevó a plantear el problema del fundamento y a afirmar el ajuste de todas las cosas al nivel de la razón.-- La segunda razón de la actualidad es la inversión aplicada sobre el modelo aristotélico de conocimiento. Ella hace posible el nacimiento y legitimación de las nuevas ciencias.-- La tercera razón es la inversión metafísica que aquí se considera centrada en la libertad y el poder de la razón. Una y otro trazan el radio de acción del hombre moderno y precisan sus riesgos”. Como sugerencia podíamos establecer las siguientes relaciones: • La renovación del saber: La inquietud cartesiana por la renovación del saber evidencia su espíritu crítico respecto a la tradición. hay que resaltar en Descartes que su pensamiento supone el renacimiento del espíritu crítico y abierto que constituye el alma de la filosofía. Se atreve a poner en entredicho todos los conocimientos previamente aprendidos logrando estructurar un nuevo saber filosófico. Y deberíamos reflexionar sobre todas las situaciones que en la actualidad en las que dogmatismos de todo tipo tratan de imponerse sobre el "buen sentido". Amplía esta información repasando los apuntes. Este espíritu crítico, dirigido especialmente al pensamiento filosófico, también está presente en el último párrafo de la segunda parte. • La duda: para eliminar todo aquello que crédulamente se acepta sin mayor planteamiento, lo cual da bastante que pensar sobre las informaciones que recibimos acríticamente en la actualidad,… Pero distinguiendo de la duda escéptica del extremo contrario,… • Las matemáticas (párrafos 2º al 4º, como modelo para el método y aplicación del método a las matemáticas, párrafo 7º y 8º): En su filosofía, Descartes "recupera" a las matemáticas, ésta ciencia había sido considerada por Aristóteles un "cálculo carente de concepto", es decir un mero conjunto de abstracciones sin contenido cognitivo. Descartes convierte a las matemáticas en la columna vertebral de su nuevo método, recogiendo la herencia del método resolutivo-compositivo de Galileo. El mundo material, para poder ser conocido debe ser interpretado a la luz de las matemáticas. De hecho la matematización del espacio que logra Descartes al unir -aplicando su método- el álgebra y la geometría, es la base del tratamiento matemático del movimiento y está en el origen de la ciencia actual. • El método: para el tratamiento de este tema busca información sobre las diversas metodologías de investigación y su importancia, en ciencias naturales y humanas (método hipotético-deductivo, método hermenéutico,…), sin las cuales no se entendería hoy la ciencia. • El “pienso, luego soy”: y su influencia en las corrientes posteriores acerca del conocimiento, reconociendo el papel clave del sujeto a la hora de conocer. Ortega y Gasset superará esa primera verdad de Descartes recogiendo el yo, pero uniéndolo a las circunstancias en la realidad radical que para él será la vida (ampliar con los apuntes de Ortega). • Y las consecuencias a las que da lugar: como la relación alma-cuerpo o mente-cuerpo tan actuales y estudiadas desde la neurociencia… (tendrías que buscar información sobre este tema) • El criterio de certeza: queda claro que ya cualquier cosa no puede ser un criterio válido, una opinión no puede ser válida simplemente porque digamos “me gusta” o “no me gusta”, hay que buscar un criterio mucho más sólido. El criterio empirista de la experiencia parece más cercano a la experiencia, no solemos cuestionar lo que ésta nos presenta, pero la aportación cartesiana sobre la precaución al analizar los datos de la experiencia y la necesidad de utilizar la reflexión profunda pueden ser considerados totalmente actuales en una sociedad en la que nos vemos bombardeados por datos, propaganda, etc., y puede dar pie a la importante reflexión sobre la relación entre apariencia (lo dado a los sentidos) y realidad. • La existencia de Dios: quizá su demostración hoy día ha perdido vigencia, sobre todo a raíz del planteamiento kantiano que hacía ver tanto la imposibilidad de demostrar su existencia como su no existencia. Esto no lleva a pensar que creer en Dios sea algo irracional o absurdo, pero sí que queda reservada al ámbito de la fe y como una opción vital en la cual la existencia de Dios da sentido a un orden moral que sustenta la vida de muchas personas, y que es muy digna de respeto. Aunque ciertamente para el ateo o agnóstico será inaceptable la demostración racional de la existencia de Dios. Pero no reconocer esa dimensión en la vida de muchas personas o absolutizar tanto la afirmación como el rechazo sin utilizar la reflexión puede dar lugar a fanatismos radicales que de hecho están siendo protagonistas en nuestras sociedades.